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Pobreza, policía y niño en

el surgimiento
de la escuela pública
en Colombia
ALBERTO MARTINEZ BOOM*

Este trabajo hace referencia al surgimiento de la escuela pública en Colombia


en el período 1750-1820. A partir de un ejercicio investigativo arqueológico y
genealógico, se expone la aparición de la escuela como acontecimiento único y
singular, el cual es atravesado por cuatro líneas de fuerza: la pobreza, la utilidad
pública, la noción de niño y las prácticas de policía. la pobreza cumple el papel
de dinamizadora y activadora de las prácticas de policía, estas a su vez
personifican el gobierno de la población; el niño, que es tanto objeto de
sensibilidad como objeto de control, y la utilidad pública relacionada con el
gobierno del Estado.
las hipótesis trabajadas permiten cuestionar algunas nociones como continui-
dad, origen, mentalidad, las cuales no sólo desde la opción teórica sino desde la
apuesta metodológica, sugieren rupturas con las evidencias que han situado la
aparición de la escuela como una constante histórica, resultado dé un natural
devenir de las prácticas eclesiásticas y familiares. De estas hipótesis se pueden
resaltar: la escuela es hija del azar más que de la necesidad; la escuela nace para
los pobres; la función de la escuela es de orden político y moral mas que de en-
señanza o educación; las máximas morales, las prácticas de policía, las formas
de vida en civilidad y la enseñanza para realizar oficios, son los primeros
objetos de saber en la naciente escuela; son los niños pobres -no la infancia en
general quienes se convierten en el objeto y centro de la escuela pública. Con lo
anterior, se observa cómo la escuela nace para controlar y gobernar antes que
para hacer circular un saber científico. Entonces, se hace necesario apoyarse en
un bagaje conceptual a modo de caja de herramientas que metodológicamente
dé cuenta de la complejidad del objeto que aquí se trabaja, entre éstas, la pro-
puesta de eventualización desarrollada por Michel Foucault.

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Hace doscientos años hacía aparición uno Si acaso tiene algún sentido y valor este
de los primeros maestros públicos en estos trabajo, se debe a que hoy la escuela
ámbitos llamado Agustín Joseph de Torres. todavía sigue vigente. Aún enseñamos en
Su emergencia, como quizás la de muchos ella y en ella matriculamos a nuestros
de los acontecimientos que nos atropellan, hijos e hijas, así la educación esté
casi nunca fue pensada. Sus características diseminada por los diversos espacios
claramente lo diferenciaban de quienes sociales (la ciudad, los medios). Mas
hasta ahora se habían dedicado a las debemos estar alerta: la escuela no
prácticas de enseñanza: religiosos y curas, permanece intacta; se le combate de un
preceptores particulares, artesanos. Este lado hablando de su desaparición con la
maestro, sujeto secular, realizaba la sociedad educadora, o se le defiende de
enseñanza públicamente, era vigilado por otro apoyándose en sustentar su
la burocracia virreinal y en ocasiones importancia para la sociedad, la nación, la
cobraba algún estipendio para su sustento o cultura y la economía.
a veces sólo velaba por pedir alguna parte
de éste.
Mi deseo es entonces retomar viejas
lecturas, aunque hoy, probablemente,
vendrán acompañadas de nuevos ries-
Paralela a esto, la situación de pobreza se gos. Haré un recuento que me permi-
problematizaba ya que no representaba ta tomar distancia, para proponer nue-
utilidad a la República, por lo que se vas conjeturas y, si es posible, llegar a
fueron configurando intentos por constituir otras reflexiones que a mi parecer
un espacio que recogiera, disciplinara y aportan nuevos visos de inteligibilidad
habilitara a los niños y niñas hijos e hijas a ese oscuro objeto que ha sido moti-
de la gente pobre. El hospicio será el que vo de tantas disputas.
inicialmente suponga esta tarea, que con el
tiempo se fue consolidando hasta devenir Desde aquel momento de inicio de mi trabajo
escuela. hasta hoy, se ha producido un cierto
desplazamiento que entraña consecuencias
de no poca importancia.
Maestro y escuela -siendo fuerzas dis- En principio, ese desplazamiento se
tanciadas la una de la otra- se cruzan en un podría expresar así: la escuela no surge como
momento que posibilita que estas dos un hecho educativo sino como
figuras se hagan visibles. La aparición del acontecimiento moral y político; si
maestro o maestra trae consigo la escuela, la ubicáramos en el orden educativo sería
y la aparición de la escuela hace visible al sólo a condición de entender lo
maestro público. Desde esa época aparece educativo como un conjunto de pautas
ese fenómeno complejo, problemático, que de comportamiento y disciplinamiento.
ha pasado por muchos avatares y que hoy
conocemos como escuela. A tono de lo anterior, diremos que la
aparición de la escuela pública en Co-

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lombia es el resultado del cruce de líneas de La escuela no surge como un he-
fuerza que coexisten, que se traslapan, que se cho educativo sino como un acon-
enfrentan y que finalmente, como resultado de tecimiento moral y político; si la
esta dinámica, terminan por configurar la
ubicáramos en el orden educativo
institución que se conocerá como escuela. Cuatro
son los ejes alrededor de los cuales actúan estas sería sólo a condición de enten-
fuerzas: la pobreza, las prácticas de policía, la fi- der lo educativo como un conjun-
gura del niño y la noción de utilidad pública. La to de pautas de comportamiento
pobreza cumple el papel de dinamizadora y disciplinamiento.
activadora de las prácticas de policía, éstas a su
vez personifican el gobierno de la población, el
niño que es tanto un sujeto de sensibilidad como ma importancia; de hecho, lo que se
un objeto de control y, finalmente, la utilidad evidencia, al menos en un primer mo-
pública relacionada íntimamente con el gobierno mento, es la existencia de un conjunto de
del Estado. prácticas de policía -más que de prácticas
educativas- que se concreta en la escuela.
En unos casos las líneas de fuerza actúan
como condiciones de posibilidad, y en De lo anterior podemos derivar las si-
otros como vectores que inducen y guientes hipótesis:
movilizan el que una idea, una práctica o
un aparataje discursivo pueda • La escuela, no es una constante histórica:
instalarse, recomponer, reconfigurar y es hija del azar más que de la necesidad.
también poner en marcha un aconte- Es el resultado de una ruptura de las
cimiento. Cuando nos referimos a evidencias del saber en una nueva función
condiciones de posibilidad, pensamos en teórico-política.
aquello que permite la emergencia de un
acontecimiento y de ningún • La escuela nace para los pobres. En
otro en su lugar, que lo sitúa además sus inicios, más que un lugar para
como algo aceptado, comprendido y ejercitar las "bellas artes de leer y es-
demandado socialmente. cribir” es un espacio de reclusión
donde a los niños y niñas recogidos
Nos encontramos ante este haz com- de la calle se les inculcan máximas
plejo de fuerzas cuya dinámica com- morales, se les imponen unas prácti-
promete poderes, instituciones, suje- cas de policía y se les forma en ofi-
tos y discursos. No podemos deslindar cios que les habiliten para ser útiles
estas instancias, pues hacen parte de a la República. En este sentido el
un mismo proceso. Mas no ocupan hospicio deviene en escuela. Como se
todas el mismo lugar, ni tienen la mis- desprende de lo anterior, la función
primera de la escuela es más de
orden político y moral que de ense-

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Son estos los cuatro aspectos sobre los
ñanza O de educación. Esto se expresaba, en cuales desarrollaré mi planteamiento, con
términos de la época, con la siguiente máxima: el propósito de exponer esta mirada nueva,
la escuela es el principal ramo de la policía. discontinua, contingente y, para algunos,
irreverente, frente a sus cuestionamientos
y frente a otras perspectivas que
• Las máximas morales, las prácticas de
posibiliten situar el ejercicio investigativo
policía, las formas de vida en civilidad y
en una construcción constante y en una
la enseñanza para realizar oficios, son los
oportunidad para desordenar las
primeros objetos
evidencias.

del saber en la naciente escuela. y no cabe


1. Eventualización de la escuela
duda de que se trata más de un saber
político y moral que de un saber que pública: ¿azar o necesidad?
pudiéramos llamar pedagógico. La escuela
entonces aparece como un acontecimiento
La institucionalización de las prácticas de
de saber, pero ante todo como un
enseñanza en que se expresan los sistemas
acontecimiento de poder.
educativos occidentales modernos -lo que
hoy conocemos como escuela- es un
• Finalmente, son los niños y niñas pobres - fenómeno tardío en las sociedades
no la infancia en general quienes se hispanoamericanas. Es necesario hacer un
convierten en el objeto y en el centro de la par de consideraciones preliminares que,
escuela pública, y todo gracias a que son aunque pudieran parecer obvias, en
más fáciles de gobernar y de dirigir, y que realidad no lo son: en primer lugar, no
es a ellos y a ellas a quienes se considera siempre hubo escuela en nuestras
necesario salvar. sociedades, y en segundo lugar, no
siempre la educación se realizó en
escuelas. Estas consideraciones nos dan
pie para hacer ciertas preguntas: ¿qué pasa
cuando emerge la escuela? ¿A qué tipo de
circunstancias espera dar respuesta? ¿Qué
nuevas prácticas instituye? ¿Cómo
funciona esa estrategia de poder que
atraviesa las prácticas existeñtes hasta
convertirse en algo regular, y luego se
institucionaliza?

Antes de la aparición de la escuela


como institución, la educación se
daba

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entre pares bajo la figura de "apren- sultante de un cruce específico de
der haciendo". Las relaciones no te- fuerzas; de ahí que más que indagar
nían nada de "ficticias", ya que el con- sobre su origen debemos preguntar-
texto del aprendiz era la misma reali- nos cómo funciona este enunciado,
dad del trabajo. La teoría y la práctica cómo se usa y cómo se convierte en
estaban integradas. La educación te- prácticas que se repiten.
nía matices diferentes en cada sector
de la sociedad: para las gentes princi- El problema a plantear es: ¿cómo se
pales la buena educación consistía en convierte la escuela en pieza central
moldear el comportamiento, adquirir del gobierno de la población? Pues si
ciertos modales o controlar las emo- se analiza en términos de continui-
ciones, mientras que para los artesa- dad, se legitima una relación causa-
nos la educación se circunscribía al efecto -la continuidad legitima-, mien-
1
aprendizaje de oficios. tras que la desmultiplicacíón causal
permite analizar el evento en función
La evangelización, instaurada desde la de los múltiples factores que lo cons-
época de la conquista, era una prácti- tituyen: más que como un efecto
ca de enseñanza pero no una práctica ideológico, se trata de analizar las
pedagógica institucionalizada. La edu- prácticas como "eventos" y no como
cación clandestina, la doméstica y los hechos institucionales. Es decir, exa-
estudios en la Universidad de Santo minar y descomponer los procesos
Tomás y en los Colegios Mayores, múltiples que lo constituyen y sus for-
eran más una práctica eclesiástica que mas de funcionamiento.
una práctica pedagógica escolarizada
como la conocemos hoy en día. En Por eso, considerar el surgimiento de
muchos casos se trataba de prácticas la escuela como un evento es la ma-
familiares y eclesiásticas que luego se- nera más útil de abordar su análisis;
rían tamizadas y recortadas con la es una forma de ruptura con la evi-
aparición de la escuela. dencia. Con la eventualizacíón es posi-
ble identificar las conexiones, los en-
La multiplicidad de fuerzas que inter- cuentros, los apoyos, los bloques, las
vienen en la aparición de la escuela relaciones de fuerza y las estrategias
pública muestra que el surgimiento de que en su momento formaron "lo que
ésta es complejo y que no es un luego funcionaría como evidencia,
resultado del natural devenir de las universalidad, necesidad".2
prácticas eclesiásticas y familiares.
La escuela no responde, pues, a un
La escuela se encuentra inscrita en proceso evolutivo que se inicie en las
un juego de continuidad-discontinui- prácticas educativas existentes (ecle-
dad. No es algo que haya sido confi- siásticas y familiares) y que derive en
gurado de antemano, y como tal no es una institución con la forma que hoy
evidente. Es un acontecimiento re- tiene. Al cuestionar su continuidad es-

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peramos "sacudir la quietud con la cual puesto que la ruptura de las evidencias
se le acepta" y mostrar que su aparición trae consecuencias políticas, es
no fue simplemente el fruto de un perfectamente válido entender a la es-
proceso evolutivo que le dio origen de cuela como instrumento de poder.
manera natural. Se trata de quitarle a este
surgimiento el carácter de evidente, para 2. La antigüedad de
reconocer que dista mucho de ser aquel la pobreza
lugar tranquilo a partir del cual se
pueden plantear otras cuestiones, como La pobreza ha tenido una gran capaci-
la aparición del maestro y la maestra, el dad de supervivencia. Quizás lo único
surgimiento del saber pedagógico, su que ha cambiado a lo largo del tiempo
estructura, su sistematicidad, y su es el discurso (es decir, el conjunto de
coherencia, entre otros aspectos. nociones y prácticas) que sobre ella se
ha hecho. Por ejemplo, en el siglo XVI
La pobreza se nos revela como el ele- los pobres estaban asociados a una
mento dinamizador en el proceso de cierta experiencia religiosa que los
surgimiento de la escuela. Para decirlo santificaba. El Cristianismo dio a la
en forma más concreta, la pobreza Beneficencia un verdadero espíritu re-
reorganiza, dispara y saca a flote la ligioso, considerando la limosna como
nueva problemática de la población, algo agradable a Dios, y haciendo de la
fenómeno social que era necesario caridad un fin en sí misma"3. La caridad
someter a régimen mediante pautas de es vista como un sentimiento natural
crianza e instrucción que hicieran "que el frío cálculo no puede contrariar
posible gobernar el alma y controlar el en el individuo". La más encomiable de
cuerpo. todas las formas de la Beneficencia "es
la caridad individual, nacida del
En nuestra cultura, la escuela aparece heroísmo, de la generosidad que
como un acontecimiento único -ini- considerando la Humanidad como una
cialmente producto del azar-, que pau- sola familia, se interesa por cualquiera
latinamente fue adquiriendo cierta co- de sus miembros".4
nexión estratégica con el problema de la
utilidad pública, el cual a su vez está A finales del siglo XVI, la Corona
ligado al de la gubernamentalidad. La española propone un plan para la funda-
realidad es que la escuela no siempre ha ción de hospicios y hospitales en las
sido algo evidente, no ha sido una Indias. En este plan se cobija "a rame-
constante histórica, y en este sentido ras, peregrinos y pobres para que sean
representa más bien una singularidad. socorridos y remediados".5 El plan
De hecho, al dar a la escuela pública dispone que "en todas partes y lugares
una nueva función teórico-política lo de las Indias a donde se erigiere iglesia
que se busca es crear una ruptura de las catedral o parrochial, en
evidencias del saber. Y

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el mismo lugar se erija, funde, cons- do directamente en la caridad y la cris-
truya y dotte hospital. Mandamos se les tiandad "para que los indios vivan en
de saber competente de lo realengo si lo concierto no dejándose morir sin curar
hubiese, de manera que en el se pueda del alma y el cuerpo".9
edificar altar y capilla a donde los pobres
tengan oratorio y habiendo capilla El hospital entonces se encuentra or-
puedan oír misa y se les puedan edificar ganizado para garantizar la salvación de
competentes enfermerías y oficinas y las almas, pero en él no es tan evidente el
habitaciones según la calidad del lugar y carácter médico. Es un lugar donde la
concurrencia que pareciere haber de enfermedad no es vista como un
pobres y que por tiempo pudiera haber" problema especial; un lugar de hospicio,
(Herraez de Escariche, 1949, p. 54). en el que se da asistencia y se practica la
caridad. Tanto el hospital como los
Se articulaban en un mismo lugar reli- hospicios están asociados a una acción
gión y caridad: el altar alIado del au- caritativa y de beneficencia para los
xilio. Así, por Cédula Real de julio de pobres.
1556 se ordena la creación de un hos-
pital en Santa Fe "en que haya dos
cuartos, uno para indios y otro para
españoles",6 y en el año de 1564 el 3. La pobreza: de la
primer arzobispo de Santa Fe otorga sensibilidad religiosa a la
"escritura pública ante el presidente sensibilidad social
don Andrés Díaz Venero de Leyva,
dando unas casas de su propiedad, Es importante precisar que la ociosidad
situadas en la calle de San Felipe, en no siempre estaba asociada a un problema
una de las cuales habitaba, para que de desempleo, así como la mendicidad no
se destinara a un hospital que se lla- se derivaba necesariamente de la falta de
mó de San Pedro"7 donde "sean cura- oportunidades de trabajo. Evidentemente,
dos los pobres enfermos y se ejercite en los períodos de epidemias, pestes,
la caridad cristiana".8 plagas y catástrofes económicas, las
hambrunas se generalizaban y la invasión
Este hospital tiene todas las caracteres- de miserables y vagabundos adquiría
ticas de un centro de reclusión para mayores proporciones. No se trata de
inválidos y enfermos en el que se equiparar la ociosidad con la mendicidad,
ejerce la caridad cristiana. Por su obje- pues esta última estaba relacionada con
to y por su funcionamiento, tanto este una cierta experiencia religiosa que la
hospital como el de San Lázaro en santificaba. Inscrita en la concepción de
Cartagena y los demás que se fundan la pobreza que tradicionalmente había
en el Virreinato hasta la primera mitad sostenido la Iglesia, a la miseria se le
del siglo XVIII, responden a un propó- reconocía una especie de dignidad
sito eclesiástico y espiritual entronca- asociada a la presencia de Dios.

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El problema de la pobreza, que en los
No obstante, los orientadores de la
siglos XVI y XVII había estado bajo el
Reforma Borbónica en España y en la
control de la "policía de las almas" con la
América Colonial, a fines del siglo XVIII
colaboración indirecta del Estado español,
y comienzos del siglo XIX, establecerían
adquiere a comienzos del siglo XVIII unas
una diferencia básica que consistiría en
dimensiones insospechadas. Las ciudades
darIe a la miseria un tratamiento marcada
se ven invadidas de pobres provenientes
mente distinto del que hasta entonces
del campo, y la pobreza se convierte en el
había recibido. Los miserables no fueron
centro de la problemática social. Familias
concebidos por ellos como un asunto
enteras de pobres viven en las ciudades
religioso asociado al ejercicio de la caridad
dedicadas a la mendicidad, la delin-
cristiana, sino como un "asunto de poli-
cuencia, la vagancia, la prostitución o
cía", y como tal debía recibir un nuevo
simplemente a la ociosidad total. Ello
tratamiento. En adelante la pobreza será
adquiría mayor significación si dicha masa
vista como un problema de policía que
de pobres estaba constituida por niños,
tiene que ver con el orden de los
niñas y jóvenes vagos y ociosos propensos
individuos en la ciudad.
a la pereza, situación considerada una
pandemia para la autoridad pública y para
Simultáneamente, se empieza a plantear el ejercicio de la policía. Todo en su
que la miseria tiene su origen en la conjunto era atribuido a la falta de trabajo
ignorancia, en la pereza y en la ociosidad, y de educación.
y se propone entonces como alternativa
social el encierro de los miserables en
Hasta entonces la pobreza había sido vista
hospicios y hospitales, los cuales habrán
como un asunto individual, esto es, como
de convertirse en lugares de trabajo y
el estado en que se encontraban ciertos
enseñanza.
individuos -los pobres, los miserables-.
Ahora se comienza a percibir como un
En numerosas fuentes aparecen refe-
problema social. Además de la gravedad
renciadas las denuncias de sujetos que
que se atribuye al problema, preocupa su
"vagan por las calles maleándose de mil
magnitud. Pero no es sólo esto. Los
maneras". En una memoria titulada
habitantes de las ciudades expresan su
"República que sufre mano ociosa está
rechazo a las hordas de miserables que las
achacosa"10 se advierte sobre la gravedad
inundan, y piden la adopción de medidas
de la ociosidad y sobre la proliferación de
para desterrarIos de las áreas urbanas. Las
mendigos en las calles de las ciudades, y
múltiples fuerzas que se entrecruzan en el
se anota que sus consecuencias, a juicio de
entramado social hacen que la reacción
las autoridades, son funestas y afectan la
frente a la pobreza tenga múltiples facetas.
moral. Afirma además la memoria que esta
Entre tanto se da inevitablemente una reor-
situación tiene consecuencias políticas que
ocasionan graves daños al Estado.

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1.

ganización del panorama social, mani- Limosneros capaces”, es decir, entre los
festada en la aparición de nuevos sectores verdaderos pobres y los pícaros que
sociales y en la desfiguración de otros, y pretenden figurar como pobres. Se toman
los problemas económicos del desempleo y medidas de orden práctico como el
falta de trabajo se ven agravados por el levantamiento de censos de mendigos y
surgimiento de calamidades sociales como enfermos, la reclusión de estos últimos en
las pestes y epidemias. hospitales, la fundación de casas de
misericordia, la creación de casas para
En 1791, Manuel del Socorro Rodríguez niños expósitos, la expedición de licencias
expone en su periódico la necesidad de para mendigar, y el establecimiento de
adelantar acciones que propicien la penas de flagelación y expulsión para
prosperidad y el florecimiento de la ociosos y mendigos disfrazados. Junto con
República, y para ello propone la creación estas medidas aparecen también numerosas
de hospicios en las cabezas de provincia. propuestas y planes para combatir la
En estos hospicios debería prevalecer la pobreza.
virtud, pues así
“alejarían los vicios de las ciudades, Se empieza a desacralizar la pobreza. Ha
acabándose los holgazanes, polilla llegado el momento de actuar frente a ella
destructora de la república, que se con medidas prácticas. Se trata, pues, de
amparaban en el hábito de pobres; se erradicar la ociosidad y de tomar decisiones
evitaría la mala crianza y [la} afemi- frente a la mendicidad y las medidas
nación de los jóvenes, se favorecía la consisten en encerrar a los pobres y a los
moral, fomentando las buenas cos- mendigos o en convertirlos en seres útiles
tumbres"11.

En medio de este escenario comienza a


surgir una nueva “sensibilidad” social, una
nueva forma de asumir la caridad cristiana,
que se manifiesta bajo las formas de
asistencia y filantropía.

Estos elementos, al entrecruzarse, dan


origen a un fenómeno político que genera
una serie de reacciones cuyo propósito es
poner fin al desorden social que ha traído
la miseria.

Son varias las tentativas estatales para


reducir el número de los pobres y para
acabar con la indiscriminación existente
hasta entonces “entre mendigos y

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para el trabajo a través de la ense- dad pública, pasaría a ser objeto de
ñanza de un oficio. La necesidad de control por parte de las autoridades.
unificar el ordenamiento laboral y A la luz de esta última consideración,
de dotar al trabajo de un papel claro durante el siglo XVI fueron creados
en la sociedad muestra el rumbo a los hospi- cios, que eran sitios en los
seguir en el caso de los pobres: cuales se esperaba controlar el
orientar su mente por el camino de abandono del que eran objeto los niños
la utilidad social. y niñas, y ejercer acciones que
disminuyeran las comunes prácticas
La pobreza se convierte así en un del infanticidio.
asunto público. El Estado protege la
pobreza, pero sobre todo la controla, De acuerdo con Vargas y Vera
pues ella es factor determinante en el (1987), en el Nuevo Reino de Grana-
gobierno de la población. Se da los hospicios aparecen como una
empieza entonces a concebir la po- estrategia:
breza como un elemento esencial
para garantizar el trabajo, pues -co- " .. .para resolver principalmente el
mo diría Marx- "si no hay pobres abandono de niños a mediados del
¿quién trabaja?". siglo XVIII, (y son) auspiciados por
las autoridades políticas y eclesiásti-
"Allí donde la propiedad está cas (...) La institución recogía,
suficientemente protegida, criaba y cuidaba por un tiempo a los
sería más fácil vivir sin dinero niños abandonados, [cuyo} destino
que sin pobres, pues ¿quién, si posterior se definía de acuerdo a su
estos no existiesen, ejecutaría posición social".
los trabajos? .. Aparte de que
son la cantera inagotable que No faltaron las críticas contra la figura
nutre las filas del ejército y la del hospicio. Se tildaba de irracional a
marina, sin ellos no habría esta alternativa por "los pocos
disfrute posible ni podrían beneficios que el Estado obtiene
explotarse los productos de un de la crianza de una población [los
país" (Marx, 1971, p. 519). niños} que sólo excepcionalmente
alcanza una edad en la que puede
devolver los gastos que ha
ocasionado" y por "la ausencia de
4. Los hospicios de una economía social".12 En general,
recogimiento las críticas sobre la atención a la
población infantil iban más allá, y
Tal como anotáramos en su momen- apuntaban a tres blancos concretos: la
to, la pobreza fue percibida inicial- crianza con nodrizas de los niños
mente como algo que movía a la ca- abandonados, la educación "artificial"
ridad. Más tarde, por considerarse de los niños ricos y, por supuesto, los
que se trataba de un asunto de utili- mismos hospicios.

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Sin embargo, es importante puntua- 5. Las prácticas de policía y el
lizar que aunque en el siglo XVIII se control de la población
da una aparente revalorización de las
tareas educativas como resultado de "¿Cómo? ¿Desde la época en que
un cambio en la imagen que se tiene os constituisteis, hasta hoy, no ha-
de la infancia, según Jacques Donzelot béis podido encontrar el secreto
(1979) lo que se implanta en verdad para obligar a todos los ricos a ha-
es: cer trabajar a todos los pobres?
Vosotros, pues, no tenéis ni los
primeros conocimientos de
policía."
" ... una reorganización de los com-
Voltaire
portamientos educativos en torno a
dos polos bien distintos y con dos
estrategias bien diferentes: el Como lo planteara Jacques Donzelot,
primero orientado hacia la difusión la policía no tenía el sentido represivo
de la medicina doméstica, es decir, que hoy tiene sino que correspondía a
un conjunto de conocimientos y una noción más amplia que englobaba
técnicas que deben permitir a las tanto el desarrollo de la población en la
clases burguesas sustraer a sus hijos ciudad como el poder central. "La
de la influencia negativa de los policía tiene como misiva asegurar el
domésticos [y] poner a éstos bajo la bienestar del Estado mediante la
vigilancia de los padres; el segundo sabiduría de sus reglamentos y
podría reagrupar, bajo la etiqueta de aumentar sus fuerzas tanto como sea
"economía socia/'; todas las formas capaz."13
de dirección de la vida de los pobres
con vistas a disminuir el coste social Las prácticas de policía se orientaban
de su reproducción [y] a obtener un a controlar la ociosidad y todo lo que
número deseable de trabajadores con generara pobreza en términos de go-
un mínimo de gasto público, en bierno y educación de la población. Al
resumen lo que se ha convenido en hablar de funciones de policía se deben
llamar filantropía" (p. 20). tener en cuenta todas aquellas ac-
tividades dirigidas a ejercer un control
político sobre la sociedad, lo que sig-
nifica que no sólo ejercían ese tipo de
funciones las autoridades directas rela-
De esta manera los hospicios, que en
cionadas con la Real Audiencia, sino
épocas anteriores habían sido los sitios
también los alguaciles,14 los corregido-
preferidos por las gentes dedicadas a la
res, los mayores de Corte, los subte-
ociosidad, vienen a convertirse en
nientes, los ministros de vara,15 los al-
lugares de ocupación y de instrucción
caides de las cárceles de Corte, los
en asuntos de policía relacionados con
pregoneros, los verdugos y los padres
el problema de la utilidad pública.
de menores.

33
En 1793, Francisco José de Caldas se de su educación, de su vestido y ali-
desempeñaba como Padre General de mentos" (p.15).
Menores de la ciudad de Popayán, es decir,
tenía específicamente funciones de policía, Para ese momento, el simple hecho de
cargo que existía desde hacía algunos años. recoger a los pobres y asegurar su encierro
En tal condición presentó una propuesta al ha dejado de ser una alternativa válida para
Gobernador y Comandante de la jurisdicción resolver el problema de la ociosidad; sólo la
sobre el mejor modo de cumplir con los pro- enseñanza podrá transformar "los brazos
pósitos definidos para su cargo. Inicia Caldas ociosos" en elementos útiles a la República.
(1910) su argumentación señalando que: Pero para alcanzar este objetivo hay que
vencer algunos obstáculos, el principal de los
"No pudiendo el Padre General de cuales es, según Caldas, el poco rigor que
Menores, sin gran dolor y sentimiento de ponen las madres en la educación de sus
su corazón, ver tantos jóvenes de ambos hijos.
sexos entregados a la ociosidad, madre
verdadera y origen fecundo de todos los La educación de los hijos es un asunto de
vicios, ya sea por indolencia o descuido inocultable importancia, y es necesaria la
de sus padres, o ya en fin por no tener intervención del Estado para asegurarla. A
una mano robusta que los dirija en sus este respecto, Caldas expresa lo siguiente:
primeros años, ha juzgado por muy útil a
la Religión, al Estado y al cumplimiento "Para que pueda subsistir la educación
de su oficio hacer presente a la paternal del joven contra los esfuerzos de las
benignidad de Vuestra Señoría un medio madres y [las} pasiones de los hijos ...
seguro para ocurrir a estos es necesario que ... se niegue toda
inconvenientes y daños que experi- protección, separar/os del todo de las
mentamos con dolor”(p. 1). madres, parientes y deudos para
impedir de este modo los disgustos
Ante esta situación sólo ve un medio para que se podrán ocasionar a los
"impedir los tristes progresos que hace maestros" (p. 16).
cada día la pereza"16 y este medio no es
otro sino: Las diferencias entre este discurso y el
que le había precedido son múltiples. Todas
" ... entregar a aquellos jóvenes y giran sobre un mismo eje: las mismas prác-
niños que todavía se hallan en su ticas, los mismos individuos, las mismas
minoridad. o. a los maestros y arte- instituciones, sólo que ahora funcionan
sanos honrados, escriturados de tal bajo un nuevo ordenamiento.
modo que éstos se constituyen en
verdaderos padres de sus discípulos La limosna, aunque continúa vigente

y aprendices, teniendo el cuidado como práctica, se centraliza en ma-

34
nos del Estado, buscando con ello Las máximas morales, las prácticas
orientarla hacia unos fines concretos y al de Policía, las formas de vida en ci-
logro de una utilidad específica. El rol
vilidad y la enseñanza para realizar
social de los curas, los obispos, los nobles,
los artesanos y los mendigos no se altera, oficios, son los primeros objetos del
pero ahora su organización y su actuación saber naciente escuela. Y no cabe
se dan en un nuevo contexto y en procura duda de que se trata más de un saber
de un objetivo común: el establecimiento político y moral que de un saber que
de un "reino industrioso". El hospicio y el pudiéramos llamar pedagógico. La
hospital como instituciones anteriores, pero
escuela entonces aparece como un
ahora articuladas a la vida productiva o a la
utilidad pública, desterrando la acontecimiento de saber, pero ante
holgazanería y exterminando "Ias malas todo como un acontecimiento poder.
costumbres y resabios" contrarios a los
preceptos de la religión y a la felicidad
pública. La nueva estrategia coloca al mas de tratamiento que hacen del niño o
trabajo como la mejor manera de honrar a niña el epicentro y el objeto no tanto del
Dios. saber como de la disciplina y el
encauzamiento. La enseñanza se centrará
entonces en la religión, en los oficios y en
6. Del hospicio a la escuela la vida en policía, y será vista desde la
pública óptica de la utilidad pública en la medida
en que el rescate de lo público se considera
Se trataba entonces de conjugar disci- una función fundamental del Estado. De
plinamiento y trabajo. No era suficiente esta experiencia surgirán las primeras
recoger y encerrar a mendigos y va- manifestaciones de lo que más tarde se
gabundos, ni bastaba con abrir nuevos conocerá como la escuela pública. Este es
hospicios. Éstos ya no cumplían, como el surgimiento de la escuela, sin un origen
lugares destinados exclusivamente a tan solemne como se le ha pensado.
albergar a los pobres, una función social.
Era necesario dar al encierro una nueva
utilidad, y para ello el hospicio habría de La escuela tiende a generalizarse como la
ser utilizado como taller-escuela en el que institución mediante la cual se somete a los
se vincularan la enseñanza y el trabajo. sectores pobres a una disciplina policial.
En efecto, más que una institución pensada
Cuando los pobres son encerrados para brindar educación o impartir conoci-
-y con mayor razón si se trata de niños mientos o ilustración, la escuela fue, en sus
o niñas pobres-, aparecen nuevas for- comienzos, un lugar para reformar las

35
costumbres y asegurar amoldamiento 7. Vagos, ociosos ... y
del individuo. ahora útiles

La pobreza, y sobre todo la existencia


Lo que planteo es que el hospicio de-
de pobres en las calles, genera un evi-
viene en forma de escuela a través de
dente malestar social. Es necesario
los mecanismos de disciplinamiento
poner orden a esta situación, y parte de
del cuerpo y temporalización del
ello es asignarle una función a la
espacio escolar, en un cruce continuo
pobreza. Es decir, sólo adquiere reali-
de fuerzas, con la instauración de
dad y valor de problema en esta di-
saberes específicos y la creación de un
mensión social, en el seno de una cul-
nuevo sujeto que es más sujeto de
tura que la reconoce como tal, según lo
virtudes que sujeto de saber. En este
evidencia De Murcia (1978) en Dis-
caso, la educación como objeto
curso político sobre la importancia y
público crea un campo de
necesidad de hospicios, casas de ex-
intervención que se refiere a un
pósitos y hospitales:
conjunto de prácticas dirigidas al
sometimiento de los pobres y las
"Se reconoce el valor de la útil ins-
pobres, prácticas muy distintas de lo
trucción de un muy crecido número
que hoy conocemos como educación
de niños ( ... ) que criándose desvali-
o instrucción. En ese sentido la
dos y ociosos se pierden y pierden a
educación era un objeto único de be-
otros de la corrección y aplicación
neficio social necesario para "el go-
de los mendigos válidos que son
bierno de las naciones"17 o para "la
peste de los pueblos y finalmente de
mejora de las costumbres, la prosperi-
varios objetos de la mayor utilidad y
dad pública y el bien y la gloria de
necesidad del Estado" (p. 1).
Dios y el Rey".18

Pero la escuela no sólo habrá de ser


La población pobre se asume como fin
un instrumento para controlar a los
último del gobierno, sujeto de ne-
pobres; también será utilizada para
cesidad y objeto de intervención,
prevenir o contener los
creándose la exigencia de su protec-
levantamientos de las gentes del
ción y otras necesidades que deben ser
común que expresaban su rechazo a
atendidas por el Estado. Para controlar
las medidas económicas y políticas
la población surgen, entonces,
adoptadas por la Corona Española. No
instituciones intermediarias como la
es coincidencia
escuela, que permitan su adecuado
que, según sabemos hoy, el 90% de
gobierno, y se combinan y entrecruzan
los planes de escuela entre 1750 y
las instancias de control y gobierno.
1820 hayan sido elaborados por los
Así la familia gobierna a los hijos e
curas de las poblaciones donde se ha-
hijas en la casa mientras la escuela
bía originado la revuelta comunera,
gobierna a quienes no tienen hogar
como Socorro y Girón en Santander, o
por causa de la desintegración, la des-
Lenguasaque en Boyacá.

36
composición o el desajuste. De este modo Con la escuela pública lo que aparece es
se empiezan a establecer estas relaciones una nueva regularidad en la que se dibuja
entre la familia, el Estado, la iglesia y la con trazos cada vez más firmes una
escuela, tratando diferenciadamente a la política de carácter totalizador para el
población, según sean vagos, expósitos o recogimiento de niños y niñas pobres,
revoltosos. encerrando sus vidas en ocupaciones y
oficios con los cuales se pretende desterrar
La nueva valoración que posee la miseria sus "libres costumbres"; corregirlos para
la empieza a despojar de cualquier acostumbrarlos a vivir en policía. Esta
solución sentimental y la ubica en un regularidad no elimina ni sustituye las
terreno enteramente práctico con efectos otras prácticas y formas educativas.
económicos y sociales, estableciendo otras
relaciones entre la familia, el Estado, la Como la escuela se constituye en un
Iglesia y la población. problema de gobierno, lo que le compete
en realidad no es educar ... a menos que
"educar" sea modelar el cuerpo y el alma
(prácticas comúnmente denominadas de
8. La escuela no es un lugar
policía, de disciplinamiento). Es decir, la
para ilustrar sino escuela tiene poco que ver con el
fundamentalmente conocimiento; instituye unas formas de
para corregir regulación del tiempo y el espacio que
determinan el tipo de prácticas que se
Si bien es cierto que la escuela neo- realizan (ejercicios basados en la
granadina tomó prestados algunos rasgos repetición, en lo consuetudinario) y que
de la escuela europea, su cristalización se dan una importancia capital al
dio entre nosotros de un modo muy cumplimiento del horario. Con ello se
singular. Los planteamientos de Julia ratifica que en sus comienzos la escuela no
Varela19 sobre el surgimiento de la escuela tuvo como tarea fundamental la educación,
como el paso de las armas a las letras el conocimiento o la ilustración de los
serían válidos para España y otros países individuos sino el amoldamiento de los
europeos, pero carecen de aplicación en el pobres -y especialmente de los niños y
Nuevo Reino de Granada. El tránsito entre niñas pobres-o Con el tiempo, este proceso
las armas y las letras no se da entre noso- tenderá a generalizarse a sectores cada vez
tros. La escuela neogranadina pone su más extensos de la población.
acento en la enseñanza religiosa, en la
civilidad y en el disciplinamiento de la La escuela regula las prácticas para
población a través de las prácticas de crear hábitos en los individuos dentro de
policía o en la enseñanza de oficios a pesar los cuales 'unos saberes' pudieron haber
de que la escuela es ya una institución en sido utilizados no por su finalidad
el orden del Estado y no de conocimiento, sino por el ejer-
de la religión.

37
cicio del disciplinamiento (un ejemplo En cierto momento, la primera edad es
de esto es la elaboración de planas). considerada como la más propicia para
En un principio no se piensa como un instruir y ejercitar a los niños y niñas
saber en sí mismo, aunque ese es el en el desarrollo de la memoria, en la
germen del saber pedagógico: las obediencia, en la adquisición de
prácticas de policía se convierten en el patrones de conducta y en general en
saber pedagógico. Este marco ilustra los comportamientos que se relacionan
claramente el surgimiento de un saber con la virtud y el gobierno. Para
que tiene que ver con la instauración conocer las razones precisas que
de prácticas de policía que luego devi- despiertan el interés por el niño y la
nieron enseñanza de primeras letras. niña, y sobre todo por la manera como
se les debe gobernar, puede servimos
un texto del clérigo Juan Bonifacio:
"Los niños son muy fáciles de
gobernar. Yo no sé cómo hay quien
9. El niño o niña: sujeto de diga lo contrario. Por lo mismo que
son tan impresionables, se puede hacer
necesidad y objeto de
de ellos lo que se quiera".20
intervención

¿Cuándo y a raíz de qué cuestiones se


descubre el papel de los niños y las ni- En el siglo XVIII, un autor que goza
ñas en la sociedad y en la escuela? de gran prestigio, conocido como Mr.
Locke (1767), afirma:

"Apenas se encontrará un hombre tan


de cortas luces que no esté per-
Las prácticas de intervención dan
fectamente convencido de la necesidad
origen a un saber que convoca y que tenemos de dar una educación a
valida en forma sistemática las di- los niños para ayudarlas a salir del
versas formas de intervención, pro- estado de incapacidad y torpeza en que
tección y moldeamiento del niño y la debilidad de la infancia los tiene
la niña, lo que luego recibirá el largo tiempo sumergidos (. . .) Las
menores y más sensibles impresiones
nombre de saber pedagógico y que
que recibimos en nuestra tierna
recoge el conjunto de métodos y
infancia son de una consecuencia
estrategias para guiar, dirigir y importantísima y de una larga
controlar al niño o niña “desde su duración" (p. xxvii).
más tierna edad”. Este saber se re-
Una vez conocidas las poderosas razo-
fiere a ejercicios y prácticas que
nes "naturales", morales y políticas
pueden ser encuadradas, homoge-
que han servido de argumento para
neizadas, con el fin último de vol- resaltar la importancia y la necesidad
verlos útiles al Estado. de comenzar en los primeros años la
acción de adoctrinamiento y adiestra-

38
miento, surge la pregunta insoslayable: deamiento que se ejercen sobre el niño
¿a quién corresponde su ejecución? o la niña (crianza, protección, ins-
Este "descubrimiento" y esta ve- trucción, educación, adoctrinamiento)
rificación de su importancia -y por tan- precisando quién está llamado a apli-
to la necesidad de intervención- res- carlas (la familia, la escuela, la
ponden a diversas corrientes que, pese iglesia), a quiénes corresponde
a todo, tienen cierta semejanza entre sí ejecutarlas (a los padres y madres, a
y que tienen que ver con el orden los maestros, al cura) y cuáles son los
moral (gobierno del alma), con el instrumentos a través de los que se
orden psicológico (control de las emo- debe hacer tal intervención. De esta
ciones), con el orden de gobierno (el forma, los padres y madres pondrán el
ser humano como sujeto civil) y con el acento en la crianza y en el cuidado
orden religioso (el individuo como su- del cuerpo, los maestros y maestras en
jeto piadoso y virtuoso). Se trata de un la obediencia y en la rutinización de
"ataque" a los niños y niñas desde di- las prácticas, y los curas y monjas en
ferentes frentes, cada uno de los cuales el desarrollo de las cualidades morales
se aborda de diferente manera. y religiosas. Las intervenciones se
realizarán con instrumentos y
Así, en el orden psicológico podrían mecanismos diversos: relatos de vidas
citarse los discursos de Huarte de San de pastores, cartillas, ejercicios y
Juan21 sobre los cuatro estados de la lectura del Catecismo, entre otros,
mente y la relación entre la infancia y pero también con castigos, reglazos y
el ingenio para las ciencias. El citado planas.
autor afirmaba que "había de haber
diputados en las Repúblicas, hombres Las prácticas de intervención dan ori-
de gran prudencia y saber, que en la gen a un saber que convoca y valida
tierna edad descubriesen a cada uno su en forma sistemática las diversas for-
ingenio, haciéndole estudiar por fuerza mas de intervención, protección y
la ciencia que le convenía y no dejarlo moldea miento del niño y la niña, lo
a su elección".22 que luego recibirá el nombre de saber
pedagógico y que recoge el conjunto
Con relación a la virtud, el discurso de de métodos y estrategias para guiar,
Juan Luis Vives23 giró en torno a una dirigir y controlar al niño o niña
serie de valoraciones y experiencias "desde su más tierna edad". Este saber
sobre la imagen de los niños y niñas, se refiere a ejercicios y prácticas que
pero serían los planteamientos de Juan pueden ser encuadradas, homo-
Jacobo Rousseau los que habrían de geneizadas, con el fin último de vol-
transformar las prácticas de su crianza verlos útiles al Estado.
y educación.

Se trata, en fin, de determinar el tipo De las circunstancias anteriores se


de prácticas de intervención y de mol- desprenden otras formas de reconoci-
miento de distinto tipo de infancia, al
igual que formas diversas (que en al-

39
gunos casos se combinan) de intervención y Determinar el surgimiento y aparición de
dirección. Es lo que Varela denomina infancia la escuela desde esta óptica nos permite
diferenciada. Para el caso del Nuevo Reino de despojarla de la pompa y la solemnidad
Granada, esta diferenciación se presenta del la con las que ha sido revestida, y nos guía
siguiente manera: el niño o niña pobre se asocia en la búsqueda de su auténtica desnudez.
con los hospicios que luego devienen en escuela Hoy, 200 años después de que la escuela
pública, mientras el hijo o hija de benemérito o se ha generalizado, todavía se escuchan las
del principal, cuenta con una educación voces que catalogan a la educación y a la
impartida a través de ayos o de preceptores escuela como alternativas frente a la
particulares. pobreza.

El hecho de que en sus orígenes la es- Intentar una reseña histórica de los
cuela haya estado desprovista de la avatares de la escuela desde esta pers-
pompa propia del poder, según hemos pectiva, sin hacer de la historia un objeto
visto en este examen, no quiere decir progresivamente mejor conocido, entraña
que haya permanecido impoluta o negarse a la complicidad de una historia
que no pueda tomar posteriormente otro hecha sobre el registro del progreso, que
sentido, tal como lo plantea Deleuze enmascara los horrores como errores, que
leyendo a Nietzsche: "( ... ) La historia simula aprender cada día más en dirección
de una cosa es la sucesión de las hacia el mejor de los mundos posibles y,
fuerzas que se apoderan de ella, y la en fin, que achaca a la equivocación o a
coexistencia de las fuerzas que lu- algún tipo de carencia lo que hoy
chan por conseguirla".24 podríamos llamar formas positivas de
conciencia y comportamiento.

40
NOTAS do de la enseñanza; El socorro de los po-
bres y El tratado del alma.
1. Foucault, Michel. Mesa redonda del 20 de mayo 24. Deleuze, Gilles, Nietzsche y la filosofía, p.1 O.
de 1978. En: La imposible Prisión: debate con
Michel Foucault, p. 61.
2. Ibídem.
3. Herráez de Escariche, Julia. Beneficencia de BIBLIOGRAFíA
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4. Ibíd. p. 11. mación, julio 1919.
5. Ibíd. p. 54. De Murcia, P., Discurso político sobre la impor-
6. Ibíd. p. 35. tancia y necesidad de hospicios, casas de
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8. Ibídem.
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9. Citado en Herráez, Julia, op. cit., p. 56.
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Michel Foucault, Barcelona, Anagrama, 1982
La educación en la España Contemporánea.
(Traducción: J. Jordá.)
Sociedad española de Pedagogía, Madrid,
Hérraez de Escariche, J., Beneficencia de España
1985.p.17
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13. Ibíd. p. 10.
prenta de Manuel Álvarez, 1767.
14. El alguacil mayor de la Corte tenía como
Martínez, A., Escueta, Maestro y Método en la
función principal el cobro de deudas en dinero y
sociedad colonial, Bogotá, Universidad Pe-
en especie, lo mismo que la entrega de reos a
dagógica Nacional, 1983.
prisión; era el encargado de la aplicación de la
Marx, K., El Capital, México, Fondo de Cultura
justicia, lo que significaba aplicar penas
Económica, 1971.
corporales e incluso realizar la ejecución en la
Olmedo, F., Juan Bonifacio (1538-1606) y la
horca.
cultura literaria del Siglo de Oro, Madrid,
15. Se designaban como ministros de vara a los
1939, 2da edición.
alguaciles, quienes entre otras funciones tenían
Rodríguez, M., Papel periódico de Santa Fe de
la misión de aprehender a los esclavos
Bogotá, mayo 6 de 1791 / enero 27 de 1792.
fugitivos, recoger a los vagos y desocupados y
Soriano Lieras, A., Crónica del Hospital de San
a los muchachos que se dedicaban a los juegos
Juan de Dios 1564-1869, Bogotá, Italgraf,
de azar y que tenían menos de diez años de
1964.
edad.
Sureda, B., La educación en la España Contem-
16.lbídem.
poránea, Madrid, Sociedad Española de Pe-
17. Martínez Boom, Alberto, Escuela, maestro y
dagogía, 1985.
método en la sociedad colonial.
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18. Archivo Eclesiástico de Popayán. Libro G-7.
la Contrarreforma, Barcelona, La Piqueta,
(Sin foliación).
1983.
19. Varela, Julia., "De las armas a las letras".
Vargas J. & Vera, G., Formas asistenciales y bene-
Capítulo l. En: Modos de Educación en la
ficencias en Santa Fe, Bogotá, Congreso Na-
España de la Contrarreforma, pp. 26-27.
cional de Historia, 1987.
20. Véase: Olmedo, F. G., Juan Bonifacio (1538-
Vives, J., El socorro de los pobres, Flandes, Edi-
1606) Y la cultura literaria del Siglo de Oro,
ción de la Lectura, 1926.
pp.102 y ss.
Vives, J., El tratado de la enseñanza, Madrid,
21. Huarte de San Juan, Juan. Examen de inge-
Edición de la Lectura, 1923.
nios para las ciencias.
Vives, J., El tratado del alma, Madrid, Edición de la
22. Ibíd. p. 61.
Lectura, 1922.
23. Juan Luis Vives: humanista español nacido en
Valencia en 1492 y fallecido en 1540. Sus obras
destacadas en educación son: El trata-

41
2.

* Ingeniero (Universidad Distrital "Francisco José de Interinstitucional en educación (UPN, Univer-


Caldas", Colombia); magíster en Investigación sidad del Valle, Universidad Distrital Francisco
Socio-Educativa (Universidad Pedagógica José de Caldas). Es director del CIUP en el
Nacional, Colombia). Doctor en Filosofía y Programa Institucional Desarrollo y Fortaleci-
Ciencias de la Educación. Historia de la Educa- miento de la Investigación (UPN). La última
ción y Educación Comparada (UNED, España). investigación realizada es "De la escuela ex-
Actualmente es Jefe de la Dirección de Gestión pansiva a la escuela competitiva: dos modos de
de Proyectos C1UP-Universidad Pedagógica modernización educativa en América Latina",
Nacional (Colombia). También se desempeña publicada en Barcelona (2004).
como profesor-investigador del doctorado Correo electrónico: almarboom@yahoo.com

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