Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Son muchos los factores que pueden incidir en el conductor y que pueden ser causantes de un accidente. Entre ellos
cabe destacar el sueño, o la fatiga.
¿Qué es la Fatiga?
La fatiga se conoce como el agotamiento mental o corporal que ocurre como resultado de un trabajo o esfuerzo, el
cual esta relacionado con la duración e intensidad de una actividad o de un proceso mental.
¿Sabías que la fatiga es la causa del 30 por ciento de los accidentes
de nuestro país? La conducción puede ser un placer, pero, si no se
hace correctamente, puede llegar a resultar un peligro para nosotros y
los demás conductores.
Aunque se advierte de que todos los efectos mencionados anteriormente depende de la salud del conductor y de su
forma física, la fatiga es acumulativa "cuantas más horas se pasan al volante y si se toma medicación o se ha
tomado el vehículo estando ya cansado", el cansancio "es el principal problema" porque hace que la persona
"no se dé cuenta de que lo está".
La fatiga y somnolencia afecta varios de Esta grave situación radica generalmente en diversos factores, que
nuestros procesos internos, y van desde lo social hasta el personal. Las causas son
cognitivos, provocando la disminución multifactoriales y que van desde los problemas emocionales hasta la
sobre exigencia laboral, dependiendo de cada situación. “Desde que
de la atención, memoria, y percepción
nacemos tenemos un exceso de confianza, de sentido común, lo
cuando conducimos. cual nos genera a la vez un sentido de indestructibilidad, que se re-
fuerza con el paso de los años, lo cual nos lleva a creer que nunca nos pasará nada”.
El desgaste de los recursos internos de una persona por debajo de su umbral, implica diferencias individuales, ya
sea en la cantidad de recursos disponibles y en su distribución, en el momento en que aparecen las primeras
señales de fatiga. Una persona puede notar, por sus características individuales, el cansancio en un tiempo
determinado y sufrirá sus primeras consecuencias de una manera particular (más muscular, más psicológica, más
emocional). De igual modo, las circunstancias concretas de la persona en ese momento pueden influir y modular la
fatiga percibida.
Por ejemplo, un conductor de autobús puede notar cansancio a las tres horas, pero un día en que esté
especialmente motivado o alegre por una noticia personal, sus cuotas pueden aumentar cierto tiempo adicional.
Obviamente, nunca por encima de las cuotas habituales de los recursos cognitivos humanos.
Del mismo modo, este mismo conductor, un día en que esté desmotivado o en que haya sufrido, por ejemplo, un
problema familiar, notará antes el cansancio, puesto que cuenta con parte de sus recursos cognitivos mermados y
la distribución de los restantes no será tan eficaz.
Existen varias causas principales que afectan a los conductores al momento de efectuar la acción de conducción,
entres las cuales tenemos:
Horas de trabajos las cuales afectan el ritmo cardiaco de la persona (jornada laboral).
La conducción prolongada puede producir fatiga osteomuscular, visual y mental, tal y como cuando trabajas
con un computador, ya que tienes una fatiga visual que repercute en la espalda,
La afectación de enfermedades que impliquen el consumo de medicamentos de forma prescrita o de libre
venta que pueden causar somnolencia.
El consumo de algún tipo de droga o alcohol al momento de conducir.
Disturbios del sueño, apnea obstructiva del sueño (que resulta ser un problema crónico (constante) de salud
que altera el sueño).
Conducción larga la cual demanda poco esfuerzo causando el efecto de hipnosis de la autopista.
Mala visibilidad en la conducción.
Privación del sueño.
Control de la forma física y de la dieta.
Las preocupaciones diarias, los malos hábitos y en ciertos casos
trastornos físicos o psicológicos, contribuyen a un mal dormir.
Pero al otro día “no se puede parar” y hay que salir al trabajo,
tomar el vehículo y conducir. Según el último Informe elaborado
por la Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial, dos
(2) de cada 10 accidentes se pueden reducir si los conductores
se abstuvieran de conducir si tuvieran sensación de
somnolencia o hubieran dormido menos de 5 horas en las 24
horas precedentes.
A continuación, se presentan 3 recomendaciones para evitar la fatiga al
conducir:
Consideraciones Finales
La fatiga informa sobre la disminución de las capacidades de la persona para su vinculación con el entorno.
Constituye un aviso que, tomado a tiempo, puede evitar graves consecuencias.
Es vital que los conductores conozcan sus propios mecanismos de respuesta del cuerpo y desistan de manejar
cuando no se encuentran en las condiciones que exige dicha actividad. Cada viaje que se emprende, debe ser
camino a la vida y no a la muerte.