ENSAYO ESTILOS DE DIRECCIÓN

MELISA ANDREA SUÁREZ LUGO

GRUPO: 1

ENTREGADO A:

ING. JOSÉ FRANCISCO VERGARA REALES

UNIVERSIDAD EL MAGDALENA

INGENIERÍA INDUSTRIAL

ALTA GERENCIA

SANTA MARTA D.T.C.H

2018-I
ESTILOS DE DIRECCIÓN

La dirección de una empresa consiste en combinar los recursos con los que se
cuenta, ya sean humanos o físicos, lo mejor posible para conseguir los objetivos
de la organización. Por ello la forma o el estilo de dirigir juega un papel
fundamental a la hora de obtener resultados. La función de un director es
básicamente planear, organizar dirigir y coordinar, pero esto se puede hacer de
diferente maneras. Hoy en día se le apuesta a aquellos estilos que potencializan
las cualidades de los miembros de la compañía mejorando así el ambiente laboral
y los resultados que se obtienen. Uno de estos estilos es el llamado “Estilo
Democrático” implementado para mantener un equilibrio entre la dirección y el
empleado, fomentando la autocrítica por parte de este último y de esta manera
promover el trabajo en equipo.

Todo esto lleva a un buen clima laboral, puesto que si el empleado siente que
hace parte de la organización y que sus opiniones y decisiones son tenidas en
cuenta, esto se verá reflejado en la obtención de los resultados deseados para la
empresa. El buen clima laboral conlleva a que se desarrollen un conjunto de
conductas repetitivas por parte del trabajador, a que se eliminen las barreras de
comunicación entre directores y subalternos, y a disminuir el riesgo de que existan
problemas de comunicación, que son tan comunes.

Si bien este estilo indica que se debe tener en cuenta las opiniones de los
empleados, es el director quien debe establecer los objetivos que se quieren
lograr, ya sea a corto, mediano y largo plazo, para que este sea un punto de
partida para los trabajadores a la hora de tomar sus decisiones, pues estas últimas
deben estar enfocadas y dirigidas a la consecución de los objetivos de toda la
organización en general. Es por eso importante generar estrategias que le
indiquen al empleado que si bien sus decisiones son importantes, no debe
tomarlas pensando unitariamente sino en un colectivo.

Siendo los empleados el principal motor de las organizaciones, el estilo de

dirección democrático, orientado al talento humano para la consecución de
objetivos, aleja la apatía, empodera la creatividad y ayuda a resolver problemas
desde la posición de cada trabajador, sin necesidad de pasar por unos largos
procesos que generan tiempo para la organización.

Se cree que el estilo democrático no es tan eficiente y que solo lleva a generar un
buen clima de trabajo, pero en realidad va mucho más allá de esto. Si se tiene un
buen clima laboral empezaran a aparecer una serie de beneficios como la
diversidad de soluciones para un mismo problema, mejor manejo del tiempo pues
existen problemas que pueden ser solucionados directamente por el empleado sin
necesidad de realizar un proceso tedioso para que este pueda ser solucionado por
el director de la empresa, promoción del sentido de pertenencia por parte del
empelado para con la organización y todo esto ayuda a la consecución de los
objetivos generales de la compañía. El estilo democrático no solo está diseñado
para atender la planeación y dirección de una organización sino que hace un
mejor aprovechamiento de su capital humano, pilar fundamental de las empresas,
para un mejor desarrollo y aumento de la productividad.