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Finanzas 4
Grahamm Velasco
25 de enero de 2018
Notas Promisorias
Conocido como un por pagar en contabilidad (como diferenciar de cuentas por pagar), o
comúnmente como una "nota", internacionalmente se define por la Prevé una ley uniforme de
Letras de cambio y pagarés, aunque existen variaciones regionales. Billete de banco se refiere con
frecuencia como un pagaré: un pagaré hecho por un banco y pagadero al portador en la
demanda. Notas de la hipoteca son otro ejemplo prominente.
Cuando una empresa se dedica a muchas de esas transacciones, por ejemplo por haber prestado
servicios a muchos clientes, todos los cuales entonces aplazar su pago, es posible que la empresa
puede ser debida suficiente dinero que su propia posición de liquidez (es decir, la cantidad de dinero
que posee) se ve obstaculizada y se encuentra incapaz de honrar sus propias deudas, pese a que por
los libros, la empresa sigue siendo solvente. En esos casos, la compañía tiene la opción de pedir un
préstamo a corto plazo del banco, o usar cualquier otros tan corto plazo arreglos financieros para
evitar la insolvencia. Sin embargo, en las jurisdicciones donde pagarés son moneda corriente, la
empresa (llamado el beneficiario o prestamista) puedes preguntar a uno de sus deudores (llamado
el fabricante, prestatario o pagador) a aceptar un pagaré, por el que el fabricante firma
jurídicamente vinculantes acuerdo para honrar la cantidad establecida en el pagaré (generalmente,
parte o toda su deuda) en el plazo acordado.[3] El prestamista puede entonces tomar el pagaré a una
institución financiera (generalmente un banco, aunque esto también podría ser una persona
privada, u otra compañía), que intercambiarán el pagaré por dinero en efectivo; generalmente, el
pagaré es cobrado la cantidad establecida en el pagaré, menos un pequeño descuento. Una vez la
nota promisoria alcanza su fecha de vencimiento, su actual titular (el banco) puede ejecutarlo sobre
el emisor de la nota (el deudor), que tendría que pagar al banco el monto prometió en la nota. Si la
máquina deja de pagar, sin embargo, el Banco conserva el derecho de ir a la empresa que cobró el
pagaré en y exigir el pago. En el caso de los pagarés no garantizados, el prestamista acepta el pagaré
basado únicamente en la capacidad del fabricante para saldar; Si la máquina deja de pagar, el
prestamista debe honrar la deuda con el banco. En el caso de un pagaré asegurado, el prestamista
acepta el pagaré en base a la capacidad del fabricante para pagar, pero la nota está asegurada por
una cosa de valor; Si la máquina deja de pagar y el Banco reclama el pago, el prestamista tiene el
derecho de ejecutar la seguridad.[4]
Por lo tanto, pagarés puede funcionar como una forma de dinero privado. En el pasado,
particularmente durante el siglo XIX, su uso generalizado y no reglamentada era una fuente de gran
riesgo para los bancos y financistas privados, que a menudo se enfrentarían a la insolvencia de los
deudores, o simplemente ser estafados por ambos.
Los términos de una nota generalmente incluyen la principal cantidad, el tasa de interés Si acaso,
las partes, la fecha, las condiciones de reembolso (que podría incluir el interés) y la fecha de
vencimiento. A veces, las disposiciones se incluyen relativas a los derechos del beneficiario en caso
de un por defecto, que puede incluir la exclusión de los activos del fabricante. Demanda de
pagarés son notas que no llevan una fecha de vencimiento específica, sino que son debidos a
petición de la entidad crediticia. Generalmente el prestamista sólo dará la prestataria antelación a
pocos días de antes de que el pago es debido. Para los préstamos entre particulares, escribir y firmar
un pagaré a menudo son instrumentales para impuestos y grabación mantenimiento. Un pagaré
solo es generalmente seguro, Pero éstos se pueden utilizar en combinación con acuerdos de
seguridad tales como hipoteca, en cuyo caso se llaman Notas de la hipoteca.
Derecho internacional
Definición y uso de pagarés son establecidos internacionalmente por la Prevé una ley uniforme de
Letras de cambio y pagarés, firmado en Ginebra en el año 1930.[6] El artículo 75 del Tratado declaró
que un pagaré deberá contener:
a) Fuente de repago: la fuente de repago hace referencia al origen de los fondos que se destinarán
al pago tanto de capital como de intereses de la emisión. En el caso de las notas promisorias, los
fondos provendrán de: o Ingresos propios generados por el GADM: Estos son provenientes de
impuestos, tasas y contribuciones especiales de mejoras generales o específicas; los de venta de
bienes y servicios; los de renta de inversiones y multas; los de venta de activos no financieros y
recuperación de inversiones; los de rifas, sorteos, entre otros ingresos. Estos ingresos son
generados por la gestión propia y en base a las competencias municipales, incluso una de las
variables para el cálculo de la asignación presupuestaria para cada GADM, es en base a su capacidad
de recaudación. (Código Orgánico de Ordenamiento Territorial, Autonomía y Descentralización) o
Recursos generados por el proyecto: Dependiendo el tipo de proyecto a financiarse, se puede
determinar mediante proyecciones y estimaciones los ingresos provenientes del proyecto,
identificando la capacidad de generación de recursos para la cobertura de los gastos financieros
originados por la emisión. Existen proyectos que generan ingresos para la municipalidad y proyectos
que no.
Para proyectos enfocados en servicios públicos, se emitirán cobro de tasas, estas están reguladas
mediante ordenanzas y serán para la prestación de los siguientes servicios:
Webgrafía:
http://repositorio.puce.edu.ec/bitstream/handle/22000/11194/TESIS%20%20-%20PUCE-
%20Veintimilla%20Izquierdo%20María.pdf?sequence=1
http://repositorio.puce.edu.ec/bitstream/handle/22000/8792/Trabajo%20de%20Titulación.pdf
?sequence=1&isAllowed=y