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Corrupción Bogotá: Carrusel de la contratación

Enfocado a el Caso Fase 3 Transmilenio.

Introducción:

La corrupción es un tema complejo de abordar en un país como Colombia donde


no hay justicia, donde hay poca cultura, donde los individuos son ambiciosos con
el poder; los que tienen el mando de las leyes del país lo que emiten son robos
contra los propios ciudadanos y no solo se refiere a robos de dinero si no también
robos de cierta información confidencial la cual genera desconcierto y también
incertidumbre del pueblo ya que genera incertidumbre por parte de los políticos los
cuales rigen el país. La corrupción se ha definido de varias formas y en diversos
sentidos, por ejemplo, se ha dicho que: “el acto corrupto es la defraudación
privada del sector público. El funcionario […] distorsiona su investidura, para
actuar con un interés privado” (Nas, Price y Weber, 1986, citados en Vásquez
Caro, 1994, pág. 317).

La Sociedad se ve seriamente afectada con la corrupción ya que pierde primero


credibilidad a sus políticos; los cuales deberían generar algo básico como:
seguridad y estabilidad social para el pueblo. La corrupción hace que el Estado y
las instituciones democráticas queden en tela de juicio, ya que “afecta la imagen
del Estado pues este pierde legitimidad, en la medida [que] no cumple con sus
fines y se distorsiona la efectividad de las políticas públicas implementadas por el
mismo” (Vélez, 2013).

Lo sucedido en el carrusel de la contratación fue sin duda uno de los casos de


corrupción más grandes que ha tenido que vivir Colombia, siendo un caso en el
que la sociedad fue testigo de cómo los recursos de la sociedad se iban en una
promesa de movilidad y desarrollo que no se dio y que por el contrario estanco la
movilidad de la ciudadanía y desvió bastante dinero a empresas corruptas,
haciendo perder los recursos públicos de los ciudadanos; fue de asombrar la
cantidad de gente que finalmente se vio involucrada en este penoso fenómeno de
corrupción que tuvo un impacto descomunal para toda la sociedad colombiana en
general, el freno que se provocó en materia de desarrollo no tenía comparación.

En este documento se pretende entonces, hacer una breve reseña acerca del
acontecimiento del carrusel de la contratación a nivel de obras de Transmilenio en
Bogotá, con el fin de proponer y llegar a una conclusión donde se plantee una
posible solución que permita eliminar o por lo menos reducir en gran proporción
esta problemática y a su vez quebrantar cada uno de los posibles escenarios que
haya podido desarrollar, se comenzará con la exposición de los antecedentes que
produjeron este fenómeno histórico, además de cómo se desarrolló el caso para
finalmente mostrar las conclusiones que parten del punto de vista de la propuesta
de posible solución.

Justificación

En el presente texto se analizará, respecto al problema de corrupción uno de los


casos que más fuerte ha sonado en Bogotá y en general en toda Colombia,
conocido como el “carrusel de contratación” donde se analizara en que consistió
este acontecimiento basándonos en fuentes secundarias de la web, centrado
primordialmente en el caso de la fase 3 del Transmilenio en la calle 26 de Bogotá.

Antecedentes

 Los casos históricos de corrupción más significativos han sido: Agro Ingreso
Seguro, Monto estimado: $12.700 millones; Interbolsa Monto estimado:
$340.000 millones; Saludcoop Monto estimado: $1,7 billones y Reficar
Monto estimado: $1,5 billones.
 El acontecimiento de corrupción que vivió el país de Colombia conocido
como el “carrusel de contratación” fue un escándalo en la ciudad de Bogotá
el cual se dio a conocer el 25 de Junio del 2010 durante la administración
del ex alcalde Samuel Moreno Rojas, ya que dio a conocer negociaciones
las cuales involucraban multimillonarias comisiones por parte del ex
congresista German Olano y la empresa de los primos Nule, la cual tenían
bajo poder gran parte de los contratos de distintas obras públicas de la
ciudad de Bogotá; el contrato que se vio más afectado fue la construcción
de la tercera fase de Transmilenio el cual presento grandes retrasos como
muchos otros contratos.
 En el “carrusel de contratación” se vieron involucrados políticos,
empresarios y dirigentes del instituto de desarrollo urbano como conalvias,
los hermanos Olarte, odinsa, sainc S.A, el grupo de Julio Gomez y Emilio
Tapia, el contralor distrital Miguel Angel Morales Russi, el ex congresista
German Olano, el senador Ivan Moreno e incluso Samuel Moreno, lo cual
todos estos integrantes secundarios se beneficiaban económicamente con
cada contrato que realizaban los primos Nule.
 Este escándalo se dio a conocer de gran manera cuando la cadena de
Caracol Radio revelo una grabación la cual involucraba al contralor distrital
de Bogotá en una negociación de comisiones de contratistas. Este
escándalo tomo mucha más fuerza por el señor Gustavo Petro el cual
realizo denuncias acerca de irregularidades en la adjudicación de contratos
y la participación del senador Iván Moreno.
 En cuanto a la fase 3 de la construcción del Transmilenio en la calle 26, el
70% fue otorgado a la empresa de los Nule en el 2007 el cual a finales del
año 2009 la empresa de los Nule empezó a presentar graves problemas
financieros a causa de malos manejos administrativos que conllevo a que
las obras se retrasaran.
 Además para el caso de la obra de Transmilenio de la calle 26, el monto
estimado fue de $156.000 millones de pesos el cual fue el contrato que más
plata se desvió.
 En este “carrusel de contratación” las obras que se vieron afectadas por los
malos actos realizados por parte de los primos Nule fue principalmente la
calle 26 la cual buscaba ampliar las calzadas para implementar el servicio
de Transmilenio para así beneficiar a los residentes de Bogotá, también se
vieron afectados los planes de ejecución del metro de Bogotá, la doble
calzada que se iba a realizar en la vía Bogotá-Girardot y muchas otras
obras publicas alrededor de Colombia.
 El carrusel de contratación tuvo un monto total estimado de
aproximadamente $211.419.574.511 según datos de la auditoria especial
realizada por la contraloría en el año 2012.

MARCO TEORICO

Antanas Mockus1, durante su candidatura a la Presidencia de la República en el


año 2010, decía: “los recursos públicos son sagrados”. Corrupción es el uso
indebido del poder otorgado para beneficio privado. La corrupción entraña
conductas por parte de funcionarios en el sector público o sus allegados, por las
cuales se enriquecen indebida e ilegalmente mediante el mal uso del poder que se
les ha confiado. (Hoddes, 2004). Para Colombia La Sociedad Colombiana de
Economistas (SCE)2 estimó en el 2011 que la corrupción le costó al país entre
1991 y 2010–alrededor de 189 billones de pesos, es decir, 9,95 billones anuales.

Según la Encuesta de Percepción de Impacto de la Corrupción en la Actividad


Empresaria, en 2016 Bogotá se encuentra en el cuarto puesto en cuanto la
corrupción con el 37.5% teniendo igualdad con bolívar, esto es preocupante a
nivel local (Bogotá) ya que siendo la capital del país y teniendo las instituciones
más grandes y estables en la ciudad genera incertidumbre en los empresarios y la
ciudadanía, el crecimiento en la ciudad ha tenido un proceso lento por los
diferentes hechos actuales de corrupción y por ende la inversión es mínima en la
ciudad porque no hay seguridad económica y tampoco social.

1
Antanas Mockus; exalcalde de Bogotá, político, magíster en Filosofía (Universidad
Nacional de Colombia), licenciado en Matemáticas y Filosofía (Universidad de Dijón - Francia),
doctor Honoris Causa (Universidad de París XIII, Francia) y de la Universidad Nacional de
Colombia
2
La Sociedad Colombiana de Economistas es una Asociación Sin Ánimo de Lucro ONG,
de carácter gremial y académico, que agrupa y organiza a los profesionales de la carrera de
economía en Colombia. Es reconocida por la Ley 37 de 1990, expedida por el Congreso de la
República de Colombia, ley que paralelamente la reconoce como Órgano Consultivo del
Gobierno, tanto nacional como regional.
Teniendo en cuenta el informe del índice de percepción de corrupción 2013 (IPC)
que califica de 0 a 100 la percepción sobre corrupción en el país, Colombia tiene
36 puntos, muy por debajo del promedio regional que es de 45 puntos. En la
región el país está en el lugar 18. Para Transparencia Internacional, el problema
sigue siendo alarmante y considera que la lentitud de la Justicia para castigar a los
corruptos y las repetitivas prácticas de abuso del poder en todos los niveles del
sector público se reflejan en la pobre calificación del país en este Índice de
Percepción de Corrupción. (Transparencia Internacional, 2013).

Transmilenio- Calle 26

Los hermanos Nule (Manuel, Guido y Miguel), ex contratistas, reconocidos por


tener más de 80 consorcios entrelazados, además de llevar a cabo el manejo de
proyectos tales como la vía Bogotá – Girardot, y sobre todo la obra de
Transmilenio – Calle 26, este último, dejando una deuda aproximada de 156 mil
millones de pesos.

Desde 2008 hasta 2012 la Avenida El Dorado extrañó los vehículos y el estrés de
los transeúntes. En cambio, retroexcavadoras, máquinas para taladrar concreto,
volquetas y decenas de obreros se convirtieron en el paisaje permanente del
lugar. Entonces, la 26 entró en coma. La obra, que estaba planeada para durar
dos años, se perdió entre el lodazal y la desidia de los trabajadores por la falta de
pago. Bogotá funcionaba a punto de sufrir una embolia por la agonía lenta de una
de sus arterias principales. El anticipo de 220 mil millones que el alcalde Samuel
Moreno había dado a los contratistas tomó otras direcciones menos a la
construcción.

Pero en junio de 2010 estalló la bomba. Cuando la capital se acostumbraba a que


la Avenida El Dorado brillara cada vez menos, la olla en la que se cocinaba uno de
los mayores escándalos de la historia del país se destapó y salpicó a reconocidas
personalidades de la ciudad, entre las que se encontraban concejales,
congresistas, tres hombres de apellido Nule, por entonces no muy conocidos, y
hasta el mismo alcalde Moreno.

“Caso Watergate criollo”, tituló Semana pocos días después de destaparse el


escándalo, haciendo alusión al caso de corrupción y espionaje que le costó el
cargo al presidente estadounidense Richard Nixon en 1974. En el caso
colombiano, el episodio fue bautizado por los medios de comunicación como
“Carrusel de la Contratación”. Pero no era un juego de niños. 220 mil millones de
pesos (en el momento no se conocían los reales alcances del escándalo) se
habían enterrado entre el fango de la inerme calle 26.

La obra que poco había avanzado se detuvo del todo y con ella la esperanza de
decenas de familia que tenían parte de su vida en este lugar.

Así concluyó uno de los más importantes capítulos del llamado Carrusel de la
Contratación en Bogotá y uno de los escándalos de corrupción más sonados de
las últimas décadas en Colombia. Sin embargo, la judicialización de los
involucrados en él aún continúa. Los hermanos Guido, Manuel y Miguel Nule
fueron encarcelados; no en las condiciones que se espera que se le dé a
personas que hicieron tanto daño a Bogotá, sino en una celda con televisor, baño
privado e Internet.

Conclusiones:

- Partiendo de que el hecho de corrupción es un problema que se genera


principalmente por una falta de ética, se puede deducir que hay que partir
con la iniciativa de crear cambios desde lo personal, teniendo como punto
de partida el núcleo familiar, para contar con personas idóneas, con sólidos
principios morales, que demuestren que son personas aptas y capacitadas
para desempeñar altos cargos sin la más mínima duda de suspicacia.

- Es necesario, además, contar con un capacitado y transparente grupo de


personas encargadas del control social, y la correcta ejecución de los
proyectos o convenios, en los cuales exista la clara y publica comunicación
de la información, y de la misma forma exigiendo un mayor control estatal
que involucre a la ciudadanía en las decisiones administrativas.

- Se genera un análisis desde el enfoque general al particular en el que se


genera una iniciativa de solución de los problemas de corrupción como
desde una parte más financiera como por ejemplo la relevancia de mayor
compromiso en el cumplimiento con entregas eficientes de las obras
publicas que se deben llevar a cabo.

- Se debe mejorar el funcionamiento del sistema de cómo se debe trabajar


en este campo y los requisitos que se deben cumplir para la mejora de este
mismo, además mejorar los limites o deberes como tal de la equidad que se
debe fomentar en el ámbito laboral igualdad de oportunidades para quienes
cumplen los requisitos.

Una propuesta de posible solución


- Con los factores anteriormente estipulados podemos evidenciar el mal
manejo de presupuesto que se llevaba además del poco control o poca
regulación por parte de las demás entidades con respecto a temas de
contratación tan delicados como este, la cuestión de esto es saber cuáles
son las fallas y en que se puede contribuir para que grandes desfalcos
como este no se repitan, además se cumpla con los objetivos que son las
obras para el servicio público.
- En propuesta como solución a la mayoría de estos inconvenientes podemos
incluir un mayor control al presupuesto y al personal encargado de dichos
contratos (contratistas), además incrementar el número de contratistas para
procurar dar algo de solución a que las personas que obtengan beneficios
por contratos de tal magnitud no sean repetitivos posteriormente se puede
decir que con esta misma solución de alguna manera también se esclarece
el dilema de las terceras personas que se benefician como en el caso de
los primos Nule el beneficio que obtenían políticos empresarios y demás.
- Uno de los factores que creemos que puede influenciar es el perfil de los
contratistas, como ya sabemos deben cumplir con ciertos requisitos para
poder acceder a contratos de mayor cuantía entonces para casos
específicos y notorios como estos contratos incrementar los requisitos que
deben cumplir y con esto llegar a una mayor eficiencia en cuanto a la labor
que deben cumplir.

Bibliografía:
Vásquez Caro, J. (1994). Corrupción en América Latina: un peso muerto de
ineficiencia e inestabilidad en gobernabilidad y reforma del estado. Bogotá:
Editores Cárdenas Santamaría.

Vélez, J. (2013). Transparencia en los procesos de contratación: un


compromiso de todos. Bogotá.

Datos Contraloría General de la Nación. (2012) La entidad. Recuperado de


http://www.contraloriagen.gov.co/web/guest/la-entidad

El enorme daño fiscal de los Nule. (16 de enero de 2014). Dinero.com.


Recuperado de http://www.contraloriagen.gov.co/web/guest/registrodeprensa/-
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La caída del imperio de los Nule. (18 de julio de 2013). El Tiempo.com.


Recuperado de http://www.eltiempo.com/Multimedia/infografia/nule/

Jaimes, O, Márquez, Marlon. La corrupción y el fenómeno Nule. (s.f). Bogota

Hodess, R. (2004). ¿Qué es la corrupción política? Informe Global de


Corrupción. Transparencia Internacional.- 2004

Datos Transparencia Internacional. (2013). La entidad. Recuperado de:


https://www.transparency.org/

Escallón, D. (2014). Reacción del Estado colombiano frente al carrusel de la


contratación en Bogotá: ¿Eficacia o discurso? Revista de derecho público. N. °32.
Universidad de los Andes

Revista semana. (2010)


Forero, J. (2013). La 26: Morir para vivir. Publicaciones Universidad Sergio
Arboleda. Bogotá.

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