UNIVERSIDAD NACIONAL DEL ALTIPLANO

ESCUELA DE POST GRADO

MAESTRÍA EN TRABAJO SOCIAL

LA DISCUSIÓN: ¿TRABAJO SOCIAL PROFESIÓN O

DISCIPLINA?

Ensayo

SESIBEL LIDIA SAAVEDRA ALDABAL

PUNO, 2017
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En el presente trabajo, se aborda un breve análisis de algunos

planteamientos acerca del Trabajo Social como profesión o como

disciplina. Para comprender los planteamientos se debe entender la

naturaleza del Trabajo Social. Se asume una posición sobre la relevancia

que la intervención profesional integral contribuye de manera más

contundente en el cambio social.

Sobre la naturaleza del trabajo social, existen dos teorías como

señala Montaño citado por Morena (2010, p3):

“a. Perspectiva endogenista: sostiene que el Trabajo Social se

origina en la evolución organizativa y profesional de las

“anteriores formas de ayuda, de la caridad y de la filantropía,

vinculada ahora a la intervención en la “cuestión social”. En este

sentido el Trabajo Social se concibe como la profesionalización,

organización y sistematización de la caridad y de la filantropía. En

esta tesis la profesión es vista a partir de sí misma, sin considerar la

historia de la sociedad, la realidad como el fundamento y

causalidad de la génesis y desarrollo profesional. Esta

perspectiva le confiere al Trabajo Social una autonomía histórica

respecto a la sociedad, las clases y las luchas sociales. No se

analiza la existencia de actores colectivos y de relaciones

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sociales vinculados a categorías socioeconómicas y políticas,

condicionados por un contexto histórico.

b. Perspectiva histórico-crítica: entiende el surgimiento del

Trabajo Social como un subproducto de la síntesis de los

proyectos político-económicos que operan en el desarrollo

histórico , donde se reproduce material e ideológicamente la

fracción de clase hegemónica , cuando en el contexto del

capitalismo en su edad monopólica el Estado toma para sí las

respuestas a la cuestión social. Desde esta perspectiva, el

Trabajo Social cumple un papel político, teniendo una función que

se explica por la posición que ocupa en la división social y

técnica del trabajo. Implica comprender la profesión

históricamente situada, configurada como un tipo de

especialización del trabajo colectivo dentro de la división

social del trabajo peculiar de la sociedad industrial. Esta tesis

parte de una visión de totalidad social, que explica la naturaleza y

funcionalidad del Trabajo Social para el oren burgués legitimando

el orden y la acumulación capitalista”

Molina (2010) nos explica que si se comprende la profesión desde la

complejidad histórica, la intervención profesional también advierte su

complejidad. La intervención no es sinónimo de procedimiento técnico, ni se

configura exclusivamente en la relación interpersonal sujeto – agente

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profesional sino que esta se gesta y desarrolla entre múltiples mediaciones

(p.12), y estas están asociadas con:

- La historicidad de las mediaciones de los sujetos, considerándoseles

sociales, tanto al sujeto de atención como al profesional,

- Las mediaciones estructurales, que dan direccionalidad a las políticas

sociales del Estado,

- Las mediaciones institucionales, que permite entender los juegos de

poder, y determinan los procesos de trabajo organizacionales de los que

somos parte,

- El desarrollo de la teoría social y del conocimiento producido desde el

Trabajo Social.

- El proyecto de profesión que hegemonice la forma de enfrentar la

desigualdad social en cada particularidad histórica.

Esta complejidad histórica, nos induce a tener presente que somos el

resultado de contextos históricos sociales, políticos, económicos y en este

caso, la cuestión social, la desigual etc, son producto de las diferencias

causadas por el liberalismo.

Morena (2010) nos dice que:

“ Una profesión existe en tanto pueda aportar elementos para la

satisfacción de determinadas demandas y sólo se podrá mantener

dentro de la división socio técnica del trabajo en tanto pueda captar

e interpretar situaciones y fenómenos emergentes, estudiarlos e

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investigarlos valiéndose de todos los conocimientos y campos

del saber que le sean necesarios y elaborando propuestas de

intervención que contribuyan a su solución…Las profesiones son

cada vez más formas de trabajo humano más o menos

diferenciadas e interligadas, que consisten en la aplicación de

un conjunto más o menos delimitado de conocimiento teórico y

técnico, cuyo objetivo es dar respuesta a un tipo o a una parte

más o menos determinada de la realidad global” (p.7)

Pretender que seamos profesión, es una dificultad, como nos

explica Tello (2010) “una de las dificultades principales que tiene aún el

Trabajo Social para elaborar teoría para su propio consumo, es que no se

sabe qué se va a estudiar, porque no hay precisión sobre el objeto. Esto,

agregado a la subestimación a la teoría, lo que dificulta la articulación con

la totalidad y con la historia, y agregado a la práctica de una

metodología inductiva, determina que las investigaciones del Trabajo

Social, queden encerradas en una descripción de lo particular, sin superar

la crítica a las prácticas teóricas del Trabajo Social Tradicional (p.7)

Para hablar de Trabajo Social como disciplina, se parte de la

premisa que en el contexto actual los cambios tanto sociales, políticos,

económicos y culturales son vertiginosos. Por lo tanto se necesita de

profesionales con intervención social que tengan mayor conocimiento en

este campo disciplinar. En palabras de Tello “el Trabajo Social profesión

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del cambio debe atreverse a transformarse a sí misma, a desligarse de

sus límites históricos y construir propuestas de intervención alternas a

la lógica dominante. La recuperación, objetivación y conceptualización

de nuestro hacer es el comienzo de la diferencia. Es un imperativo ético

comenzar a trasladar prácticas emancipadoras y transformadoras a la

intervención social, la propia ciudadanía lo demanda. Para ello, es

necesario que asumamos, que el desempeño del trabajo social varía

dependiendo de nuestra orientación ideológica. Asimismo, quienes están

interesados en estas corrientes deben dotarse de teoría y, por último, para

poner en práctica estrategias transformadoras se tiene que tenemos salir a

la realidad y mirar: los movimientos ciudadanos nos están enseñando el

camino.

Hoy por hoy nos referimos al hacer de Trabajo Social con el

nombre de los diversos métodos o técnicas que utilizamos, en vez de

definir lo hecho como procesos (calificados) de Trabajo Social.

“Tenemos que pensar circularmente que la sociedad hace el lenguaje que

hace a la sociedad, que el hombre hace el lenguaje que hace al hombre”

(Morin, 1998, p. 166) citado en Tello (2010. P12), que el trabajador social

hace al lenguaje que hace al Trabajo Social. Somos una constante

reflexión de lo que hacemos y sabemos, no está desligado.

Muy diferente a lo dicho por autores sobre ser disciplina, o que se

nos considere como técnicos, Tello (2010) nos explica “ El Trabajo Social

integra conocimientos en su visión, lo histórico, lo filosófico, lo

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económico, lo psicológico, lo social, lo cultural unido para intentar

comprender una realidad, una situación problema conformada, para

nosotros por la tríada sujeto-problema-contexto y entonces, y sólo

entonces hablamos de Trabajo Social, ya que no nos es posible hablar

desde otra disciplina en particular, nuestra mirada se constituye en la

síntesis de los conocimientos sobre lo social. Así, la visión técnica queda

desplazada, puesto que como profesionales nos preparamos usando el

conocimiento de las ciencias sociales, y el propio como resultado de una

reflexión del que hacer, para intervenir. “La intervención trasciende la

investigación, trasciende el diagnóstico, la intervención se construye

en el ir y venir entre la teoría y la realidad, entre lo general y lo

particular, entre el antes y el después, entre lo existente y lo

inexistente. La intervención de Trabajo Social es un continuo” (ibídem)

Como reflexión final, podemos decir que al no contar con teoría

propia, y valiéndonos de las demás ramas de las ciencias sociales, nuestra

intervención se ve nutrida por las mismas. Debemos plantearnos

seriamente en pensar que los cambios sociales se producen desde lo micro,

desde el quehacer diario del profesional que se capacita para intervenir en

una realidad particular, cuestionando el proyecto de transformación

estructural que se encierra en lo teórico hasta utópico, y no aterriza en

intervención profesional y no ha mostrado logros más que en el campo

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intelectual. Debemos ser coherentes con la realidad en la que como

profesionales estamos insertados, y acorde plantear nuestra intervención.

Referencias.-

DI CARLO, E (2005) Importancia de la investigación para el Trabajador Social

profesional. Revista Tendencia y Retos N°10. ARGENTINA. P. (33-37)

MOLINA, L (2010) Trabajo Social: el viejo debate disciplina o profesión y las

implicancias en la construcción de la autonomía profesional. VII Congreso
Nacional E Internacional De Trabajo Social. COSTA RICA.
P. (1-25)

MORENA, N (2010) El vínculo entre las ciencias sociales y el trabajo Social:

algunos elementos para la discusión. Rev. Reflexiones 89. P. (1-8)
TELLO, N (2010) Ires y Venires de la Intervención de Trabajo Social.
Universidad Nacional de México. Trabajo Social UNAM- VI Época • Número 1.
P. (60-71)