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El matraz aforado: Se caracteriza por un cuello largo con una línea para la medición de un
volumen especificado, generalmente viene provisto de un tapón. Se utiliza para preparar
una solución de volumen fijo con mucha precisión. Su manejo es relativamente simple,
primero debemos Pasar al matraz aforado la cantidad exactamente pesada de sustancia
después se llena el matraz con agua destilada hasta la mitad aproximadamente y agitar el
matraz para facilitar la disolución o el mezclado luego se adicionar agua destilada hasta
llegar al aforo y por último tapar el matraz y agitarlo.
Buretas: Se emplean para la medida precisa de volúmenes variables y por lo tanto están
divididas en muchas divisiones pequeñas. Se usan principalmente en valoraciones. El
tamaño común es de 25 y 50 mL, graduados cada 0,1 mL Para el manejo de buretas
Enjuagar la bureta con la solución patrón a utilizar y alinear de manera que el tubo de la
bureta quede vertical. Después llenar la bureta hasta sobrepasar ligeramente la marca
cero. Para desairar la llave de bureta, dejar salir el líquido hasta llegar, como máximo, al
volumen nominal. Al dejar salir el líquido ajustar exactamente el punto cero. Abrir la llave
de bureta y añadir lentamente la solución patrón a la solución con el analito (con
indicador). Durante la adición gota a gota agitar ligeramente el recipiente de recogida con
la muestra, o colocarlo sobre un agitador magnético.
Pipeta volumétrica: está hecha para entregar un volumen bien determinado, el que está
dado por una o dos marcas en la pipeta. Si la marca es una sola, el líquido se debe dejar
escurrir sin soplar, que baje por capilaridad solamente esperando 15 segundos luego que
cayó la última gota.
Pipeta graduada: Se emplean para la para la medida de un volumen variable de un líquido
que se vierte. Proporcionan una exactitud inferior a la de las pipetas aforadas salvo en el
caso de las de 1 y 2 mL.
Para el manejo de pipetas el líquido se debe aspirar mediante un ligero vacío usando bulbo de
succión o propipeta, se debe asegurar que no haya burbujas ni espuma en el líquido, y por último
llenar la pipeta sobre la marca de graduación y trasladar el volumen deseado. El borde del menisco
debe quedar sobre la marca de graduación.
Otro tipo de material volumétrico que utilizaremos son las PROBETAS GRADUADAS CON o sin
tapón, para la el manejo de las probetas graduadas de debe llenar con líquido luego ajustar el
menisco al aforo deseado, no se debe mojar la pared de vidrio por encima del aforo y para finalizar
el volumen leído corresponde a la cantidad de líquido contenida. Cuando tienen tapón se pueden
mezclar directamente por agitación.
Al medir en material volumétrico o de vidrio hay que tener en
cuenta el menisco que es la curvatura de la superficie de un
líquido que se produce en respuesta a la superficie de su
recipiente. Esta curvatura puede ser cóncava o convexa,
según si las moléculas del líquido y las del recipiente se atraen
(agua y vidrio) o repelen (mercurio y vidrio), respectivamente.
Durante la medición la curva debe coincidir (más bien la
tangente de ésta) (la parte central) con el aforo o graduación,
tal cual se muestra en la figura 1. Para leer el menisco sin
error de paralaje, el aparato volumétrico debe estar en
posición vertical y los ojos del operador deben encontrarse a la altura del menisco.
volumen nominal
símbolo de unidad: ml o cm³
temperatura de referencia: 20 °C
ajuste: Ex o In
clase: A, AS o B
eventualmente tiempo de espera: por ejemplo ‘Ex + 5 s’
nombre o distintivo del fabricante
Adicionalmente, pueden ser impresas sobre el aparato las siguientes indicaciones:
país de origen
límite de error
marca (aquí BLAUBRAND®)
norma, p. ej. ISO 648 l número de lote
Según su clase de exactitud los materiales volumétricos pueden clasificarse en clase A/AS y en
clase B; los de clase A/AS tienen límites de error idénticos. Por regla general, estos son alcanzados
sólo por aparatos volumétricos de vidrio, la adición de 'S' significa vaciado rápido y el peligro de
obstrucción es pequeño. Los de clase B en general se acepta el doble de los límites de error que
para la clase A/AS, tienen ajuste por vertido ‘Ex’ es decir no tienen tiempos de espera
especificados.
La limpieza del material se debe realizar inmediatamente después de cada operación ya que es
más fácil y además se conoce la naturaleza de los residuos que contiene. Para limpiar un objeto de
vidrio, en primer lugar se quitan los residuos (que se tiran en el recipiente adecuado) con una
espátula o varilla y después se limpia con el disolvente apropiado. Ocasionalmente, se utilizan
ácidos, bases o disolventes orgánicos para eliminar todos los residuos difíciles. La última operación
de lavado consiste en enjuagar todo el material con agua destilada. El material limpio se seca en
un soporte adecuado inclinado o vertical, colocando el material boca abajo, o bien se utiliza una
estufa de secado.l