Vous êtes sur la page 1sur 22

2018

BENEMÉRITA ESCUELA NORMAL VERACRUZANA


“ENRIQUE C. RÉBSAMEN”

ANÁLISIS DE LA
DESCENTRALIZACIÓN EDUCATIVA.

AMMISADDAI VENTURA SARMIENTOS


L.E.S.E.T TERCER SEMESTRE 2° B

LA EDUCACIÓN EN EL DESARROLLO HISTORICO DE MÉXICO| DOCENTE : VIOLETA GONZÁLES RIVERA


ENERO 17 / 2018

Resumen
La centralización no es mala en sí misma; la unidad de autoridad es
indispensable, por civilizadora, en cierto periodo de evolución de los
pueblos, como lo demuestra en todo momento la historia del mundo. La
centralización sólo llega a convertirse en obstáculo para el progreso, cuando
tiende a deprimirla iniciativa local, cuando esa iniciativa ha llegado a su
mayor edad, cuando ya es consciente de sí misma, cuando ya siente su
dignidad y se revela su poder precisamente como feliz resultado y en virtud
de una buena centralización. Gregorio Torres Quintero
Pedagogo mexicano 1866-1934

Por el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (1992), el sistema


educativo mexicano (SEM) ingresa a una reforma compleja. A diferencia de las reformas
anteriores, ésta descentraliza el sistema, renueva el currículo, produce nuevos
materiales, implanta programas compensatorios y nuevas formas de financiamiento,
ingresa la evaluación, hace obligatoria la secundaria y amplía el calendario escolar. Esta
reforma ha evidenciado las deficiencias y el agotamiento al que había llegado el SEM,
por lo que no parece posible lograr con lo mismo los propósitos de calidad y equidad.

El propósito de este textoo es presentar un análisis crítico de algunos elementos que han
caracterizado el devenir del SEM, en particular de la educación básica, en la última
década del controvertido siglo XX. El trabajo centra su atención en las razones de la
descentralización y la reforma educativa; en los retos y tensiones que es necesario
enfrentar y superar, en especial lo que se refiere a la gestión institucional del sistema y,
finalmente, se aborda un planteamiento inicial de cuáles son los escenarios posibles del
desarrollo futuro del SEM.
ENERO 17 / 2018

Introducción
Los fines de la educación no son siempre los mismos, cambian en el tiempo porque
están estrechamente ligados al tipo de hombres y de sociedad que se pretende formar.
Las expectativas que se asignan a la educación en los distintos proyectos dominantes se
expresan en la orientación y contenido de la política educativa, entendida como el
conjunto de decisiones (lineamientos declarativos y prescriptivos) tomadas por el Estado,
para orientar la práctica educativa en contextos específicos.

Al llegar al poder grupos con posturas o proyectos políticos diferentes a los


anteriores, se modifica el contenido y orientación de la política educativa. Las reformas
suelen constituirse en los mecanismos privilegiados para buscar la adecuación de los
sistemas escolares a lo que, desde esa particular postura o proyecto, se define como lo
que la sociedad necesita de la educación.
El control social entendido como el conjunto de medios de intervención puestos en
marcha por los grupos en el poder para realizar un orden social determinado, incluye
tanto controles internos como externos, de ciertas pautas, valores, normas y conductas
consideradas fundamentales para el propio orden social, como mecanismos punitivos,
sanciones de distinta índole, que se ponen en marcha en relación con los sujetos que no
se conforman con esas pautas, valores y normas.

En ese sentido es que la educación constituye un importante medio de control


social. Por lo que la mejor manera de entender las reformas es considerarlas una parte
del proceso de regulación social ya que éstas suponen cuestiones de producción social
y de regulación estatal, en tanto implican prácticas de gobierno que producen valores
sociales y relaciones de poder por lo que en diversos momentos de la historia se
realizaron reformas a los sistemas educativos en correspondencia con los distintos
modelos de organización económica, política y social que, a partir de determinada
correlación de fuerzas, guiaban el rumbo de la nación, sin embargo, al acercarse el fin
del segundo milenio, se inició un proceso de profunda transformación que difiere
significativamente de lo ocurrido en periodos anteriores.

En la última década del siglo XX el sistema educativo mexicano (SEM) ingresa a


una nueva etapa de su desarrollo. La firma del Acuerdo Nacional para la Modernización
de la Educación Básica y Normal (ANMEB), el 18 de mayo de 1992, es el acontecimiento
detonador de un amplio proceso de reforma de la educación básica y de la formación de
maestros. Este hecho no es aislado, se inserta en un contexto más amplio de la Reforma
del Estado mexicano y significa uno de los pactos políticos más importantes del siglo
veinte al plantear decisiones sobre dos asuntos fundamentales para el desarrollo futuro
del SEM: la descentralización del sistema educativo y una reforma curricular y
pedagógica para la educación básica obligatoria y la formación inicial de maestros.
ENERO 17 / 2018

En la última década del siglo XX, los sistemas educativos de la mayoría de los
países de América Latina iniciaron complejos procesos de reforma que se caracterizan
fundamentalmente por la transformación de la gestión y por una renovación significativa
en el ámbito pedagógico. Dicho así, podría parecer una simplificación extrema de la
complejidad de la reforma; nada más lejano de cualquier intención de nuestra parte.
Quien conozca de cerca un sistema educativo, se podrá representar lo que significa
reformar la gestión y transformar la pedagogía. Estos aspectos de la acción educativa
están relacionados con decisiones que tienen que ver con la centralización o
descentralización de la administración; los montos del financiamiento, así como su
distribución, destino y uso; la ampliación de la educación obligatoria; la introducción de
sistemas de evaluación; el desarrollo de pro-gramas compensatorios; la formación inicial
y continua de los docentes; y la vinculación entre los niveles de educación básica, media
y superior, entre otras.
Por lo anterior, es necesario advertir que el análisis y la reflexión planteados en
este texto se elaboran con el propósito de comprender el proceso de reforma de la
educación en México, en especial en su aspecto descentralizador que se presentó en
mayo de 1992, cuando el encargado de la Secretaría de Educación Pública, la secretaria
general del SNTE y los gobernadores de las 32 entidades federativas del país, firmaron
el “Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica” (ANMEB) que dio
paso a la descentralización del sistema de educación básica y normal del país.
Modernización Educativa es el nombre de una política de reforma educativa mexicana vigente de
1988 a 1994.

El gobierno mexicano asume el “liberalismo social” (“neoliberalismo”) como el eje


filosófico de esta reforma, subordinando una vez más la educación a perspectivas
económicas. Aunque el neoliberalismo involucra el adelgazamiento del Estado, por
ejemplo, la reducción de los aparatos institucionales y la apertura a la “participación
social”. Los tres documentos principales en los que se condensa esta política son: el
Programa Nacional para la Modernización Educativa (SEP, 1989), el Acuerdo Nacional
para la Modernización de la Educación Básica (SEP, 1992), y la Ley General de
Educación (1993).
Además de la descentralización, en el Acuerdo, bajo el enunciado “Revaloración
de la función magisterial”, se anunció la puesta en marcha de la Carrera Magisterial,
programa que, más allá de promover la pretendida profesionalización de la labor docente,
constituyó el primer mecanismo de diferenciación salarial de los maestros con base en la
productividad. Fue ese el primer aviso de que se impondría al magisterio nacional un
esquema centrado en la flexibilidad laboral y el uso de incentivos salariales como
mecanismos de regulación y de control bajo el argumento de la calidad educativa.
ENERO 17 / 2018

La presidencia de Ernesto Zedillo, 1994-2000


La presidencia de Ernesto Zedillo, 1994-2000, quien de inmediato anunció
cambios en el proyecto de modernización educativa. Entre ellos estuvo convertir a los
ciclos primario y secundario en educación básica y obligatoria y promover una
reformulación de los contenidos y materiales educativos, con un aire del back to the
basics estadounidense, para promover capacidades básicas: “alfabetización,
conocimientos de aritmética elemental y aptitudes de comunicación y para resolver
problemas”.

El gobierno de Ernesto Zedillo, consideraba que la educación era un factor


estratégico del desarrollo, que hacía posible asumir modos de vida superiores y permitía
el aprovechamiento de las oportunidades que han abierto la ciencia, la tecnología y la
cultura de nuestra época (Poder ejecutivo Federal 1996.)

En el ciclo 1997-1998 se esperaba que el 89 por ciento de los niños que ingresaran
a la primaria hayan cursado por lo menos un año de preescolar. Así, se pensaba que en
el año 2000 quedará superada la meta de que el
90 por ciento de los niños de 5 años se encontraran
inscritos en la escuela.

Uno de los resultados más notables a partir


de la firma del Acuerdo Nacional para la
Modernización de la Educación Básica fue la
disminución de los niveles de deserción y
reprobación escolares. Como efecto de esa evolución, en el año 2000 la eficiencia
terminal en primaria alcanzó el 87 por ciento. Cada año, más de dos millones de niños
terminaban la primaria y un millón 800 mil de ellos se incorporan a la secundaria. El
número de estudiantes que terminó este nivel para el año 2000 se debió haber
incrementado en alrededor de un tercio con respecto al que concluyó en 1994. Se
alcanzaría así, una cifra de más de un millón y medio de egresados de secundaria
anualmente, lo que significaría un importante paso en favor de la disminución del rezago
educativo y un futuro de más oportunidades para estos jóvenes.

Desde 1995, se emprendió un ambicioso programa de producción de materiales


didácticos diversos en apoyo a la labor del maestro en el aula. Estos libros tenían el
propósito de aportarles nuevas ideas, métodos, recursos didácticos e información que les
fueran de utilidad para la impartición de las clases en primaria y secundaria. El Programa
Nacional para la Actualización Permanente de los Maestros de Educación Básica en
servicio fue una respuesta a la inquietud y legitimo anhelo de superación del magisterio.
Con el apoyo que recibían en los 314 centros establecidos para este fin, 190 mil
educadores se inscribieron en siete cursos de actualización flexibles para poderse
ENERO 17 / 2018

adecuar a sus necesidades y disponibilidad de tiempo. Antes del año 2000, los profesores
contaron con al menos 500 de estos centros equipados con biblioteca y medios
electrónicos. Como resultado del compromiso de fortalecer la educación normal, tras una
amplia consulta emprendida entre el SNTE y la Secretaría, en el ciclo que inició en
agosto, se comenzaron a aplicar los nuevos planes y programas de estudio para las
escuelas formadoras de maestros, estos estaban orientadas a mejorar la formación
integral de quienes ingresaban a trabajar. Con la reforma a las normales se inició, además
de la transformación de planes y programas, la inducción de procesos de reorganización
interna, la renovación de la infraestructura física y la dotación de materiales bibliográficos.

Para elevar la calidad de la educación se ha puesto en marcha el programa de


mejoramiento del profesorado de las instituciones de educación superior (PROMEP). Se
trabaja con las universidades públicas y la asociación nacional de universidades e
instituciones de educación superior, a fin de adecuar el programa a las necesidades y
características de cada institución. La necesidad de mayor disponibilidad de tiempo de
trabajo motivó, a partir del 93, la ampliación del calendario escolar a 200 día hábiles, es
decir, hubo un incremento del orden del 10%.

La utilización de los medios electrónicos puede apoyar la educación básica de dos


maneras; la primera consiste en la transmisión de contenidos curriculares en el medio
televisivo, con la orientación de un maestro por grupo y de textos y guías impresos, como
es el caso de la telesecundaria en la segunda la televisión, el video y la informática
complementa la labor del maestro en el aula.

Carrera Magisterial y Revaloración social del Magisterio


Se buscaba la estimulación de la preparación y el desempeño profesional de los
docentes, para la revaloración del maestro. Todo esto con la supuesta intención de
asegurar a los maestros un auténtico estímulo en su desempeño. Para ello las
autoridades tenían que continuar las acciones y reconocer el valor de la labor docente,
para fortalecer el aprecio social por su trabajo. Atención a las poblaciones más lejanas y
pequeñas. La carencia de servicios en estas poblaciones está determinada, antes que
por cualquier otro factor, por la ausencia de educadores.

El Programa de Desarrollo Educativo 1995-2000


El Plan Nacional de Desarrollo 1995-2000 propone cinco objetivos fundamentales:

 Fortalecer el ejercicio pleno de la soberanía nacional, como valor supremo de


nuestra nacionalidad y como responsabilidad primera del Estado Mexicano.
 Consolidar un régimen de convivencia social regido plenamente por el derecho,
donde la ley sea aplicada a todos por igual y la justicia sea la vía para la solución
de los conflictos.
ENERO 17 / 2018

 Construir un pleno desarrollo democrático con el que se identifiquen todos los


mexicanos y sea base de certidumbre y confianza para una vida política pacífica
y una intensa participación ciudadana.
 Avanzar a un desarrollo social que propicie y extienda en todo el país, las
oportunidades de superación individual y comunitaria, bajo los principios de
equidad y justicia.
 Promover un crecimiento económico vigoroso, sostenido y sustentable en
beneficio de los mexicanos.
Nuevas Propuestas para la Gestión Educativa.

• Como llevar a cabo la gestión educativa para lograr una educación integral
• Se enfoca en la problemática de América Latina.
• La deserción y repetición escolar deberían ser manejados por una nueva gestión.

Se enfoca más en la gestión de forma integral para solucionar problemas nacionales


y continentales.

Programa Nacional de Educación 2001-2006


El PNE que propuso Vicente Fox, se planteó tres grandes desafíos en cuanto a la
educación, cobertura con equidad, calidad de los procesos educativos y niveles de
aprendizaje e interacción y funcionamiento del sistema educativo.
Se creó el programa de Escuelas de Calidad (PEC) cuyo objetivo expresaba:

Promover la trasformación de la organización y funcionamiento cotidiano de las


escuelas básicas para asegurar que el personal docente y directivo de cada escuela
asuma colectivamente la responsabilidad por los resultados educativos, establezca
relaciones de colaboración entre sí y con el entorno social de la escuela, y se comprometa
con el mejoramiento continuo de la calidad y la equidad de la educación

El PEC fue el programa de educación básica del régimen que más rápido
crecimiento presupuestal presentó durante el sexenio. Este programa pretendió
trasformar gradualmente la cultura institucional, formas de gestión, planeación y control
de la administración educativa, consideró como necesario un lapso de cinco años como
mínimo para evaluar los frutos en la mejora de los aprendizajes de los educandos, pues
el primer esfuerzo se concentró en la mejora de la gestión institucional entre el centro y
las entidades federativas, la difusión de los objetivos del programa entre jefes de sector,
supervisores, directores, profesores y padres de familia.

Para asegurar el mejoramiento en cuanto a educación se instituyó en agosto del


año 2002 el Instituto Nacional Para la Evaluación Educativa (INEE), con la tarea de
ofrecer a las autoridades educativas y al sector privado herramientas idóneas para la
ENERO 17 / 2018

evaluación de los sistemas educativos, en lo que se refiere a educación básica


(preescolar, primaria y secundaria) y media superior.

El concepto de calidad del INEE tiene en cuenta, pues, el conjunto de los


componentes del sistema educativo contexto, insumos, procesos y productos, tienen
claro que sus evaluaciones no deben limitarse a imágenes instantáneas de la situación
del sistema educativo en un momento dado, ni a la descripción de la misma. Al
promulgarse la obligatoriedad de tres grados de educación secundaria se amplió la
escolaridad básica obligatoria de seis a nueve años. En la actualidad, la educación básica
obligatoria implica preescolar de tres a cinco años de edad, educación primaria de seis a
once años de edad y educación secundaria doce-catorce años de edad. Con estas
reformas se ratificó que la educación obligatoria impartida por el Estado es laica y gratuita.

El que la cobertura aumente es positivo, pero no suficiente; se requiere saber si


los alumnos alcanzan los resultados de aprendizaje estipulados. Aunque desde mediados
de la década de 1970 se aplican pruebas de rendimiento estandarizadas a nivel nacional,
sus resultados no son comparables, por lo cual se carece de series de datos que permitan
definir tendencias de largo plazo.

Sin embargo actualmente existen datos comparativos disponibles que muestran


avances entre los años 2000 y 2005, en los niveles de rendimiento en lectura y
matemáticas de los alumnos de 6° grado de primaria, pero no en 3° de secundaria. En
primaria el avance se produce tanto en el conjunto de las primarias del país, como en los
servicios educativos considerados, con excepción de los cursos comunitarios. Debe
advertirse que la muestra de escuelas indígenas es insuficiente para ofrecer buenos
niveles de confiabilidad, por lo que los resultados de ese servicio deben tomarse con
reserva. En lo que se refiere a secundaria, en cambio, sólo se detectó un ligero avance
en las secundarias públicas generales, pero no en las privadas ni en las escuelas técnicas
o en las telesecundarias.

En un porcentaje internacional la calidad de la educación mexicana, en el 2005-


2006, en términos generales, se situó claramente por debajo en relación con la situación
de países más avanzados; presentó niveles semejantes a los de países que tienen un
nivel similar de desarrollo; y es claramente mejor que la de los países de menor nivel de
desarrollo.

El Plan Nacional de Educación 2001-2006, le quedaron tareas pendientes como el


instrumentar programas y estrategias dirigidos a impulsar la equidad en el nivel de
educación básica; tomando en cuenta que tales estrategias no pueden centrarse sólo en
garantizar el acceso y permanencia escolar; sino que debe de asegurar los niveles de
calidad necesarios para asegurar que todos los alumnos y alumnas tengan las
oportunidades adecuadas para alcanzar niveles de desempeño satisfactorios.
ENERO 17 / 2018

Revisar los modelos educativos aplicados en educación, especialmente indígena


y las telesecundarias, para asegurar que respondan a las necesidades y características
particulares de la población atendida y al contexto en el cual se desarrollan.

Impulsar estrategias de intervención integrales para mejorar la calidad de la


educación básica, ello implica evitar los programas aislados. Es necesario articular las
acciones en un enfoque integral de calidad que contemple los insumos recursos
didácticos, tecnológicos y humanos, así como los procesos educativos diferenciados que
requieren las diferentes modalidades y su relación con el contexto.

Definir políticas de calidad dirigidas a mejorar los niveles de aprendizaje de los


estudiantes, tomando en cuenta las recomendaciones que se desprenden de las
evaluaciones del INEE y de los resultados de ( Programme for International Student
Assessment, PISA).

Sacar adelante la reforma integral de la secundaria.


Reconocer los programas compensatorios, y además de apoyar los insumos
necesarios tanto por las escuelas como por las familias, centrar la atención en los
procesos educativos que posibilitarán que la mejoría en el caso de los alumnos que
actualmente enfrentan profundas desigualdades en su aprovechamiento.

Promover el desarrollo de la investigación educativa sobre el nivel, que contemple


la medición de los resultados, la valoración de los factores externos e internos de la
escuela, para conocer su impacto en la calidad educativa a fin de orientar las acciones
más pertinentes para impulsar la calidad en este nivel.

Programa sectorial de educación 2007-2012


Por ser un programa y no un plan, este carece de un diagnóstico de la situación
educativa nacional y de un capítulo filosófico orientador del rumbo que habrá de seguirse
en este sector educativo durante el sexenio. Ante la falta de un capítulo orientador, no se
sabe por qué se persiguen dichos objetivos y metas. Muchas cosas que debieran estar
presentes están ausentes, como por ejemplo la atención del rezago educativo y la forma
de impedir que éste siga creciendo; el mejoramiento de la formación inicial de docentes,
de lo que no se dice prácticamente nada, entre muchos otros. El modelo de planeación
seguido conduce a que las estrategias y las líneas de acción, incluso los objetivos, sean
bastante más ambiciosas que las metas, todas ellas expresadas en términos cuantitativos
y con un énfasis desmedido en el producto final.

Actualizar los planes y programas de estudio, sus contenidos, materiales y


métodos para elevar pertenencia en la educación integral de los estudiantes y fomentar
en ellos el desarrollo de valores, habilidades, conocimiento y actitudes que le permitan
participar con éxito en la vida de su país y del mundo del siglo XXI.
ENERO 17 / 2018

Programa sectorial de educación


Reforma integral de la educación básica, con el fin de que los planteles y
programas permitan a los ciudadanos del siglo XXI ser y convivir en el ejercicio de una
ciudadanía democrática, responsable ética, creativa y productiva que proyecte un
horizonte más próspero, equitativo y democrático se ordena avanzar hacia una plena
articulación de los niveles que integran la educación básica obligatoria de 12.

Los planes y
programas de
estudio

Desarrollo de
Aprendizaje del
Deben favorecer competencias en
inglés, como
un currículo el uso de los
segunda lengua.
tic’sCon

que propicie el
aprendizaje de los
alumnos en su
lengua materna.

Acuerdo por el que se establece la articulación de la educación básica

La articulación de una educación básica organiza en un plan de estudios, los


programas y estándares educativos correspondientes a los niveles de preescolar,
primaria y secundaria. Así mismo determina un trayecto formativo congruente con las
características, fines y propósitos de la educación y el Sistema educativo Nacional,
establecidas en el artículo 3ª de la Constitución y en la Ley General de Educación.

Política de calidad educativa 2007-2012

Conforme a lo dispuesto en el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 (PND), la


propuesta educativa radica en una trasformación de la misma, ésta iniciativa, también ha
estado en el anterior gobierno de Vicente Fox. Uno de sus objetivos en cuanto a la
educación es elevar la calidad de la misma para que los estudiantes mejoren su nivel de
logro educativo, cuenten con medios para tener acceso a un mayor bienestar y
contribuyan al desarrollo nacional
De acuerdo al PND, la calidad educativa comprende los rubros de cobertura,
equidad, eficacia, eficiencia y pertinencia. Una educación de calidad entonces significa
atender e impulsar el desarrollo de las capacidades y habilidades individuales, en los
ámbitos intelectuales, afectivos, artísticos y deportivos, al tiempo que se fomentan los
valores que aseguren una convivencia social solidaria y se prepara para la competitividad
y exigencia del mundo del trabajo.
ENERO 17 / 2018

El PND propone como estrategias para elevar la calidad educativa en educación básica
lo siguiente:

 Realizar una reforma integral de la educación básica, centrada en la adopción de


un modelo educativo basado en competencias, que responda a las necesidades
de desarrollo de México en el siglo XXI.
 Revisar y fortalecer los sistemas de formación continua y superación profesional
de docentes en servicio, de modo que adquieran las competencias necesarias
para ser facilitadores y promotores del aprendizaje de los alumnos y alumnas.
Enfocar la oferta de actualización de los docentes para mejorar su práctica
profesional y los resultados de aprendizaje de los educandos.
 Desplegar acciones complementarias que favorezcan el dominio de la
comprensión lectora, y el uso de la lengua oral y escrita en diferentes contextos.
 Articular esfuerzos y establecer mecanismos para asegurar el desarrollo de
habilidades cognoscitivas y competencias numéricas básicas que permitan a todos
los estudiando seguir aprendiendo.

El presupuesto para hacer frente a las necesidades educativas (cobertura,


infraestructura, investigación, actualización de profesores, etc.) del país en el 2010 será
de 211,186 millones de pesos, que si bien presentó un incremento con respecto a años
anteriores, no será suficiente para satisfacer las necesidades básicas de educación en el
país.

Comparación

Al analizar el Programa Nacional de Educación 2001-2006, y el Plan Nacional de


Desarrollo 2007-2012 , se han identificado la relación del estado con la educación, en el
nivel básico, de tal suerte que una fortaleza de la educación es que la educación pública
en México además de ser gratuita y laica, ha tenido siempre la aspiración de preparar a
los individuos para enfrentar la vida con libertad, con un valor cívico y desarrollar todas
sus habilidades como señala la carta magna de la constitución en el artículo 3° de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Haciendo un recuento de la historia educativa en 1943, con apoyo del gobierno


federal, se unifican las distintas organizaciones gremiales de maestros en una sola: el
Sindicato Nacional de trabajadores de la Educación. Hasta la fecha es un actor político
fundamental en la gestión de los servicios educativos y de control político. En 1978 se
desconcentra la Secretaria de Educación Pública y pasa a delegaciones en los estados,
pero continúa teniendo control en la educación preescolar, primaria y secundaria, así
como también en la elaboración y distribución de los libros de texto, planes y programas
algunos autores afirman que:
ENERO 17 / 2018

El 18 de mayo de 1992, a la mitad del proceso salinista se firmó el Acuerdo


Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB) mediante el cual
el gobierno federal, a través de la SEP, trasfirió a los gobiernos de los estados los
servicios de educación básica y los de formación inicial y en servicios de los
docentes. El ANMEB fue suscrito por los gobernadores de los estados, el Poder
Ejecutivo Federal y la autoridad del SNTE.

Sin embargo a pesar de estos esfuerzos realizados la educación en sentido


estricto no se ha descentralizado. Pero no sólo en la legislación se observa la fuerte
resistencia a la soberanía de los estados, sino que el Consejo Nacional de Autoridades
Educativas (CONAEDU), el cual fue creado el 4 de marzo del 2004 a iniciativa de la SEP,
con el objetivo de que cada secretario de educación de los estados, así como autoridades
educativas del gobierno federal sean los que den sustento para el buen funcionamiento
de los programas destinados a incrementar la calidad de la educación, así como un
órgano colegiado que de lineamientos para la aplicación de las políticas públicas
educativas nacionales.

Un elemento importante para llevar a cabo la calidad en la educación es el monto


financiero el cual es trasferido por el gobierno federal a la SEP, a los estados, tomando
en cuenta el gasto corriente, los programas de prioridad y, la infraestructura de las
escuelas. Las negociaciones para este rubro siguen siendo centralizadas, y son
decisiones conjuntas de la SEP y de la dirigencia nacional del SNTE. En el 2006 México
el gasto en educación fue equivalente a 7% del PIB.

La comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados asignó a la educación


una cantidad menor a la solicitada por el gobierno de Felipe Calderón en donde se afecta
el nivel básico principalmente.

Para los niveles básicos, el planteamiento de la Comisión de Educación


contemplaba una ampliación de 3,662 millones de pesos; no obstante, la comisión de
presupuesto lo dejó únicamente 2,334 millones de pesos, en donde se afectará
principalmente los programas de Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito de
Fortalecimiento a la Educación Temprana y el Desarrollo Infantil.

Con este presupuesto asignado para la educación básica, la trasformación


educativa propuesta en el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 en los retos de una
mejor calidad educativa, equidad y trasformación de la misma, son aspectos difíciles de
cumplir, ya que se entiende por calidad educativa un mejoramiento global el cual depende
de las operaciones del sistema educativo como son insumos, procesos, productos y la
interacción con el entorno, los cuales se toman en cuenta para el concepto de calidad
educativa de tal manera que es un proceso complejo.
ENERO 17 / 2018

PROGRAMA SECTORIAL DE EDUCACIÓN 2013-2018


El contexto previo al programa 2013-2018

En el caso del sector educativo, en la anterior administración (2006-2012) se da


un hecho sui generis que altera esta programación fundamentalmente en el nivel de
educación básica: la aparición de la llamada Alianza por la Calidad de la Educación
(ACE), instrumento que remplaza al Programa Sectorial de Educación en dicho nivel.
Éste se gesta desde la representación sindical y cuenta con el beneplácito de la máxima
magistratura de la nación, generando distorsiones, duplicidades y traslapes importantes
en la gestión del sector y disminuyendo de forma importante la rectoría del Estado y por
ende la de los distintos secretarios que ocuparon la SEP en esos años, derivando todo
ello en prácticas inusuales en la actual administración.
Concomitante con lo anterior se abandona la función de gobernar que compete al
Estado en otras áreas de la gestión pública, lo que da como resultado un caldo de cultivo
propicio y hasta necesario para que se geste lo que se conoce como el Pacto por México,
inusual instrumento de carácter político que mediante el consenso de las tres fuerzas
políticas mayoritarias del país, PAN, PRI y PRD, busca retomar la rectoría del Estado en
diferentes áreas de la gestión pública mediante compromisos concretos, entre los cuales
el sector educativo ocupa un lugar especial.

Después de dicho Pacto se de la reforma del artículo 3° Constitucional, la


promulgación de las leyes secundarias que de ella devienen (la Ley del Instituto Nacional
para la Evaluación de la Educación y la Ley General del Servicio Profesional Docente),
así como las modificaciones a la Ley General de Educación, que en su conjunto forman
el cuerpo jurídico normativo que determina el marco dentro del cual se desarrollará toda
la política educativa de la nueva administración —y en tanto no surjan nuevas
modificaciones— de las subsiguientes.

Así surge el Programa Sectorial de Educación 2013-2018, instrumento técnico-


programático quizá cuestionado, en tanto que se le pudiera considerar un “refrito” de otros
documentos político-cupulares (Pacto por México) o institucionales (la Reforma
“Educativa” y sus leyes secundarias), apreciación del todo equivocada, ya que el
Programa Sectorial es un instrumento de planeación de la gestión pública, que si bien
está enmarcado por lo que establece la reforma educativa, define cuáles serán las
estrategias y líneas de acción que la nueva administración emprenderá para lograr sus
objetivos.

En el Capítulo I. Diagnóstico, se menciona que la Educación Superior (ES) debe


ser fortalecida pues es fundamental para el desarrollo social, político y económico
nacional. Por lo tanto, para asegurar la calidad educativa en este nivel, se necesita
continuar impulsando a los mecanismos de evaluación, acreditación y los exámenes de
ENERO 17 / 2018

egreso en colaboración con otras instancias, además de continuar con los modelos de
cooperación académica con otros países.

En el Capítulo II se cuadran las Metas Nacionales del Plan Nacional de Desarrollo


(PND) con los objetivos del PSE, destacando entre otras metas y/o objetivos, la
pertinencia de los programas educativos y la incorporación de nuevas tecnologías en el
proceso enseñanza-aprendizaje; promover un Sistema Nacional de Evaluación; la
ampliación de la oferta para mejorar el acceso; el incremento paulatino de la inversión
nacional en investigación científica hasta alcanzar el 1% del PIB.

En el Capítulo III. Objetivos, Estrategias y Líneas de Acción, se encuentra el


Objetivo 2. Fortalecer la calidad y pertinencia de la educación media superior, superior y
formación para el trabajo, en el que se hace la indicación de orientar la educación de
estos niveles hacia las competencias necesarias para el desarrollo democrático, social y
económico del país.
Las líneas de acción indican:

 Fortalecer la asignación de recursos extraordinarios, articular un sistema nacional


de evaluación y acreditación de la ES.

 Crear reformas para dar certidumbre a las inversiones, actualizar a los


profesionistas, a los docentes y vigorizar las capacidades administrativas de las
autoridades.
 Otorgar becas de apoyo y reconocimiento a estudiantes, crear esquemas de
cambio generacional para profesores y crear modelos de cooperación académica
para la internacionalización.
 Flexibilización de los marcos curriculares para las trayectorias académicas e
impulsar el ingreso a posgrado.

En la Estrategia 2.4 se busca promover la investigación y tecnología para generar


conocimiento en beneficio del desarrollo nacional.
En la Estrategia 2.5 se busca fortalecer la pertinencia de la ES para el país.
La Estrategia 2.6 establece el aprovechamiento de las tecnologías información y la
comunicación como medio de fortalecimiento.
En la Estrategia 2.7 se establece la ampliación y mejora de la infraestructura y
equipamiento de la ES.

En el Objetivo 3 se determina asegurar una mayor cobertura, inclusión y equidad


educativa para una sociedad más justa, y se afirma que el Estado tiene la obligación de
asegurar el derecho a la educación.
ENERO 17 / 2018

En el Capítulo IV los indicadores para la educación superior:

Indicador 2.2 Porcentaje de estudiantes inscritos en programas de licenciatura


reconocidos por su calidad el cual se obtendrá de la Relación de Programas-Instituciones
que son certificados con nivel de calidad por ciclo escolar de la Subsecretaría de
Educación Superior.

Indicador 2.3 Número de Certificados de competencia laboral emitidos, el cual refleja el


número de personas que son certificadas por el Sistema Nacional de Competencias con
el fin de fortalecer la calidad y pertinencia de la ES.

Indicador 3.1 Tasa bruta de escolarización de educación media superior y superior, el


cual indica el número de estudiantes matriculados al inicio de cada ciclo escolar. La
información se obtendrá de la SEP y la CONAPO.

Indicador 3.2 Tasa bruta de escolarización de educación media superior y superior para
los primeros cuatro deciles de ingreso monetario per cápita, el cual es utilizado para medir
si es que la cobertura está mejorando en los sectores económicamente menos
favorecidos.

Indicador 5 Proporción de estudiantes beneficiados con los servicios y actividades


artísticas y culturales, que mide la matrícula que recibió servicios de actividades artísticas
y culturales a través de becas o cursos de capacitación.

Indicador 6.1 Gasto en Investigación Científica y Desarrollo Experimental (GIDE)


ejecutado por las IES respecto al PIB, el cual establece una medición de la investigación
científica y desarrollo experimental. Las fuentes de información serán CONACyT y el
INEGI.

Indicador 6.2 Porcentaje de programas de doctorado escolarizados en áreas de Ciencia


y Tecnología registrados en el PNPC, el cual mide la proporción de programas de
posgrado que pertenecen al padrón del PNPC.

En esta ocasión, el Programa no fue sólo producto de un proceso definido por ley,
fue resultado de un proceso político y constitucional que se planteó como indispensable
para avanzar, que se esgrimió como la única forma de salir del marasmo y deterioro en
el que está este sector, más allá de que sigan o no los garantes originales del Pacto por
México, de que se incluyó dentro del proceso la remoción de obstáculos de otra índole,
de las distintas manifestaciones de oposición que existen a los postulados y métodos de
las reformas, más allá de cualquier consideración posible, está dado todo lo que se
planteaba como necesario: el Pacto por México, la Reforma Constitucional, las Leyes
Secundarias, el Plan Nacional de Desarrollo, y ahora, el Programa Sectorial de Educación
2013-2018. Cabe entonces esperar que al fin del sexenio México supere en forma
significativa al menos los indicadores que se han mencionado. De no ser así, el problema
no es el Programa, sino el sistema mismo.
ENERO 17 / 2018

Reflexiones finales
En 1921, con la creación de la Secretaría de Educación Pública (SEP), se inició un largo
y complejo proceso de Federalización de la educación mexicana en su sentido
centralizador, que tuvo distintas facetas que caracterizaron el sistema educativo en la
mayor parte del siglo xx. Aunque desde los años setenta del siglo aludido se iniciaron
algunas acciones de descentralización del sistema educativo, fue en el gobierno de
Carlos Salinas cuando se puso en marcha el proceso más amplio de transferencia de la
educación básica y educación normal a los gobiernos de los estados; este proceso se
llevó a cabo en el marco de la reforma del Estado y la administración pública. Para la
educación, el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB)
Fue el instrumento de arranque y estructuración de la descentralización.

La descentralización de la educación básica y la formación de maestros fue una


decisión política y ha provoco que los estados asumieran nuevas responsabilidades de
muy diversas maneras. En este nuevo siglo XXI el proceso de descentralización y la
reforma educativa han producido una nueva gama de problemas, escenarios inéditos y
heterogéneos, así como una combinación inestable de consensos, rechazos,
expectativas, incertidumbres y viejas prácticas que apenas empiezan a explorarse

Según el plan de desarrollo 2013-2018. Los mexicanos de hoy deberán responder


a un nuevo paradigma donde las oportunidades de trabajo no sólo se buscan sino que
en ocasiones deben inventarse. La dinámica de avance tecnológico y la globalización
demandan jóvenes capaces de innovar. La falta de educación es una barrera que limita
la capacidad de la población para comunicarse de una manera eficiente, la educación
deberá estar en estrecha vinculación con la investigación y con la vida productiva del
país.

El plan nacional de desarrollo (PND) 2013-2018: menciona 5 metas para hacer prosperar
a México, en su tercera meta señala: un México con educación de calidad; la cual se
puede desear, sin embargo las directrices son dadas por los estándares mundiales
ajenos al gobierno mexicano.

Educación de calidad:
Diagnóstico

• 29% de la consulta ciudadana consideró prioridad la educación de calidad.


• Lugar 33 de 33 países en la prueba (PISA)
• Sólo 7.6% de las patentes solicitadas en México, son de mexicanos.
• 32.3 millones de adultos no ha terminado la educación básica y 15 millones
no terminó el bachillerato. 5.1 millones son analfabetas.
• Hay 29.9 con nivel de doctorado por cada millón de habitantes.
ENERO 17 / 2018

• Por cada $1 invertido en actividad física, se reduce $3.2 en gasto médico


futuro.

Educación de calidad:

Algunos objetivos
Garantizar la inclusión y equidad en el sistema educativo.
Ampliar el acceso a la cultura, como un medio para la formación integral de
los mexicanos.
Promover el deporte de una manera incluyente para fomentar la cultura de
la salud.
Hacer del desarrollo científico, tecnológico y la innovación, Pilares para el
progreso económico y social sostenible.
Educación de calidad:
Indicadores
1. Prueba: Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares
(ENLACE). Escala 200 a 800 mejor.

Español, primaria 551


2. Eficiencia terminal del sistema de
Matemáticas, primaria 509 572
educación nacional.

Español, secundaria 514 496

Matemáticas, secundaria 511 532

2010 2013
Primaria 95 96

Secundaria 83 85

Media Superior 62 63

Superior 71 71

Fte. SEP.
ENERO 17 / 2018

La educación es trascendental internacionalmente, así se ve que México como otros


países de América Latina están ordenados por estándares mundiales como la
Organización de las Naciones

Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el banco mundial, la


Organización y Cooperación de Desarrollo Económico (OCDE), entre otros, se habla de
cambiar, de gestionar, de competir en el campo de la preparación de acuerdo a las
necesidades; la educación superior no podrá hacer frente a los desafíos que le plantea
la realidad actual sin una nueva elaboración de las políticas de
cooperación dentro del marco de los países latinoamericanos y hablando exclusivamente
de México se habla de que este es un buen momento por tener una economía estable.
México tendrá que buscar la
educación y la innovación en sus

se universidades para ser


competidor, en el ámbito laboral.
En su eje plantean La investigación sin duda será un
factor determinante dentro de los
3 como profesores y los estudiantes
objetivos: porque esto es lo que hace
competente a ambos tanto en el
conocimiento, como en la
3.1. Desarrollar el potencial tecnología, y en el idioma inglés.
humano de los mexicanos
con educación de calidad.
.Al ingresar nuevos actores
en el escenario de la política
3.2. Garantizar la inclusión y educativa nacional aparecen o se
la equidad en el Sistema
Educativo. hacen evidentes nuevas
dificultades y obstáculos o nuevas
posibilidades para la conducción
3.3. Ampliar el acceso a la
“México con Educación de cultura como un medio para del sistema educativo y para su
Calidad”, la formación integral de los desarrollo futuro.
ciudadanos.

La UNESCO recomienda que las


3.4. Promover el deporte de respuestas de la educación
manera incluyente para
fomentar una cultura de superior a los continuos cambios
salud, y de hoy deberán estar guiadas por
tres principios rectores:
3.5. Hacer del desarrollo
científico, tecnológico y la relevancia, calidad e
innovación pilares para el internacionalización. Según la
progreso económico y social
sostenible. Organización para la Cooperación
y Desarrollo Económico (2012),
ENERO 17 / 2018

(OCDE), tiene como objetivo principal promover mejores políticas para una vida mejor.
El principio de la internacionalización es muy importante, pues se considera que el
aumento en los intercambios entre universidades de distintos países ha de redundar en
un mayor entendimiento entre las culturas y también en una mayor difusión del
conocimiento.

Ninguna de las nueve estrategias que el Plan establece para realizar los objetivos 3.1 y
3.2 versa, explícitamente, sobre los procesos referidos. Cuatro de ellas, en cambio, se
concentran en insumos de dicho proceso: la infraestructura y el equipamiento, los planes
y los programas de estudio, las tecnologías de la información y la comunicación, y un
“sistema nacional de evaluación”. Solamente la estrategia 3.1.1 refiere, de manera
secundaria en una de sus ocho líneas de acción, al proceso educativo, al discurrir
respecto a que el estímulo del desarrollo profesional de los maestros ha de centrarse en
la escuela y en el aprendizaje de los alumnos.

Esta referencia, sin embargo, habrá de interpretarse a la luz de la iniciativa de ley


presentada por el Poder Ejecutivo ante el Congreso para la creación del Sistema de
Desarrollo Profesional Docente, y su propuesta de que los docentes sean evaluados e
incentivados, como viene siendo desde el sexenio anterior, a partir de los resultados de
aprendizaje de los alumnos (que en México se mide mediante la prueba ENLACE). La
estrategia, entonces, se centra en un estímulo técnicamente insostenible, puesto que
hace décadas que en México, América Latina y los países de la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), entre muchos otros, se ha
documentado que los resultados de los estudiantes en pruebas estandarizadas se asocia,
en primer lugar, al contexto en que son educados (condiciones socioeconómicas y
familiares), y que no es fácil distinguir la contribución de cada docente en las variables
en cuya configuración sí participan (el clima de aula, la gestión escolar), y se relacionan
con el logro educativo (Casassus, 2000; INEE, 2008; Valdés, 2008; OCDE, 2010a,
2010b).

Por otra parte, las estrategias 3.2.1 y 3.2.3 del PND rozan la enseñanza y el aprendizaje
al proponer, respectivamente, “ampliar las oportunidades de acceso a la educación en
todas las regiones y sectores de la población” –y considerar en el nivel táctico la línea de
acción “robustecer la educación indígena, la destinada a niños migrantes, la
telesecundaria, así como los servicios educativos que presta el Consejo Nacional de
Fomento Educativo (Conafe)”– y “crear nuevos servicios educativos, ampliar los
existentes y aprovechar la capacidad instalada en los planteles” –creación que implica,
además de insumos, “impulsar la diversificación de la oferta educativa en la educación
media superior…”, y “fomentar la creación de nuevas opciones educativas, a la
ENERO 17 / 2018

vanguardia del conocimiento científico y tecnológico”, lo que requiere, necesariamente,


mejorar los procesos educativos en sí mismos.

Una de las dos estrategias restantes está encaminada a incidir en el contexto en que se
realiza la educación: “ampliar los apoyos a niños y jóvenes en situación de desventaja o
vulnerabilidad”, mientras que otra se refiere a los resultados del sistema educativo, y es,
más que una estrategia, un objetivo de impacto en indicadores cuantitativos: “disminuir
el abandono escolar, mejorar la eficiencia terminal en cada nivel educativo y aumentar
las tasas de transición entre un nivel y otro”.

A partir del análisis reportado se puede inferir que a nuestra Federación le interesa muy
poco contribuir con la mejora del desempeño docente mediante la formación, y considera,
equivocadamente, que el desarrollo profesional de las y los maestros depende de
someterlos a múltiples evaluaciones, y no de ofrecerles una formación de calidad. La
iniciativa de ley del Poder Ejecutivo respecto al llamado Sistema de Profesionalización
Docente carga a los docentes, de manera exclusiva (y por lo tanto excesiva), como
“responsables del aprendizaje de los alumnos”; pero ni el Ejecutivo ni el Legislativo
asumen, a su vez, la responsabilidad de formarlos de la manera más pertinente (con base
en los datos necesarios, hoy técnicamente construibles) para propiciar que dichos
aprendizajes sean los que los estudiantes mexicanos requieren y requerirán para
realizarse como humanos, ciudadanos y productores. Una formación inicial y continua
robusta, y diseñada a partir de evidencias sobre las necesidades de los docentes
mexicanos para mejorar la educación que ofrecen en las aulas, sería disponer un insumo
directamente orientado a la mejora del proceso clave del SEN. La traducción del capítulo
educativo del PND en un plan sectorial, su concreción programática y la reasignación
presupuestal a partir del próximo ciclo fiscal son oportunidades aprovechables para
corregir los descuidos aquí mencionados y fortalecer la enseñanza y el aprendizaje en
las aulas mediante una formación inicial y continua que revitalice la profesión docente en
México. Una evaluación planteada de manera adecuada puede, incluso, nutrir este
proceso formativo. De lo contrario, nuestro país difícilmente “desarrollará el potencial
humano de los mexicanos con una educación de calidad”, ni “garantizará la inclusión y la
equidad en el sistema educativo”.
ENERO 17 / 2018

Bibliografía
Aguado, M. L. y Ruiz, M. (1996). La reforma educativa está en marcha. ¿Y la tuya?

Madrid: La Muralla.

Álvarez, G. J. (2000). “Oportunidades y obstáculos de la descentralización educativa. El

caso de México”. Ponencia presentada en el Seminario Internacional Reformas

Educativa y Política en América Latina.

Arnaut, A. (1998). Historia de una profesión: Maestros de primaria en México, 1887-1994.

México: SEP -Biblioteca del Normalista.

Di Gropello, E. (1999). Los modelos de descentralización educativa en América Latina.

Revista de la CEPAL, 68, 153-170.

Ornelas, C. (1995). El sistema educativo mexicano. La transición de fin de siglo. México:

CIDE-Nacional Financiera-Fondo de Cultura Económica.

Reimers, F. (1995). Participación ciudadana en reformas de políticas educativas.

Pensamiento Educativo,17, 115-131. Schmelkes, S., Martínez, F. y Noriega, M. C.

(1997). La calidad de la educación primaria: Un estudio de caso. México:

Secretaría de Educación Pública-Fondo de Cultura Económica.

Secretaría de Educación Pública. (1996). Programa de Desarrollo Educativo 1995-2000.

México: Autor.

Secretaría de Educación Pública. (1999). Informe de labores 1998-1999. México: Autor.

Secretaría de Educación Pública. (2000). Informe de labores 1999-2000. México:


ENERO 17 / 2018

Autor. Secretaría de Educación Pública. (2001). Programa Nacional de Educación

2001- 2006. México: Autor.

Vous aimerez peut-être aussi