Vous êtes sur la page 1sur 335

Acerca de este libro

Esta es una copia digital de un libro que, durante generaciones, se ha conservado en las estanterías de una biblioteca, hasta que Google ha decidido
escanearlo como parte de un proyecto que pretende que sea posible descubrir en línea libros de todo el mundo.
Ha sobrevivido tantos años como para que los derechos de autor hayan expirado y el libro pase a ser de dominio público. El que un libro sea de
dominio público significa que nunca ha estado protegido por derechos de autor, o bien que el período legal de estos derechos ya ha expirado. Es
posible que una misma obra sea de dominio público en unos países y, sin embargo, no lo sea en otros. Los libros de dominio público son nuestras
puertas hacia el pasado, suponen un patrimonio histórico, cultural y de conocimientos que, a menudo, resulta difícil de descubrir.
Todas las anotaciones, marcas y otras señales en los márgenes que estén presentes en el volumen original aparecerán también en este archivo como
testimonio del largo viaje que el libro ha recorrido desde el editor hasta la biblioteca y, finalmente, hasta usted.

Normas de uso

Google se enorgullece de poder colaborar con distintas bibliotecas para digitalizar los materiales de dominio público a fin de hacerlos accesibles
a todo el mundo. Los libros de dominio público son patrimonio de todos, nosotros somos sus humildes guardianes. No obstante, se trata de un
trabajo caro. Por este motivo, y para poder ofrecer este recurso, hemos tomado medidas para evitar que se produzca un abuso por parte de terceros
con fines comerciales, y hemos incluido restricciones técnicas sobre las solicitudes automatizadas.
Asimismo, le pedimos que:

+ Haga un uso exclusivamente no comercial de estos archivos Hemos diseñado la Búsqueda de libros de Google para el uso de particulares;
como tal, le pedimos que utilice estos archivos con fines personales, y no comerciales.
+ No envíe solicitudes automatizadas Por favor, no envíe solicitudes automatizadas de ningún tipo al sistema de Google. Si está llevando a
cabo una investigación sobre traducción automática, reconocimiento óptico de caracteres u otros campos para los que resulte útil disfrutar
de acceso a una gran cantidad de texto, por favor, envíenos un mensaje. Fomentamos el uso de materiales de dominio público con estos
propósitos y seguro que podremos ayudarle.
+ Conserve la atribución La filigrana de Google que verá en todos los archivos es fundamental para informar a los usuarios sobre este proyecto
y ayudarles a encontrar materiales adicionales en la Búsqueda de libros de Google. Por favor, no la elimine.
+ Manténgase siempre dentro de la legalidad Sea cual sea el uso que haga de estos materiales, recuerde que es responsable de asegurarse de
que todo lo que hace es legal. No dé por sentado que, por el hecho de que una obra se considere de dominio público para los usuarios de
los Estados Unidos, lo será también para los usuarios de otros países. La legislación sobre derechos de autor varía de un país a otro, y no
podemos facilitar información sobre si está permitido un uso específico de algún libro. Por favor, no suponga que la aparición de un libro en
nuestro programa significa que se puede utilizar de igual manera en todo el mundo. La responsabilidad ante la infracción de los derechos de
autor puede ser muy grave.

Acerca de la Búsqueda de libros de Google

El objetivo de Google consiste en organizar información procedente de todo el mundo y hacerla accesible y útil de forma universal. El programa de
Búsqueda de libros de Google ayuda a los lectores a descubrir los libros de todo el mundo a la vez que ayuda a autores y editores a llegar a nuevas
audiencias. Podrá realizar búsquedas en el texto completo de este libro en la web, en la página http://books.google.com
4
!Í"J>¿?"í

<

Y
\J A
fíe
Jhpoá

~Hrhr-£
,(í
>*
Y~
LIBRO TERCERO liftbj
DE LA GEOGRAFÍA fo í
DE ESTRABON,
QUE COMPREHENDE UN TRATADO
SOBRE ESPAÑA ANTIGUA.
TRADUCIDO DEL LATIN ¿™ %Oto

POR DON JUAN LO VEZ,


Geógrafo Pensionista de S. M.,
Individuo de la Real Academia de Bue
nas Letras de Sevilla , y de las Socie
dades Vascongaday de Asturias*

MADRID MDCCLXXXVII.
Por la Viuda de Ibarra , Hijos , y Compañía.
Con las licencias necesarias.
5* ♦
AL EX «° SEÑOR
„ DON JOSEPH MONINO,
CONDE DE FLORIDABLANCA,
CABALLERO GRAN CRUZ DE LA REAL
ORDEN DE CARLOS TERCERO , CONSEJERO
X>E ESTADO DE S.Jf.. SU PRIMER SECRE
TARIO DE ESTADO Y BEL DESPACHO , SU
PERINTENDENTE GENERAL DE CORREOS
TERRESTRES Y MARITIMOS , DÉ LAS POS
TAS. Y RENTAS DE ESTAFETAS EN ESPAÑA
Y LAS INDIAS , Y DE LOS CAMINOS DE ES
TAÑA : ENCARGADO INTERINAMENTE DE
XrA SECRETARÍA DE ESTADO Y DEL DES-
TACHO DE GRACIA Y JUSTICIA , Y DE LA
. SUPERINTENDENCIA DE LOS PÓSITOS
DEL REYNO.

SEÑOR.

JOjI a¿
tgrado , con que V. E.
recibe las producciones de los
que se aplican , y szi acogi
miento , en favor de los mis*
mos , me estimulan d ofre*
cer d V. E. este Libro ter
cero de /<£_ Geografía de Es-i
trabon , traducido al Caste
llano , con muchas notas , y
con un Mapa general de Es
paña antigua. Bien sabe V. E.
lo difícil que es una buena
version. No pretendo con este
motivo alabar el tal qual mé
rito de la presente ; solo sí
hacer ver , que he procurado
ceñirme al dicho de Terenció*
quando non potest fieri quod
vis , velis id quod possis. Tam
poco presento d V. E. esta,
obrita por creerla perfecta*
ni para que boceo > de. su nom
bre y carácter se encubran
mis errores ; sino para dar
d V. E. una breve demostra-
cion de que procuro aprove
char el tiempo. Dígnese V. E.
de dar aliento ¿mis tareas,
y admitir mi buena volun
tad j disimulando sus defec
tos. -' r
Dios conserve la impor-
T^

tante vida de V. E. muchos


años , para que con su influ-
xo puedan lograr entre noso*
tros las Artes y las Cien-
cías útiles el aumento corres
pondiente, Madrid y Mayo j>
de i/8/.
i .''-.'.- , . v,

EX."° SEÑOR.

B. L. M de V. E.
su mas atento servidor

Juan Lopez.
I
PRÓLOGO DEL TRADUCTOR.

%-^on quanta justicia han elogia


do siempre á Estrabon , lo conocerá
aquél que registre la Geografía ; pues
en ella se advierten muchos rasgos de
Filósofo y Matemático. Además del
comun aprecio que ha tenido en di
versas ocasiones qualquiera testimonio
de su obra , la variedad de ediciones
que han hecho , unas con solo el tex
to Griego , otras en Latin , y algunas
de ambos modos , son una prueba cla
ra de como le han recibido entre to
dos los sabios de la tierra. Hallában
se manuscritos sus diez y siete libros
Geográficos en la Librería de Vicen
te Grimán , pero de mejor letra en
las de San Juan y San Pablo de Ve-
necia , y en la del Cardenal Besa-
rion , con otro intitulado : Descrip
cion de la Tierra , segun Thomasino,
Bibliotheca Venetae , pág. 27. 42. Im
primieron tambien á Estrabon Con
rado Suneyheim y Amoldo Panvartz
a2 ó
ó Ponnaratz, en fol. , año de 1470
ó poco ántes , como consta de la Car
ta á Sixto IV que está en el tomo
quinto de la Glosa de Nicolás de
Lira. Guarino Veronés puso los diez
libros primeros en Latin , y se pu
blicaron en fol. año de 1480 {Venet.
Ex Beugbem. Incunabul. Typogr.) , y
despues en 1502. Bartolomé de Za-
nis los reimprimió en 1511 (Ex Jo-
siae SimJeri Epitome Gesner.). Alano
siguiente Gregorio Trifernate tradu-
xo los siete libros últimos , que sa
lieron á luz en Paris con los del Gua
rino. Año de 1516 publicó Aldo en
Venecia un Estrabon Griego , fol.
Conrado Herebasch reconoció la tra
duccion de Guarino Veronés y Gre
gorio Trifernate , imprimiéndola en
Basiléa con una vida de Estrabon,
años de 1 523 y 1 539 tambien en fol.
Gerónimo Gemuséo y Enrique Gla-
reano hicieron muchas emiendas de
las versiones antecedentes. Juan Har-
tungo prosiguió el mismo estudio.
Marcos Hoppero , Basilense , cotejó
es-
estas correcciones con el original de
Aldo Manucio , dando á luz su edicion
Griega y Latina en 1 549 fol. y año de
1557. Dicho texto Latino se reimpri
mió solo en dos tomitos Lugduni, apud
GabrielemCoterium, 1559, y en Amster-
dam , año 1652 [Apud Joan. Jansson.
jfuniorem'.in 12.). Alfonso de Bonaccio-
li traduxoáEstrabonenltaliano, 1561,
4: 1562,4: 1 589, 4: dos tomos ra
rísimos. Federico Morell y Jacobo Pal-
merio escribieron varias notas. Gui
llermo Xylandro hizo una buena tra
duccion Greco-Latina , añadiendo ta
blas y anotaciones Gramaticales en
1 57 1 (Ex Officina Henric.Petrin. Ba
stí, infol.). Isaac Casaubon corrigió é
imprimió esta obra en la misma mar
ca , Genova , años de 1 587 y 1 596,
y en Paris año de 1620. Teodoro Jan.
sonio de Almeloven volvió á imprimir
dicha version , las notas enteras de Xy
landro , Casaubon , Morell y Palme-
rio , con otras que sacó de los escritos
de Pablo Mérula , Juan Meursio, Feli
pe Cluverio , Lucas Holstenio , Salma-
«3 sio,
4
sio,Bochart, Isaac Vosio, Spanhemio,
Christobal Celario,&c. en Amsterdam,
año de 1 707 , y es la que yo tengo.
Deseando no careciese España de
una version en su propio idioma , iba
á traducir toda la obra del Latin al
Castellano. Por una parte , me dete
nía lo arduo de la empresa , por otra,
el considerar que ningun Autor Es
pañol ni Francés había querido ocu
parse en semejante asunto ; pero úl
timamente , con aprobacion y conse
jo de varios curiosos , resolví empe
zar por el libro tercero que trata de
España. Mi intento es seguir , si me
reciese la aceptacion del Público. So
lo he tenido presente la edicion de
Casaubon , y quando hubo algun pa-
sage difícil , procuré entender el ori
ginal Griego , de cuya lengua he ad
quirido bastantes ideas , aunque no
suficientes para traducir obra tan
vasta. Van al pie las notas de Ca
saubon , y las señaladas con una es
trella son mías. Varias veces fué pre
ciso dilatarme en algunas, para dar
á
á conocer completamente mi opinion;
Quando por casualidad se citan Au
tores Extrangeros , como ellos alteran
nuestos nombres , no salgo por res
ponsable de muchos que se hallan en
sus obras totalmente desconocidos, aun
que algunos se corrigen fácilmente por
ser la mudanza de una sola letra. Para
hacer un cotejo de la correspondencia
moderna con la antigua me ha servido
principalmente la España Sagrada del
P. M. Florez. , y de su continuador el
P. Fr. Manuel del Risco. El Mapa ad
junto contiene todas las Provincias y
Pueblos de que habla Estrabon , con
sus correspondientes modernos ; pero
como estos eran pocos, y quedaban
algunos blancos , llené el hueco don.
de se pudo con mucho mas. He lleva
do en esto dos fines. Primero y princi
pal : que sirva para nuestra obra. Se
gundo : que puedan dándole suelto leer
con su auxilio otros escritos antiguos.
1 Aunque este no es el libro prime
ro de Estrabon , como es el primero
que se publica , le he querido ilustrar
a4 tra
traduciendo la introduccion de Teodo
ro Jansonio de Almeloven , y los pare
ceres, testimonios ó juicios que han he
cho de esta Geografía y de su Autor
diferentes sabios. En el primer , libro
añadiré otros prefacios y cartas pues
tas en varias ediciones , que merecen
darse á luz por excelentes y eruditas.
Los números ó cifras marginales de
notarán tanto en este tomo como en
los siguientes la página que correspon
de á la impresion de París del año 1 620.
En todo el discurso de mi obra no he
suprimido ni suprimiré ningun pasage
de Casaubon sino para amplificarle,
excepto algunas notas y emiendas del
Griego , las quales es preciso omitir4
porque no pongo dicho texto. El.Rmo.
P. Fr. Juan de Cuenca , del Orden de
San Gerónimo, revisó esta traduccion,
y fué de parecer que se añadiese el
texto Griego , lo qual no executo por
no encarecer el libro , y hacer por es-,
te medio mas comun su lectura en el
público. <
TEO-
7
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
TEODORO JANSONIO
DE ALMELOVEN
AL LECTOR BENÉVOLO.

cuchos años hace que apenas


se hallaba , aun en las mejores biblio
tecas , un Estrabon ( á mi parecer
príncipe de los Geógrafos y junta
mente historiador fidelísimo ) , que es
tuviese ilustrado por el docto Isaac
Casaubon , y enriquecido con sus eru
ditas anotaciones. Advirtiendo el li
brero tanta escasez de exemplares de
dicho Escritor, y que le buscaban
con ansia los sabios ; queriendo sa
tisfacer á aquellos , que abrazan el
estudio de la Geografía antigua so
bre todos , determinó imprimir an
te otras cosas la obra de este Au
tor, cuya lectura es muy necesaria
para conocer bien el sitio de todo el
orbe, habiendo ya 87 años que se
pu
8
publicó en París la última vez * . Pa
ra que excediese esta edicion á las
demás que se han hecho (aunque ver
daderamente es extraño fuesen tan po
cas ; pues en el espacio dé 190 años
solo se dio á luz cinco veces con el
texto Griego ) , me participó sus bue
nos intentos , con el fin de que los
coadyuvase , entregándole algo aña
didas las notas de varios , que pu
diesen adornar á nuestro Geógrafo,
ó á las de su célebre comentador
Isaac Casaubon. Al principio no abra
zaba yo este trabajo con tanto gus
to ni libertad , que creyese impri
miéndole poder descender seguro al
campo de batalla , qual soldado ar
mado , ó como un Atleta ; pues nun
ca traté ni registré á Estrabon mo
vido de semejante designio. Me ame
drentaba por una parte el peso de to
da
* Es de advertir que este prefacio se pu
so en la edición de Amsterdam , año 1 707,
y la impresion que hicieron en Paris fué
el de 1620.
9
da la obra , á que solo pueden resis
tir los hombros de un varon erudito,
y por otra parte la mucha detencion
que había de padecer hasta concluir
se. El mismo Casaubon me obligó á
reusarlo con mas fuerza ; pues , se
gun consta de sus comentarios , qui
so publicar á este Autor y no lo hi
zo Felipe Cluverio , docto Geógrafo
de aquella edad. Este Escritor , co
nocido por sus trabajos literarios en
describir las regiones del orbe anti
guo y moderno , era verdaderamen
te muy apto para promover dichos
estudios , y el campo igual de Estra-
bon hubiera debido mucho á tan dies
tro artífice. Me impidió del mismo
modo pasar adelante el juicio unifor
me que hicieron de Estrabon en los
siglos antecedentes muchos héroes fa
mosos por su sabiduría , como son
Victorio , Turnebo, Estéfano, Esca-
lígero , Lipsio , Holstenio , Lindem-
brog , Salmasio , Vosio , &c. y aque
llos que se celebraron ó celebran por
su autoridad en nuestro tiempo , es
IO
á saber , los Gronovios , Grevio , Ve-
rizonio , Celario , Hudson y otros;
pues todos estos quisieron mejor irse
á la mano con Estrabon , que preten
der curarle con débiles medicinas,
dexándole realmente mas enfermo y
alterado. Faltaban remedios , faltaban
varias cosas precisas para limpiar es
te establo del Rey Augias. No se po
día , ni Casaubon daba por acertado
el emendar alguna cosa en este Es
critor , sin la autoridad de algun có
dice. Habiendo hecho cuentas y con
siderado para conmigo , que el libre
ro no habia de hallar fácilmente
quien tomase á su cargo un negocio
de tanto peso , determiné , para dar
á luz este Autor , seguir aquel exem-
plar , que , corregido segunda vez por
el mismo Casaubon poco antes de
su muerte , y publicado seis años des
pués , había merecido la aclamacion
de todos los doctos. Le comuniqué
mi parecer al librero, y como sería
bueno añadir tambien todas las ob
servaciones que habían escrito en otro
tiem-
1 1
tiempo con algun destino Xylandro,
Morell , Palmerio , y otros que con
diferente mira aclararon algunos pa-
sages. Para dirigir todo esto no pude
menos de condescender habiéndome
lo pedido: pero por lo que toca al
texto Griego y Latino de Estra-
bon , le dexamos como estaba en la
edicion última ; pues ni pude ni qui
se emendarle , porque , destituido de
todo auxilio , no se dañase acaso una
produccion genuina del docto Ca-
saubon. Siguiendo tales conjeturas,
clamarán tal vez contra nuestro des
cuido algunos severos Aristarcos, por
haber dexado en esta los defectos co
metidos en las primeras ediciones á
pesar de Casaubon. Véase como se
defiende dicho Escritor del rigor de
sus Críticos en el prefacio que puso
al Policeno. "Nunca fué mi intento
«(dice) hacerme famoso con la ver-
«sion Latina de libros Griegos , prin
cipalmente históricos , y mucho
«menos con la correccion de aque
llas traducciones hechas por otros;
»por
12
aporque no me ha sido difícil quan-
«do me puse á experimentarlo, ni he
»creido era una cosa digna de tra
barse, ó emplear en ella el tiempo
»que me permi■an mis ocupaciones.
« Suplico á los doctos cesen contra
» mí sus quejas de que en el año pró-
«ximo pasado, quando publiqué á
»Estrabon , no reprehendí todos los
» errores del intérprete uno por uno.
«Mal me conocen si creen fué por
«ignorancia, pues ya los tenia yo
"advertidos, y hubiera podido sin di-
"ficultad corregir lo que ellos le re-
» futan, y acaso otras muchas cosas
«que no todos ven , como hubiera
» sido ese mi intento. Pregunto. ¿No
«se portan injustamente los que me
" piden mas de lo que prometo? Yo
"solo dixe que emendaría y comen-
" taría el texto Griego , pero no que
«refutaría los defectos de la traduc-
"Cion. Si otras veces lo hice tendría
" motivo para ello , ó sería necesario
«para la claridad de algun pasage.
" En otra ocasion intentaron los mis-
»mos
13
»mos sabios destruir con mil máquir
»nas cierta nota que puse al libro
«quarto de Estrabon : pero como no
«profieran mas de lo dicho , jamás
«conseguirán que mude un ápice. Si
«hubieran leído enteramente nuestra
» nota , no permitirían que , siendo to-
«do en ellos digno de admiracion , se
«echase menos la sencillez : pero á
«estos intratables (no hablo contigo
«célebre Belga), que estiman poco
«el trabajo ageno , nunca los creo
«merecedores de respuesta. Sienten
« mucho que de tan poca edad ( pues
«apenas había cumplido 28 años
«quando publiqué á Estrabon) inten-
« tase ganar una victoria , á que as-
« piraban ellos después de tantos lus-
« tros y decadas : pero lo que mas
«les ha de mortificar es que , si Dios,
«único favorecedor de nuestros es-
«tudios, me concede vida y tiempo,
«haré de modo que conozcan no ne-
« cesito su auxilio , para pulir y per
feccionar una obra alterada por la
«iniquidad de los tiempos."
Yo
14
Yo había creído que era pruden
cia dexar de corregir en Estrabon al
gunos defectos levísimos, quando al
contrario , suele ser la temeridad de
algunos hombres atrevidos tal, que
se toman demasiado derecho en cor
regir las obras ; mudan y trasponen
las palabras á su gusto , y de un mo
do que ni soñaron los mismos Auto
res. Por eso no quise emendar ni al
terar , de mi motu propio , lo que po
nían constantemente las primeras edi
ciones , aunque algun pasage parez
ca corrompido y poco exacto. No
obstante , donde advertí que faltaban
palabras , segun el códice de Aldo
y Hoppero , las escribí al margen , ó
las inserté en el mismo texto. Oim>
to el contar todas estas , pues el cu
rioso que lo registre hallará bastan
tes. Mi principal cuidado y diligen
cia se exercitó en corregir por las
mejores ediciones aquellos testimo
nios que pone Casaubon en sus no
tas , procurando en aquellas citas me
nos fieles distinguir bien los libros
y
i5
y capítulos , para el uso y comodi
dad de los lectores. Me hizo enfadar
muchas veces este trabajo , el qual,
aunque á primera vista no se distin
gue , merece alabanza y es utilísimo.
Tambien me empleé en añadir al tex
to de Estrabon en sus lugares respec
tivos lo que pude recoger de los li
bros de otros Escritores , ó de los
comentarios de qualquier ciencia y
edad , para que con este aumento sa
liese mas completa y brillante la des
cripcion del orbe. Dichoso yo que
he logrado el éxito de mi empresa,
pues unas veces breve y otras proli-
xamente he ilustrado con las palabras
de otros Autores mas de quinientos
lugares de Estrabon.
Espero que despues de Herebasch,
Glareano , Juan Hartungo , Hoppero,
Guillermo Xylandro , Isaac Casaubon
y Jacobo Palmerio , resucitará algu
no , que dispuesto con estos auxilios
(los quales pocas veces son superfluos,
y necesariamente se requieren al emen
dar un Escritor tan autorizado ) , per-
b fec
i6
feccione por fin lo que no pudieron
tocar dichos Autores. Esta esperan
za nos engañaría menos , si no fue-
. se tan deplorable la falta de códices
escritos ó corregidos por Estrabon,
pues son tan raros que apenas se ha
llan en las Bibliotecas públicas de los
Señores. Solo hay un fragmento de
la obra en aquella célebre Bibliote
ca Vosiana , con que se ha formado
el rico Tesauro del Holandés Ate
neo.
Ni en toda la Inglaterra y Esco
cia , tan excelentes por la abundan
cia de sus manuscritos , se ha podi
do encontrar mas que uno mutilado
en el Colegio Lincolnense , y otro en
el Etonense , que existe del mismo
modo incompleto , pues le faltan sie
te libros. En la famosa Biblioteca
Palatina , consta de un catálogo he
cho por Sylburgio , que solo se ha
llan algunos epítomes de Estrabon.
No tiene nada Thomasino , aunque ha
dado á luz quanto hay en las Bi
bliotecas públicas y particulares de
Pa-
17
Pádua ; pero existe toda la obra en
tera en la Biblioteca de San Marcos
en Venecia , segun refiere el perito
Spachio , que fué uno de los qua-
tro que enviaron varias noticias por
mano de su suegro Enrique Estéfa-
no á Casaubon , estando casi para pu
blicar su Estrabon (como él mismo
lo confiesa ) . Tambien hay dos li
bros enteros , pero de letra moder
na , en Milan en la Biblioteca Am-
brosiana , y así consta por un diario
del camino de Italia que compuso el
erudito Monfaucon. Hubiera servido
de un adorno muy grande , si se hu
biese podido adquirir á Cyriaco In
térprete Griego de Estrabon , natural
de Ancona , que en tiempo de Fede
rico III parece que escribió unos es
colios en lengua Griega al texto de
nuestro Geógrafo , y de ellos usó
Langerman Letrado de Hamburgo,
como puede colegirse de lo que di-
xo Reinesio pág. 223 y 368 del Tra
tado de Inscripciones. Se consultaron
particularmente las notas de Enrique
b 2 Scrim
i8
Scrimgero , Profesor Genovés , envia
das á Casaubon el año 1607 por Pe
dro Junio , y segun el mismo Ca
saubon le fueron muy útiles , pues
escribe en la ep. 514 que no puede
ponderarse quanto le han servido las no
tas de Scrimgero. Si con estas y otras
muchas noticias logramos ver algu
na vez aventajarse nuestro Estrabon
á los demás , me alegraré infinito.

Juicios y testimonios de Estrabon


vertidos del Latin al Cas
tellano.
Suidas.
Estrabon , Filósofo y Geógrafo
Amaséo.
Fr. Patricio ( de Regno et Regis Ins
tituí.) p. 170. Edic. de Parts.
Estrabon , Príncipe de los Geó
grafos.
Ídem pag. 194.
Estrabon Cretense ( no es sino de
Capadocia), hombre de mucha lectu
ra.
19
ra , suma exactitud y copiosa doc
trina , todo lo abrazó de suerte , que
no hay nada que añadir á su obra
consumada.
Luis Cel. Rbodigin. Leccion. Antig. lib.
XXI. cap. 25.
Estrabon no solo Historiador in
signe , sino tambien Filósofo y Ma
temático , fué de tan famoso y cele
brado nombre , que Eustacio de Te-
salónica casi siempre le intitula por
excelencia ó antonomasia el Geó
grafo.
Budéo {de Asse) lib. 1. p. 86. edic.
1542.
Estrabon fué oriundo de Capado-
cia , Griego en la erudicion , de opi
nion abonada , y Romano en el tra
to y vida. Registró por sí mismo va
rias tierras , como consta de su Geo
grafía. X
Pedro Victorio , Var. Lect. VIH. 1 7.
Estrabon grave y erudito Escri
tor.
Ídem lib. XIII. c. 3.
Estrabon exactísimo Escritor.
b3 Del-
20
Delrio á Solino , Volyhist. c. 41.
Estrabon , Autor grande.
Casaubon á Math. cap. II.
Autor grave , Escritor excelente
y Príncipe de los Geógrafos.
ídem á Ateneo, lib. XIV. c. 21.
Estrabon erudito Escritor de Geo
grafía.
ídem [Exercit. ad Annal. Eccles. Ba
ron) Año XXXIV. N. CXVI. pag.552.
ed. 1655.
Estrabon , Escritor muy serio.
Lipsio á Tácito. Ann. II. cap. 60.
Estrabon casi todo lo cuenta co
mo testigo de vista, y no es Escri
tor de gusto vulgar.
ídem en la Introduccion a la Filosofía
Estoica, l. 1. disert. 7.
Añado al Geógrafo Estrabon, hom
bre de insigne juicio y prudencia.
ídem Epistol. Miscell. cent. II. ep. 84.
He visto tu Estrabon , y en él
muchas cosas buenas. Sigue por Dios,
y ya que nuestro Escalígero calla,
sal y haz tu papel.

Go
21
Goropio Secano ( Híspame, ¡ib. V.
P"g- 75.)
Dudo que ninguno de aquellos,
que antes de Ptoloméo fueron famo
sos por su docta descripcion de la
tierra , hayan dexado noticias y me
morias de Autores mas acreditados
en esta parte que Estrabon, al qual,
por la excelencia con que aventajó á
todos , le llaman muchas veces los
Intérpretes Griegos , no por su nom
bre propio , sino el Geógrafo.
Carnerario (in Homerum pag. 1 96. Edit.
Scherpezeelianae).
Oxalá hubiesen publicado los es
critos de Estrabon sin alterar nada;
pero están tan llenos de errores , que
necesita el lector , por diligente y
erudito que sea , pararse en muchos
lugares.
Christobal Colero en sus Cartas, sobre
el estudio Político.
Voy á tratar de los libros de mez
cla. La obra de Plinio se debe tener
por varia y émula de la naturaleza.
Lo mismo opino de Estrabon , en
b4 cotn
22
comparacion del qual nadie escribió
la Geografía con mas exactitud. No
cuidaba solo «'*»,, sino tambien t?,*»»;
Cuenta varias repúblicas , trata de la
milicia, registra Historiadores y Poe
tas.
Felipe Cluverh en el Prefacio de la
Alemania antigua.
Con razon se le da á Estrabon,
Escritor Griego del Asia , el princi
pado entre todos los Geógrafos La
tinos y Griegos , pues supo unir la
Historia con la Geografía. Ademas
de esto , dicho Autor no trae sola
mente los nombres de los rios, mon
tes , costas , lugares , regiones y ha
bitantes , sino que tambien disputa
con cuidado, arguye lo falso, y afir
ma la verdad. Despues nota el orí-
gen de las gentes , costumbres y ri
tos , nacimientos de Jos reynos y re
públicas mas nobles , incrementos , al
turas, mudanzas, muertes, hazañas, y
otras cosas necesarias ó dignas de sa
berse.
P.
23
i\ Bercio en Ja descripcion de Francia,
pág. 203.
Es necesario tratando de su va
lor militar oir á Estrabon , hombre
sabio , oriundo de Capadocia , de opi
nion abonada , Romano en el trato y
viajante por muchas tierras.
Gerardo Juan Vosio (Hist. Griega J. II.
cap. 6).
Ahora voy á tratar de aquellos
Historiadores , que consta vivieron
antes de Augusto. Uno de ellos es
Estrabon , hombre verdaderamente
grande. Por lo que toca á su patria era
oriundo de Cnoso , Ciudad de Creta,
como él mismo dice Lib. X : de lo
qual resultó que Juan Aventino le
llamase Cretense , siendo así que na
ció en Amasia , Ciudad del Ponto.
No hay que alabar á Suidas por es
te aviso , quando Estrabon propio lo
confiesa en el libro duodécimo de su
Geografía , donde explicando cierta
parte del Ponto , escribe : Httjus regio
nes Septentrionale latus Gazelotus , et
•dger Amasenus includunt : occiduum Ha*
(ys:
24
Jys : orientale Phanaroea : reliquum nos~
tra yímasensium terra , omnium multo
amplissima et optima.
Existen aún .sus 17 libros Geo
gráficos , que son excelentes por va
rios motivos. Fué Filósofo consuma
do , y si atendemos á Xylandro era
de secta Peripatética , aunque Estéfa-
no reprueba así este parecer : Ama
sia civitas Pontica\ex qua Straboyphi-
losophus Stoicus. Lo mismo afirma
Suidas. Pudiera traer otros testigos;
mas no son necesarios , quando el
mismo Estrabon lo manifiesta lib. II
donde dice , que Posidonio disputa
varias veces sobre causas , y en mu
chas imita á Aristóteles , pero que de
su secta es propio evitar esto por su
obscuridad. En efecto mas son de un
Estoico que de un Peripatético las
palabras siguientes en el libro IV:
Nam ubi de providentia et fato dispu-
tatur , multa inveneris alioqui in rebus
bumanis ac naturalibus ; de quibus dice-
res , praestitisse. alio , quam hoc modo,
ea fieri. Ut , verbi gratia , imbribus
pO'
25
potius irriguam Aegyptum debuisse es-
se , quam ab Aethiopia humorem acci-
pere : et Paridem , cum Spartam pete-
ret , debuisse potius naufragium faceré',
quam , rapta Helena , poenas postmodo
sceleris daré , auctorem tantae cladis
Graecorum , ac Barbarorum ; quam Eu
rípides Jovi imputat:

Teucris malum,Helladique cladem Jupiter


Cmtingere volens , ista decrevit pater.

Hasta aquí Estrabon. No ignoró


tampoco Ja Filosofía Peripatética,
pues se exercitó en ella con Boétho
Sidonio, segun él mismo dice libro
XVI y lib. XIV, llamando á su Pre
ceptor Xenarcho Seleuciense , Peripa
tético. Otra causa hay que nos ha
ce mas recomendables los trabajos de
Estrabon ; y es que ningun Geógra
fo de los anteriores registró tantas
tierras como él. Así lo sabemos por
lo que escribió en el lib. II. "Tra-
» taremos , dice , ya de lo que hemos
»andado por mar y tierra , ya de lo
"que
26
«que nos aseguran otras conversacio
nes y escritos. Yo he visitado hacia
»el poniente desde Armenia hasta los
"lugares de Etruria opuestos á Cer
meña : hacia el mediodía desde el
"Ponto Euxino hasta los límites de
"Etiopia. Y no hallarás ninguno de
"quantos escribieron este sitio , que
"haya peregrinado mas , porque los
»que en el lado occidental vieron mu-
"Cho , no tocaron tanto como yo de
"Jos orientales. Al contrario , otros
"hablan poco del ocaso, y lo mismo
"afirmo del septentrion y mediodía."
Antes que escribiese estos libros , ha
bía ya publicado Estrabon unos co
mentarios históricos , útiles para la
Filosofía moral y civil , como afir
ma él mismo al lib. I. de su Geogra
fía. Escribió tambien todo aquello
que seguía despues de lo que trae
Polybio , y en el libro XI de los Par-
thos pone que añadió muchas cosas
al sexto de los comentarios históri
cos , pero en el segundo continúa la
historia ■de Polybio Trató de las
ha
27
hazañas de Alexandro.... En qué tiem
po vivió , lo manifiesta así lib. XIII:
la providencia de Tiberio Cesar , que
ahora manda ; y al libro IV , donde
dixo que escribía en el año de XXXIII
despues de los Noricos , Carnos , y
otras gentes Inalpinas vencidas por
Tiberio y Druso. Sucedió esto el año
738 de la fundacion de Roma , que
fué el primero de la Olympiada 191.
Luego escribió Estrabon su Geogra
fía en el año de 771 de la fundacion
de Roma , y al quarto del Imperio
de Tiberio Cesar. Sabemos que era
entonces de edad avanzada , porque
dixo al lib. II, que tuvo por amigo
y compañero á El ¡o Cornelio Galo,
el qual fué nombrado Prefecto para
Egypto , y vio con él la estatua de
Memnon , tan celebrada por los Es
critores antiguos, como afirma al li
bro XVII. Pero este Galo comenzó á
presidir á Egypto despues de la muer
te de Marco Antonio y Cleopatra, en
cuyo año empezó la nueva Era Egyp-
ciaca. Solo mandó en Egypto qua-
tro
28
tro años , pues se mató á sí propio,
siendo Cónsules Cesar Octaviarlo Vill
y Lucio Statilio Tauro. Desde este
tiempo hasta el año quarto de Tibe
rio en que escribía Estrabon , hay
quajrenta y tres años. Luego , ya que
dicho Galo , hombre de tanta erudi
cion y dignidad , trató á Estrabon
familiarmente como amigo , nadie ne
gará que fué nobilísimo y célebre.
Esto prueba tambien con toda evi
dencia , que nuestro Geógrafo tenia
bastante edad , quando publicó su
Geografía.
P. D. Huet. Demonstr. Evangel. Propo-
sic. IV. cap. 2. §. 42.
A este añadiremos á Estrabon,
varon apreciable por la mucha sin
ceridad con que trató de Moysés y
los Judíos.
Samuel Bochart Hieros. 1. III. cap. 31.
Estrabon Escritor de mucho dis
cernimiento.
Marsilio Cognato (Observat. ¡.III. c.20).
Juntó muchas cosas excelentes so
bre la edad y patria de Estrabon.
SY-
29

SYNOPSIS Ó ARGUMENTO
DEL LIBRO TERCERO

DE LA GEOGRAFÍA DE ESTRÁBON.

LsOntiene este libro la descripcion


de España ; primero de toda en gene
ral , donde se explica su figura , longi
tud y latitud. Después de cada parte
de por sí. Porque empieza Estrabon
desde el Sacro Promontorio , que es se
ñal £vTtx.aUrcr tUwftint y describe primero
la Bética y todo lo contenido entre es
te Promontorio y las Columnas y expo
niendo latamente lo abundante de estas
regiones en todas las cosas , y princi
palmente en metales. Después trata de
Lusitania , de las costumbres de sus ha
bitantes , y de toda aquella parte que
se incluye en el Promontorio Sacro y
el Nerio ; y tambien de aquellas nacio
nes , que miran hacia el Aquilon. Des
pués explica la Tarraconense , las cos-
tum
30
tumbres y vida de su gente , y todo lo
restante de España , que se extiende ó
dilata desde las Columnas hasta los mon
tes Pyreneos. Últimamente describe las
Islas adyacentes á España.

LI-
LIBRO TERCERO.

'espués de haber manifesta


do la primer figura de la descrip
cion de la tierra , nos parece pro
pio hablar de cada una de sus
partes ; porque así nos lo hemos pro
puesto , y parece que hasta ahora va
el tratado bien dividido " . Se debe
puesi
Núm.° ' Dice Estrabon lo que resta
hacer después de haber manifestado la
primer Jigura de la descripcion de la
tierra , porque así dividió la obligacion
de un Geógrafo en el libro segundo , y
dixo que primero habia de presentar un
exemplar universal , ó ruda informacion de
, todo el mundo , enseñar su quantidad y
calidaci « itcií í^íuirot •tfpíí '¿Am yin y otras co
sas de éste' género, que convienen decirse
y saberse en general de la tierra que ha!
hitamos. Después se propuso hablar en par
c ti
2 tIJBRO III. DE LA GEOGRAFIA
pues ¿ empezar segunda vez por la
Europa y sus partes , hablando antes
Pág. de estas por las causas sobredichas 2.
137. Es pues la primera parte de Europa
hacia el Ocaso la España. Lo mas
de ella se habita con incomodidad %
Cu
ticular , y exponer la situacion y clima ó
calidad de cada lugar. Habiendo , pues,
cumplido Estrabon la primera parte en el
libro antecedente , resta hacerlo con la se
gunda. Finalmente , procediendo casi con
el mismo órden y método en la narracion
singular , que en la general , no hay para
qué hablar mas sobre este punto.
2 Por las causas sobredichas ). Plinio
lib. 3. cap. r.° escribe : Primum ergo de
Europa altrice vietoris omnium gentium
populi , longéque terrarum fitlcherrima.
Tambien empieza por aquí Ptoleméo. Y
en efecto , como es mejor tratar ántes de
las cosas que se conocen que de las des
conocidas , era necesario que los antiguos
comenzasen por el ocaso.
3 Lo mas dé ella se habita con inco
modidad.). Aquí debo advertir de paso el
elogio que Mela atribuye á la España li
bro
DE ESTRAB0N. 3
como que tiene montes , selvas , y
campos llenos de tierra arenisca , y
no está por la mayor parte regada
con igualdad : tambien la parte que
mira al Septentrion , además de su
aspereza , es muy fria : en la del Oca
so sucede , que sus habitantes no tie
nen trato con los demás , y por eso
allí se vive muy mal ; pero la situa
da hacia el Mediodía es casi toda una
region feliz. , principalmente la que
está fuera de las Columnas. Lo ex
plicaremos claramente por partes:
primero se ha de describir la figura
y magnitud de toda España. Esta es
pa-
bro II. c. 6. diciendo : Adeo fertilif , ut sic
ubi ob penuriam effoeta , et sui dissimilis
est , linum tamen aut spartum alat* Con
menos consideracion la alaban Solino c. 58,
y Justino lib. 44. Aunque en España se
encuentra lo que dicen , con todo no debe
atribuirse á toda ella ; porque , como dice
Estrabon , en muchos lugares se habita con
incomodidad , y en otros no : pero esto bien
veo que es universal.
c 2
4 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
parecida á una piel ó pellejo exten
dido á lo largo desde el Ocaso hácia
el Oriente , de suerte que las prime
ras partes miran al Oriente , y su an
chura desde el Septentrion hasta el
Austro 4 . Su largo total es de 69
estadios s , y su mayor ancho
5®,
4 Es parecida d una piel). Mela li
bro II. c. 6. la explica del modo siguien
te : " España está rodeada de mar en to
adas partes , ménos donde toca á las Ga
chas , pues allí es muy angosta , y se ex
tiende poco á poco hacia nuestro mar y
«el Océano , hasta hacerse dilatadísima por
«el Occidente." Justino lib. 44. cap. 1 . es
cribe : " La forma de la tierra es casi qua-
»?drada , excepto en los Montes Pyrenéos,
«que se estrechan sus costas." Pero Eti
co dice que la figura de España es trian
gular.
5 Su largo total es de 6$ estadios ).
Como la longitud de España se puede to
mar con variedad , de ahí resulta que los
Autores la dan tan diferente. Estrabon mi
de así la costa del Mediodia un poco mas
. . aba-
DE ESTRABON. g
g@ 6 , en otro tiempo mucho menor
ca-
abaxo : " Desde Gades á las Columnas hay
»)2© estadios. De aquí á la Nueva Carta-
«go 22)2oo. Otro tanto de allí á las en-
«tradas del Rio Ibéro; y desde este sitio
«hasta los Montes Pyrenéos i$6oo , cu-
«ya progresion de estadios hace la suma
«de 89." Aquí se vé que una vez la da
62> , y otra 82) , cuya variedad en longi
tud puede resultar de contarla desde di
versos sitios. Polybio lib. III. mide la mis
ma costa marítima Austral de esta suerte:
"Desde la boca que mira á las Columnas
«de Hércules hasta la nueva Cartago hay
>,3© estadios. De aquí á las entradas del
«Rio Ibéro 22)6oo. De este parage al Em-
«porio , cuyo lugar no dista mucho de los
»?Pyrenéos , i2)6o2." Por lo qual , desde
las Columnas hasta el Emporio , segun la
dimension de Polybio , habrá 72)202 esta
dios. Seis mil estadios hacen en la medi
da Romana 750$ pasos. Si esta variedad
quiere alguno compararla con lo que dice
Plinio , vea el libro IV. cap. 22. de su obra.
6 Y su mayor ancho 5$). Que son
625© pasos. Apiano dice al principio de
'3 su
6 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
casi en 3© , especialmente hacia el
Pyrenéo 7 , que incluye el lado Orien
tal. Este monte 8 *, que continuada-
men-
su historia Ibérica que la latitud de Espa
ña en ciertos lugares se estima en 28)500,
pero ya explica él de qué modo se ha de
entender esto ; pues añade **< «V" ¿«tj tí
■TTAaroí itr¡ nix,svi ; sin embargo , ni aun así
se libra de la nota de falso.
7 Especialmente hacia el Pyrenéo ) .
Porque de esta parte es muy estrecha la
España , como sabemos de Mela y Justi
no. Este último Escritor lib. 44. c. 1. di
ce : El espacio que ocupan los Pyrenéos es
de 600$) pasos , que componen 4^800 es
tadios. Pero Diodoro afirma que los Py
renéos se dilatan casi 3$ estadios en lon
gitud.
8 * Plinio en su Historia natural lib. IV.
cap. 26. hablando de la España citerior po
ne lo siguiente : " Los Pyrenéos cierran su
«extension real , y son por un lado mas
«estrechos hácia el Septentrion que al Me-
«diodia , pues su cadena se extiende desde
vel Oriente equinoccial hasta el Poniente
«brumal." Este pasage embarazó á muchos
Co-
DE ESTRABON. 7
mente se dilata desde el Austro has
ta
Comentadores ; pero el P. Harduino y
otros sabios observaron , que se trata aquí,
no de la cadena de los Pyrenéos que sir
ve como paso ó comunicacion de España
á Francia , sino de otra proyeccion que
corta la misma España , dirigiéndose hacia
el mar de Cádiz. Así , no hay nada que
mudar en dicho texto. La cima ó Summum
Pyrenaeum , segun varios monumentos an
tiguos de Aragon , llámase tambien Pyre-
naei Saltus ó Summus Portus. En fixar el
verdadero sitio de dicha mansion conviene
con Gerónimo Zurita el P. de Marca L.
I. M. H. c. 13. Esta parte alta del cami
no militar corresponde , como quieren al
gunos , al lugar llamado Burguete. El Imum *
Pyrenaeum á San Juan de Pie de puerto. W
Silio Itálico hablando de los Pyrenéos trae .,
los versos siguientes:

Pyrene celsa Nimbosi verticis arae


Divisos Celtis longe prospectat Iberos,
Atque aeterna tenet magnis divortia terris.

Los Poetas fingieron que Hércules pasando


c4 por
8 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ta el Boreas , divide la Gallia de la
Es-
por estas montañas las dicV el nombre de
Pyrenae en honor de una hija del Rey de
los Bebryces que■ habia querido. Otros di
cen que recibieron su nombre dei fuego,
en Griego ■rop , por la freqüencia de rayos
que allí caen , ó porque los Pastores que
maban sus selvas. Extiéndeme desde el Mar
Mediterraneo hasta el Océano por espacio
de 85 leguas en largo : su ancho es dife
rente segun los lugares , y el mayor es de
40 leguas. Los antiguos creyeron que los
Pyrenéos corrian por toda España hasta el
Océano Atlántico , y no se engañaron mu
cho ; pues todas las montañas de esta pe
nínsula son ramos de aquellos. Están pro
digiosamente altos y tan cerrados que apé
nas dexan cinco caminos para pasar de Es
paña á Francia. No se pueden andar sino
á pie , ó en muletas acostumbradas á tre
par por estos pericuetos , donde qualquier
Caballero poco experimentado camina mil
veces con riesgo de romperse la cabeza.
Todas estas montañas se hallan cortadas por
un gran número de valles y bosques , que
regularmente están llenos de pinos. Vean-
i "i se
DE ESTRAB0N. O,

España. Extendiéndose , pues, con des


igualdad ambas regiones , es muy es
trecha una y otra desde nuestro mar » *
hasta el Océano por la parte que lle
ga al Pyrenéo ; y en ambas partes,
cada una con su respectivo mar se
forman variedad de senos. Pero los
de la Galia son mayores , y el mas
angosto de ellos será como el Istmo
de España ,0. El lado , pues, Orien
tal de España incluye al Pyrenéo;
y el Meridional desde aquí á las Co
lumnas ' ' * contiene nuestro mar:
cer-
se en comprobacion de todo lo expuesto
Felipe Cluverio, Mariana lib. VIL cap. 2,
y el Gran Diccionario Geográfico y Crí
tico de la Martiniere,
9 # Por nuestro mar ó mar interno se
entiende todo el Mediterraneo.
I o Y el mas angosto será como el Ist
mo de España ). Plinio lib. IV. cap. 20.
A Pyrenaei promontorio Hispania incipit,
angustior non Gallia modo , verum etiam
semetipsa.
ll * Pomponio Mela de Siiu Orbis
lib.
IO LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
cercano á este está el Océano , que
se
lib. I. cap. V. hablando de Mauritania trae
"que hay en ella un monte muy alto opues-
«to á otro de España , llamado aquel Aby-
*>la , y este Calpe , que ambos forman las
"Columnas ó Estrecho de Hércules." Al
gunos pretenden que Abyla equivale hoy
á Ceuta , otros dicen ser la Sierra de Al-
marza , segun Olivar ; y Sierra Ximie-
ra segun el P. Medina. Marmol escribe
que los Arabes la llaman Alcudia , sin duda
por alusion á Alcides ó Hércules , á quien
estaba consagrada. La Martiniere escribe
del Calpe , que nadie duda es hoy lo que
llamamos Gibraltar , y al Abyla , segun
él mismo , le llaman las ediciones de Pto-
loméo Alyba. Se creería era una falta del
Copista , que debia decir Abyla , si Dio
nisio Periegetes no la nombrase del mis
mo modo. Está vecina y casi continuada
■ede otras peñas , que fuéron llamadas an
tiguamente los siete hermanos , á causa de
su semejanza. Solino coloca aquí infinito
número de Elefantes , como tambien Pli-
nio , de lo qual es reprehendido por Sau-
masio su Comentador , pero sale á la de-
fen-
DE ESTRABON. II
se dilata hasta el Promontorio Sa
cro.
fensa Vosio en una de las notas que pu
so á Pomponio Mela , cap. 25. Mr. Bo
chará cree que este nombre es de origen
Fenicio , y viene de Ab-ilaa ; que Ab
puede significar floresta ó selva , y así
Ab-ilaa da á entender un bosque elevado.
Observa además que la palabra Ab , to
mándose tambien algunas veces por una
columna , podia bien haber dado lugar á
la Fábula , y ser causa de que llamasen
Columna el Monte Calpe , que está al la
do opuesto. Efectivamente , estas montañas
parecen de léjos dos columnas á aquellos
que navegan hacia el Estrecho. El P. Feui-
llée en su Diario la llama Monte de Mo
nos : dice que la cumbre está dividida en
dos puntas muy elevadas , y que al pie
hay una Aldea habitada de Moros , con
el nombre Btilliona , la qual tiene al
Oeste á diez millas de distancia la peque
ña Ciudad de Alcázar Quivir ; pero á
esta la nombran en Arabe Ezzagir ó Al
cázar simplemente. El P. Ricciolio da al
Abyla 15 grados, 30 minutos de longi
tud , y 35 grados, 21 minutos de latitud.
I2 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ero ' * * El tercer lado es el Occi
dental , casi paralelo al Pyrenéo , des
de el Promontorio Sacro hasta el
Promontorio que está junto á los Ar-
tabros y se llama Nerio ' 3 *. El la
do
1 * * Ptoleméo pone al Promontorio
Sacro en .... % | y 38 •*.
El Promontorio Sacro , segun la Martinie-
re , es un Cabo de Lusitania , llamado
hoy Cabo de San Vicente en Portugal.
Pytheas de Marsella le dio el nombre de
Calbium Promontorium. Estrabon dice que
es el lugar mas occidental no solo de Eu
ropa , sino tambien de toda la tierra habi
tada ; pero se engaña en esto , porque el
Cabo de Roca cercano á Lisboa está mas
occidental , y el de Finisterre es el mas
occidental de todos los Cabos del Conti
nente de Europa. No hay mas que ver
un Mapa , donde se manifiesta patentemen
te. Columela le llama Sacer Mons.
' 3 * En la Costa Septentrional , dice
Pomponio , habitan los Artabros , nacion
Céltica. Ptoleméo los pone junto al Pro
montorio Nerio. Plinio coloca á los mis
mos con el nombre de Arotrebas hacia el
Pro
DE ESTRABON. 13
do quarto corre desde aquí hasta los
límites Boreales del Pyrene'o. Te
niendo que tratar de cada uno , da
remos principio por el Promontorio
Sacro ; pues este , además de estar
situado hacia el Ocaso , es como
punto ó señal no solo de Europa,
sino tambien de todo el universo ó
tierra habitada. Esta se termina , ha
cia el referido Ocaso , en dos Con
tinentes , á saber , Europa y África
que son los extremos : en el primero
estan los Españoles , y el segundo le
ocupan los Moros. Pero el Continen
te Español excede al Promontorio Sa
cro
Promontorio Céltico. De lo qual resultó
que dicho Promontorio Nerio se llamaba
tambien Artabro y Céltico. Aunque algu
nos Autores distinguen al Céltico del Ar
tabro , colocando á aquel en la Punta ó
Cabo de Ortegal , y á este en el de Fi-
nisterre : sin embargo otros Geógrafos bien
instruidos dicen ser uno mismo, y al Cabo
de Ortegal le nombran Promontorium Tri-
leucum.
14 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ero que diximos en 18500 estadios,
y á la Region adyacente á él lla
maron con voz Latina ,4 Ager Cu-
neus.
' * Llamaron con voz Latina Ager
Cuneus ) . Las palabras de Estrabon no
tienen nada de obscuro ó ambiguo , por
que claramente significan que la parte ve
cina al Promontorio Sacro fué llamada
Ager Cuneus. Pero esto conviene poco á
lo que dicen otros. EHano afirma que no
es el Término el que se llama Cuneo , si
no el mismo Promontorio , y esto parece
mas conforme á la razon , como lo juzga
rá fácilmente qualquiera que vea los Ma
pas. Mela lib. III. cap. 1. llama Cuneo
al Término. Por eso debo advertir que no
puede ser que quepa emienda en el lugar
de Mela Cuneus ager dicitur , antes al
contrario está bien por ir conforme á Es
trabon , y erró el eruditísimo Pinciano en
querer corregirlo poniendo Cuneus d Grae-
cis dictus. Porque ¿quien me persuadirá
que los Españoles nombraron este sitio con
voz Griega? Estrabon afirma discretamen
te que ellos usurparon la voz Latina , lo
qual no es extraño ; porque en aquel tiem
po
DE ESTRABON. Ig
mus ' 5 *. A este mismo Promonto
rio,
po las Españas estaban sujetas á los Roma
nos , y los Españoles se deleytaron mucho
con la lengua Latina , lo que consta , ade
más de un pasage de nuestro Geógrafo,
por infinitos lugares que se pueden mos
trar , principalmente en Plinio. Este últi
mo Autor lib. IV. cap. 22. no llama Cu
neo al campo , tierra ó término vecino al
Promontorio Sacro , sino á otro Promon
torio diverso. Pero ¿ que hemos de enten
der ó pedir á Apiano que tantas veces
nombra Pueblos Cuneos ? Querrá decir los
que Estrabon llama Célticos , haciendo
mencion de la Ciudad Conistorsis.
' s * La Nacion ó Provincia de los
Cuneos estaba en Lusitania junto al Pro
montorio de su nombre. Este corresponde
hoy día á la punta que termina el terri
torio de Almarges entre Loule y Aldea
de Ventilhosa , : llamándose Cabo de Santa
María. Cuneus , segun varios Autores,
equivale á Gesum , esto es , un género de
flecha ó saeta céltica. Gomo dicho Cabo
se parece á una cuña , especialmente me
tiendo en cuenta las tres Islas con que re
ma
IO LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA

rio, que entra en el mar, le compa


ró bien á un navio Artemidoro, quien
afirma haber estado allí , y para com
pletar la figura vienen bien sus tres
Pág. pequeñas Islas ' 6 , una de las quales
138. ha
maca formando ángulo agudo , por eso le
llamaron Cuneus , que segun varios signi
fica el Rincon. Mr. Mentelle en la Geo
grafía comparada tom. VI. ignora por qué
los Latinos le llamaron así , y dice que no
puede ser otra la causa sino su figura cer>-
rada entre montañas y el mar. Los Ara.
bes llamaron á esta parte Garb ó Ponien
te , de donde se formó Algalbe que es su
nombre moderno.
1 h Vienen bien sus tres pequeñas Is
las ) . Es extraño que de estas no hayan
hecho mencion Mela ni Plinio, y tampo
co cita Estrabon los Promontorios que co
locan en este sitio aquellos Escritores. Me
la lib. III. cap. 1. escribe : Lusitania trans
Anam , qud mare Atlanticum spectat,
deinde resistit , ac se magis etiam quam
Baetica abducit : qua prominet , bis in se-
met recepto mari in tria promontoria dis-
pergitur. Anae proximum , quia lata se
de
DE ESTRABON. I£
hace las veces del pico de la nave
en la proa , las demás de dos orejas
pequeñas del navio, y las tres Islas
tienen medianos puertos. Eroro fin
gió , que aquí se manifestaba el
tem-
de procurrens se ac sua latera fastigat,
Cuneus ager dicitur , sequens Sacrum -oo-
cant. Magnum quod ulterius est. El que
compare lo dicho con el pasage de nues
tro Geógrafo, conocerá que las Islas no
son sino tres Promontorios. Y en erecto
varias veces tengo ya observado que los
Geógrafos confunden los Promontorios y
las Islas. Por eso vemos, que á la que
Estrabon llama Isla Scombraria nombra Pto-
leméo £*pa, , esto es , Promontorio. Estra
bon y Estéfano llaman Isla á Kxuis en Ita
lia , y Plinio Promontorio. Minea ó Mi
gara es segun Estrabon Isla , y segun Tu-
cídides Sxp*. A Lencas la intitula Ptole-
méo «*f>* , Estrabon y Tucídides Isla ó
Península. Luego tambien pueden ser es
tos Promontorios de Mcla las Islas de Ar-
temidoro , y me maravilló cómo á muchos
hombres sabios no se les ocurrió esta es
pecie.
,'
I8 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
templo de Hércules , lo que no es
así ; porque ni había ara de Hér
cules ni de otros Dioses , sino pie
dras puestas en muchos lugares de
tres en tres ó de quatro en quatro,
que parecían dar la vuelta á aquellos
que por allí pasaban , segun costum
bre de los antiguos ' 7. No era líci
to
' 7 Que parecian dar la vuelta). Es
te pasage está algo obscuro , y puede que
el original carezca de emienda. Yo no me
atrevo á imputar la falta á Estrabon , sino
á los que corrompieron su sentido , que
explicado puede ser el que sigue. Decía
Eforo que allí estaba el Templo de Hér
cules. Esto lo niega nuestro Geógrafo , y
Artemidoro indica la causa de la falsedad,
exponiendo que los habitantes de este si
tio decían era sagrado no sé por qué Dio
ses, y hablaban de unas piedras, que co
locadas en forma de ara andaban de su mo
til propio mudando lugar , creyendo la
supersticion de que los mismos Dioses las
movian. Justino tratando de la Religion de
su gente trae al lib. 44. cap. 3. En los
límites de esta nacion hay un monte sa
gra
DE ESTRAEON. jg
to sacrificar, ni pasar por aquel lu
gar de noche ; porque contaban que
los Dioses detenían al que se acer
caba en aquella hora , y por esto los
que venían á ver este espectáculo de
día tenían que pasar la noche en la
aldea vecina , llevando consigo el
agua , de la que dicho lugar carecía.
Esto pudo ser cierto , y por tal lo*
podemos creer ; pero no aquellas co
sas , que suelen decir los hombrecillos
plebeyos y vulgares. Comunmente
dice Posidonio , afirman algunos, que'
es mayor el Sol quando toca los mar
genes del Océano ' 8 , y que hace un
es
grado, que se tiene por muy injusto man
char ó profanar con armas : pero si al
guna vez se abre la tierra a causa de
un rayo (cosa freqüente por aquellos pa-
rages ) , es permitido recoger el oro des
cubierto , como un don ó regalo recibido de
la mano de Dios.
Que es mayor el Sol quando toca los
margenes del Océano). No es maravilla
que hayan afirmado esto muchos hombres
di im-
2O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
estrépito como si el mar silbase ó
rechinase I9 ; pero esto es falso , co
mo el que la noche venga luego que
el
imperitos , siendo cierto que el Sol y otros
cuerpos celestes parecen mayores quando
nacen ó quando se ponen , que no quan
do están en medio del Cielo. La razon de
esto la explican con variedad los Físicos,
como tambien los ópticos ; y Estrabon se
acerca mucho á la verdad , mostrando qual
es la causa ««¡hai»i.
1 » Como si el mar silbase ó rechina
se ). Es un error creer , que el Sol su
mergido en el Océano ha de chispear ó
rechinar , como lo haría un hierro ú otro
cuerpo ardiendo , si se metiera en agua,
lo que se confirma por ignorancia ó niñe
ría. Sin embargo hubo Filósofo que pro
nunciase tal delirio , principalmente Epi-
curo , á quien dieron crédito otros. Hace
mencion de esto el doctísimo Poeta Auso-
nio al principio de la Epístola XIX. á
Paulino:

Condiderat jam Solis equos Tartesia Cal/e


Stridebatque freto Titan insignis Hibero.
DE ESTRABON. 21
el Sol se pone, segun ellos quieren.
Esta, pues, sucede no al instante,
sino pasado un corto momento , y
especialmente en otros mares dilata
dos , á modo del Sol , que quando
muere en los montes , por el espar
cimiento de los rayos, hace el dia
mas largo , y no le cubren las tinie
blas tan pronto, lo qual suele tam
bien acontecer en campos ó llanuras
dilatadas. Pero de que la magnitud
del Sol parezca aumentarse por el
Oriente ó el Ocaso en los profundos
mares , no puede ser otra la causa
sino los vapores , que se levantan de
la humedad í0 , con los quales inter-
rum-
Tácito cuenta una cosa semejante en el Mar
de Alemania.
20 No puede ser otra la causa sino
los vapores , que se levantan de la hume
dad}. Este parecer de Estrabon no hay du
da que es de los pensamientos mas felices;
pero el curioso puede juzgar viendo , ade
más de Cleómedes , los escritos de otros
modernos.
¿3
22 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
rumpidos los rayos visuales, como en
ciertas flautillas , se esparcen y fingen
mayor quantidad que la verdadera;
á la manera que el Sol ó la Luna,
quando la vemos nacer ó ponerse por
medio de una nube seca y delgada,
creemos ser roja. El Autor citado es
cribe que se engañó en la observa
cion que hizo del Sol , quando se de
tuvo en Gades treinta dias : pero Ar-
temidoro dice que el Sol quando se
pone es cien veces mayor , y que
luego al punto sigue la noche. Nin
guno que haya observado lo que di-
xo sobre el asunto creerá que viese
esto en el Sacro Promontorio ; si es
cierto (como afirma) que ninguno
entra allí de noche , y que nadie es
tuvo allí despues de puesto el Sol,
aunque después le cogiese la noche.
Pero ni aun esto vio en algun otro
lugar del Océano, porque Gades es
tá en su costa , aunque Posidonio
y otros muchos afirmen lo contra
rio. Así , es cierto que estando ad
yacente la costa marítima al Sa
cro
DE ESTRABON. 23
ero Promontorio , por una parte Pág.
es principio del lado Occidental 139.
de España hasta la embocadqra
del Rio Tajo *' *, y por otra del
la-
" * Ptoleméo lib. II. cap. V. pone
á las bocas del Tajo ú Tagus en . 5 \ . 40 ■*■
Plinio lib. IV. cap. ai. dice : "El Tajo
«es muy célebre por sus arenas de oro.
«Entre él y el Promontorio Sacro, que pa-
«rece salir al mar , cuentan ciento setenta
»imil pasos. La distancia del Tajo al Gua-
»idiana , que separa la Lusitania de la Be
ática, es de ciento veinte y seis mil pasos,
*>y su distancia de Gades ciento y dos
«millas mas." Celario lib. II. cap. i. sec
cion 1. habla de sus arenas de oro , citan
do á Ovidio. Metamorph. lib. II. vers. 251.
jQuodque suo Tagus amne vebit , fluit ignibus aurum.
Silio Itálico añade tambien al Duero , lib. I.
v. 234.
Hete certant , Pactole , tibi Duriusque Tagusque.
Algunos pretenden , segun la Marti-
niere , que hoy día no se halla oro en el
Tajo , otros dicen que sí , pero que está
d4 pro-
24 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
lado Austral hasta el Rio Anas ó
Gua-
prohibido sacarle , de miedo que las arenas
removidas no traigan algun perjuicio á las
tierras de labor que son baxas. Lo cierto
es que la corona y cetro de los Reyes de
Portugal se hicieron con el oro del Tajo.
Este Rio tiene su origen en la parte Orien
tal de Castilla la Nueva , confinante con
el Reyno de Aragon. Atraviesa toda la
Castilla de Oriente á Occidente , y baña
á Toledo : de aquí pasa á Almaraz y á Al
cántara en la Extremadura de España , des
de donde entrando en la Extremadura de
Portugal riega á Santarén , va formando un
pequeño golfo de una legua de ancho que
sirve de puerto á Lisboa y dos leguas mas
abaxo desagua en el Océano Atlántico. El
Rmo. P. M. Fr. Enrique Florez ( al to
mo V- cap. i. de su España Sagrada) es
cribe , que hoy se emplean algunos en el
logro de las piedras preciosas que Mela
atribuye al Tajo lib. 3. cap. 1. y hallan
no ser ficcion de los Poetas. " Su naci-
«miento ( añade ) es sobre Cuenca , en-
«tre esta , Molina de Aragon y Albarra-
»cin , en un sitio que Ihmm^Fuente Gar-
. . acia,
DE ESTRABON. 2g
Guadiana 2l*. Uno de los dos corre
por
r>cía , donde brotan tres Ríos , el Guada-
«laviar que camina al Oriente desaguan-
«do junto á Valencia : y Gabriel y Jucar
«que baxan al Mediodía , torciendo luego
«á Oriente San Isidoro recurre á la
«voz Carthago para la etimología del nom-
«bre de este Rio , lib. 13. cap. 2i. Pero
«yo no alcanzo la conexion de uno con
«otro ; y así me contento con citarle.
«En Aranjuez recibe el Tajo al Rio
"Jarama , enriquecido ya con el Hena-
«res , Tajufia y Manzanares."
"* Ptoleméo lib. II. c. IV.
pone á la boca Oriental del Guar
diana en 4 "3" • • 37 í
A una curvatura que tiene
hacia el Oriente 6 \ . . 39 ..
Y su origen en 14. . .40..
Plinio lib. III. cap. I. dice, que nace
en el Campo Laminitano de la España
citerior , y ya formando estanques , ya es
trechos, ú ocultándose del todo y querien
do salir varias veces , derrama por fin sus
aguas en el Océano Atlántico.
La Martiniere escribe : " Guadiana,
.' . «Rio
26 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA '

por partes de España situadas hacia


el
«Rio grande de España. Los Latinos le
«conociéron baxo el nombre de Ana , y
«á este añadieron los Moros las dos prime
aras sílabas del nombre moderno. Nace , se-
«gun el Abate Vairac , en Castilla la Nue-
«va, cerca de Cañamares en una vasta
«campiña , nombrada por los Españoles
*>Campo de Montiel. Sale de ciertos La-
«gos , que llaman en el país Lagunas de
«Guadiana ó de Ruidera ; se pierde de-
f>baxo de tierra un poco después , y rena-
«ce por las aberturas ú Ojos de Guadia-
«na , desde donde va hacia Calatrava.
«Allí se engruesa con el Rio formado por
«el encuentro de los de Rianzares y Zán-
» cara ; como tambien por los de Giguela
«y Bedija , que tienen una misma corrien-
«te desde Villaharta. Unido así el Gua-
«diana junto á Calatrava , corre tanto al
«Poniente como al Mediodia , Sur-Oeste
«y Nor-Oeste , pasa á Ciudad Real , y
«después de haber recogido las aguas del
«Rio Bullaque , del Estena , Guadarran-
«que , y algunos otros arroyos , entra en
«la Extremadura , pasa á Mérida y á Ba-
«da-
DE ESTRABON. 27
el Oriente ; pero el Tajo mucho ma
yor
«dajoz , de allí á Portugal , donde baña
«las Provincias de Alentejo y Algarbe , y
«se echa en. el Océano entre Castro-Ma-
«rin y Ayamonte.
«Antiguamente, dice el mismo Aba-
«te Vairac , descargaba en el mar por dos
«brazos ; pero le sucedio lo mismo que
«al Guadalquivir : uno de ellos se cerró
«con el tiempo Formaba aún dos ó
«tres Islas , y en su embocadura es tan
«poco profundo que apénas tiene dos ó
«tres pies de agua. Algunos Españoles
«cuentan como enigma , que tenia un puen-
«te , sobre el qual podian apacentar libre-
«mente diez mil carneros. Otros que no
«sabian donde colocar este puente fingido,
«le buscaron junto á Medellin , que es la
«Metallinum de los Antiguos Desde
«Mérida hasta Mertola , dos Ciudades dis-
«tantes la una de la otra como treinta y
«cinco leguas , está todo lleno á la dere-
«cha é izquierda de una infinidad de ro-
«cas que impiden su navegacion , y hacen
«el paso muy difícil y peligroso. No es
«maravilla , que crean se pierde baxo de
«tier
28 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
yor que el otro , va en derechura al
Ocaso. El Guadiana se vuelve al
Mediodía , y circunscribe una Re
gion llena de Rios , habitada lo mas
por Celtas 2* * y
Lu-
«tierra , guando en la sequedad se des
aparece en muchos lugares. Esto dió lu-
»igar á que dixese un ingenio tratando de
»ilos Rios de España : El Ebro por su
«nombre , el Duero por la fuerza , el Ta-
»ijo por la fama , el Guadalquivir por sus
» riquezas , y el Guadiana , no teniendo
»»con quien compararse , se oculta de ver
güenza."
a3 * Los Celtas , segun la Martiniere,
es un antiguo Pueblo de la Europa. Fún
dase en que Ortelio hizo un Mapa de la
Europa antigua con el título Céltica vetus,
y que Ptoleméo se conforma con el mis
mo parecer. En efecto no se encuentra
país alguno donde no haya Celtas. Heró-
doto los pone en España hácia el Occi
dente , mas allá de las Columnas de Hér
cules. Estrabon junto al Rio Betis , hoy
Guadalquivir. Plinio coloca á los Célticos
Praesamarcos baxo el Departamento de Lu-
CE ESTRABON. 29
Lusita
nos,
go , y á otros por sobrenombre Nerios , ba-
xo el de Tarragona. Dion y Xiphilin,
cuentan entre Celtas los habitantes de Can
tabria y Asturias. Plinio cita la Ciudad Cél
tica en el Departamento de Sevilla. En la
Galia se ven los Celtas y Celtogálatas , que.
de allí pasaron á la Gran Bretaña. Apia
no los coloca en Italia. Eforo , antiguo Geó
grafo , citado freqüentemente por Estrabon,
divide la tierra en quatro partes : dice que
la de Oriente está poseída por Indios , la
del Mediodia por Etíopes , la del Norte
por Scytas, y la de Occidente por los Celtas.
Estas razones bastaron para que Orte-
lio creyese que el nombre de Celtas era
general á todos los países de Europa. Clu-.
verio limita un poco esta idea , y preten
de que Ascenes , biznieto de Noé , se es
tableció despues del Diluvio con sus hijos
y descendientes en la Céltica , esto es en
la Ilyria , Germania , Galia , España é Is
las Británicas, de modo que le hace el pa
dre comun de los Celtas.
El P. Florez tom. 1 3. cap. 1 : " Es muy
«afamado el nombre de los Celtas por la mu
«cha
3<D LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
nos 24 * , traidos aquí por los Roma-
1 nos
„ cha extension con que se difundieron des-
„ de el Danubio á Guadiana , ocupando aun
„ dentro de España no uno , sino diversos
„ territorios , pues entrando en los contor-
„ nos del Ebro , se intitularon Celtiberos
„ los Celtas que se mezclaron con los Ibe-
„ ros , dexando allí nombre de Region , Ua-
„ mada por las dos gentes Celtiberia. Otros
„ pasaron mas adelante , llegando hasta Lu-
„ sitania , de donde pasaron á la Bética , se-
„ gun refiere Pliniolib. III. cap. i. hablando
„ de los Célticos entre Guadiana y el Betis,
„ de quienes dice : Célticos d Celtiberis ex
„ Lusitania advenisse manifestum est , sa-
„ cris , lingua , oppidorum vocabulis , quae
„ cognominibus in Baetica distinguuntur. Pe-
„ ro como en la Lusitania no hubo Celtí-
„ beros , sino Celtas ó Célticos , leen algu-
„ nos d Celticis ex Lusitania : otros a Cel-
„ tiberis et Lusitania : y de qualquiera
„ modo se verifica que entre el Tajo y Ana,
„ y entre este y el Betis , hubo Célticos:
„ como tambien en otra parte de la Bética
„ de la parte de allá del Guadalquivir, &c."
a+ * Cluverio lib. II. cap. 3 : "La Lu-
ttsi-
DE ESTR.ABON. 3I
nos de la Region situada mas allá
del
sitania termina hacia el Septentrion en
el Rio Duero , por el Ocaso con el Océa
no , por el Mediodía con el Guadiana,
, y se separa de la Provincia Tarraconen
se tirando una linea al Oriente desde Ciu-
„ dad Real hasta Zamora." Los antiguos
quisieron derivar el nombre de Lusitania
de Luso y Lysa , compañeros fabulosos
de Baco. Tiene la Ciudad Olysípo jun
to á las bocas del Tajo , y algunos creen
ser fundada por Ulyses.
La Martiniere en su Diccionario es
cribe : " La Lusitania era en otro tiempo
„ una de las tres Provincias que compo-
„ nian la España. Sus límites no fueron
„ siempre los mismos } pero los antiguos
„ Geógrafos dieron al Tajo por término
„ Meridional , y del lado del Septentrion
„ extendieron los límites de esta Provincia
„ hasta el Océano Cantábrico , ó á lo mé-
„ nos hasta el Promontorio Céltico , Ne-
„ rio ó Artabro. Sin embargo , el país que
„ estaba entre el Rio Anas y el Tajo se
„ llamó la Céltica , como observa Isaac
„ Vosio. Luego que los Romanos se hi-
,1 cié-
32 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
del Tajo. Sobre el Guadiana moran
los
„ cieron dueños de toda España , Augus-
„ to hizo una nueva division de Provin-
„ cias , y entonces se limito la Lusitania
„ por el Norte con el Rio Duero , por el
„ Mediodia con el Anas ; y toda la exten-
„ sion de las tierras entre el Duero y el
„ Océano Cantábrico fué unida á la Pro-
„ vincia de Tarragona. Los límites señala-
„ dos hácia los faetones y Carpetanos fue-
„ ron diversos. Esta diferencia nace de que
„ confundieron la Provincia de Lusitania
„ propiamente dicha con el país de los Lu-
„ sitanos." . j
El P. Florez tom. III. cap. i. dice:
"Desde el Tajo arriba empezaba la Re-
„ gion de los Lusitanos. Su extension por
„ el Norte fué en lo antiguo hasta el mar,
„ incluyendo á Galicia ; pero desde Au-
„ gusto se contraxo al Duero : por lo qual
„Plinio y Ptoloméo señalaron por límite
„ Boreal de los Lusitanos al expresado
„ rio. Despues que los Romanos empeza-
„ ron á dominar aquellas gentes , hicieron
„ que pasasen á la banda Meridional del
„ Tajo i y desde entonces quedó la mayoc
„par-
.' .. DE ESTRABON. 33
los .... ....... JS * Carpe
ta-
„ parte de la tierra que hay entre los dos
„ Ríos Tajo y Guadiana , habitada de los
„ antiguos Celtas y de los Lusitanos nue-
,, vamente trasladados. Desde entonces , pues,
„ empezaron estos á vivir en el territorio
„ que hoy llaman de Alentejo , ó Ultrata-
„ gano : y por tanto señala Ptoloméo co-
„ mo parte de los Lusitanos la porcion Orien-
„ tal sita entre los dos Rios , y á los Cél-
„ ticos les da la Occidental , en la confor-
„ midad que vemos en su Mapa."
"s * Ptoleméo pone á los Carpetanos
mas Australes que los Vacceos y Areva-
cos , y entre otras muchas Ciudades ad
yacentes <cita á Mantua , Toletum , Com-
plutum , Garacca , Libora ó Talábrica , hoy
Talavera, , Ispinum , Pedraza de la Sier
ra , y Pácerniana , hoy Pastrana.
Plinio'lib. 3. cap. 3. los coloca cerca del
Tajo : su nombre se deriva del Griego
Carpos que significa fruto , por ser un
pais muy abundante.
El P. Florez al tom. IV. de la Espa
ña Sagrada escribe : "Consta por los lí-
„mites de los Carpetanos, que al Orien-
""'• #• «te
34 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tanos 26 * Ore-
ta-
„ te : confinaban con los Celtíberos llegando
„ hasta tierra de Cuenca , y por tanto
„ Ocaña quedaba dentro de la Carpetania,
„ mirada esta por su linea Oriental , que
„ llegaba hasta el Rio Xucar exclusive.
„ Por el Mediodía empezaba desde Somo-
„ sierra y acababa en Alcaráz y Campo de
„ Montiel : cpnio consta de que el último
„ lugar de los Carpetanos era Laminio , se-
„ gun Ptoloméo. Este Laminio estuvo cer?
„ ca de Montiel ; pues Plinio expresa que
„ el Rio Guadiana nacía en el Campo La-
„ minitano , lih, 3. cap. 1. Luego, toda esta
„ jurisdiccion viene á ser lo que hoy abra-
„ za el Arzobispado de Toledo * no con-
„ tando el Adelantamiento de Cazorla."
a6 * El sitio donde Plinio puso á la
Region llamada Oretania , y eí nombre
Griego , que significa pais verdegueante,
obligan á colocar sus habitadores hácia las
montañas del Guadiana y Tajo, donde es
tá hoy día el Rosetan. Recibiéron los Ore-
tanos este nombre de una Ciudad , que
fué antiguamente Episcopal , sita cerca de
Almagro , y del lugar llamado Granatula,
don-
DE ESTRABON. 35
taños ,T , y mas freqüentes los Vet-
to-
donde hoy está la Ermita de Nuestra Se
ñora de Oreto , llamada tambien , como
escribe Morales , de Azuqueca. Comprehen-
día su territrorio la Sierra de Segura y el
Adelantamiento de Cazorla.
37 Los Carpetanos y Oretanos ). Quan-
do dice Estrabon que estos Pueblos están
en la parte superior de la Bética conviene
con Plinio , que afirma dividirse la Tarra
conense de la Bética y Lusitania por me
dio de las cumbres Oretanas y Carpetanas.
Pero quando atribuye dichos Pueblos á la
Bética , vá discorde con Ptoleméo , quien
los cuenta en la tfípmyíim de la Provincia
Tarraconense. Parece que los Carpetanos
son aquellos que los Griegos llaman Car-
pesios. Estéfano , Ketp*Í9m i&ns i£ip<xor rSt
eirá ifripoí woraycior. Polybio lib. III. llama
Carpesios á los que Livio llama Carpeta-
nos en su Historia lib. 21. cap. 5. Sin em
bargo , el mismo Polybio en otra parte co
noce á los Carpesios , á no ser que nues
tros libros nos engañen , como tambien Li-
■vio lib. 23. cap 26. Leimos en Estéfano
que juzgaba por Carpetanos los que habi-
e 2 tan
36 LTBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tones a8 *. Esta Region es mediana-
men-
tan el Calpe , como si dixéramos Calepia-
nos ó Calpianos.
48 * Ptoleméo coloca á los Vettones,
Vergones ó Vectones mas Orientales que
los Lusitanos. Segun algunos , son los de
Escalona , que está como unas quince le
guas al Norte de Toledo. El célebre Pe->
dro de Marca escribe , que babia parte de
ellos en la Lusitania cerca del Tajo , y
parte en la España Tarraconense junto al
Duero. Prudencio llama al Pais Vettonia,
y da á Augusta Emerita el título de cla
ra Kettoniae colonia : Hymno 9. In Eulal.
v. 186. Véase cómo está puesto en lano
la 134 * . Silio Itálico III. 378. dice así:
slt Vettonum alas Bálarus pnbat aequore aperto.
El P. Florez tom. 13. pág. 34. escribe , que
empezaba la linea Oriental de testos desde
la ribera Meridional del Duero entre Si
mancas y Toro , baxando por el Oriente de
Avila hasta el Tajo;, á quien cortaba cerca
de la Puente del Arzobispo , y baxaba por
la cordillera de Guadalupe hasta. cerca de
Trugillo La linea Occidental de los
Vet-
DE ESTRABON. 37
mente feliz. Pero la que sigue des
pués hacia el Oriente y Mediodía,
aunque se compare con qualquier par
te de la tierra habitada , no habrá
ninguna á quien deba posponerse en
excelencia de bienes , tanto de mar
como de tierra. Esta es la que riega
el Betis í9 *, Rio que nace de la mis-
.;• '. ma

Vettones llegaba hasta el límite actual de


Portugal con poca diferencia : de suerte
que dentro de la Vettonia quedase Ciu
dad-Rodrigo y Plasencia : pues aunque á
Caurium le puso Ptoleméo entre los Lu
sitanos , erró la situacion , en suposicion de
que denotaba á Coria , como reconocen
los Autores. La linea Boreal fué el Duero
desde cerca de Simancas hasta la entrada
de Portugal. Y la Meridional remataba
junto á Alburquerque , Trugillo y Berzo-
cana , &c.
29 * Pomponio Mela lib. 3. cap. 1. es
cribe del Rio Betis , que baxando de la
Region Tarraconense , corre bastante tre
cho solo , del mismo modo que nace , por
medio de la Bética : cerca del mar hace
e3 un
38 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ma parte con Guadiana y Tajo , ca
si
un gran lago , de donde vuelve á renacer
como nueva fuente , y siendo así que en
tró como en un simple cauce , despues sa
le mayor que los demás. Tiene otro seno
hasta el fin de la Provincia , y en él hay
los pequeños lugares de Olintingi , Onoba
y Laepa. Ptoleméo coloca á las bocas Orien
tales del Betis en los grados 5 .*. 37..
Y á su origen en 12....... 38^
Plinio pone el nacimiento de dicho
Rio en la Montaña de Tugia ó Tugiense,
que segun el P. Harduino corresponde á
Sierra de Alcardz. Dupinet traduce por
Tugiensis saltus, Montañas de Segura, y
otros con increíble diferencia Sierra Ne
vada. Ortelio cree que el Tugiensis sal
tus de Plinio , y el Castulonensis de Ti
to Livio son una misma cosa.
Al Betis , nombre Latino , segun la
Martiniere , le dio Silio Itálico el de Bae-
tes lib. 3. y. 405 :

Palladio Baetes umbratus cornua ramo.

Rara vez se escribe sin diptongo ; no


obs-
•..•'.. DE ESTRABON. 39

si igualmente grande que qualquiera


de
obstante , los Poetas tomaron la licencia
de hacer breve su primera sílaba : entre
otros San Paulino Obispo de Ñola. Carm.
X. ad Auson. v. 236:
Qua Betis Oceanum , Tyrrbenumque auget llerui.
Algunos Autores declinan este nombre
á la Griega , y no solamente los Poetas,
como Marcial lib. 9. Epig. 62 :

Qua dives placidum Corduba Baetin arnet;

y Estado en los versos para el nacimiento


de Lucano: i. ¡, ...'.
í.. '. '..¡ •.' . , . . . l
Grajo nobilior Melete Baetis.
Baetin Mantua provocare noli;

sino tambien los Escritores en prosa como


Plinio , que hablando del Xenil que cae
en este Rio dice : SingulisJiuvnis in Bae
tin irrumpens.
El P. Florez tom. 5. pág. 43. escribe:
Al Mediodia de Guadiana tiene su naci
miento el Betis , el qual aunque por su
e4 prin-
4<3 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de los dos , y al principio vuelve
há-
principal espacio toca á la Provincia de la
Bética , con todo eso por su origen fué
de la Tarraconense. Nace en los Oretanos,
en el sitio que era parte del Orospeda,
dicho segun algunos Monte Argenteo. Hoy
se llama aquel: sitio Sierra de Cazorla , á
cuya parte Oriental brota el agua , y em
pieza corriendo al Norte , hasta que á las
quatro leguas halla un corte de peñas , que
le permiten inclinarse al Ocaso, y baxar al
Mediodía, hasta recibir á Guadiana el me
nor , desde cuyo punto gira por el Oc
cidente , no solo en todo el territorio de la
Cartaginense ( de la qual sale ; luego que
recibe el Rio de Jaen ) , sino hasta cerca
de Sevilla , en que tuerce al Mediodía,
y da en el mar por San Lucar de Barra-
meda.
Los Moros quitaron á este Rio su nom
bre primitivo , y le pusieron el de Gua
dalquivir , que se interpreta Rio grande,
y es el de que hoy usamos. Los Esparto?
les antiguos le llamaron Tarteso , y die
ron el mismo nombre á una Ciudad, que
hubo entre los dos brazos , ó bocas , con
1UC
■' . DE E5TRAB0N. 41
hacia el Ocaso como Guadiana , des
pues mira al Mediodía , y desagua
con el otro. en la misma costa. A
la Region , la llaman Bética 3° * por
V. .. ,"....j ', • el
que antiguamente se metia en el Mar. Hoy
se> unen los dos, brazos en uno. despues de
formar algunas Islas , y dan junto todo
süj caudal al Océano Atlántico. El Betis
desde luego empieza á ser freqüentado por
lugares ilustres , que á competencia pro
curaron gozar sus márgenes.
., 30 * La Bética, segun Plinio lib 3.
cap. i , era famosa entre todas las Provin
cias de España por su riqueza , fertilidad^
y particular excelencia del terreno. Conv-
prehendia quatro jurisdicciones ,. la de Ga-
des y. Astigís (hoy Ecija ) , la de Hispa-
lis , y Córduba , actualmente una de las
mejores poblaciones de Andalucía. Con
taba en todo 18$ Ciudades, entre ellas
9 Colonias , .18 Municipales , 29 del fue
ro del Lacio antiguo , 6 libres, .3 confe
deradas , y i a© estipendiarías. El fuero del
Lacio consistia, en poder ascender á todos
los i grados de lá Milicia Romana; El de-
aecho de libres ó franquicias era poder nom-
■•; \ brar-
42 LIBRO II*. DE LA GEOGRAFIA
el Rio , Turdetania por sus habitan-
m ¡ : xtes,
brarse sus Magistrados , conducirse por le
yes propias ; pero unidas á lo ménos táci
tamente con la República. Las Ciudades
aliadas ó confederadas no debían ningun
privilegio á los Romanos , y cada una de
ellas trataba á Roma como su igual ; en
nada dependían del Senado y Pueblo: id*
timamente , tenían un tratado de alianza
ofensiva y defensiva. Así eran Saguntoen
España , Autun en las Galias , &c. ..»
JLa Bética propiamente dicha está , se
gun la Martiniere , entre el Guadiana y
el Mar al Mediodía. Lo que se halla en
medio de este Rio y el Guadalquivir , prin
cipalmente hacia el Oriente y junto .á los
Oretanos , tenía el nombre particular de
Beturia. No es fácil señalar los límites de
la Botica del lado de Oriente ; porque di
versos Príncipes los alteraron. El P. Flo-
rez tom. 9. pág. 3. escribe, que fue Pro
vincia de la Bética todo lo incluido por
la costa del Mar desde Moxacar hasta la
boca de Guadiana , dexando incluida la
Isla de Cádiz , y siguiendo dicho Rio has
ta el punto que hay sobre Villanueva de
la
DE ESTRAB0N. 43
tes , y ellos Turdetanos , y Túrdu-
los 3I *. A estos unos los tienen por
el
Ja Serena, por donde se junta con Gua
diana el Zuja. Pasaba después la linea so
bre Almadén por las cuestas que desde
Guadalupe vienen á Sierra Morena , adon
de está Fuencaliente. Desde allí baxaba al
Rio Guadalquivir , cortándole entre los
Riachuelos Herrumblar y Guadal bollon ; y
proseguía por el Occidente de Jaén con la
linea que divide hoy el Arzobispado de
Granada de lai Diócesi de Guadix hasta
acabar entre Urci y el citado Moxacar.
■ ' 3 * * Aunque dieron á la Bética el nom
bre de Turdetania por sus habitantes , co
mo afirma nuestro Geógrafo , es opinion
muy recibida que los Turdetanos y Túr-
dulos formaban Provincias diferentes. El P.
Florez al tom. 9. pág. 7. conviene en que
los Túrdulos y Turdetanos sean naciones
distintas, y prosigue diciendo : "Ptoloméo'
«separa estas dos gentes , pero de diverso
«modo que Estrabon , pues á los Túrdu-
»ilos los coloca al Oriente de los Turdeta-
»nos , dando por Metrópoli de aquellos á
«Córdoba y de estos á Sevilla. En Mela
44 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
el mismo pueblo , otros por diver-
• ' sos,
«y Plinio no hay mención del nombre de
«los Turdetanos , sino solo de los Turdu-
«los ; indicio de que eran voces promis
cuas , y que prevalecía en aquel tiempo
«la de los Túrdulos ; pues no omitieran
»»á los Turdetanos , si denotara entonces
«Region diferente. Supuesta , pues , ahora
«la distincion , solo pueden señalarse los
«límites de los Turdetanos por la demar
cacion de Ptoloméo , que les dio la par-
«te Occidental de la Bética , donde les
«aplica á Ecija , Sevilla y Medinasido-
«nia , con todo lo que cae al Occidente
«de estas poblaciones y de la linea que se
«tire desde Sierra Morena hasta el medio
«del Estrecho. Lo incluido en este espa
cio hasta el Rio Guadiana era de los
«Turdetanos Béticos , exceptuando un po
co que tocaba á los Célticos.
«He dicho Turdetanos Béticos , por-
«que segun Ptoloméo proseguían las pobla
ciones de los Turdetanos por la otra par
ce de Guadiana , que era de la Lusitania,
«abrazando hasta el Cabo de San Vicente,
«ó Promontorio Sacro , con todo y aun al-
«go
DE ESTRAB0N. • ; 4^

sos , entre los que se cuenta Polybio,


quando dice, que los Turdetanos son
vecinos de los Túrdulos al Septen
trion. En nuestro tiempo no hay nin
guna diferencia entre ellos. Son re
putados por los mas doctos de toda
España , hacen uso de la Gramática,
tienen escritos monumentos de anti
güedad, poemas, y leyes en metro
de seis mil años (como dicen ). Los
demás Españoles se valen de la Gra
mática , pero no todos de un mismo
i. :.. . • rno-
»»go mas de lo que hoy pertenece al Rey
uno de Algarhe. No solo había Turdetanos
«fuera de la Botica por el conlin de la Lu-
«sitania , sino en la Tarraconense y no léjos
«de Sagunto , si es legítima la leccion de
«Tito Livio en la Dec. 4. lib. 4. cap. 7.
«y 9 , y bd la Dec. 3. lib. 8. cap. 21.
• •. j .^Últimamente los Túrdulos ( prescin
diendo de unos: que llamaban Turdulive-
«ter,es) ocupan la parte Oriental de la Be
ática , extendiéndose con todo lo mediter
raneo que hay desde Vera hasta el medio
«del Estrecho de Gibraltar.
46 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
modo , como ni tampoco con el mis
mo lenguage. Esta Region que está
dentro del Guadiana tira al Oriente
hasta los Oretanos : despues al Me
diodía , desde la desembocadura del
Guadiana en la costa marítima , has
ta las Columnas. Es preciso hablar
mas de ella y de los lugares vecinos,
para entender la felicidad y excelen
cia de su clima. Después entre esta
costa , en que desaguan el Guadiana
y Betis , y los extremos de la Mau
ritania, formándose rápido el Mar
Atlántico 3l * , se hace el Estrecho
de
3* * El Mar externo , Océano ó At
lántico fué llamado así ya por Atlante,
monte de Mauritania , ó bien por su Pro
montorio , y se extiende con xste nombre
rodeando á España desde el Estrecho has
ta Cabo de Finisterre , segun algunos Geó
grafos. Otros le colocaron al Occidente de
Africa , y aunque en su tiempo dieron
vuelta á parte de la costa , solamente lo
graron una idea imperfecta de todo lo que
se halla mas allá del monte , dicho el Car
ro
CE ESTRABON. 4*
de las Columnas , por el qual se jun
ta el Mar interno con el externo. En
este lugar está el monte Calpe 3i * de
los Españoles llamados 3* Basistanos
.... y
ro de los Dioses 6 Sierra Leona : en este
espacio estaban las Islas Purpurariae , hoy
de Cabo Verde , y las Fortunatas , al pre
senté Islas de Canaria. Mr. de 1* Isle en
un Mapa del Mundo antiguo extiende el
Mar Atlántico por el Occidente de Euro
pa , costas de Portugal , España , Francia,
y aun de las Islas Británicas.
.\ ík Otros llaman Atlántico el vasto Mar,
que hay entre América, Europa y Africa,
desde el Mar Helado hasta la linea Equi
noccial , donde empieza el Océano Merir
dional ó de Etiopia. Véase á Mr. Bouache
que trató tambien de esto muy á lo lar
go en su Geografía Física.
,,33 # Véase la nota 11 *.
-í. 34 Basistanos y Bástalos*). La lec
cion antigua es Bastitanos : en Ptoleméo
Bastetanos ., y lo mismo en Estrabon un
poco mas abaxo : pero Ptoloméo distingue
entre Bástulos y Bastitanos , haciendo cier-
" , ta
48 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
y Bástulos » * t no de mucho ámbi
to,
ta diferencia , que otros aprueban y Es-
trabon confunde. A los Bástulos los colo
ca donde Estrabon, y á los Bastetanos en
la España citerior.
« * Convengo en. que los Bástulos y
Bastitanos son Provincias diferentes , pues
si muchos Geógrafos están de contrario pa
recer ¡ otros , y aun la mayor parte , me
siguen. Plinio coloca á los Bastetanos in
Mediterráneo , y dice que los Bástulos ha
bitaban la costa opuesta del Océano Atlán
tico , primi in ora Bastuli , ó como pone
después , ab And autem Oceano Atlánti
co obversa ora Bastulorum Turdulorunít^de
est. El pais que ocupaban aquellos., segun
el P. Briet , corresponde al territorio de
Murcia y Obispado de Guadix. Los Bás
tulos llamados tambien Poeni, esto es, Fe
nicios ó Cartagineses , á causa de su orí-
gen , se extendían mas allá del Estrecho.
El mismo P. Briet les da parte del Duca
do de Medinasidonia con los Obispados de
Málaga y Almería. Por quitarse de varia
ciones , el Mapa demuestra lo que me ha
parecido debe ocupar cada uno de ellos. •
/> DE ESTRABONi "T. ' '. 49
to , pero de tanta altura , que ofre
ce la imágen de una Isla k los que
le miran de lejos 3<s . Este está á la
derecha de nuestro Mar para los que Pág.
navegan de fuera , y á quarenta es- 1 40.
tadios de distancia la Ciudad Cal-
pe « , antigua y memorable , muelle
en
3« Paulino escribe á Ausonio:

Discussit bimarem celso qui vertice Culpen.

Mela II. c. 6. hablando de los montes Cal- \


pe y Abyla trae : Uterque quidem sed Cal-
ge magis et pene totus in mare próminens.
37 La Ciudad Calpe"). Creo que se
debe leer Ciudad Carteya ; porque así en
seña el contexto que debe entenderse , y
sería extraño que Estrabon la nombrase
despues tantas veces sin haber hablado nada
de su situacion , siendo como consta por
bastantes causas Carteya una Ciudad veci
na al monte Calpe. Mela II. c. 6. , des
pués de describir el Calpe , dice : Mas
adelante hay un seno y en él Carteya. Lo
mismo escribe Ptoleméo : pero Ciudad Cal-
pe no se halla ni aun nombrada en los an-
/ ti-
gO. LIBRO ni. DE LA GEOGRAFIA
en otro tiempo de naves Españo
las 38 *, Afirman algunos, que esta
fué fundada por Hércules ; y entre
ellos Timóstenes , que en los siglos
pasados cuenta fué nombrada Hera
cles , y que aun había gran circuito
de muros y atarazanas. Siguese Mela*
ría " * , donde se componen las car
nes
tiguos , siendo por otra parte cierto que
la fundada y llamada Heracléa por Hér
cules fué Carteya ; y aunque el Itinerario
de Antoníno dice que son dos diversas , no
es natural que las dos fuesen fundadas por
Hércules y adornadas con su nombre á un
mismo tiempo. Lo mas creíble es que di
cho pasage , no teniendo otro testimonio,
se habrá alterado ó corrompido.
38 # Véase la Nota 103 *.
39 * Melaría , antigua Ciudad de Es
paña en la Bética junto al Mar. Plinio la
nombra inmediata á Belo. Marciano de He
racléa la llama Menlaria y Ptoleméo Men-
ralia. El P. Harduino dice que está ente
ramente arruinada y su situacion corres
ponde hoy día á Milarese ó Cabo Muri-
nal.
DE ESTRABON. £j
nes saladas. Despues Belon , Ciudad
Y
nal. A Mr. Conduitt , Caballero Inglés,
que en este país hizo varias pesquisas y
las comunicó después al Público , le pare-
ce que estaba donde se halla al presente
Val de Vacca , que no es sino una Aldea
como á legua y media de Tarifa hacia el
Occidente , donde por tradicion creen que
existió una Ciudad de las mas considera
bles. El mismo Autor afirma su conjetura
fundado en que dicho Canton produce ex
celente miel. Por esta razon sería tambien
la antigua Melaria Vejer de la Miel , ó
Tarifa , como quieren Mármol y otros Geó
grafos , u la Playa de Orimel y Rio de la
Miel , sitios donde pudo existir nuestra Me
laria. Mr. Corneille dice que esta Ciudad
era patria de Pomponio Mela; pero se en
gaña , pues el mismo Mela dice que era
de Tingis , Colonia Española traída por los
de Tingis , Capital de la Mauritania Tin-
gitana en Africa. Esta Tingis de España
patria de Mela , era la Julia Traducía,
nombrada tambien Tingentera ú Cetra-
ria , y parece que esti#o junto á las Al-
geciras. . ' ', . . ,,,;.
g2 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
y Rio 4° * : de aquí se pasa princi
palmente á Tingis dela Mauritania,
y allí están los mercados y carnes
saladas. Hubo una Ciudad vecina á
Tingis , llamada Zeles ; pero á esta
la mudaron los Romanos á la otra
parte del mar , y además de algunos
colonos de Tingis enviaron otros de
Italia , y la pusieron el nombre de
Julia loza 4I *. Siguese Gadira ó Ga-
des,
40 #' Belon ; llamada tambien Claudia
por Antonino , Ciudad antigua de España
en la Bética sobre un Rio del mismo nom
bre. Este , segun el orden con que los
Geógrafos refieren su nombre, consta ha
ber estado en el Estrecho , entre Tarifa y
el Cabo de Trafalgar , correspondiendo hoy
al Rio Barbate. Otros repectoá la Ciudad
creen que es Bolonia , distante quatro le
guas de Barbate , siete de Conil , y una
y media de Tarifa.
41 # Casi indecible parece lo que han
trabajado y variado los modernos mas eru
ditos para colocar 4 Julia loza ; pero ba-
xo este último nombre nadie la cita sino
Es-
AVU. DE ESTR.ABON. ¿3
des ♦* * y Isla apartada de Turdetania
i-.j por
Estrabon, Unos la pone» en Africa, otros
en España;, y la ocasion de estas diferen
cias proviene de los mismos textos anti
guos. Bochart en su Cartaan lib. I. cap. 34.
págj 614.. dice que Julia loza es lo mis
mo qué Julia Traducta,■ , porque loza en
lengua Fenicia corresponde á la voz latina
Transducta, Transportada ó Transpasa
da. Ptoleméo la coloca en los Bástalos , de
suerte que parece innegable el que hubo
una Traducta en España ; porque sobre los
testimonios que la suponen , se añade no
haber otros que la excluyan. Lo mismo
se confirma por las medallas que dentro de
una corona Quercéa tiene Jul. Trad. ¿ las
quales abundan en España : y no sucede
esto en otras Ciudades Africanas. Sin em
bargo , aunque dicha Traducta estuviese en
la Mauritania con ei nombre dé Zeles cer
ca de Tingis , como fué trasladada1 á la
costa opuesta , es preciso confesar que pa
só á España. El sitio que aquí tuvo fué
entre Carteya y Melaria , y otros ménos
probablemente la baxan hasta Tarifa.
i2 * Pomponio Mela lib. III. cap. 6.
/3 ^-
e¡4 LIBRO til. DE LA GEOGRAFIA
por un pequeño estrecho ,' distante
del
hablando de las Islas del Mar Oceano!, po
ne : "Gades toca al Estrecho , .y separada
«un pequeño espacio como con un. río , ca-
«si tiene recta su ribera donde^está mas
«cercana al continente ; por la parte que
«mira al Océano , levantada en alto con
«dos promontorios aparta la ribera inter-
w media , hallándose en un lado la Ciudad
«opulenta del mismo nombre , y en otro
«el templo de Hércules Egypcio,.j ilustre
«por sus fundadores , religion , antigüedad
«y riquezas." . : ,
Ptoleméo pone que hay una Isla adya
cente á la Bética. hacia el Mar exterior,
donde está la Ciudad Gadira en 5 ..¿.....:36 TVr
Plinio lib. IV. cap. 2 2. dice : La Isla
de Gades está situada frente de la misma
Bética á veinte y cinco mil pasos de la en
trada del Estrecho. Polybio la dio en su
tiempo doce mil de largo , sobre tres mil
de ancho. Su menor distancia del conti
nente es setecientos pies , y la mayor ex
cede á siete mil pasos. Su extension actual
es de quince millas. Por la costa que mi
ra á España no dista mas que cien pasos
de
DE ESTRABOSK ^ *i i 1 gg
del Calpe casi setecientos cincuenta
de otra Isla, larga de tres mi! y crnil de an
cha , donde estaba antiguamente' 7a Ciudad
de Gades. Llámase esta Isla Erytia por
Eforo y Filístides , AfrodSsia^per Tí*
méo y Sileno , y Junoniariá por sus'pro>
pios vecinos. Respeto á la Isla de Gades
escribe Timéo que sus habitantes la llaman
Cotinusa. Nuestros Griegos ( añade él )
la dan el nombre de Tarteso ,y .los Car
tagineses Gadir , significando esta voz en
lengua Púnica una haya.
El Itinerario de Antonino coloca á Gades
distante del templo de Hércules.. M. P. XII.
Solino cap. 23, de España: In capite
JSaeticae , ubi extremus est nori qrbister-
minus , ínsula a confinenti septingentis pas-
sibus separatur , quam Tyrii , a Rubro
profecti mari , Erythraeam , Poeni Un-
gua sua Gadir , id est septem nomina-
runt.
Tuvo un convento jurídico para que
los pueblos adyacentes pidiesen allí su de
recho. Creció baxo el Imperio de los Ro
manos , y Balbo Gaditano , que había si
do Cónsul , fundó otra Ciudad. A esta la
g6 LIBRO Wl. DE LA GEOGRAFIA
estadios i> ú < ochocientos segun quie.-,
ren otros. A esta Isla que en ningu
na cosa .sobresale á las demás , de
clarada la fortaleza de sus habitan
tes por las navegaciones , parece que
la fortuna la induxo y ensalzó á te-
nepj amistad con los Romanos 43 ; tan
to
llamaron Nueva , y á entrambas hH/ur.. ó
Gemelas. .;c.J
Mr. Mentelle pág. 235 , después dé) ci
tar varias cosas que tengo repetidas , dice
así : " La Ciudad de Gades , hoy Cádiz,
«fué llamada Augusta urbs Julia Gadita-
vna , noi porque fuese Colonia Romana,
«como algunos Autores, creyeron , sino solo
«por municipal. El nombré de Julia, se
«fundaba en que Julio Cesar , como sabe-
«mos por Dion , había concedido á los Ga
ditanos el título de Ciudadanos Romanos;
«y el de Augusta , añadido despues al de
«Julia , provino de que Augusto colocó
«á los Gaditanos en la Tribu Galeria , dán-
«doles lugar en los votos y elecciones. Es-
«te es á lo menos el parecer de Suarez
«de Salazar , Antigüedades Gaditanas."
43 A tener amistad con los Romanos .)
. . Véa-
/ r . be estrabon; «J7

to que aun estando en lo extremo de


la tierra habitada era la mas célebre
de todas : pero de esta hablaremos,
como tambien de las demás Islas;
Siguese el 44 Puerto de Menes
téo 4S *, y junto á Asta46* pasa
..í:..ti;.' ' .'; i.. \' ,•.. ba-
Veasetoda la oracion de Ciceron en de
fensa de Cornelio Balbo. Dion lib. XLL
afirma , que el César dio á los Gaditanos
una Gradad , quando vino á España por la
guerra civil.
. 44 Puerto de Menestéo ). Este Me
nestéo fué General de los Atenienses en
tiempo ;de la Guerra Troyana. Leímos en
los , Comentarios de los Griegos , que Me
nestéo ,.. de quien habla Homero, vuelto
de Troya á Atenas fué echado por Te-
sidis y se vino á España. Es de creer que
daría nombre á este Puerto.
45 * El Puerto de Menestéo viene á
estar segun Estrabon en la Peréa , peque
ño país dependiente de los habitantes de
Gades. Ptoleméo le coloca en los Túrdu-
los. Ahora corresponde al Puerto de San
ta María. wi .• . «.
46 * Asta , Ciudad de España en la

$3 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
bañando é hirviendo el mar : esto
llaman Estuario ó Estero en los pue
blos que cubre el agua quando se al
borota , formando como ríos ^ donde
se puede navegar en medio de la tier-
ra y las Ciudades puestas sobre ella;
Divídese en tres la costa del Rio Be-
tis « . La Isla que está en el medio
con*
Bética , segun Plinio. Tenía por sobrenom*
bre Regia ó Real. Mela dice que era Co->
lonia. Antonino la pone á i6@ pasos del
Puerto de Gades. El P. Harduino cita el
parecer de dos Historiadores Españoles/
Martin Roa , quien pretende sea Xere¿
de la Frontera , y Rodrigo Caro que juz-.
ga que las ruinas de esta antigua Ciudad
se ven entre Xerez, y Tribugena , donde
se conserva hoy un alto , que llaman Me->
sa de Asta , al Oriente del Betis y Noroes
te de Medinasidonia , sobre el Rio Guada-
kte , y á cinco leguas de la Ciudad de
Arcos. Esto último aprueban Ortelio , Flo-
rez y Mr. Baudrand.
47 Divídese en tres la Costa del Rio
Betis.') Es extraño que estas divisiones ó
bo-
f DE JESTRABON. ~*?|t.T £Q

contiene de costa marítima cien es


tadios , ó mas segun otros. En estos
lugares está 'el «Oráculo de Menes-
téo/y la Toíréde Capion***, fun-
./. jiiWil ■ ■'• íei■iifi '• . ''.o i/.aú ■".■'da-
bocas no se hallen en las Tablas y Mapas
de Ptoleméo. '■> ';■ ? r"■'3,s i >
?.'M*^ ■ La Torre de Capieti■, segun la
Martiniere , á la entrada del Guadalqui
vir , es una obra excelente como el Faro
de Alexandría , y sirve de señal para los
navios. Pomponio Mela habla también do
ella ; pero dicho pasage le han alterado va
rios Críticos. Habiendo;; encontrado lia ip~
so mari monimentum Cepionis scopulo mu
gís quam insulae impositum , creyeron que
en lugar de Cepionis: , nombre desconoci
do para ellos , debian poner Geryonis i ■si
guiendo á Filostrato , quien dixo .que los
habitantes de Gades edificaban un túmulo
4 Geryori. Festo Avieáo escribe con el
mismo sentido: , y. . .. ,i ...:.

Geryonis arx est eminus , namque ex en


Geryona. quondam nuncupatum accepimus,

Vosjo reprehende á los Sabios que leen


i. Ca-
6o LIBRO III. DE XA GEOGRAFIA
dada en piedra , que rodea el Mar;
obra maravillosa como el Faro 49 , he«i
cha . para . provecho de los navegan-i
tes, porque sacando el Rio la aren*
forma baxíos , y antes de los desagua
deros, t^eae este sitio escollos debaxoi
del agua ; de modo que ántes necesi-i
taba, alguna claridad. Desde aquí es
navegable el uBetis ,y se halla la ;€üüí
i. '. i í.j .'fii.>:' f,~'>>Tf.5 j;it:..j ¡.....i >.'.. dad'

CapioniT', como Estrabon , en vez de Car*'


/wftíV. ;.Aunque hubo mlUctios Caballero*
Mamados -'así ,'Ono hay duda que aquí se
trata de Quintus Se'rviliüs Caepio , famo
so por "el -triunfo .y- ventajas que alcanzó',
sobre los Lusitanos , y mas famoso por su"
crimen y .suplicio. 'Mandó hacer esta For-.'
taléza para reprimir las correrías de los pi-,
ratas de Lusitania , que aumentándose jun-f
tx> al. Guadalquivir. ,' infestaban las FIcrtas;
Romanas. Hoy corresponde á Chipioña.
4« Como el Faro ). Etico en la descrip
ción de España hace mencion de uno-"; y/
dice: Seeundus angulus üitendit ubi BriJ
gantia Civitas sita est Galliciae , ac al-
tissimum farum , et inter pauca memoran
te
i CE ESTRABON, . . 61
dad Ebura 50 * y el Templo de Lu
cifer Sl * , que llaman Luz dudosa:
• tani-
di operis , ad specnlam Britanniae erigi-
tur. . -
so * Ebttra , Ebora íi Epora , segun
el Itinerario de Antonino, dista de Córdu-
ba XXVIII. M. P. , y juntando esta me
dida con las Inscripciones conservadas en
la Villa de Montoro , que está como á
siete leguas de Córdoba , rio arriba , á la
orilla Meridional del Betis , se convence
haber sido este el sitio de Epora. Parece
ser la misma que Ptoleméo coloca entre
las Ciudades mediterraneas de los Túrdu-
los junto á Onoba. Plinio la nombró -Rí-
pepera , y Zurita dice que debe corregir-,
se en Epora , hoy Montoro. Caro preten
de lo mismo , siguiéndole Weseling. Rus
Puerta escribe como Plinio que hay dos
Eburas , la nuestra , llamada tambien Rt-
pensis , y la Cerealis que , segun el Pa
dre Harduino , corresponde á Alcalá la
Real.
$i # El Templo de Lucifer , del Lu
cero ( u de la Lucífera , si atendemos al
artículo femenino de Estrabon t«< tv'ih*}
es-
62 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tambien hay varias navegaciones de
Otros estrechos ; después , el Rio Gua*
diana se divide en dos bocas , y cada
una de estas es navegable. Lo último
está el Sacro Promontorio , distante
de Gades poco menos de 28 esta
dios sa . Algunos cuentan desde el
Promontorio Sacro hasta la entrada
del Guadiana 60 millas «*, de aquí
á las bocas del Betis 100 , y des
pués hasta Gades 70 millas. Estará,
pues,
estuvo mas abaxo de Lebrija , al margen
del Betis. Nuestros Autores , y entre ellos
Florian de Ocampo , reducen este nombre
á la actual poblacion de San Lucar de
Barrameda.
s1 Dos mil estadios"). Dicha suma ha
ce M. p. CCL. de medida Romana, pe
ro esta no contenia sino CCXXX. ; lue
go los estadios eran 1840.
sj Sesenta millas"). Cada una de es
tas era de ocho estadios. Así , toda su su
ma es 230, que harán estadios 1840. Por
esto se vé claramente que no diferencian
mucho las dos cuentas. Xyl.
DE ESTRAB0N. 63
pues , situada la Turdetania , á quien
divide el Rio Betis , sobre la costa Pág.
marítima que está dentro del Guadia- 141.
na. A esta la divide hacia el Ocaso
y Septentrion el mismo Guadiana,
hacia el Oriente los Carpetanos y
Oretanos ; pero hacia el Mediodía los
Bastetanos , que habitan la estrecha
ribera entre Calpe y Gades ; el Mar
externo corre hasta el Guadiana ; y
los Bastetanos que dixe son adyacen
tes á Turdetania con muchos Pueblos
vecinos. La magnitud de esta Region
no pasa de 2® estadios ni en lo lar
go ni en lo ancho» Hay gran núme
ro de Ciudades, y serán como dos
cientas S4 . Son muy conocidas por el
uso de las cosas las que están situa
das junto á Rios , esteros , ó junto al
Mar. Principalmente excede en gloria
y
S4 Y serán como doscientas). Es ex
traño que poniendo Plinio en toda la Bé-
tica 175 , señale Estrabon tantas en una.
sola parte. ■:
64 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
y poder Córduba ss *, obra de Már
ce
se * Todos saben que Córduba ocupa
hoy dia el mismo sitio que antiguamente;
pero sin embargo hablaré algo mas de ella,
por ser un punto tan principal. En quan-
to al origen de la voz , el P. Girón , Car
melita , recurre á la lengua Hebrea , su
poniendo que fundaron esta Ciudad los
Persas , y dice se deriva de Cardumot ó
Cordum , que significa la segur ó hacha.
Samuel Bochart en el lib. i. de las Colo
nias de los Fenicios cap. 34. recurre al
Arábigo Corteba ó Coteba , que significa
entre los Syros lo mismo que entre noso
tros trapetttm , ó rueda del molino de acey-
te : pero sea lo que fuese , solo resulta
nuestra ignorancia por su mucha antigüe
dad. Esta es tanta , que si creemos á Si-
lio Itálico , Córduba subsistía ya en tiem
po de la segunda guerra Púnica:

Non decus auriferae cessavitCórdubaterrae.

Plinio dice que fué llamada por los Roma


nos Colonia patricia , y esto mismo se prue
ba con las Inscripciones y Medallas que
trae
DE ESTRABON. 65
celo *6 , y tambien la Ciudad de los
Gaditanos : esta por navegaciones , y
por-
trae el P. Florez. Los dos Sénecas y Lú-
cano eran de Córdoba, como nos asegura
Marcial en estos dos versos:

Duosque Senecas , unicumque Lucannm
Facunda loquitur Córduba.

Últimamente , siempre ha sido célebre por


sus ingenios é infinito número de Márti
res , que han padecido allí defendiendo la
Religion Christiana.
56 Obra de Marcelo). Está en duda
si será este Marco Claudio Marcelo el Cón
sul , que lo fué el año 601 de la funda
cion de Roma , quien , habiéndole tocado
por suerte venir á la España citerior , des
empeñó felizmente su obligacion , segun
cuentan Apiano y los Epítomes: peroquan-
do se llama Córduba obra de Marcelo , no
se entiende respecto de las murallas , por
que estas creo que áñtes de él existían , si
no porque con él , ó en su tiempo , fué
enviada allí Colonia de Romanos , como el
mismo Estrabon explica.
66 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
porque se mostró aliada de los Ro
manos : aquella por la bondad y an
chura. de su campo , que comunica
tambien gran parte al Rio Betis ; la
habitaron desde el principio Roma
nos escogidos y varones extrangeros,
enviando aquellos con preferencia co
lonia á estas Regiones. Después de
la de los Gaditanos es célebre His-
palis S7 * , que tambien es colonia de
Ro-
57 # Hispalis , hoy Sevilla , antigua
Ciudad de España en los Turdetanos pre
tende el Principado de la Bética oponién
dose Córduba. A favor de esta escribio el
Padre Martin de Roa , y por Sevilla Ro
drigo Caro en ellib. 2. de sus Antigüeda
des. Ptoleméo da á una y otra el dictado
de Metrópoli. Ausonio , Escritor del siglo
quarto , en la obra que hizo sobre el
orden de los pueblos mas famosos , dice
así: '
Jure tnibi post has memorabere nomen Jberum
Hispalis , aequoieus quam praeterlabitur amnis,
Submittit cui tota suos Hispania fasces.
Córduba non , non arce potens tibi Tarraco certant.
<~)uaeque sinu Pelagi jtetat se Bracara dives.
Las
DE ESTRABON. 67
Romanos , en la qual permanece aún
el Emporio : pero la Betis *8 se aven-
ta-
Las ediciones posteriores al año 1596 po
nen Emérita en lugar de Hispalis , y de
este modo leyó Casaubon. Yo me inclino
mas á la primera , siguiendo al P. Florez
y á los códices mas antiguos. Silio Itálico,
lib, III. v. 391. escribe:
jEt celebre Oceano , atque alternzs aestibus HispaU

Llamóse Rómula ó Romulensis: Filóstra-


to la nombra Ispolon , y en las Noticias y
Monumentos Eclesiásticos se ve Spalts. El
sabio Arias Montano deriva este nombre
del Fenicio Spila ó Spala , que significa
lina llanura ó un campo cubierto de ver
dor ; los Griegos añadieron la aspiracion,
y como los Arabes no tienen la letra P
pronunciaron Shila , y después los Chris-
tianos le mudaron en el moderno que aho
ra conserva,
58 La Betis). Esta leccion está erra
da , y me mueve á creerlo ver que na
die hace mencion de una Ciudad llamada
así , y tambien porque Estéfano , advir
tiendo que Betis era Rio de Iberia , no
g2 me
68 LIBROIIt. ¡DE LA GEOGRAFIA
taja en honor; por la nueva habita
cion fundada,-aunque Sin fausto, pa
ra los Soldados de César enviados
allí. Después ;de estas son excelentes
Itálica "*...;..... ,
é
me parece hubiera callado el nombre de
la Ciudad , si así lo hubiese leido en Es-
trabon ; pues en esta parte era bastante bien
versado. Creo que debe leerse Baicula,
de quien dice Estéfano : Baicula , Ciudad
de Iberia ' cerca de las Columnas de Hér
cules , que parece ser la misma Obúcula
de Hircio B. Alex. cap. 57. Ptoleméo la
llama Obúcola , Apiano Obólcola , y la ha
cen vecina á Hispalis y Córduba. Hay
otra Baicula Authetanorum en Ptoleméo,
pero dentro de la España citerior.
S9 # Itálica , segun la Martiniere y el
P. Florez , fué una Ciudad de la Bética
conocida entre los antiguos Geógrafos , y
célebre por ser patria de muchos hombres
famosos , como son Trajano , Adriano su
primo y succesor , y Teodosio el viejo.
Esto mismo confirma Apiano , quien , al
tiempo de referir la fundacion y origen
de Itálica , escribió que Escipioa el Afri
ca-
DE ESTRABON.. >. 69
6 Hipa <0*, situadas sobre el Be-
tis.
cano dispuso dexar todos los Soldados dé
biles por las heridas en una Ciudad , y
por ser (á lo ménos los mas) naturales
de Italia , la dió el nombre de Itálica.
Plinio lib. III. cap. 1. pone: Hipa cogno-
mine Itálica. Aulo Gelio extraña que ha
biendo dicha Ciudad■ logrado; ej nombre
de Colonia , pidiesen después los Prenesti-
nos á Tiberio licencia para pasar de este
nuevo estado al de Municipio que ántes
gozaban. A fuerza de varios testimonios
se halla ya reconocido como cierto entre
los modernos el lugar en que estuvo \ti-
lica , conviniéndo en que fué . á , una legua,
de Sevilla , rio arriba , sobre el sitio lla
mado Santiponce , en un de.?P°blado donde
se descubren muchas ruinas , que el vulgo
nombra Sevilla la vieja , y los campos de
sus cercanías retienen como en abreviatu-.
ra algo del nombre moderno , pues se in
titulan , segun Morales y Caro , .los camr,
pos de Talca. . , "..j.¿ \¿ ..:;C
60 * La Hipa de Estrabon es una jan-:
tigua Ciudad de España en la Bética. En
tre los Escritores vemos algunas voces alu-
£3 si-
^O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tis. Astenas 6l * lejos de aquí, Cár-
mon
sivas y comunes á esta , por hallarse diver
sos pueblos parecidos. Antonino propone
dos Hipas. La una se halla en el camino
de Cádiz á Córdoba por Asta , entre Ca
nda y Ostippo , á XVIII. millas de la pri
mera , y á XIV. de la segunda. El sitio
de la otra Hipa , que nos pertenece mas
por ser la que cita nuestro Geógrafo , es
la Illípula magna de Ptoleméo, ó Canti-
Uana segun el P. Florez , y no Peñaflor
como quiere Morales , ú Alcalá del Rio
como escriben Maldonado y Caro. Es di
versa de Julipa •, y tampoco conviene su
nombre á Zalamea de la Serena.
61 * Astenas fué una de las mas fa
mosas y antiguas Ciudades de la Bética,
segun Estrabon , que desfiguró su verdade
ro nombre Astigi. En el Compendio lib. 3.
de las Chrestomatias se escribe Astina. Pu
nió señala su situacion, diciendo que la ba
ña el Rio Síngülts ó Síngilis -, que va &
parar al Betis , pudiéndose navegar desde
k Ciudad en adelante , lo que correspon
de á Ecija , llamada así desde los Moros,
en cuyo tiempo, se mudó la pronunciacion
c , de
DE ESTRABON. 71
mon 6I * y Obulco 63 *
En
de Astigi en Ecija , como la del Rio Sín-
gilis en Genil. Los Romanos la hicieron
Colonia , añadiéndola los dictados de Au
gusta Firma. Fué tambien Convento Ju-
ndico.
62 * Cdrmon ó Carmona , como trac
la Martiniere , es una Ciudad no muy
grande á seis leguas de Sevilla , segun el
Diario de un Viage de España , que se
conforma con el Mapa del Reyno de Se
villa de mi padre. Julio Cesar en la His
toria de las guerras civiles hace mencion
de sus habitantes. Antonino la llama Gar-
monia ó Charmonia. Conserva varios mo
numentos antiguos ; entre ellos , la puerta
que va á Sevilla está todavía entera , y
una parte bastante grande de los muros.
6 3 * Obulco , famosa Ciudad de la Dió
cesi Tuccitana. Estéfano nombra una lla
mada Obolcon , sin expresar la Nacion , que
Pinedo en sus notas dice ser la de España;
añadiendo que Rodrigo Caro la reduce á
Manclova , y otros á Porcuna. Pero se
equivocó en lo primero : pues la que Ca
ro hace corresponder al Castillo de Man-
g4 cío-
72 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA

En Munda 64*,
Ape-
clova , entre Carmona y Ecija , no es Obul
co , sino Obúcula , Ciudades muy diversas-
La situacion de Obulco no puede errarse,
si se miran bien las señas que nos dieron
de ella los antiguos , especialmente Plinio
que la pone catorce millas , ó tres leguas
y media distante del Betis. En ¡efecto , si
guiendo tambien á Mariana , Obulco es
hoy dia Porcuna. Morales publicó dos Ins
cripciones en las Antigüedades fol. 13. y
aj. La primera incluye los nombres de
Ordo . Pontifícensis . Obulconensis : la se
gunda omite • el de Obulco y usa solo del
Pontificense , declarando ser Municipio.
64 # Munda fué una Colonia immune
perteneciente al Convento Astigitano se
gun Plinio. Hoy se llama Monda. Su si
tuacion es al Occidente de Málaga y al
Sur Oeste de Cartama , distando de esta
tres leguas y media , junto á una falda de
la Sierra de Tolox entre el mar y un
riachuelo que llaman Río seco , el qual va
á parar á Río grande , y los dos se me
ten en Guadaljorce. El Autor de Bello
Hispanensi cap. 41. cita el arroyo dicho
Río
DE ESTRABON. 73
Apetua 6s *, Urso "*, . .
Tuc-
Híb grande , y aunque no declara allí su
nombre antiguo , parece le llamaron los na
turales Sigila , como pone Muratori. Lu-
cano hablando de Munda escribe lo si
guiente:

Ultima funesta concurrant praelia Munda.

6 s * En lugar de Apetua ó Atettta,


como trae el Epitome de Estrabon , debe
entenderse Ategua , Ciudad expresada por
Hircio y Dion Casio. Antes se leía Sin"
gilia , y es diversa de Atubi , que corres
ponde ahora al lugar de Espejo. Cerca de
aquí se halla el despoblado Teba la vieja,
que retiene algo de la voz Ategua : dista
quatro leguas de Córdoba hacia el Medio
día , y parece ser la que buscamos. Fué
muy famosa en el Comentario de la guer
ra del César , quien la tomó por combate
después de un largo sitio.
66 * La Ciudad de Urso se escribe
de diversos modos. Apiano la llama Qr-
sona , Hircio Ursaon , y Plinio añade que
era Colonia immune con el sobrenombre
Ge-
74 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Tuccis 6? f , ..

Genua Urbanorum ; pero conforme á la


prevencion expuesta por Don Antonio Au-
gustin debe corregirse el texto en Gemi
na , al modo de los dictados de otros Pue
blos que por las Legiones Geminas ó Ge
melas recibian el mismo título. Ptoleméo
trae una Urbona , y es muy creible sea Ur-
sona , aunque su situacion no está pun
tualmente. El Ravenate c. 45. expresa Cir-
sone. Corresponde á la famosa Villa , lla
mada hoy Osuna , Capital del Ducado de
su nombre , distante cinco leguas al Me
diodía de Ecija. Hállase en Grutero una
antigua Inscripcion y dice así : Resp. Ur-
sonensium. Las medallas que batió tienen
por un lado una cabeza desconocida , y
por otro el símbolo de la Esfinge.
6 7 * La verdadera situacion de Tucci
es en el Reyno de Jaén , en el mismo si-,
tio que hoy está la Villa de Martos , se
gun convencen los muchos monumentos
que han quedado en sus ruinas , entre cu
yas inscripciones vemos publicado repeti
damente el nombre de la Ciudad , no so
lo baxo la voz de Tucci , sino como la nom
bra-
DE ESTItABON. 75
Julia 68 * ,Egua 6«* fueron derrotados
los hijos de Pompeyo. Todas distan
poco de Córduba. Munda en cierto
modo es su Metrópoli 7° , distante
f
de

braron los Romanos Colonia Augusta Ge-


mella. Véase al P. Florez tom. 12.
68 * Consta que hubo en este parage
muchas Julias , pero dudamos qual sea por
no citar ninguna distincion de sobrenom
bre. Puede ser Ulia , hoy Montemayor.
69 * Egua pretenden algunos con po
ca razon sea la Escua de Ptoleméo ; yo
creo que corresponde á Hegua , Ciudad
nombrada por Plinio lib. 3. cap. 5., y se
gun varios manuscritos es la misma Ate-
gua de arriba.
7° Munda en cierto modo es su Me
trópoli ) . Dice en cierto modo , porque
casi eran iguales aquél tiempo en esta par
te de España Munda y Córduba ; aunque
Ptoleméo llama á esta principalmente Me
trópoli. Hircio escribe de Córduba que
se tenia por cabeza de la Provincia. Ad
vertiré de paso al lector que me parece
debe leerse Munda quando Ptoleméo es-
cri-
76 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de Carteya cerca de 1400 esta
dios fI*. Aquí huyó Cn. Pompe-
yo 7i vencido en la guerra , y en
trando en una nave salió huyendo
a
cribe AsrourJ1* tel btruvifr*. Los que creen
que la Arunda de Ptoleméo es la Munda
de los otros Geógrafos , se engañan , como
lo verá claramente qualquiera que consi
dere un poco : además de esto , Plinio
lib. III. cap. 1 . conoce que Arunda es di
versa de Munda.
71 * Distante de Carteya cerca de
1400 estadios'). Aquí hay sin duda algun
yerro , pues el sitio que ahora ocupa Mun
da , respecto de Málaga hácia el Occiden
te , no permite ni aun mil. Nota Casaubon
que algunos exemplares leen e£*¡n<r;t<AiW , y
Palmerio cree ser el verdadero número
igínorra , 6o , que añadido á los 400 compo
nen 460 estadios , proporcion con efecto
mas correspondiente.
71 Aquí huyó Cn. Pompeyo"). Venci
do Cnéo en una peléa que describe Hir-
cio cap. IV. de la guerra de España , se.
resguardó huyendo en Munda , segun Plu
tarco , Cesar y Apiano.
DE ESTRABON. 77
ala montaña que está sobre el mar "¿
donde le mataron. Su hermano Sex
to habiendo huido de Córduba , no
pudiendo sostener mucho tiempo la
guerra en España , movió á Sicilia
procurando se rebelase , de aquí hu- ,
yó á Asia , y perdió la vida en Mi-
Jeto prisionero de los Soldados de
Antonio 74 • En los Ce'lticos es muy
notable la Ciudad Conistorsis " *
'. . " Cer>
7J A la montaña que está, sobre el
mar*) . Hircio pone : Pompejus cum pau-
fis profugit , et locum quendam munitum
natura, occupat.
74 Prisionero de los Soldados de An
tonio). Dion lib. 49. y Apiano al lib. 5.
cuentan que Sexto Pompeyo fué muerto
á manos de los Lugartenientes Marco Ti-
cio y Furnio.
7s # El nombre Conistorsis es desco
nocido de muchos : solo Apiano in ifnpixS
hace mencion de una Ciudad llamada Cu-
nistotgis , pero no la coloca en los Célti
cos como Estrabon , sino en los Pueblos
Cuneos.
78 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Cerca de los Estuarios Asta situada
sobre la atarazana de la lila á poco
mas de 100 estadios, en la quai se
juntan los Turdetanos. Muchos habi
tan el Betis, y se navega 1200 es-
Pág. tadios hacia arriba , desde el mar
142. hasta Córduba , y otros lugares de la
parte superior : están edihcados con
inteligencia los situados en la ribera;
tambien las pequeñas Islas que hay
en el río , y á esto se añade la ame
nidad de la vista , porque aquellos
parages están llenos de bosques y la
brados para plantacion de árboles.
Navegase Hispalis arriba hasta 500
estadios en naves grandes de carga:
las Ciudades superiores hasta JUipa
en naves menores , y de allí á Córdu
ba en esquifes ó barcos de pesca
dor , hechos en nuestro tiempo , por
que antiguamente pasaban en canoas:
pero no se pueden navegar las par
tes superiores á Claston 7Ó * , porque
J cier-
76 * La Ciudad Claston entre los Grie
gos se escribió de varios modos. El mismo
Es-
DE ESTRABON. 79
ciertos peñascos ó espaldas de mon
tes,
Estrabon lee mas adelante Castaon. Poly-
bio usó la voz Castalon 6 Castalona en
acusativo , y tambien Estéfano. Apiano la
nombra Castaca , otros Caetulon ; pero to
das son voces sinónimas , que convienen al
Cdstido de los Latinos Livio , Plinio y Si-
lio Itálico. Este último Autor la intituló
Pamasia por ser sus fundadores los Fo-
censes , pueblos situados al Norte del Seno
de Corinto ó Golfo de Lepanto , donde
se hallaba el monte Parnaso ó Helicon : di
ce , pues , el vers. 391. del lib. 3.

Fulgent f<rae'cipuis Parnasia Cástulo signis.

Y poco antes:

Cirrhaei sanguis Imilce


Castalii , cui materno de nomine dicta
Cástulo , Phoebei servat cognomine vatis.

En fuerza de este texto escribió Nico


lás Heinsio que Cástulo fué fundada por
Castalio Focense. Ambrosio Morales dice
que el nombre provino de la fuente Cas-
• . ta
8o LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tes , igualmente distantes entre si
por todas partes , y hácia el Boreas
llenos de metales , se extienden á lo
largo del río mas ó menos juntos.
Hay mucha plata en los lugares cer
ca de Hipa y Sisapon , tanto el anti
guo como el moderno 77 *. Cerca de
, un
1 taita , llamada también Pegasia y Caba-
lina. Bochart recurre á otra etimología , to
mada de la voz Arábiga Castala , que sig
nifica ruido del Río (Fluviifragor) . Ju
lio César compró las tierras de Cástulo.
Se mantuvo Municipio y no corresponde
hoy dia á Cazorla , como han pretendido
muchos sabios. Entre estos dixo uno sar
San Esteban del Puerto , pero el P. Florez
con otros testimonios y documentos prue
ba que estuvo situada puntualmente don
de se halla hoy día Cazlona. .
is * Sisaron , Ciudad de. la Bética. Es
actualmente Almaden. A la parte, de Sier
ra Morena , que se pasa viniendo de Caz-
lona , llamaron los antiguos balto Castulo-
nense : cerca de aquí se mantienen las mi
nas de Bermellon ftan celebradas por Pli-
nio lib. 33. cap. 7.) en donde está ahora
Val-
DE ESTRABON. 81
un sitio que llaman las Cotinas se
saca oro y cobre. Estos montes , na
vegando hácia arriba, están á mano
izquierda , pero á la derecha se ve
una larga planicie , alta , fértil , lle
na de grandes árboles y muy propia
para pastos. La navegacion contraria
tiene tambien riberas , pero no se
puede ir con naves tan grandes , ni
tan largo espacio. Con todo se ha
llan tambien por encima montes que
tienen venas de metal y tocan al Ta
jo. Los lugares en que hay metales
es preciso sean altos y casi estéri
les,
Valdeazogue. Solo nuestro Geógrafo po
ne dos Ciudades con el nombre de Sisa-
pon; la una corresponde al expresado Al
madén , y la otra segun parece es Guadal-
canal. Me ha venido esta reflexion en apo
yo de Morales , porque á Guadalcanál le
vemos colocado entre Hipa y Sisapon , co
mo hacia el mismo lugar que Estrabon Ha-
ma Cotinas , en cuyo parage deben encon
trarse las minas de plata , distintas de las
otras.
h
82 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
les 7$ , como lo son aquellos que es
tán contiguos á Carpetania , y mu
cho mas los que tocan á Celtibe
ria 79*. Tal es Beturia , que tiene
tambien secos los campos que cor
ren hasta cerca del Guadiana 8o*. Pe
ro la misma Turdetania es maravi
llosamente opulenta , y siendo íertil
en todo género de cosas , se aumen
tan sus comodidades con el comercio;
pues por la multitud de mercaderes
navegantes , fácilmente se venden los
frutos de que abunda : pero no solo
sirven los Ríos para las navegaciones,
sino tambien sus varios esparcimien
tos , que parecen copiosos arroyos,
donde se navega desde el mar á las
Ciudades mediterraneas , no solo en
pe-
7« Plinio lib. XXXIII. invierte esta
opinion con mucha elegancia , diciendo:
Caeterum , montes Hispaniae aridi steri-
lesque , et in quibus nihil altud gignatur
huic tono coguntur fertiles» esse.
79 # Véase sobre Celtiberia lanota 23 *.
80 * El terreno que ocupaba Beturia
queda explicado en la nota 30 *.
DE ESTRABON. 83
pequeños navichuelos , sino tambien
en grandes. Sobre la costa marítima
toda la Region es campestre , y la
mayor parte de lo que se contiene
entre el Sacro Promontorio y las
Columnas. Se hallan allí en muchos
sitios cavidades entre el mar y la
tierra , con medianos valles semejan
tes á la madre ó cauces de un Río,
que se extiende muchos estadios:
quando vienen las crecientes , los lle
na el mar de modo , que se puede
navegar por ellos tan bien ó mejor
que en los Ríos ; porque se parecen Pág.
á estos sin ningun impedimento, y 143.
sucede el fluxo y refluxo como en el
mar. Estos aumentos ó crecientes en
unas partes son mayores que en otras;
porque el mar vuelve sacudiendo , re
ducida su grande anchura á un estre
cho pasage que hay entre España y
Mauritania , y sube por donde la
tierra lo permite. De estas cavida
des unas se vacian , quando el mar
vuelve á extraer las aguas , á otras
jamás las desampara , y algunas tie-
h2 nen
84 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
nen Islas dentro de sí. Tales son las
crecientes entre el Sacro Promonto
rio y las Columnas, que tienen aquí
aumento con mas vehemencia que en
otro sitio : esto trae mucha utilidad
á los que trafican por el mar ; pues
hace mas y mayores derramamientos,
navegables casi siempre hasta ocho
estadios , de tal suerte , que pueden
andar embarcados por tierra y trans
portar mercadurías : tambien tienen
alguna molestia ; porque las navega
ciones en los Ríos , que resisten con
fuerza al fluxo de ellos por la vehe
mencia de la inundacion , presentan
no pequeño peligro á los que nave
gan arriba y abaxo. Verdaderamen
te , los refluxos del mar en estas efu
siones son dañosos ; pues se incitan
por la misma razon que el fluxo , y
por su celeridad no pocas veces de-
xan en seco las naves, y el ganado que
antes del fluxo había pasado á las Islas
puestas junto al Río : esto unas veces
lo cubre la avenida , otras lo dexa , y
es en vano querer pasar por fuerza.
Cuen-
DE ESTRAB0N. 8g
Cuentan que los bueyes habiendo ob
servado esto , y que el paso del mar
se cubría , pasaron al continente. Los
hombres , pues , conocida la natura
leza de los lugares , y viendo que es
tos esparcimientos podian suplir la
falta de Ríos , fundaron domicilios y
Ciudades en aquel parage , como son
junto á ellos Asta , Nebrisa 8l * ,
Ono-
>
81 * La Ciudad de Nebrisa pertene
ció al Convento de Sevilla , como decla
ra Plinio lib. 3. cap. 1. donde dice : ínter
aestuaria Baetis , oppidum Nebrissa , cog'
nomine Veneria. Su antigüedad es tan
grande , que Silio Itálico hablando del orí-
gen y fundacion lib. 3. v. 393. escribe :

Ac Nebrissa Dionyseis conscia thyrsis,


Quam Satyri coluere leves , redimitaque sacra
JSfebride , et arcano Maenas nocturno Liaeo.

Ptoleméó la coloca en las tierras vecinas á


Lusitania : fué muy sobresaliente en las
guerras de Aníbal. Mantiénese actualmen
te la poblacion con nombre de Lebrija,
h3 dis-
86 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Onoba ía * , Sonoba 8j * , Meno-
ba
distante de Sevilla nueve leguas al Me
diodía y cinco antes de llegar á Xerez.
81 # Plinio lib. 3. cap. 1. , de las dos
Onobas que trae , cita una llamándola con
el sobrenombre Lusturia , y debe corre
girse en Esturia ó Estuaria. Es la Onoba
Lusturia de Ptoleméo ; parece ser la que
Estrabon entiende , y así lo previno el sa
bio Casaubon. Muchos Autores la redu
cen al sitio donde hoy está Gibraleon,
otros á Moguer , pero si se escrupuliza
puede colocarse en Huel-va , Villa mas
cercana al Mar , en la punta de tierra que
forman el Río Tinto y el Odiel , corres
pondientes al Luxia y Urium antiguos.
8* * Sonoba no se encuentra en nin
gun Autor ; pues aunque hay una Oso-
noba (nombre parecido) , no existe en
la Bética sino en Lusitania. Sólo hay du
da en si puede ser la Onoba que pone
Ptoleméo en el mismo lado de Ripépora,
después de Sacili Martialium y frente de
Córdíiba. Yo creo mejor que corresponde
á la Colobona de Plinio , situada entre los
Estuarios del Betis.
DE ESTRABON. 87
ba S4 * y otras muchas. Sirven de auxi
lio en algunos lugares ciertas fosas, por
que en muchas partes se lleva desde
. aquí allá mercadurías, tanto para los
habitantes como para los extraños.
Del mismo modo aprovechan tam-
< bien
84 * Hubo dos Ríos y dos Ciudades-
con el nombre de Menobas , el primero
de aquellos correspondiente á Guadiamar,
cuya embocadura dista cinco leguas y me
dia de Sevilla , el otro al Oriente de Má
laga , como traen Mela , Plinio y Ptole-
méo , quien le nombra Saduca. El P. Har^
duino reduce este al que llama Río Frío,
y coloca la Ciudad Menoba en Torres;
pero en esto se guió por Mapas mal for
mados , pues el lugar es Torróx y el ria
chuelo se intitula de Frigiliana. Dupinet
y Girolamo Ruscelli dan á la Ciudad el
nombre de Vezmeliana. Acertaron proba
blemente si quisieron escribir Velez-Md-
laga , pues miéntras no haya otra opinion
mejor , Menoba y su Río corresponderán
al expresado. Esta es la que cita Estra-
bon , y se halla confirmada con la distan
cia del Itinerario de Antonino.
A4
88 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
bien por lo comun la concurrencia
en las inundaciones ; estas son impe
didas por los Istmos, que dividen la
madre del Río haciéndole transita
ble: así, se puede navegar desde los
Ríos hasta sus Estuarios y al con
trario. Toda la negociacion está há
cia Italia y Roma 8s , y tienen cómo
da navegacion hasta las columnas , á
.Pa8# no ser que haya alguna dificultad
1 44* junto al Estrecho, ó en lo interior
de nuestro mar. El curso es por un
clima tranquilo, principalmente quan-
do se navega en alta mar; lo que es
cómodo á las naves mercantes, pues
los vientos tienen su orden soplando
mar adentro: se añade tambien que
ahora hay paz sepultados los latro
cinios , y así es mucha la seguridad
dé los navegantes. Escribe Posidonio
que observó una cosa particular en
la navegacion de España , es á saber,
que en el Mediterraneo hasta el Se
no
*s Figura Homérica , como si Roma
no estuviera en Italia.
DE ESTRABON. 89
rio Sardo ó de Cerdeña soplaban los
Euros vientos Etesias 86 , y que así
lle-
86 Observó Posidonio que en nuestro
mar soplaban los Euros vientos Etesias.
Aristóteles al libro II de sus ; Metéoros,
cap. 6. , enseña que los Etesias iban de
Septentrion á Occidente , pero solían mu
darse en otros llamados Spao.».»? t a.pyí^a.í xxl
£4¿p«u« , que soplan parte desde el Septen
trion y parte desde el Ocaso. Segun la
opinion de Aristóteles , confirmada con un
pasage de Diódoro Sículo , resulta por fin
que los vientos Etesias soplarán en el Me
diterraneo desde el Occidente y se muda
rán en Favonios ó Cauros : pero esto es
contra la observacion de Posidonio , pues
dice que los Etesias vienen del Oriente 3
nuestro mar , uniéndose con el Euro ; luego
Plinio escribió maravillosamente quando
puso : In Hispania et Asia ab Oriente est
f.atus eorum , in Ponto ab Aqiúlone , re-
'Uqitis in partibus d Meridie. Aulo Ge-
lio , á quien sigue el sabio Julio César
Escalígero trae tambien al libro 2. cap. 22:
Etesiam ex alia atque alia parte eoeli
spirare.
gO LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
llegó en tres meses á Italia , habien
do pasado mal por las Gymnesias,
por cerca de Sardinia ó Cerdeña, y
por otros lugares de África enfrente
de estos. Se saca de Turdetania 87
bastante trigo 88 y vino "9 , y acey-
te no mucho pero exquisito 9°. Lle
va
87 Se saca de Turdetania"). Lo mis
mo que si dixera de la Bética. Justino
XLIV. cap. 1. escribe : Aquí no solo hay
abundancia de trigo, sino tambien de vino,
miel y aceyte.
88 Bastante trigo). De que los Espa
ñoles suministrasen trigo á los Romanos
son testigos las Historias antiguas , y que
de España solía entrar trigo en Roma cons
ta por Plinio XVII.
8' Y -vino ). Plinio lib. XIV. cap. 6.
hablando de vinos generosos , juzga por
tales los Luletanos , Tarraconenses , Lauro-
nenses y Baleáricos ; pero de la Bética nin
guno.
90 Aceyte no mucho pero exquisito).
Plinius XV. 2. de Oleo : Reliquum certa
men inter Istriae terram et Baeticae par
est.
DE ESTRABON. 91
va tambien cera 9I , miel, pez9a»
mucha grana 9i , y bermellon 94 en
nada inferior al de tierra Sinópi-
ca " : hacen naves con la madera de
otras

" Cera). Aun hoy dia es estimada


la cera de España.
9í Pez). Paréceme que la pez de Es
paña no es muy recomendable. Plinio , li
bro XIV. cap. 20. sobre la pez, pone: Ha-
cese de la resina del pino , pero en Espa
ña no es laudable , ni aprobada , por ser
de pino silvestre , cuya resina es amarga,
árida y de olor molesto.
93 Mucha grana). Véase Plinio lib. 16.
cap. 8. El mismo lib. IX. cap. 41. dice:
Coccum Galatiae rubens granum , ut dice-
mus in terrestribus , aut circa Emeritam
Lusitaniae in máxima laude est.
94 Y bermellon). Justino lib. 44. c. I,
hablando de España , afirma que no hay
tierra mas abundante en( bermellon. De
este trata Vitrubio lib. yí cap. 8. y Pli
nio lib. 33. cap. 7 , y 36. 6.
■ 9S Al de tierra Sinópica). Pone esto
nuestro Geógrafo , porque el bermellon
de
92 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
otras partes , tienen sales cavadizas ó
fósiles, y no pocos fluxos de Ríos
salados : tambien hay abundancia de
carnes y peces compuestos , que no
ceden en bondad á los del Ponto, y
esto no solo aquí, sino tambien en
la restante costa fuera de las Colum
nas. En otro tiempo se llevaban allí
muchos vestidos 96 ; ahora las lanas
de los Coraxós " , que son excelen
tes
de mas fama en su tiempo era el que ve
nía de Sinope , Ciudad del Ponto.
96 En otro tiempo se llevaban allí mu
chos vestidos") . Era costumbre entre los
antiguos el comprar mejor vestidos hechos
que no paño. Por eso vemos tantas veces
en Livio y otros Historiadores , que de
Roma enviaban ropa á los Soldados , y que
quantas veces la pidieron estos , tantas se
la concedio la ley de Graco. No es me
nester exemplos porque ocurren á cada
paso.
97 Ahora las lanas de los Coraxos").
Aquí faltan algunas palabras para el per
fecto sentido. Parece que Estrabon quiere
com
DE ESTRAEON. 93
tes y muy hermosas ; como que cues
ta cada carnero un talento 9S * : y
verdaderamente está texido con mu
cha iinura todo lo que preparan los
Sal*

comparar la lana de España con la de los


Coraxos. De aquella trató Plinio al li
bro VIH. cap. 48. , y de la última Juan
Tzetza en sus Chilladas. Los Coraxos eran
.una Nacion del Ponto , segun Aristoteles
y Hesychio.
98 Como que cuesta cada carnero un
talento ) . No sé si estos carneros serán
los musmonas del lib. V. Que existió de
dicha especie un corto número en Espa
ña , consta por Plinio lib. VIII. cap. 49 * .
Diódoro al libro V. escribe , que los Cel
tíberos usaron unos capotes, cuya lana es
parecida á los pelos de cabra.

* Don Juan Francisco Masdeu en su Dis


curso Preliminar á la Historia Crítica de Espa
ña , pág. 34. traduce carneros padres , vulgar
mente llamados moruecos , y añade que un ta
lento viene á ser 600 escudos Romanos', ó
600 pesos fuertes de España con corta diferen
cia.
94 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Salciatos " . Hay allí mucha copia
de ganado y caza. No tiene casi nin
gun animal pernicioso , excepto los
conejos , cuyos gazapillos cavan la
tierra, y algunos los llaman libéri-
des : estos devoran las raíces , y da
ñan á las plantas y semillas. Así
acontece por toda España hasta Mar
sella. Destruyen las Islas , y es tra
dicion 10° que los habitantes de las
Gym-
9» Todo lo que preparan los balda-
tos} . Quienes sean estos está por averi
guar. Silio Itálico lib. III. v. 373. alaba
á otros llamados Setabos del modo que si
gue:
Atque altrix celsa mittebat Setabis arce,
Setalus et telas Arabum sprevisse superbass
Et Pelusiaco Jilum componere lino.

Tambien hace mencion de ellos Cátulo:


Nam sudaría Setaba ex Hiberis
Miserunt mihi muneri Fqbullus,
Et Veranius.

100 Y es tradicion). Estrabon habla


como de una cosa antigua y casi dudosa,
de
DE ESTRABON. <)<-
Gymnesias, habiendo despachado era-
baxadores , pidieron á los Romanos
terreno para habitar , porque del su
yo les echaban los animales , y no
podían resistir á tanta multitud. Ver
daderamente , todo este auxilio es
necesario quando cunden como peste
ó guerra ( lo que sucede raras veces);
ó como suelen tambien las serpien
tes y ratones terrestres. Donde hay
mediano número , han inventado ya
muchos modos de cazar los conejos:
el uno es, que tienen con mucho cui
dado gatos fieros de África , los qua-
les , atada la boca , entran en los agu
jeros, y con las uñas cogen los co-
ne-
de lo que me maravillo , pues esto había
sucedido poco antes de escribirlo , aunque
quieran decir que sus libros los ha escrito
siendo muy viejo. Plinio , hablando de los
animales nocivos , pone : Certum est Ba
leáricos adversus proventum eorum auxi-
lium militare a Divo Augusto petiise. Es
to se vuelve á contar otra vez en el mis
mo libro.
g6 LIBRO ni. DE LA GEOGRAFIA
nejos que hallan , sacándolos afuera,
donde son muertos por los que están
Pág. presentes. Quanta sea la abundancia
145. de todo lo que llevan de Turdeta-
nia , se vé claramente por la multi
tud y magnitud de naves ; pues las
mayores de carga van de aquí á Di-
cearchía y Ostia , que es la ataraza
na de Roma , y se han multiplicado
ya tanto , que pueden igualar en el
número á las de África. Como este
sea el estado del Mediterraneo en
Turdetania , parece que su costa ma
rítima quiere apostar con ella á ri
quezas ; pues aunque el mar externo,
por lo general , abunda de todo gé
nero , número y magnitud de ostras y
conchas ; con todo sucede mas esto en
Turdetania , como que allí se aumenta
el fluxo y refluxo del mar , y este exer-
cicio parece ser causa de la multitud
y grandeza de dichas cosas. Lo mis
mo se ha de entender de todos los
demás cetáceos, como son Oryges ' ° ',
Ba-
.1 o 1 Estrabon nombra entre . el pescado
á
DE ESTRABON. 97
Ballenas , Fyséteres 10* , los quales,
si se miran de lejos quando soplan,
parece que despiden una nube dis
puesta en forma de columna : tam
bien hay Congrios de mas magnitud
que los nuestros , Lampreas , y otros
ge'neros de peces. Cerca de Carte-
ya i°3 * dicen hallarse los pececillos
de
á los Oryges , quando otros dicen ser un
animal como Cabra. En Opiano se halla
bien descrito al libro segundo.
Ioa Fyseteres ). Hablando Plinio de
estos monstruos marinos lib. IX. cap, 4.
dice : En el Océano de Francia hay Fy-
seter , que se levanta al modo de una gran
de columna , y poniéndose mas alto que las
velas del navio vomita cierta tempestad
sobre ellos. Mejor es el parecer de Estra-
bon , pues juzga que no son ellos los que
se levantan, sino el ayre de su respiracion,
que mirado de léjos hace la figura de una
columna.
103 * Carteya , segun Plinio Tartesos
es lo mismo que Calfe óí Heracléa. Lo,
antiguos Geógrafos é Historiadores , y enr
"i tre
98 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de púrpura , y Caracoles con un co
lor como grana ; de estos llenan por
lo regular diez, cotylas , y en los lu
gares exteriores se hallan Lampreas
y Congrios, que pesan ochenta mi
nas , Pulpos de un talento , Calama
res de dos codos , y otros peces varios.
Tambien se juntan aquí muchos Atu
nes , gordos y crasos por el antiguo
calor del mar externo. Se sustentan
con bellota de encina 10* , que nace
in-
tre ellos Tito Livio la citan. Antonino po
ne en la ruta de Málaga á Cádiz una Ciu
dad llamada Calpe Carteya. Estuvo cerca
de Rocadillo , como lo prueban varios frag
mentos. Así se confirma con el parecer de
Mr. Conduit en las Memorias literarias
de la Gran Bretaña , tom. 30. pág. 96.
y á esta propia opinion siguen Mr. de la
Nauze , Mr. d' Anville , &c.
104 Se sustentan con bellota de enci*
tía}. Polybio libro XXXIV. como cuen
ta Ateneo ,VII. cap. 14. p. 302 escribió
de la España ; que cerca del mar había en
cinar , con cuyo fruto se alimentaban ¡os
í.; Atu-
DE ESTRABON. 99
inclinada hacia el mar, perot lleva un
frutomuy crecido. Este árbol nace tam
bien muy freqüentemente en tierra de
España , con hondas raices como las
perfectas encinas , pero es baxo y del
tronco salen varios matorrales : solo
lleva fruto quando el mar , después
de sazón , derrama su avenida, lle
nando la ribera dentro y fuera de las
columnas ; pero siempre es menor el
que nace dentro de ellas l0$. Poly-
bio cuenta , que de España se envia
ba esta bellota hasta el Lacio , á no
ser que tambien se críe en Sardinia y
los Jugares vecinos : pero los Atunes
quanto mas se acercan á las Colum
nas, tanto mas delgados son por fal*
ta de Sustento. Cuentan que este ani
mal vive,,; aunque en el mar, cerca
• : : ü ■.,!■• , .■ de
Atunes. De aquí parece que lo tomó Es
trabon.
xos Aunque se dice en este pasage , que
las bellotas nacidas dentro de las Columnas
de Hércules son menores , sin embargo se
hallan con mas abundancia.
i%
IOO LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de tierra , y que se deleita y aun en
gorda con la bellota , y que quanto
mas abundancia hay de ellas , tantos
mas Atunes se crían. Después de to-
Pág. do esto , como Turdetania abunda en
146. todos los bienes , alguno observará y
■• se maravillará , no de paso , sino con
razon , quan fértil es en metales lo6 :
porque aunque toda España está lle
na de ellos , no todas las regiones son
fructíferas y felices , y mucho menos
las que los crían. Raro es á la ver
dad tener á un mismo tiempo abun
dancia de metales y de frutos : raro
es tambien tener en una region pe
queña riquezas de todo género de me
tales. Pero Turdetania y su region
contigua abundan tanto en ambas co
sas , que no puede imaginarse alaban
za bastante digna á su excelencia ; por
que hasta ahora en ninguna parte de
1
la
106 Quan fértil es en metales ) . No es
necesario buscar testimonios en los Auto
res. Todos saben que España fué alabada en
esto por Untos , quantos de ella escribieron.
DE ESTRABON. I Oí
la tierra se ha hallado tanto oro, pla
ta , cobre ó hierro , ni tan bueno co
mo en ella. No solo se cava el
oro l°7 , sino que tambien los Ríos y
torrentes le traen mezclado con are
na : en muchos lugares faltos de agua
se halla la tal arena , mas no el oro;
pero en otros sitios regados brillan
polvos , y aunque las arenas no es
tén humedecidas , las bañan con agua,
y de este modo hacen resplandecer
dicho metal. Haciendo tambien po
zos Io8■ , é imaginando otros artificios
para empapar y lavar la arena, co
gen oro, y ahora mas son los para-
ges donde este se limpia , que no don
de
IO? 2tí> solo se cava el oro.). Plinio
lib. 33. cap. 4. pone tres modos de ha
llarle. Véase la nota 112.
I08 Haciendo tambien jpozoif). Plinio
lib. XXXIII. 4 : Alio modo puteorum scro-
bibus effoditur. El mismo al lib. XXXIV.
cap. 4 : Quod puteis foditur canalitium vo-
cant , alii canaliense , marmoris glareis
inhaerens.
1 02 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de se cava. Afirman algunos Gála-
tas , que sus metales son mas exce
lentes en el monte Cemmeno y so
bre el mismo Pyrenéo ; pero con tx>
do la mayor parte de los de esta re
gion son muy alabados. Cuentan que
entre sus terrones han solido hallar
alguna vez bolas de oro de media
libra , que llaman palas , y necesitan
purificarse poco 109. Dicen que tam
bien se hallan dentro de las piedras
partidas en dos , terrones en figura
de pechos. Cocido , pues , el oro , y
purificado por medio de cierta tierra
con parte de alumbre, aparta de sí
lo que se llama electro , el qual tiene
mez-

*°9 Plinio en el primer lugar citado


escribe : Aurum , arrugia quaesitutn , non
\ (oquitur sed statim suum est. Inveniuntur
ita massae nec non in puteis etiam denas
excedentes libras : palacras Hispani , alii
palancranas vocant. Estrabon entiende por
palas lo que los Españoles llamaban ba*
lima.
.' ¡ DE ESTRABOK. I O3
mezcla de plata y oro 110. Poniendo
dicho electro al fuego, se quema aque
lla y el oro permanece , por quanto
es materia fundible y de piedra. Así
tambien.* con la escoria del bronce
se derrite mas fácilmente el oro ; por
que siendo la llama menos fuerte,
tiene proporcion templada para ce
der sin dificultad ; pero el carbon coa
sume mucho , derritiendo y disminu
yendo demasiado coñ.su vehemencia.
En los Erytros "* * sacan esta tier
ra y la lavan dentro de unas hoyas
Ó pozas 113. Hacen tambien hornos
AU' muy

110 El qual tiene mezcla, de plata y


cro^. Afirma que el electro es mixto : así
entenderemos mejor el verso 229 de Silio
Itálico lib, 1 : .*''..
Electri gemino fdllent de semine rvenae:
' 111 #r Dudamos donde están estos Ery
tros , pues , segun Casaubon , no se deben
entender baxo dicho nombre los habitantes
de Erytria ó Eryteya. Mejor le parece
la leccion Artabros ó Asturos.
"2 Plinio lib. XXXIII. cap. 4. donde
í*4 di
1 04 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
j|y,;'■ muy altos para la plata : pero de los
1||} terrones sube cierto hollín molesto
y pestilente "3. Entre las tiendas
donde se labra el cobre hay algunas
que llaman de oro , porque allí se
V ' ' de-

.y1" dixe que ponía tres modos de hallar el


oro , trae tambien lo siguiente : Apud nos
tribus modis Jluminum ramentis , ut in Tu
go Hispaniae , Pado Italiae , Gange In-
diae : nec ullum absolutius aurum est cur-
su ipso trituque perpolitum. Alio modo pu-
teorum scrobibus ejfbditur.... Quod ejf'osum
est , tunditur , lavatur.
1I* Sube curto hollín molesto y pestilen
te). Plinio XXXIII. c. 6 ; Odor ex ar-
genti fodinis inimicus omnibus animalibus,
.sed máxime canibus. Lucrecio lib. VI.
V. 808: : i
■. •"■ - ■• o '■■ •• j-

JDenique,, ubi argenti venas , aunque sequuntur,


Terrat penitus scrut antes abdita ferro :
Qualeis exspirat scaptesula subter odores ? "
jQuidve mali fit ut exbalent aurata metalla!
Ouas hominum reddunt facies ? qualeisque colores ?
trotine vides audisve perire in tempore parvo
jQuam soleant ? et quam vitat copia desit,
Quos opfire in tali cobibet vis magna ? ~ ■ "
DE ESTRABON. IOg
depositan quando sale de la mina.
Posidonio alabando la multitud y ex
celencia de metales , no se abstiene Pág.
de su acostumbrado adorno en ellen- 147.
guage , antes se dexa llevar con de
masiadas amplificaciones de cierta ins
piracion ó entusiasmo poético114. Di
ce,
114 Parece que Posidonio habló con
mucho acierto sobre los metales de Espa
ña. Diódoro Sículo tratando exprofeso de
esto mismo , tomó , como nuestro Geógra
fo , toda la narracion de Posidonio , pero
sin alabarle por verdadero autor ; lo qual
es ageno de la integridad de Estrabon.
Además que Diódoro no tenía motivo pa
ra avergonzarse en confesar de quien se
había valido. El pasage de este Escritor se
halla en el libro quinto. Tocante á lo que
Estrabon nota en el estilo de Posidonio,
lo mismo observamos en Plinio , pues sus
palabras están llenas de tal Retórica , que
muchas veces mas afecta al lector con ellas,
que con los verdaderos hechos. No es me
nester ir muy léjos. En aquel capítulo que
.escribió tambien de metales , hay varias co
sas de este género. Al contrario , sobre la
fa-
I 06 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ce , pues , que no disminuye el crédi
to á una fábula , afirmando , que en
otro tiempo derretida la tierra con el
incendio de los bosques "* , y te
niendo materia de oro y de plata , ar
rojó hirviendo á la superficie estos me
tales, de modo que todo el monte y
todo el collado se llenaron de mate
ria monetaria por un rico don de la
naturaleza , y hubo quien al ver estos
lugares los llamó tesoros de ella , ó
erario del perpetuo poder : porque no
es solamente rica (segun dice) esta
tierra , sino que tiene las riquezas de
ba-
facilidad y elegancia de Posidonio léase la
epístola XCI. de Séneca.
u$ Bien sabida es la fábula del incen
dio de los montes que enriqueció sus cer
canías. Yá diximos que esta dió causa al
nombre de los Pyrenéos , y tambien hubo
quien contó lo mismo de otros , como Po
sidonio , que hablando de los montes Rí
feos los confundió con los Alpes. Véase
á Atenéo lib. VI. y Eust. IV. Odys.
Com.
DÉ ESTRABON. I07
baxo , y allí habita , no Ades , sino
Pluton ll6*. Esto escribió Posidonio
con una elegante oracion , y quasi
deducida de los mismos metales. Ma
nifestando la diligencia de los cava
dores trae un dicho de Falereo, quien
tratando de los metales Áticos , pone
que cavan allí los hombres con tan
ta freqüencia como si esperasen sa
car al mismo Pluton "7 ; y demues
tra
116 * Pluton , hijo de Saturno y Opis,
hermano de Júpiter y Neptuno. Casó con
Proserpina : fué tenido por Dios del In
fierno y de las riquezas. Los Griegos le
llamaron Ades , esto es , triste y tenebro
so , porque de ningun modo podia ver.
Estrabon parece que distingue dos Dioses;
pues pone que allí habitaba Pluton , no
Ades , á ménos que no quiera denotar
en esto que residía entre ellos Pluton , pe
ro no el Pluton triste y tenebroso.
"7 Silio Itálico lib. I. v. 231. pone:

Astur avarus
Visceribus lacerae telluris mergitur imis,
Et redit infoelix effoso concolor auro.
108 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tra que esta industria y deseo de tra
bajar es ahora semejante al de los
Turdetanos , quienes hacen minas pro
fundas y obliquas "8 , y las mas ve
ces encuentran Ríos U9 . Extraen el
agua con conchas Egypcias M0; y
esta estratagema no la tenían anti
guamente los Áticos ; pues aunque
había entre ellos para sus obras me
ta.
u8 Quienes hacen minas profundas y
obliquas) . Plinio XXXIII. 4. escribe : Ter-
tia ratio opera vicerit Gigantum : Cuni-
culis per magna spatia actis , cavantur
montes ad lucernarum lumina. Diódoro Sí-
culo , tratando en su libro quarto del mo
do de sacar el oro , ilustra á Plinio y á
Estrabon.
«9 y las mas veces encuentran Ríos).
Tambien suelen tropezar pedernales , y los
rompen con fuego ó aceyte.
xío Extraen el agua con conchas Egyp
cias). De esta máquina para agotar el agua
trata Vitrubio. Llámala Egypcia nuestro
Autor porque los Egypcios la usaron ma?
principalmente , aunque su inventor fué
Archimedes. .... -
DE ESTRAB0N. I09
tálicas una cosa semejante á aquel
enigma ; sin embargo los Atenienses
no guardaban todo lo que alcanza
ban , y de lo que habían tenido per
dieron bastante. A los Turdetanos,
al contrario , aun esto les aprove
chaba. Porque sus artífices sacan co
bre , que es la quarta parte del ter
ron cavado , y en tres días un ta
lento Euboico de plata. Añade tam
bien Posidonio , que el estaño no se
halla en la superficie de la tierra , co
mo divulgaron los Historiadores , si
no que se cava , nace junto á los bár
baros que viven sobre Lusitania y
las Islas Casitérides Ml * , y tambien
se suelen llevar de los Britannos á
Masilia ó Marsella. Cerca de los
Artabros , que están en lo último de
Lusitania hacia el Ocaso y Septen-
. '..¿ trion»
121 * Islas Casitérides son , segun Me-
la, Plinio y Ptoleméo , todas las situadas
frente de los Celtas entre la Gran Bretaña
y el Promontorio Nerio. Véase al último
donde las coloca Estrabon..
110 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
trion, afirma que hay estaño dora
do mezclado con plata 122 * : á esta
tierra la llevan los Ríos, las muge-
res la sacan con azadon , y la lavan
en cestos de mimbres, donde limpia
despide puro estaño. Hasta aquí es
cribe él de metales. Polybio, haden-*
do mencion de los metales plateados
que hay junto á la Cárthago íj<h

: ,?*;i*í Estaño dorado). Mucho hada-.


do que hacer este pasage á los Intérpretes.
Porque en ningun Autor parece se halla,
plomo , que tenga el color de oro ( lo que
quiere decir , xwri<" ) •. Pljnio XXXIV,"
c. 1 6, escribe que entre los metales dora
dos se halla plomo ; pero no por eso se
debe llamar purun.. Además que si es blan
co , como denota la palabra Griega \ux.»
y la Latina albo , ¿ cómo ha de ser al mis
mo tiempo dorado ? Yo solo traduxe esta
ño dorado , y no blanco , por hacer la ad
vertencia que diré. .Todos saben que es
blanco este metal. Luego en poner nues-■
tro Autor xpw«í> , dorado , ó es por error
de los codices, ó quiere significar 1© mis
mo que Plinio. .hjú iud üj..^^ ■',[ j.í.i¡■■¡i
DE ESTRAB0N. I1J
va I2s * , y dice que son muy gran
des , distantes de la Ciudad como
20 estadios , y contenidos en el cír
culo de 400 : aquí se empleaban en
el trabajo quarenta mil hombres, y
estos daban libres al pueblo Roma
no
. «3 * Cárthago nova , llamada tambien
Espartaría , por hallarse cerca de dicho
campo y distinguirla de la de Africa , cor
responde hoy día á Cartagena. Su situa
cion es hácia el país de los Contestanos en
el golfo que nombraban antiguamente Vir-
gitanus sinus. Segun Polybio podía tener
este golfo veinte estadios de profundidad
y la mitad de ancho. " A la entrada (di-
«ce y hay una Isla que dexa por cada la-
«do un espacio bastante reducido á las em
barcaciones. Al fin , se avanza la tierra
«en forma de península , y allí está funda-
»ida la Ciudad. En la montaña mas alta
»ique hay al Poniente , se halla un pa
lacio. Por el Norte está rodeada de co
cinas : entre ellas las mas principales sori
»ila de Vulcano y la de Saturno." Con
quistóla Escipion , y se conserva gran
parte de sus medallas antiguas.
' s 112 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Pág. no 2g9 drachmas diarios. Omito con-
148. tar cómo se haga la plata por ser
largo. Pero dicen , que el terron que
los Ríos llevan se quebranta , y se
tiene en cedazos sobre el agua ; des
pués machacan y cuelan lo que que
da encima , repitiéndolo algunas ve
ces : á la quinta se pasa el líquido
restante ; y de esta suerte , derrama
do el plomo , sale la plata purifica
da. Aun ahora existen tiendas don
de trabajan la plata : estas no son pú
blicas , ni se han colocado aquí y en
otros lugares arbitrariamente, sino
que están sujetas á cierto impuesto-
Junto á Castaon "** y otros luga
res hay metal de plomo cavadizo con
mezcla de plata , cuya separacion no
es de provecho. No lejos de Castaon
está un monte llamado de plata , ó Ar-
gentarius et Argenteus mons, por la abun.r
dancia que hay allí de este metal,
donde se dice que corre el Betis "**
Po-
124 * Véase la nota 76 *.
"í No. lejos de Castaon esta un mon-i
te
* DE ESTRABON* I13
Polybio escribe que este y el Gua
diana corren desde Celtiberia , dis
tantes entre sí como 900 estadios,
porque los Celtíberos habiéndose he*
cho poderosos dieron nombre á to
das las regiones circunvecinas. Pare*
ce que los antiguos llamaron al Be-
tis Tarteso , y á Gades con sus Is
las adyacentes Eryteya l26 : por eso
juz-
te llamado de plata"). Avieno juzga lla
marse así , poique sus lados están cubier
tos de estaño , que tiene la apariencia de
plata , y dice : . :

At mons paludem incumbit Argentarius,


Sic d vetustts dictus d specie sui,
Stanno iste namque latera plurimo nitet.

126 JT d Gades con sus Islas adya


centes Eryteya ) . Que Eritia sea nom
bre de muchas Islas no creo se halle en
ningun Escritor. El mismo Estrabon afir
ma mas abaxo que solo fué llamada así
una ', no muchas ; entre ellas la que está
separada de la Ciudad de Gades por un
angostó estrecho. • . . .1; . -
ú k
114 LIBR0 "*• DE LA geografía
juzgan que cantó así Estesícoro ha
blando del ganado de Geryon:
.. . '1
Rio Tarteso , que de inmensas fuentes
Casi á la opuesta parte de Eryteya
Naciendo corres , y con plata llenas •>
Duros peñascos.

Saliendo , pues , al mar el Betis pot


dos bocas, dicen que antiguamente
en medio de estas fué habitada Ja
Ciudad Tarteso , con el sobrenombre
del Río , y que la region se llamó
Tartésides , donde ahora viven los
Túrdulos. Se sabe que Eratóstenes
á la costa adyacente á Calpe llamó
Tarte'sides , y á Erytéa Isla Fortu
nata. Por esto le reprehendió de fal
so Artemidoro , y tambien porque
dixo que el Promontorio Sacro dis
taba de Gades cinco días de navega
cion , no siendo el espacio mas de
3700 estadios : le acusó tambien de
vano en escribir, que por aquellos si*
tios acababan las crecientes del mar,
quando duran en todas las partes de;
la
t DE ESTRABON. I Ig
la tierra : últimamente que así hizo
jnal en afirmar , que las partes de Es
paña al Septentrion son conocidas con
mas facilidad navegando hacia la Ga-
lia que hacia el Oce'ano , y otras co
sas semejantes dichas con arrogancia
siguiendo á Pyteas. Homero que Pág.
tenia noticia de muchas cosas, alesi 149.
cribirlas se le proporcionó ocasion de
pensar , que no ignoraba la situacion
de estos lugares , como verá quien
quisiese raciocinar conforme á lo que
dixo , si no bien , por lo menos con
verdad. Lo peor es que oyó , que
Tarteso estaba en lo último del Oca
so , donde como él escribe :

La clara luz de Febo


Cae en el Océano,
T siguese la noche,
Negra y aciaga para el fértil campo.
Consta que la noche era de mal agüe
ro , cercana de Pluton , y Pluton del
infierno. Al oir Tarteso podrá juz.gac
alguno , que de aquí nombró Home-.
k2 ro
I 16 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ro infierno ó Tártaro al lugar mas"
profundo de debaxo la tierra , y que
así , guardada su costumbre poética,
añadió otra fábula. Al modo de los
Cimmerios , que sabiendo habitaban
junto al Bósforo en lugares situados
hacia el Septentrion y el Ocaso , los
colocó cerca de los infiernos : aun
que en esto seguiría acaso el comun;
parecer de los Jonios ; porque, en el
tiempo de Homero ó poco antes, Jos
Cimmerios caminaron hasta la Jonia
y Eólide. Del mismo modo , á exem-
plo de los peñascos Cyanéos fingió
piedras Planetas, introduciendo siem
pre en la historia alguna fábula. Di-
xo que ciertos peñascos , quales eran
los Cyanéos , se llamaban Symplega-
des , por chocar y estar unidos en
tre sí ; que Jason navegó por medio
de ellos ; y este cuento duró hasta
las Columnas y el Estrecho de Sici
lia. De lo menos bien dicho , es á
saber, la ficcion del Tártaro , juzga
rá alguno que quiso tratar Homero,
quando nombra á Tarteso. Pero me.»
jor
DE ESTRABON. H7
jor se puede discurrir sobre las cosas
que voy á contar. Porque habiendo
hecho hasta aquí una expedicion Hér
cules y los Fenicios , dieron materia
á Homero para significar el poder y
negligencia de los hombres ; pues vi
nieron todos baxo su poder, tanto que
las mas Ciudades de Turdetania y
sus lugares vecinos aún están habi
tados por ellos. Sabiendo Homero la
expedicion que hizo hasta aquí Ulí-
ses , parece que le dio ocasion para
escribir al modo de la Ilíada , la Uli-
séa ú Odyséa , mudando en una nar
racion fabulosa , segun costumbre de
los Poetas, lo que era verdadera
mente historia , porque de ello no
solamente dan indicios varios luga
res de Italia y Sicilia, y algunos otros;
sino que en España se conoce aún la
Ciudad Ulyséa , el Templo de Miner
va , infinitos vestigios de este error,
y de aquellos hombres , que habien
do salido de la guerra de Troya , in
festaron tanto á los vencedores como
á los vencidos ; pues se dice que la
k3 vic-
118 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Pág. victoria Cádmea de los Griegos fué,
150. perdiendo sus cosas domésticas , y
apoderándose cada uno de una pe
queña parte de la presa. Así suce
dió que los que quedaron de la des
truccion de la patria I27 se entrega
ron á latrocinios , y lo mismo hicie
ron los Griegos , ó porque su hacien
da estaba perdida , ó porque cada uno
pensaba :

Que era mengua faltar tanto de casa,


T con manos vacías volver á ella.
Odys. lib. XI. v. 567.
De esta manera se recomendó á la
memoria la peregrinacion de Eneas,
Antenor y los Henetos , como tam
bien la de Diómedes , Meneláo, Uly-
ses y otros muchos. Sabiendo además
Homero , que estas expediciones lle
ga-
"7 Los que quedaron de la destruc
cion de la patria). Quiere decir Estrabon
los Troyanos que se libraron del incendio,
como Heleno , Enéas , Antenor , y algu
nos mas. ■ . j
DE ESTRABON. 1 19
garon á lo último de España , y ha
biendo conocido por los Fenicios la
opulencia y demás bienes de estos si
tios , fingió allí el asiento de los jus
tos , y el Campo Elysio , donde dice
Proteo que habitará Meneláo:

Fuera del postrer límite terrestre


Te llevarán los númenes sagrados
(Para que habites campo delicioso)
Al Elysio , que ocupa Radamanto,
Donde se pasa vida muy dichosa.
Allí no cubre Júpiter los campos
Defria nieve ; no hay lluvias ni invierno:
El Favonio respira siempre grato,
T mitiga viniendo del Oeste
Los calores del hombre porfiados.
Odys. lib. IV. v. ¿68,
En efecto es propia de esta region la
buena disposicion de ayre *28 , y el
dul-
118 En efecto es -propia de esta region
la buena disposicion de ayre). Justino XLIV.
cap. i : Salubritas coeli per on.nem His-
paniam aequalis quia a'éris spiritus , nulia
paludium gravi nebula injicitur. Huc ac-
¿4 ce
120 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
dulce soplo del Favonio , siendo la
tierra en sus límites occidental y tem
plada , donde decimos por eso que
fingió estaban los Infiernos , y el Juez
Radamanto describe así el lugar ve
cino á Minos:

Desde aquí veo á Minos , Rey de Creta,


Ilustre hijo del Tonante Jove,
Que con dorado cetro marca leyes,
T de la sombra tácita dispone.
Odys. lib. XI. v. 567.
Semejantes á estas cuentan los Poe
tas modernos varias fábulas, como la
expedicion por los Bueyes de Geryon,
" y otra por las manzanas de las Hes-
pérides. Tambien hacen memoria de
ciertas Islas nombradas de los Beatos,
dichosas ó fortunadas 129,que aun exis
ten,
cedunt et marinae aurae , undique versus
assidui flatus , quibus omnem provinciam
penetrantibus , eventilato terrestri spiritú,
fraecipua hominibus sanitas redditur. .•
"9 De estas habla mucho Plutarco en
Sertorio. ;
• DE ESTRABOK. 121

ten , y se conocen poco distantes de


los extremos de la Mauritania , opues
tos á Gades. Verdaderamente me atre
vo á decir , que los descubridores de
estas cosas fueron los Fenicios , quie^
nes antes del tiempo de Homero pose
yeron lo mejor de España y África,
haciéndose dueños de estos lugares,
hasta que los Romanos destruyeron
su imperio. Otro testimonio dan los Pág.
Escritores de las riquezas Españolas, 151.
y es que los Cartagineses , que hi
cieron una expedicion con su Gene
ral Barca x3° , cogieron á los Turde-
tanos que usaban pesebres y tinajas
ó botas de plata131. Alguno podrá
juz-
l3° Barca"). Este es Amilcar , por so
brenombre Barcas , que gobernó la Espa
ña antes de Asdrubal , y fué padre de
Anibal. De este tomó nombre k faccion
Barcina de los Cartagineses.
131 Pesebres y tinajas ó botas depla
to). Hizo bien Xylandro en condenar la
leccion de los Epítomes poniendo <fccria.it
pesebres , y no táAuts vasos ; porque no
era
122 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
juzgar que estos hombres á causa dé
su mucha felicidad , serían tambien
lia-
era mucha magnificencia usar vasos de pla
ta , quando ahora entre nosotros los hom
bres de mediana fortuna tienen eso , y í
veces su pequeña baxilla. Al contrario , es
prueba de una maravillosa y casi increíble
abundancia el hacer pesebres de plata ; por
eso admito en parte la leccion dicha, aun
que me parece algo dudoso , por mucha
riqueza que hubiese , emplearla en sitio
tan extraño. Podía ser casi lo mismo di
ciendo «jaTiai^irar , esto es , las paredes de
la casa , lo qual no fuera tan nuevo , pues
Polybio , describiendo el rico aparato del
Palacio de los Persas Ecbátanos , dice que
los maderos y tapias eran de plata. Luego
es verosímil que en este sentido pusiesen
4>irr<tí los Escritores. Diódoro Sículo, lib. i:
%<t¡ tUvtw /u,ei¿M&oí »► ¡pop* , qctricuí Kctl £W,«.aa■<
tirí biaiytyÁvftftiii f »aí ypa.fai.is íietfSp*l5 *í*oi*lA.-
/"i«. Tambien se puede tomar por mesas;
pues tambien significa esto algunas veces
la palabra ?árm , como si dixera fiyu w«p<*
t■í i<tyt7>. Un Autor incierto en Suidas , ti¡
Airaiiiv &tf*.ittvrat x.a.¡ ¡TexiKkMot afta, fírtm.
Elia-
BE ESTRABON. Í23
llamados longevos , especialmente los
prin-
Eliano , OÍ JAarrími Tíis ¿x. T«í a. irtí <?krrvií
ilini' iUfox.lrxs ifyiMeitr. Pero la primera in
terpretacion es la mas verdadera de todas.
Estado, lib. 1 . de su Tebaida , vers. 144:
Et nondum crasso laquearía fulva metal/o
Montibus aut alté grajis effulta nitebant
¿ítria.

Lucano , lib. X. vers. 3. describiendo el


Palacio de Cleopatra:
Jpse locus , templi quod vix corrupt'tor aetas
Exstruet , instar erat : laquetaque tecta ferebant
Divitias ; crassumque trabes absconderat aurum.

Plinio XXXIII. 3. hablando de los Sua-


nos , gente de Coicos , y su Rey Eusobe:
Sed et illius aureae camerae , et argenteae
trabes narrantur., et columnas atque jpa-
rastatae.
Horacio lib. a. Carm. Od. 18.

Isfon ebur , ñeque aureum


Mea renidet in domo ¡acunar.

Y Séneca lib. XIII. de sus Epístolas.


124 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
principales , y que por eso dixo Ana-
creonte w :

No quiero de Amaltéa la abundancia


O la fértil de bienes cornucopia.
Ni reynar pido ciento y cincuenta años
Dó los Tartesios con fortuna moran.

Heródoto expresó aquí el nombre de


su Rey Argantonio ; y este parece
que debemos entender , pues reynd
muchos años ; á menos que Anacreon-
te no hablase de otro , ó quisiese de
cir en general : no quiero ser Rey lar
go tiempo en Tarteso. Hay algunos que
dicen ser Tarteso lo que ahora Car-
teya Iw. Pero los Turdetanos tienen,
junto con la felicidad de su Region,
ci-
*3* Y que for eso dixo Anacreonte ).
Plinio lib. VIL cap. 48. El Poeta Ana
creonte dá 150 años á Argantonio Rey
de los Tartesios.
233 Dicen ser Tarteso lo que ahora.
Carteya. Lo mismo notan Mela , Plinio,
Pausanjas y Apiano. Véase la nota 192 *.
DE ESTRAB0N. 12 5
civilidad y mansedumbre de vida , y
de esta escribe Polybio que reciben
parte los Célticos , por la vecindad
V parentesco , pero mucho menos los
que están mas cerca. Los Turdetanos,
que están junto al Betis , siguieron
casi del todo las costumbres Roma
nas , olvidando su lenguage patrio;
y muchos se hicieron Latinos , y re
cibieron Colonos Romanos , faltando
poco para serlo ellos. Las Ciudades
que ahora se fundaron , como son
Pezaugusta en la Céltica1"*, Au-
gus-
134 # Pezavgusta debe corregirse en
Pax Augusta , como notó yá Ortelio en
su Tesauro , citando el Códice Griego del
Escorial , y lo mismo Jacobo Palmeno con
Casaubon. La disputa que hay "entre al
gunos Autores es sobre si hubo dos Pa
tentes , una correspondiente a la Ciudad
de Beta en Portugal , y otra donde hoy
existe Badajoz. Que hubo una en Lun-
tania es muy cierto , pues además de nom?
brarla Plinio lib. 4. cap. 22. con los títu
los honoríficos de Colonia y Convento Jur
■-
I 26 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA

gusta Emerita en los Túrdulos135 *¿


Ce-
rídico , sabemos que batió monedas y se
llamó Pax Julia. Resta averiguar si es la
misma de Estrabon. Yo creo que toda es
una , pues los argumentos que defienden
esta opinion parecen mas probables. La ob
jecion contraria de mayor peso es decir que
como los Moros no tienen P y en su lu
gar usan B , al pronunciar Pax Augus*
ta mudaban la voz en Baxaugus , que
luego degeneró en Badaxos y Badajoz.'»
pero despreciando semejantes etimologías
prueba el Reverendísimo P. M. Fr. Henri-
qüe Florez , que solo hubo una Pacense
donde ahora Beja.
i3í * Concluida la guerra de los Cán
tabros y Asturianos , que vino á mandar
personalmente el Emperador Augusto, fué
preciso reformar muchos Soldados y dar
algun premio ' á sus fatigas ; ¿ pues quien
se sacrificaría á los trabajos, si no fuera
<;on la esperanza de que se acabasen? Lu»
cano en su Farsalia lib. 1,. vers..343: j
"Cwnferet exánguis qub se post bella sénectm? '.
Quue sedes erit■emeritis'i quiie rura dabwtur, ■1
J¿uaa fioster veteranus aret'i (¡une moenia fes'si& .
Au
.f DE ESTRABON. ■ * 12?
Cesaraugusta cerca de los Celtíbe*
ros,
Augusto , pues , concedió á la Tropa per
miso para poder erigir nuevas Colonias, y,
parte de los jubilados , con el título de
Eméritos , fundaron la Ciudad Augusta
■Emérita , como expresa Dion Casio li
bro 53. Este Autor , Mela , Ptoleméo y
Aggeno colocan á Augusta Emérita en los
Lusitanos. Nuestro Geógrafo en los Túr-
dulos. Prudencio en su juiciosa descrip
cion indica ser de los Vectones. Véase el
pasage entero , Eulalia , Hym.. 3. v. l86.
donde dice: . •
' 2Vu»c' locus Ementa est tumulo
.. Clara Colonia Vectoniae; 1
Quam memorabilis amnis Ana
Praeterit , et mudante rapax
Gurgite moenia pulchra lavit ( sic pro lavai).

Hyginc.: pone á Mérida (nombre moder


no de la; Ciudad que hablamos ) en. Be
tuna. Consiste la diferencia de los Escrito
res en que unos miraron al concepto de
Provincia y otros al de Region ; pero toV
dos se pueden concordar así. Perteneció á
la L.wifea»ja como su Capital y Consiento
Ju/idico. Fué de los Túrdulos, segun Es-
-ijA tra-
128 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ros n6 * , y algunas otras Colonias,
de-
trabon añadiendo Plinio afirmativamente
que estuvo junto al Rio Ana. Como aquel
sitio era confín de los Vetones y de la Be
tuna , participaba Mérida de entrambos so
lo por inmediacion ó cercanía , no en rigor
verdadero. ~
136 Cesaraugusta fué nombrada por
Ptoleméo K*i<ráp«<* AJyowr*. Pomponio Me-
la lib. 2. cap. 6. pone: Urbium de Medi-
terraneis clarissimae fuerunt Palantia,et^
Numantia , nunc est Caesaraugusta. Casi
todos los Geógrafos Latinos escriben dicha
Ciudad con una sola voz : entre los Poe
tas hay variedad. Prudencio Pansteph.
Hymn. 4. la trae de este modo :

Tu decem Sanctos revehes et octo


Caesaraugusta studiosa Christi, ; . l
Verticem fíavis oleis reviruta .
—J - ' .'.;...' .r.nuí
Pacis honore.
Y en otro verso: :.:' : íllj:; ":'°'>}
,. , ,''[. ,=ü"
Caesaramustam vocitamus tirím¿ ^

. . ' ' Au~


DE ESTRABON. 120,
demuestran la mutacion dicha de la
Re-
Ausonio y San Paulino la escriben con dos
voces. El primero Epíst. 23.
Nunc tibi trans Alpes , et marmoream Pyrene.m
Caesareae Augustae domus est.

El segundo , Poemat. 1.0 : >


Bilbilis buic tantum , Calagurris , Hiíerda notatur
Caesarea est Augusta cui , cui Barcino ameena , Cr.

Hoy corresponde á Zaragoza , Capital del


Reyno de Aragon , situada sobre el Ebro
en el parage donde se juntan los Ríos
Guerva y Gallego, á once leguas comu
nes y al Nor-Este de Calatayud , á trece
de Tarazona , y á 19.3.de Lérida. Pli-
nio dice que su nombre antiguo fué Sal-
duba : distingue dos Pueblos llamados así,
el uno en la Bética y el otro en la JE.de.
tania , donde existió después Caesarau
gusta. Samuel Bochart , con la idea de que.
casi todas las Ciudades de España tuvieron
por fundadores á los Fenicios , tomándose
licencia de alterar las letras escribe que Sal-
duba es Saltobaal , que significa su domi
nio ó escudo Baal. Marineo Sículo , para,
/ com
I3O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
República , y los Españoles que la
siguieron fueron llamados estolados ó
togados , entre ellos los Celtíberos,
que eran reputados en otro tiempo
por los mas íieros é inhumanos. Pe
ro baste lo dicho acerca de esto.
Adelantándose ya segunda vez
desde el Promontorio Sacro hasta la
otra parte de la Costa marítima '37,
hacia el Tajo hay un Seno , después
el Promontorio Barbario I38 * , y cer
ca
comprobar que Juba fundó esta poblacion,
leyó Saldyba y lo interpreta Casa de Ju
ba. Semejantes etimologías deben despre
ciarse por poco felices : al contrario , las
monedas que batió esta Ciudad , y saber
fué Colonia inmune , son instrumentos po
sitivos de antigüedad y de excelencia.
J37 Adelantándose ya segunda vez. des
de el Promontorio Sacro). Describió hasta
aquí la Costa de España , que está desde
el Calpe al Sacro Promontorio : ahora va
de este al Nerio de los Artabros , que ter
mina el lado Occidental y el Septentrional.
138 # El Promontorio Barbario corres
ponde al que hoy llaman Cabo de■ Espi-
íhel.
DE ESTRAB0N. 131
ca las desembocaduras de dicho Río,
á las quales se navega recto, por es
pacio de 10 estadios. Hay allí va
rios esparcimientos , de los quales uno
corre desde el parage nombrado Tor
re ó Pyrgo 400 estadios , y los de-
mas van á desaguar á Eipon La-.
ceía I39 . Las desembocaduras del Ta
jo
chel. Ptoleméo le coloca al Mediodía de
la boca del Tajo ; pero Mela y Plinio no
le nombran , por no ser muy sobresalien
te , y tener cerca el Magno de quien ha
blaron. Florian de Ocampo interpreta el
nombre de este Promontorio , recurriendo
á que vivian allí los que llama Sarios,
gente Lusitana bárbara , y de mal hospe-
dage para los Extrangeros , como escribe
en el lib. 3. cap. 7. Aquel territorio es
abundante en jaspes de diversos -colores,
produciendo juntamente mucha grana.
x39 Eipon Laceia). Este pasage no
puede ménos de padecer alteracion. Si fue
se lícito adivinar , diría Hippon y Salada;
porque á estas Ciudades las nombra y co
loca aquí Ptoleméo : de suerte que se ha
ce probable sean las mismas de Estrabon.
/2 Tam■
1 32 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
jo tienen, pues, casi 20 estadios de
latitud, y suficiente profundidad , de
modo que bien pueden pasearse con
Naves Myriagogas l*°*. Quando el
mar sale de madre , hace el Tajo dos
dispersiones en los campos situados
sobre sus desembocaduras , de suerte
que la tierra se estanca , y es na-;
Pág. vegable 150 estadios. En la disper-
152. sion superior se incluye tambien una
Isla de 30 estadios en longitud y ca
si tanta latitud , apta para bosques
y
Tambien nombran hacia dicha parte Pto-
leméo y Plinio un lugar que se parece,
pues tiene por título Lancea. Dudamos,
sin embargo , la situacion afirmativa.
140 # Llama nuestro Autor Naves My
riagogas á las que en semejante caso nom
bro libro XVII. /iwpHfopo,. Casaubon cree
<jue se intitulan de esta manera por el pe
so de las mercadurías , pero ignora la cau
sa , y no la explica Polux , aunque hace
mencion de ellas. Véanse sus libros Iy , IV.
y VI. en los respectivos capítul. 9 , 22,
y 3-
DE ESTRABON. I33
y llena de viñas 1+I *. Está situada
en un monte , cerca del Río, y dis
ta del mar como unos 500 estadios:
solo la rodean bienes : tiene fáciles
navegaciones hácia arriba , embar
cándose algun poco tiempo en es
quifes grandes , después en barcos
de pescador , y sobre Morón l42 * es
aún la navegacion mas larga. Bru
to, por sobrenombre Calaico 143, usan
do
141 * Xylandro pone que esta Isla pa
rece ser la Londobris de Ptoleméo , lla
mada hoy Berlengas , y Casaubon dice que
no es así ; pues la Londobris del Océano
está en alta mar , y la Isla de Estrabon se
halla junto á los Estuarios del Tajo.
142 * Morón fué una antigua Ciudad
de Lusitania á la izquierda del Tajo , y
casi enfrente de Escalabis. Mr. Mentelle la
reduce hoy día al pequeño lugar llamado
Almeyrim.
143 Bruto por sobrenombre Calateo"). Es
cribía Tito Livio al libro XLIV. y XLV.
Epít. LVI , hablando de la guerra contra
los Calaicos ó Gallegos , que tomó este so-
/3 bre
134 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
do de esta Ciudad como de un al
cázar , hizo la guerra contra los Lu
sitanos, los venció y fortificó tanto
las desembocaduras del Río , que hi
zo libre la navegacion del Mediter
raneo y seguros los tráficos de su
comercio. Por eso estas Ciudades son
de las mejores que hay situadas jun
to al Tajo. El Río abunda de peces
y ostras l*4. Nace de los Celtíberos,
y vá por los Vetones , Carpetanos y
Lusitanos hacia el Ocaso equinoccial,
y
brenombre D. Junio Bruto. Así le llama
Plinio : otros Callaecum ; y últimamente,
tambien le apellidan Gallicum , segun la
variedad de Provincias. De esta guerra hay
memoria en Orosio , y Eutropio IV. c. 8.
y otros Autores Romanos ; pero se queda
en memoria sin pasar á narracion.
J*4 El Río abunda de peces y ostras).
Justino XLIV. c. i. tratando de los Ríos
de España pone : In hac cursus amnium
non torrentes , rapidique ut noceant , sed
leves , et vineis campisque irrigui , aes-
tuariisque Oceani affatim piscosi.
DE ESTRABON. I 35
y si alguna vez corre á igual distan
cia respecto del Guadiana y Betis,
luego se aparta , declinando ellos á
la costa Meridional. Aquellos que es
tán situados sobre los montes arriba
dichos , especialmente los Oretanos,
van al Mediodía , tocando por algu
na parte la ribera del mar, que es
tá fuera de las Columnas. Al Septen
trion de estos están los Car petanos,
después los Vetones y r« Vac
céos 14(S * , por quienes corre Durias

o
145 Después los Vetones y Vaccéos).
El Griego pone Ouaxaioi , Estéfano B«a7oi,
pero quieren decir Vaccéos como yo tra-
duxe ; porque en muchas dicciones latinas
mudan los Griegos la letra £ en V', y
á veces en el diptongo » , como BipyUtts
y ívifyitoof , A\€tat y aahiuf. Los Bárdulos
de Plinio son para Ptolemco ¿apí.ouAoi.
í4<s * Los Vaccéos , Provincia de la Es
paña Tarraconense , situada parte al Sur
de los Asturos y parte al Oriente de los
Calaicos. Diódoro pone que los Vaccéos
eran muy agradables y corteses. Todos los
/4 años
I36 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ó el Duero, bañando su Ciudad Acon-
cia *47*. Los últimos son los Ca lai
cos I48 * , quienes habitan mucha Re
gion
años hacían la division de las tierras , y
cada porcion se confiaba á un quintero, el
qual tenía pena de muerte si engañaba á
su amo. Apiano dice que Intercatia era
la Capital de los Vaccéos , y añade que
sus habitantes despreciaban la plata y el
oro. Tito Livio" coloca á esta Region en
el número de las que sujetaron L. Lúcu"
lo y Cl. Marcelo.
I47 # Aconcia parece ser la misma Ciu
dad de Estéfano , nombrada Acuteya ó
. Aquiteya. Ignoro como este Autor pone
que dio nombre á los Aquitanos , quando
todos saben que era una Nacion de la Gar
lia.
148 * Los Calaicos , Provincia de Es-,
paña al Norte del Río Duero. Se llama
ron después por corrupcion Gallaeci ó
Gallegos , pues como advierte Celario , su
nombre no viene de la voz Galli ¿ sino de
la antigua Ciudad Calle , perteneciente hoy
á Oporto , y situada sobre una colina. Lo*
Griegos llamaron á dicho pueblo KaM*'*"-'
Si-
DE ESTRABON. 1 37
gion montuosa difícil de subirse;
Estos dieron sobrenombre de Calai-
co al que derrotó la Lusitania , é hi->
cieron que muchos Lusitanos se lla
masen Calaicos. Las Ciudades prin
cipales de Oretania son Cástulo149*, y
Oria iI^0. Desde el Tajo hacia el Sep-
ten-
Silio Itálico les imitó en el lib, 3, v. 352:
Quidquid durutn sine Marte gerendum est
Callead conjux obit irrequieta Mariti.

Ptolemco divide á los Calaicos en Braca-


renses y Lucenses. Los primeros teman su
distintivo de la Ciudad Brácara hoy Bra
ga. Se extendían desde el Duero hasta
el Miño. Los otros se llamaban Lucenses
por la Ciudad Lucus Angustí hoy Lugo,
y su distrito era entre el Miño y los an
tiguos Asturos.
H9 # Véase la nota 25 *.
*s° Oria"). Estéfano dice que de Oria
tomaron nombre los Oretanos : pero pri
meramente lee Orisia y después Orsia,
debiendo llamarla como Estrabon , ú Ore^
tum Germanorum , como escribe Plinio,
Véase la nota 26 *.
í 38 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tentrion está la Lusitania , que abra
za mucha parte de la Nacion Espa
ñola , acosada largo tiempo con guer
ras de los Romanos. El Tajo se ha-,
lia al lado Austral de esta Region;
al Occidental y Septentrional el Océa
no ; al Oriental los Carpetanos, Ve-
tones , Vaccéos y Calaicos , gente
ilustre : las demás no son dignas de
memoria , ó por poco conocidas ó
por su pequenez.... Están confinando
hacia el Oriente los Calaicos con los
Asturos IS1 * é Iberos , y los demás
con
isr * Los Asturos pretende Silio Itáli
co que recibieron este nombre de Astur ó
Astyr , Armígero de Memnon. San Isido
ro dice que se llamaron así del Rio As-
tura , junto al qual viven , cercados de
montes y de selvas. Confinaban con los
Artabros por el Oriente , segun Mela y
Plinio. Este los divide en Transmontanos
y Augustanos. Los primeros son los mis
mos que hoy , desde los montes sobre Leon
y Astorga hasta el mar : los segundos ha
bitaron la parte del Mediodía. Aquellos
re-
DE ESTR.AB0N. 139
con los Celtíberos. Su longitud es de Pág.
1300 estadios y su latitud mucho 153.
menor , desde el lado Oriental has
ta la costa opuesta del mar. La par
te del Este es sublime y áspera; pe
ro mas abaxo toda la Region es lla
na hasta el mar , excepto algunos
quantos montes no muy grandes. Po-
sidonio dixo á Aristóteles , que no se
podían señalar en la ribera de Mau
ritania las verdaderas causas del flu-
xo y refluxo del mar , que en Espa
ña suceden , diciendo, que el agua
iba y venía alterada porque los ex
tremos de la tierra son allí ásperos
y altos , que reciben con dureza las
olas , y en España las sacuden , sien
do casi todas sus costas baxas, y lle
nas de montones de arena. Cosa ver
daderamente bien dicha.
La Lusitania , pues , de que íba
mos
recibieron el nombre por su situacion , es
tos por la Capital Astúrica Augusta , y
acaso por lo que dice Floro , de que Augusto
los hizo baxar para civilizarse.
I4O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
mos hablando, es opulenta V», y cons
ta de grandes y pequeños Ríos , to
dos paralelos al Tajo, y que manan
del Oriente : por muchos se puede
subir desde el mar al Continente , y
tienen bastantes polvos ú arenas de
oro. Los Ríos mas conocidos después
del Tajo son I« Muliadas 1S* * , que
tie-
Es opulenta ) . Las alabanzas de
Lusitania se pueden ver en Ateneo citan^
do á Polybio al principio del libro octa
vo.
153 Muliadas). Ptoleméo pone que se
llama Mondas el Río •*»£»< rS T¿y<p. Tam
bien se lee en Estrabon Moteas. Plinio IV:
c. 11 : Ab Durio Tagus CC. M. P. in
terveniente unda.
*S4 * £1 Río Muliadas , Munda ó
Mondas corre como el Tajo de Oriente á
Poniente , y pertenece al que hoy llaman
1 Mondego , cuyo nombre conserva vestigios
de la voz antigua. Nace cerca de la Ciu
dad de Guarda , y entra en el mar por
Coimbra y Montemor , sitas á su orilla
Meridional. . .: .. . • ¡ , • ,.:: •.
DE ESTRABON. I¿j.l
tiene algunas pequeñas ramas T y ISS.
Vacua 1S<5 * : tambien el Duero 1S7 ,
que corre desde lejas tierras , además
de
t~
H& Y Vacua). En Ptoleméo succede
el S«t*oí á Mondas.
156 * El Rio Vacua , Vacca , Vagus
ó Vaca corría con un movimiento paraT
lelo entre el Duero y el Munda. Cor
responde hoy al que los Portugueses lla
man Vouga, el qual es bastante caudaloso
en su embocadura , especialmente después
que recibe por la parte del Sur al Río
•Águeda.
, JS7 Tambien el Duero"). Después de
nombrar Ptoloméo ix.SoA.as de los Ríos ante
cedentes , dice : fu&"ás ai th Amgi'a .xera.fiiiv
íy&oku. Apiano siempre pone AJgios. Plinio
IV. c. 20. describe este Río del mismo
modo que Estrabon. Duríus amnis , ex.
tnaximis Hispaniae , ortus in Peleudoni-
bus , et juxta Numantiam lapsus , dein
per Arevacos , Vacceosque , disterminatis
#b Asturia Vectonibus , d Lusitania Gal
leéis , ibi quoque Túrdidos d Bracaris ar
142 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
de pasar por Numancia y otras mu
chas habitaciones de los Celtíberos
y Vaccéos. Se puede subir por él
en esquifes grandes hasta la distan
cia de ochocientos estadios : después
hay otros Ríos ; entre ellos el Le-
téo , esto es , Río del Olvido , que
otros llaman Liméa , y viene des
de los Celtíberos y Vaccéos x?8*¿
Fue-

^8 * Al Letéo ó Río del Olvido, que


otros llaman Liméa , nombra Estrabon con
la voz Griega Bía«5k* , y Casaubon la omi*
te en su version leyendo oÍAiaia;* y como
pasage alterado que debió escribirse así,
\ aludiendo al uso de la palabra latina. Creo
no desagrada á ningun intérprete ; aunque
se nota que para decir la palabra latini
zada hubiera. puesto nuestro Geógrafo
oSaihíSccí y no o,*. Esta última termina
cion pretende probar y defender Xylan-
dro en una nota á las qücstiones Romanas
pág. 272. contra su Autor Plutarco. A mí
me parece que puede exponerse dicho tex
to sin quitar el nombre Belion , pues don
de nace hoy el Rio es en el Lago Beon,
cu-
DE ESTRABON. I 43
Fuera de los dichos hay el Benis,
que

cuyo parage conserva los mismos vestigios.


Ptoleméo le llama Limio. Acaso viene el
origen ó tema del vocablo Griego Limnt,
esto es, Laguna y agua estancada. Como
quiera que sea , no le intitula Estrabon
* K*&* , sino ó ri( krifrns ; porque este no
es Río Olvido , sino del Olvido. Pompo-
nio Mela III. c. 1. Et cui Oblivionis cog-
nomen est Limia. Plinio IV. cap. 22. Aemi-
nius quem alibi quídam intelligunt et Li-
tnaeam vocant , Oblivionis antiquitus dic-
tus. Floro lib. 2. cap. 17 : Formidatum-
que militibus jiumen Oblivionis. Apiano,
habiendo encontrado este Río \*&y¡í en ge
nitivo , creyó ser el recto ó aí^s , lo que
no es así , pues el Río de los infiernos se
llamaba ns Aid■me. Consta de los Epigra
mas de Ant. III. cap. 1. ep. 19:

___ CU ytí ■9■í/ttíí ilf&l/MtOlTl.


Toü Aia■iií eVe,«oí fivn icUf iH/íurtí.

En el Epítome 55. de Livio ponen mal


fuvium oblivionem , debiendo decir oblivio
nis.
144 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
que otros llaman Minio , mayor que
los demas de Lusitania , y este tam
bien
i

nis.. Silio Itálico líb. i. vcrs. 23$. escribe:


Quique super gravios lucentes volvit arenas
Infernae popuíis referens obkvia Letbes.

Corresponde hoy día al Río Limia , que


nace al Levante de Orense , junto á Ño-,.
celo da Pena y Villa del Rey en el Lago
referido. Habiendo corrido dentro de Ga
licia unas ocho leguas , entra en el mar
después del Nevis por la Villa de Viana,
habiendo pasado ántes por la de Ponte de
Lima en Portugal. Algunos Autores ( en
tre ellos Mr. Baudrand ) le colocaron en
la Bética donde ahora se halla el E ío Gua-
dalete , por convenir su etimología , pero
es. un error gravísimo; pues aunque esta
convenga no le adaptan otras muchas se
ñales : tales son el hallarse arrimado al Mi
ño , como consta por todos los antiguos
Escritores. Además , el Rio de Andalucía
quiere decir Río del Delepe , nombre pues
to por los Moros , y por consiguiente maj,
moderno que el del, Olvido,
DE ESTRABON. 145
bien es navegable hasta 800 estadios
*59*.Posidonio afirma, que este tambien
se precipita desde los Cántabros : de
lante de sus bocas hay una Isla , y
dos Postes para defender el Puerto l6°.
La naturaleza ó clima del sitio me-
re-
159 # Creí que este Río fuese el Nebis de
Ptoleméo, pero me disuadió ver que este
último Escritor hace suceder al Letéo el
Minio , distinguiéndole del Benis. Alguno
sospechará , que en su lugar debe leerse ifi><aí
ó Ni>is ; porque así le nombra Apiano ,xifa.ca.t
ft x.<tl To',S~e ( \ri&tii J x.&¡ fiíxt1 Nía*',* «rspou ,
-xaTcífíiM 7rape\a.», : pero en tanta inconstan
cia de escritores no se puede afirmar nada
de positivo. Plinio IV. c. 22. dice , que el
Río Minio ( correspondiente hoy al Miño)
IV. M. P. ore spatiosum esse.
160 JT dos Postes para defender el Puer
to. ) Es Griego los llaman x,a*« , y en La-
tin Pilas : eran unas montañas , y á veces
diques , que estaban fabricados en el mar
para libertarse de los vientos. Polux I. cap.
9. dice , que pueden ser Xíaís todos los lu
gares adonde upa nave se anima sin pe
ligro. .¿ . u . . .
.. ., m
1 46 L1B. 111. DE LA GEOGRAFIA
rece alabanza , porque los Ríos tienen
márgenes altas, suficientes para des
pedir el crecimiento del mar , de mo
do que nunca se derraman , ni dañan
los campos. Aquí es el fin de la ex
pedicion de Bruto I<Sl. Mas adelante
hay otros Ríos l62 paralelos á los di
chos. Habitan en lo último los Arta-
bros l63 cerca del promontorio que se
llama Nerio , donde terminan las li
neas
161 Aquí es el Jin de la expedicion de
Bruto ). Lo mismo enseña Apiano ; porque
despues de explicar las hazañas de Bruto
hechas de la otra parte del Minio , añade,
que desde allí se partió á Roma. El Epí
tome 5 5 . de Livio escribe : D. Junius Lu-
sitaniam urbium expugnationibus usque ad
Oceanum perdomuit : et quum flwvium Obli-
'vionis transiré nollent , raptum signífero
signum ipse transtulit , et sic ut transgre-
deretur persuasit.
162 Mas adelante hay otros Ríos}.
Ptolemeo pone el Via y Tamara.
l6s Habitan en lo último los Artabros).
Es maravillosa la confusion de Plinio en Ja
explicacion de este pasage. Primeramente
:' con
DE ESTRABON. Í47
neas Occidental y Septentrional : al
rededor habitan los Célticos , con
sanguíneos de los que están junto al
Río Ana ó Guadiana. Cuentan , que
entre estos y los Túrdulos , habiendo
hecho aquí una expedicion, se susci
tó cierta discordia al pasar por el Li-
méa ( de que ya tratamos) , y que ha
biendo sucedido en este intermedio la
muerte del General, todos quedaron
dispersos y dieron nombre al Río del
Olvido. Tienen los Artabros muchas p'
Ciudades situadas en un seno , al qual x *V
na-
confunde el Promontorio Nerio con el Oli-
sipponense ; porque , ó yo me engaño , ó
estos dos fueron promontorios diversos en
el lado Occidental: primero el Olisipponen-
se , donde está la Ciudad Olisippo , y des
pués el Nerio , que Estraboñ y Prolemeo
dicen era habitado por los Artabros, y de
ahí le llamaron Artabro algunos antiguos,
á quienes reprehende Plinio sin entender
se. Promontorio Céltico sabemos ser lo mis
mo que Nerio , porque Estraboñ pone des-,
pues Kt\Tíx.ti¡e rfo *xf*i ■#¡p¡iix.uTÜiu.
j - m %
I 48 LIB. M. DE LA GEOGRAFIA
r\ navegan por tres pasages , y los 11a-
iA man Puertos de los Artabros : estos
v en nuestro tiempo mudaron el nom-
&J bre en Arotrebas. Serán como unas
treinta las Naciones que habitan en
tre el Tajo, y los Artabros. Aunque
solamente es feliz la que abunda de
frutos , ganado , oro , plata y varias
cosas : con todo eso , muchos bienes
de los Lusitanos , que iban á extraer
se fuera , volvieron á entrar en casa,
obligados del poco cuidado , latroci
nios y guerra , con la qual pasando
el Tajo infestaron á los vecinos , has
ta que los Romanos pusieron fina tan
tos males , represando , convirtiendo'
muchas Ciudades en Aldeas r64, y fun-
dan-
l64 Convirtiendo muchas Ciudades en
Aldeas ). Knjiixi en Griego son las que ca
recen de murallas , y -ko\m las que las tie
nen. Marco Porcio Caton inventó un con
sejo de que se valieron los Romanos para
apaciguar la España , y fué , segun Plinio,
que los muros de todas las Ciudades de la
parte adentro del Betis se derribasen en.
i. ■ ;. un
DE ESTRABON . I 49
dando con mejor disposicion algunas.
Hicieron estas injurias los de la mon
taña , quienes , como vivían en tierra
estéril y poseían poco , desearon lo
ageno ; otros por defender su honor,
se apartaron , olvidando enteramente
el gobierno de las necesidades domes-:
ticas, y aprendieron en lugar de la
agricultura la milicia : de lo que re
sultó , que abandonada la tierra dexó
de ser fértil , y se llenó de ladrones.
Cuentan que los Lusitanos eran peri
tos
un día. Véase Apiano y Plutarco. Frontino
strat. 1. c. 1 . M. Porcius Cato deviBas a se
Hispaniae civitates , existimabat in tem-
pore rebellaturas Jiducia murorum : scripsit
itaque singulis ut diruerent mwiimenta , mir
natus bellum. Aquello , pues, que hizo Ca
ton en la parte que sujetó de España, imi
taron después los Conquistadores de Lú-
sitania. Uno de ellos parece ser César ; es
á saber , el primero , que segun Plutarco,
puso baxo el yugo de los Romanos á los
Lusitanos y Calaicos. Estrabon atribuye di
cha empresa varias veces á Augusto,
• ¡ »»3
I gO LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
tos, ligeros , rápidos, y á propósito pa
ra poner asechanzas é indagar. Usan
de un pequeño escudo l6¿ , cuyo diá
metro es de dos pies , cóncavo por
afuera , y pendiente de correas porque
no tiene asas , ni anillos : además se
arman con espada y daga , casi todos
se valen de petos , ó corazas que cu
bren desde el cuello al pecho como
las cotas de malla , y tienen tres pe
nachos en el yelmo; otros toman mor
riones de nervios : los de infantería
se ponen freqüentemente botas l66, ca
da uno va con su lanza167, y algu-
• !
'' nos?
l6¿ Usan de un pequeño escudo*). Po"
lybio lib. III. afirma , que así fueron los
escudos de Franceses y Españoles. A los
primeros llama el mismo Polybio al libro
quarto ©npiMÍí , y tambien Diódoro lib. Vi
166 Los de infantería se ponen freqüen
temente botas). Diodoro escribe de los Cel
tíberos , x.a¡ Tfífi raí x.njua.í rpixints tlfoüiri

l6? Cada uno va con su lanza). Era


esto propio de los Españoles,. y ¡por tanto se
en
DE ESTRAB0N. Tgl
nos se sirven de picas con punta de
cobre. Muchos de los que habitaron
cerca del Río Duero , tomaron un mo
do de vivir Lacónico ^8 , usando de
ungüentos preciosos dos veces al día169,
calentándose con piedras hechas as-
qua, lavándose unas veces en baños
calientes I7° , otras con agua fria , y
to-
engañan los que quieren que sea invencion
Francesa: entre ellos Polux. Ateneo ( lib.
6. ) afirma que los Romanos aprendieron de
los Españoles el manejo de estas armas. Vir
gilio JEn.VIII.66i.
Duo quisque Alpina coruscant Gaesa manu.
I68 Tomaron un modo de vivir Lacó
nico ). Que los Lacones estuvieron antigua
mente en España consta mas abaxo por un
pasage de Estrabon , y se puede colegir de
algunos nombres de lugares , que citan Pli-
nio y Ptoleméo.
169 Usando de ungüentos preciosos dos
veces al día ). No eran ungüentos para he
ridas , sino unas confecciones de olores sua
ves con bálsamo y aceytes , delicias de la
luxuria.
170 Lavándose unas veces en baños ca-
m4 lien
I e|2 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
tomando sola una especie de alimen
to limpia y sobriamente 1?1. Los Lu
sitanos matan reses , y se aplican á
examinar sus entrañas sin cortar ; re-
gis-
lientes). De estos trata Vitrubio al libro
V. cap. lo. Ateneo (lib. XII. cap. 3. pag.
519.) cuenta, que los Sybaritas inventa
ron un género de bacía , y sobre ella se
sentaban para percibir calor. Es de advertir,
que bañarse no se usaba solo entre los La
cones ; pues Aristóteles, Plutarco y otros
Autores Griegos hacen mencion de la pro
pia costumbre.
1?1 Y tomando sola una especie de ali
mento limpia y sobriamente ) . Fylarco en
Ateneo II. c. 6. pag. 44. escribe : que los
Españoles , aunque fuesen los mas ricos de
todos , bebían agua sola , comían con tem
planza ; pero se adornaban con sumptuosos
vestidos. Ausonio , que era medio Español
dice de sí mismo , viSum , vestirum , sup-
pelleBilem , munda , non splendida. Ptole-
méo ( Tetrabili libro secundo ) enseña , que
las gentes de Italia , Francia y España eran
amantes de la limpieza , lo qual es muy
cierto al presente.
DE ESTRABON. I ¿3
gistran además las venas de los lados,
y adivinan tocándolas. Tambien con-
geturan por las entrañas de los cau
tivos muertos , y las ocultan con má
xima : después de ver herida en el ca
dáver, lo primero que hace el agore
ro es anunciar las cosas futuras. Cor
tan la mano derecha de los cautivos,
y la consagran á los Dioses. Todos
los que viven en los montes comen
poco , beben agua , duermen en el sue
lo , llevan tendido el cabello al mo
do de las mugeres , y pelean con to
cados y adornos en la frente. Su co- Pág.
mida regular , principalmente es de 155.
cabras, y sacrifican á Marte un «a-
bron , y además los cautivos y caba-
llos.Tambien instituyeron las centurias
de víctimas , llamadas hecatombas «r«
segun el rito Griego , donde como
dice Píndaro todo se sacrificaba á
cien-
• ". 1?» Hecatombas). Sacrificio muy solem
ne de cien reses , todas de una especie,
que se hacía á los Dioses en cien ala
res. .... . . .♦
1 54 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
cientos l™. Daban certámenes Gytñ-
nicos , armas , y quanto pertenece á
la caballería , tenían pele'as , correrías
y esgrimas , ordenando la gente de
batalla en cohortes. Los Montañeses en
dos Estaciones del año se alimenta^
ban con bellota de encina ; la mo
lían después de seca , y con la hari
na amasaban panes ; por eso á su
tiempo hacían el repuesto necesario.
Tambien gastan cerbeza : usan poco
vino , y quando lo hay , se consume
pronto en convites con los parientes.
La manteca de leche que llaman Bú-
.: tyro suplía las veces del aceyte I7«.
Ce-
*« Todo se sacrificaba á cientos"). Ate
neo lib.IV. cap. 10. pag. 144. escribe: Theo-
pompus libro trigésimo quinto historiarum
scribit , Thyn Paphlagoniae Regem in coma.
fercula omnia centum mensae apposuisse, d
bobus auspicantem.
x74 La manteca de leche que llamaban
Bútyro suplía las -veces del aceyte). Por
eso dice Plinio al libro XVIII. cap. 9. B
lacle Jit ér butyrum , barbararum gentium
lau
DE ESTR.ABON.. • ¿SS
Cenan sentados, y tienen , a este fin
asientos construidos junto la pared.
Los primeros lugares se ceden a
los mayores en edad y gobierno. La
cena se lleva al rededor de todos. En
medio de la bebida danzan al son de
la flauta , y guían el bayle con trom-
peta , saltando unas veces ; y otras se
hincan de rodillas baxando el cuer
po recto. Lo mismo hacen en Basteta-
nia las mugeres , teniéndose una á otra
de la mano. Usan todos de vestido ne
gro , se rebozan en capotes , y duermen
sobre camas de la misma hierba. Se sir
ven de vasos de ceta como los Cel
tas , y las mugeres tienen vestidos de
flores. En lugar de dinero pagan con
cambios , ó dan un pedazo de lámina
de plata. Precipitan á los condenados
á muerte desde unos peñascos , ape
drean
laudatissimus cibus , ir qui divites d pie-
be 4iscernat. Plurimum é bubtdo , et indff
nomen : pinguissimum ex ovibus. Véase tam-
bieta en Dioscórides el libro segundo , ca
pítulo 8 1.
I ¿6 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
dréan á los parricidas , sacándolos
junto á Ríos fuera de sus límites. Con
trallen matrimonios al modo de los
Griegos. Exponen los enfermos en los
caminos1^, segun costumbre antigua
de los Egypcios , para que den reme
dio los que experimentaron la misma
enfermedad. Se valieron de embarca
ciones de cuero x76 por las inundación
nes,
*W Exponen los enfermos en los cami'
nos ). Herodoto , y el mismo Estrabon al
libro XVI. cuenta que tambien hacían es
to los Asyrios.
I76 Se valieron de embarcaciones de cue
ro"). En la Historia antigua se hace men
cion bastante freqiiente de esto por Plinio,
Solino , Dion y otros, Antífilo en sus Epi
gramas 1. 1. c. 57. Ep. 14.

TAíto/íoi it'xíiritirlít >\óir J^ápii «u» ttt rtílic*


:
Kil/itaToí aAA.' i$> pires i*íTpo^*««.

AAAÍ AÍ>i? roldar ae/Mtít S'tJ'íTtu.

Quiere decir, segun lo interpretó en La


tín Lubino:
DE ESTRABON. I 57
íies , pantanos y lagunas , hasta el
tiempo de Bruto : ahora se sirven de
algunas canóas , ó troncos de árboles
excavados. Tienen sal purpurea ; pe
ro se vuelve blanca al machacarla I77.
Esta es la vida de los Montañeses,
que terminan el lado Septentrional de
España , y la de los Gallegos , Astu-
ros y Cántabros , hasta los Vasco-
nes I?8* y el Pyrenéo , pues todos vi-.
ven
XÁgnatores quiescite. navium gratia: non amplias pinta
In mari , sed jam corium currit.
Clavas autem non amplias oes in navibus, aut ferrum,
Sed lino laterum harmonio alligatur.

'- *77 Tienen sal purpúrea , hrc. ) Plinio


lib. 3 1. c. 7. afirma , que en Menfis se halló
sal roja.
■ w8* Vascones , Pueblos de la España
Tarraconense. Segun los límites de Ptole-
méo se extendían entre parte del Océano
Cantábrico , y parte de los Pyrenéos : con
finaban al Oriente con el pais de los Sue-
sitanos ; al Mediodía con el Río Ibero , y
al Occidente con el pais de los Várdulos.
Plinio los pone junto á los Cer retanos. Ha
bitaron la Navarra , y guando pasaron á la
Ga
Ig8 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
ven de la misma manera. Me pesa
poner otros muchos nombres , quan-
do quisiera evitar el tedio de su des
agradable escritura , á menos que al
guno no guste de oir Pletauros,Bar-
dyetas 179* Alotrigas lSo*, y otros peo
res , ó mas obscuros. Es propia en
ellos la inhumanidad y fiereza de cos
tumbres, no solo en la guerra, sino
tambien en paz,; porque habitan apar-,
•- ta-

Galia para establecerse , recibieron el nom


bre de Gascones.
179 * Bard yetas , ó Barduitas , que tam
bien los llama Estrabon Bardyalos , son una
antigua Provincia de España sobre el Ebroj
junto á los Berones. Habitaban toda la par
te Septentrional de las montañas , no lejos
del parage donde se halla al presente Ca
lahorra.
180 * Los Alotrigas , como supone Ca-
saubon , son lo mismo que los Autrigones:
estos habitaban parte de la España farra.:
conense , y segun el Padre Briet era hacia
la Provincia de Alaba y Señorío de Viz
caya. _ <... ' . J ._ ( :.. .;. .... '....•j
DE ESTRABON. I «J9
tados entre sí ; por mar y tierra son
largos los caminos para llegar adon
de están , y de aquí resultó, que ca
reciendo de comercio r perdieron la,
sociedad y trato. Hoy día son me- Pag.
nos defectuosos por la paz y venida de 156.
los Romanos ; adonde estos no fue
ron , quedó la gente mas importuna
y bárbara , cuyo vicio no es extraño
crezca con velocidad , quando á mu
chos se les junta la incomodidad de
los lugares , y montes que poseen. Pe
ro como ya he dicho , todas las guer
ras se extinguieron. César Augusto m
Su-
181 César Augusto sujetó á los Canta'
bros}. Véase el Epítome de Livio lib. 145,
y Floro al lib. 4. cap. último. Suetonio de
Augusto c. 20. Externa bella duo omnino
per se gessit : Dalmaticum adolescens adr
huc : et Antonio devitlo Cantabricum. Ve-
leyó II. cap. 90. escribe de las Españas:
Has igitur provincias tam difusas , tam
frequentes , tam feras , ad eam pacem ab-
hinc annos ferme L. perduxit Caesar Au
gustos ; ut quae máximas bellis nunqtiam
1 60 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
sujetó á los Cántabros l82 * , y sus Pue
blos vecinos que principalmente exer-
cían
•vacaverant , ea sub C. Antistio , ac dein-
de P. Silio legato , caeterisque postea etiam
latrociniis vacarent.
182 * Sobre el sitio y extension de la
Cantabria hay controversias entre los Es
critores. Nacen estas de no considerar la
materia geográficamente , ó en quanto á lí
mites de Region. Para informar bien sobre
dicho asunto , véase el parecer de varios
Escritores , y lo que resulte dará á cono
cer si la Cantabria propia llegaba , ó no
á Vizcaya , como algunos pretenden. Yo
( pareciéndome mas verosímil , por no ha
ber testimonio auténtico de los Geógrafos
antiguos en contrario ) sigo la opinion del
Padre Maestro Florez , quien dice, que el
país de los Cántabros empezaba de Occi
dente á Oriente corriendo por S. Vicente
de la Barquera hasta cerca de Somorrostro,
Muzquiz y Pobeña. Desde aquí se seguían
hacia el Oriente los Autrigones y Caristos
con poca costa , luego los Várdulas , y fi
nalmente los Vascoius. El territorio medi
terráneo ó de tierra adentro , esto es , la
par-
DE ESTRABON. l6l
cían latrocinios y maldades ; y aque
llos que antes destruyeron á los Ro
manos , toman ahora las armas en su
defensa, como los Coniacos l8s #, y ios
que
parte que ocupaban desde Septentrion á
Mediodía , consta por Plinio lib. 3. cap. 3.
donde expresa , que el Río Ebro nace en
los Cántabros. Ptoleméo pone tambien aquí
su nacimiento , y teniéndole ahora como
una legua al Norte de Aguilar de Campó
y Poniente de Reynosa , se infiere , qu^,
llegó hasta allí , ó poco mas abaxo la Can
tabria , incluyendo el Valle de Sedaño,
Frias , Carrion , Pisuerga , &c. Pruebase que
los Autrigones , Caristos , Várdulos y Vas-
cones no son Cántabros , porque si la Can
tabria llegara hasta los Pyrenéos no queda
ba costa para los demás. Ptoleméo expresa
que los Autrigones caían al Oriente de los
Cántabros , y así no lo eran , pues nadie
cae al Oriente de sí mismo. En lo mismo
conviene Plinio y Pomponio Mela.
l8* * Los Coniacos de Estrabon corres
ponden á los Concanos que cita Ptole
méo , de quienes dixo Virgilio III.
Georg. 461.
» . Et
IÓ2 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
que moran junto al origen del Ría
Ibero , exceptuando los habitantes de
la Ciudad de Tuisi. El succesor Ti-*
berio poniendo en estos lugares tres
co-
Et lac concretum cum sanguine potat equino,,
Horac. lib. 3. Od. XV.
Visam Britannoi' hospitibus ferof,
Et Utum equino, sanguine Concanum,
Visam pharetratos Gelonos, be.
Silio Itálico los atribuyó la misma fiereza
de los Masagetas en el lib. 3. v. 360 y 361.
Nec qui Masagetem monstrans feritate parentemt
Cornipedis fusa satiaris ¡Voncane , vena.

Aunque Casaubon previene , que aca


so son estos los que mas abaxo se nombran
Coniscos , no debe hacerse esta correccion,
sino la prevenida de Concanos en lugar de
Coniacos. La razon es , porque Ptoleméo
expresa en los Cántabros , hácia el territorio
mas alto de las mediterraneas , una Ciudad
llamada Cóncana , la qual viene á estar en
este parage , y de ella tomaron nombre sus
habitantes y vecinos. Ademas de esto los
Coniscos , que hallaremos mas adelante es
tán cercanos á los Berones de la Rioja.
DE ESTRABON. j fa
cohortes , que Augusto había destina
do , no solo los apaciguó , sino que los
civilizó á muchos de ellos. Resta expli-
car aquella costa marítima de España
que hay desde las Columnas hasta eí
Pyrenco , y todo lo mediterraneo que
hay situado en aquella parte , donde
no es siempre igual la latitud : la lon
gitud es poco mayor de quatro mil
estadios. De la costa se cuenta la ma
yor longitud dos mil. Desde Calpe
que es el monte junto á las columnas*
hasta la nueva Cartago hay dos mil
doscientos estadios. Esta costa la ha
bitan parte los Bastetanos ( que tam
bien se llaman Bástulos), y parte los
Oretanos. De aquí al Río Ibero habrá
casi otra tanta distancia l8* y en ejja
viven los Eletones. Desde el Ibero
hasta el Pyrenéo , y los Trofeos de
Fompeyo l8* cuentan 1600 estadios,
sien-
18* Habrá casi otra tanta distancia).
rolybio pone 2600. estadios.
185 Y los Trofeos de Pompep ) . Plinio:
Fotnpejus Magnus Troceis suis,quac sta-
«* tuc-
I 64 LIB. III. DE LA GEOGRAFTA
siendo una tierra habitada por al
gunos pocos Eletanos I86 * , y des
pues por los Indigetes r87, distribui
dos en quatro partes. Comenzando por
el Calpe para seguir cada cosa de por
sí,
tuebat in Pyrenaeo DCCCXLVI. oppida
ab Alpibus adjines Hispaniae ulterioris in
ditionem as* redacta testatus est. En esta
obra se hace mencion de ellos no una vez sola.
186 * Los Eletanos , Leetanos ó Lale-
tanos habitaban parte de la Cataluña , in
cluyendo desde Barcelona hasta Blanda , que
hoy se llama Blanes , sobre el Río Tordera.
Era su término , viniendo de Oriente á Me
diodía todo el Río Llobregat , Flumen Ru-,
bricatttm , como expresa Plinio , ú parte de
él , como pretenden otros. De qualquier ma
nera , resulta que la celebrada Malvasía de
Sitges pertenecía 3 los vinos Tarraconenses y,
no á los Laletanos ; porque Sitges cae cinco
leguas mas abaxo del Llobregat á la parte
de Tarragona.
lS7 Indigetes ). Ptoleméo los llama En-
digetas , y Estéfano dice , que tomaron su
nombre de la Ciudad Indica existente hácia
esta parte de España.
DEESTRABOK. l6g
sí , hay un promontorio montuoso en
Bastetania y Oretania ; una selva es
pesa y guarnecida de árboles , que di
vide la costa del Mediterraneo ; y mu
chos sitios donde se hallan oro , y
otros metales. En esta costa la pri
mer Ciudad es Malaca l88*
tan
188 # Malaca ilustre y antiquísima
Ciudad de España opuesta á Siga , que fué
Corte del Rey Syphaz en la Mauritania , co
mo escribe Plinio. Del mismo Estrabon inferi
mos, no solo que su situacion existe en el
mismo lugar donde hoy Málaga , sino que
combinando los dos textos de Plinio y Es
trabon , puede aclararse el texto Griego de
este , que ha molestado á los que le han
querido declarar. E>*«g«(i» fr« i<;¡, b riTí u
tS taga.[a. <rA!ftx<ri. Casaubon estuvo inclinado
á mudar la cláusula. Xylandro dudó si los
que habitaban en la costa contraria se lla
marían Saemades ; pero siendo desconocida
tal gente , no pudo sostener su pensamien
to. El P. Florez , advirtiendo la cercanía de
Saemasi con los Sigeos , traduce á nuestro
Geografo dándole mejor sentido y diciendo:
Tiene Málaga un gran Mercado , de que
n3 usan
'■
1 66 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA

tan distante de Calpe como Gades ,8'.


Tie-
itsan los de Siga , que viven enfrente. Isaac
Vosio en las Notas sobre Mela lib. 2. cap.
6. no quiere reconocer el Emporio en Má
laga , sino en cierta Isla próxima , alegan
do en su favor estos versos de Avieno:
Tartesiorum juris illic insula
Antistat urbem , Noctiluca ab incolis
Sacrata pridem. In Insula stagnum quoque,
Tutusque portus , oppidum Minace super.
Yo creo que no hubo tal Isla enfrente
de Málaca , porque siendo tan considerable
no la omitirían Estrabon , Mela , Plinio y
Ptoleméo. De qualquiera suerte consta , que
Málaga fué aliada de los Romanos. El Río
que la baña por el Occidente tuvo el mis
mo nombre de la Ciudad : ahora se inti
tula Guadalmedina , y no Guadalquivirejo.
Festo Avieno hace mencion de dicho Río,
poniendo que la Ciudad se llamó Ménaca.
Malacteque flumen , urbe cum cognomine,
JUenacue priore qua vocataest stfculo.v.426.
Nuestro Geógrafo tiene yá impugnados los
que confunden á Ménaca con Málaga , y por
eso no me queda que añadir sobre el asunto.
l8? Tan distante de Calpe como Gades).
Es-
- DE ESTRABONV : 1 67
Tiene un Emporio^ del' que usan los
que yiven ea la ratera opuesta , y
se componen allí muchas carnes sala
das. Hay algunos que piensan es esta
la misma Ménaca que sabemos ser la
ultima Ciudad de los Foceos hacia el
Ocaso I9° * ; pero yerran : porque los
peñascos de la destruida Ménaca, bas
tante distante del Calpe , conservan
vestigios de la Ciudad Griega , y Ma
laca se acerca mas á forma Púnica.
Siguese la Ciudad de los Exíta-
■' ■■-■■ . nos
Esto es , 500. estadios segun algunos , segun
otros 700 , y hay quien escribe 800.
190 # De Ménaca no tenemos otra no
ticia , sino ser lo mismo que Menoba , hoy
Velez Málaga , como se dixo en la nota
84 *. Palmerio quiso reducir esta Ciudad
al sitio llamado Almuñecar ; pero compa
radas ambas distancias , y el orden con que
nombra Ptoleméo primero á Málaca .luego
á Manoba , confirma casi del todo nuestra
opinion. Que fuese Ciudad de■ los Focéos
ó Focenses no tengo duda, pues consta por
Herodotolib. i.c. 163 , que vinieron á Es
paña dichos pobladores.
«4
I 68 Lia. III. DE I- A GEOGRAFIA
nos X9Z * , célebre por sus adobos. Des
pues Abdera l92 * , obra tambien de
los
w * La Ciudad de los Exítanos , Ex,
Hexi , Sex , Sexi , ú Sexti , fué llamada por
Plinio con el sobrenombre Firmum Julium,
y eran muy célebres sus salsamentos. Ate
neo hace mencion de ellos en el lib. 3. c.
20. y 34. Marcial lib.7. Epígr.77. Cum Sex*~
tanifertur tibí cauda lacerti. Mela y Pto-
leméo colocan dicha Ciudad al Occidente
de Salambina , hoy Salobreña : Motril cae
al Oriente ; luego no pudo estar allí Sexi, co
mo quieren algunos , y por tanto le dexa-
remos reducido áAlmuñecar, que está 1.3
leguas distante de Málaga , cuya situacion
corresponde al Itinerario de Antonino.
*J>a * La Ciudad de Abdera se halla es
crita en Ptoleméo Abdara , en Estrabon
Aydera , y Artemidoro , Estéfano , Mela y
Plinio la nombran. Estuvo en la costa del
Reyno y Arzobispado de Granada , diez
leguas al Occidente de Almería. Llámase
hoy Adra , y tiene hacia el Oriente un
Río del iriismo nombre , que baxa por Sier
ra Nevada y las Alpuxarras corriendo de
Norte á Sur.
/ DEESTRABON. 1 69
los Fenicios. Sobre estos lugares se Pág.
presenta la montaña Ulyséa 19** , y 157.
en ella el Templo de Minerva , como
traen Posidonio , Artemidoro ,, y As-
clepiades Myrleano , quien enseñó gra
mática en Turdetania , y sacó una des
cripcion de la gente , que habitaba en
estas regiones. Cuenta que en aquel
Templo de Minerva había fixadas mu
chas reliquias de la peregrinacion de
Ulyses , como son escudos é infinitas
proas de Navios ; mas que cerca de los
Caláicos quedaron algunos hombres de
los que siguieron la guerra deTeucro,y
que había una Ciudad llamada Helenes
y
193 # La fundacion y origen de Oli-
sipo , hoy Lisboa , la atribuyen varios Auto
res á Ulyses , dando el nombre de Ulyséa
á dicha Ciudad. Estrabon coloca , como se
advierte , una Ulyséa en la Bética sobre
Abdera , hacia lo mas montuoso de las Al-
puxarras. Luego esta no puede de nin
gun modo acomodarse á Lisboa ; y por
tanto ignoramos su correspondiente mo
derna.
I 70 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
y otra dé Anfíloco *94 * ; porque allí
mu-
194 # La Ciudad Helenes y la de An
fíloco , Anfílochis ú Anfilochia consta exis
tieron en la España Tarraconense hacia
Galicia y recibieron su nombre por los
Griegos que llegaron hasta allí , después
de haber estado en Cartagena y en dife
rentes partes de España. Justino lib. últi
mo , cap. 3 : Gallaeci autem Graecam si'
bi originan asserunt : siquidem post Jinem
Trojani belli Teucrum morte Ajacis fra-
tris invisum patri Telemoni , quum non re-
ciperetur in regnunt Cyprum concessisse , at-
que ibi urbem nomine antiquae patriae Sa-
laminam condidisse. Inde accepta opinione
paternae mortis , patriam repetisse. Sed
quum ab Eurysace Ajacis Jilio accessu
prohiberetur , Hispaniae littoribus appul-
sum loca ubi nunc est Carthago nova oc-
cupasse : Inde Galleciam transísse , et po-
sitis sedibus genti nomen dedisse.... Galle-,
ciae autem portio Amphilochi dicuntur. Si-
lio Itálico al lib. III. vers. 378. escribe:

Dat Carthago viros Teucrofundata vetusto.

Pli-
DE ESTRABON. t 1 >[ J¡

murió un General de este nombre , y


sus aliados corrieron todo el Medi
terraneo : afirma tambien dicho Es
critor que algunos aliados de Hércu
les , venidos desde Mesina , habita
ron la España : este y otros asegu
ran que parte de Cantabria fué ocu
pada de Lacones ; que fué fundada
allí la Ciudad Opsicela por uno de
este nombre que pasó á Italia con
Antenor y sus hijos. Algunos creen
á los mercaderes Gaditanos , pues co
mo pone Artemidoro , los Etíopes,
que habitan sobre los Mauritanos há
cia el Ocaso , se llaman Lotófagos,
porque comen la hierba y raiz. Loto:
no necesitan de bebida , ni padece
rán trabajos por la escasez de agua:
llegan hasta los lugares cercanos á
Cyrene. Tambien se nombran Lotó-
fa-
Plinio refiere á los Helenos, Grovios y á;
Tuy lib. 4. cap. 20 , llamándolos Graeco-
rum sobolis omnia. El P. Mariana cree que
Helenes corresponde hoy día á Ponteve
dra.
172 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
fagos los que viven en Meninges , una
de las Islas situadas delante de la pe
queña Syrte. No es maravilla t9¡ que
Homero describiese la peregrinacion
de Ulyses al modo de fábula , fin
giendo que hizo varias hazañas fuera
de las Columnas en el Atlántico;
porque las historias que hay se dife
rencian poco en los lugares y cir
cunstancias que pone dicho Escritor.
Y así ni Homero propuso un fingi
miento absurdo é increible , ni fueron
ineptos los que dando crédito á la
pericia de la historia acomodaron su
poesía á qüestiones de ciencia , como
hizo Crates Malotes ; ni interpreta
ron rústicamente el instituto de poe
ta , tanto que le tuviesen por un ca
vador ó segador : antes bien eran te
nidos por locos los que intentaban
tratar de ese modo su sabiduría; no
atreviéndose ningun Gramático ó Ma
te

os No es maravilla}. Vuelve á ha
cer otra digresion en defensa de Homero.
DE ESTRABON. •» 1 73

temático á defender el poeta , ni á


emendar á aquellos que así se llaman: Pág*
aunque, segun creo , muchas cosas se 158.
pueden vindicar y otras corregir, prin
cipalmente aquellas con que Pyteas
engañó á los crédulos , ignorando
cerca del Océano quales eran los lu
gares hacia el Ocaso , y quales al Bo
reas. Pero dexemos esto , porque re
quiere plática mas larga y particu
lar. La causa de que los Griegos se
dispersasen entre naciones bárbaras^
parece ser la division que hicieron
muchos en pequeñas porciones , y el
poder de aquellos que por su fausto
ú vanidad no podian medrar unos
con otros , ni cuidar á sus parientes
y mugeres : de donde resultó , que
acometiendo los de afuera , quedaban
desiguales en fuerzas para resistirse.
Esta pertinacia se aumentó especial
mente entre los Españoles , juntán
dose además la cautela de ánimo y
astucia engañosa ; pues dichos hom
bres siguiendo un género de vida
sospechosa y salteadora , atreviéndo
se
1 74 LIBRO III. DE LA GEOGR AFIA
se á cosas pequeñas , y no empren
diendo nada grande , olvidaron su
sociedad y señorío. Aunque quisieran
defenderse unidos no podrían ; ni los
Cartaginenses , siendo mas veloces en
la carrera , hubieran podido sujetar
la mayor parte de España ; ni antes
de ellos los Tyrios y Celtas , que
ahora se llaman Celtíberos y Vetones;
ni después del tiempo del vandolero
Viriato y Sertorio, si es que hubo otros
pntre los Españoles que mas anima*
sen al imperio. Los Romanos dividi
dos en partes, oprimiendo yá este¿
yá aquel Reyno con guerra, doma
ron algunas veces á muchos pop
bastante tiempo , hasta que al fin to
dos vinieron baxo su poder , gastan
do para ello casi doscientos ó mas
años ig6 . Pero vuelvo al intento.
Des-
19ff Gastando para ello casi doscien
tos ó mas años ) . Bien colige Estrabon;
porque si se tiene cuenta con los tiem
pos , se hallará desde el principio de la
segunda guerra Púnica, que fué quando
los
DE ESTRABON. íyg
Después de Abdera se sigue la nue
va Cartago '97 * , fundada por As-
drubal , aquel que succedió á Barcas
padre de Aníbal I98 : es la Ciudad mas
ex

los Romanos pensaron sujetar las Espafias


hasta que lo hizo César Augusto , poco
menos de doscientos años. Floro libro se
gundo , cap. 17 : Hispaniae nunquam ani-
mus fuit adversus nos universae consurge~
re , nunquam conferre 'vires suas libuit , ne-
qiie aut imperare , aut libertatem suam
tueri publicé. Después : In hac prope au
mentos per annos dimicatum est d primis
Scipionibus in primum Caesarem Avgus-
tum , non continuo , nee cohaerenter , sed
frout lacessierant. Veleyo Patérculo ha
blando de España : Per annos CC. in his
multo mutuoque ita certatum est sanguine,
ut amissis P. R. Imperatoribus , exerciti-
busque , saepe contumelias nonnunquam etiam
periculum Romano inferretur Imperio.
197 * Véase la nota 123 *.
198 Apiano contra el testimonio de to
dos cuenta , que destruidos los Saguntinos
volvió Aníbal á edificar á Sagunto y po
blar
1^6 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
excelente de todas quantas hay en
aquella region ; pues el clima del si
tio es saludable , tiene un muro per
fectamente construido , hay Puertos^
un Lago , y como he dicho , meta
les de plata. Tanto allí como en los
lugares vecinos se componen carne*
saladas : es un grande Emporio, don
de los del Mediterraneo reciben las.
cosas marítimas , y comercian otros
navegantes. La costa desde aquí al
Río Ibero á mitad de distancia tie
ne el Sucron , y la boca y Ciudad
de su nombre 19* * : el Río se preci-
pi-r
■ *
blarle de ciudadanos , afirmando que des
pués se Hamó Cdrthago Spartaria.
199 * Del Río y Ciudad de Sucron que
dieron tambien nombre al Promontorio y
Golfo Sucronense , he aquí en breves pa
labras lo que traen nuestros Geógrafos an
tiguos , y el P. M. Florez tom. 5. pág. 35..
Ptoleméo omite la Ciudad , y Plinio lib. 3.
cap. 3. manifiesta el motivo en estos tér
minos : Suero flwvius et quondam oppidum.
Después de Plinio hallamos en el Itinera
rio
f>~: " DE ESTRABONí "' ' i**
pita desde un monte, que está con
tiguo á un promontorio sobre Mala
ca y Cartago : se pucjde pasar á pie
y es casi paralelo. 4I Ibero , del quaí Pás?
dista algo mas que.de, Cartago. En- i*q
tre esta y Sucron , nQ. lejos de dicho
Río, hay tres lugares, de los Masi-
lienses; el mas célebre es aquel que
tiene atalaya diurna ,.(y. en el pro
montorio un Templo de mucho cul->
to dedicado á Diaqa Efesina , donde
se refugió Sertorio , /exécutando ha
cia el mar sus debidas■ maniobras co
mo en un Alcázar. Sirve de defensa
la naturaleza del sitio, apta parala-
trocinips , y desde allí hasta muy le'-
jos se ven los navegantes. Su nom
bre es Dianium 200 * : tiene cerca co-
. -...., pio-
rio de Antonino puesta una mansion en
Suero, y esto prueba que aun no se ha
llaba destruida. Sabemos que fué límite de
la Contestania , y atendiendo á su situa
cion existió donde hoy Cullera ó Sueca,
Pueblos de la embocadura del Jucar.
200 * . Dianium , nombre latino de la
o Ciu-
I 7# LIBRQIII; DE LA GEOGRAFIA
piosas venas deshierro , tambien dos
- ,;. ,i ?• « u U)i .".... "A". „ : ... . pe:-
Ciudad de Denia:''I,lamose así por el fa-
moso Templo due; tenia consagrado á D\a-
: na , y como «sta. misma Diosa es Artemis
en Griego y diéhá poblacion recibió el tí
tulo de Artemisiwm. También solía nom«
brarse Hemeroscapium , segun leíen Artemi-
doro y Estéfano. c Festo Avieno vers. 476,
escribe : ¡;\ ob or . ::., ■.: .
. Hemeroscoptum quoque
Habita pridetn béic civitas , nunc jam sohim
Vacuum incoiarum lánguido sfagno madet.

El Promontorio , junto al qual la colocan,


fué célebre por sus minas cercanas, y de
ellas tomó el nombre Ferrarium , hoy Ca
bo Martin. Plinio dice que piaruo. "dista-'
ba de la nueva Ca'rtago por 'el 'Confínen
te setecientos estadios. Tambien pone , co
mo Estrabon , que Sertorio se había valí-/
do de sus fuerzas para la guerra. Aun
que Tito Livio y Plutarco no hacen men
cion de este asunto , sabemos por algunos
pasages de Ciceron , que Dianium estuvo
ciertamente ocupada por las tropas.de aquel.
General. Véase el libro primera, oracion
• . ' sex-
DE ESÍRAB0N. i<*n
pequeñas Islas Planesia y Plumba-
ria 2M, y un Lago marino encima,
cuyo circuito es de 400 estadios. Sigue
detrás de Cartago la Isla de Hércu
les,

sexta contra Cayo Verres , cap. 34; y el


libro quinto , oracion séptima, cap. $6 y
59-
201 Dos pequeñas Islas Planesia y
Plumbada). Ninguno de los antiguos que
yo sepa hace mencion de la primera j di
go en este sitio , porque Ptoleméo pone
Planasia , pero en otro mar. Estrabon cuen
ta tres Planasias en diversos lugares. La
primera es esta , que , como tengo dicho^
no se halla citada anteriormente. La otra>
está cerca de Leron y Stoechadas delante
de la ribera de los de Marsella , tambien
desconocida ; y la tercera cerca de Aetha-
lia ó Ilua , la misma de Ptoleméo , Plinio
y otros Geógrafos. Por lo que toca á es
ta de que hablamos , pudo ser una de las
veinte pequeñas Islas, que Plinio refiere
haber en este mar. La Plumbaria se en
cuentra tambien en Ptoleméo j pero en el
mar Sardo.
o i
1 8o LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
les , que llaman Escombraría 2M*
por los peces y arenques, en, Latín
Scombri , cuyo género es allí copio
so , y de él hacen una salsa muy bue
na y estimada: dista de Cartago 24
estadios. Saliendo segunda vez desde
Sucron á otra parte , hácia las bocas
del Ibero se halla Sagunto a°s * ,
fun-
404 * I¿as Islas de los Contestanos que
hay entre Cartagena y Denia , son , co
mo advierte nuestro Geógrafo : 1 .■ la de
Hércules ó Escombraría , y segun su orden
corresponde al Islote situado frente de Car
tagena : 2.a un Lago marino ó Limnotha-
lasa ; nombrante al presente la Isla Gra
sa , que está junto al Cabo de Palos:
3.a Plumbaria , hoy es la de Santa Po
la : 4.a y última Planesia , que ahora lla
man de Benidorme.
, '.st>3 # Sagunto , antigua Ciudad de los
Edetanos , y ahora en la Diócesi de Va
lencia. Llámanla los Latinos Saguntus ó
Saguntum. De este modo la nombran Li-
vio , Plinio , Ptoleméo , &c. , y de aquél
Mela , Floro y una antigua inscripcion que
trae Grutero pág. 499. n. 2. .¿AGUN-
k o . TUS
/ DE ESTRABON. l8l

fundada por los. -- .


Za-
TUS PATRONIS VI. Silio Itálico lib. i.
vers. <o2 escribe:
Conclamant utrimque ocies , ceu tota Saguntos
Jgne micet.

Fué tanta su antigüedad que se creyó fun


dacion de Hércules , como refiere Silio
vers. 505. donde en boca de Murro Sa-
guntino dice así :
Conditor Alcide , cujus vestigia sacra
Incolimus , terrae minitantem avene procellam.

Nuestro Geógrafo y S. Isidoro 15. Etym.


c. 1. reducen su origen á los Griegos de
la Isla Zacynto (llamada hoy Zante , al
Ocaso del Peloponeso ó la Moréa). Tam
bien hace mencion de ello el mismo Silio
vers. 274:
Prima Saguntinas turbarunt cJassica portas,
Beíiaque sumpta viro belli ntajoris amore.
Haud procul Herculei tollunt se litore muri,
Clementer crescente jugo , auis nobile nomen
Conditus excelso sacravit colle Zacyntbos.

Enviaron aquí los Rútulos una colonia de


Ardeates , se.gun el dicho Silio Itálico li-
. '..t ° 3 Dro
1 82 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
,...*..... Zacyn-
tios:
bro segundo vers. 603:
¿írmaque Dulicbia proavis portata Zacyntbo,
Et prisca advectos Rutulorum ex urbe Penates,

Sagunto producía un género de tierra, con


la qual formaban vasos. Marcial en el li
bro octavo, JEpigr. 6. pone:

Ficta Saguntino cymbia malo luto. .

Y después en el libro 14. Epigr. 108;


t

Sume Saguntino flocula ficta luto.

Sitió Aníbal á los Saguntinos por espacía


de ocho ó nueve meses , al fin de cuyo
tiempo , después de un hambre funesta , se
quemaron á sí mismos todos los principa*
les , no queriendo admitir condicion algu
na de paz. Desde entonces quedó en fé
de los Romanos Sagunto ; pues escogió su
destruccion , antes que confederarse con
los enemigos. Por esa razon escribió Li-
vio : Fidem sociakm usque ad perniciem
suam coluerunt : Mela : Fide et aerumnis
in
/....-. »E ESTRABON. •: I 83
tíos *°f : á la qual Ciudad ha-*
biendo destruido Aníbal, contra los
pactos convenidos con los Roma
nos , se encendió guerra entre es
tos y los Cartaginenses. Cerca es
tán
inclytam; y Plinio : Fide nobile. Los Es-
cipiones reedificaron las casas y muros des
truidos , como refiere Silio Italico lib. 1 j,
v. 675.

Jsíos miserae muros et tecta renata Sagunto,


JSlos dedimus Baetin nullo potare sub hoste.

El sitio legítimo de dicha Ciudad es don


de al presente se halla Murviedro.
ao4 Sagunto , fundada por los Zacyn*
tíos). Polybio la llama Zacanta : dice
que está situada en un alto .rt^olt T,s ¿gmiís,
en el confín de la Iberia y Celtiberia, dis
tante del mar solo siete estadios. Livio lib.
2i. c. 7. de Sagunto: Civitas ea longg:
opulentissima , ultra Iberum sita passusí
tnille ferme d mari , oriundi d Zacyntho
Ínsula dicuntur , mistique etiam ab Árdea.
Rutulorwn quídam generis. Véase la his
toria en Polybio , Apiano y los Epítomes.
o4
1 84 LIBRO. m. DE LA GEOGRAFIA
tan las Ciudades Chérroneso, Olea-
tro , Cartalias 2°s * , y en el mismo
parage del Ibero la Colonia Derto-
sa 2°6 *. El Ibero , que nace junto á
los Cántabros a°7 , corre por larga
11a-
*°s # Ignoramos las verdaderas y res
pectivas situaciones de Chérroneso , Olea-
tro y Cartalias. Zurita cree que la segun
da Ciudad es la misma que nombra Anto-
nino Oleastrum en la ruta de Tarragona á
Tortosa á XXI. M. P. de la primera.
306 # Dertosa fué Capital de los Iler-
caones , y la Ciudad mas considerable de
todas las quarenta y tres , que , segun Pu
nio , están sujetas al Convento de Tárra-
con. Estuvo baxo la proteccion del Dios
Pan , como vemos todavía por algunas re
liquias de antigüedad. Tambien hay me
dallas que representan á Tiberio y otras
á Augusto. Escipion hizo á Dertosa Mu
nicipio. Corresponde hoy á Tortosa , Ciu
dad de la Cataluña , sobre el Ebro.
- 2°7 El Ibero , que nace junto á los
Cántabros}. Plinio III. cap. 3. Iberus am-
nis navigabili commercio dives , orttts in
Cdntabris.
DE ESTRABON. 1 l8g
llanura hacia el Mediodía, paralelo
á los montes Pyrenéos. Entre lo di-*
timo de estos y las bocas del Ibero;
donde están los Trofeos de Pompe-*
yo , es la primer Ciudad Tarra-
con ao8 * , sin puerto , pero fundada
en

»o8 # Tárraco , Ciudad muy antigua,
que en tiempo de los Romanos dio nom
bre de Provincia Tarraconense á toda la
España citerior , siendo su Capital Civil
y Eclesiástica : fué llamada por Mela opu
lentísima. Algunos Autores atribuyen la
fundacion de Tárraco á Tubal , otros re
curren á los Mgypcios ; pero el origen mas
verosímil es Siro , segun Bochart , col. 623.
donde dice que en aquella lengua Tarcon
significa Palacio ú Alcázar. Marcial , lib. 1 o.
Ep. 104:

Hispanae pete Tarraconis Arces.

Tuvo los honrosos epitetos de Colonia , Ju


lia , Augusta , Togata y Victrix. Al pre
sente se llama Tarragona , Ciudad céle
bre de Cataluña sobre la costa, cinco mi
llas
1 86 1TBR0 III. DE LA GEOGRAFIA
en un seno y abundante de otras va
rias cosas ; freqüentada ahora no de
menos gente que Cartago. Está si
tuada comodamente para las peregri
naciones ó vi ages de los Prefectos en
España: es Metrópoli no solo de la
España interior al Ibero , sino de mu
cha parte exterior. Las Gymnesias y
Ebuso , Islas memorables , manifies
tan tambien que el sitio de la Ciu
dad es oportuno. Eratóstenes la atri
buye un muelle seguro para naves,
quando Artemidoro refutándole dice,
que aun no es bastante oportuna pa
ra anclar. Así , toda la costa desde
las Columnas hasta este parage tiene
pocos puertos , los que regularmente
son buenos , y es fértil el suelo de
los Leetanos *°9 , Lartoleetas y otros
has-"

lias y media al Ñor. Este del Cap de Sa


lon , y entre los Ríos Gaya y Francoli.
20¡> Leetanos*). Aquí los coloca tam
bien Ptoleméo ; pero los Lartoleetas me
son desconocidos. Véase la nota 186 *.


DE ESTRAB0N. 187
hasta el 2I0 Emporio 2I1 * Esta Ciu
dad , fundada por los de Marsella,
dista del Pyrenéo y del confín de
España con Galia como unos 400
estadios : toda la Region es buena,
con bellos puertos. Allí está tam
bien
• aOX Hasta el Emporio ). Plinio y Pto-
leméo le llaman Emporias , y Livio lib. 34.
c¿ 8. Rhoda secundo vento Emporias ven-
tum. El mismo varía lib. 29. cap. 2$. po
niendo : Emporia ut peterent gubernatori-
ius edixit ; á ménos que aquí tambien no
se deba leer Emporias. Estéfano : E^*«'gioi
itoKiS KíAtiioí i x,riffía, Mcura■aAiaiTíiír. Apiano:
xecrtn\tvirtt tSí l6«gi'«S tíí tí JtaMB/Uíroi i/nicigioi,
2II * Los Emporios ó el Emporio fué
Una Ciudad de mucho comercio , dividi
da en dos partes segun algunos Escritores.
Silio Itálico hablando de esta poblacion,
lib. 3. v. 369. pone :
Phocaicoe dant Emporiae , dant Tárraco pubem.

Hoy día se llama Castellon de Ampu-


rias , y está situada junto á otro Río Llo-
bregat , distinto del de Barcelona.
1 88 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
Pág. bien 8W Ródope "3 * , Ciudad de loa
1 6o. Emporienses : algunos dicen que la
edificaron los Rodios. Aquí y en los
Emporios dan culto á Diana Efesi-
na ; diremos el motivo quando se
hable de Marsella. Los de Emporio
habitaron ántes cierta Isla opuesta,
que se llama al presente Ciudad vie
ja;
aia Allí está tambien Ródope). Otros
Geógrafos é Historiadores la llaman cons
tantemente Roda. Estéfano , &h , *o\ií
i€,gia¡r. El mismo Estrabon lib. 14. p. 654.
ti, PoS\>,. En los libros Griegos de Ftole-
méo hay casi el mismo error que en Es
trabon ; pues se lee PaS^oAis , debiendo de-:
cir Paí* iriMt , como tiene la antigua inter
pretacion Latina. r
2I3 * Ródope ó por mejor decir Roda
se halla todavía al Norte de un pequeño
Golfo en el País de los Indigetas sobre la
orilla de un Río que viene de los Pyre-
néos. A este le llamó Pomponio Mela 27-
ger y Plinio Tichis. Mudó dicha Ciudad
su nombre en Rosas , conservando , como
vemos , alguna semejanza con el antiguo.
DE ESTRABON. 1 89
ja: ahora moran en el continente.
Estaba dividida en dos Ciudades por
medio de un muro 2r4 quando vi
vían algunos Indigetas ; los quales
aunque tenían su idea y género de
República, para estar mas seguros
quisieron comunicar sus murallas con
las de los Griegos , pero siempre se
parados unos de otros interiormente*
Con eL tiempo se unieron formando
una sola Ciudad als r, mezclada de
cons-
> *** Estaba dividida en dos Ciudades
por medio de un muro). Pueden servir á
jEstrabon de comentarios las palabras de Li
rio 34. 9. Emporiae dúo oppida erant
muro divisa : unum Graeci habebant d
Phocaea , unde et Massilienses oriundi,
alterum Hispani. Sed Graecum oppidum
in mare expositum , totum orbem muri , mi
tins quadringentos passus patentem ha->
bebat : Hispañis retractior d mari
trium millium passuum in circuitu murus
trat. .: . . . ., '.'¡ ..o:\:,. ¿ .. 5
M* Con el tiempo se unieran formando
una sola Ciudad}. Livio 34. 9. Nunc in
cor
190 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
constituciones bárbaras y Griegas , lo>
que sucedió á otras muchas. Cerca,
corre el Río al6 que nace del Pyre-
néo , cuya boca sirve de puerto á los
Emporienses. Emplean todo su cona
to y haberes en manufacturas de li
no. Los lugares del Mediterraneo sor*
buenos en parte , y fértiles ó abun
dantes yá de esparto i yá de juncos
poco útiles, nacidos en el cieno al
lado de lagunas. Llaman al Campo
Jun-
torpus unum confusi omnes : Htspantsprius,
postremo et Graecis in civitatem Roma-
nam ascitis.
ai6 Cerca corre el Río). Ptoleméo co
loca á Emporias entre dos Ríos , Sambro-
ca y Clodiano , de modo que no sabemos
qual de los dos deba entenderse. Las pa
labras de Plinio III. c. 3. aumentan mas
la dificultad : Flumen Alba , JEmporiae,
geminum hos , veterum incolarum , et. Grae-
corum : qui Phocaensium fuere soboles : Flu
men Tichis. Pero Mela 2. 6. aclara todo,
diciendo que el Clodiano corre por Em
porias. . , ■ .: . u ... .x
DE ESTRABON. igi
Juncario "7. Algunos habitan desde
lo último del Pyrene'o hasta los Tro
feos de Pompeyo ; por donde hay un
camino que viene de Italia á la Es
paña que llaman exterior, principal
mente la Bética. Este camino algu
nas veces se acerca al mar , otras se
aparta , especialmente en las partes Oc
cidentales : vá á Tárracon desde los
Trofeos de Pompeyo 2 ' 8 por el cam
a,7 Llaman al campo Juncario). Pto-po
leméo en este parage hace mencion de un
lugar llamado lungaria , y tambien Anto-
nino. • • ." . i."'l . .
218 Vá d Tárracon desde los Troféos
de Pompeyo). El camino desde lo sumo
del Pyrenéo , donde están dichos Trofeos/
hasta Tarracon lo describe Antonino de es
ta suerte c ' , . . v .;
Summo Pyrenaeo. . v •. ', . . '
Junearia M. P. XVI.
Cinniana .'i .»'.' M. P. XV. '
Aquis Voconis . M. P. XXIV.
Secerras/, .u . M. P. XV.
Praetorio ]vi. P. XV.
Barcinone . ■•' . M. P. XVII. ! 's
Ft-
I92 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
po Juncario , los Véteres * ' 9 , y t\
campo Feniculario , llamado así del
Latín foenicuii , por la abundancia
de conejos que cría : desde Tárracon
por el tránsito del Ibero á la Ciu
dad Dertosa "° : de aquí llegando
recto á Sagunto 22t y la Ciudad Se
ta»
¡■ . .■» i ... • . . u .>;.:■ . >

F/W : ; M. P. XX.
, Antistiana M. P. XVII.
Palfuriana M, P..XIII. '."
, Terracone M. P. XVIL
2i3 Zo¿ Véteres}. No sé qué decir
sobre ellos : puede que sean los Secerras
de Antonino , corrupta aquí ó allí la lec
cion. .' . ; . • ' >'., , > , ■■ .
ai» Desde Tárracon por el transir»
del Ibero á la Ciudad Dertosa). Anton!-.
no describe así este camino.; '.
Terraconti
Oleastrum M. P. XXI. >
Tmja capta M..P. .XXIV.
Dertosa M. P. XVH. .
...■■ ,~; . c »
321 .] De . aquí llegando recto. . á Sagun
to).
DE ESTRAB0N. 1 93
tabi "' * , se aparta un poco del mar,
y se inclina al Campo Espartano
( como si dixeras fertil en juncos ma
rinos). Este, con ser grande y §in
agua , produce esparto apto para te-
xer cordeles , que se llevan á todas
partes , y principalmente á Italia.
-Antes iba el camino largo y áspe
ro por medio del campo y de 2,s Ege
las
ta ). En el Itinerario de Antonino se lee
'así :
Dertosa.
L 1. Intibili M. P. XXVII.
•. Ildum M. P. XXIV.
Sepelaci M. P. XXIV.
Saguntiim M. P. XXII.
, aa2 # Sétabi ú Saetabis no fué Colo
nia sino Municipio de la España Tarra
conense en los Contestanos. Se halló situa
da hacia la embocadura del Suero ; y por
eso la reducen varios Autores á Xatfaa,
ó San Felipe.
223 Egelasta). Plinio hace mencion de
los Egelastanos en la descripcion de la Tar
raconense : él mismo lib. XXI. cap. 6. nom
bra á Egelasta.
I 94 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
lasta "* * ' ahora le han hecho cer
ca del mar , de modo que solo toca
el Campo de jjncos , vá á Claston y
Obulco , y tuerce á Córduba y Ga-
des , famosos Emporios. Dista Obul
co de Córduba casi 300 estadios.
Los Historiadores cuentan que Ce'sar
vino á Obulco desde Roma en 27
días de camino "5 , habiéndose de
dar
r

224 * Egelasta , Ciudad de la España


Tarraconense. Dicen ser al presente Inies-
ta , Lugar de Castilla la Nueva en el
Partido de Cuenca , y algunos creen con
poca probabilidad ' que es la misma Ete-
lesta de Ptoleméo.
a*s . César vino á Obulco desde Roma
en 27 días de camino^. Lo mismo viene
á decir Apiano. El Autor de la Historia
sobre la guerra Española afirma , que Cé
sar para acabarla vino á España con mu
cha prontitud. Dion lib. XL1II. pone , que
César usó de tanta celeridad , que se apa
reció á los suyos y á sus enemigos , antes
que supiesen ú oyesen hablar algo de su
venida.
DE ESTRABON. - IQg
dar la batalla junto á Munda. Ya se
explicó qual sea toda la Costa ma
rítima desde las Columnas hasta el
confín de España y Galia ; pero la Pág.
tierra interior , incluida en los mon- 1 6 1 .
tes Pyrenéos, y el lado Septentrio
nal hasta los Ásturos se contiene en
dos montes principales : de estos uno
es paralelo al Pyrenéo, comenzando
desde los Cántabros y acabando en
nuestro mar : le llaman Idúbeda "6:
el otro extendiéndose del medio has
ta el Ocaso "7 , se inclina hácia Me-
. '.. . .!. \\..'.. '• C \ .••-?> , * dio-
... a26 Le llaman Idúbeda). Ptoleméo po
ne el Monte Idúbeda como Estrabon. Pu
nio III. c. 3. dá este nombre á un Río.
22? El otro extendiéndose desde el me
dio hasta el ocaso).. Tocante á dicho mon
te se han tomado las palabras de Mela II.
cap; 6 ,: PyraeneUs primo hinc in Britan-
nicum procurrit Qceanum , tune in terras
fronte conversús , Hispaniam irrumpit , et
minore ejus parte acl dexteram exclusa
Jrahit perpetua latera continuus , donef
per omnem provinciam immissus tJ in eft
vt p 2 lit
I96 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
diodía y la costa vecina á las Co
lumnas , al principio desnudo deco
llados , después yendo por el Campo
Espartano , Heno de selvas , situa
das sobre Cartago y Málaca. Este se
llama Oróspeda. Ehtre el Pyrenéo é
Idúbeda se precipita el Río Ibero, pa
ralelo á los dos montes ; y se llena
de Ríos y otras aguas que allí cor
ren. Cerca del Ibero está Cesaraugus-
ta y la "8 poblacion Celsa ,39* don
de
littora, quae Occidenti sunt adversa, per-
leniat.
228 Y la poliacion Celsa) La inscrip
cion antigua de una medalla que trae el
eruditísimo Ortelio , COL. V. I. CELSA,
se puede interpretar : Colonia vetus , Ju
lia Celsa , ó , como dice Plinio , Colonia
veteris Latii.
229 # Celsa , segun Ptoleméo , estuvo
muy • apartada del Ebro y hacia la raíz del
Pyrenéo , en lo qual difiere enteramente
de nuestro Geografo. Esta variedad fué
causa para que algunos distinguiesen dos
Ciudades del propio nombre , como quie-
ü re
DE ESTRAB0N. , . 1 97
de se pasa el Río con un puente de
piedra. Muchas Naciones habitan es
ta region: la mas noble es la delos
Jaccetanos 23° *. Esta , comenzando al
pie
Te Ortelio ; aunque entre varios Autores
Solo se ha recibido una. Corresponde, pues,
hoy día el sitio de dicha Celsa , á nueve
leguas de Zaragoza , en la orilla del Ebro,
donde hoy está el Lugar de Velilla, cer
ca del qual hay otro llamado Xelsa , que
con poca variacion conserva el nombre an
tiguo de aquella Ciudad, Sin embargo yá
está comunmente recibida Velilla y no
Xelsa , por favorecer á este dictamen los
vestigios que allí se descubren del puente
mencionado , con el parecer acorde de Mo
rales , Zurita y Don Antonio Agustín. Tu
vo los dictados de Colonia , Victrix , Ju
lia ; pero Plinio usurpó el primero apli
cándosele á Calahorra , que solo fué Mu
nicipio ; y debiendo leerse Celsenses ex Co
lonia , se leía Celsenses : ex Colonia Cala-
gurritanos.
a3° * Debaxo de los Ausetanos colo
can Plinio y Ptoleméo á los Lacetanos . ó
Jaccetanos , y segun el célebre Marca les
i;' 1 3 cor
I98 LIB IIT. DE LA GEOGRAFIA
pie del Pyrenéo , se dilata en los cam
pos, y toca los lugares vecinos á Iler-
da *** * é Ileoscai *52 * , que son de la
re-r
correspondía el territorio que hay entre Sol-
sona , Manresa y Cervera.
23l * Berda hoy Lérida , Ciudad situa
da sobre el Río Segre , llamado en otro
tiempo Sicoris. Fué muy ilustre. desde las
guerras del César con los Legados de Pom-
peyo. Se halla mencionada por los Histo
riadores Floro y Dion. Entre los Poetas , lá
citan Horacio , Avieno , Ausonio , San Pau
lino y Lucano, de los quales quien se es
meró en describir su sitio individual , es el
último lib. 4. v. 11. Perteneció á los Iler-
getes , y así lo confirman Antonino y Pro-
leméo. Plinio lib. 3. cap. 3. escribe -.Civiutn
Romanorum Ilerdenses...;. Surdaonum gentis,
constando además de esto que era Munici
pio, unido al Convento de Zaragoza.
32Z * Osea ó Ileosca fué una antigua
Ciudad ' bastante rica. Sabemos por Tito Li-
vio , que en el año 5,57 de Roma sacaron
de allí sumas muy considerables Helvio y
Q. Minucio. En esta Ciudad , como trae
Aurelio 'Víctor , asesinaron á Sertorio. Hoy
la
DE ESTRABON. 199
region de los Ilergetes 2" * , no
lexos del Ibero. En estas Ciuda
des acabó Sertorio su última guerra,
en Calagurri , Ciudad de los Vasco-
j •-.... nes

la nombran Huesca. Segun Plinio pertene


cía á los Vescitanos ; pero Ptoleméo la co
loca en los Ilergetes , cuya diferencia ex
plica el Padre Florez diciendo : que el país
entero y principal era de los Ilergetes , que
dentro como parte menor estaba la Ves.
citania , y que en el territorio de Huesca se
intitulaba Vescitanos particularmente ; pe
ro no por eso dexaban de aludir á la re
gion mayor y general, . ,
233 * Lvs Ilergetes estaban al Oriente de
los Vascones. Ptoleméo les dá todo el ter
ritorio que hay desde el Pyrenéo hacia
Huesca , inclusive dicha Ciudad , y baxan-
do hasta Fraga y Lérida ; de suerte , que
el Río Segre era su límite , que los divi
día de los'Lacetanos desde ¡Urgel al Cam
po de BaJáguer. Así . lo explica el Señor
Marca , quien pone por Capital de los Iler
getes á Lérida, declarando ser esta la que
Livio llama Atanagia.
j>4
200 LIB. Ht. DE LA GEOGRAFIA
nes 234*? en la costa al rededor de
Tárraco , en Dianio , de que yá ha
blamos , y después echado de Celti
beria , murió de enfermedad 23*. Poco
después cerca de Ilerda fueron venci
dos
a34 # Dos Calagurris nos menciona
Plinio , una con el sobrenombre de Nasst-
ca , otra con el de Fibularia. La situacion
de la segunda se señala en el Mapa jun
to á Huesca , en el sitio que hoy llaman
Loharre , y la de la primera donde exis
te actualmente Calahorra , Obispado anti
quísimo. Véase el tomo 3 3 . de la España
Sagrada por el Padre Risco , donde prue
ba ser mas verisímil que la Calahorra de
los Vascones fuese condecorada con los dic
tados de Julia , Nassica. Sabemos que ba
tió Monedas , y dudamos que las batiese la
Calagurris llamada Fibularia. Por tanto , de
bemos no defraudarla ningun honor posible,
y entre tanto contentarnos con saber que ha
sido patria del famoso Retórico Quintiliano.
235 Murió de enfermedad ) . Esto es
falso ; porque nadie ignora , que á Serto-
rio le cortaron la cabeza los suyos estando
bebiendo. ... .;..::.. . ...
DE ESTRABON. 201
dos por César , Afranio y Petreyo 23<V
Generales de Pompeyo. Dista Ilerda
del Ibero situado hacia el Ocaso 237
1 6o estadios de Tarracon al Aus*
tro 460 238 : Osea está distante de Iler
da hacia el Septentrion 54o239. Des
de Tárraco por los montes dichos has
ta los últimos Vascones que habitan
el
*36 Fueron vencidos por César , Afra
nio y Petreyo ) . El Epitome 1 1 o. de Livio
pone : Cajus Caesar Massiliam , quae por
tas ipsi clauserat , obsedit : et. relicJis in
obsidione urbis ejus legatis C. Trebonio , 6*
D. Bruto ,profecÍus in Hispaniam, L. Afra-
nium et C. Petreium legatos Cn. Pompeii cum
septem legionibus ad llerdam in deditionem
accepit , omnesque incolumes dimissit.
237 Dista Ilerda del Ibero situado ha
cia el Ocaso ) . Ptoleméo coloca tambien á
Ilerda al Oriente del Ibero. Véase Antonino.
238 De Tarracon al Austro 460.) Es
to es, casi 1058 pies. Antonino enseña, que
Ilerda está á 1062 pies de Tarracon , que
hacen 496 estadios.
239 Plinio pone no mucho después de
los Ilerdenses á los Oscenses.
202 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
el Océano cerca de Pompelon 2*° * é
Idanusa ^ * , Ciudades situadas en
el mismo mar , hay un camino de 2400
estadios , que acaba en los límites de
Aquitania y España. En los Jacceta-
nos hizo guerra Sertorio contra Pom-
peyo , y después su hijo Sexto Pom-
peyo contra los enviados de César.
Sobre Jaccetania hacia el Septentrion
habitan los Vascones , en los quales
está la Ciudad Pompelon , como si
dixeras de Pompeyo. El lado del Py-
re-
,240 # Pompeiepolis , Pompelon 6 Pompi-
hs , Ciudad de la España Tarraconense en
los Vascones. Hoy es Pamplona, Capital del
Reyno de Navarra. Andres Escoto en una
Nota al Itinerario de Antonino escribe Pom-
padonenses con diptongo. Algunos dicen que
esta Ciudad se llamó tambien Martua , y
Mariana cree que la fundó Pompeyo des
pués» de haber sujetado á España para eter
nizar la recordacion de sus victorias.
a+x * Ptoleméo coloca en este parage
una Ciudad llamada Oía™ : tal vez será la
Idanusa que buscamos , y así les parece á
Pinciano , Xylandro y Casaubon.
DE ESTRABON. 2(>3
renéo hacia España es rico de árbo
les, tiene bosques de todo género,
siempre verdes ; pero el lado de Ga-
lia carece de todo. Hay en el medio Pág.
valles, oportunos para habitarse. Es- 162.
tos por la mayor parte los tienen los
Cerretanos 2**'*, nacion Española. Se
componen entre ellos exquisitos per-
mies , tan buenos como los Cantá
bricos, y de esto sacan mucho pro-
: ve-
24* # Recibieron el nombre latino de
'Ceretanos ó Cerretanos los habitantes de la
antigua Cerdania , que corresponde hoy
día al Territorio de Puigcerdá y Condado
de Urgél en el Principado de Cataluña. Se
hallan mencionados por Silio, lib. 3. v. 357.

2sfec Cerretani , qtiondam Tirynthia castra.

Plinio al lib. 3. cap. 3. los divide en Ju


lianos y Augustanos. Estos no compreheri*.
dieron pueblo alguno de consideracion rpe-
ro en aquellos estaba la Capital Julia. Li-
' bica } que les dio su título , habiendo de
bido antes al César otras exémpciones , y
privilegios. *
204 MB. III. DE LA GEOGRAFIA
vecho. Subido , pues , Idubeda , al
instante se ve Celtiberia , region an
cha y desigual. La mayor parte es
áspera y bañada de ríos ; pues por
esta corren el Guadiana y Tajo , y
despues otros que habiendo nacido
en este sitio de España van al mar
Occidental. De estos el río Duero
riega á Numancia 2« * , y Serguncia.
El
«43 * Numancia , Ciudad de la España
Tarraconense en el país de los Arevacos,
junto á los Pelendones de Celtiberia. Fué
muy célebre por su vigorosa resistencia con
tra la República Romana , padeciendo du
rante catorce años un duro asedio y una
guerra violenta. Por eso la llama Floro
Hispaniae decus , y añade , que careció
de muros , como estaba Esparta. Es el úni
co Autor antiguo en quien se halla tal es
pecie; pues Apiano y Paulo Orosio dicen
lo contrario. Destruida Numancia , si aten
demos á ciertos Historiadores , la reedifi
caron otra vez ; aunque algunos no asienten
á esta nueva fundacion. Segun Mariana cor
responden sus vestigios al puente de Garay,
mas de una legua sobre la Ciudad de Soria.
DE ESTRABON. 20 g
El Betis , que nace en Oróspeda , corre
por Oretania á la Bética. Desde los
Celtíberos hacia el Septentrion están
los Berones , vecinos de los Cánta
bros Coniscos ; los mismos que vis
ten al modo de Galia. Su Ciudad es
344 Varia245 * , situada en el tránsito
del Ibero : están contiguos á los Bar-
dyetas , los que ahora se llaman Bar-
dya-
s44 Su Ciudad es Varia ) . Ptoleméo
pone tambien á 'Oáp<* por Ciudad de los
Verones ; pero mas remota del Ebro en sus
Tablas.
a4S # Con respeto á lo que dice Pu
nio de la Ciudad de Varia la coloca el Pa
dre Florez media legua al Oriente de Lo
groño , donde hasta hoy muestra un peque
ño pueblo las ruinas del antiguo , y con
servad nombre sin mas alteracion que una
letra ; pues se intitula Varea ó Varea. En
este mismo parage nos ofrece Antonino un
lugar que llama Verela , Verala , Verada,
' Veraza y Verola , lo qual debe atribuirse
á la. variedad de Copiantes que erraron el
Itinerario.
20Ó LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
dyalos a*6. En el lado Occidental vi
ven los Asturos , Caláicos , Verones
y Carpetanos. Hacia el Mediodía los
Oretanos , y todos los Bastetanos y
Dittanos 247 * , que habitan el Oróspe-
da. Al Oriente está el Idúbeda , y de
los Celtíberos divididos en quatro par
tes moran allí los mas útiles ? y al
Mediodía los Arevacos 2*8* , casi uni
dos
**6 Que ahora se llaman Bardyalos).
Acaso serán los Várdulos. En Ptoleméo pa-
xecen los Bárbulos. Plinio IV. c. 22. con
funde los Túrdidos con los JBárdulos , y lo
sigue , como tambien Ta_pori , nombre se
gun creo de otra nacion , no sobrenombre
de los Túrdulos , como quieren algunos
hombres doclos. Los Bargusios de Polybio
no sé si pertenecen aquí. Véase Estéfano.
M7 * El país de los Dittanos no se en
cuentra en ningun Escritor. Pueden ser los
Edetanos , ó los Thitti de Polybio , come»
trae la Martiniere en su Diccionario Geo
gráfico. . -'í'l \
248 # Xylandro puso por correccion
Arevacos , siguiendo á Plinio III. cap. 3. f
IV. cap. 20. . '•:.."*
DE ESTRABON 20£
dos á los Carpetanos , y á las bocas
del Tajo. La Ciudad mas célebre de
estos es Numancia. Mostraron su va
lor en la guerra de Celtiberia 249 que
duró veinte años 2S° contra los Roma-
manos, quienes perdieron muchos exér-
citos ; pero al fin los Numantinos to
leraron el cerco , desamparando po
cos los muros a¿I. Los Lusones as* *
son
249 Mostraron su valor en la guerra
Celtiberia ) . Otros la llaman Numantina:
léanse sobre esto varios Historiadores.
*s° Que duró veinte años). Floro po
ne casi lo mismo libro segundo , cap. 18.
de Numancia. Quatuor millibus Celtibe'ro-
rum , XL. millium exercitum per annos XJV^,
sola sustinuit. Pero Estrabon baxo del nom
bre de guerra Celtibérica parece que com-
prehende aun lo que se hizo algunos años
antes de Viriato , y lo que executó des
pués Metelo en Celtiberia.
*$l De diferente manera se cuenta en
Apiano , Orosio , Frontino y otros.
2S2* Delos Lusones hace mencion Apia
no in Iberic.l. 3. sobre el Ebro y cerca de
Numancia.
•208 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA

son tambien Orientales y tocan al ori»


gen del Tajo. Son tambien además Ciu
dades de los Arevacos Segida 2¿3# y
Palancia 2*4 *. Dista Numancia de Ce
sar
253 * Segida , Ciudad de la España
Tarraconense ; segun Estéfano , en la Cel
tiberia. Plinio lib. 3. cap. 1. coloca una Se-
geda entre el Betis y la costa del Océano.
■ Orosio lib. 5. cap. 23. la dá el epíteto de
nobilis , y escribe que fué tomada por
Pompeyo. Un manuscrito de este Autor,
que consultó Ortelio para su Tesauro, trae
Bélgida en lugar de Segida. Es la misma
Segeda de Apiano ( bello Hispanensi'). Al
gunos creen inverisímilmente corresponde
hoy dia á Cárceres. Otros la llaman con Tito
Livio Segéstica , y Certima ó Tutia , como
Floro y Plutarco. Estrabon pone á su Segida
en los Arevacos ; por lo qual parece Ciu
dad diversa. Ptoleméo habla aquí de Se-
govia : tal vez será esta la que referimos,
aunque el nombre convenga á diferente po
blacion,
aJ4 * Palancia, segun Ptoleméo, Apia
no y el Itinerario de Antonino , fué una
Ciudad perteneciente á los Vaccéos. Lo pro
DE ESTRABON. 200,
saraugusta, que hemos dicho está si
tuada junto al Ebro, como unos ocho
cientos estadios iss. Las Ciudades de los
Cel-
pio dicen Plinio y Mela , el qual añadió
que era la mas ilustre de la España Tarraco
nense. Estos últimos la escribieron con dos
//; pero todos se distinguen de nuestro
Geógrafo en quanto al sitio. Llámase aho
ra Palencia , y ocupa un terreno fértil jun
to al Río Carrion , y no junto al Pisuer-
ga , como escribió Ferrari en su Lexicón
Geográfico , ni Arrion , como se lee en las
correcciones de Braudand. Pinedo en las no
tas sobre Estéfano dice , que el Río de Pa
lencia se llamó antiguamente Nubis. Así lo
trae el Padre Florez , quien pone además
de esto , que el Convento Jurídico adonde
debía concurrir Palencia con sus causas era
al de Clunia , hoy Coruña del Conde , en
el Obispado de Osma.
«ss El Itinerario de Antonino describe
así elL camino.
Numancia.
Augustobriga. M. P. XXIV.
Turtassone. M. P. XVII.
Caravia. M.P. XVIII.

1>
2IO LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
Celtíberos son 2s6 Segóbriga 2«*y
Bil-
Gesar Augusta: M. P.XXXVIII.
Que son del todo M. P. XCVI.
Ochocientos estadios hacen M. P. C; por eso
Estrabon lo dexa en duda diciendo como
unos 800 estadios.
256 Segóbriga). Algunos leen SiyífyJW;
pero mas Español es el primer nombre;
porque en aquella region muchos lugares
terminaban en briga. Plinio á todas las dic
ciones tí y las muda enr, y así dice Se-
góbrica XXXVI. cap. 22.
257 # Colocan Estrabon y Ptoleméo á
Segóbriga en los Celtiberos. O no estuvo
bien conocida por Antonino , ó la llama Se-
gontia , hallándose en el camino de Eme-
rita á Cesaraugusta entre Cesada y Arcó-
briga. Al presente disputan los modernos
sobre su verdadera situacion. Mariana y Zu
rita pretenden , que Segóbriga corresponda
á una Aldea de junto a Iniesta. Vaillant
admite dos Ciudades del mismo nombre,
una en el Reyno de Castilla, á las faldas
del Oróspeda , y margenes del Rio Dura-
tón ; otra en el de Valencia, cerca del Río
Turuli , intitulando á esta Segorbe ó Cabe-
DE ESTRAB0N. ' r 211

Bilbilis258* , junto las quales hicieron


guerra Metelo y Sertorio. Polybio,
examinando los pueblos y lugares de
los
z¿ del Griego , y á aquella Sepúlveda.
Véase el tomo 8. del Padre Florez, pág.107,
y la justa crítica que hace de dicho escri
tor. Siguiendo su opinion por ser mas co
munmente admitida y verisímil , reduzco
Segóbriga á la actual poblacion de Segor-
be , en lo que convienen Vaséo , Clusio,
Xarafa y Mr. d' Anville.
. 358 * Bilbilis, Ciudad de la Celtibe-
ria. Fué muy famosa entre los Geógrafos
antiguos Estrabon y Ptoleméo. El Itinera
rio de Antonino la pone en dos rutas di
ferentes desde Emérita á Cesaraugusta , en
tre Aquae Bilbilitanae y Nertóbriga. Mar
cial, como nacido en Bilbilis, no omitió
medio alguno de elogiar á su patria. Esta
tenía la especialidad de sobresalir y ser co
nocida por sus Armas y Caballos.
Así lo afirma él mismo lib. 1. Epíg. 50.
Videbis altam , Liciane , Bilbilim
Equis ét armis nobtlem.
En el lib. 4. Epíg. 55. suelve á celebrar.
Su hierro: *■
q% No-
212 LIB. III, PE t,A GEOGRAFIA ,

los Vacceos y Celtíberos , cuenta en


c
tre
Nostrae nomina, duriora terrae
Grato non pudeat referre versu:
Saeto Bilbilim optiman metallo:
Quat vincit Chalybas.que , Norieosque.

No se ha de creer por eso , que había


mimas junto á esta Ciudad , sino que las
aguas del Salo , que regaban á Bilbilis , eran
excelentes por su situacion y propiedad
para fabrica y temple de metales , como
escribe Plinio lib. 34. c. 14. Sabemos , que
la presente poblacion ocupó una Montaña,
segun el expresado Marcial lib. lo. Epí-
gr. 103.

Municipes, Augusta mihi quos Bilbilis acri


•Monte creat, rapidis, quem Salo cingit aquis.
1 •.. , . .'...'>
Por esta razon dice Gaspar Barreiros en
su Corografía, que la Ciudad de Bilbilis
estuvo puntualmente media legua de Cala-
tayud, en el monte que hoy llaman Bambolea,
f donde existen vestigios de ruinas y meda
llas. Lo mismo pone el Padre Florez , y
solo añade , que siendo Calatayud la que
su-
DE ESTRABON. 213
tre otras Ciudades á a# * Segesama , ó
Se-
sucedió con poca diferencia á Bilbilis , debe
ser precisamente heredera de sus glorias.
*59 # Para dar una idea exacta de la
situacion de Segesama ó Segisamo , como
hay varios pueblos casi del mismo título,
pondré el parecer de los Geógrafos y de
más Comentadores. En el Itinerario de An-
tonino entre Libia y Virovesca se lee Sega-
samúndo , que otros llaman Segesamunclum
6 Segasammdo , y Ptoleméo nombra Segi-
samunclum , en la region de los Autrigo-
nes ; pero esta poblacion no es del asunto.
El mismo Itinerario coloca después entre
Virovesca y Lacóbriga á Segisamo. Plinio
lib. 3. cap. 3. pone en los Turmodigos á los
Segisamonenses y á los Segisamejulienses.
Ptoleméo trae á Segisama Julia en los Vac-
céos. Floro lib. 4. cap. 12. nombra á Segi
sama. El Padre Harduino al contrario de
Zurita quiere que sus habitantes sean los
Segisamonenses de Plinio. La Martiniere di
ce , que la Segisama de Floro puede ser la
Segisama Julia de Ptoleméo , el qual cita
al lib. 2. cap. 6. otro lugar llamado Seti-
sagon en los Murbogos. Segisamo se halla
23 w-
214 LIB. IJI. DE LA GEOGRAFIA
Segisamo, é 26o# Intercacia 2fil. Es-
cri-

reducido por algunos á un Pueblo que no


conozco , y pretenden llamarle Sagradame-
na , diciendo que existe en Castilla la vie
ja , hácia el Duero , y cerca de Peñaliel. .
Segisama segun Mariana y Garibay es la
Ciudad de Veyzama en los contornos de
Guipuzcoa, pero el Padre Maestro Florez
distingue la Segisama Julia del verdadero
Segisamo , colocando á este ,( que es el que
buscamos ) en Sasamon , seis, leguas al No
roeste de Burgos y quatro cortas de Amaya.
»6o # Ptolemóo pone dos Intercacias,
una en los Vaccéos,, y otra ien el País de
los Orniacos. Aquella se halla nombrada
por Estrabon , y dudamos la verdadera cor
respondencia ; aunque por ahora se señala
cerca de Rioseco. La.Martiniere en el Dic-
cionario Geográfico escribe , que P. Corne-
lio Escipion , nieto adoptivo del Africano
é hijo de L. Paulo , mató hacia esta parte
un bárbaro provocador , y en el ataque de
Intercacia se expuso á los mayores riesgos.
-. 26r Segesamaé Intercacia). Plinio III,
cap. 3. hace tambien mencion de los Segi-
j; . . sa-
DE ESTRABON. 2I£
cribe Posidonio , que M. Marcelo 26a
exigió de Celtiberia un tributo de 600
talentos , y de ahí colige , que los Cel
tíberos fueron gente populosa y rica,
aunque vivían en una tierra incómo
da de todos modos. Lo que dixo Po- Pág.
lybio , es á saber, que Tiberio Gra- 163.
co 26s derribó trescientas Ciudades
de Celtiberia , fué rechazado con sua
vidad por Posidonio, quien para te
ner : su gracia añadió , que dicho Gra-
co había dado nombre á muchas
Torres , como se hace en las pompas
triunfales. No dixo esto fuera de pro-
pó-
samdnenses é Intercacienses. Ptoleméo co
loca dichas Ciudades en los Vaccéos.
262 M. Marvelo ). En otros libros se
echa con razon de menos la voz Mar
co ; pues este es Marco Claudio Marcelo,
que hacia el año 600 de la fundacion de
Roma hizo guerra felizmente contra los Cel
tíberos , como cuenta Apiano.
26s Tiberio Graco.) . Livio lib. 41. c.
26. afirma , que este triunfó de los Celti
beros , y sus aliados..
Í4
216 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
pósito : porque los Generales en la
guerra , y los Escritores de sus haza
ñas son muy inclinados á mentir , es
to es á adornar y exagerar acciones;
pues aquellos que dicen haber sido
mas de mil las Ciudades de España,
parece se vieron obligados á contar
las Villas ó Lugares grandes en el
número de Ciudades 2fi4 : porque ni la
naturaleza de la Region es capaz de
muchas Ciudades por su aridez , larga
distancia , y fiereza de gente ; ni la
vi-
*ff4 Pues aquellos que dicen haber sido
mas de mil las Ciudades de España , pa
rece se vieron obligados á contar las Villai
o Lugares grandes en el número de Ciuda
des'). Yo soy del mismo parecer que Estri
ban , porque Plinio dice , que en toda la
Bética había solo 185 poblaciones , y en \a ci
terior 294. En la Lusitania no explica
quantas sean ; pero se me hace inverisímil
que llegasen á mil en esta parte. Eforo , au
tor antiquísimo , fué tan ignorante en las
cosas de España, que juzgó que Iberia era
nombre de una Ciudad. Así lo trae Josefo.
DE ESTRABONi 21 7
vida y acciones de los Españoles per
miten eso , ni se exceptúan los de la
costa hacia nuestro mar : pues los que
habitan en las Aldeas , que son casi
todos , pasan con rudeza , y con difi
cultad se domestican en las mismas
Ciudades , donde suele haber algunos
que vuelven á huir á las selvas para
infestar los vecinos. Cerca de los Cel
tíberos hacia el Mediodía están los Si-
detanos 2<5s*, que habitan el monte
Oróspeda , y los lugares junto al Río
Sucrón hasta Cartago : tambien los
Bastetanos y Oretanos , no lexos de
Malaca. Pero casi todos los Españo
les usaron en la guerra de broque
les pequeños , y armadura ligera , va-
lién*
a6S * Los Sidetanos de Estrabon se ha
llan nombrados de diverso modo en los Es
critores antiguos. Livio y Apiano mudan
la i en e. Algunos ponen Hedetani ú Ede-
tani. Ptoleméo emplea uno y otro indife
rentemente. Corresponden á parte del Obis
pado de Zaragoza, y á parte del Reyno
de Valencia.
2 18 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
liándose , como diximos de los Lu
sitanos , de espada , dardo , y honda
en sus latrociniosa66. La Caballería
se mezclaba con la Infantería , y es
taban los caballos enseñados á trepar
montes , y á quedarse de rodillas pron
tamente , haciéndolo quando se les
mandaba , y la ocasion lo requena.
España cría muchas cabras y caballos
fieros ; en algunos lugares hay tam
bien crecidas lagunas ; tiene aves cis
nes , de otros géneros , y muchas ótU
des26*. Producen los Ríos Castores268:
pe-
266 En sus latrocinios). Livio lib. XXII.
cap. 18. hablando de cierta cohorte Espa
ñola , Ea assuetior montibus , et ad concur-
sandum inter saxa rupesque aptior , cum
velocitate corporum , tum armorum habitu.
267 Y muchos Otides). Plinio X. cap.
22. dice , que son Aves tardas ó Abutar-
das. Véase Atenéo IX. cap. io. p. 390.
268 Producen los Ríos Castores). Es un
animal de agua y tierra , ó anfibio , como
dice Dioscórides lib. 2. y Plinio lib. XXXII.
«p. 3- '
DE ESTRABON. 2IO,
pero en España no tienen la misma
fuerza que en el Ponto ; y aquí les
es propia la virtud medicinal. Cuen
ta Posidonio , que solo el metal Cy~
prio lleva piedra Cadmia 269 , vitrio
lo 27° y escoria , y que es propio de
España el ser negras las cornejas a?1j
•••.*. . • . que
2g9 Lleva piedra Cadmia ). Véase eií
PHnio lib. XXXIV. cap. 10. qué cosa sea
Cadmia. Allí con poca diferencia escribe
como Eosídonio. Omnis Cadmia in Cypri
fornacibus optima , y Dioscórides k*í>«i<*í
¿fú;, \/u\> i Ku*|>i*. Despues hace mencion de la
que se saca de Macedonia, Tracia y España.
270 Vitriolo ). Plinio cap. 1 1. escribe:
Sed et aeris Jlos medicinae utilis est : Jit,
aere fuso , et in alias fornaces translato.
Poco despues trae lo siguiente : In Cypriis
máxime officinis omnia.
271 Las cornejas ). Si es propio de las
cornejas de España ser negras , luego no
lo serán las de otros lugares , lo que es una
necedad. Me parece que falta la negacion,
lo que ya hace tiempo corrigió en su có
dice un hombre doclo muy amigo de Ca-¡
saubon llamado Jacobo Dalecarnpio.
2 20 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
que los caballos de los Celtíberos, sien
do de muchos y diversos colores , le
mudan quando salen de España ; pe
ro son semejantes á los de los Partos,
y mejores que otros en velocidad y
destreza. Hay copioso número de raí'
ees útiles para la tintura. Por lo que
toca á olivos , higueras , vides y otras
plantas semejantes , de todas abunda la
costa de España , que toca á nuestro
mar : tambien nace bastante en el Me
diterraneo ; pero las Riberas del Océa-
Pág. no hácia el Septentrion carecen de es- .
1 64. to por frías , y las restantes por des
cuido de los nombres , que pasan una
vida mal empleada , no en recreos lí
citos , sino en necesidades y apetitos
bestiales, como que se lavan con ori
nes detenidos en los algibes ó cister
nas 2?2 , y con lo mismo se estregar*
los
9?2 Se lavan con orines detenidos en
los algibes 6 cisternas ). Ya saben los doc
tos lo antiguo de esta sucia costumbre en
tre los Españoles , por Diódoro y Apule-
yo. Catulo dice de los Celtíberos Epíg. 36.
Nunc
DE ESTRAB0N. 221
los dientes ellos y sus mugeres , lo
qual hacen tambien los Cántabros y
vecinos. Esto y echarse á dormir en
tierra es propio de los Galos y Es
pañoles. Algunos afirman , que los
Calaicos no entendían , ni opinaban
nada acerca de los Dioses ; pero que
los Celtíberos , y sus vecinos hacia el
Septentrion, veneraban un Dios sin
nombre la noche del plenilunio , ha
ciendo toda ella fiestas y danzas va
rias familias á sus puertas ; que algu
nos centuriones , viendo que en estas
danzas y paseos torcían los Vetones
(antes de venir baxo el poder delos
Romanos ) el camino de aquí para allí,
creyeron eran locos , y los guiaron á
las tiendas de sus soldados ; pues pen
saban , ó tranquilizarlos así , ó mover
los á pelea. Es de preciosa figura*
como la de los bárbaros , el adorno
de algunas mugeres que cuenta Arte-
mi-
Nunc Celtiber in Celtiberia térra
Quod quisque minxit , hoc selet sibi mane
Dentem atque russam defricare gingvvam.
222 LIBRO III DE LA GEOGRAFIA
midoro. En algunas partes llevan col
gadas al cuello gargantillas de hier
ro con corbos 273 un poco torcidos
hacia arriba, y que salen delante de
la frente , sobre los quales dexan caer
el velo , que las hace sombra en la
cara quando quieren , y aquí usan de
este género de adornos : en otros pa-
rages llevan como un pequeño tam
bor redondo hacia eL colodrillo , que
coge las orejas , y de allí abaxo se
estiende poco á poco en alto y an
cho. Las otras partes de la cabeza que
pertenecen al cabello , se las pelan de
modo , que brillan mas que la misma
frente. Algunas se ponen en la cabe
za un colmillo de un pie de largo,
y allí recogen las guedejas , cubrién
dolas de un velo negro. Muchas co
sas que testifican esta verdad se han
• • vis-
»73 Llámanse córbos , en Griego Ko'paxa^,
aquellos instrumentos con que las mugeres
de España acercaban , ó retiraban el velo;
porque tenían cierta semejanza con la má1
quina que describe Polibio libro primero. -
DE ESTRAGÓN. : : 223
visto, y sabido en varios pueblos de
España en general , y en los Septen
trionales mas particularmente. Imitan
á las fieras , no solo en fortaleza , si
no en crueldad y furor. Las madres
mataron á los hijos en la guerra Can
tábrica 274 , porque no viniesen á ma
nos de sus enemigos ; y el niño , te
niendo á su padre y hermanos cau
tivos , los mataba con su orden , va
liéndose de armas , y tambien la mu-
ger con ellos. Algunos después de em
briagados se echaban al fuego. Esto Pág.
es comun entre ellos, los Celtas , Tra- 165.
ees y Scitas ; como tambien la forta
leza , no solo de los hombres , sino
tambien de las mugeres. Estas culti
van el campo 27S , y quando paren
mandan acostar en su lugar á los ■
ma-
a7+ Las madres mataron á los hijos
en la guerra Cantábrica). En todo eran tan
inhumanos como en esto , segun se lee á
cada paso en las Historias del cerco de Nu-
mancia , los Calagurritanos , &c.
a« ■ Cultivan el campo). Justino XLIV.
224 LIB- U1, DE LA geografía
maridos , y los cuidan 2?6 , y en medio
de sus obras , ó haciendas muchas ve
ces lavan y envuelven á los niños,
reclinándoles cerca de algun río. Po-
sidonio dexó escrito , que en Liguria
contó un huesped suyo de Marsella
llamado Carmoláo , que habiendo
llamado para cabar hombres y muge-
res , vino una entre ellas con dolores
de parto : no pudiendo sufrir se apar
tó un poco de la obra , y echada la
criatura volvió á trabajar por no per
der el jornal ; pero viendo él que pro
seguía con dificultad , aunque al prin
cipio ignoraba el motivo , sabido des
pués , la despachó , y la muger lle
vó al niño á una fuentecilla , donde
lavándole , y envolviéndole con los
paños que tenía , se fueron á casa siri
no-
3. Foeminne res domesticas agrorumque cul
turar», administrant : tpsi armis ¿r sapinis
serviunt. .
3?6 Mandan acostar en su lugar d los
maridos, y los cuidan). Es estraño lo que cuen
tan los Españoles de algunos Americanos,
que
De estrabon. 225
novedad 2". Era uso de los Españo
les el montar sobre cada caballo dos
personas, y al tiempo de la batalla
una combatía á píe , y otra desde la
silla. No es comun entre ellos la mul
titud de ratones 2?8 , á que se suelea
> \ • .'. se*
.que guardan esta costumbre tan agena de
la razon , de donde congeturo , que ellos
fueron trahidos aquí de otras partes de Eu
ropa , segun el erudito Hugo Grocio.
277 Este suceso será menos extraño,
.citando un pasage de Varron , que dice : In
Illyrico hoc amplius : praegnantem saepe cum
•venit pariendi tempus , non longe ab opere
discedere.
2?8 No es común entre ellos la multitud
de ratones'). Al contrario sucede en Gyá-
,ro , que, es una de las Cycladas ; porque
de allí cuenta Plinio, que huyeron en una
ocasion los habitantes. El mismo X.cap.óf.
Plurimi ita ad Troadem perveniunt , irjam
inde fugaverunt incolas. Eliano lib. 17. cap.
41. escribe lo mismo de algunos Italianos
Rutilio Rufo ..Itiner. 1. ver. 289.

Dicuntur cives quondam migrare coaBi,


.í . r
2 26 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
seguir infinitos daños y peste. En Can
tabria sucede desde los Romanos,
que pagan hombres para cazar cierto
número de ellos , y aun así con di
ficultad se libran del contagio , aña
diéndose á esto la escasez de sal y
trigo ; pues no pueden entrar víveres
de Aquitania por lo áspero del sido.
Cuéntase otro exemplo de la demen
cia Cantábrica, y es el creer algunos,
que los cautivos después de clavados
en la cruz cantaban alabanzas á los
Dioses y y estas costumbres á la ver
dad indican la ferocidad que tenían
en las costumbres 279. Hay otras cosas
acá-
Muribus infestos deseruisse lares*
Gerónimo Mercurial corrige este pasage
leyendo moscas , y no ratones j pero se en
gaña.
279 Creían algunos , que los cautivos
después de clavados en la cruz cantaban
alabanzas á los Dioses). Justino al lib.
XLIV. cap. 2. trata de este asunto dicien
do : Celebratur etiam bello Punico serví
iliius fatientia , qui ultus dominum inter
tor-
DE ESTRABQN> , 22*
acaso menos políticas ; pero no tan
duras : como que entre los Cántabros
el hombre dota á la muger 28°, las hi
jas son herederas , y se casan con los
hermanos ; las mugeres tienen cierto
imperio en los maridos , lo qual no
>'•... es
tormenta risu exultavit , serenaque laetitia
crudelitatem torquentium vicit.
280 Entre los Cántabros el hombre do
ta día muger). No es esto comun gene
ralmente en España : mas propio y recibi
do era entre las costumbres de los Judíos,
segun nos declaran á cada paso las Sagra
das letras. Y en el tiempo de Homero se
usaba casi lo mismo , como denotan las pa
labras siguientes de la Odys. &' 3. 317.

Sed ipsos dolos et vinculam detinebit,


Doñee mihi omnem pater reddat dotem,
Quantam illi prabui impudentem obpuellam.

Además escribe Cornelio Tácito de los


Alemanes c. 18. Non uxorem marito dotem,
sed uxori maritum aferre , y de los Fran
ceses no sé que cosa parecida cuenta Cé
sar libro VI. c. jq.
r%
2 28 LIBRO Iir. BE LA GEOGRAFIA
es muy civil. Es tambien costumbre
de los Españoles componer tósigo 28t
que para matar sin dolor hacen de
Cierta hierba semejante al apio : está
siempre á la mano 282 por si sucede
algun lance, fatal , y si tienen que
ofrecerse por aquellos cuya amistad
profesaron , desean la muerte con an
sia
281 Es tambien costumbre de los Espa
ñoles componer tósigo.). Sobre el tósigo ó ve
neno Español véase á Pliniolib. 16. cap. 10.
aunque es diferente de este el que cekr.be;
porque el suyo se hace de fruta del árbol
texo , y el que cita Estrabon se compone
de la cicuta.
281 Esta siempre á la mano ) . Era
costumbre entre los antiguos tener pronto
el veneno en los casos inciertos de fortuna,
y consta , que así lo hicieron principalmen
te los Reyes y hombres grandes; por eso
Livio lib.XXX. c. 15. hablando de Masi-
nisa llama á esta costumbre real : Ingenti ad
fostremum■ndito gemitu ,Jido ex servis uno
aceito , sub cujus custodia regio more ad in-
certa fortuna venenum erat , ei mistum in
foculo ferré ad Sophonisbam jubet.
DE ESTRABON. 229
sia. Unos dividen aquella region en
dos porciones , otros en cinco; y no
se puede asegurar nada de cierto, por
las mudanzas y obscuridad de los lu
gares. Fácilmente se dan á conocer Pág.
las variaá distribuciones de las tierras, 166.
la mutacion de nombres, y otras co
sas semejantes , que suceden en las
regiones conocidas y nobles ; pues to
do se vé celebrado , principalmen
te por los Griegos, que son muy ha
bladores. Las Regiones barbaras dis
tantes , separadas en pequeñas por
ciones , no dán materia cierta de
comentar , y se aumenta la ignoran
cia , quanto mas distan de los Grie
gos. Los Escritores Romanos imi
tan tambien á los Griegos , pero con
moderacion : toman lo que ellos di-
xeron , poniendo muy poco de suyo;
y así donde los Griegos faltan no
es extraño que quede vacío, quando
los nombres mas Célebres son Grie
gos. Siendo cierto que antiguamente
se entendía baxo el nombre de lbe- ,
ria todo lo que está fuera del Ró-
r3 da-
23O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
daño , y el Istmo que se estrecha
por los senos de Galia : ahora se lla
ma mas peculiarmente Iberia la que
termina el Pyrenéo , tomando solo
por España la que está contenida
dentro del Ebro 283. A los primeros
los llamaban Igletas 28t * , labrado
res de una pequeña region , como di
ce Asclepiades Myrleano. Los Ro
manos , llamando á toda la region
con un nombre Iberia y España , la
dividen en interior ó citerior , y en
exterior ó ulterior ; pero acomodán
dose el Gobierno con los tiempos , la
distingue otras veces de diferente mo
do:
283 Polybio dice , que solo entendían
baío esta voz la costa de España opuesta.
á nuestro mar , y que todo lo resrante co
mo desconocido no tuvo ningun nombre en
su tiempo.
284 * Los Igletas eran un pueblo par
ticular , que solo cultivaban cierto Can
ton muy limitado. Casaubon quiere que
sean los Gletas ó Eydétas de Estéfano,
junto á los Cynetas de Iberia.
DE ESTRAB0N. 231
do : habiéndose en nuestra edad asig
nado unas Provincias al Senado y
Pueblo Romano , otras al Príncipe;
tuvo el Pueblo por suerte la Be'cica,
y desde entonces se envía á ella un
Pretor , con su Qüestor y Legado.
Tiene señalado término hácia el Orien
te cerca de Castaon 28s. La parte res
tante es del César, y se envían á
ella dos Lugartenientes , uno Preto
rio y otro Consular. Estos dan leyes
á Lusitania , que toca á la Bética,
extendiéndose hasta el Río Duero 286
y sus bocas : así llaman propiamen
te
185 Cerca de Castaon). Se debe leer
Cástulo. Plinio lib. II. cap. 2. pone : Be-
ticae longitudo nunc d Castulonis oppidi
Jine Gades.
286 Hasta el Río Duero') . Este Río
forma el lado Aquilonio de la Bética; Gua
diana , como se há dicho , el lado Meri
dional. Así Plinio y Ptoleméo llaman solo
Lusitania á aquella region contenida entre
el Guadiana y Duero. Mela II. cap. 6.
dice de otro modo : Lusitania Oceano tan-
r4 tum
232 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
te á aquella region , y allí está Au
gusta Emérita. Lo demás y á la ver
dad la mayor parte de España obe
dece al Legado Consular, que tiene
un Exército no despreciable casi de
tres Cohortes y tres Lugartenientes.
El primero de estos con dos Com
pañías guarda todo el paso de la otra
Pág. parte del Duero hacia el Septentrion,
107. que antiguamente se llamaba Lusita-
nia , ahora Calaica : á él tocan los
montes Septentrionales de los Astu-
ros y Cántabros. Por los Asturos cor
re el Río Melso 287 * ; dista de él un
po-
tummodo objecta est , sed latere ad Sep
tentriones , fronte ad Occasum.
28 7 # Del Río Melso no tratan los de
más Geógrafos que traen los Ríos de la
Costa , ac«iso porque no entrará en el mar,
ó porque será con diferente nombre. El P.
Florez tom 15. pág. 47. se inclina mu
cho al intitulado hoy Nanea , el qual
corre desde cerca del Puerto de Leitarie-
gos , y baxa por los Concejos de Cangas
y Tinéo á unirse con el Nalon. A Ca-
SP'l-
DE ESTRABON. 233
poco la Ciudad Noega 288 * , y cer
ca está el Estuario del Océano, que
divide los Asturos de los Cántabros.
El segundo Legado con una Cohor
te
saubon le parece el Mearos y Ortelio
cree que es el Nelos de dicho Autor.
288 • a Noega la coloca tambien Pom-
ponio Mela en los Asturos , sobre la cos
ta ; y,Plinio lib. IV. cap. a o. in Penín
sula Pesici. Segun Ptoleméo se llama INoe-
ga Ucesia , y su situacion está en la Can
tabria hacia las Ciudades marítimas , cuyo
parecer no es tan preferible ni autorizado
como los anteriores. Comunmente dicen
que corresponde hoy día á la Villa de Na-
via ; pero si atendemos á que nuestro Geó
grafo pone á Noega cerca del Río Melso,
siendo este el Narcea ó Nalon , no pue
de pertenecer la Ciudad á Navia , que es
tá distante , sino á Pravia , á menos que
por el sentido de cercanía no entendamos
algunas leguas , como sucede al mismo Es-
trabon en la cláusula , donde poco des
pués cita un Estuario , que para verificar
se su situacion es menester tomarla lata
mente.
234 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
te gobierna la region montañosa has
ta el Pyrenéo. El tercero rige la
costa mediterranea , y contiene á
pueblos pacíficos y de sanas costum
bres , que visten toga al modo de Ita
lia : estos son los Celtíberos y aque
llos que habitan por ambas partes
junto al Ebro hasta el mar. Aquí sue
le invernar el mismo Prefecto , juz
gando yá en Cartago ó Tarracon:
por el Estío visita la Provincia , ad
virtiendo en qualquier tiempo Jo que
necesita correccion. Hay allí Procu
radores del César de la Orden Eqües-
tre , que dan dinero á los Soldados
para las necesidades de la vida. De
las Islas que están puestas al frente
de España , dos Pityusas 289 * y otras
tan-
289 # Todos afirman que son dos las
Islas llamadas con el nombre comun de
Pityusas , la primera Ebusus correspon
diente á Lviza , y la segunda O/tusa , hoy
tormentera. Lo mismo siente Ptoleméo , y
tambien se conlorman ( aunque no lo pa
rece á primera vista ) Plinio y Pomponio
Me-
BE ESTRABON. 235
tantas Gymnasias , llaman Balea
res

Mek: Aquél al libro tercero' cap. $. es-.


cribe, que el nombre de Ebuso conviene
á entrambas por estar casi unidas , y este
quiere denotar lo mismo citando solo una
Ebusos. Algunos juzgan que la Ojiusa,
intitulada asi del Griego o^ que signifi
ca serpiente , es la Coiubraria de los La
tinos , que segun Celario conviene á lo
que hoy llaman Monte.Colibre , y otros
la reducen á la Dragonera. Equivocóse
Estrabon quando puso que las Pityusas están
mas adentro o en mas alta mar que las
Gymnasias. Diódoro Sículo , que solo ad
mite una isla con el nombre de Eresos , des
cribe su situacion de esta suerte. "Dista
»de las Columnas de Hércules tres días
«con tres noches de navegacion , del Africa
«un día con su noche , y de España un día".
Livio XXVIII. 37. coloca á una Pityu-
«a como á cien millas del continente. Eus-
tacio escribiendo contra Dionisio Periege-
tes lee Bousos por Ebusus , y Dion li
bro 43. E be son. Recibieron estas Islas el
nombre de Pityusas por la multitud de

236 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
res 29°* las situadas delante de la
eos-

pinos que tienen , y en Griego se dicen

290 # Las Islas Baleares tomaron este


nombre del verbo Griego Bailo , que sig
nifica arrojar , echar al ayre , por la des
treza de sus habitantes en tirar con honda;
,y se llamaron Gymnesias de la palabra
Gumnos , que quiere decir desnudo , por
que , segun Tito Livio y Diódoro , no lle
vaban aquí vestidos durante el estío. Ly-
cofron. v. 633:

Alii ad mari cincta saxa Gymnesia


Vestibus induti villosis Cancri navigantes,
Nudam trahent discalceatam vitam.

Divídense las Baleares en Mayores y Me


nores como trae Mela , ó en Mayor y
Manar , como dice Ptoleméo. Aquella que
mira al Ocaso , y corresponde á Mallor
ca , es , segun Plinio , de figura quadra-
da , y de 100ÍD000 pasos de largo sobre
380^)000 de circuito. Tuvo dos antiguas
Ciudades Palma y Pollentia ó Potentia , Ja
pri-
DE ESTRABON. 237
costa marítima entre Sucron y Tár-
raco , sobre la qual costa está Sagun-
to : mas adentro existen las Pityusas
y al Ocaso de las Gymnasias. Una
de aquellas se llama Ebuso : que tie
ne una Ciudad del mismo nombre:
el circuito de la Isla es de 400 es
tadios , casi de igual longitud y la
titud. La otra se llama Ofiusa, ve
cina á esta , pero mucho menor y
despoblada. La mayor de las Gym-
nesias tiene dos Ciudades , Palma y
Pollentia , esta hácia el Oriente , y
aquella al Ocaso. La longitud de la
Isla no es mucho menos de 600 es
tadios 2SU y la latitud 200. Artemi-
do~
primera conserva el mismo nombre , y la
segunda el de Pollenza en una Villa jun
to á la Ciudad de Alcudia. La Isla Me
nor (ó Menorca) comprehendió las Ciu
dades de Jarrino y Mago vel Portus Md-
gonis , hoy Ciudadela y Puerto Mahon.
291 JLa longitud de la Isla no es mu-
, cho ménos de 600 estadios). Diódoro afir
ma que es la primera en magnitud des-
*.. . . pues
238 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
doro duplica una y otra. La menor
dista de Pollemia como 70 estadios,
y no es mucho menor que Ja prime
ra , ni esta la cede en poderes y va
lor. Una y otra son dichosas y tie
nen buenos Puertos , cuyas entradas
dan cuidado á los que allí vienen
por tener muchos peñascos ocultos
baxo el agua. Los habitantes viven
tranquilos como los Ebuséos, por lo
excelente del terreno ; pero habiendo
hecho algunos amistad con los pira
tas , todos fueron culpados a92 ; les
hí-
pués de las siete máximas que hay en
nuestro mar , Sicilia , Cerdeña , Chipre,
Creta , Eubéa , Córcega , y Lesbos. El
mismo Plinio en el citado parage dice , que
la menor de las Baleares dista de la ma
yor 308)000 pies, que serían estadios 240,
y así había absurdo entre Estrabon y este
Escritor ; porque comparadas sus distancias,
resultaba una diferencia muy notable.
a9a Todos fueron culpados*). He aquí
el origen de la guerra Baleárica. Floro,
Baleares insulae pirática rabie corrupe-
rant
DE ESTRABON. 1 239
hizo guerra Metelo , que fundó algu
nas Ciudades y se apellidó Baleári
co. Por esta discordia son sospecho
sos , aunque vivan en paz ; pero ti
ran diestramente con hondas , y di
cen que han exercitado mucho esta
arte desde el tiempo que los Fenices
ocuparon sus Islas. Cuéntase que los Pág.
principales de ellas llevaban unas tú- 168.
nicas muy largas y exquisitas. Salen
á pelear desceñidos , llevando un es
cudo en la mano , ó un dardo fixa-
do en pequeño hierro. Traen al rede
dor de la cabeza tres hondas 293 he
chas de Melancraneo , esto es , un gé
nero de junco con que texen los cor
deles 294 ; por eso Filetas en su In-
ter-
rant maria. Después , Ascondere etiam
inconditas rates et praeternavigantes sub-
inde inopinato impetu terruere : libro III.
cap. 8.
39* Traen al rededor de la cabeza tres
■hondas). Floro : Tribus quinqué fundís prae-
liatur.
29+ Hechas de Melancraneo , esto es,
un
24O LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
terpretacion ó Hermenía pone :

Desalmada tosa visten luego


T con cien Melancraneos se rodean:

advirtiendo que usaban de vestidos


hechos con dicho junco , ó con cabe
llos y nervios 29S. Usan de tres gé
neros de hondas : larga , que llaman
Macrócolon , para dirigir mas lejos
■los tiros : pequeña (esto es , Brachí-
colon) para herir las cosas cercanas;
y media para los tiros regulares. Los
obligaban á exercer la honda de tal
suer-
un género de junco con que texen los corde
les ) . Como no todos sabían lo que era
Melancrania , por eso añadió nuestro Geó
grafo la explicacion. Hay dos géneros de
juncos , y de este trató Plinio XXI. c. 18.
295 Confírmase con la autoridad de Fi-
letas que dicha Melancranea era una espe
cie de junco. Filetas fué un antiguo Gra
mático , que interpretó las voces mas difí
ciles y obscuras , parte en cierta obra in
titulada Ar¡*x.ra , parte en su Eg/uwia..
DE ESTRABON. 241
suerte desde muchachos , que no se
les daba pan sin acertar antes á al
gun determinado sitio. Por eso Me
telo arribando á estas Islas, exten
dió pieles sobre las tablas y másti
les de sus navios para recibir los gol
pes de las hondas , y poder mas fá
cilmente introducir tres mil Colonos
Romanos» que traía de España. Se
añade tambien otro provecho á la
fertilidad de esta tierra , y es , que
no se encuentra en ella fácilmente al
gun animal dañoso 2*6 ; porque dicen
no cría Conejos w , sino que se lle-
i ■ i . van
«96 No se encuentra en ella fácilmen
te algún animal dañoso). Habla de las
Gymnésías , y las atribuye loque otros á
Ebuso', qué es una de las Pityusas.
*97JJÑo cría Conejos). TÍinio III. ca-
J?ít. 5. Jtfec cuniculos Hbusos gignit , popu
lantes Balearium messes. Meia II. cap. y.
de Ebuso ; Omnium animalium , quae no-
cent , adeo expers , ut nec ea quidem , quae
de agrestibus mitia fiunt , aut generet , aut
si inyecta sunt , sustineat.
242 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA

van macho y hembra del opuesto


continente , y que aunque nacieron
muchos , capaces de maltratar árboles
y casas, tanto que varias veces se
vieron obligados los Baleares á pe
dir socorro á los Romanos ; ahora
no obstante , su destreza en la caza
los impide crecer de modo que pue
dan hacer daño» y así viven muy
poco ; porque los habitantes desean
servirse de ellos para su ganancia.
Estas son las Islas situadas dentro
de las Columnas de Hércules. Fue
ra de las Columnas hay dos peque
ñas Islas : á la una llaman Templo
de Juno 298 , y otros las nombran
Columnas. Fuera de estas está Gades,
de quien hemos dicho solo que dis
taba del Calpe 750 estadios. Está
vecina esta Isla á las bocas del Be-
'.- , ......
. r. ' ...
v tis
.,
298 A la una llaman Templo de Ju
no ) . Sobre dicha Isla véase■ á Plinio V.
cap. 11. Proleméo la cita como Promon
torio , en el que está fundado un Templo
de juno. • . >. .. j».
DE ESTR.ABON. 243
tis, y hay mucho que hablar sobre
ella ; porque los Gaditanos son los
que salen á nuestro mar y al ex.- " ,
terno con mas naves y mayores,
siendo así que habitan una Isla pe
queña : no poseen muchas tierras
en el continente opuesto , ni son ri
cos con otras Islas; pero sin em
bargo los mas están siempre en el
mar , y pocos viven en su casa ó
van á Roma. Su Ciudad no tiene me
nos multitud de habitantes que otra,
fuera de la expresada Roma. He oi- Pág.
do decir en mi tiempo que, habien- 169.
do habido alguna vez visita de Cen
sor , se examinaron quinientos Caba
lleros Gaditanos, lo qual no se ha
hecho en ninguna Ciudad de Italia,
sino en Padua. Siendo tanto el nú
mero de gente , ocupan una Isla po
co mas larga que 1 00 estadios 2^ ,
y
a" Poco mas larga que cien estadios).
Plinio citando á Polybio dá de largo á es
ta Isla 1^013 pies, y de ancho 3©ooo,
s % lo
244 LIB* Itt' DE XA geografía
y de ancha en algunas partes uno so
lo. Habitaron al principio una Ciu
dad muy pequeña : después les fun
dó otra , que llaman nueva , el varon
triunfal Balbo Gaditano 3°° : de anc
has se hizo la Didyma (ó Gemela)
como de 20 estadios de ámbito : no
viven en esta con estrechez , pues po
cos residen en casa , y los mas pasan
en el mar. Algunos van tambien á la
opuesta tierra, especialmente á la Is
la situada delante de Gades 301 de
j > sue
lo que es bastante conforme, al parecer de
Estrabon.
3°° Balbo Gaditano}. Con razon di
ce varon triunfal ; pues quiso denotar el
particular honor que recibió M. Cornelio
Balbo Gaditano , quando fué el único es-
trangero que entró triunfante en Roma,
como dicen Plinio , Solino y Dion , des
pués de haber vencido á los Garamantes
y otros pueblos de Africa.
301 La Isla situada delante de Ga
des). Ilustrarán este pasage las palabras
de Plinio IV. c. 22 : Ab eo latere , quo
His-
DE ESTRAB0N. 245
suelo fértil , con cuyo parage con
tentos fundaron otra Ciudad opuesta
á Didyma. Pocos habitan á esta en
comparacion de la primera , y lo mis
mo sucede con el atarazana , que fun
dó Bruto en el continente opuesto.
La Ciudad está situada hácia la par
te Occidental de dicha Isla , á lo
qual está contiguo en la extremi
dad el Templo de Saturno , y fren
te algunas pequeñas Islas. El Tem
plo de Hércules está en la otra
parte hacia el Oriente , por donde
mas se acerca la Isla al continente;
pues dista solo un estadio 3°2. Dicen
que este Templo dista de la Ciudad
doce mil pasos , número cuyos milla-
, -:r! res
Hispariia)n spectat , passibus fere C. al
tera ínsula est longa ¡IV. M. P. M. Lata,
in qua prius oppidum Gadium fuif. Esté-
fano llama á esta Isla Erytia.
301 Pues dista solo un estadio). Pu
nio piensa diferentemegt*, ; pues dice que
distará, por. la parteenlas corta como ocho
cientos estadios, y por,jotras mas de siete mil.
s3
246 LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
res igualan los trabajos de Hércules;
pero es mayor la distancia , y casi
tanta , quanta es la longitud de la Is
la desde el Oriente hácia el Ocaso.
Parece que á Gades la atribuyó Fe-
récides el nombre de Erytéa 3°3 , don
de fingieron estaban los bueyes de
Geryon. Otros entienden baxo este
nombre la Isla situada junto á Ga
des , separada por el estrecho solo
un estadio : teniendo cuenta con la
bondad de sus pastos ( pues rara vez
falta leche en las ovejas que apacien
tan , por la grosura del agua ) , pue
den hacer mucho queso ; y en espa
cio de cincuenta dias se sofoca el ga
nado , si no le sacan alguna sangre.
La hierba que pacen es seca , pero
los pone demasiado gordos : esto lo
congeturan de la fábula fingida so
bre los bueyes de Geryon. Toda la
Ribera está comunmente freqüentada;
.''V ' , • \«.« ü'.v: ...*. mas
s°*. 'Parece que á.Gades la atribuyó
Ferécides el nombre.' de' Erytéa). Véase á
Mela, Plinio ,' Dionisio y otros¿
DE ESTRAB0N. 247
mas acerca de la fundacion de Gades
cuentan esto. Dicen que los Gadita
nos habiendo consultado al Oráculo de
Tyro , para que les permitiese fundar
una Colonia junto las Columnas de
Hércules, fueron enviados á ver el
sitio ; y que luego que llegaron al Es
trecho cerca del Calpe , Creyendo ser
allí el fin de lá tierra habitada y de
la expedicion Hercúlea (porque cer
raba el paso los extremos llamados Pág.
por el Oráculo Columnas"), se arri- 170.
maron en medio de estrecheces al
lugar , donde está ahora la Ciudad
de los Exítanos , y de allí , habien
do hecho sacrificios sin efecto, tu
vieron que dar segunda vez, la vuel
ta á casa. Enviados despues de al
gun tiempo, pasaron 1500 estadios
fuera del Estrecho , y vinieron hasta
la Isla, Sacra de Hércules , situada
frente de Onoba Ciudad de España,
y juzgando ser allí las Columnas, hi
cieron i Dios sacrificios, y no ha
biendo sido admitidas las víctimas
yol.vieron á su casa. Los; que navega-
s4 ron
248 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ron tercera vez fundaron á Gades,
poniendo un Templo á la parte Orien
tal de la Isla ; pero la Ciudad al Oc
cidente. De aquí resultó que unos
entendieran por la palabra Columnas
lo mas cerrado del Estrecho , otros
Gades, y otros tambien alguna co
sa situada fuera de él. Muchos tie
nen por Columnas al Calpe y Abi-
la 3°* , que es un monte en África
opuesto al primero , situado segun
Eratóstenes en los Metagonios , gen
te Numídica. Otros creían ser dos
pequeñas Islas cercanas á ambos mon
tes , de las quales la una llamaban
Isla de Juno. Artemidoro conoce tam-1
bien la Isla y Templo de Juno; pe
ro dice que es diverso del Abila , que
no es monte , ni está en los Meta
gonios. Algunos colocan aquí las pie
dras Planetas y Symplegades , y juz
gan
»°4 Abila). En Griego Abylycém : véa
se Estéfano. Eustacio cita este lugar no
muy al principio in Dionisii periegesimi
pero el parecer de Artemidoro es obscuroi
DE ESTRABON. 249
gan ser las Columnas que Píndaro
llama puertas de Gades , diciendo úl
timamente que hasta ellas llegó Hér
cules. Dicearco , Eratóstenes , Poly-
bio y otros muchos Griegos afirman,
que las Columnas están en el Estre
cho; pero los Españoles y Africanos
las apropian á Gades ; pues lo que
está en el Estrecho no tiene seme
janza de Columnas. Algunos quieren
entender baxo este nombre las que
hay de bronce de ocho codos en Ga
des en el Templo de Hércules , don
de se halla inscrito todo el gasto he
cho para su conclusion. Hasta estas
dicen que llegaron acabada la nave
gacion , y que sacrificándolas á Hér
cules procuraron divulgar su fama,
y que era el fin de mar y tierra. Po-
sidonio juzga ser esta la opinion mas
probable , y al Oráculo y los Emba
jadores tiene por ficcion Púnica 3°s.
/ .'\ i ■■■;■.., ^ ■Wv.,.. ■ En
■ 30s Ficcion Púnica). La fe Púnica era
sospechosa entre los antiguos*; por eso di
ce Platon fumutn (género ^de hablar pro
ver-
2gO LIB. III. DE LA GEOGRAFIA
En efecto ignoro que se pueda afir
mar cosa cierta sobre estos Embaxa-
dores. Pero no carece de razon lo
que dicen , es á saber , que estas Is
las ó montes no tienen la figura de
columnas , y que las columnas pro
piamente dichas son el fin del mun
do , y señal de la expedicion Hercú
lea. Era costumbre antigua poner es
te género de límites , como los de
Pág. Regio que en su Estrecho pusieron en
171. lugar de columna una torrecilla opues
ta á la torre de Peloro, y las aras
de los Filenos casi en medio de las
Syrtes. En el Istmo de Corinto cuen
tan había antiguamente una columna,
colocada con trabajo comun por los
Jonios , que echados del Peloponeso
ocuparon la Ática y Megárida,y por
los que obtuvieron el mismo Pelopo
neso : fué inscrito en la parte opues
ta á Megárida :
No es aquí el Peloponeso , sino la Jonia.
1 :. T ." ...;. Y
verbial , que quiere decir algo falso y de
dudoso crédito). . .O
DE ESTR.AB0N. .- 2gl
Y en la otra parte:
Aquí está el Peloponeso , no la Jonia.

Alexandro en la expedicion Indica á


los últimos lugares donde llegó , cer
ca de los Indios que habitan hácia
el Oriente , puso por término unas
aras , imitando á Hércules y Baco;
porque era costumbre. En efecto es
probable que los lugares recibiesen
este género de señales, principalmen
te quando el tiempo borraba los an
tiguos límites. Hoy día no existen
las aras de los Filenos , pero el lu
gar conserva este nombre ; y dicen
en la India que no se han visto ni
las Columnas de Hércules ni las de
Baco ; pero los Macedones , habién
doles indicado y demostrado algunos
lugares , creyeron eran las Columnas
donde hallaban ciertos vestigios de
lo que sabían de Baco ó Hércules.
No es , pues , de ninguna manera in
creíble , que los primeros , habiendo
llegado á los lugares últimos y mas
ilus-
252 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
ilustres , señalasen límites , edifican
do algunas aras, torres ó columnas
( porque son los estrechos cercados
de montes ó Islas muy principales,
y propios para señalar el principio
ó fin de las regiones ) : tampoco es
extraño , que después de destruidos
los monumentos fundados con el tra
bajo de sus mismas manos , quedasen
los nombres á los lugares ; yá fue
sen pequeñas Islas, ó promontorios
que cierren el Estrecho. Es difícil de
definir que nombre se les debe dar,
quando las Columnas son semejantes
á ambas cosas ; digo semejantes , por
que están colocadas en unos lugares
que demuestran evidentemente la ex
tremidad : de aquí vino entre los
Griegos el nombre de boca á este
Estrecho y á otros ; porque la boca
es principio navegando adentro, y fin
para los que navegan hacia fuera.
Circunscribiendo fácilmente aquellas
pequeñas Islas en la boca ( que así
se llama ) , y representando como un
punto , con razon parece que se pue
den
DE ESTRABON. 2 $3
den comparar á columnas , refiriendo
tambien á columna grande ó á pe
queña las eminencias de los montes
vecinos al Estrecho. Por eso dixo Pág.
bien Píndaro puertas de Gades, si 172.
colocó á la entrada las columnas ; por
que dichas bocas son semejantes á
puertas : pero Gades rio está situado
en tal parte, que denote alguna ex
tremidad , sino que yace en medio al
modo de la ribera sinuosa del mar.
Menos conforme á la razon me pare
ce ,. querer derivar el nombre de co
lumnas de las colocadas en el Tem
plo de Hércules ; pues no es proba-
ble que los Mercaderes pusiesen pri
mero este nombre sino los Generales,
y después le propagó la fama. Tarar
bien la inscripcion de ellas , indican
do , no la dedicacion del sacro voto,
sino la suma de los gastos , impug
na aquella razon ; pues las Columnas
de Hércules convenía que fuesen prue
ba de su magnificencia, no de los
gastos hechos por los Fenices. Poly-
bio dice que hay en Gades en el Tem
plo
3g4 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
pío de Hércules una fuente 306 } ¿ Cl^
y as aguas, buenas para beber, se ba-
xa por unos pocos escalones : este des
censo se halla agitado de un modo
muy contrario á las mareas : faltale
el agua en la inundacion del mar , y
se
s°6 En el Templo de Hércules una
fuente}. Plinio hace mencion de ella libró
segundo cap. 103 : Nam dulcís haustus
in mari plurimis locis , ut ad Chelidonías
Insulas et Aradum , et in Gaditano Ocea
no. El mismo Plinio lifa. 2. cap. 94. Eh
Gades , que esta cerca del Templo de Hér
cules , hay una fuente d modo d& poto;
yá se aumenta y disminuye unas veces con
el Océano ; otras lo hace todo con .contra
rios movimientos. En el mismo, lugar' hay
otra , unida d los montes del Océano.Jüií-
crecio explica la causa de esío libro üfy,
v. 888. ..; .;„■„
Praeterea dispersa foros erumpere cogit
Ut per aquam subito , sursumque ea ccnciliari,
Quod genus endo mari spirat fons dulcís aquai\
Qui scatit , et salsas circum se dimovet midas. '
Et multis aliis praebet regionibus aequor
Utilitatem opportunam sitientibus nautis,
Quod dulces ínter salsas intervomat midas.
DE ESTRABON. 2gíJ
se llena con su refluxo. La causa de
esto es el ayre que sube de lo pro
fundo á la superficie de la tierra , la
qual superficie estando llena ú ocu-
pada de agua por el fluxo del mar,
vuelve adentro el ayre , privándose
de los caminos acostumbrados , y de
tiene las aguas cerrando el curso á la
fuente , hasta que desnuda otra vei
la superficie, libra sus venas de la
opresion , y brotan agua con abun
dancia. Artemidoro ínterin quiere re
futar esta opinion, y dá otra causa
de suyo , parece que dice los hechos
del Historiador Silano, indignos de
contarse : como que él y Silano fue
ron ignorantes de todo. Pero Posi-
donio condenando esta narracion por
falsa , dice que hay dos pozos en el
Templo de Hércules , y el tercero es
tá en la Ciudad. De aquellos que es
tán junto al Templo de Hércules, el
menor , si sacan agua continuamente,
se seca en la misma hora, y vuelve
otra vez á llenarse si cesan de sa
carle : el mayor se disminuye hacien
do
2 g6 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
do agua todo un dia : el mismo tam
bien , al modo de otros pozos , se lle
na dexando de correr por la noche, y
en el tiempo que sube hasta arriba
no es extraño tuviesen los habitan
tes aquella desusada contrariedad por
refluxo del mar. Que se dio verdade
ramente crédito á esta historia lo afir
ma él , y nosotros lo hallamos así
escrito en las narraciones divulgadas
de casos desusados. Tambien hemos
Pág. oido que hay en Gades otros pozos*
i 73. tanto en la misma Ciudad como fue
ra en los huertos ; pero por lo vi*
cioso del agua se usan cisternas : no
sé si tambien estos pozos tienen al
guna diferencia natural ó antipatía
del mar. Pero si esto sucede así, se
debe examinar la causa como en co
sas difíciles ; y puede que el motivo
del asunto sea como juzgó Polybio.
Es tambien probable que algunas ve
nas de la fuente humedecidas se en
sanchan por afuera tanto , que mas
derraman las aguas á la parte obli-
qua , que lo que suelen ir por el an
DE ESTRABON. 2C¡7
tiguo cauce á la fuente ; pero el en*
sancharse es casi preciso con la inun
dacion de las aguas. Si, como pare
ce á Atenedoro , tiene este acto de re
cibir y despedir el ayre alguna se
mejanza con el fluxo y refluxo del
mar , serán acaso ciertas aguas cor
rientes , que habiendo seguido natu
ralmente otros caminos derraman par
te en la superficie (cuya boca llama
mos fuente ó manantial copioso) , has
ta que de varias partes van juntas
á la profundidad del mar : estas aguas
le aumentan tanto, que sale de ma
dre quando sucede el fluxo ; y dexan
entonces su propio camino, al qual
vuelven después que baxa el mar. No
sé por qué Posidonio , atribuyendo
en todas las demás cosas agudeza de
ingenio á los Fenicios , los juzga en
esta parte mas fatuos que sutiles. De
día y de noche medimos la mudan
za del Sol , que pasa parte sobre la
tierra, parte debaxo. El citado Au
tor cuenta que el movimiento del
Océano imita á la conversion celes-
t te,
2 ¿8 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
te , y que hay crecientes y menguan
tes ó marea 3°7 , una diurna , otra
mensual s°8 , y otra siguiendo en cier
to modo la Luna*09: después quan-
do esta se eleva sobre el horizonte
por espacio de un signo , entonces
brama el mar, y derrama sus aguas
en la tierra \ lo qual se puede perci
bir
s°7 Hay crecientes y menguantes 6 ma
rea ) . Parece que Manilio quiso indicar
aunque obscuramente estos tres géneros,
quando dixo:
Sic Pontum tiiovet , et territ immitit et aufert
síequé seditio pelagi , nunc sidera Lunae
Mota tenent , nunc diverso stimulata. recessu,
Nunc anni spatio Phoebum comitata volantem.

3°s Otra mensual"). César lib. IV. ca-


pít. 29; Eadem Luna accidit , ut Lunav
esset plena , quae marítimos aestus in Ocea
no efficere consuevit.
309 y otra siguiendo en cierto modo la
Luna). El Autor de los Epítomes fué aquí
demasiado liberal en poner de suyo. Véa
se á Plinio lib. II. c. 97.
DE ESTRAEON. 2g9
bir por los sentidos , y esto hasta
que la Luna llega al medio del Cie
lo. Desde aquí declinando el astro,
se retira poco á poco el mar , hasta
que la Luna dista solo un signo del
Ocaso : entonces para el mar , hasta
que ella muere , y tambien ínterin
anda por la parte inferior de la tier
ra baxo el horizonte la cantidad de
un signo : después vuelve á crecer,
hasta que la Luna toca al medio del
Cielo por la parte opuesta de la tier
ra : luego se aparta segunda vez, ín
terin anda la Luna un signo hacía el
Oriente, y se pone mas alta que el
horizonte ; en este estado permanece
el mar , hasta que ella supera al ho
rizonte en la altura de un signo. Ul- Pág.
timamente vuelve á salir , y este di- 1 74.
cen ser el circuito diurno. El men
sual es quando suceden los refluxos
máximos cerca del novilunio ; des
pués se disminuyen en el quarto cre
ciente : luego aumentan segunda vez
en el plenilunio , y desde aquí decre
cen hasta el quarto menguante. Es-
t 3 tos
2 6o LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
tos aumentos suben mas ó menos se
gun el tiempo y celeridad. Final
mente , dice Posidonio , que los Ga
ditanos supieron las mudanzas anua
les 31° . Así cuentan ellos , que el flu-
xo y refluxo del mar crecen hácia
el solsticio estivo ; pero conjeturan
que disminuyen los mismos en el equi
noccio : después son mayores hasta
el invierno ; desde este decrecen has
ta el equinoccio del verano , y luego
se acrecientan en el estivo solsticio.
Quando acontecen estas mudanzas de
mar en qualquier dia natural , levan
tándose dos veces , apaciguándose
otras dos , y esto por su orden , yá
de día ya de noche; ¿cómo creen
que llenarse un pozo sucede varias
veces con el refluxo del mar, pero
pocas el vaciarse? Y ¿cómo saben
ciertamente si son algunas ó todas?
Sea,
a10 Tácito en el libro I. de sus Ana
les cap. yo. escribe : Mox impulsu aquilo-
nis , simul sidere equinoctii , quo maxtrni
tumescit Qceanus , raj)i , agique agmen.
DE ESTRABON. 26 1
Sea , pues , en hora buena , que los
Gaditanos bastasen para observar con
cuidado todo lo que pasaba cada día:
pero ¿cómo pudieron conocer las mu
danzas anuales , sucediendo solo una
vez al año? Consta que él les dio
crédito ; pues añade por causa una
conjetura sobre los demás solsticios
y equinoccios. En efecto , no parece
natural , que unos hombres que se
aplican á observar sucesos , reflexio
nasen tan poco , y creyesen á los.
menos peritos. Un tal Seleuco , oriun
do del Mar Rojo , quiso establecer
cierta igualdad y desigualdad , segun
razon con los signos celestes ; por
que estando la Luna en los signos
equinocciales sucedían igualmente las
crecientes ; pero en los solsticiales
eran de quantidad y celeridad des
igual ; y esta desigualdad tenía lu
gar en los demás signos , segun aque
llo que mas se acercase á lo dicho.
El mismo hace mencion que estuvo
en Gades en el Templo de Hércu
les por el solsticio estivo , después
*3 de
262 LIBRO III, DE LA GEOGRAFIA
de algunos dias en el plenilunio, pe
ro que no pudo conocer las mudan
zas aniversarias : solo notó mucha
variedad hacia el novilunio de aquel
mes en el golpe del Río Betis junto
á Hipa ; el qual antes apenas hume-
7 Pág. decía la mitad de la ribera , y entón-
175. ees se derramó tanto, que pudieron
hacer agua los Soldados (dista, pues,
Hipa del mar cerca de setecientos
estadios ) ; y las regiones campestres
vecinas al mar se llenaron de agua
hasta la altura de treinta estadios, tan
to que algunas Islas se cubrieron 3":
la profundidad de los cimientos en
que insiste el Templo de Hércules,
y el campo que está antepuesto al
puerto Gaditano , se ocultaron como
diez codos , que él dice haber me
dido ; y aunque alguno añada el do
ble,
*** Tanto que algunas Islas se cu
brieron') , Afirma esto César libro sexto
cap. 3 1 : Qui proximi Oceano fuerunt , in
insulis sese occultaverunt , quas aestus ef~
Jicere consuerunt.
DE ESTRABON. 263
ble, segun las crecientes de entónces,
lo mismo indicaría su magnitud, que
la inundacion en los campos. Esto
parece ser muy comun en todo el
círculo de la costa adyacente al Oce'a-
no. Cuenta otra cosa nueva y parti
cular del Río Ibero , es á saber, que
algunas veces se desagua , no con
lluvias ó nieves que lo motiven, quan-
do soplan freqüentes Bóreas , sino á
causa de una laguna por quien cor
re ; pues los vientos conmueven á la
vez el agua de esta. Cuenta tam
bien que hay un árbol en Gades , cu
yos ramos , doblados hacia el suelo,
tienen las hojas de un codo de lar
go y quatro dedos de ancho, en for
ma de espada : que junto á la Nueva
Cartago hay otro árbol , el qual echa
por medio de espinas una corteza, de
donde se componen telas exquisitas.
Nosotros , por lo que toca á la incli
nacion de las ramas hacia abaxo, yá
hemos visto en Egypto otro árbol
semejante al de Gades , pero diferen
te en las hojas , y carece de fruto,
t4< sien
2 64 LIBRO III. DE LA GEOGRAFIA
siendo así que este le produce. De
las espinas hacen tambien texidos en
Capadocia ; pero ningun árbol las
cría , sino la humilde hierba. Del ár
bol Gaditano cuenta tambien , que des
pide leche por un brazo roto, y cor
tando la raíz un humor parecido al
bermellon : pero baste lo dicho so
bre Gades. f Las Islas Casitérides
son diez , vecinas entre si , situadas
en alta mar al Septentrion del Puer
to de los Artabros : una de ellas es
tá desierta , las demás habitadas por
hombres vestidos de negro , con unas
túnicas que llegan hasta los pies , ce
ñidos junto al pecho , andando con
báculos , y procurando conservar las
barbas como de cabrito. Viven con
el ganado , vagando sin asiento fixo:
tienen metales de estaño y plomo:
en lugar de estos y de pieles, reci
ben ó toman á sus mercaderes hechu
ras de barro , sales y obras de cobre.
En los primeros tiempos solo los Fe-
nices iban á negociar aquí desde Ga
des , ocultando á otros esta navega
cion;
DE ESTRABON. 265
cion ; pero habiendo seguido los Ro
manos á cierto piloto , para saber don
de eran dichos Emporios , este , por Pág.
envidia, cuidó poner su nave en el va- 176,
do , logrando guiar las otras al pe
ligro. Libre así del naufragio, reci
bió del Erario público el precio de
las mercadurías perdidas. Últimamen
te los Romanos , haciendo varias ten
tativas , aprendieron la navegacion.
Hasta aquí vino por mar Publio Cra
so, y viendo que los metales se po
dían tener sin cavar mucho, y que
los habitantes , deseosos de la paz,
en medio de su ocio , querían estu
diar la navegacion , se la enseñó á
algunos ; pues mas habían de tran
sitar este mar , que el perteneciente
á Bretaña. .

IN-
r 266

ÍNDICE
GEOGRÁFICO-HISTÓRICO
de las cosas mas notables pertenecientes i
este libro tercero de Estrabon.

Los números señalan la página de la edicion de Pa


rís en i62o, que vá puesta al margen.

A
xVbdera , ciudad. Obra de los Fenicios. igo*.
Abyla, monte. 170.
Aconcia , ciudad. ig2.
Ades. 147.
Adivinaciones. 154.
Adobos en la ciudad de los Exitanos. J<¡<S.
Adorno bárbaro de las mugeres. 1Í4.
Afranio y Petreyo , Generales de Pompeyo:
donde fueron vencidos. l(5l.
Agua. Escasez de ella entre los Lotófagos. 157.
.Aguas de la fuente de Hércules , de los pozos
y otras. 172.
Agüeros de los Lusitanos. 154.
Alexandro. Véanse Aras.
Alótrigas. igj.
Alumbre. Véase Oro.
Ana. Véase Guadiana.
Anacreonte. Xgx.
Anfiloco (Ciudad de) , llamada así porque en
ella murió un General de este nombre. .157.
Aníbal, destructor de Sagunto. iáP»
Ani-
ÍNDICE. 267
Animales perniciosos no hay casi en Turdeta-
nia. *44*
Antenor. Sus viages. 1g0. Que pasó á Italia
desde España. 1 g7,
Antonio (los Soldados de) , matadores de Sex.
Pompeyo. *4**
Apetua , ciudad. Ibid.
Apio. Féase Hierba.
Aquitania. Sus limites. 161.
Aras de Alexandro. 171.
Árbol corpulento en Gades , y Otro en la Nue
va Cartago. 175.
Arena mezclada con oro. 146.
Arévacos. 162.
Argantonio , Rey. Iji¿
/Irgentarius et drgenteus mons o monte de
plata. 148.
Aristóteles notado por Posidonio. 1g3.
Arotrebas o Artabros. 147 , 1g3 y ig4- Su
puerto. 175.
Artemidoro. Jg7 > 17° y 174,
Artemisio , promontorio. igo.
Asclepiades Myrleano , Gramático. 157 y i<5<5.
Asiento de los justos. igo.
Asientos construidos junto á la pared para ce
nar. 1g5.
Asta , ciudad. 141 y 143. Que el mar pasa
bañando é hirviendo junto á Asta. 140.
Astenas ó Astigi, ciudad. 141.
Astures. JS*j 10"í y 1(57-
Atalaya diurna.- igo.
Atenedoro , escritor. 173.
Atenienses. 147.
Atunes cerca de Carteya. 145.
augusta Emérita, ciudad en los Turdulos. 1g1 y 166.
Augusto César, idéase César.
Axi-
268 índice.
Axitanos ( ciudad de los ) . i*p.

B.

Baco (Columnas de). 171,


Báculos, Véanse Casitérides.
Baile con trompeta. igg.
Balbo Gaditano , varon triunfal. 169.
Baleares. Véanse Islas.
Baleárico, sobrenombre de Metelo. 16*7.
Ballenas. 145.
Barbas como de macho cabrío en los habitan
tes de las Casitérides. 175.
Barbário , promontorio. igi.
Barcas , General de los Cartagineses , hizo una
expedicion á Turdetania. Ibid. Fué padre de
Aníbal. ig8.
Barduetas , Bardyetas , Bardyalos ó Várdu-
los. 1 $g y 16%.
Basistanos , Bastetanos , Bastitanos ó Rastillos
( Monte de los). 139. Regiones de este nom
bre. 141 , 1g$ , 1g6, 161 y 103.
Beatos (Islas de los). Véanse Islas.
Bebida. Véanse Pueblos.
Belo , ciudad y río. 140.
Bellota de encina que nace junto al mar. 14$.
Pueblos que se alimentaban con ella. i$<¡. La
molían , y con su harina amasaban panes. Ibid.
Bénis ó Minio, río. 1g3. Delante de sus bo
cas hay una Isla. Ibid.
Bermellon , en nada inferior á la tierra Sinópi-
ca. 144. Humor parecido al bermellon, que
sale cortando la raíz de un árbol. 175.
Bestias perniciosas no hay casi ninguna en Tur
detania. 144*
Bética , region. 139. Bética , provincia i<S6.
Que
índice. 269
Que S ella se enviaba un Pretor con suQües-
tor y Lugarteniente. Ibid.
Bétis, ciudad. 141»
Bétis, río. 139 y i<5a. Su boca se divide en
tres. 140. Desde donde corre el Bétis , y
que también se llamó Tarteso. 148. Riada
. del Bétis junto á Hipa. 174.
Beturia. ' *42-
Bílbilis , ciudad. i<S2,
Bolas de oro de media libra. 146. Bolas ó ter
rones de plata. 148»
Bondad de pastos. 169.
Botas ó tinajas de plata. igr.
Brachicolon , género de honda. i<58.
Urazo ú rama de un árbol , que rota despide
leche. 175.
Bruto, igg. Donde sea el fin de una de sus ex
pediciones. 1 £¡3. Que tuvo por sobrenombre
Caláico. iga.
Bueyes. Su observacion. 143. Bueyes de Ge-
ryon. 150 y \6g.
Bútyro en lugar de aceyte. 155.

Caballería mezclada con la infantería. 16*3,


Caballeros Gaditanos y Patavinos. i6g,
Caballos. Estaban enseñados á trepar montes,
y á quedarse de rodillas prontamente. 163.
Eran fieros. Ibid. Los caballos de los Celtíbe
ros , siendo de muchos y diversos colores , le
mudan viniendo á la España exterior. Ibid.
Son semejantes á los de los Partos. Ibid. Era
costumbre de los Españoles el ir montados
sobre cada caballo dos personas > y para qué. t6e
Cabras , muchas en España. 163
Cád-
270 INDICE.
Cádmea , victoria de los Griegos. ijo«
Cadmía , piedra. 103.
Caiagurris , ciudad de los Vascones. 161.
Caláica , antes se llamó Lusitania. 167.
Caláico , sobrenombre de Bruto , destructor de
Lusitania. i¿2,
Caláicos, Calecos ó Gallegos. Ibid. 157 y 162.
Calamares de dos codos junto á Carteya. 141?.
Calpe , ciudad antigua y muelle en otro tiempo
de naves Españolas. 140.
Calpe , monte. 148 y 170. Distancia que hay
desde el monte Calpe hasta la nueva Car-
tago. ig<5.
Camas de hierba. ig¿.
Cambios en lugar de dinero. Ibid.
Campo Elysio. 150. Campo ó tierra que se es
tanca , y es navegable como el mar. iga.
Campo Juncario. 160. Feniculario. Ibid. Es
partano. Ibid. y i6im
Cántabros. 167. Cántabros Coruscos. 161. Fue
ron sujetados por César Augusto y eran van-
doleros. 1 g6. Parte de Cantabria estuvo ocu
pada de Lacones. 157. Demencia Cantábri
ca. 16$. Pemiles de Cantabria. iff2.
Capion. Idease Torre.
Capotes ó Sayales. Quienes se embozaban con
ellos. igg.
Caracoles y pececillos de púrpura , cerca de Car
teya. 145.
Carbon ( el ) consume mucho al oro por su de
masiada vehemencia. I4<í.
Carrnoláo , huésped de Posidonio. ifjg.
Carmon o Carmona , ciudad. 141.
Carnero que costaba un talento. 144.
Carpetania y Carpetanos. 139, 141 , 144 , ig2y 16a.
Cartálias, ciudad. ifp.
Car-
INDICB. 271
Carteya. 141 y 14$. Antes se llamó Tarteso. igr.
Cártbago Nova. 147 y 156. Su fundador y si
tuacion. 158. Guerra de los Cartagineses y Ro
manos. 1 ¡(3.
Casitérides , islas. 147 y 17^. A los principios
solo navegaban hasta aquí los Fenices. 171;.
De los habitantes de las Casitérides y sus cos
tumbres , entre las quales una era el andar
con báculos. Ibid. Metales de estaño y plomo
, en las Casitérides. Ibid.
Castaon. I66. Junto á esta Ciudad hay metal
de plomo cavadizo. 148.
Castores , animales anfibios en los ríos de Es
paña. No tienen la misma fuerza que en el
Ponto •■, pero conservan una virtud medicinal. 163.
Cautivos. Los Lusitanos hacían adivinaciones
por las entrañas de los cautivos muertos. 154.
. Y les cortaban la mano derecha para consa
grarla á sus Dioses. Ibid.
Cazar. Véanse Conejos.
Celsa, pueblo grande. 161.
Celtas. Su region. 139. Su fiereza. ióg.
Celtiberia , region. 161 y 163. Guerra Celtibé
rica. 162. De Celtiberia exigió M. Marcelo
un tributo. Ibid. En ella derribó Tiberio Gra-
co trescientas ciudades. 163.
Celtíberos. ig8. Su fiereza, igi. Sus ciuda
des. 160. Que fueron gentes populosas, y de
riqueza. i6a.
Célticos. Unos viven al rededor del Promon
torio Nerio y otros junto al Guadiana. 133,
Cena. Se llevaba ai rededor de todos entre los
Montañeses. i¿¿.
Centurias de víctimas. Ibid.
Cerbeza. Pueblos que la gastaban. Ibid.
Cerdeña cria un nuevo género de bellota. 143.
Cer-
2^2 INDICB.
Cerretanos. i6"a. Sus pemiles. Ibid.
Certámenes Gymnicos de los Lusitanos. ijg,
Cesaraugusta. iji , 161 y i6a.
César Augusto sujeto á los Cántabros. 156. Par
te de España era del César , parte del pue
blo. 166".
Cétulo , ciudad de Oretánia. iga.
Chérroneso , ciudad 159.
Cimmerios. Habitaban junto al Bosforo , y , se- x
gun Homero , cerca de los infiernos. 149.
Cisnes en España. i¿3*
Ciudad de los üxitanos. 1 g6\ Ciudad vieja. 160.
Y ciudad de los Axitanos. 170.
Claston. 142 y 160.
Cn. Pompeyo , llamado el Grande, Véanse Tro
féos. Donde huyo y murio. 141. Donde fue
ron derrotados sus hijos. . Ibid.
Cobre junto á las Cotinas. 14a.
Cobre. Oficinas donde le labran. 145. Su exca
vacion. 147.
Cohortes enviadas por Tiberio. igiS.
Colonia junto á las Columnas de Hércules. 169.
Columnas ó islas pequeñas. iób. Columna en el
Istmo de Corinto. 171. Columnas de Baco. Ib.
Columnas de Hércules. 170, 171 y 172.
Conchas de Turdetania. 145. Egypcias. X47.
Conejos. Modo de cazarlos. 144. Conejos de las
Baleares. 16%.
Coniacos. I $6*
Conistorsis , ciudad. . 141*
Convites de parientes , en los quales se consu
me pronto el vino que hay. J<J¡>-
Coraxós. Véanse Lanas.
Córdoba , obra de Marcelo. 141. Emporio fa
moso, loo-
Cornejas. i<*3-
Co-
INDICE. 273
Cotinas. Véanse Cobre y Oro.
Crates Malotes. 157.
Cruz. Algunos Cántabros creían que los cauti
vos , después de clavados en ella , cantaban
alabanzas á los Dioses. ifjg.
Culpa de unos quantos echada á todos. 167.
Cuneus Ager , nombre de region. . 137.
Cyanéos. Véanse Peñascos. v

D
Dertosa , colonia. igo;.
Diana Efésia. 179. Su culto. 160. Su templo
alcázar de Sertorio. igo.
Dianium. Ibid. y 161.
Dicearchia. 14g.
Dicearco , Geógrafo sabio y filósofo. 170.
Dignidad ó gobierno , y edad. A los mayores
en esto se cede el primer lugar. jgg.
Dinero. Véanse Cambios.
Diómedes. Sus viages. igo.
Dios. Véase Veneracion.
Dioses. Los Galaicos no entendían ni opinaban
nada acerca de ellos. 164.
Ditanos. 162.
Diurna. Véase Atalaya.
Doctos. Quales son los mas de toda Espafia. 139.
Durias , Durius o Duero , río. 1ga , 133 , \6% y 166.

Ebura. "% 140.


Ebuso, isla. 139. Ciudad del mismo nombre. 167.
Echarse á dormir en el suelo es proprio de los
Galos y Españoles. 164.
Edad. Que á los mayores en ella se cede el
it pri^
274 índice.
primer lugar. ig,i,
Eforo. Sus ficciones. 138.
Egelastas. 160.
Egua , ciudad. 141.
Egypcias ( Conchas). 147.
Eipon Laceya. igi.
Electro. 146".
Eletanos. . '. ig(5.
Elysio. Véase Campo.
Embarcaciones de cuero. igg.
Embriagados , se echaban al fuego. 1 6¡.
Emporio. 159. Los Emporios ó Emporienses. 160.
Eneas. Sus viages ó expediciones. i<¡o»
Enfermos. Que antiguamente Jos exponían en
los caminos , segun costumbre de los Egyp-
cios. Igij.
Enigma. *47»
Eratóstenes reprehendido. 148.
Erytéa , Eryteya , Erytreya ó Gades, isla for-
tunata. Ibid. y idp.
Erytris (Tierra de). 148.
Escombrarla, isla y de Hércules. ig$>.
Escoria. 163.
Escritores Romanos y Griegos. 166.
Escudo de los Lusitanos. 154»
España. Es la primera parte de Europa hacia
el Ocaso. 136. Su descripcion , figura, ferti
lidad del sitio y aspereza del suelo. 1 37. Cos
ta marítima de España desde las Columnas
hasta el Pyrenéo. 1 $6.. Parte de ella sujeta
por los Tyrios , Celtas y Cartaginenses. 158.
Navegaciones de los Prefectos á España. 1 59.
„ España situada dentro del Ebro. Ibid. Su fer
tilidad. 162. Número de sus Ciudades. 163.
Costa Septentrional de España hacia el Océa
no. 164. España é Iberia eran antiguamen
te
INDICH. 275
í .te promiscuas. 166. Qué se entendió después
por uno y otro nombre. Ibid. Pueblos de Es
paña que vestían toga al modo de Italia. 167.
Español (Mar). 122. Riqueza Española, igi.
Costumbre de tener á la mano tósigo , y pa
ra qué efecto. ióg. Provincias Españolas , unas
asignadas al Senado y Pueblo Romano, y otras
al Principe. 160".
Españoles. Quáles eran los mas doctos , que te-
. nían gramática , poemas , leyes y otros es
critos de seis mil años. 139. No todos los Es
pañoles usaban el mismo lenguage. Ibid. Perti
nacia de los Españoles, y resultas de ella. ig8.
Su cautela de ánimo y astucia ingeniosa. Ibid.
Que los Romanos gastaron doscientos años de
guerra en domar á los Españoles. Ibid. Su vi
da rústica. 163. Su armadura y latrocinios. Ib.
Su fortaleza , fiereza y crueldad. 164. Era
costumbre de los Españoles el ir montadas
sobre cada caballo dos personas , y para qué. i6g.
Esparcimiento de agua. igi.
Espartario. Véase Campo.
Esparto apto para texer cordeles. 160.
Estaño. Su excavacion. 147. Que le hay en Bri-
tánia. Ibid. Que también hay estaño dorado y
donde. Ibid.
Estesícoro. 148.
Estolados ó togados. Qué Españoles fueron lía—
■ mados así. , igr.
Estratagema que no tenían los Aticos. 147.
Estuario ó Estero. Qué cosa sea. 140. Estuario
. del Océano. 167.
Eubóico. Véase Talento.
Euros Etésias. 144,
Excavacion del oro en Turdetaniai 146.. - del
cobre y estaño. 147.
v1 Exi-
276 INDICE.
Exitanos (Ciudad de los). igtf,

F
Favonio, viento grato. igo.
Feniculario. Véase Campo.
Fiereza de algunos pueblos. igg.
Flauta. Al son de ella danzaban en medio de la
bebida. it¡<¡.
Fluxo de ríos salados. 144.
Fluxo y refluxo del mar. 1153 y 173.
Fortunadas. Véanse Islas.
Fuente que pierde el agua en la inundacion del
mar , y se llena con su refluxo. 171.
Fyséteres. 145,

Gades. í(58. Cómo fué fundado. 169. y sig.


Gades ó Gadira , isla. 140. Su recomenda
cion. Ibid. Gades ó Erytreya. 148 y 169.
Gades famoso Emporio. 160. Su sitio. 174.
Puertas de Gades. 170 y 172.
Gaditanos (Ciudad é isla de los). 141 y i<58.
Mercaderes Gaditanos. 1g7. Sus naves. 168.
Ganado de Gerion. 148. Véanse Bueyes y Re
baño.
Gargantillas de hierro colgadas al cuello de las
mugeres. 164.
Gatos de África , empleados en la caza de co
nejos. 144.
Gazapillos ó Libérteles. Ibid.
Gerion. Véase Ganado.
Gobierno. Véase Dignidad.
Gramática de seis mil años , escrita y conser
vada entre los Españoles. 13P.
Grie-
índice. 277
Griegos. Causa de que se dispersasen entre na
ciones bárbaras, y su fausto. ig8.
Guadiana, rio. 139, 140 y 141. Region den
tro del Guadiana. 139. Costa marítima junto
á dicho río. 141. Nacimiento y curso del
Guadiana. 148.
Guerra contra los Lusitanos. i<¡a. Guerra de
los Cartagineses y Romanos. 159. Guerra de
Sertorio en los Jaccetanos. 161. Guerra Cel
tibérica. 161. Guerra Cantábrica. 164. En
ella se mataban mutuamente los padres , ma
dres é hijos. Ibid.
Gymnasias , dos islas. 167 y 168. Gymne-
sias. 144 y 159. Los habitantes de estas des
pacharon embaxadores á Roma. 144.

H
Hecatombas. ig¿.
Helenes , 'ciudad. 157.
Hénetos (Peregrinacion de los). 150.
Heracléa o Calpe. 140.
Hércules. Número de sus trabajos. 169. Tsla de
Hércules. 1 j9 y 170. Templo del mismo. 138,
169 , 170 , 172 y 174. Fuente de Hércu
les. 172. Su expedicion. 149: Algunos aliados.
ó compañeros de Hércules habitaron la Espa
ña. ^ 157.
Hermanos (los) mataban á sus hermanos en la
guerra Cantábrica. 164. Se casaban con Jas
hermanas. i6¿.
Hespérides. Véanse Manzanas.
Hierba semejante al apio , que mata sin do
lor, ifig.
Hierro. Venas de este metal. 139.
Hijas (las) son herederas éntrelos Cántabros. 165.
vi Hi-
278 INDICE.
Hijos que mataban á sus padres en la guerra
Cantábrica. 1^4.
Hincarse de rodillas , baxando el cuerpo recto. i$g.
Hispalis , ciudad. 141.
Hojas de un codo de largo y quatro dedos de
ancho , en forma de espada. iyg.
Homero. Tuvo noticia de muchas cosas. 149.
Defensa de Homero. 137.
Hondas. Hechas de Melancranea. 168. Exerci-
cio de la honda entre los Baleares, lbid.
léanse Tiradores.

Iy J
Iberia. Qué se entendió antiguamente por este
nombre. 166,
Ibero, rio. 156, 158 y 161. Moradores junto
al origen del Ibero. ígó■Pasage y nacimien
to del Ibero. 1 59. Particularidad sobre la inun«
dacion de este río. 17$.
Iberos. 152.
Idanusa , ciudad. 16 r.
Idübeda, monte. Ibid. y 1 <52.
Igletas. 1 66.
Ileosca. j6i.
Ilerda cerca del Ibero. Ibid.
Uergetes. Ibid.
Hipa , ciudad. 141 , 174 y sig. Hay mucha pla
ta en los lugares cerca de Hipa. 147.
Indigetes. , ig6 y 160.
Inscripcion de una columna. 171. Inscripcion de
las Columnas. 172.
Intercacia , ciudad. 160.
Islas délos Beatos, dichosas ó fortunadas, igo.
De cierta Isla en la dispersion superior del
Tajo. 152. Isla delante del Mifio y alabanza
de
índice. 279
de su situacion 1'53. Islas que hay en frente
de España , Pityusas, y Gymnasias ó Balea
res. 167. Islas situadas dentro de las Colum
nas de Hércules. i<58. Islas Casitérides. iyg.
Itálica , ciudad. 141.
Jaccetanos. 161. Guerra de Sertorio en los Jac-
cetanos. Ibid.
Jason (Navegacion de). 149.
Jonios y Jonia. 149. Los Cimmerios camina
ron hasta ella. Ibid. Los Jonios fueron echa
dos del Peloponeso. ' 171.
Julia , ciudad. 141.
Julia loza , ciudad. 140.
Julio César. Véase César Augusto.
Juncario. Véase Campo.
Junco con que texen los cordeles. 168.
Juno. Su isla y templo. Ibid. y 170.
Justos. Véase Asiento.

Lacónico modo de vivir. 1g4.


Lago marino. 1g9.
Lagunas crecidas hay en España. 163.
Lámina de plata, en lugar de dinero. igg.
Lampréas de Turdetania. i4g.
Lanas de los Coraxós. 144.
Lartoleetas. 159.
Leche sin suero , que por la grosura necesita
agua para poder hacerse queso. 169. Leche
que sale del brazo de un árbol.' 17^.
Leetanos. 1g9.
Legados , Embaxadores ó Lugartenientes en Es
paña , tanto del Príncipe , como del Senado
y Pueblo Romano. 166.
Letes ó Liméa, río. 153.
v4 Li-
280 INDICE.
Libérides 6 gazapillos. 144,
Liméa , Liméo ó Letes , río. j¿o.
Lino, ¡léanse Manufacturas.
Lotofegos ( los ) se llaman así , porque comen
la hierba y raíz Loto. I<ft
Lucifer ( Templo de ) , del Lucero , de la Lu
cífera ó Luz dudosa. 140.
Lugares grandes contados en el número de ciu
dades. ' I(53.
Luna. Véase Mar.
Lusitánia. ig2 y sig. Sobre ella viven bárba
ros. 147. Lusitánia toca á la Bética. 166.
Lusitánia se llamó también Caláica. 167,
Lusitanos. Su region. 139. Guerra contra ellos,
y victoria de Bruto. I52. Que muchos se lla
maron Caláicos. Ibid. Latrocinios , armas , sa
crificios y vida délos Lusitanos. 1^4. Délos
Lusitanos Montañeses. !-,»
Lusones Orientales. 160.
Luz dudosa. Véase Lucifer.

M
Macrócolon , género de honda. x6.8.
Madres que mataban á sus hijos en la guerra
Cantábrica. 164.
Malaca ó Ménaca , ciudad. 1 gtf.
Manufacturas de lino. 160.
Manzanas de las Hespérides. igo.
Mar. Dónde se junta el interno con el exter
no. 139. Cavidades entre el mar y la tier
ra. 142. Aumentos ó crecientes del mar. 143. <
Sus derramamientos. Ibid. Que los refluxos
son dañosos. Ibid. Abundancia del mar ex
terno. 145. Por dónde acababan las crecien
tes del mar. 148. Causa de la ida y venida,
ó
índice. 281
6 fluxo y refluxo de sus aguas. 133. El ac
to de recibir y despedir el ayre tiene algu
na semejanza con el fluxo y refluxo del
mar. 173. Hay una maréa diurna, otra men
sual , y otra siguiendo en cierto modo la Lu
na. Ibid. Mudanzas anuales del mar. 174. So
bre el fluxo y refluxo. Ibid.
Marce'o (M. ) fundo á Córdoba. 141. Exigió un
tributo de Celtibéria. 162.
Marido ( el) dotaba á la muger entre los Cán
tabros. 16g. Maridos que se acostaban en lu
gar de sus mugeres , quando estas parían. Ibid.
Marte. Le sacrificaban un cabron , los cauti
vos y caballos. i<a..
Masilienses (Tres lugares de los). i¿p.
Matrimonios contraidos al modo de los Grie
gos. ISS.
Mauritania (Extremos de la). i<o.
Melancraneo para hacer hondas. 168.
Melaría. I4o.
Melso ría 167.
Ménaca ó Malaca , ciudad. . ig<y.
Meneláo (Viage ó peregrinacion de). igo.
Menestéo (Oráculo y puerto de). 140..
Meninge , isla de los Lotófagos. j g7.
Menoba , ciudad. . . 143.
Metagonios , gente Numídica. . 170.
Metales. Los lugares , en que los hay, es pre- T
ciso sean altos y casi estériles. 14». Abun- .,
dancia ó fertilidad de metales en Turdeta- .
nia y su region contigua. 14a. España está
llena de ellos. Ibid. Que es raro tener en una
region riquezas de todo género de metales
y de frutos. Ibid. Metales de los Galos en l
el monte Cemmeno , y sobre el mismo Py-
renéo. Ibid. Dicho de Faléreo , h ablando so
bre
282 INDICE.
bre los metales Áticos. 147. Metales platea
dos junto á la nueva Cartago. Ibid. Rédito
de los metales al pueblo Romano. 148. Me
tales de oro , pertenecientes por la mayor
parte á la República. Ibid. Metal de plomo
cavadizo junto á Castáon. Ibid. Metales de
estaño y plomo en las islas Casitérides. 173.
Metelo , por sobrenombre Baleárico. 167.
.Mileto. Allí murio Sex. Pompeyo. 141*
Minerva (Templo de). 149 y 1g7*
Minio y Benis , río. 153. Delante de sus bo
cas hay una Isla. Ibid.
Minos. 1g0.
Monte , llamado de plata , ó tnons Argenta-
rius et sirgénteut. 148.
Morón, ciudad. 1g2. Bruto. usó de ella como
de un alcázar. Ibid.
Muerte. Era costumbre Española ofrecerse á
ella por los amigos. i6¿.
Mugeres (Danza de), igg. Mugeres que se es
tregaban los dientes con orines. 164. Su
adorno bárbaro. Ibid. Su fortaleza y agri
cultura. i(Sg. Que , quando parían , manda
ban acostar á sus maridos y los cuidaban.
Ibid. Suceso de una cavadora con dolores de
parto. Ibid. Las mugeres tenían cierto impe
rio en los maridos. Ibid.
Muliadas , río. A'jp 1g3.
Munda , ciudad. 141. Batalla de César jun
to á Munda. 160.

N
Navegaciones de ríos peligrosos. 143. Navega
cion desde Gades á las Casitérides , encu
bierta por los Fenices. 17g. Envidia y mal
dad
índice. 283
dad de un piloto contra los Romanos. 176.
Naves de carga. En dónde están las mayo
res. 143. Naves M yriagogas. 151. Muelle se
guro para naves en Tárraco. 1S9«
Nebrisa , ciudad. 143.
Nerio , promontorio. 137 y 1g3.
Niño reciennacido , que fué llevado á una tuen-
tecilla , donde le lavaron y envolvieron. l6"¡J.
Noche ( la ) sigue al punto que el Sol se po
ne. 138. Era de mal agüero y cercana de
Pluton. 149.
Noéga , ciudad. 167.
Nombres (los) mas célebres son Griegos. 166.
Nombres de España é Iberia. Ibid. Cómo fué
ron impuestos los nombres á cada lugar , y
el nombre de boca á los estrechos. 171.
Numancia , ciudad célebre. 162. Valor de los
Numantinos , que toleraron el cerco contra los
Romanos. Ibid*

O
Obulco. 141. En quantos días vino César á
Obulco desde Roma. 160,
Océano. Su movimiento. 173. Véase Estuario.
Odyséa ó Ulyséa de Homero. Qué fué lo que
. le dio ocasion para escribirla. 145.
Ofiusa , isla. 167.
Ofrecer la vida por sus amigos era costumbre
. entre los Españoles. i5<.
Oleatro , ciudad. 1 gp.
OWido ( Rio del ) , y etimología de su nom
bre. IS3.
Onoba , ciudad. 143 y 170.
Opsicela , ciudad llamada así por el nombre de
uno que pasó á Italia con Antenor. 137.
Ora-
284 INDICE.
Oráculo de Tyro. top.
Oretánia (Ciudades de). 151.
Oretános. 130 , 141 , i$4 , tgó. , 162 y 163.
Oria, ciudad. 15 2.
Orines detenidos en las cisternas. Quiénes se la
vaban con ellos. 1(54,
Oro junto á las Cotinas. iga. Polvos de este
metal : su cocimiento y purificacion con tier
ra de alumbre : por qué se derrite mas fá
cilmente con la escoria del bronce. 146 y 148.
Oróspeda, monte. 161 y 163.
Oryges. 145.
Osea. 161. Su distancia de Ilerda. Ibid.
Ostia , atarazana de Roma. i 145.
Otides. Tiene muchas España. 163.

Pádua (Caballeros de). 16*9.


Paláncia , ciudad. 160.
Palas ó Bolas. 146*.
Palma , ciudad. 167.
Pan. En dónde no se les daba á los muchachos,
sin acertar antes al blanco. l<58.
Parricidas (Suplicio de los). lg¿.
Paseos de algunos Centuriones Romanos , en
presencia de los Vetones , historia graciosa. 164.
Pastos, focase Bondad.
Pececillos de púrpura y caracoles , cerca de
Carteya. 143.
Pelear con tocados y adornos en la frente. 1^4.
Pelear desceñidos , era usado entre los habi
tantes de las Baleares. 168.
Peloro , torre. 171.
Peñascos. Quiénes precipitaban desde ellos á los
condenados á muerte, igj. Peñascos Cyanéos. 149.
Per-
índice. 285
Pemiles de Cerretánia , tan buenos como los
Cantábricos. i53.
Pesebres de plata. j¿j.
Petos ó corazas , que cubren desde el cuello al
pecho , como las cotas de malla. j¿¿.
Piedra. Véase Torre de Capion.
Piedras amontonadas , segun costumbre , por los
pasageros ; y ficcion antigua. 138. Los parri
cidas eran apedreados fuera de sus límites ó
junto á ríos. !gv
Pieles extendidas por Metelo sobre las tablas y
mástiles de sus navios para recibir los gol
pes de las hondas. jgj,
Pindaro. *SS>i7oyi73.
Pityusas , dos islas. K5»
Planetas , piedras. 143 y 170.
Planesia , isla. 1 gp.
Plata. Hay mucha en los lugares cerca de Hipa
y Sisapon. 142. Cómo se quema y el oro
permanece. 146. Hornos de este metal. Ibid.
Talento Euboico de plata. 147. Terron ó mi
neral. 148. Tiendas particulares donde le tra-
"in. Ibid. Monte de plata. Ibü.
Pletauros. j¿¿.
Plomo cavadizo. I48.
Ftumbaría , isla. - jgp.
Pluton. Su domicilio. 147. Cercano del Infiér-
_ no- 149-
Polybio habla de Tiberio Graco. 163.
Pompelon , ciudad. 161,
Pompeyo. Véanse Cn. Pompeyo , Sex. Pom-
peyo y Trofeos.
Ponto. Carnes y peces compuestos allí. 144.
Pozos. Dos en el Templo de Hércules. 17». Y
otros en Gades. j»*
Prefectos. Sus navegaciones á España. igo. Pre-
fec-
286 índice.
fecto de los Romanos en ella. ióf.
Procuradores del César en España. Ibid.
Proteo. * go.
Pub. Craso- Su navegacion á las Islas Casité-
rides. 17o"*
Pueblos que no necesitan de bebida. Pueblos de
España que vestían toga al modo de Italia. 167.
Puente de piedra. itfi.
Puertas de Gades. 170 y 172.
Pulpos cerca de Carteya. 145.
Púnica ficcion. 170.
Pyrenéo , monte, tgfi. Divide la Galia de la
España. 137. Metales sobre el mismo Pyre
néo. '46. Montes Pyrenéos. 159. Tierra in
cluida en ellos y el lado septentrional. 161.
Lado del Pyrenéo hacia España. Ibid. Lado
de Galia. ifo.
Pyteas. Su ignorancia. 158.

R
Radamanto. 1S0,
Raíz de un árbol , que cortada despide un hu
mor parecido al Bermellon. 173. Raíces pa
ra teñir. ,"3»
Rama. Véase Brazo.
Ratones. A la multitud de ellos suelen seguir
infinitos daños y peste*. i6g. Su caza. Ibid.
Rebaño ( el ) se sofocaba en espacio de cincuen
ta dias, si no le sacaban alguna sangre. 169.
Regiones. En ,las conocidas y nobles fácilmen
te se dan á conocer la variedad de tier
ras , mutacion de nombres y otras cosas. i6'óV
Reos de muerte y suplicios antiguos. igj.
Ríos ó torrentes , que traen oro mezclado con
arena. 146. Ríos salados. Véase Fluxo.
Ró-
índice. 287
Ródope. Sus fundadores. _ 160.
Romanos (los) pusieron fin á los latrocinios. 154.

Sacrificar de noche no era lícito. 13S. Quiénes


sacrificaban á Marte un cabron , cautivos y
caballos. igg.
Sacro promontorio. Era tenido por el punto
mas occidental , no solo de Europa , sino del
universo. 137. Costa adyacente al Sacro pro
montorio. 138. Millas que hay desde aquí al
Guadiana. 140. Distancia del mismo Cabo á
Gades. 148. Progresion noticiosa desde este
promontorio hasta otra parte de la costa ma
rítima i hacia el Tajo. 1 «¡i.
Sagunto , ciudad. 159. Sus fundadores y destruc
tor, lbid. Lugar de las ruinas. 167.
Saladas (Carnes). 144 y 156.
Salciatos ó Salcietas. Su finura en el texido. 144.
Sales cavadizas. Ibid. Sal purpúrea , que se vuel
ve blanca al machacarla. igg.
Salsa de arenques muy buena y estimada. 159.
Saltar. Como lo hacían las mugeres en Bas-
tetania. _ igg.
Saturno. Su templo. 169.
Sayales. Véanse Capotes.
Scytas. Su fiereza. jo"g.
Segesama, ciudad. 160.
Segida , ciudad. Ibid.
Segóbriga, ciudad. Ibid.
Seleuco , oriundo del mar Roxo. 174.
Selva siempre verde. 161.
Serguncia. !(52.
Sertório , vandolero. ig8. Guerra de este y Mé
telo , en dónde, ióo. Guerra de Sertorio con
tra
288 índice.
tra Pompeyo. 161. Ultima guerra de Sertó-
rio. Ibid. Que fué echado de Celtiberia. Ibid.
Sétabis , ciudad. I60.
Sex. Pompeyo. Fué muerto por los Soldados de
M. Antonio. 141. Guerra de Sexto Pompe
yo «ontra los Embaxadores del César. 161.
Sicilia rebelde. 141.
Sidetanos. 163.
Silano , historiador. 172.
Sisa pon. Hay mucha plata en los lugares cer
canos. 142.
Sol. Fábula de que quando se pone es mayor,
y de que hace estrépito. 138. La magnitud
del Sol parece aumentarse por el oriente y
el ocaso. Ibid. De su conversion. 173.
Sucron ,'Rio , boca y ciudad de ). 158 y 163.
Symplegades , piedras. 149 y 170.
Syrte pequeña. igy.

Tajo , río. 139 y sig. Sus desembocaduras. ii¡t.


Dos dispersiones del Tajo. 1 j 1 y sig. Pueblos
al septentrion , oriente , mediodía y occiden
te del Tajo. igs. Número de las naciones
. que habitan entre él y los Artabros. rS4«
Talento Eubóico de plata. . 147.
Tárracon , ciudad. 159 y sig. Sus fundadores y
otras cosas. Ibid.
Tártaro (Ficcion del). 149.
Tarteso. Parece que los antiguos llamaron así
al Bétis. 148. Tarteso, ciudad y río. Ibid.
Tartésis , region. Ibid. Tarteso estaba en lo
último del Ocaso. 149. Fué nombre conoci
do por Homero. Ibid. Felicidad y larga vi
da de los Tartésios. 151. Algunos dicen ser.
Tar-
índice. 289
Tarteso lo mismo que Carteya. Ibid.
Telas exquisitas de corteza de árbol. 175.
Teñir, léanse Raíces. "
Teopompo , escritor. 163.
Teucro. Algunos le siguiéron en la guerra. 157.
Texido fino de los Salcietas ó Salciatos. 144.
Tiberio , succesor de Augusto. 1g6:
Tiberio Graco derribó trescientas ciudades de
Celtiberia. 163.
[Tiendas u oficinas donde trabajan el cobre y la
plata. 146 y 148.
Tierra habitada hacia el ocaso. 137. Tierra ó
campo que se estanca y es navegable como
, "el mar. i;J4.
.Tinióstenes , escritor. ,., 140.
Tinajas ó botas y vasijas de plata. Jgi.
Ting's de Mauritania. 140.
Tiradores diestros con honda. 167.
Togados ó estolados. Qué Españoles fueron 11a-
, 1 nados así. igi.
Torre de Capion , fundada en piedra que ro
dea al mar , obra admirable. 140. Torre ó
. Pygo , desde el qual corre un esparcimien-
. to. icji. Torrecilla de los de Régio. 17 r. Tor
re de Peloro. Ibid.
Torrentes que traían oro mezclado con arena. 146.
Tósigo 3 era costumbre de España hacerle y con-
, servarle. Para qué efecto. 16^;
Traces. Su fiereza. Ibid.
Troféos de Pompeyo. ig6 y 159.
Trompeta. Idéase Baile.
Troya. Aquellos que saliéron de su guerra , in-
¡ festaron tanto á los vencedores , como á los
, vencidos. 149 y igo;
Tucis , ciudad. 141;
Tuisos. 156.
x Tú-
290 INDICE.
Túnicas muy largas , quienes las llevaban. 168.
Túnicas hasta ios pies. 175.
Turdetánia ó Turditánia. 139 y 141. Su opu
lencia en varias cosas. 142 y sig. Géneros
• que se 'sacan de Turdetánia. 144. Costa ma-
■ rítima y riquezas de ella. 14^.
Turdetanos ó Turditanos. 139. Usaban pesebres
y vasijas de plata, iiji. Felicidad , civilidad,
mansedumbre y otras cosas de los Turditanos. Ibid.
Túrdulos. 139. Su expedicion. 153.

V.UyZ
Vaccéos. ««¡2 y iría.
Vacua , río. 153.
Várdulos. léanse Barduetas.
Vascones. 161.
Vasos de cera. ig<¡.
Veneracion de un Dios sin nombre entre los
• Celtíberos. 164.
Verones. ii¡8 y 162.
Vestidos de flores entre las mugeres Basteta-
nas. 155. Vestidos negros. Ibid. y 175.
Véteres. 160.
Vetones. 139, xg2 y 161. Sujetos al yugo dé
los Romanos. 164. Historia graciosa. Ibid.
Vieja ( Ciudad ). 160.
yiriato, vandolero. ig8.
Vitriolo. 163.
Ulyséa, ciudad. 149 y igf. Véase Odyséa.
Ulyses. Infinitos vestigios de su expedicion. 149.
Otros viages y adonde. 1 50. Memoria de sus
peregrinaciones. 15)7.
Urso , ciudad. 141.
Zeies , ciudad vecina á Tingis. • 140.

* FIN.
.,"
•.•■MT""". '*"*■ " .' 'TTTT'.

Vous aimerez peut-être aussi