SOR JUANA INES DE LA CRUZ Y LA
FILOSOFiA MODERNA
Laura BENITEZ G.
Instituto de Investigaciones Filoséficas, UNAM.
Introduccién
JUANA INES DE Asbaje y Ramirez de Santillana (1648-1695), nuestra
Sor Juana, nos ha dejado un legado intelectual complejo y vasto que
ha dado lugar a los mas interesantes estudios y las mas diversas in-
terpretaciones.
El presente trabajo es solo un ensayo en que intento formular una
Propuesta tomando como base algunos contenidos filos6ficos de sus
trabajos acerca de los cuales se han sostenido distintas opiniones.
Asi, hay quienes consideran que Sor Juana permanece atada a“... la
filosofia clasica medieval que prevalecié en Espaiia hasta el siglo XVI y
que fué trasplantada a México a través de los sacerdotes.”!
También hay quienes piensan que est4 mds bien cercana a la filo-
sofia modema: “ Sor Juana conocié, al menos por referencia, el tra-
bajo de Descartes”.? Finalmente, hay quienes plantean que su trabajo
filoséfico més importante, el Primero Suefio, es un poema herméti-
co, que ha recibido la influencia de Atanasio Kircher a quien Sor
Juana cita directamente en su Respuesta a Sor Filotea de la Cruz.
Ademias de estas interpretaciones centrales y siempre desde un punto
de vista filosdfico, existen algunas otras consideraciones en torno a sus
escritos que aluden basicamente a la influencia de su pensamiento:
) Morkowsky, Mary Christine: “Sor Juana Inés de la Cruz” en A History of Women
Philosophers Ed. Mary Ellen Waithe. Vol. 3 (1600-1900) Holands, Kluwer Academic
Publishers, 1991.
? Xirau, Ramon: Genio y figura de Sor Juana Inés de la Cruz. Buenos Aires, EUDEBA,
1970, p.17.202 ‘LAURA BENITEZ
El tema central de la libertad del entendimiento ha hecho que se la
considere precursora de la Ilustracién, en tanto que el tema de la
liberacién y educaci6n de Jas mujeres la hacen precursora del fe-
minismo contempordneo?
Yo intento verla como cercana a la modernidad, no sélo en tanto
retoma algunas propuestas cartesianas, sino precisamente porque ex-
hibe propuestas escolasticas, ideas humanistas, imagenes herméticas
y una actitud critica ante el conocimiento que me parece ser el signo
més importante de su modernidad filoséfica.
Del barroco y Sor Juana
En México, el barroco durante el siglo XVII no es meramente un
estilo sino que constituye el ambiente cultural de la Nueva Espajia y
tiene mucho que ver con el modo de vivir y pensar.
El barroco ha sido tratado por diversos historiadores del arte
como un estilo que surge tras la caida del clasicismo renacentista. Es
un arte directo que evita, a través de la exuberancia formal, presu-
puestos o conceptos implicitos. De acuerdo con la nueva vision del
mundo, fundada en la decadencia de la unidad medieval, el barroco
es un intento por guardar el equilibrio en un mundo en cambio y
conlleva, en general, una actitud de lucha firme contra el escepticis-
mo y el subjetivismo. Desde mi punto de vista, “ barroco” no es sdlo
un adjetivo aplicable a la literatura o a Ja arquitectura, sino que
puede usarse para describir a algunos criollos del siglo XVII en
México. Como modo de vida, el barroco es un intento por salvar
contradicciones, tanto individuales como sociales. La vida de Sor
Juana esta Ilena de contradicciones. Por el mero hecho de ser una
criolla que, mientras permanece en la corte, vive su propia vida y al
mismo tiempo la de otros, los de la “ verdadera” corte en Madrid,
3. Morkowsky, Mary Christine : op. cit. p. 59.‘SOR JUANA Y LA FILOSOFIA MODERNA . 203
que sirven de paradigma a los de ésta, como lo ha sefialado Sergio
Fernandez. Por otro lado, ama el conocimiento cuando en su socie-
dad no es un mérito sino un demérito en una mujer y porque, como
dice Paz, busca valores masculinos siendo una mujer. Por supuesto
no es la contradiccién en si misma la que caracteriza el espiritu ba-
rroco, sino la bisqueda del equilibrio.
Sor Juana es barroca en vida y estilo y cuenta con el instrumento
mas efectivo para expresarse, el lenguaje poético, cercano al gongo-
rismo en el verso y al esquema calderoniano en las obras de teatro.
En la ultima parte del siglo XVII cuando Espafia sufria una deca-
dencia politica y se hallaba en el ultimo momento de su gran cul-
tura literaria .... aqui, en lo que fue una pseudo Espafia, se da una
continuidad cultural ..... Esta continuidad es un fenémeno extrafio
porque Sor Juana se halla en el climax de una trayectoria histérica;
y en tanto que surge muy lejos de ese origen literario en Espafia,
tiene otras raices que la alimentan, asi se constituye en la primera
americana con cardcter universal.*
La década de los 80's en el siglo XVII mexicano fue la mas importante
para la vida intelectual de la colonia, no obstante que, como refiere Ir-
ving Leonard, habia inseguridad tanto en las costas, debido a los piratas,
como en las fronteras debido a los indigenas del norte, la vida cultural en
Ja capital de Nueva Espajia fue muy intensa en 1683.
Ademas de la justa poética que tuvo lugar en la Universidad, Sor
Juana escribe en ese afio el mejor poema de su tiempo en castellano,
Los especialistas estan de acuerdo en que de 1669 a 1693 Sor Jua-
na tuvo su mas importante desarrollo literario.
Conocia muy bien su oficio y su trabajo no dejaba nada que desear
... Representa el final de una era poética. Recibe los valores asu-
4 Feraindez, Sergio: Homenajes, México, Sep Setentas, 1972, p. 24,
S Irving A. Leonard: Baroque Times in Old Mexico. Seventeenth century persons, places
and practices, Ann Arbor, The University of Michigan Press, 1959. ef. p. 162.204 LAURA BENITEZ
midos por la lirica del “Siglo de oro” después del Renacimiento y
en su poesia es posible apreciar por ultima vez estos rasgos impor-
tantes ...6
Algunos de sus poemas han sido clasificados como filoséficos
como “Finjamos que soy feliz’ o “Supuesto discurso mio”. Estos
dos poemas, independientemente de su contenido particular, consti-
tuyen una interesante critica contra la variedad de opiniones y sefia-
lan el limite del entendimiento humano, particularmente en la via de
la contradiccion. Pero el trabajo mas importante, desde el punto de
vista de la filosofia, es la larga silva, Primero Suefio que examinaré
mas adelante.
Algunas caracteristicas filosficas en los escritos de Sor Juana.
Sor Juana escribié dos trabajos en prosa y un poema que son im-
portantes desde el punto de vista de sus ideas acerca de Dios, el
mundo fisico, la educacién, la organizacin de las ciencias, 1a liber-
tad y algunas cuestiones epistemoldgicas. Estos trabajos son: Crisis
de un sermon, la refutacién teolégica a un sermén de Antonio de
Vieira, famoso predicador jesuita, y Respuesta a Sor Filotea de la
Cruz, un documento autobiografico que exhibe la valiente defensa
que Sor Juana hace de su vida intelectual. En el primer escrito, la ar-
gumentacién se reduce a la forma escolastica clasica. Aqui podria
estar de acuerdo con Mary Morkowsky cuando dice que Sor Juana
acepta la filosofia clasica medieval, si este aserto se refiere unica-
mente a la susodicha critica, también llamada por Monsefior Fernan-
dez de Santa Cruz, Carta Atenagorica, pues remite a la diosa griega
Atenea en vista de la claridad de la argumentacion de Sor Juana. En
cuanto al segundo escrito, La respuesta,.., es muy dificil clasificarlo
como escolastico. Es verdad que considera que todas las ciencias
Reyes, Alfonso: Medallones. Buenos Aires, Espasa-Calpe, 1970, pp. 107-8‘SOR JUANA Y LA FILOSOFIA MODERNA. 205
Itevan a la teologia’ pero, en este mismo escrito, se muestra partidaria
del amor intelectual de Dios, la via de la gnosis, que es realmente una
caracteristica renacentista que surge en la baja Edad Media y que se
opone a la mera intuicién mistica. Por otra parte, piensa también que
existe cierta concatenaci6n entre las diferentes ciencias de modo que ca-
da una contribuye a explicar las otras en una armonia universal.
Porque como es menester mucho uso corporal para adquirir habito,
munca le puede tener perfecto quien se reparte en varios ejercicios;
pero en Jo formal y especulativo sucede al contrario, y quisiera yo
persuadir a todos con mi experiencia a que no sélo no estorban,
pero se ayudan dando juz y abriendo camino las unas para las
otras por variaciones y ocultos engarces —que para esta cadena
universal les puso la sabiduria de su Autor—, de manera que pare-
ce se corresponden y estén unidas con admirable trabazén y con-
cierto.*
Esta es, claramente, una idea que proviene de la filosofia natural
renacentista y que Descartes refleja en su consideracién acerca de la
Mathesis Universalis a la que se tefiere en la Regulae.
Hay otro rasgo interesante que acerca a Sor Juana a los autores rena-
centistas y éste es la soledad de su desarrollo intelectual. Estudia sin
maestro, sola con sus libros, independientemente de las instituciones,
aunque por razones diversas a las humanistas; pero mas importante
que este hecho externo es que se acerca a los filésofos modernos en
la via de reflexion epistemolégica al analizar las disposiciones menta-
les para el conocimiento y su posibilidad de mejoria.
7Cf. De la Cruz, Juana Inés: “Respuesta a Sor Filotea de la Cruz” en Florilegio, Selec-
cidn y prélogo de Elias Trabulse. México, Promexa Editores, 1979, p.740:
“Con esto proseguf, dirigiendo siempre, como he dicho, los pasos de mi estudio a la
cumbre de la Sagrada Teologia, pareciédome preciso, para egar a ella, subir por los es-
calones de las ciencias y artes humanas ...”
®De la Cruz, Juana Inés: op. cit. p. 742,206 ‘LauRA BENITEZ,
Finalmente, la discusién teoldgica y la carta biografica nos mues-
tran, por un lado, su capacidad argumentativa y, por otro, su biis-
queda de un saber completo y arménico sobre la base de un esfuerzo
muy personal, Si recordamos que Sor Juana se mueve de las cues-
tiones y métodos de la escolastica al de los autores renacentistas re-
sulta mas facil entender los contenidos del Primero Suefto, Sor Juana
misma ofrece una breve versién:
Siendo de noche, me dormi, sofie que de una vez queria compren-
der todas las cosas de que el universo se compone no pude, ni aun
divisar por sus categorfas, ni aun s6lo un individuo; desengafiada,
amaneci6 y desperté °
Existen diversas interpretaciones importantes del poema. Algunas de
ellas subrayan el sentido moderno del Primero Suefio, algunas otras
sefialan el carcter psicolégico del poema, pero existe una interesante
aproximaci6n que pone a Sor Juana en contacto con el hermetismo:
Las interpretaciones que han querido ver en esta obra una expre-
sién del conocimiento filoséfico se han acercado bastante a su
significacién ya que, en realidad, si se trata de un conocimiento,
pero no filoséfico, sino cientifico del mundo, aunque debemos
aclarar aqui que la palabra cientifico no tiene las connotaciones
que actualmente le damos, Se trata del conocimiento cientifico tal
como lo concebian los filésofos herméticos de los siglos XVI y
XVII, adscritos a lo que actualmente se conoce como la tradicién
magica.'°
Por supuesto estoy de acuerdo en que el intento de Sor Juana en el
Primero Suefio es lograr un conocimiento del mundo natural; sin
embargo, y a pesar de las imagenes herméticas, la critica al conoci-
miento la acerca més a los escritos especulativos de filosofia natural.
9 Trabulse, Elias: “El hermetismo y Sor Juana Inés de la Cruz” en El circulo roto. Méxi-
co, F.C. E. Sep., 1984, pp. 75-76.
10-Tyabulse, Elias: op. cit., p. 82.‘SOR JUANA Y LA FILOSOFLA MODERNA 207
El Suefio ha sido dividido de diferentes maneras pero todos los
intentos tienen la misma secuencia. En efecto, podemos reconocer,
primero, el suefio acerca de la noche, donde la poetisa sabe que esté
dormida pero es consciente de que esta sofiando. Mas tarde, dentro
del Suefio tiene la intuicion de que el universo esta dormido. Aqui
hace abstraccion de algunas caracteristicas del mundo fisico como el
cambio y el movimiento e intenta conocer el mundo en reposo. El
Suefio continda en lo que puede considerarse la tercera parte que es
el andlisis de la base fisiologica del suefio. Esto la lleva a los proble-
mas de la percepcién y de la relacion mente-cuerpo. Aqui Sor Juana
considera el cuerpo dormido como un cadaver con alma. Mas ade-
lante se describen las acciones del espiritu relativas a sofiar, es decir,
el suefio del suefio. Esta parte es seguida por otra muy importante en
que Sor Juana hace algunos sefialamientos epistemolégicos, espe-
cialmente se refiere a la secuencia inferencial y al método que va de
lo simple a to complejo, lo cual muestra cierta semejanza con la fi-
losfia cartesiana. En esta etapa es importante sefialar la duda que Sor
Juana expresa acerca de la posibilidad de lograr un verdadero cono-
cimiento deductivo que vaya de lo simple a lo complejo, duda que,
sin embargo, no es plenamente escéptica sino critica.
Por otra parte, todas estas dudas que se presentan una vez que ha
descartado la intuicién como el! medio para alcanzar el conocimiento
completo del universo, nos permiten llegar a la conclusion de que
Sor Juana deja atras el hermetismo y ahora se mueve hacia los pro-
blemas de la filosofia moderna. Si la intuicién era la forma natural de
conocimiento para el hermetismo, el hecho de que Sor Juana se
vuelva hacia el método. deductivo racional, muestra que, desde su
punto de vista, la intuicién no puede proporcionar un conocimiento
unitario e integrado del universo, aunque no deja de ver las defi-
ciencias del conocimiento inferencial.208 LAURA BENITEZ.
Se sigue de lo anterior que Sor Juana no est4 proxima al agnosti-
cismo y mucho menos a un escepticismo radical. Su preocupacién es
mostrar la debilidad de los métodos a través de los que se obtiene el
conocimiento, mas que negar la posibilidad de conocer. Parece claro
que el desencanto se da por las limitaciones de la potencia animica
que se establecen al analizar sus bases de materia critica.
El Primero Suerio
UPor qué suefio?
EI suefio ha sido favorecido a todo lo largo y lo ancho de la litera-
tura por muchos autores como un recurso que permite tomar dis-
tancia con respecto a lo real con diferentes propésitos, desde salvar
hechos, desconexiones, fortalecer ideas, etc. Pero el suefio puede decir
mucho mis cuando es profético o cuando se emplea como recurso
metodoldgico.
En los autores modernos, el suefio tiene peculiares resonancias; en
efecto, el asunto concreto es cémo poder dirimir, con criterios sufi-
cientemente claros, entre el suefio y la vigilia. La dramaturgia en
Shakespeare o en Calderon de la Barca ha mostrado la naturaleza
del problema, {Hay acaso rasgos peculiares del suefio que nos
permitan decidir cuando sofiamos y cuando estamos despiertos?
Descartes retomara filos6ficamente el problema en la primera Me-
ditacién. Ahi el tono escéptico de “La vida es suefio” se profundiza
reflexivamente. ,Cémo saber que los sentidos no me engafian? El suefio
se transforma en el primer argumento escéptico cartesiano y por ello
mismo se constituye en un importante recurso metodoldgico.
En Sor Juana el suefio también juega un papel metodoldgico, pero
no se reduce a un argumento sino que se constituye en una peculiar
forma de hacer abstraccién de lo cambiante e inestable, pero sobre
todo, permite a Ja autora discurrir reflexivamente como mejor le
place pues al fin, y después de todo, los suefios, suefios son.‘SOR JUANA Y LA FILOSOFIA MODERNA. 209
En la segunda parte del Suefio la quietud, el reposo y el silencio
son sindnimos de inmutabilidad:
E1 viento sosegado, cl can dormido,
éste yacem aquél quedo
los 4tomos no mueve
con ¢l susurro hacer temicndo leve,
aunque poco, sacrilego muido,
violador del silencio sosegado.
El suefio obra la parilisis, la naturaleza entera se aquieta, todo mo-
vimiento cesa y con él todo ruido.
y los dormidos, siempre mudos, peces
en Ios fechos lamosos.
de sus oscuros senos cavernosos,
mudos eran dos veces.
La naturaleza entera entra en este letargo, en este suefio, pero
épara que hacer dormir al mundo natural? porqué dejarlo en la os-
curidad, sin luz ni colores, y en el completo silencio sin sonido y
sobre todo sin movimiento?
En El mundo o “tratado de la luz”, Descartes nos habla de la
naturaleza reducida a particulas de materia en movimiento: colores,
sabores, sonidos, etc., no forman parte de la estructura propia de los
objetos, pero nunca renuncid al movimiento como un modo 0 carac-
teristica propia de la extension.
Sor Juana aquieta al universo:
EI suefio todo, en fin, 1o poseia;
todo, en fin, el silencio lo ocupaba,
aun el ladr6n dormia
aun e] amante no se desvelaba.210 ‘LAURA BENITEZ,
A la dualidad reposo-movimiento Sor Juana agrega otra que es
paralela, el par trabajo-ocio. Ambos pares expresan una concepcion
del universo, de “ esta aparatosa maquina del mundo” en que se al-
ternan movimiento y reposo, trabajo y ocio. Todo en el mundo natu-
tal pasa de la actividad al suefio a semejanza de lo que sucede con el
paso de la vida a la muerte. De hecho la poetisa llama al suefio
“ muerte temporal”.
Ademas de un diferente punto de partida, en cuanto a la concep-
cién del movimiento en e! universo, media otra interesante distancia
teérica entre Descartes y Sor Juana. Para Descartes la muerte se da
cuando, por la descomposicién del cuerpo, de la maquina, el alma
tiene que abandonarlo, idea contraria a la tradicién para la cual el
cuerpo se descompone al ser abandonado por el alma, y del cuerpo
dormido para Sor Juana quien lo califica como “ cadaver con alma”,
tanta es la semejanza entre el suefio y la muerte, “ muerto a la vida y
aal muerte vivo”.
Ahora encontramos tres nociones que se encuentran parcialmente
vinculadas: trabajo, movimiento y vida, por un lado y, por otro, ocio,
reposo y muerte.
En el cuerpo en reposo, “ cadaver con alma”, se hacen mas lentos
el pulso cardiaco y la respiracién. Al igual que Descartes, segura-
mente una herencia de la tradicién, al menos en cuanto al nombre,
Sor Juana menciona el corazon menos en cuanto al nombre, Sor
Juana menciona el corazén como el centro de los espiritus vitales, a los
que Descartes llama espiritus animales, que para él son particulas
sutiles de sangre que pasan del coraz6n al cerebro y mueven la glan-
dula pineal para que esta envie informacién al alma o bien reciben los
movimientos de la glandula y se mueven a través de los nervios para
producir las respuestas de los diferentes musculos de nuestro cuerpo.
A diferencia del padre de Ia filosofia moderna, Sor Juana sigue
pensando, con la tradicién, en la division del alma humana en vege-SOR JUANA YLA FILOSOFIA MODERNA 211
tativa, motriz e intelectual, separacion que Descartes rechaza. En
efecto, para él, los niveles vegetativo y motriz pertenecen entera-
mente al cuerpo. El ritmo cardiaco, las pulsaciones, etc., son mani-
festaciones de la maquina del cuerpo y no del anima.
En Sor Juana, “El alma ... suspensa”, pero no del todo separada,
da cuenta, en “los languidos miembros y sosegados huesos”, de los
“gajes del calor vegetativo”. El alma da cuenta del cuerpo en reposo.
Junto a esta idea, mas bien tradicional del alma, Sor Juana presenta
una concepcién anatémica y fisiologica del cuerpo, mas cercana a la
descripcién moderna que a la de los médicos renacentistas, pues, si
bien menciona los “ cuatro humores”, no recurre a los parametros as-
trologicos de Paracelso para explicar su funcionamiento. Se limita a
describir la funcién del coraz6n, los pulmones y el estomago y su inter-
accién con los sentidos, la estimativa, la memoria y la imaginacién. Se
trata, pues, de la base fisiologica de algunas operaciones que no son ex-
clusivamente mentales sino mixtas (cuerpo-mente); dice:
ésta, pues, si no fragua de Vulcano,
templada hoguera del calor humano,
al cerebro enviaba
himedos, mds tan claros los vapores
de los atemperados cuatro humores,
que con ellos no sélo no empafiaba
os simulacros que la estimativa
dié a la imaginativa
y aquésta, por custodia mds segura,
en forma ya mds pura
entreg6 a la memoria que oficiosa
‘grabé tenaz y guarda cuidadosa,
sino que daban a la fantasia
lugar de que formase
imagenes diversas,212 ‘Laura BantTez,
En esta parte de la silva llama la atencién la simplificacion de los
pasos que conducen a la explicacién, ya de la memoria, ya de las
imagenes de la fantasia.
Ciertamente, las epistemologias tradicionales cargaban con un
complejo aparato explicativo que intentaba detallar el paso de lo
meramente corpéreo a lo animico. Y precisamente una caracteristica
de la modernidad fue la de simplificar la explicacion epistemolégica
aunque, en ocasiones, como en Descartes, el problema, de cémo co-
nectar cuerpo y alma, desborda la explicaci6n.
En la metodologia de Sor Juana, el suefio aparece como instancia
que libera el alma. De hecho, una vez acallados los sentidos, con el
cuerpo en reposo, el alma emprende, sin estorbos, la tarea de cono-
cerlo todo en un vuelo intelectual, buscando una alta “ eminencia”,
mayor que ef Monte Olimpo, desde donde contemplar el universo y
su causa,
-» que como sube en piramidal punta
al cielo la ambiciosa llama ardiente,
asi la humana mente
su figura trasunta,
ya la Causa Primera siempre aspira
—céntrico punto donde recta tira
Ia linea, si ya no circunferencia,
que contenia infinita toda esencia.
La aspiracién de la mente es, pues, hacia lo infinito pero, natural-
mente, aspirar o querer no es estar capacitado para alcanzar. La pre-
gunta, entonces, es {cuales son los tiniitres de esta aspiracién; hasta
dénde puede extenderse este afan por conocer? La mente aspira,
pero tal parece que en tanto la volicién impulsa, desea, quiere, se
afana, hay limites intelectuales que impiden colmar ese infinito deseo
de conocer.‘SOR JUANA Y LA FILOSOFIA MODERNA 213
Descartes diria que, al paso que la voluntad es infinita, pues puede
extenderse a cualquier cosa, el intelecto es limitado.
Nuestra poetisa, utilizando otro discurso, ve elevarse el alma por este
“... ambicioso anhelo, haciendo cumbre de su propio vuelo” y, al llegar
a este punto casi extatico, casi mistico, al intentar la contemplacién, el
alma percibe la limitacién de su capacidad intelectual. Dice:
En cuya casi elevaci6n inmensa
gozosa mas suspensa,
suspensa pero ufana
y atonita aunque ufana, Ja suprema
de lo sublunar reina soberana,
Ja vista perspicaz, libre de anteojos,
de sus intelectuales bellos ojos
(sin que distancia tema
ni de obstaculo opaco se recele,
de que interpuesto algiin objeto cele),
libre tendié por todo lo criado:
cuyo inmenso agregado
cimulo incomprensible
aunque a la vista quiso manifiesto
dar sefias de posible,
a la comprensién no, que —entorpecida
con la sobra de objetos y excedida
de la grandeza de ellos su potencia—
retrocedié cobarde.
Del texto pueden extraerse numerosas implicaciones pero voy a
centrarme en dos.
1° Hay una cambio de nivel de la aspiracion de lo infinito al cono-
cimiento del mundo sublunar, a lo creado y aun en este mundo finito
el alma no logra su intento.
2° Bien que reina del mundo sublunar, el alma se ve sobrepasada
en varios sentidos. No sdlo se trata de la “sobra de objetos”, esto214 ‘LAURA BENITEZ
es, de la cantidad, sino de la captacién intelectual de los objetos en si
mismos. Sor Juana hace hincapié en el estado ideal del alma para co-
nocer, que lo que las cosas son ellas mismas y de ahi desprender el
sentido de este “ inmenso agregado cimulo incomprensible” es, para
Sor Juana, el gran afan intelectual del alma, algo que los fildsofos
moderos comparten con ella.
Sor Juana se queda en el reconocimiento de los limites de la po-
tencia animica, donde el alma “retrocede cobarde” ante el exceso,
Descartes y otro intentan una solucién, hacer del “ cimulo incom-
prensible” algo inteligible, algo racional, al reducir el exceso, la sobra
de objetos a la “ homogénea extensién” con todas las consecuencias
que eso pueda tener.
Para Sor Juana al entendimiento lo vence la maquina del universo:
“y por mirarlo todo, nada via, ni discernir podia”. Sin embargo, una
cosa es reconocer los limites y otra, declarar al alma impotente para
conocer. Este primer intento omniabarcante, falla, pero el alma se re-
trae de la diversidad, regresa a si misma y centra su atencion. Se
inicia un segundo camino al conocimiento. El alma se fija, ya no en
la diversidad y separaci6n, sino en la unidad y el orden. Se preludia,
asi el camino del método. La poetisa es consciente de no poder abar-
car, a través del conocimiento intuitivo, el ser del universo, por lo
que habra de contentarse con el arte de la inferencia:
... feparando, advertido,
con el lente el defecto
de no poder con un intuitivo
conocer acto todo lo creado,
sino que, haciendo escala, de un
concepto en otro va ascendiendo
grado a grado.
Sor Juana propone un modo de acceso a lo real por niveles onto-
légicos. Del ser inanimado a los seres que poseen alma vegetativa, aSOR JUANA Y LA FILOSOFIA MODERNA 215
los que la tienen motriz y, finalmente, a los seres con alma intelec-
tual. El esquema jerarquico del ser que Sor Juana presenta es de
base aristotélica y se reelabordé en la tradicién escolastica, Sin em-
bargo, el ser humano se ve favorecido por los cinco sentidos y las
facultades internas con que Dios le doté:
... el hombre, digo en fin mayor portento
que discurre el humano entendimicnto
compendio que absoluto
parece al angel, a la planta, al bruto.
Este canto a la naturaleza humana recuerda de cerca a los humanistas,
a Pico della Mirandola en la Oracidn sobre la dignidad humana y a
Vives en la Fabula.
Aparece con toda claridad la imagen renacentista del hombre
como microcosmos, la naturaleza que resume en si todo el mundo
natural y que puede ser espejo del universo. Esa es la auténtica dig-
nidad humana, desde el punto de vista ontolégico, ser resumen de
todo lo creado. Sor Juana no saca ni las consecuencias éticas ni las
epistemoldgicas; esto es, las primeras se refieren a que no teniendo
el hombre naturaleza propia tiene a cambio la libertad para darse la
naturaleza que le plazca. En cuanto a las segundas, como espejo del
cosmos, la conciencia enlazadora del hombre puede en efecto aspirar
a conocer todo el universo. Naturalmente la aspiracién, como hemos
visto, aparece en Sor Juana, pero al verse obstaculizada cierto es-
cepticismo se deja sentir en la ultima parte del poema, de donde po-
demos concluir que la autora no se queda en el canto humanista a la
dignidad del hombre, sino que se acerca mas al esquema epistemo-
légico moderno que apunta hacia el desencanto del poder intelectual.
Asi, respecto al conocimiento a través del método inferencial dice:
Estos pues grados discurrir queria
‘unas veces, pero otras disentia,216 ‘LAURA BENITEZ,
excesivo juzgando atrevimiento
al discurrirlo todo
quien aun la més pequefta,
aun la mds facil parte no entendia.
En suma, la gigantesca empresa de investigar la naturaleza y cono-
cerla como un todo arménico no se logra ni por Ia via intuitiva, ni
por fa via inferencial; ni siquiera anteponiendo el recurso metodolé-
gico del suefio el cual facilitaba algun tipo de abstraccién que pro-
metia llevar el conocimiento de las cosas, de su estructura y orden.
La abstraccion que Sor Juana propone es insuficiente, no basta con
inmovilizar las cosas; los modernos se plantean el problema en tér-
minos de propiedades cuantificables que permiten establecer regula-
tidades a pesar de la diversidad de los fenomenos, es decir intentan
hacer inteligible este universo sensible.
El final del Primero Suefio, como el final de cualquier suefio, es un
despertar. Aunque Sor Juana nunca satisface su deseo de alcanzar un
conocimiento integro del universo, su intento de hacerlo la lleva a
dar una valiosa descripcién de algunas operaciones y estados de la
mente. Desde luego no llega al conocimiento de todas las causas del
mundo fisico, pero nos da una interesante version de la base fisiolé-
gica del suefio,
Sor Juana no penetra en las causas y efectos del mundo como qui-
siera, pero avanza en las de la conciencia y es ahi, en ese espiritu
suyo dé modemiidad, que alcanzamos a percibir que su peregrino in-
genio “... no pereceré sino con el mundo”.