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Principio de funcionamiento[editar]

Los dispositivos variadores de frecuencia operan bajo el principio de que la velocidad síncrona
de un motor de corriente alterna (CA) está determinada por la frecuencia de AC suministrada y
el número de polos en el estator, de acuerdo con la relación:

Donde RPM = Revoluciones por minuto, f = frecuencia de suministro AC (Hercio), p =


Número de polos
las cantidades de polos más frecuentemente utilizadas en motores síncronos o
en Motor asíncrono son 2, 4, 6 y 8 polos que, siguiendo la ecuación citada, resultarían
en 3600 RPM, 1800 RPM, 1200 RPM y 900 RPM respectivamente para motores
sincrónicos únicamente y a la frecuencia de 60 Hz. Dependiendo de la ubicación
geográfica funciona en 50Hz o 60Hz.
En los motores asíncronos las revoluciones por minuto son ligeramente menores por el
propio asincronismo que indica su nombre. En estos se produce un desfase mínimo entre
la velocidad de rotación (RPM) del rotor (velocidad "real" o "de salida") comparativamente
con la cantidad de RPM's del campo magnético (las cuales si deberían cumplir la ecuación
arriba mencionada tanto en Motores síncronos como en motores asíncronos ) debido a
que sólo es atraído por el campo magnético exterior que lo aventaja siempre en velocidad
(de lo contrario el motor dejaría de tener par en los momentos en los que alcanzase al
campo magnético)

La forma de variar la frecuencia básicamente consta de cambiar el ciclo de trabajo (tiempo ON


y tiempo OFF en un período ) de una onda cuadrada periódica, de tal forma que el valor medio
de la tensión (el promedio) a lo largo del tiempo varíe entre V máximo y V mínimo. .(ver figura
a su derecha). La velocidad con que variamos el ciclo de trabajo, o sea su valor medio, será la
frecuencia de variación del valor medio.
Esto físicamente se logra a través de "llaves electrónicas" de conmutación que son los IGBT
(transistores bipolares de compuerta aislada) que actúan como interruptores que al cerrarse y
abrirse por medio de un software especifico conforman la onda cuadrada, que permite obtener
la señal sinusoidal .

Controlador del VFD[editar]


El controlador de dispositivo de variación de frecuencia está formado por dispositivos de
conversión electrónicos de estado sólido. El diseño habitual primero convierte la energía de
entrada CA en CC usando un puente rectificador. La energía intermedia CC es convertida en
una señal quasi-senoidal de CA usando un circuito inversor conmutado. El rectificador es
usualmente un puente trifásico de diodos, pero también se usan rectificadores controlados.
Debido a que la energía es convertida en continua, muchas unidades aceptan entradas tanto
monofásicas como trifásicas (actuando como un convertidor de fase, un variador de
velocidad).

Tan pronto como aparecieron los interruptores semiconductores, fueron introducidos en los
Variadores de Frecuencia, siendo aplicados en inversores de todas las tensiones disponibles.
Actualmente, los transistores bipolares de puerta aislada (IGBTs)son usados en la mayoría de
circuitos inversores.
Las características del motor CA requieren una variación proporcional del voltaje cada vez que
la frecuencia es variada. Por ejemplo, si un motor está diseñado para trabajar a 460 voltios a
60 Hz, el voltaje aplicado debe reducirse a 230 volts cuando la frecuencia es reducida a 30 Hz.
Así la relación voltios/hertzios deben ser regulados en un valor constante (460/60 = 7.67 V/Hz
en este caso). Para un funcionamiento óptimo, otros ajustes de voltaje son necesarios, pero
nominalmente la constante es V/Hz es la regla general. El método más novedoso y extendido
en nuevas aplicaciones es el control de voltaje por Modulación de la Anchura de Pulso (PWM).

PWM
La modulación por ancho de pulsos (también conocida como PWM, siglas en inglés
de pulse-width modulation) de una señal o fuente de energía es una técnica en la que se
modifica el ciclo de trabajo de una señal periódica (una senoidal o una cuadrada, por ejemplo),
ya sea para transmitir información a través de un canal de comunicaciones o para controlar la
cantidad de energía que se envía a una carga.
El ciclo de trabajo de una señal periódica es el ancho relativo de su parte positiva en relación
con el período. Expresado matemáticamente:

D es el ciclo de trabajo

es el tiempo en que la función es positiva (ancho del pulso)


T es el período de la función
La construcción típica de un circuito PWM se lleva a cabo mediante un
comparador con dos entradas y una salida. Una de las entradas se conecta a
un oscilador de onda dientes de sierra, mientras que la otra queda disponible
para la señal moduladora. En la salida la frecuencia es generalmente igual a
la de la señal dientes de sierra y el ciclo de trabajo está en función de la
portadora.
La principal desventaja que presentan los circuitos PWM es la posibilidad de
que haya interferencias generadas por radiofrecuencia. Estas pueden
minimizarse ubicando el controlador cerca de la carga y realizando un filtrado
de la fuente de alimentación.

En los motores[editar]
La modulación por ancho de pulsos es una técnica utilizada para regular la velocidad de giro
de los motores eléctricos de inducción o asíncronos. Mantiene el par motor constante y no
supone un desaprovechamiento de la energía eléctrica. Se utiliza tanto en corriente continua
como en alterna, como su nombre lo indica, al controlar: un momento alto (encendido o
alimentado) y un momento bajo (apagado o desconectado), controlado normalmente
por relès (baja frecuencia) o MOSFET o tiristores (alta frecuencia).
Otros sistemas para regular la velocidad modifican la tensión eléctrica, con lo que disminuye el
par motor; o interponen una resistencia eléctrica, con lo que se pierde energía en forma de
calor en esta resistencia.
Otra forma de regular el giro del motor es variando el tiempo entre pulsos de duración
constante, lo que se llama modulación por frecuencia de pulsos.
En los motores de corriente alterna también se puede utilizar la variación de frecuencia.
La modulación por ancho de pulsos también se usa para controlar servomotores, los cuales
modifican su posición de acuerdo al ancho del pulso enviado cada un cierto período que
depende de cada servo motor. Esta información puede ser enviada utilizando
un microprocesador como el Z80, o un microcontrolador (por ejemplo, un PIC 16F877A,
16F1827, 18F4550, etc. de la empresa Microchip), o un microcontrolador de hardware libre
como es arduino.

VENTAJAS DE VFD

Regulación del flujo en bombas centrífugas


En muchas ocasiones es preciso trabajar durante mucho tiempo en condiciones de caudal inferiores al
nominal; en esta situación se pueden realizar planteamientos que permitan ahorros
energéticosconsiderables, implantando el sistema de regulación de caudal más apropiado.

Los métodos de regulación de caudal se obtienen mediante: modificación de la curva presión-caudal del
sistema sobre el que trabaja la bomba; modificación de la curva presión-caudal de la bomba; modificación
simultánea de ambas características (sistema y bomba); arranque o paro de la bomba.

Leyes de afinidad
Las bombas centrífugas se comportan de acuerdo a las leyes de afinidad, éstas nos indican que: el flujo tiene
un comportamiento lineal con la velocidad; la presión tiene un comportamiento cuadrático con la velocidad; la
potencia de entrada tiene un comportamiento cúbico con la velocidad.

Ventajas de los variadores de velocidad


Con ellos podemos acelerar y desacelerar a voluntad, controlar la velocidad y mantener el factor de potencia.

Ajustando el torque motor a la carga resistente logramos eliminar el choque hidráulico o golpe de ariete. Al
acelerar suavemente el aire de la tubería vacía, se va retirando lentamente y no golpea las válvulas de
retención al abrir. Además evitamos la cavitación del impulsor en el momento de arranque cuando el agua
está detenida. Al parar el motor suavemente reducimos muchísimo el golpe de ariete. Evitando golpes de
ariete y demás, se aumenta la vida mecánica del motor. Por otro lado ahorramos energía ya que podemos
regular el caudal.

Un contactor es un componente electromecánico que tiene por objetivo establecer o


interrumpir el paso de corriente, ya sea en el circuito de potencia o en el circuito de mando, tan
pronto se dé tensión a la bobina (en el caso de contactores instantáneos). Un contactor es un
dispositivo con capacidad de cortar la corriente eléctrica de un receptor o instalación, con la
posibilidad de ser accionado a distancia, que tiene dos posiciones de funcionamiento: una
encendido y otra apagado, cuando no recibe acción alguna por parte del circuito de mando, y
otra inestable, cuando actúa dicha acción. Este tipo de funcionamiento se llama de "todo o
nada". En los esquemas eléctricos, su simbología se establece con las letras KM seguidas de
un número de orden.

El relé (en francés, relais, “relevo”) o relevador es un dispositivo electromagnético. Funciona


como un interruptor controlado por un circuito eléctrico en el que, por medio de una bobina y
un electroimán, se acciona un juego de uno o varios contactos que permiten abrir o cerrar
otros circuitos eléctricos independientes. Fue inventado por Joseph Henry en 1835.
Dado que el relé es capaz de controlar un circuito de salida de mayor potencia que el de
entrada, puede considerarse, en un amplio sentido, como un amplificador eléctrico. Como tal
se emplearon en telegrafía, haciendo la función de repetidores que generaban una nueva
señal con corriente procedente de pilas locales a partir de la señal débil recibida por la línea.
Se les llamaba "relevadores".1

Relé térmico

Relé térmico.

Los relés térmicos son los aparatos más utilizados para proteger los motores contra las
sobrecargas débiles y prolongadas. Se pueden utilizar en corriente alterna o continua.1 Este
dispositivo de protección garantiza:

 optimizar la durabilidad de los motores, impidiendo que funcionen en condiciones de


calentamiento anómalas.
 la continuidad de explotación de las máquinas o las instalaciones evitando paradas
imprevistas.
 volver a arrancar después de un disparo con la mayor rapidez y las mejores condiciones
de seguridad posibles para los equipos y las personas.

Sus características más habituales son:

Compensados[editar]
La curvatura que adoptan las biláminas no sólo se debe al recalentamiento que provoca la
corriente que circula en las fases, sino también a los cambios de la temperatura ambiente.
Este factor ambiental se corrige con una bilámina de compensación sensible únicamente a los
cambios de la temperatura ambiente y que está montada en oposición a las biláminas
principales. Cuando no hay corriente, la curvatura de las biláminas se debe a la temperatura
ambiente. Esta curvatura se corrige con la de la bilámina de compensación, de tal forma que
los cambios de la temperatura ambiente no afecten a la posición del tope de sujeción. Por lo
tanto, la curvatura causada por la corriente es la única que puede mover el tope provocando el
disparo.
Los relés térmicos compensados son insensibles a los cambios de la temperatura ambiente,
normalmente comprendidos entre –40 °C y + 60 °C.

Sensibles a una pérdida de fase[editar]


Este es un dispositivo que provoca el disparo del relé en caso de ausencia de corriente en una
fase (funcionamiento monofásico). Lo componen dos regletas que se mueven solidariamente
con las biláminas. La bilámina correspondiente a la fase no alimentada no se deforma y
bloquea el movimiento de una de las dos regletas, provocando el disparo. Los receptores
alimentados en corriente monofásica o continua se pueden proteger instalando en serie dos
biláminas que permiten utilizar relés sensibles a una pérdida de fase. Para este tipo de
aplicaciones, también existen relés no sensibles a una pérdida de fase.

Rearme automático o manual[editar]


El relé de protección se puede adaptar fácilmente a las diversas condiciones de explotación
eligiendo el modo de rearme Manual o Auto (dispositivo de selección situado en la parte frontal
del relé), que permite tres procedimientos de rearranque:

 Las máquinas simples que pueden funcionar sin control especial y consideradas no
peligrosas (bombas, climatizadores, etc.) se pueden rearrancar automáticamente cuando
se enfrían las biláminas en un determinado lapso de tiempo.
 En los automatismos complejos, el rearranque requiere la presencia de un operario por
motivos de índole técnica y de seguridad. También se recomienda este tipo de esquema
para los equipos de difícil acceso.
 Por motivos de seguridad, las operaciones de rearme del relé en funcionamiento local y de
arranque de la máquina debe realizarlas obligatoriamente el personal calificado.
Graduación en “amperios motor”[editar]
Visualización directa en el relé de la corriente indicada en la placa de características del motor.
Los relés se regulan con un pulsador que modifica el recorrido angular que efectúa el extremo
de la bilámina de compensación para liberarse del dispositivo de sujeción que mantiene el relé
en posición armada. La rueda graduada en amperios permite regular el relé con mucha
precisión. La corriente límite de disparo está comprendida entre 1,05 y 1,20 veces el valor
indicado.

Principio de funcionamiento de los relés térmicos[editar]


Los relés térmicos poseen tres biláminas compuestas cada una por dos metales con
coeficientes de dilatación muy diferentes unidos mediante laminación y rodeadas de un
bobinado de calentamiento. Cada bobinado de calentamiento está conectado en serie a una
fase del motor. La corriente absorbida por el motor calienta los bobinados, haciendo que las
biláminas se deformen en mayor o menor grado según la intensidad de dicha corriente. La
deformación de las biláminas provoca a su vez el movimiento giratorio de una leva o de un
árbol unido al dispositivo de disparo.
Si la corriente absorbida por el receptor supera el valor de reglaje del relé, las biláminas se
deformarán lo bastante como para que la pieza a la que están unidas las partes móviles de los
contactos se libere del tope de sujeción. Este movimiento causa la apertura brusca del
contacto del relé intercalado en el circuito de la bobina del contactor y el cierre del contacto de
señalización. El rearme no será posible hasta que se enfríen las biláminas.

Clases de disparo[editar]
Curvas de disparo.

Los relés térmicos se utilizan para proteger los motores de las sobrecargas, pero durante la
fase de arranque deben permitir que pase la sobrecarga temporal que provoca el pico de
corriente, y activarse únicamente si dicho pico, es decir la duración del arranque, resulta
excesivamente larga. La duración del arranque normal del motor es distinta para cada
aplicación; puede ser de tan sólo unos segundos (arranque en vacío, bajo par resistente de la
máquina arrastrada, etc.) o de varias decenas de segundos (máquina arrastrada con mucha
inercia), por lo que es necesario contar con relés adaptados a la duración de arranque. La
norma IEC 947-4-1-1 responde a esta necesidad definiendo tres tipos de disparo para los
relés de protección térmica:
• Relés de clase 10: válidos para todas las aplicaciones corrientes con una duración de
arranque inferior a 10 segundos o menos al 600% de su corriente nominal
• Relés de clase 20: admiten arranques de hasta 20 segundos de duración o menos al 600%
de su corriente nominal.
• Relés de clase 30: para arranques con un máximo de 30 segundos de duración o menos al
600% de su corriente nominal.

Guardamotor

Un guardamotor con sus partes internas.

Un guardamotor es un interruptor magnetotérmico, especialmente diseñado para la


protección de motores eléctricos. Este diseño especial proporciona al dispositivo una curva de
disparo que lo hace más robusto frente a las sobreintensidades transitorias típicas de los
arranques de los motores. El disparo magnético es equivalente al de otros interruptores
automáticos pero el disparo térmico se produce con una intensidad y tiempo mayores. Su
curva característica se denomina D o K.
Las características principales de los guardamotores, al igual que de otros interruptores
automáticos magnetotérmicos, son la capacidad de ruptura, la intensidad nominal o calibre y la
curva de disparo. Proporciona protección frente a sobrecargas del motor y cortocircuitos, así
como, en algunos casos, frente a falta de fase.
Pero contrariamente a lo que ocurre con los pequeños interruptores automáticos
magnetotérmicos, los guardamotores son regulables; resultado de lo cual se dispone en una
sola unidad de las funciones que de otra manera exigirían por ejemplo la instalación de al
menos tres unidades a saber: interruptor, contactor y rele térmico.

Un interruptor magnetotérmico, interruptor termomagnético o llave térmica, es un


dispositivo capaz de interrumpir la corriente eléctrica de un circuito cuando ésta sobrepasa
ciertos valores máximos. Su funcionamiento se basa en dos de los efectos producidos por la
circulación de corriente en un circuito: el magnético y el térmico (efecto Joule). El dispositivo
consta, por tanto, de dos partes, un electroimán y una lámina bimetálica, conectadas en serie
y por las que circula la corriente que va hacia la carga. Al igual que los fusibles, los
interruptores magnetotérmicos protegen la instalación contra sobrecargas y cortocircuitos.
Funcionamiento[editar]

Composición de un magnetotérmico.

Operación de un magnetotérmico.

Al circular la corriente por el electroimán, crea una fuerza que, mediante un dispositivo
mecánico adecuado (M), tiende a abrir el contacto C, pero sólo podrá abrirlo si la intensidad I
que circula por la carga sobrepasa el límite de intervención fijado.
Este nivel de intervención suele estar comprendido entre tres y veinte veces (según la letra B,
C, D, etc.) la intensidad nominal (la intensidad de diseño del interruptor magnetotérmico) y su
actuación es de aproximadamente unas 25 milésimas de segundo, lo cual lo hace muy seguro
por su velocidad de reacción.
Esta es la parte destinada a la protección frente a los cortocircuitos, donde se produce un
aumento muy rápido y elevado de corriente.
La otra parte está constituida por una lámina bimetálica (representada en rojo) que, al
calentarse por encima de un determinado límite, sufre una deformación y pasa a la posición
señalada en línea de trazos lo que, mediante el correspondiente dispositivo mecánico (M),
provoca la apertura del contacto C.
Esta parte es la encargada de proteger de corrientes que, aunque son superiores a las
permitidas por la instalación, no llegan al nivel de intervención del dispositivo magnético. Esta
situación es típica de una sobrecarga, donde el consumo va aumentando conforme se van
conectando aparatos.
Ambos dispositivos se complementan en su acción de protección, el magnético para los
cortocircuitos y el térmico para las sobrecargas. Además de esta desconexión automática, el
aparato está provisto de una palanca que permite la desconexión manual de la corriente y el
rearme del dispositivo automático cuando se ha producido una desconexión. No obstante, este
rearme no es posible si persisten las condiciones de sobrecarga o cortocircuito.
Incluso volvería a saltar, aunque la palanca estuviese sujeta con el dedo, ya que utiliza un
mecanismo independiente para desconectar la corriente y bajar la palanca.
El dispositivo descrito es un interruptor magnetotérmico unipolar, por cuanto sólo corta uno de
los hilos del suministro eléctrico. También existen versiones bipolares y para corrientes
trifásicas, pero en esencia todos están fundados en los mismos principios que el descrito.
Se dice que un interruptor es de corte omnipolar cuando interrumpe la corriente en todos los
conductores activos, es decir las fases y el neutro si está distribuido.
Las características que definen un interruptor termomagnético son el amperaje, el número de
polos, el poder de corte y el tipo de curva de disparo (B, C, D, MA). (por ejemplo, Interruptor
termomagnético C-16A-IV 4,5kA, que necesita unos 10x16A -entre 5 y 10 veces el amperaje
indicado- para saltar en menos de un segundo y proteger el circuito. Si fuese B-16A-IV 4,5kA
necesitaria unos 5x16 A (entre tres y cinco veces el valor nominal indicado). Una corriente
mantenida de 16 A provocaria el disparo al cabo de una hora.
Conductor eléctrico

Conductor eléctrico de cobre.

Un conductor eléctrico es un material que ofrece poca resistencia al movimiento de la carga


eléctrica.

Calibre de alambre estadounidense


Calibre de alambre estadounidense (en inglés american wire gauge o AWG) es una
referencia de clasificación de diámetros. En muchos sitios de Internet y también en libros y
manuales, especialmente de origen norteamericano, es común encontrar la medida
de conductores eléctricos (cables) indicados con la referencia AWG. Cuanto más alto es este
número, más delgado es el alambre. El alambre de mayor grosor (AWG más bajo) posee
menos resistencia interna y, por lo tanto, soporta mayores corrientes a distancias más
grandes.

Ley matemática[editar]
La escala obedece prácticamente a los pasos sucesivos del proceso de estirado del alambre
que existía en 1857. Se seleccionaron los diámetros más grueso, de 0,4600 pulgadas (calibre
4/0), y más delgado, de 0,0050 pulgadas (calibre 36); se determinaron 39 dimensiones entre
dichos calibres. De tal suerte, que la razón entre un diámetro y el siguiente está dada por la
progresión geométrica:

Es decir, la razón entre dos diámetros consecutivos en la escala AWG es constante e


igual a 1,1229.
Por esta razón los pasos de los calibres con respecto al diámetro son regresivos, pues
corresponden en realidad a los pasos del proceso de estirado del alambre. No obstante,
para los calibres de mayor grosor, se optó la solución de identificarlos directamente por el
área en el sistema inglés de medida:

 Mil, para los diámetros, es decir una milésima de pulgada.


 Circular mil, para las áreas, unidad que representa el área del círculo de un mil de
diámetro, es decir, 0,7854 mils cuadrados.
 kcmil, para secciones de mayor área. Estas siglas también eran conocidas hasta
finales del siglo XX como MCM o KCM.

Transformador
Transformador
Pequeño transformador eléctrico

Tipo Pasivo

Principio de Inducción electromagnética


funcionamiento

Invención Zipernowsky, Bláthy y Deri (1884)

Primera producción En 1886

Símbolo electrónico

Terminales Dos terminales para el bobinado primario y


dos para el bobinado secundario o tres si
tiene tap o toma central

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Se denomina transformador a un dispositivo eléctrico que permite aumentar o disminuir


la tensión en un circuito eléctrico de corriente alterna, manteniendo la potencia.
La potencia que ingresa al equipo, en el caso de un transformador ideal (esto es, sin
pérdidas), es igual a la que se obtiene a la salida. Las máquinas reales presentan un pequeño
porcentaje de pérdidas, dependiendo de su diseño y tamaño, entre otros factores.
El transformador es un dispositivo que convierte la energía eléctrica alterna de un cierto nivel
de tensión, en energía alterna de otro nivel de tensión, basándose en el fenómeno de
la inducción electromagnética. Está constituido por dos bobinas de material conductor,
devanadas sobre un núcleo cerrado de material ferromagnético, pero aisladas entre sí
eléctricamente. La única conexión entre las bobinas la constituye el flujo magnético común
que se establece en el núcleo. El núcleo, generalmente, es fabricado bien sea de hierro o de
láminas apiladas de acero eléctrico, aleación apropiada para optimizar el flujo magnético. Las
bobinas o devanados se denominan primario y secundario según correspondan a la entrada o
salida del sistema en cuestión, respectivamente. También existen transformadores con más
devanados; en este caso, puede existir un devanado "terciario", de menor tensión que el
secundario.

Principio de funcionamiento[editar]

Transformador monofásico ideal.

El funcionamiento de los transformadores se basa en el fenómeno de la inducción


electromagnética, cuya explicación matemática se resume en las ecuaciones de Maxwell.
Al aplicar una fuerza electromotriz en el devanado primario o inductor, producida esta por la
corriente eléctrica que lo atraviesa, se produce la inducción de un flujo magnético en el núcleo
de hierro. Según la ley de Faraday, si dicho flujo magnético es variable, aparece una fuerza
electromotriz en el devanado secundario o inducido. De este modo, el circuito eléctrico
primario y el circuito eléctrico secundario quedan acoplados mediante un campo magnético.
La tensión inducida en el devanado secundario depende directamente de la relación entre el
número de espiras del devanado primario y secundario y de la tensión del devanado primario.
Dicha relación se denomina relación de transformación.
Transformador ideal[editar]
Se considera un transformador ideal aquel en el que no hay pérdidas de ningún tipo. En la
práctica no es realizable, pero es útil para comprender el funcionamiento de los
transformadores reales.
En un transformador ideal, debido a la inducción electromagnética, las tensiones en los
devanados son proporcionales a la variación del flujo magnético que las atraviesa y al número
de espiras del devanado. Puesto que el acoplamiento magnético de los devanados se
considera perfecto, se deduce que la relación entre las tensiones es inversamente
proporcional a la relación entre el número de espiras de los devanados. De este modo:

Se denomina relación de transformación a la relación de tensiones entre el primario y el


secundario. También se puede expresar en función del número de espiras de los devanados.

Del mismo modo, al no considerarse ningún tipo de pérdidas, la potencia de entrada en el


primario es igual a la potencia de salida en el secundario.

El motor asíncrono o de inducción es un tipo de motor de


corriente alterna en el que la corriente eléctrica del rotor necesaria para producir torsión es
generada por inducción electromagnética del campo magnético de la bobina del estátor. Por lo
tanto un motor de inducción no requiere una conmutación mecánica aparte de su misma
excitación o para todo o parte de la energía transferida del estator al rotor, como en
los motores universales, motores DC y motores grandes síncronos. El
primer prototipo de motor eléctrico capaz de funcionar con corriente alterna fue desarrollado y
construido por el ingeniero Nikola Tesla y presentado en el American Institute of Electrical
Engineers (en español, Instituto Americano de Ingenieros Eléctricos, actualmente IEEE) en
1888.
El motor asíncrono trifásico está formado por un rotor, que puede ser de dos tipos: a) de jaula
de ardilla; b) bobinado, y un estator, en el que se encuentran las bobinas inductoras. Estas
bobinas son trifásicas y están desfasadas entre sí 120º en el espacio. Según el teorema de
Ferraris, cuando por estas bobinas circula un sistema de corrientes trifásicas equilibradas,
cuyo desfase en el tiempo es también de 120º, se induce un campo magnético giratorio que
envuelve al rotor. Este campo magnético variable va a inducir una tensión eléctrica en el rotor
según la Ley de inducción de Faraday: La diferencia entre el motor a inducción y el motor
universal es que en el motor a inducción el devanado del rotor no está conectado al circuito de
excitación del motor sino que está eléctricamente aislado. Tiene barras de conducción en todo
su largo, incrustadas en ranuras a distancias uniformes alrededor de la periferia. Las barras
están conectadas con anillos (en cortocircuito) a cada extremidad del rotor. Están soldadas a
las extremidades de las barras. Este ensamblado se parece a las pequeñas jaulas rotativas
para ejercitar a mascotas como hámsters y por eso a veces se llama "jaula de ardillas", y los
motores de inducción se llaman motores de jaula de ardilla.
Entonces se da el efecto Laplace (ó efecto motor): todo conductor por el que circula una
corriente eléctrica, inmerso en un campo magnético experimenta una fuerza que lo tiende
a poner en movimiento. Simultáneamente se da el efecto Faraday (ó efecto generador): en
todo conductor que se mueva en el seno de un campo magnético se induce una tensión.
El campo magnético giratorio, a velocidad de sincronismo, creado por el bobinado del
estator, corta los conductores del rotor, por lo que se genera una fuerza magnetomotriz de
inducción.
La acción mutua del campo giratorio y las corrientes existentes en los conductores del
rotor, originan una fuerza electrodinámica sobre dichos conductores del rotor, las cuales
hacen girar el rotor del motor.
La diferencia entre las velocidades del rotor y el campo magnético se denomina
deslizamiento o resbalamiento.

Funcionamiento[editar]
El motor asincrónico funciona según el principio de inducción mutua de Faraday. Al aplicar
corriente alterna trifásica a las bobinas inductoras, se produce un campo magnético giratorio,
conocido como campo rotante, cuya frecuencia será igual a la de la corriente alterna con la
que se alimenta al motor. Este campo al girar alrededor del rotor en estado de reposo, inducirá
corrientes en el mismo, que producirán a su vez un campo magnético que seguirá el
movimiento del campo estátórico, produciendo una cupla o par motor que hace que el rotor
gire (principio de inducción mutua). No obstante, como la inducción en el rotor sólo se produce
si hay una diferencia en las velocidades relativas del campo estatórico y el rotórico, la
velocidad del rotor nunca alcanza a la del campo rotante. De lo contrario, si ambas
velocidades fuesen iguales, no habría inducción y el rotor no produciría par. A esta diferencia
de velocidad se la denomina "deslizamiento" y se mide en términos porcentuales, por lo que
ésta es la razón por la cual a los motores de inducción se los denomina asincrónicos, ya que
la velocidad rotórica difiere lévemente de la del campo rotante. El deslizamiento difiere con la
carga mecánica aplicada al rotor, siendo máximo con la máxima carga aplicada al mismo. Sin
embargo, a pesar de esto, el motor varía poco su velocidad, pero el par motor o cupla
aumenta (y con ello la intensidad de corriente consumida) por lo que se puede deducir que
son motores de velocidad constante.
Eléctricamente hablando, se puede definir al motor asincrónico como un Transformador
eléctrico cuyos bobinados del estator representan el primario, y los devanados del rotor
equivalen al secundario de un transformador en cortocircuito.
En el momento del arranque, producto del estado de reposo del rotor, la velocidad relativa
entre campo estatórico y rotórico es muy elevada. Por lo tanto, la corriente inducida en el rotor
es muy alta y el flujo de rotor (que se opone siempre al del estator) es máximo. Como
consecuencia, la impedancia del estator es muy baja y la corriente absorbida de la red es muy
alta, pudiendo llegar a valores de hasta 7 veces la intensidad nominal. Este valor no hace
ningún daño al motor ya que es transitorio, y el fuerte par de arranque hace que el rotor gire
enseguida, pero causa bajones de tensión abruptos y momentáneos que se manifiestan sobre
todo como parpadeo en las lámparas lo cual es molesto, y puede producir daños en equipos
electrónicos sensibles. Los motores de inducción están todos preparados para soportar esta
corriente de arranque, pero repetidos y muy frecuentes arranques sin períodos de descanso
pueden elevar progresivamente la temperatura del estator y comprometer la vida útil de los
devanados del mismo hasta originar fallas por derretimiento del aislamiento. Por eso se
utilizan en potencias medianas y grandes, dispositivos electrónicos de "arranque suave", que
minimizan la corriente de arranque del motor.
Al ganar velocidad el rotor, la corriente del mismo disminuye, el flujo rotórico también, y con
ello la impedancia de los devanados del estator, recordemos que es un fenómeno de
inducción mutua. La situación es la misma que la de conectar un transformador con el
secundario en corto a la red de CA y luego con una resistencia variable intercalada ir
aumentando progresivamente la resistencia de carga hasta llegar a la intensidad nominal del
secundario. Por ende, lo que sucede en el circuito estatórico es un reflejo de lo que sucede en
el circuito rotórico.

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