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Batalla de Carabobo - 24 de Junio

Acción bélica librada cerca de la ciudad de Valencia, el 24 de junio de 1821, entre el ejército
realista a cargo del mariscal de campo Miguel de la Torre y el republicano comandado por
el general en jefe Simón Bolívar. La victoria lograda por este último, resultó decisiva para la
liberación de Caracas y el territorio venezolano, hecho que se logrará de manera definitiva
en 1823 con la Batalla Naval del Lago de Maracaibo y la toma de las fortalezas de Puerto
Cabello.

Previo al combate, Miguel de la Torre distribuyó sus fuerzas de manera tal que cubrieran
por el oeste el camino de San Carlos, y por sur el de El Pao. La primera línea defensiva fue
confiada a la Primera División dirigida por el teniente coronel Tomás García, la cual se
organizó en tres batallones principales. El batallón del Valencey a cargo del teniente coronel
Andrés Riesco, ocupó la parte sur del camino; a su derecha se situó el batallón ligero del
Hostalrich comandado por el teniente coronel Francisco Illas, en columna de marcha detrás
de las anteriores. Además de esto, dos piezas de artillería fueron colocadas en una pequeña
altura, delante de la línea formada por Valancey y Barbastro. La Posición correspondiente
a la vía de El Pao fue ocupada por la División de Vanguardia liderada por el brigadier
Francisco Tomás Morales, quien contaba con dos batallones principales y uno de reserva.
Primero tomó posiciones el batallón ligero del Infante, a cargo del teniente coronel Simón
Sicilia; e inmediatamente detrás de esta unidad se situó el batallón ligero del Príncipe. La
reserva quedó integrada por el segundo batallón del Burgos, bajo la jefatura del teniente
coronel Joaquín Dalmar, quien disponía de cuatro regimientos de caballería. En cuanto al
cuartel general, el mismo quedó establecido cerca del batallón Burgos.

El 15 de junio de 1821, el Libertador reorganizó el ejército republicano en tres divisiones.


La primera a cargo de José Antonio Páez, y formada por los batallones Bravos de Apure
(liderada por el teniente coronel Francisco Torres) y los Cazadores Británicos (al mando del
coronel Thomas Ildeston Ferriar); además de 7 regimientos de caballería. La segunda,
comandada por el general de división Manuel Cedeño, y constituida por los batallones
Tiradores (dirigida por el teniente coronel Ludwig Flegel), y Vargas ( teniente coronel
Antonio Gravete), a lo que se sumaba un escuadrón de caballería. La tercera, bajo las
órdenes del coronel Ambrosio Plaza y constituida por 4 batallones. El de Rifles a cargo del
teniente coronel Arturo Sandes, Granaderos al mando del coronel Francisco Paula Vélez,
Vencedor de Boyacá dirigida por el coronel Juan Uslar y Anzoátegui, comandada por el
coronel José M. Arguidegui; completado todo esto por un regimiento de caballería. Las
fuerzas republicanas sumaban en total 6500 hombres.

A tempranas horas del 24 de junio, desde las alturas de Buenavista, elLibertador hizo un
reconocimiento de la posición realista y llegó a la conclusión de que ésta era inexpugnable
por el frente y por el sur. En consecuencia, ordenó que las divisiones modificaran su marcha
por la izquierda y se dirigieran al flanco derecho realista, el cual estaba descubierto; es
decir, Bolívar concibió una maniobra tendiente a desbordar el ala derecha enemiga,
operación ejecutada por las divisiones de Páez y Cedeño, en tanto que la división Plaza
seguía por el camino hacia el centro de la posición defensiva. Al darse cuenta la Torre de
la maniobra de los republicanos, ordenó al batallón Burgos que marchase al norte a ocupar
la altura hacia la cual se dirigían las divisiones de Bolívar. Al llegar el Burgos al área
indicada, abrió fuego contra el batallón Bravos de Apure, cabeza de la primera división, el
cual después de cruzar el riachuelo de Carabobo, trataba de escalar la pendiente que lo
llevaría a la parte plana de la sabana. Tan violento fue el contraataque del Burgos, que el
Bravos de Apure tuvo que replegarse por dos veces. La situación cambió cuando una
unidad que lo seguía, el batallón Cazadores Británicos, se enfrentó al Burgos y lo obligó a
retroceder. Por su parte, los batallones Infante y Hostalrich, entraron en auxilio del Burgos,
pero reorganizado el Bravos de Apure, se unió al Cazadores Británicos para reanudar el
ataque, ayudado por dos compañías del batallón Tiradores. Para detener el repliegue de
las unidades realistas que había producido la operación patriota, Torre envió los batallones
Príncipe, Barbastro e Infante, los que lograron sostener la línea de combate, pero sólo por
breve tiempo, pues el grueso de la caballería de la primera división del ejército republicano
entró por el norte de la sabana. Con el fin de hacer frente a este nuevo ataque, la Torre
ordenó al regimiento Húsares de Fernando VII que cargase contra la caballería patriota,
pero esta unidad se retiró después de disparar sus carabinas.

Finalmente, atacados de frente por la infantería y por la derecha por la caballería, los
batallones realistas optaron por la retirada. Como último recurso, la Torre le ordenó al
regimiento de los Lanceros del Rey que atacara a la caballería patriota, pero esta unidad
no sólo desobedeció la orden, sino que huyó ante la embestida de las fuerzas republicanas.
Al entrar la batalla en su fase final, los patriotas iniciaron una tenaz persecución del ejército
español, la cual fue llevada a cabo hasta Valencia. De los 4.279 efectivos que participaron
en la batalla de Carabobo, los realistas perdieron dos oficiales superiores, 120 subalternos
y 2.786 soldados. Por su parte, las bajas de los republicanos también fueron cuantiosas. El
resto del ejército realista terminó refugiándose en Puerto Cabello.

ACCIONES POSTERIORES DESPUES DE CARABOBO.

Después de la victoria de Carabobo, Bolívar es vuelto a ser encargado de la presidencia


por el congreso en Cúcuta (3 octubre). Sin embargo, Bolívar sentía que su obra no había
concluido. Encarga a Carlos Soublette de la vicepresidencia de Venezuela y nombra a
Santander presidente encargado de la República de Colombia. Allí inicia la Campaña del
Sur.

El libertador logra su primera victoria en Bomboná, el 7 de abril de 1822 y Antonio José de


Sucre completa la libertad de Ecuador, el 24 de mayo en Pichincha. Es importante
mencionar que Guayaquil, que ya era independiente, fue anexada a Quito. El 26 y 27 de
julio de 1822 se lleva a cabo una entrevista entre dos de los más grandes hombres del
continente: Simón Bolívar y el General argentino San Martín.

La campaña siguió muy exitosa: el 18 de marzo de 1823 las fuerzas patriotas entran a Lima,
el 7 de agosto vencen en Junín y el 9 de diciembre Sucre logra una gran victoria en
Ayacucho, batalla que marcó el fin de la dominación española en el continente. Bolívar
escribió: "La batalla de Ayacucho es la cumbre de la gloria americana y la obra del General
Sucre. La disposición de ella ha sido perfecta y su ejecución divina. Maniobras hábiles y
prontas desbarataron en una hora a los vencedores en catorce años, y a un enemigo
perfectamente constituido y hábilmente mandado. Ayacucho, semejante a Waterloo, que
decidió el destino de la Europa, ha fijado la suerte de las naciones americanas". Se fundó,
en lo que se llamaba el Alto Perú y que formaba parte del Virreinato de Buenos Aires, la
república de Bolivia (cuyo nombre se dio en honor al libertador). Bolívar es encargado de la
redacción de la constitución y Sucre se convierte en el primer presidente de ese nuevo país.

BOLIVAR LIDER CONTINENTAL.

Los países homenajean su figura: en Nueva York, París, Madrid, Hamburgo, Roma,
Londres y Buenos Aires, entre otros, los monumentos recuerdan su gesta. En todo el mundo
y en el universo hay barcos, estrellas, montañas, ríos, pueblos y ciudades llamados Bolívar;
hasta Estados Unidos tiene quince localidades con el nombre del caraqueño inmortal. En
su tiempo gozó de fama y notoriedad. Reseñas de la época hablan de la existencia en
Europa de abanicos, placas de marfil, panes y vajillas con su rostro; sombre-ros y botas a
su usanza; publicaciones que dan cuenta de su vida y hazañas, como la reseña que se
incluye, apenasen 1816, en el periódico

PLANES PARA PANAMA

Una vez constituida la Gran Colombia, llegó la hora de celebrar un Congreso de todas las
ex colonias de España. El 7 de diciembre de 1824 Bolívar se dirigió a los gobiernos de
Colombia, México, río de la Plata, Chile y Guatemala, convocando al Congreso de Panamá:
... es tiempo ya que los intereses y las relaciones que unen entre sí a las repúblicas
americanas, antes colonias espa- ñolas, tengan una base fundamental que eternice, si es
posible, la duración de estos gobiernos ... en 1822, como presidente de la República de
Colombia invité a los gobiernos de México, Perú, Chile y Buenos Aires para que
formásemos una confederación y reuniésemos en el Istmo de Panamá u otro punto elegible
a pluralidad, una asamblea de plenipotenciarios de cada estado "que nos sirviese de
consejo en los grandes conflictos, de punto de contacto en los peligros comunes ... " ... Perú
y México quedaron comprometidas. Diferir más tiempo la asamblea... hasta que se verifique
la accesión de las demás sería privarnos de las ventajas que produciría aquella asamblea
desde su instalación... nada ciertamente podrá llenar tanto los ardientes votos de mi
corazón, como la conformidad que espero de los gobiernos confederados a realizar este
augusto acto de la América... el día que nuestros plenipotenciarios hagan el canje de sus
poderes, se fijará en la historia diplomática de América una época inmortal. .. Cuando
después de cien siglos, la posteridad busque el origen de nuestro derecho público y
recuerde los pactos que consolidaron su destino, registrarán con respeto los protocolos del
Istmo…

Durante 20 años de actividad incesante, concibe y emprende el proceso de la


independencia que va a dar lugar a la formación de naciones suramericanas, como lo son
Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. No sólo comanda las acciones de una
guerra difícil y empecinada contra el imperio español, sino que establece la plataforma y las
instituciones para una nueva organización de toda Hispanoamérica.

Su visión libertadora estaba orientada hacia la unión del continente. De ello dan cuenta
diversos documentos y escritos, de extraordinaria actualidad, en los cuales describe la
realidad y las posibilidades futuras de nuestros países. La novedad y profundidad de su
pensamiento estaban servidas por un excepcional don de expresión.

Campaña del sur

Es el nombre con que se conocen a una serie de campañas militares que emprendió la
Gran Colombia al sur de su territorio entre 1821 y 1826 contra el dominio español en la
América del Sur y que tuvieron una importancia decisiva para la independencia de las
actuales repúblicas de Ecuador, Perú y Bolivia. La definición de que hechos comprendieron
las campañas del Sur varía, tal que algunos historiadores llaman así a las campañas
libertadoras de Quito y Pasto entre 1820 y 1822, mientras que otros se refieren a las
operaciones militares desde 1821 hasta 1826 cuando capítulo la guarnición de El Callao.
Sin embargo, se puede decir a ciencia cierta que las campañas del Sur tuvieron por objeto
finalizar la guerra de independencia americana, y como resultado el auge de la influencia y
el poder de la Gran Colombia que bajo la presidencia de Simón Bolívar buscaba la unión
de los nuevos estados hispanoamericanos.

Planes para panamá y congreso de Cúcuta 1821

Planes para Panamá: Asamblea convocada por Simón Bolívar en la ciudad de Panamá,
para crear una federación de países hispanoamericanos independientes. Se desarrolló
entre el 22 de junio y el 5 de julio de 1826 y contó con la participación de la Gran Colombia,
México, Perú, Bolivia y Guatemala. Enviaron observadores Gran Bretaña y los Países
Bajos, pero no acudió Estados Unidos, que había sido invitado. Se acordó un tratado
perpetuo de unión y confederación, la creación de un Ejército interamericano para la
defensa común y la renovación bianual del Congreso, al que se podrían sumar otros países.
Debido a las rivalidades entre los distintos países y a la oposición de Estados Unidos, que
no deseaba la formación de un sistema de estados federados en América del Sur, los
acuerdos sólo fueron ratificados por la Gran Colombia y no tuvieron consecuencias
efectivas. Logró reunirse en una segunda ocasión, a convocatoria de México, muy pocos
años después.

Congreso de Cúcuta 1821: El principal objetivo de este congreso fue unificar a la Nueva
Granada (Colombia y Panamá) y Venezuela mediante la Constitución de Cúcuta y así crear
un enorme estado conocido en ese entonces como República de Colombia. Posteriormente
Quito (Ecuador) hizo parte de esta enorme nación.
Juramento como presidente de Colombia

Simón bolívar dice en su juramento “Señor, espero que me autoricéis para unir con los
vínculos de la beneficencia a los pueblos que la naturaleza y el cielo nos han dado por
hermanos. Completada esta obra de vuestra sabiduría y de mi celo, nada más que la paz
nos puede faltar para dar a Colombia todo, dicha, reposo y gloria. Entonces, Señor, yo
ruego ardientemente, no os mostréis sordo al clamor de mi conciencia y de mi honor que
me piden a grandes gritos que no sea más que ciudadano. Yo siento la necesidad de dejar
el primer puesto de la República, al que el pueblo señale como al jefe de su corazón. Yo
soy el hijo de la guerra; el hombre que los combates han elevado a la magistratura: la
fortuna me ha sostenido en este rango y la victoria lo ha confirmado. Pero no son éstos los
títulos consagrados por la justicia, por la dicha, y por la voluntad nacional. La espada que
ha gobernado a Colombia no es la balanza de Astrea, es un azote del genio del mal que
algunas veces el cielo deja caer a la tierra para el castigo de los tiranos y escarmiento de
los pueblos. Esta espada no puede servir de nada el día de paz, y éste debe ser el último
de mi poder; porque así lo he jurado para mí, porque lo he prometido a Colombia, y porque
no puede haber república donde el pueblo no está seguro del ejercicio de sus propias
facultades. Un hombre como yo, es un ciudadano peligroso en un Gobierno popular; es una
amenaza inmediata a la soberanía nacional. Yo quiero ser ciudadano, para ser libre y para
que todos lo sean. ¡Qué vivo entusiasmo excita en el ardiente pecho de todo sensible
patriota, la heroica franqueza de estas palabras! Yo soy el hijo de la guerra, el hombre que
los combates han elevado a la magistratura: la fortuna me ha sostenido en ese rango, y la
victoria lo ha confirmado. Un hombre como yo es un ciudadano peligroso en un go¬bierno
popular, es una amenaza inmediata a la soberanía nacional. Aprended de un héroe
Americano, o tiranos legítimos de Europa, el verdadero lenguaje de la virtud, de la razón, y
de la gloria.

Batalla de bombona, acción diplomática de sucre, batalla de pichincha.

Batalla de Bomboná: Fue un combate realizado el 7 de abril de 1822 entre tropas


colombianas y españolas durante la marcha del ejército de Simón Bolívar hacia Quito. Las
grandes bajas sufridas en el enfrentamiento paralizaron por unos días a Bolívar mientras
esperaba refuerzos. La batalla fue igualmente desastrosa para los españoles, a pesar de
que detuvieron a los colombianos un breve tiempo para ello tuvieron que desviar tropas de
Quito donde Sucre se hallaba a la ofensiva.

Acción diplomática de Sucre: Bolívar encomendó una misión diplomática a Sucre, con el
fin de dirimir en forma correcta las diferencias con Mariño. La gestión diplomática de Sucre
hace posible la firma de dos tratados, uno de armisticio que se convirtió en un instrumento
estratégico para fortalecer la causa de la independencia Y otro, más importante aún, el
Tratado de Regulación de la Guerra, suscrito el 26 de noviembre de 1820. Es allí donde se
pone de relieve la magnanimidad deSucre; él mismo redacta los artículos de dicho tratado
mediante el cual se pone fin a la guerra. Es el recuerdo de la suerte que corrieron sus
hermanos lo que le inspira a redactar los artículos 2 y 4 de dicho Tratado, que establecen
normas categóricas para que la guerra entre España y Colombia se haga como lo hacen
los pueblos civilizados.
Batalla de pichincha: Batalla definitiva de la Guerra de independencia de Quito (Ecuador)
El general de brigada Antonio José de Sucre había llegado el 17 de mayo de 1822 al valle
de Chillo. Después de algunas maniobras, Sucre llevó sus tropas al pueblo de Chillogallo,
a unos 1.600 metros de las posiciones contrarias. Durante la noche del 23 al 24 de mayo,
Sucre marchó con su división con la idea de ocupar el valle de Iñaquito, al norte de Quito,
el cual, además de ser el mejor terreno, se hallaba entre Pasto y Quito. Se inició el combate,
y poco después llegó el batallón Trujillo (coronel Andrés Santa Cruz), seguido de 2
compañías del batallón Yaguachi. El resto de la infantería, bajo las órdenes del general
José Mires, seguía el movimiento de estas unidades, hasta entrar en combate. Córdoba
recibió la orden de relevar al batallón Paya y cargó contra el enemigo, hasta desorganizarlo
y derrotarlo. Al mediodía, Sucre había obtenido la victoria; la explotación de ésta fue llevada
a cabo por los batallones Paya, Yaguachi y Albión, la cual fue llevada hasta la propia ciudad
de Quito. Imposibilitados los realistas para hacer frente a estas acciones, se refugiaron en
el fuerte del Panecillo, y hasta allí les hizo llegar Sucre su oferta para una capitulación,
aceptada por Aymerich y ratificada el día siguiente.

Encuentro de bolívar y san Martin, elección de Guayaquil a Colombia.

Encuentro de Bolívar y San Martin: Al mediodía del 26 de julio de 1822, San Martín con
su comitiva y una pequeña escolta hasta la casa escogida para el encuentro con Bolívar.
San Martín fue a Guayaquil a solicitar la unión de los dos ejércitos para terminar la guerra
de la independencia de América del Sur. En los días previos al encuentro también había
solicitado refuerzos a Chile y las provincias del norte de las Provincias Unidas del Río de la
Plata. Además le propuso a Bolívar la Jefatura Suprema del que tendría que ser el ejército
unido libertador y le ofreció servir a sus órdenes, pero en vista que Bolívar no aceptó, San
Martín decidió dejarle campo libre para que Bolívar concluyera dicha gesta libertadora.
Guardó el secreto de lo tratado en la entrevista pues la guerra de la independencia no
estaba concluida y los realistas tenían un importante ejército en el Alto Perú. Como
conclusión, puedo decir que el tema militar fue el punto central de la entrevista y que al
producirse el desencuentro se produjo también el desencanto. Ambos personajes no
quedaron satisfechos con la entrevista y es por ello que en sus testimonios se trasluce ese
desconcierto y esa desilusión.

Elección de Guayaquil a Colombia: El 31 de julio de 1822, la ciudad de Santiago de


Guayaquil declaró su anexión oficial a la Gran Colombia y con ella también el resto del
agonizante administración independiente guayaquileña. La Provincia Libre de Guayaquil
pasó a constituir el Distrito del Sur del estado colombiano junto con el Departamento de
Ecuador con capital en Quito y el Departamento de Azuay con capital en Cuenca, bajo el
nombre de Departamento de Guayaquil con capital en la Ciudad de Guayaquil.
Venezuela

El Tratado de Armisticio y Regularización de la Guerra:

Fueron dos acuerdos firmados entre la República de Colombia (Gran Colombia) y el Reino
de España el 25 y el 26 de noviembre de 1820 en el pueblo de Santa Ana de Trujillo,
Venezuela. Mediante estos tratados quedaba oficialmente derogada la guerra a muerte, se
acordaba una tregua de seis meses además de constituir de facto un reconocimiento del
estado colombiano por España.

El Capitán General Pablo Morillo recibe instrucciones el 6 de junio de 1820 desde España
para que arbitre con Simón Bolívar un cese a las hostilidades. Morillo informa a Bolívar
sobre el cese al fuego unilateral del ejército español y la invitación para conferenciar un
acuerdo de regularización de la guerra. Los plenipotenciarios de ambos bandos se
entrevistan y el 25 de noviembre hacen lo mismo Bolívar y Morillo.

El 25 mismo se firma el Armisticio entre la República de Colombia y España el cual


suspendía todas las operaciones militares en mar y tierra en Venezuela y confinaba a los
ejércitos de ambos bandos a las posiciones que sostenían el día de la firma según lo cual
la línea de demarcación entre ambos:

El río Unare, remontándolo desde su embocadura al mar hasta donde recibe el Guanape;
las corrientes de éste subiendo hasta su origen; de aquí una línea hasta el nacimiento del
Manapire; las corrientes de éste hasta el Orinoco; la ribera izquierda de éste hasta la
confluencia del Apure; éste hasta donde recibe al Santo Domingo; las aguas de éste hasta
la ciudad de Barinas, de donde se tirará una línea recta hasta Boconó de Trujillo; y de aquí
la línea natural de demarcación que divide la Provincia de Caracas del Departamento de
Trujillo

El Tratado de Regularización de la Guerra fue firmado por los plenipotenciarios el 26.


Mediante este acuerdo ambos bandos se comprometían a hacer la guerra "como lo hacen
los pueblos civilizados", acordando el respeto a los no combatientes, el canje de prisioneros
y a acabar definitivamente con las viejas prácticas de la guerra a muerte. Este representa
el principal antecedente del Derecho Internacional Humanitario actual.

Morillo y Bolívar se entrevistaron personalmente el 27 de noviembre celebrándose el


célebre abrazo de Santa Ana. Ese mismo día fueron firmados ambos tratados por los jefes
de ambos bandos.

El armisticio se rompió antes de lo pactado. El 28 de enero de 1821 se produjo un


pronunciamiento en la ciudad de Maracaibo, que había permanecido realista casi desde el
principio de la independencia, en el cual declaraba a la provincia de Maracaibo unida a
Colombia. El general venezolano Rafael Urdaneta ocupó rápidamente la ciudad con varios
batallones ligeros. Miguel de la Torre protestó la medida como una violación del tratado y
Bolívar a su vez argumentó su legalidad. Al no llegar a un acuerdo sobre Maracaibo ambos
bandos acordaron el reinicio de las hostilidades el 28 de abril. Sin embargo, a partir de aquí,
el resto de los enfrentamientos violentos hasta el final del conflicto de la Independencia,
tanto en Venezuela como en el resto de Sur América, estarían regulados por el Tratado de
Regularización de la Guerra.

Acciones Posteriores después de Carabobo:

Después de la Batalla de Carabobo, Bolívar amplía su visión para observar el panorama y


buscar la manera de asegurar la libertad de toda América. Sabe que mientras haya países
bajo el dominio español, la República de Colombia no puede considerarse totalmente libre.

Organiza en forma provisional el gobierno y dicta algunas medidas. Entre ellas, dejar en
sus cargos a los regidores y alcaldes de la capital, declarar en vigencia la ley de sobre
secuestros de propiedades de los emigrados dictada en Angostura y exigir empréstitos a
los comerciantes y hacendados para la confección de uniformes militares. Pero estos
empréstitos no dieron el resultado esperado debido a las condiciones paupérrimas en que
se encontraba Venezuela. Sin embargo, Santander envió desde Bogotá a Bolívar treinta mil
pesos para que emprendiera con su ejército el viaje hacia Nueva Granada.

Bolívar Líder Continental:

Los países homenajean su figura en Nueva York, París, Madrid, Hamburgo, Roma, Londres
y Buenos Aires, entre otros, los monumentos recuerdan su gesta. En todo el mundo y en el
universo hay barcos, estrellas, montañas, ríos, pueblos y ciudades llamados Bolívar; hasta
Estados Unidos tiene quince localidades con el nombre del caraqueño inmortal. En su
tiempo gozó de fama y notoriedad. Reseñas de la época hablan de la existencia en Europa
de abanicos, placas de marfil, panes y vajillas con su rostro; sombreros y botas a su
usanza.

Acciones Posteriores después de Carabobo:

Después de la Batalla de Carabobo, Bolívar amplía su visión para observar el panorama y


buscar la manera de asegurar la libertad de toda América. Sabe que mientras haya países
bajo el dominio español, la República de Colombia no puede considerarse totalmente libre.

Organiza en forma provisional el gobierno y dicta algunas medidas. Entre ellas, dejar en
sus cargos a los regidores y alcaldes de la capital, declarar en vigencia la ley de sobre
secuestros de propiedades de los emigrados dictada en Angostura y exigir empréstitos a
los comerciantes y hacendados para la confección de uniformes militares. Pero estos
empréstitos no dieron el resultado esperado debido a las condiciones paupérrimas en que
se encontraba Venezuela. Sin embargo, Santander envió desde Bogotá a Bolívar treinta mil
pesos para que emprendiera con su ejército el viaje hacia Nueva Granada.
Bolívar encomendó una misión diplomática a Sucre, con el fin de dirimir en forma correcta
las diferencias con Mariño. La gestión diplomática de Sucre hace posible la firma de dos
tratados, uno de armisticio que se convirtió en un instrumento estratégico para fortalecer la
causa de la Independencia Y otro, más importante aún, el Tratado de Regulación de la
Guerra, suscrito el 26 de noviembre de 1820. Es allí donde se pone de relieve la
magnanimidad de Sucre; él mismo redacta los artículos de dicho tratado mediante el cual
se pone fin a la guerra. Es el recuerdo de la suerte que corrieron sus hermanos lo que le
inspira a redactar los artículos 2 y 4 de dicho Tratado, que establecen normas categóricas
para que la guerra entre España y Colombia se haga como lo hacen los pueblos civilizados.

Planes para Panamá:

Una vez constituida la Gran Colombia, llegó la hora de celebrar un Congreso de todas las
ex colonias de España. El 7 de diciembre de 1824 Bolívar se dirigió a los gobiernos de
Colombia, México, río de la Plata, Chile y Guatemala, convocando al Congreso de Panamá:

Es tiempo ya que los intereses y las relaciones que unen entre sí a las repúblicas
americanas, antes colonias españolas, tengan una base fundamental que eternice, si es
posible, la duración de estos gobiernos, en 1822, como presidente de la República de
Colombia invité a los gobiernos de México, Perú, Chile y Buenos Aires para que
formásemos una confederación y reuniésemos en el Istmo de Panamá u otro punto elegible
a pluralidad, una asamblea de plenipotenciarios de cada estado "que nos sirviese de
consejo en los grandes conflictos, de punto de contacto en los peligros comunes ... " ... Perú
y México quedaron comprometidas. Diferir más tiempo la asamblea hasta que se verifique
la accesión de las demás sería privarnos de las ventajas que produciría aquella asamblea
desde su instalación nada ciertamente podrá llenar tanto los ardientes votos de mi corazón,
como la conformidad que espero de los gobiernos confederados a realizar este augusto
acto de la América el día que nuestros plenipotenciarios hagan el canje de sus poderes, se
fijará en la historia diplomática de América una época inmortal cuando después de cien
siglos, la posteridad busque el origen de nuestro derecho público y recuerde los pactos que
consolidaron su destino, registrarán con respeto los protocolos del Istmo…

Durante 20 años de actividad incesante, concibe y emprende el proceso de la


independencia que va a dar lugar a la formación de naciones suramericanas, como lo son
Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. No sólo comanda las acciones de una
guerra difícil y empecinada contra el imperio español, sino que establece la plataforma y las
instituciones para una nueva organización de toda Hispanoamérica.

Su visión libertadora estaba orientada hacia la unión del continente. De ello dan cuenta
diversos documentos y escritos, de extraordinaria actualidad, en los cuales describe la
realidad y las posibilidades futuras de nuestros países. La novedad y profundidad de su
pensamiento estaban servidas por un excepcional don de expresión.

Congreso de Cúcuta 1821:


El Congreso de Cúcuta fue una asamblea donde se redactó y aprobó la Constitución de
Cúcuta, carta magna que dio origen a la Gran Colombia. Fue instaurada por Antonio Nariño
y en ella participaron Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander y otros importantes
próceres de la independencia. Inició el 30 de agosto de 1821 y culminó el 3 de octubre del
mismo año La asamblea se llevó a cabo en lo que hoy se conoce como Templo Histórico
de Cúcuta, el cual está ubicado en el Parque de la Gran Colombia junto con la casa natal
de Francisco de Paula Santander.

Juramento como Presidente de Colombia:

Señor:

Espero que me autoricéis para unir con los vínculos de la beneficencia a los pueblos que
la naturaleza y el cielo nos han dado por hermanos. Completada esta obra de vuestra
sabiduría y de mi celo, nada más que la paz nos puede faltar para dar a Colombia todo,
dicha, reposo y gloria. Entonces, Señor, yo ruego ardientemente, no os mostréis sordo al
clamor de mi conciencia y de mi honor que me piden a grandes gritos que no sea más que
ciudadano. Yo siento la necesidad de dejar el primer puesto de la República, al que el
pueblo señale como al jefe de su corazón. Yo soy el hijo de la guerra; el hombre que los
combates han elevado a la magistratura: la fortuna me ha sostenido en este rango y la
victoria lo ha confirmado. Pero no son éstos los títulos consagrados por la justicia, por la
dicha, y por la voluntad nacional. La espada que ha gobernado a Colombia no es la balanza
de Astrea, es un azote del genio del mal que algunas veces el cielo deja caer a la tierra
para el castigo de los tiranos y escarmiento de los pueblos. Esta espada no puede servir de
nada el día de paz, y éste debe ser el último de mi poder; porque así lo he jurado para mí,
porque lo he prometido a Colombia, y porque no puede haber república donde el pueblo no
está seguro del ejercicio de sus propias facultades. Un hombre como yo, es un ciudadano
peligroso en un Gobierno popular; es una amenaza inmediata a la soberanía nacional. Yo
quiero ser ciudadano, para ser libre y para que todos lo sean. Prefiero el título de ciudadano
al de Libertador, porque éste emana de la guerra, aquél emana de las leyes. Cambiadme,
Señor, todos mis dictados por el de buen ciudadano.

¡Qué vivo entusiasmo excita en el ardiente pecho de todo sensible patriota, la heroica
franqueza de estas palabras! Yo soy el hijo de la guerra, el hombre que los combates han
elevado a la magistratura: la fortuna me ha sostenido en ese rango, y la victoria lo ha
confirmado.

Un hombre como yo es un ciudadano peligroso en un gobierno popular, es una amenaza


inmediata a la soberanía nacional.

Aprended de un héroe Americano, o tiranos legítimos de Europa, el verdadero lenguaje de


la virtud, de la razón, y de la gloria. SIMÓN BOLÍVAR

El juramento que acabo de prestar en calidad de Presidente de Colombia es para mí un


pacto de conciencia que multiplica mis deberes de sumisión a la ley y a la patria. Sólo un
profundo respeto por la voluntad soberana me obligaría a someterme al formidable peso de
la suprema magistratura. La gratitud que bebo a los representantes del pueblo, me impone
además la agradable obligación de continuar mis servicios por defender, con mis bienes,
con mi sangre y aun con mi honor, esta constitución que encierra los derechos de los
pueblos humanos, ligados por la libertad, por el bien y por la gloria. La constitución de
Colombia será junto con la independencia la ara santa, en la cual haré los sacrificios. Por
ella marcharé a las extremidades de Colombia a romper las cadenas de los hijos del
Ecuador, a convidarlos con Colombia, después de hacerlos libre.

Campaña del Sur:

Fueron campañas militares que emprendió la Gran Colombia al sur de su territorio entre
1821 y 1826 contra el dominio español en la América del Sur y que tuvieron una importancia
decisiva para la independencia de las actuales repúblicas de Ecuador, Perú y Bolivia.

La Batalla de Bombona:

El 7 de abril ve Bolívar una fuerza enemiga acercarse al otro lado de la quebrada de


Cariaco. De una vez manda a Torres a atacar pero el entiende mal y eso permite que el
enemigo se apodere de una estratégica colina. El Libertador le grita que es mejor que
entregue el mando al Coronel Barreto que seguramente cumpliría mejor las órdenes. Torres
le contesta, que si no es digno de servir como General lo hará como soldado y se coloca
en la primera línea de la tropa. Conmovido Bolívar lo vuelve a poner frente al frente de su
regimiento.

Los patriotas empeñan la batalla en condiciones desfavorables ya que la posición de los


españoles era apoyada a la derecha en el volcán de Pastos y a la izquierda en los bosques
de el Guaitara.

Ataco de frente al enemigo para desalojarlo de sus fuertes posiciones.

Los realistas eran 2200 partidarios, dispuestos a sacrificarse antes de ceder un solo palmo
de terreno: Los ataques los realiza la División de León Torres sufriendo grandes pérdidas,
incluyendo su jefe que recibe una herida mortal y muere varios días después. Diezmados
también los españoles, un ataque de flanco dado por la División Valdés en la parte alta
define la batalla.

El ejército libertador tiene 341 heridos y 116 muertos, los realistas 250 muertos, heridos y
prisioneros.

La batalla de Bombona logra que los realistas de Pastos no salieran a defender a Quito.

Negativamente Bolívar tuvo que alejarse al Peñol ya que no recibió socorros de ninguna
clase de Bogotá. A Sucre no le llegaron las órdenes de avanzar a Quito. Si esto se hubiera
realizado el Libertador atacaría de nuevo y acababa con la amenaza de los pastusos
después de Bombona.
Bombona le abre al Libertador las puertas del sur del continente y todas las provincias del
Virreinato granadino son incorporadas a Colombia.

Guayaquil era una plaza estratégica sobre el Océano Pacifico. Pertenecía a la Presidencia
de Quito y esta era parte de la Republica de Colombia. Perú quería anexarla a su territorio.

El General San Martín, Protector del Perú quería hacer efectivo los deseos de anexión
Sucre comandaba las fuerzas colombianas enviadas en auxilio de la ciudad, desarrolla una
acción de diplomacia y logra que la Junta de Gobierno reconozca al gobierno Colombiano.

Los jefes de Guayaquil y de toda la región le encargan la misión de reorganizar el ejército


y la economía del país.

Sucre como era común en el se entrega a esta misión.

Preparado el ejército, se inicia la campaña de Quito, la cordillera de Los Andes era el


enemigo más difícil. Sucre actúa con cautela. En Yaguachi obtuvo una victoria que eleva la
moral de su ejército.

En Guachi es derrotado pero no se rinde ante esta prueba.

Bolívar es hostilizado por guerrillas realistas y tiene que retirarse al Peñol, combatiendo
desesperadamente. Sucre le escribe participándole su entrada en Cuenca y de sus planes
de ataque a Quito.

A las tropas del Libertador le llegan refuerzos, 400 hombres miserablemente vestidos y
armados, días más tardes 400 hombres más, con lo que sus fuerzas volverán a ascender
a 2000.

Las aplastantes victorias de Sucre en Cuenca y Quito evitan que Bolívar sea aplastado. En
Río Bamba el cumanés abate la caballería de los españoles

Acción diplomática de sucre:

Batalla de pichincha

La Batalla del Pichincha ocurrió el 24 de mayo de 1822, en las faldas del volcán Pichincha,
a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, justo arriba de la ciudad de Quito, en el
Ecuador actual. Ocurrió en el contexto de las guerras de independencia de Sudamérica. En
esta ocasión enfrentó al ejército independentista bajo el mando del General venezolano
Antonio José de Sucre y al ejército realista comandado por el Mariscal de Campo Melchor
Aymerich. La derrota de las fuerzas realistas leales a España condujo a la liberación de
Quito y aseguró la independencia de las provincias que pertenecían a la Real Audiencia de
Quito, también conocida como la Presidencia de Quito, la jurisdicción administrativa colonial
española de la que eventualmente emergió la República del Ecuador.
Encuentro de Bolívar y Sucre en Quito:

Encuentro de Bolívar y San Martin: Al mediodía del 26 de julio de 1822, San Martín con
su comitiva y una pequeña escolta hasta la casa escogida para el encuentro con Bolívar.
San Martín fue a Guayaquil a solicitar la unión de los dos ejércitos para terminar la guerra
de la independencia de América del Sur. En los días previos al encuentro también había
solicitado refuerzos a Chile y las provincias del norte de las Provincias Unidas del Río de la
Plata. Además le propuso a Bolívar la Jefatura Suprema del que tendría que ser el ejército
unido libertador y le ofreció servir a sus órdenes, pero en vista que Bolívar no aceptó, San
Martín decidió dejarle campo libre para que Bolívar concluyera dicha gesta libertadora.
Guardó el secreto de lo tratado en la entrevista pues la guerra de la Independencia no
estaba concluida y los realistas tenían un importante ejército en el Alto Perú. Como
conclusión, puedo decir que el tema militar fue el punto central de la entrevista y que al
producirse el desencuentro se produjo también el desencanto. Ambos personajes no
quedaron satisfechos con la entrevista y es por ello que en sus testimonios se trasluce ese
desconcierto y esa desilusión.

Anexión de Guayaquil a Colombia: Entrevista de Bolívar y San Martín. Ascenso al


Chimborazo. Delirio sobre el Chimborazo:

La primera llegada de Bolívar a Guayaquil se produjo el 11 de julio de 1822. La tradicional


cortesía y generosidad guayaquileña hizo que sea recibido con grandes muestras de júbilo:
no se recibía al “Libertador”, puesto que Guayaquil se había independizado dos años antes
y sin su ayuda; se recibía simplemente a un gran hombre de América.

Durante casi una hora y acompañado por Olmedo, Roca y Jimena -miembros de la Junta
de Gobierno-, cabildantes y personas notables de la ciudad, Bolívar caminó en medio de la
algarabía de la multitud entre los aplausos y el tremolar de las banderas de Colombia y
Guayaquil.

Guayaquil sabía que ella representaba la esencia de la libertad y, generosa como era, sabía
también que, así como su participación había sido determinante para dar la libertad a Quito
y consolidar la independencia de Colombia, de ella dependía también en gran parte la
libertad del Perú; por eso, queriendo compartir su independencia y su condición de
República soberana, Guayaquil aclamó a Bolívar con expresivos gritos de “Viva Colombia...
viva el Libertador” o “Viva Bolívar... Viva el Perú”.

Muchos han querido ver en el entusiasmo guayaquileño un oculto deseo de ser anexados
a Colombia o al Perú, e indudablemente así pudo ser; pero el deseo de mantenerse
independiente lo constató el propio Bolívar, cuando desde veredas y balcones -por encima
de los vivas a Colombia y Perú- la gran mayoría de guayaquileños lo saludó expresándole
con voz emocionada “Viva Guayaquil Independiente”; confirmándole así su deseo de no ser
anexados a ningún país extranjero.
Por otro lado, ¿por qué querría Guayaquil anexarse a Colombia, con la que debido a las
distancias desde épocas coloniales no la unía ningún vínculo? o, ¿por qué querría anexarse
al Perú, que aún permanecía bajo el dominio español?

Y no podía ser de otra manera. “El pueblo de Guayaquil había declarado su independencia
sin la intervención de otros pueblos. Libre por sí mismo, por nadie libertado, tenía perfecto
derecho para darse un gobierno propio o por escoger la nacionalidad que más le conviniese.
Recibió auxilio y armas del Perú y soldados de Colombia para sostener su independencia,
pero a cambio, agotó sus recursos pecuniarios y dio su contingente de tropas para libertar
las provincias de Quito en cuatro campañas sucesivas. Los colombianos no figuran solos
en la batalla del Pichincha que terminó la guerra. Atenidos a ellos solos no habrían podido
librar esa memorable batalla, a la cual concurrieron dos batallones peruanos, un escuadrón
argentino y un batallón de guayaquileños”

Ante la complejidad de esta situación y envuelto en su megalomanía frustrada ante un


pueblo que logró ser libre sin su participación y que por el contrario, le había abierto sus
puertas para que pueda continuar sus campañas, Bolívar se negó a aceptar la existencia
de un estado soberano que pudiera ensombrecer su grandeza, y respaldado por una fuerza
de 1.300 bayonetas que lo acompañaba, inventó un estado de caos republicano para
justificar una resolución violenta que se produjo el 13 de julio cuando de manera prepotente
y abusiva asumió el mando civil y militar de la provincia, se proclamó Jefe Supremo y a
través de su secretario envió a la Junta de Gobierno un oficio en el que decía: “S. E. el
Libertador de Colombia, para salvar al pueblo de Guayaquil de la espantosa anarquía en
que se halla, y evitar las funestas consecuencias de aquella, acogió, oyendo el clamor
general, bajo la protección de Colombia al pueblo de Guayaquil; encargándose S. E. del
mando político y militar de esta ciudad y su provincia...”

Esta comunicación, que ni siquiera llevaba la firma del Libertador, fue recibida con
indignación por los miembros del cabildo guayaquileño, quienes comprendieron que ante
tal atropello no podían ofrecer ningún tipo de oposición.

Así, de manera artera, Bolívar ocupó y tomó por la fuerza la ciudad capital de la Provincia
Libre de Guayaquil, poniendo fin a un año y nueve meses en que había permanecido
independiente y soberana, con un gobierno propio representado por una Junta que había
sido elegida democráticamente por voluntad del pueblo, con un territorio definido que con
sus 53.000 km2 integraba en un solo Estado todos los territorios de las actuales provincias
de Manabí, Bolívar, Los Ríos, Guayas y El Oro; el sur de Esmeraldas, y las estribaciones
de la cordillera occidental, con una Constitución conjugada en el Reglamento Provisorio de
Gobierno, con un periódico, el Patriota de Guayaquil, que circulaba regularmente
informando y orientando a la ciudadanía a través de una libertad de prensa sin tapujos ni
intereses; con un ejército, la División Protectora de Quito, que con patriotismo había regado
con su sangre todos los campos de batalla para libertar a toda la audiencia; con una marina,
representada por la goleta Alcance y sus fuerzas sutiles; con una bandera la gloriosa celeste
y blanco que había flameado en todos los campos de batalla durante las luchas por la
independencia; y una condición de Estado Soberano reconocida por Colombia y Perú y,
sobre todo, por el representante de la corona española, Melchor Aymerich, Presidente de
la Audiencia de Quito, quien en su oportunidad había escrito a Olmedo, dirigiéndose a él
como Presidente de la Junta de Gobierno de Guayaquil.

“Papel mojado fue para Bolívar el Acta de Independencia de Guayaquil, no le importó la


libre determinación de la provincia, nada dijo el derecho de gobierno de los pueblos al lector
de Montesquieu y de Rousseau, no franqueó sino que rompió las puertas de la ciudad, la
prepotente y abusiva actitud de Bolívar puso fin a la natural alegría de la ciudad, y acalló
los gritos que expresaban su voluntad independentista. El glorioso pabellón celeste y blanco
fue arriado y sustituido por el tricolor de Colombia que fue izado en el muelle, se disolvió la
Junta de Gobierno de Guayaquil y sus miembros, atropellados por el dictador, tuvieron que
abandonar el país.

Consumado el abuso, Bolívar se preparó para recibir al Gral. San Martín, con quien se había
citado en la ciudad que acababa de someter.

Ante estos hechos, los guayaquileños, indignados, escribieron en los muros y paredes de
la ciudad: “Aquí tremoló la intriga... Un tricolor sostenido por la fuerza, con mengua de los
derechos del pueblo guayaquileño”.

Cuando en la mañana del 26 de julio llegó a Guayaquil el Gral. San Martín, con intenciones
de anexarla al Perú, en el mismo muelle fue recibido por Bolívar quien estrechó su mano
diciéndole: “Bienvenido a Colombia...” Pocos días después, el 31 de julio de 1822, la
asamblea provincial o colegio electoral -presionado por Bolívar- ratificó lo hecho y declaró
que desde ese momento Guayaquil quedaba para siempre restituido a Colombia.

Entrevista de Bolívar y San Martín:

La entrevista entre San Martín y Bolívar tuvo lugar los días 26 y 27 de julio de 1822 en la
ciudad de Guayaquil. Los dos libertadores, el del Norte y el del Sur conferenciaron a solas,
sin la presencia de testigos. Es frecuente rodearla de misterio, por que para determinar lo
realmente conversado entre ellos es necesario recurrir a fuentes indirectas o comentarios
de los próceres a terceras personas. Existe además una polémica entre los historiadores
bolivarianos y los sanmartinianos acerca de lo tratado por los libertadores en la entrevista.
Para San Martín, lo conversado en las reuniones era un secreto que se debía guardar para
no poner en peligro las operaciones militares contra los realistas que todavía no estaban
definidas, y, por varios años, no reveló lo conversado. Bolívar, en cambio, produjo a los
pocos días varios informes, redactados por su secretario, en el que da su versión acerca
de lo tratado con San Martín en Guayaquil, pero en ellos, Bolívar omitió el pedido de San
Martín de unir ambos ejércitos y de este modo terminar en forma rápida la guerra.

Ascenso al Chimborazo:

El Chimborazo es el volcán más alto del Ecuador y, geodésicamente hablando, es el punto


más lejano del centro de la Tierra. Históricamente, esta montaña fue usada por Simón
Bolívar, uno de los héroes de la emancipación de Sudamérica, realizó un ascenso parcial
sin equipo profesional y escribió "Delirio sobre el Chimborazo", un clásico único de la
literatura.

Delirio sobre el Chimborazo:

Simón Bolívar no sólo fue un gran estratega, militar y político, que llegó a liberar a tantos
países en Latinoamérica, sino también ensayista y si se quiere hasta poeta, sólo habría que
revisar algunas de sus cartas. Su prosa siempre fue fina y enérgica, por medio de ella
ejerció un poder humano de gran envergadura, en lo real y en lo teórico, a tal punto que su
pensamiento escrito sigue brillando en el tiempo, se mantiene vigente y ha sido guía para
muchas personas que buscan el bien y la justicia.

La obra verdaderamente literaria, y cargada de gran belleza escrita por El Libertador fue Mi
Delirio sobre El Chimborazo. Obra de excepción en los escritos de Bolívar. Es la única de
sus obras escrita con una finalidad esencialmente poética. En ella llega a mostrar, con gran
vivacidad, la pequeñez humana delante de lo infinito Es evidente que este poema en prosa
es una alegoría. Es como una ensoñación, como un delirio. Es una gran obra literaria, por
el tema: la crisis ideológica que vivió este gran hombre después de la batalla de Carabobo.
Lo es también por su elaboración: lírica, en la primera parte, por la forma como expresa la
ascensión al Chimborazo; es dramática en la segunda, pues da una solución simbólica, es
decir, estética, al terrible y pavoroso drama aludido. Este poema, además, es una de las
piezas representativas de nuestro primer romanticismo, que tiene la singularidad de
haberse inspirado en la vida y en la obra del propio autor y es, por último, el primer poema
en prosa con que cuentan nuestras letras.

Giras Históricas:

Cada uno de los viajes que Simón Bolívar realizó durante su juventud y su adultez, le ofreció
un cúmulo de conocimiento sobres los valores culturales, sistemas políticas, criterios
ideológicos, potencial humano y situaciones económicas. Esto le permitió el poder actuar y
hablar de acuerdo a las circunstancias no en forma superficial sino precisa y objetivamente.
El Libertador asigna a los viajes una importancia fundamental en su carrera tres viajes
realizó Bolívar a Europa con motivos diversos, pero fácilmente con un solo fin: construcción
de su personalidad, búsqueda y acumulación de experiencias elaboración de un destino. El
primer viaje a Europa lo realizó cuando apenas tenía 15 años y medio en el que se
encuentra con su tío Esteban, le permite recibir una cultura genero de diferentes maestros
hasta que los problemas políticos ocasionaron la desgracia de su tío, fue a vivir a la casa
del Marqués De Ustariz, allí el conocimiento general dio poco al conocimiento profundo,
fundamentado en un intenso e interesado estudio. Convirtió allí en el ávido lector que fue
durante su vida.

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