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Antes de introducirnos al tema del liderazgo, es importante que tengamos claro el concepto
de ciudadanía: Ser ciudadano o ciudadana significa tener y ejercer derechos civiles,
políticos y sociales al interior del lugar donde vivimos, que están garantizados por el
Estado. Para tener un buen ejercicio de la ciudadanía, es necesario que se asuman
algunas prácticas y conductas responsables, entre otras:
Recordemos que todo ser humano tiene dignidad, autonomía y que tiene los mismos
derechos que los demás.
Por tanto, es importante tener verdaderos líderes hombres y mujeres, que contribuyan a que
como ciudadanos, podamos ejercer nuestros derechos y garantizar nuestra participación
ciudadana efectiva.
No hay una sola definición de liderazgo. Sin embargo, existen algunas ideas previas que
debemos tener en cuenta antes de llegar a una definición:
Desde un enfoque democrático el liderazgo debe entenderse como una disposición a servir
y no servirse del cargo que se le confiere al líder o lideresa. Sólo entendido así el liderazgo,
puede movilizar positivamente a las personas.
¿QUIÉN ES UN LÍDER?
Es la persona que pertenece a una comunidad u
organización, con ella sabe compartir lo que tiene y
está dispuesta a colaborar con los demás. Debe tomar
decisiones en algunas ocasiones, pero debe ser
apoyado. Tiene la capacidad de influir más que otros
miembros en el desarrollo de actividades o la toma de
decisiones a favor de dicha comunidad u organización.
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.
Liderazgo desde la equidad de Género e interculturalidad
El liderazgo basado en valores y principios, “Ser lo mejor, que puedo ser”.
La persona que ejerce el liderazgo es un hombre o mujer que decide ponerse al servicio de
las demás personas. Esta definición sencilla e ideal contradice con la realidad que nos
presenta casos en los que las personas que deberían ser servidas, sirven a la que ejercen el
liderazgo.
Ser líder
Ser líder es ser confiable, es decir que la gente confíe en esa persona, que sepa que no
fallará, y si lo hace que sus fallas serán reconocidas porque son de buena fe, lo que
corresponde a las personas de buen corazón. Pero también significa dar confianza a las
demás personas.
Por lo tanto no basta que confíen en el líder o que sea confiable, sino que dé confianza. Es
la presencia de la confianza en los hechos.
S. Covey en su libro “Liderazgo basado en principios”, nos propone cinco claves de lectura
para evaluar el desempeño efectivo del liderazgo:
Los cuatro criterios se relacionan, por lo tanto el liderazgo es una suma de ellos. Pero no se
trata de capacidades en el sentido solamente intelectual, sino que involucran el uso maduro
de la inteligencia emocional como un segundo recurso complementario.
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.
Liderazgo desde la equidad de Género e interculturalidad
El liderazgo basado en valores y principios, “Ser lo mejor, que puedo ser”.
Se necesitan líderes que sepan motivar a pesar de las circunstancias, con capacidad para
escuchar lo que su gente y la sociedad necesita, y que además sepa proyectar ese
conocimiento en el futuro a corto y largo plazo.
Para ello un líder debe conocerse a sí mismo, conocer sus fortalezas en las que apoyarán su
gestión, pero también ser capaz de reconocer sus defectos y lejos de ignorarlos u ocultarlos,
que los conviertan en un reto para crecer personalmente”
Tipos de liderazgo
Complementando muchas teorías y desde nuestra experiencia, podemos señalar tres tipos 3
de liderazgo:
a) Liderazgo autoritario
b) Liderazgo paternalista
c) Liderazgo democrático
Busca crear seres inútiles e inmaduros a los que se debe asistir siempre como
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.
Liderazgo desde la equidad de Género e interculturalidad
El liderazgo basado en valores y principios, “Ser lo mejor, que puedo ser”.
buenos padres, sin tomar en cuenta que todos los seres humanos normalmente tienen
derecho a crecer y madurar. Busca promover seres independientes pero limitados e
incapaces de ser interdependientes.
Debemos esforzarnos para ser cada uno de nosotros líderes democráticos, de esa manera
fortaleceremos nuestras organizaciones y la democracia en nuestro país.
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.
Liderazgo desde la equidad de Género e interculturalidad
El liderazgo basado en valores y principios, “Ser lo mejor, que puedo ser”.
Ejercer el liderazgo es ejercer el poder que tenemos como seres humanos. Poder que se
siente si somos capaces de recurrir al sentido común, sentido que permite dar sentido a los
otros sentidos. Poder que se puede medir en cierto grado, si revisamos nuestras vidas,
nuestra situación personal de empoderamiento o de capacidades a las que todas las personas
podemos acceder con mucho sacrificio.
En la medida que mis capacidades en las cuatro dimensiones aumentan, aumenta mi poder
que se puede expresar en las 8 “C” del poder personal: 5
Pero todo este poder tiene sentido solamente si es para servir a las demás personas y no
para servirse de ellas, como sucede actualmente con frecuencia en la realidad.
En cada uno de nosotros hombres y mujeres existe un líder potencial que debemos cultivar
y desarrollar con esmero, sacrificio y dedicación. Requiere sin embargo que cambiemos
nuestros malos hábitos por buenos hábitos, por hábitos efectivos, para lo cual debemos
revisar nuestros modelos mentales y recuperar el valor de nuestros principios que nos
ayudarán a ser efectivos en la construcción de una sociedad con mayor justicia, fraternidad
y solidaridad entre todas las personas.
• Visionario: el líder se caracteriza por su visión a largo plazo, por adelantarse a los
acontecimientos, por anticipar los problemas y detectar oportunidades mucho antes
que los demás.
• Persona de acción: el líder no sólo fija unos objetivos exigentes sino que lucha
denodadamente por alcanzarlos, sin rendirse, con enorme persistencia, lo que en
última instancia constituye la clave de su éxito.
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.
Liderazgo desde la equidad de Género e interculturalidad
El liderazgo basado en valores y principios, “Ser lo mejor, que puedo ser”.
• Brillante: el líder sobresale sobre el resto del equipo, bien por su inteligencia, bien
por su espíritu combativo, bien por la claridad de sus planteamientos, etc., o
probablemente por una combinación de todo lo anterior.
• Coraje: el líder no se amilana ante las dificultades; las metas que propone son
difíciles (aunque no imposibles), hay que salvar muchos obstáculos, hay que
convencer a mucha gente, pero el líder no se desalienta, está tan convencido de la 6
importancia de las mismas que luchará por ellas, superando aquellos obstáculos
que vayan surgiendo.
• Gran comunicador: otra cualidad que caracteriza al líder son sus dotes de buen
comunicador, habilidad que le va a permitir "vender" su visión, dar a conocer sus
planes de manera sugerente.
Honestidad: unos elevados valores éticos son fundamentales para que el liderazgo se
mantenga en el tiempo y no se trate de algo pasajero.
Cumplidor: el líder tiene que ser una persona de palabra: lo que promete lo cumple.
Trabajador: el líder debe mostrar una gran dedicación al trabajo, debe predicar con el
ejemplo, trabajar duro, identificados con la organización.
Una verdadera ciudadanía sólo es posible en sociedades donde todas las personas son consideradas iguales en dignidad y en derechos.