Propusimos la reescritura de las tapas de un yogurt de
moda, intervenirlas con líneas hechas con marcador. La palabra AMO y Mi fueron interferidas visualmente en dos oportunidades sobre un total de ocho, la palabra SER, nunca, excepto para destacarla.
Mostrar esa escritura requirió elaborar un soporte.
Trabajé sobre la base de una caja cuadrangular incorporando esas tapas circulares, recubriéndolas con plásticos transparentes y opacos que horadé. Incorporé ataduras y costuras con hilos de algodón que fueron coloreados y texturizados con cera, marcadores y pasteles disueltos con fuego. En su parte posterior lo pinté de negro con acrílico.
Acompañado por la lectura de Gombrowicz en Curso de
Filosofía en Seis Horas y Cuarto, hago pie en la idea de Sartre que comenta el autor, la opacidad del ser. Idea que retorna al soporte como pregunta alrededor de esa palabra y sus fluctuaciones en la visibilidad de la obra. Las horadaciones se presentan como campo de lectura. El color negro como materia prima o resto. Las ataduras y costuras sostienen las múltiples capas de lo que interroga la imagen. ¿Qué diálogos podrán abrirse con ellas?