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1.

Pertinencia del programa de formación y Espacios de Proyección


Social

El programa de formación complementaria de La Escuela Normal Superior


Divina Providencia, nace en relación a las particularidades y necesidades del
contexto histórico, políticos, social y cultural, el cual se ha caracterizado por ser
una región que vivió y de forma crónica y significativa las problemáticas
sociales relacionadas con hechos violentos, prácticas de exclusión y
segregación social y cultural, donde los derechos humanos así como el valor
de la vida, se invisibilizaron y llegaron hasta el extremo de una inexistencia por
omisión y negligencia por parte de todos los actores -víctimas y victimarios- del
conflicto. Lo anterior, se ha evidenciado como ciclos de repetición (La época de
la violencia, el conflicto armado interno, el narcotráfico, paramilitarismo, crimen
organizado, y falsos positivos), sin que el Estado (Ciudadanos y Gobierno), nos
pensemos y tomemos acciones para evitar su “sin sentido”, continuidad y
agudización
De lo anterior, la ENSDP como institución educadora y comunidad educativa,
asumimos que esa historicidad del territorio del Rionegro no debería volver a
repetirse, ya que la pérdida de vidas humanas y los efectos de las secuelas
psicológicas, sociales, económicas, políticas y culturales han marcado y
estrechado las oportunidades de desarrollo de una vida plena y una
convivencia pacífica en la comunidad.
Ahora bien, tomando en cuenta el rol privilegiado de la ENSDP como
institución educadora y espacio inicial de socialización, siendo este un lugar
donde se presta las condiciones para sembrar forjar las condiciones iniciales
para una transformación social hacia una sociedad más justa, democrática,
equitativa, ética y pacífica.
Para llegar a este propósito, asumimos y creemos que desde nuestra labor,
compromiso y práctica cotidianas y pedagógicas investigativas y se encuentra
esa posibilidad de transformación social y cultural; es por esta razón, que en la
comunidad educativa hemos construido la siguiente misión institucional:
La Institución Educativa Escuela Normal Superior Divina Providencia de La
Palma Cundinamarca, ofrece a la comunidad Palmera y municipios
circunvecinos una educación Pre-escolar, Básica Primaria, Básica Secundaria,
Media Académica con formación pedagógica y programa de formación
complementaria de Maestros de Paz, bajo los principios Cristianos, éticos,
morales y pedagógicos (de educabilidad y enseñabilidad, pedagogía de la Paz
-Franciscano Bernardina-) dirigida a niños (as), jóvenes y adultos para que a
través de procesos de investigación formativa y pedagógica participen
activamente en la construcción de una sociedad más justa democrática y
equitativa que responda a las exigencias y retos de los problemas producto del
conflicto y del postconflicto. (Proyecto Educativo Institucional - Centro de
formación permanente y formador de Maestros de Paz, 2018)
En otras palabras, nuestra institución educativa, desde su naturaleza como
formadora de maestros(as), busca el cambiar la realidad social de nuestro
contexto por medio de los principios de educabilidad la cual busca una
formación integral del sujeto desde los principios de la naturaleza pedagógica
de las Escuelas Normales Superiores; educabilidad (es el aspecto que
concierne la formación integral del sujeto, basada en la dimensión ética y
moral), enseñabilidad (es el aspecto que pertenece a la formación intelectual y
cultural del sujeto a partir de los campos conceptúales y disciplinas científicas)
y contextos (comprensión crítica y sistémica del maestro producto de su praxis,
la investigación y la reflexión pedagógica), son los ejes de todos los saberes
del ser humano, y desde ellos y bajo sus preceptos se construyen y orientan
las acciones educativas institucionales.
Por otra parte, en ese orden de ideas nuestro programa de formación
Complementario se ha construido de forma histórica y reflexiva, desde un
compromiso social constante con la niñez y juventud del territorio de Rio
Negro, de igual modo desde nuestra identidad como maestros y formadores
que seguimos las enseñanzas de San Francisco de Asís, son elementos
centrales de nuestra practica pedagógica: la paz, la equidad, el derecho a la
diferencia, la comunicación asertiva-empática, las pedagogías de la memoria,
la formación del pensamiento crítico, el amor al prójimo, acciones de
reparación y no repetición individuales-comunitarias, las cuales serían el
camino más corto a la reconciliación y una convivencia pacífica e incluyente a
partir del respeto y compromiso por la vida de todos los seres vivos, así como
su cuidado para conservar todas las condiciones necesarias para una vida
plena y feliz.
En ese orden de ideas, nuestros maestros normalistas, se posicionan en el
campo social desde los componentes: a) Pedagógico, él reconoce en la
pedagogía como fundamento del accionar y propone alternativas de cambio y
solución a problemas educativos; b) Investigativo, saber articular la práctica
pedagógica investigativa a los contextos en que se desarrolla el niño, y a su
vez le permita al docente argumentar, proponer acciones para transformar las
realidades de los sujetos educativos; c) Socio-Cultural, ser un sujeto enseñante
con actuar comprometido, comprensivo, crítico y reflexivo, que aplica los
conocimientos para solucionar problemas y crear nuevas ideas, decide y actúa
en forma responsable y autónoma, desde perspectivas inclusivas e
interculturales; d) Psicológico, un sujeto docente que construye en los
escenarios socio-educativos relaciones armónicas de convivencia por medio de
la comunicación efectiva, el trabajo en equipo, la resolución de conflicto,
asumiendo la valoración de la diferencia como una posibilidad de desarrollo
humano y social.
En ese orden de ideas, desde la formación de maestros para la primera
infancia y la básica primaria, es de vital importancia clarificar como se
comprende la formación para primera infancia, como ya es de comprensión de
política pública mundial-nacional, es desde la primera infancia el lugar más
importante donde se posibilita las bases y condiciones para el desarrollo pleno
e integral del infante. Por otra parte, el infante lo comprendemos como un
sujeto desde su dimensión psicológica por sus cualidades cognoscente
(Biológico -Filogenético y sociocultural - Ontogenético), afectivo, moral, y ético,
como sujeto de significado y simbólico (estético: corporal, artístico y
comunicativo) y como también un sujeto de derechos y deberes. En ese orden
de ideas como educadores para esa etapa de desarrollo especifica
comprendemos a los niños y niñas como sujetos capaces de sentir, pensar,
interactuar posibilitando y que el maestro con trabando desde los pilares de la
educación inicial (la literatura, la exploración del medio, el juego y las artes) y
aplicación de los principios de formación de las escuelas normales que son la
pedagogía, la educabilidad, la enseñabilidad y el contexto, que orientan
nuestras acciones para lograr en ellos la posibilidad un desarrollo pleno y un
futuro como miembro activo y responsable de su sociedad y su comunidad.

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