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Se define una sanción administrativa como aquel acto de carácter administrativo que implica
una penalidad a una persona o institución por el desarrollo de una conducta o
comportamiento que viole una determinada norma o ley establecida. Es decir, una conducta
ilegal desarrollada por una persona que requiere una acción represora o sancionadora.
En este sentido, la sanción se desarrolla por una autoridad superior competente, con la
finalidad de desarrollar un proceso de corrección de dicha conducta con la finalidad de que
esta se enmarque dentro de las normas y leyes establecidas.
Por lo tanto, las sanciones administrativas se caracterizan por: proceder de una actividad
administrativa superior, por poseer un carácter aflictivo, por ser consecuencia de un acto ilícito
realizado, por buscar establecer un proceso represor, y su aplicación se enmarca dentro de un
marco legal.
En este sentido, toda norma sancionadora aplicable dentro de una organización se debe de
sustentar en los principios prescriptos en la constitución, con la finalidad de asegurar la
protección de la sociedad y de los miembros que la integran.
-El principio de legalidad; que indica que toda sanción que se aplique debe de enmarcarse
dentro de una norma establecida previamente, de modo que tenga un sustento legal, l las
consecuencias que acarrean la realización de determinadas acciones.
-El principio de razonabilidad y el exceso de punición; señala que se debe de tener en cuenta el
daño causado por la conducta a sancionar y las normas que castigan dicha conducta, de modo
que se establezca una adecuada relación entre la conducta y sus consecuencias, que permita
establecer una sanción acorde al nivel de daño causado.
-Pocos niveles de higiene dentro de la institución que suponga un riesgo para trabajadores y
personas que hacen uso del servicio.
-No comunicar a la autoridades pertinentes en tiempo oportuno de los acciones que hayan
ocurrido dentro de la institución o tratar de ocultarlo.
-No desarrollar procesos de primeros auxilios, ni medidas de evaluación del local en casos de
ocurrencia de situaciones de emergencia.
-Violar los procedimientos que regulan el trato a mujeres embarazadas o que dan lactancia.
La proporción de las sanciones pueden variar acordes a las circunstancias que rodean las
acciones a sancionar, entre las que se pueden mencionar:
-El total de daños causados, en relación a daños materiales, pérdidas institucionales, y daños
físicos y posológicos causados a terceros.
Principalmente, se puede señalar que a nivel general las sanciones prescriben a los tres, dos y
un año posteriores a la acción cometida, dependiendo si son acciones consideradas leves,
moderadas, graves o muy graves. En este sentido, cada organización establecerá el tiempo de
prescripción de las sanciones impuestas a sus trabajadores, y en caso de violaciones realizas
por empresas e instituciones, estas prescribirán en relación a las normas establecidas por el
estado.
CONCLUSIONES
Segunda: Estas sanciones se deben aplicar en pleno sustento de normas y principios legales
previamente establecidos, de forma que no se violen los derechos de los
trabajadores y se incurran en nuevas faltas administrativas.