Vous êtes sur la page 1sur 1

La siguiente propuesta tiene como finalidad analizar y proponer alternativas de cómo

gestionar el currículo dentro de mi escuela. Para ello quiero resaltar tres potencialidades
evidentes dentro de mi equipo docente que me permitirán gestionar el currículo por
competencias, estas son: a) la capacidad de aprender y actualizarse permanentemente lo
cual permitirá una preparación para el cambio de un nuevo currículo, b) la capacidad para
desempeñarse en ambientes multidisciplinarios, la complejidad del mundo y de la cultura
actual que llevan al desarrollo de trabajo colaborativo y c) la capacidad crítica en el uso
de las TIC´s, su selección y aplicación a proyectos de aprendizaje concretos.

El modelo curricular por competencias plasmado en el CNEB se caracteriza por el


aprender haciendo: aprendizaje basado en problemas reales, trabajo en equipo y por
proyectos, simulación de casos, trabajo colaborativo y cooperativo tomando en cuenta no
solo los conocimientos y su aplicación sino también su comportamiento, lo cual implica
que el docente debe preocuparse por su formación continua en contextos específicos de
su área curricular. Además, en este modelo el profesor es un aprendiz más del grupo y un
mediador que guía a sus estudiantes en su proceso de aprendizaje autónomo,
proporcionándole ocasiones, estrategias y herramientas adecuadas. Ahora bien, dado que
los cambios tecnológicos están sucediendo cada vez más rápido, las competencias pierden
actualidad por lo que las instituciones educativas deben procurar que sus docentes
faciliten a sus estudiantes las formas y mecanismos necesarios para lograr habilidades y
destrezas que les permitan aprender a aprender lo cual significa, aprender a buscar la
información correcta y tener éxito en los intentos, reflexionar sobre la misma, dudar,
cuestionarse, adaptarse a las circunstancias, deconstruir aprendizajes y reconstruirlos.

Frente a este nuevo CNEB, el docente debe proyectar un cambio en su quehacer


pedagógico, reorientándose al desarrollo de un trabajo didáctico por competencias, lo que
supone una nueva forma de enfrentar la enseñanza. Esto implica que los docentes tendrán
que desaprender lo aprendido y adquirir nuevas competencias que les permitan contribuir
al logro de lo correspondiente al plan de estudio. En definitiva para que este modelo tenga
éxito los docentes necesitan desarrollar competencias para la planificación y desarrollo
de programas diseñados por competencias lo cual requiere tomar en cuenta el contexto
curricular del área curricular, la propia visión de la disciplina y su didáctica, la experiencia
docente y el estilo personal, las características de los estudiantes y los recursos
disponibles y sobretodo la comprobación del logro de las competencias a través de
estándares y desempeños muy bien establecidos, minimizando así los riesgos de hacer
evaluaciones subjetivas.

Desde mi rol de líder pedagógico me siento en la capacidad de gestionar el CNEB


poniendo especial cuidado en el aspecto de la sensibilización de mi equipo docente pero
la condición que restringe y atrasa mi trabajo es el tiempo que se debe dedicar a ello, toda
vez que las actividades rutinarias de índole administrativo absorben y restringen el tiempo
que debería dedicarle a las actividades de índole pedagógico que permitirían el logro de
aprendizajes basados en competencias dentro de un contexto de una óptima convivencia
democrática y clima de aula.

Alcances para una Gestión Curricular basada en Competencias.


Lic. Alejandro Capcha Passara
Subdirector de la I.E. República del Paraguay

Vous aimerez peut-être aussi