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JAS CURNTAS YITRRAS DRL STTIO ARQUEOLOGICO CARPE MALAL I (DEPARTAMENTO CHOS MALAL, NEUQUEN) COMO INDICADORES ‘TEMPORALES. Adan Hajduk™ Introduce {én A fines del aflo 1984, trabajos dedicados a la apertura de una nueva acequia, en el paraje Caepe Malal Departamento Chos Malal- encomendados por la Adminis~ tracién Provincial de Aguas, dejaron al descubierto un importante cementerio indigena. Una parte considerable del mismo fue dafiado por el uso de maquinarias. luego de una evaluacién de las condiciones del sitio y realizado el andlisis del material arqueolégico rescatado de ias remociones, recién en diciembre de 1986- con el apoyo de la Direccién Provincial de Cultura de la Provincia del Neuguén- se procedié a realizar las primeras excavaciones sistemiticas en dicho sitio.} Como resultado de dichos trabajos de campo se detectaron siete entierros de les cuales se exhunaron sélo cuatro. La posicién de todos ellos era decubito dorsal extendidos, con una orientacién ENE para los pies y WSW para el craneo, con las manos tendidas a los costados. Kl entierro N° | correspondia a un individuo de sexo masculinos otro, el N@ 2, a una eriatuta de meses a un afic, posiblemente femenina, y los Nos. 3 y 4 a individuos femeninos. %n estos tres ditimos entie~ rros se hallé una serie de cuentas vitreas. En él presente articulo sélo se haré referencia a dichas cuentas, brindandose las caractevisticas de todas ellas, mas la asignacién temporal inferida a partir de algunas de ellas. Esta presentacién tiene por objeto servir como material de referencia, comparativo pata otros hallazgos en ios cuales vuelva a aparecer este particular elemento. Pesicién de las cuentas vitreas en cada una de Jas inhumaciones Entierro 2: Asociadas a la criatura} se hallaron 954 cuentas vitreas (en adelante CV); prac- ticamente todas ellas estaban densamente concentradas en la zona del cuello. Sélo seis se oncontraban algo apartadas de su lugar original, debido a clara perturba- cién de pequefios roedores. Zn relacién intima a ellas, se encontraron ademas cineo cones de cabre, cuatro tubites y un pequefio casquete con dos perforaciones en extremo, también realizados en cobre, todos de factura indigena, conformando una unidad que se interpreta como collar. Dos de los conos contenian en su inte- rier una y tres GV, las que habrian servido de vemate al cordén de suspension de dichos pendeloques. * Museo de ia Patagonia "Francisca P. Moreno" ~ CONICET. 36 Entierro 3: Femenino infantil. Del total de 971 CV identificadas en este entierro, 350 se localizaron en la zona del cuello, conformanda un collar de, aparentemente, una sola welta; y 621 CV en la zona correspondiente al pecho y parte ventral supe- rior. Estas Wltimas se hallaron asociadas a un "tupu" de plata envolviendo, en tdrabuzén, a su punzdn de hierro y, también, a wra serie de seis conos y 10 tubos de cobre. Algunas pocas CV conservaban atin restos del cordén de fibra animal (un cordén de dos cabos tarcidos en Z) que las enhebraba. Por su posicién y asociacién a las piezas de metal mencionadas, es posible que las CV pertenecieran a un pendiente largo compuesto de CV y tubos que remataban en su parte inferior en conos de metal. Dichos pendientes eran tipicos de la mujer araucana, quien los usaba colgados a ambos lados de una faja cefalica, 0 bien, suspendido por su extrema superior, a la altura del pecho, mediante el tupu; tal parece ser el presente caso. Cabe hacer aqui una observacién: al haberse encontrado el "tupu" con el anverso del disco vuelto hacia abajo, cubriendo conos y tubitos de cobre y estando a su vez cubierto el disco por otros tubitos y conos, y al haberse hallado buena parte del punzén envuelto por varias tiras de CV, plantea que el mismo no se hallaba cumpliendo su funcién de prendedor en este caso particular, sino que se hallaba colocada simplemente en su lugar de uso. Entierro 4: Este entierro femenino, de un probable adulto, conformaba con el N° 2? una unidad o entierro doble, ya que se hallaban muy pr6ximos, uno al lado del otro. La disposicién del conjunto de ofrendas funerarias confirms, a su vez, esta unidad. En este entierro se encontraron 768 CV, De eilas, 767 se localizaron en torno al cuello y una sola préxima al tobillo izquierdo del individuo y a una tortera litica, entre otros elementos que constitufan el ajuar. Andlisis descriptive del material vitreo Si tomamos en cuenta la técnica de factura de las cuentas vitreas -como primer aspecto a ser considerado- se tiene que el conjunto de 1a muestra corresponde a dos grupos técnicos bien diferenciados: Az cuentas a partir de globo de-vidrio estirado, y B: cuentas a partir de vidrio arrollado. Asi, del total de 2693 CV tecuperadss, 2483 cotresponden a las del grupo A o vidrio estirado (92.20% del total) y sélo 210 CV al grupo B o vidrio arrallado (1.19%) (Sobre técnicas de factura de CV ver: Boman 1920; Kidd y Kidd 1970; Kidd 19793 Smith y Good 19825 Hajduk 1981-82). Dentro del grupo A se identificaron a su vez tres tipos segiin caracteristicas de mayor © menor complejidad en 1a constructién, elles son: 1) Guentas viteeas simples (o monocromas): con 22 variedades segin color y grado de transparencia de los vidrios. 2) Cuentas vitreas simples decoradas superficialmente (o monocroma con segmentos longitudinales de diferente color): con una sola variedad. 7 2) Cuentas vitreas compuestas (dos c mas capas de vidrio de diferente color vio grado de transpareacia): cin una sola variedad (Fig. 2a-b y 4a-b), cabe agregar que estas cuentas no han sido modeladas en su estado plastico, ni Facetadas por pulido -como a veces sucede-, de aqui que todas conservan su sec- cién fransversa circular. kn cuanto a su forma, la inmensa mayoria es eltpsoidal -con ei eje mayor en sentido transverso ai orificio de suspension- (elipsoidal EI, Fig. 42); y en propercion mucho menor y en niimero decréciente, se tionen aquellas sub-esferoida- les (Fig. Ja; sub-eilindricas cortas -con oxtremos redondeados- de largo menor o semejante al diametro o espesor (Fig. 24); forma de tonel (Fig, 1a); amigdaloides y finalmente slipsoidales con eje mayor’ en sentido del orificio de suspension {clipsoidal 1). Finalmente, en su acabado, practicamente todas han sido regulari- zadas por rodamionte. Kn el grupo & -curntas de vidrio arroliado-, se identificaron también tres Cipos listintes, con sus respectivas variantes: 1) Cuentas vitreas simples (o monocromas): on tres variedades segin color de vidrio. 2) Cuentas vitreas simples decoradas_superficialmente (motive lobulade Hitomorfo, en sentido transverse}: con dos variedades (Fig. 5a-b). 4) Cuentas vitreas simples modeladas bajo las siguientes formas: 3.1 poligdricas: con siete variedades segiin ntimero de caras y color (Fig. bs 12) <2 "frambuesa": una variedad (Fig. | ja-b) +3 "melén': una variedad (Fig. Laat? @16n" torsionada (surcos en sentido diagonal): una variedad. fe O© 0@ @ b a 4 06 ° B @ g fo. 8a b 9a b 2 Frecuentenente, las cuentas de vidrio arrollado suelen ser, en su acabado, mis imperfectas que las de vidrio estirado. Bn el presente caso, esto se observa particularmente en las variedades mds pequefias de cuentas poliédricas. Por pre- sién se habrian modelado las poliédricas, mientras que las “frambuesa" y “melén" lo habrian sido por medio del empleo de moldes. Al referirnos al color de cada variedad, se brinda un nombre, el cual como tal, es sélo aproximado -insuficiente en su eminciacién- y su expresién codificada mis exacta, correspondiente al “Atlas de los Colores" de Harald Kiippers (1979). Para la identificacién del color se empled una fuente luminica de caracteristicas constantes -ya que la luz natura) es variable de un dia a otro y de hora en hora- + Para el caso nos valemos de una lémpara "luz dia" de 100 watts, manipulandose cada cuenta vitrea de tal forma que la luz incida simultaneamente sobre la cuenta y el atlas de los colores, contandose ademés con 1u2 reflejada en un fondo blan- 20, distante de la cuenta unos pocos centimetros, De este modo se diferencian ademés, las cuentas de vidrio en transparentes (trp.), traslicidas (trl.) y opacas (op.). Un problema frecuente en estas cuentas vitreas es que por su prolongada exposi- cién a los agentes meteéricos, por la accién de éstos, se les suele formar una delgada pelicula blanquecina o grisécea clara, la cual encubre las caracteristi- cas originales del vidrio. Otro tanto sucede ain después de haberse desprendido dicha pelicula -sea en forma natural o por raspado con la ufia-, ya que se observa una nueva superficie, generalmente tornasolada ~iridiscente- con brillos matali- cos: dorados, azulinos, etcétera, que con cierta frecuencia algunos autores toman erréneamente por pintura intencional. Este problema se subsana simplemente hume- Meciendo 0 mojando las CV con agua, oportunidad en que una y otra pelicula de meteorizacién dejan de tener su efecto encubridor.4 fn lo que respecta ai tamafio de las cuentas. se las ha agrupado de la siguiente forma: muy pequefias (m.peq.): wo lm pequefias (peq.): 2.1 Som, medianas (med.}: 4.1 “6m. grandes (ars): 6.1 % 38 am. muy grandes (m.gr,): 10,1 . mam. Al hacerse la deseripcién de las CV, cada variedad ira precedida de un niimero; el mismo sélo indica el orden de descripcién que aqui se ha adoptado. Asi, a las cuentas de vidrio estirade se las mumera en forma corrida del 1 al 24, y a las arrolladas del 1 al 15, Se colocara al final de cada descripcién y entre parénte- sis su equivalente -codificedo- del sistema de clasificactén de CV de Kidd y Kidd (1970), siempre que esto nos fuere posible. Variedades de CV identificadas (a partir de los entierros 2, 3 y 4), y sus carac- berists A Guentas a partir de vidrio estirado (cuadrs 1): Simples (Monocromas): 1) incolora_trp.: dos ejemplares (peq-?. Medidas: largo (seg. oje de orificio)/ didmetro maximo/ didmetro de] orificio, en mm.: 1.4/2.6/0.5 y 39 2.5/3.2/5.5 um. bocca: OL psoidal Li Kidd y Krod: (TLa 9) 2) negea opaca: 1 contra iu2 se observa en el borde del orificio: rojo rubi subido HggAzgua, + Asgiggtzg (Kiippers. cit.). Siete ejemplares (peq.). El nas pequefio: 1 /3.2/0.6 wm., y ef mas grande: 2.5/4,6/0.6 mu. Forma: elip- soidal IL. (is 7} 2) celeste my clara tep.: NogC30400 a NootgoGon. Quince ejemplares (peq.)- Bi més pequerio: 1.973.470.5 mm., y el mayor 2.4/3.4/0.7 mm, Forma: elipsoi- dal JI. (ila) 4) celeste claro trp.: NagMeCsa 4 NigGsq49g- ‘Treinta y dos ejemplares (peq.). EL menor 1.2/2.4/0.5 om. y ei mayor 2.9/3.3/0.5 mm. Elipsoidal IT. (ita) 5) celeste txp.: NogM4oC7y @ Agg4y0%go 9 NicMsoCgo- 75 ejemplares (758 peq. vy? med.). Z) menor: 1.2/2.4/0.5 mm.; e1 mayor: 3.0/4.3/0.9 mm. Casi todas son elipsoidales TL ¥ algunas pocas subcirculares cortas, subesferoidales, “tonel" y amigdalvides, (iTa) 6) celeste tuzquess trp. CqgAqMeq a AzoMgoGyo. Nueve ejemplares (peq.). El menor: 1-473,4/0.6 mm.j el mayor: 2,4/401/0.3 mm. Blipsoidal II y una sub- eilindrica. (Ila) 7) azul trp.: NygMzat9a a CygAgo7g (como m&s frecuentes) y AngMgoCgg 4 Agotiaotgg- 331 “oyemplares (437 peqne TS mad. 9 2 aepeqe). BI menor? LolPe.— 0/0.7 mp. y ei mayor: 4-8/4.4/0.8 am. Una amplia mayoria es elipsoidal IT, fuego ef micho menot numero son subesferoidaies, “tonel", amigdaloides y elipsoidal 1 (Ifa) 8) azul oscuro trp.: NapMggtg9 a N3oMgoCoo- 312 ejemplares (103 vea., 208 med.). El menor: 2.1/2.770.5 mm., y el mayor: 4.0/5.7/1.2 mm. Una amplia mayoria es elipsoidal 11; le eiguen en mucho menor numero formas de “tonel", amigdaloides y subeilindrica corta. (IIa) 9) turguesa grp.: Coghsoizg a AspMog%gq- Cuarenta y dos ejomplares (41 peq., lage.) Elmencr: 2.1/5.0/.4 am., y el mayor: 5./6.2/0.8 mm. EL mayor es subestercidal, y las restantes elipsoidales 11. (IIa 31) (Fig. la-b y 3a-b) ejemplares (1 med. y el otra gr.). idal II y subesfercidal de polos 30} azul torauasn opi: NapMigC70- 2AIS OTD om. 6.5/7 ond com, EL achatados. (Tia) 14) turguesa op. a trl: NyglMpo%gg 4 AyoMagtgg {las mas oscuras v op.) ¥ AgoM{oC7n a Ni 7oAgg (las mas clacae y trl. J. 155 ejemplares (144 peq-, 11 ned.}. Bi menor: {.472.7/0.7 am. y el mars 3,2/5.5/1.2 mm. ba mayosia es elipsoidal [[, y en menoe proporcion se tiencn alganas en forma de "tonel"; amigdsioides y una que otra subcisindciva corta. Observaciones: entre estas cuentas, frecuentemence se observan aquellas que presentan -como impertec- cinnes* hovwelos. orresponden a burbujas de aire apvisionado en la masa de Vidrio que se Han abierte hacia 1a superticie. (1a) V2) veleste grisacea muy clara_op.: AygMigCag. Tres ejemplares (dos peq., uno med}. 207/3,0/1.3 mm, 8.0/3.1 x 3.3/0.5 % Ltmm. y 5.2/5.3/0.8 mm. Elipsoidal [3 subeilindrica corta y amigdaloide. (ia) 40 13) celeste gerisdcea op.: NagMooC3g. Veintides ejemplares (peq.). Hl tamafio varia poco: 1.4/2.6/0.6 mn. la més pequetia y 1.9/3.1/0.9-2.2/2.8/0.6 mm. las mayores. Todas son elipsoidales II. (IIa) 14) agul_griséces op.: AzoMagC79 4 NzoMaoGey y N30Man&70 2 N50!30C60 (las mAs peq. tienden a ser tel.), 112 ejemplares (100 peq., 9 med. y 3 gr.). BL menor: 1.8/2,7/0.4 mm. y los mayores 4.7/7.8/1.1 mm. y 5.7/6.9/1.3 mm. Elipsoidales II y cinco en forma de "tonel". (IIa) 15) gnbarina clare trp: NygAgoMgo- Un ejemplar (med.). 3.5/5-4/1.1 am. Subeilindrica muy corta de bordes redondeados. (Ila) 16) ambarina trp.: NggAggM59 y contra luz: NigA7oMsq- Un ejemplar (med.). 3,4/5.8/1.1 wt. Elipsoidal 11. (Ila) 17) marrén trp: NgqdooM79 y contra luz: NgoAggM7p- Un ejemplar (gr.). 5.6/6.1/1.0 mm, Forma de "tonel". (IIa) 18) verde clara trp.+ NooGgohse 2 Nog°goAso ¥ NyoCgoA70- 328 ejemplares (325 peq.» dos m.peq. y uno med.). El menor: 1.2/2.9/0.4 mm. En generel sus valores oseilan alrededor de 1.7/2.8/0.6 mm, y 2.4/3.2/1.0 mm, La medina es de: 3.9/5.3/1.0 mm. de forma subcilindrica corta, con extremos redondeados. las dents son elipsvidales IT y no més de seis son de forma de “tonel". Tra 19) verde trp: NzgCa9A9q a NaoCooAa9 Y AgoMyoC99 a AgoM30C99. 115 ejempla- res Ul] peas, 4 oped. fo EL menor? 1-3/3.3/0.3 am. fel mayor: 2.2/4.9/ 1.1 mm. En general oscilan cerca de 2.4/3.1/1.0 mm. Elipsoidales iT y algunas pocas cilindricas muy cortas. (IIa) 20) verde amacillenta clara _trl.: NigCsodgg. Dos ejemplares (peq.). 1.7/2,2/0.4 mo, y 2.1/3.1)0-5 mm, Elipsoidales [1. (Ila) 21) verde curquesa trl, 2 op: NygC7gAgo- Un ejemplar (peq-). 1.6/2.3/0.6 mi. Elipsoldal (1, (ile 22) verde amarillenta clara op.: AgoMaCan # AgoHaoCa0. Un ejemplar (peq.). 1.5/2.2/0.6 mm. Elipsoidal T?. (Ifa Simple decorada superficialmente (cuatro segmentos longitudinales): 23) celeste oscura trp. con cuatro segmentos sup.: blanco op.-rojo_lacre gp.cblanco op.-rojo _Lacre op.: NyoMagGgo y segmentos: Blanco op. y AzoMgoCso- Dos ejemplares (peq.). 1.5/2.7/0.6 mm. y 1.8/ 2.9/0.5 mm. Elip~ soidales IT. (IIb 64) Compuesta (dos capas de distinto vidrio): 24) videio incoloro trp./ nicleg blanco _op.: (e1 vidrio superficial es de espesor bien delgado). 25 ejamplares (16 med., 7 peq.). Los menores: 2.4/2.6/0-6 mm. 9 1.7/3.3/0.5 mm; e1 mayor: 3.1/5.7/1.1 mm, Elipsoidales IL, y solo dos subcilindricas my cortas. Observacisn: estas cuentas suelen mostrar poros diminutos en ei vidrio blanco op., corresponden a burbujas longadas que se hallaban aprisionadas en dicha masa vitrea- (IVa) (Fig. 2a- by da-b al B Guentas a partir de video arrollady (ouadro Simpies (monocromas): 1) azul _cobalto_op.: CogAjgMgo- Dos ejemplaree (grandes), 6.8/7,0/16 um. y 7.477.671.4 mn, Los dos de forma subesferoidal. (Wib) 2) verde turquesa clara _op.: A3oMg0Cs0 @ NooC4gAgg- Tres ejemplares (dos pegs, uno med.). 4.3/2.870.5 mm. de forma elipsoidal I y 3,0/3.4/0.8 am. de forma elipsoidal IT. 3) roja rubi_trp.: NgoAggMgg a NzgAggMgp- Cuando se altera por meteorizacién se vuelve rosada opaca: AzpM39Cpq @ AzpMagCo9- Siete ejemplares (seis peq., Uno med), Hedidas: oseilaa entre 2.873.7/008 mm. y -3/3-1/1.0 mm, reste Ultimo es elipsoidal I-. Generalmente son de forma elipsoidal Ii. Observa- cién: de estas siete CV, cuatro son rosadas opacas por meteorizacién; tien- den a desgranarse. Simples decoradas superficialmente (motive lobulado “fitomorfo" transverso)+ 4) blanca op. con motive lobulado rojo rubj_trp.: blanco op. con motivo lobulado: N2oAgqMog a NopAggMgg. Un ejemplar (gr.). 7-7/6.8/1.4 mm. Forma elipsoidal I. Observacién: el vidrio superficial -rojo rubi trp.- se ha desprendido en su mayor parte, por meteorizacion sufrida. (Fig. Sab) 5) negra op. con motivo Jobulado en blanco Un ejemplar (gr.). 8.1/9.2/1.2 mm, Porma subesferoidal dé polos achatados. Observacion: por metecrizacion parcial, se ha desprendido parte del vidrio blanco op. Simples modeladas (poliédricas, "frambuesa", "melén", "mel6n" torsionada): Poliédricas: 6) de ocho caras pentagonaies (cuatro desde cada extremo, en forma alternan- te) vidrio” incoloro tep.: Cuatro ejemplares (dos gr., 2 m.gr.). El menor 8.079.6/1.7 y 2.5 mm en uno y otro extremo. Bl mayor 10.0/11.8/2.8 y 3 m. Observacin: todas elias tienden a mostrar una variacién del didmetro del orificio, de un extremo a otro. (Wile 2) (Fig. 12a-b) 7) de tres caras irregulares; vidrio blanco op.: Seis ejemplares (cinco peq., uno med.). Fl menor 2.8/3.1/0.6 mm. y ef mayor 4.3/3.5/0.7 mm. Obser- vacidn: entre una y otra cara se tienen superficies redondeadas: no hay aristas. (Fig. 6a-b y 7a-b) 8) de seis a ocho catas trapezcidales (tres a cuatro desde cada extreme); v. rojo rubi Erp.: NoqAgqgg a NogAgoMgp. Por meteorizacién se vuelven rosadas op. AzpM39C90 4 AzoMaoCo- Setenta ejemplares (de ellos quince se han desheeno) (30 med., 25 peq.). El menor 2.2/3.5/0.5 mm. y el mayor 4,7/4.5/0.6 mm, Los demas ejemplares varian entre estas medidas extremas. salvo uno que es doble (7.3/4.0/1.0 mm.). Forma: los planos teapezoidales al, encontratse, sé unen segin su base mayor a la mitad del iargo de la cuenta, conformando un angulo muy abierto. En relacién al mimero de caras, las secciones transversas tienden a ser cuadrangulates o subtriangulares. No son muy regulares en su factura, de aqui que las previamente descritas -rojas rubi trp. en 3) podrian representar un extremo de variactén de estas polie~ drivas, Observacion: del totai de 53 CV enteras, 33 se encuentran muy meteo- tizadas. (Fig. #a-b ¥ Jab) 3) de ocho, diez, doce caras trapezoidales (4-5-6 desde cada extremo); vidrie rojo rubiiup.: NgoAzq%o9. Por meteorizacion: Fosadas opacas AjoMqCQn- Diez y State ejemplares (uno deshechs) (14 med.. 2 gr.). EL menor 4.6/5.1/0.9 mn. v ontre las mayores: 6.1/5.6/0.8 mm. y 5.1/6.0/0.9 mm, Forma: son nas regulares que las de la variedad precedente. Los planos trapezoidales se unen segin sus bases nayores, a la mitad dei largo de cada cuenta. Observacién: cuatro CV muy alteradas per metooriaacton. (Fig. 10a-b) 10) de cuutro caras, vidrio rosa _alilado -contra Iug~ trp. AagMgoCyg. Un ejemplar (med-). 5.8/0.8/1-1 ¥ 1.5 mm. €n uno y otro extreno. Forma: subci- lindrica injcial, a ia cual por presionado leve, se le conformaron cuatro caras no may definides. 11) dg ocho, seis, cuatro caras irregularus (4-3-2 desde cada extreme); Videig yerd® turguesa claro op.: AagMopso @ AsgMg9CA0 ¥ NooCagAyo @ NooCsoAqy. Cincuenta y un ejemplares (siete deshechos) (22 med., 18 peq., 4 gre). EY menor 2,3/3.5/0.7 mm. v el mayor 4.9/4.7/1.0 mm, Coatro ejemplares coveesponden a cuentas dobles -unidas- de 7.5/4.2/0.8 mm. a 8.6/4.6/1.0 mn. Forma: de todas las CN paliédricas, éstas son las mas irregulares, con planos no muy bien definidos y aristas poco pronurctadas. De aqui que las descritas en 2) pueden representar un extremo de variacion de éstas. Opser- vacién: varias suelen presentar una especie dc “'sarro" fuertemente adheride a sus superficies. Veinte CV se encuenttan vonsiderablemente meteorizadas. 12) ge ocho caras trapezoidales (4 caras desde cada extremo); vidrio verde anariliénto Claro Op.+ NogCaghso J Njge2Aso (Las mas amerillentas!. Treinta y siete ejemplares (gr.}. Los menores de 5.2/6.8/0.7 mm. y 6.1/3.4/0.7 mm. Los mayores de 7,4/6.4/0.7 mm. y 6.2/7.7/0.7 mm, Forma: suelen ser algo irregulares, a veces con aristas puco definidas. Las caras trapesoidales se unen por sus bases mayores. Observaciones: al igual que la variedad prece- dente, suelen presentar una especie de "sarro" foertemente adneride a Las superficies. (Pig. La-b? “Prambuesa"': 13) “Frambuesa" de vigrio incgloro irp.: Ocho ejemplares (cuatro gr., cuatro mgee). Fi menor 8.0/0.272,0 ¥ 2.6 woe 81 mavor 11.0/12.7/2.8 y 3.3 mm. Las demas varian entre estas medidas extremas. Forma: eilindrica corta con multiples mamelones en refieve; se suelen contabilizar entre 14 y 26 Probablenente realizados mediante e} empleo de un moide plano con hoyuelos. Al completarse ©! giro de impresion, no ¢iempre los mamelones voivieron a roinciaiy ea su posician “en el lugar en donde se completo dicho giro-, ¢e alli que suelen observarse cuentas cot mamelones deformados. Generalmente de un extreng a otro el didmetrc de los srificios varia. (Wild 11 (Fig. LJa-b) "Melén" (riefinide por sswens longitudinal i4) “melén" (de siete surcos); vidrio incslory trp.: Un ejemplar (mgr... 9.4/10.172.3 5 2-7 mi Forma; Subcilindrira vorra con surcos longitudinales que se habrian realizado ron el empleo de nelde plano, provisto de una serie de aristas salientes paralelas entre si. (Wile 1) (Fig. l4a-b) "Melén' torsionada (surcos en diagonal): 15) “melén" (cuatro surcos en diagonal): vidrio muy alterado por meteoriza~ cién, se lo ve color beige oscuro y beige claro op. N29A39%30 ¥ NuoAzoMig- Un ejemplat (gr. a m.ge.?) fragmentado. 6.8 frg./8.0 frg./1.i mm. CUADRO NO 1 Distribucion de las distintas variedades de cuentas de vidrio estirado, segin los entierros 2, 3 y 4. Hatierro 2 Eatierre 3 Entierro 4 Ne tipo cull cuello pecho ventrai cuello Total segtin variedad N2 de (Vv wo cy ne cy Nec variedad Simples: i incolora trp. 1 - - 2 2 negra op. 3 2 i 7 4 vel.mcltrp. 8 4 1 15 cel. ch. trp. 5 5 v7 2 5 celeste trp. a 56 574 765 6 cel. turg. trp. 8 - - 8 7 azul trp 198 3s 7 531 8 azul osc. trp 205 - 98 31h 9 turquesa trp. 8 u 3 42 10 azul turg. op. 2 - - : 3 Ul turg. op. a trl. 40 85 29 i 155 \2 eel-gr.m.cl.op. - 2 1 - 3 13 col. grisac. op. > 10 nn i 22 14 azitl grisac. op. a 16 3 112 15 ambarina cl.trp, L - 7 - i 16 ambarina trp. 1 - - - 1 U7 mareéa trp. 1 - : - 1 18 verde ch. trp. 8 “u 307 328, 19 verde trp. 86 - 29 - 15 20 ¥.amarill.el.trl. - - 2 - 2 21 v.turq.trl. a op. - - 1 - 1 22 v.amarili.el.op. - - i 1 Simpic dec. superf.: 23 cel.ose.tep.con dos segm.bl.op. y dps rojo lacre op. alrernantes - - 2 - 2 Gompuesta: 24 capa incol.tep. blanca op. 7 - 6 - 23 Total de CV segtin (340) (621) cada entierro 7137 961 785 4b Come informacién complementaria titil al presente trabaj Sr. Carlos Quintana ~maquinista que estuvo afectado a las tareas de canalizacién- tres esferoidales azules trp. a trl.; una elipsoidal II incolora y una poliédrica de ocho caras pentagona- les de color azul trp.; todas grandes en su tamafio. recuperé en el sitio las siguientes cinco CV arrollada: CUADRO No 2 0, cabe mencionar que el Distribucién de las distintas variedades de cuentas de vidrio arrollado, segin los entierros 2, 3 y 4 Entierro 2 Entierro 3 Entierro 4 parte Ne tipo cuello cuello cuello préx.a —Tot.segun tobillo variedad variedad ne cy Ne cv Ne cv Ne CV Simple: i azul cobalto op. 2 - - - 2 2 verde turq.cl.op. 3 - : : 3 3 roja rubi trp. 7 - - - 7 Simple dec. superficialmente: 4 bl.op.con mot.. lob. rojo rubi trp. 1 - - : 1 5 negra op.con mot. lobulado bl.op. 1 - - - 1 Simples modeladas: Poliédricas: 6 P.8 caras pentag; v.incolore trp. - 4 - - 4 7 P.4 caras irreg.; bl. op. 6 - - - 6 8 P.6-8 caras trap. rojo rubi trp. 70 - - - 10 9 .P. 8-10-12 c.trap. rojo rubi trp. uv - pot - wv 10 P.4 caras; v. rosa alilado -¢.luz- trp. 1 - - : : TL P.4-6-8 c.irreg.; verde turq.cl.op. 5h - . : 5U 12 P.8 c.trapezoidales vde. amarill.cl.op. 37 - - - 37 "Wrambuesa" 13 incolora trp. L 6 i : 8 “weLon" (surcos longitudinales): 14 incolora trp. - : L - 1 "Melén" (surcos en diagonal): 15 meteorizada, se ve beige cl.a osc.op. - - - i 1 Total CV segiin @ a) cada entierro 197 10 3 48 Asignacién temporal de las cuentas vitreas de la muestra: lino de los aspectos que suscita mayor interés y expectativa en el estudio de las cuentas vitreas, es que através de dichas piezas es factible realizar apro- ximaciones tenporales bastante ajustadas, para los diversos contextos arqueoldégi- cos -principalmente indigenas-, en los cuales éstas hagan su aparicién. A través del tiempo, en su produccién, las cuentas vitreas fueron cambiando en sus tipos y variedades, segtin los gustos de la gente y segin los avances tecnolé- gicos registrados en la industria del vidrio.5 De aqui que es posible establecer una secuencia temporal, en la cual figure el orden de aparicién de ios distintos tipos y variedsdes de CV, indicdndose el lapso de factura y uso de cada una de eilas. Asi se identifican aquellas que sirven de "fésiles guias" -variedades de CV de corta vida- de aquellas otras que fueron "constantes" a través del tiempo- variedades de CV de larga vida. Hasta tanto no se logre una secuencia propia en nuestro pais -para las distintas cuentas vitreas- nos vemos obligados a confrontar nuestro material con las se- cuencias regionaies logradas por los autores norteanericanos pata esa parte del continente americano; “ya que son ellos quienes mis han avanzado en este novedoso canpo de invest igacién, Dentro de la muestra de Caepe Malal I, las cuentas de vidrio arcollado son las que surgen como los més claros indicadores temporales. Entre ellas, las varieda- des mds grandes: simples azul cobaito op. (NO 1) (mas las azules @ incolora trl. a trp. recuperadas por el maquinista); y las modeladas: poliédricas de ocho caras pentagonales incoloras trp. (N@ 6) (més una variedad azul trp.); las "Franbuesa” incoloras trp. (N@ 13) y las dos variantes del tipo "Melén" (N2 14 y 15) sugieren su correspondencia al periodo comprendido entre los afos 1670 y 1760; periode definido y caracterizado por G. Quimby (1966) como "Periodo Histérico Medio". Segiin algunos trabajos consultades de Ch. Wray, B. Kent; K. Karklins y M.E. Good “trabajos reunidos en un volumen especial dedicado a ias cuentas de vidrio publi- cado en 1983- se desprende que las cuentas vitreas arriba mencionadas -o bien sus variantes en otros colores- hacen su aparicién aproximadamente a fines del sigio XVII, extendiéndose en su uso durante la primera mitad del siglo XVIII. Zsto sin embargo no implica que algunas de estas formas hayan dejado de usarse por perio- dos mas prolongados, aunque s{ en una proporcién micho més reducida (Good 1983). De 17 tipos de cuentas vitreas que identificé R. Carlson en uno de sus estudios {Carlson 1965), ocho tipos -con parte de sus distintas variedades- tienen su equivalente en 1a muestra de Caepe Malal. Entre elios se reconoce uno (su tipo 11} compuesto por cuentas rojas trp. que se relacionan con todas nuestras formas arrolladas rojo rubi trp. (N23, 8, 9). Segin Woodward, citade por Carlson, estas cuentas se fecharian entre los afios 1730 v 1800.7 Respecto 4 las cuentas ce 1a variedad N° 3 -poliédricas de tres caras irregulares blanco op.- de tamafio pequefic, segin la secuencia de Way (1983)- si es valida nuestra relacién-, éstas aparecerian aproximadamente a partir de 1745, prolongan- dose en su uso hasta cerca de 1820. Finalmente las dos variedades decoradas “lobuladas fitomorfas" (N@ 4 y 5), segin Quimby (1966) son diagndsticas para ei perfodo comprendido entre los afios 1760 y 1820, denominado "Periode Histérico Tardio". Por lo visto hasta aqui, se desprende que hay en Gaepe Maial i variedades de CV comunes a la primera mitad del siglo XVIII y otras que lo son mis bien de ia 6 segunda mitad del siglo. Esto plantea acaso, a nivel hipotético atin, ja corres~ pondencia de estos tres entierros a la segunda mitad del sigle XVIII, con formas que perduran desde su primera mitad. Bn cuanto a las variedades de cuentas de vidrio estirado -de dimensiones mas pequefias- simpies y la variedad compuesta "v. incoloro/blanco op." (N2 24) son comines, segiin la bibliografia consultada, al siglo que tratamos. De entre ellas, las formas turquesa trl. a op. (N@ 10, 11) y las celestes a aculinas grisace: op. (2 12, 13 y 14) corresponderian a variedades "constantes” a través del rhempo. lin segundo criterio valido para respaldar ia aproximacién temporal efectuada para las CV de Caepe Malal, se logra mediante 1a consideracién -aunque noe sin pruden- cia- de ausencias de tipos diagnésticos que sean representativos de los siglos EVI, XVIL y XIX. Asi, basdndonos en los trabajos de Quimby (1966), Benson (1967), Smith y Good (1982), Smith (1983), Wray (1983) y en observaciones propias (para los siglos XVI y XVII), se destaca en Gaepe Malal la ausencia de las siguientes cuentas de vidrio estirado caracteristicas del siglo XVI: compuestas de varias capas de vidrio, modeladas de disefio estrellado y facetadas por pulido en su acabado- conocida por algunos autores bajo el nombre de "Aggri perlen"-; y las prismaticas de seccién cuadrada, frecuentemente Largas, simples o compuestas, que los autores orteamericanos identifican bajo el nombre de "Nueva Cadiz Plain" y sus variantes torsionadas en tirabuzén "Nueva Cadiz Twisted". Dentro de estas cuentas, son frecuentes las compuestas, en las que el espesor superficial del vidrio es color turquesa trp. Entre las cuentas diagnésticas para @1 siglo XVII estén ausentes en Caepe Mala 1) las cuentas de patron estrellado -arriba citadas- pero acabadas por rodamien- tos 2) las cuentas simples decoradas mediante inclusién de plaquitas discoidales blancas op. con motivo estrellado interno en color rojo latre op.; 3) turquesas op. a trl. medianas a grandes con segmentos longitudinales blancos op. (estas eins nuedGh “eventuainente protongatse en sw tse hacia prineipion del siglo XVID). Finalmente, para las cuentas de vidrio del siglo XIX nos basamos en los trabajos de Quimby (1966), Carr (1981), Good (1983) y en observaciones propias de material arqueolégico y etnografico procedente de Patagonia Norte. Asi, en Caepe Malai, no se registraron entre otras CV caracteristicas para el siglo XIX: 1) las de vidrio estirado simples 0 compuestas, facetadas por pulidos 2) aquéllas compuestas rojo trp./nicleo bl.op.; 3) simples rosadas oscuras op.; 4) simples blancas op.; entre otras varias. Cabe agregar, respecto al tamafio de las CV que, en el siglo XIX, se registra una clara variacién hacia las formas pequefas. Comentario final En el andlisis de las CV con ei propésito de su uso en arqueologia para fijar fecha a los demas restos asociados, es importante considerar que una cuenta vitrea o bien una serie de ellas correspondientes a una o dos variedades de CV, no hacen @ la fecha o datacién que se protende deducir. Es la diversidad de CV asociadas entre si, temadas en su conjunto, lo que les confiere su mayor valor diagnéstico, ya que una determinada CV que consideramos diagnéstica, avala y sora avalada a su vez, por la presencia de otras variedades de cuentas “guias” exis- tentes en el conjunto. Es este tipo de aproximacién, en la problemética de las aa CY, ia que permitird asimismo individualizar eventuales ejemplares que deban su presencia a practicas de reutilizacién o bien como a bienes heredados que han perdurado en su uso por tiempo considerable. Volviendo a 1a muestra de Caepe Malal I, es nuestro andlisis del conjunto de las CV obtenidas e1 que nos hace plantesr su ubicacién en el siglo XVITI, proba~ blemente a su segunda mitad. Futuros trabajos arqueolégicos a realizarse en el sitio Caepe Malai T nos aportaran seguramente nuevos conjuntos de cuentas vi treas, conjuntos que seran utiles a través de su andlisis, para lograr un mejor ajuste en la edad correspondiente a este importante sitio. NOTAS A. Esta vex, se conté con 1a participacién activa da la Lic. ana Bisat, del Ares de Investigaciones Arqueslégicas de la Provincia de Neuguén, responsable de la organizacién de la campafia arqueologica al sitio Caspe Malai I. La Lic. Biset y el autor Je este articulo son los corresponsables de la Syecucien del proyacte de estudio dei mencionads sitio. cabe agregar qua ek las tareas de CAMPO se santé con la inestimable colaboracién del Sr. Carlos Muion y el Sr. Osvaldo Espinoza. 2. Las caracterieticas que hacen 1a naturalera del amplazaniento dei comentario; localizacién y estructura de los entierros; nivel arqueoldgico superior asociade 4 ellos; variedad y caracteristi- eas del ajuar funerario; su confrontaeién con las ruentes etrohistericas y otyos aspectos por su ‘sngnitud~ son tratados en otros articulos de este mismo cuadernc. 4. Futures andlisis de los restos humanos ~aunque en mal ostado- drindarén mejores aproximacicnes hacia la edad y sexo correspondientes, entre otros rasgos de no gener interé 4. Hay, sin embargo, algunas cuentas on las quo la weteorizacién alters précticanente toda la aasa Vitroa, cambiande su coloraciGn las smpalidere notabiemente- y opacéndolas totalaente -en caso de haber sido trasiucidas 9 transparentes-. in dicho estado se desgranan y/o pulverizan facilmante. Tai es el caso de las CV vorde turquess op. y rojas rubi trp. arrolladas. Probableaente esto tenga que vex con sus composicicnes quimicas particularas, que ias hacen mis vuinerables. La gran mayoria de tas CV del continente anericano son de procedencia europea, destaciniosa Yenecia durante varies siglos, como centre de mayor produccién ae dicho matarial. Para los siglos que son de nuestro interés, paradéjicagen:e, hoy en Europa poco se conace ain sobre las cuentas Vitreas, sus variedades, tiempos y cantros correspondientes de produceién. 6. Aplicands 1a estrategia ewplesda por los autores norteansricanes, se podria desarrollar una Secuencia propia mediante: 1) el estudio arqueolégico d¢ una serie de sition histéricos de fecha conceida ~preforentenente de corta ocupacisn- los cuales eslabonades cubran todos los sigloe poste Fiores al descubrimiento de Asgrica, 2) estudio de las fuentes histéricas escritas y 3) estudio de las colecciones de CV arqueslégicas y otnogréf icas existentes en los distintos museos. Dicho nate- rial, a traves del métode do sefiacion, podra irse incorporando al perfil cronolégico a construir. 7. Una serie de andlisis dendrocronolégicos realigados para_los sitios estudiados por Carlson, arrojaren fechas que can entre log anos 1/16 y 1742. Woodward, tomande en su cangunto a Las CY recuperadas por Carson, les estipuls una edad que oscila entre 1750 v 1769 (Carlson 1965). 4d. En la provincia de Neuguén se cuenta con dos conjuntos mis de cuentas vitreas correspandiantes al sigle XVIIT; ellos son: ol logrado an el canenterio indigena "Rebolledo Arriba” (Hajduk 1981-82} ¥ el otro en el cenenterio "Las Lajitas" (Podasta y Porada 1979: hajduk, MS). Para el de "Rebolleda Arriba, M. Smith =a quien agradecames s% cominicacién personal, astipwia una edad que escila entre los aftos 1/00 ¥ L130. ag RIBLUOGRAF LA GENERAL, Alvarez, G. 1972. NEUQUEN. SU HISTORIA. SU GEDGRAPTA. SU TOPONIMIA. TOMO 1 Neuquén, Prov. del Neuquén/Univ. del Nouquén. 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