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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE

FACULTAD DE MEDICINA
ESCUELA DE ENFERMERÍA

de enfermería

VOLUMEN 17 • No 2
2006
de enfermería
Publicación anual de la Escuela de Enfermería de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Fundada en 1990 por Erma Barrientos A., Cecilia Campos S. y Rina Pérez A.
Directora Escuela de Enfermería: Paz Soto Fuentes.

DIRECTORA
Angélica Cazenave González
Magíster en Administración en Salud
Magíster en Salud y Humanización, EM.
Profesora Adjunta. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile

COMITÉ EJECUTIVO
Nivia Cruz, Mg. Salud Pública, EM.
Claudia Pérez, Mg. en Psicología, EM.
Paola Carrasco, candidata Mg. en Educación, EM.
Angelina Dois, Terapeuta Familiar y de Pareja, EM.
Daniela Fuentes, EM.

COMITÉ DE PUBLICACIÓN
Cecilia Arechabala, Mg. en Psicología, E.
Silvia Barrios, Mg. en Salud Pública, E.
Solange Campos, Mg. en Psicología, EM.
Aixa Contreras, Mg. en Psicología, EM.
Pilar Espinoza, E.
Patricia Fernández, Mg. en Salud Pública, E.
Camila Lucchini, candidata Mg. en Enfermería, EM.
Francisca Márquez, candidata Mg. en Enfermería, EM.
Patricia Masalan, Mg. en Salud Pública, EM.
Astrid Ourcilleon, Mg. en Administración en Salud, EM.
Giselle Riquelme, M.
Julio Ruiz, Soc.

SECRETARIA ADMINISTRATIVA
Marta Gutiérrez Pacheco

DIRECCIÓN
Escuela de Enfermería.
Pontificia Universidad Católica de Chile
Avenida Vicuña Mackenna 4860. Casilla 306, Correo 22. Santiago - Chile
Código Postal: 6904411.
Fono: (56 2) 3545838 - Fax (56 2) 3547910
e-mail: revistahorizonte@uc.cl
COMITÉ EDITORIAL

Rita Ailinger, PhD, MA, MS , BS Valeria Lerch, PhD, ME, E


Professor. College of Nursing and Health Science Profesora Escuela de Enfermería.
George Manson University. USA Universidad Federal de Río Grande
Río Grande. Brasil
Ana María Alarcón, PhD, MA., BA. E
Profesora Asociada. Departamento de Salud Pública María Eugenia Lorenzini
Universidad de La Frontera. Temuco - Chile Educadora
Escritora
Marcela Arias
Bibliotecaria documentalista y referencista Tatiana Páravic, PhD, MCE, E
Dirección de Bibliotecas Profesora Titular. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile. Universidad de Concepción. Chile

Alejandrina Arratia, PhD, MDI, EM Nilda Peragallo, PhD, MSN, E


Profesora Adjunta. Escuela de Enfermería Dean and Professor, School of Nursing and Health
Pontificia Universidad Católica de Chile Studies, University of Miami. USA

María Cecilia Campos, MSP, E Águeda Pereira Wendhausen, PhD, ME, E


Profesora Titular. Escuela de Enfermería Profesora. Escuela de Enfermería.
Pontificia Universidad Católica de Chile Universidad del Valle de Itajaí. Santa Catarina. Brasil

Rossina Cianelli, PhD, MSP, EM M. Soledad Rivera, PhD, MSP, E


Profesota Titular. Escuela de Enfermería Profesora Adjunta. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile Pontificia Universidad Católica de Chile

Yolanda da Silva, PhD, Mg Antropología Claudio Robles, MBA, E


Profesora. Universidad Vale do Itajaí. Brasil Coordinador Enfermería. Hospital Clínico
Profesor Auxiliar Asociado, Escuela de Enfermería
Lilyan Ferrer, PhD, MSP, EM Pontificia Universidad Católica de Chile
Profesora Adjunta. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile Julio Ruiz
Sociólogo. Experto en descentralización y desarrollo
Ximena Ferrer, E local y gestión pública. Chile
Profesora Titular. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile Julia Sequeida, ME, LE, PhD.
Coordinadora de Investigación y Publicaciones,
Ester Gallegos, PhD, MNS, E Facultad de Educación. Pontificia Universidad Católica
Profesora Titular. Facultad de Enfermería de Chile.
Universidad Autónoma de Nuevo León
Monterrey, México. María Soledad Smith, PhD, MNSc, RN
Assistant Professor, University of Louisiana at
Lynda Harrison, PhD, MSN, BSN Lafayette, College of Nursing and Allied Health
Professor and Associate Dean for Professions, Department of Nursing. USA.
Graduate Studies School of Nursing
University of Alabama at Birmingham Lúcia Takase Gonçalves, PhD, ME, E
Profesora Adjunta, Programa de Postgrado
Sonia Jaimovich, MSP, E Universidade Federal de Santa Catarina. Brasil.
Profesora Titular. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile Mila Urrutia, MSC, E
Profesora Titular. Escuela de Enfermería
Fransisco Javier León Pontificia Universidad Católica de Chile
Doctor en Filosofía y Letras
Profesor Centro de Bioética. Facultad de Medicina María Teresa Urrutia, Mg Nutrición
Pontificia Universidad Católica de Chile Profesora Adjunta
Escuela de Enfermería
Erick Landeros O. Pontificia Universidad Católica de Chile.
Máster en Ciencias de Enfermería.
Facultad de Enfermería de la Benemérita Luis Villarroel, Estadístico, PhD, Mg, Estadística
Universidad Autónoma de Puebla. México. Profesor Auxiliar. Departamento de Salud Pública
Facultad de Medicina.
Ilta Lange, MSC, E Pontificia Universidad Católica de Chile.
Profesora Titular. Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile
SUMARIO
Volumen 17. Número 2, Año 2006.

Editorial ........................................................................................................................................................ 9
Angélica Cazenave G.

Cartas el Editor .......................................................................................................................................... 10

Investigación

Uso de sustancias en mujeres con desventaja social: un factor de riesgo para VIH/SIDA......................... 15
Cianelli, R.; Ferrer, L.; Bernales, M.; Miner, S.; Irarrázabal, L; Molina Y.

Consumo de sustancias en estudiantes de educación técnica superior ..................................................... 23


Fuentes, D.

Revisión de Literatura

Efectividad en el tratamiento de las adicciones........................................................................................... 31


Canepa, G.; Chomalí, C.; Fuenzalida J.; Grass M.; López M.; Quijada G..

Familia y adicciones: una mirada sistémica ................................................................................................ 39


Dois, A.

Efectos del uso de tabaco, alcohol y cocaína en el embarazo y su descendencia ..................................... 45


Medeiros, P.; Poupin, L.

Validación empírica de la entrevista motivacional en adicciones ................................................................ 55


Valeria, C.

Proyecto o Programas de Intervención

Recursos en familias llamadas multiproblemáticas .................................................................................... 63


Pérez, D.

Sección Nuevos Horizontes


Revisión de Literatura

Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar ...................................................................................... 73


Oteíza, C.

Artículos Misceláneos

Investigación
Presencia de dolor en un grupo de trabajadores del sector salud .............................................................. 85
Aqueveque, X.; Núñez. M.

Desarrollo y bienestar del adulto mayor: desafíos para la implementación de la política pública............... 93
Martínez, L.; Hernández, B.; Reyes, M. A.

Arte
Cuento ....................................................................................................................................................... 105
Ruiz, P.
Placer culpable .......................................................................................................................................... 107
Autor anónimo

Reseñas de Libros................................................................................................................................... 109

Sitios web y películas sugeridas ........................................................................................................... 113

Tesis de Licenciatura y Estudios Bibliográficos año 2006, segundo semestre................................ 115

Normas de publicación ........................................................................................................................... 119

Suscripción .............................................................................................................................................. 131


EDITORIAL

Cada vez es más frecuente en el mundo y en nuestro país encontrar personas que sufren un
trastorno por adicción. Dicho trastorno implica una patología compleja de entender y más com-
pleja aún de abordar. A la hora de aproximarse a este fenómeno, el trabajo interdisciplinario y en
red debe ser una constante.

Por esto, nuestra Revista ha querido rescatar algunas investigaciones y revisiones de litera-
tura propuestas por distintos expertos en la materia que muestran diferentes formas de abordar
el tema.

En sus páginas se encuentran investigaciones que evidencian cómo el consumo de drogas


afecta a la persona en su integralidad, en su desarrollo. Se revela cómo el consumo es cada vez
más frecuente en distintos estratos y segmentos de nuestra sociedad, como en los estudiantes
técnicos, y cómo este consumo se hace realidad y se convierte en un factor que aumenta el
riesgo de enfermedad al unirse al grave problema de salud que representa el VIH/SIDA para las
personas.

En la sección de revisiones de literatura se avala la necesidad de abordajes multidisciplina-


rios y la incorporación de la entrevista de acogida como forma especial de aceptar a la persona
adicta y apoyarla en su motivación para ingresar a tratamiento. Adicionalmente, se muestran las
experiencias que resultan más eficientes para la rehabilitación de las personas y la importancia
de considerar las características de cada una de ellas en su tratamiento y se releva la necesidad
que cada persona que sufre este trastorno encuentre una intervención de ayuda personalizada,
de acuerdo a sus propias características y necesidades.

En este número además, se incorpora una nueva sección denominada Nuevos Horizontes en
la que se harán presente artículos realizados por futuros profesionales, la que se abre como un
espacio de estímulo al desarrollo de su formación, pensamiento, reflexión e investigación, man-
teniendo inalteradas las pautas y normas de selección de los artículos propuestos.

Finalmente, desde el ámbito de la literatura se nos narra la experiencia desgarradora de de-


gradación, abandono y soledad de quien tiene esta enfermedad social, y el grito atragantado y
desesperado ¡necesito ayuda!

Esperamos que el lector encuentre en estos artículos nuevas “lecturas”, experiencias, sa-
beres y modos de intervención que contribuyan a que las personas que sufren y padecen los
trastornos adictivos, encuentren el apoyo en y de profesionales que cuenten con herramientas y
modos más eficaces y efectivos para afrontar este verdadero flagelo.

Angélica Cazenave G.
Directora
Revista Horizonte de Enfermería

9
Cartas al Editor

Estimadas Colegas:

En la edición anterior de la revista Horizonte tuve la oportunidad de publicar un artículo sobre


un área incipiente en la práctica de la Enfermería como es la hipnosis clínica.

Escribo esta carta por tres motivos. Expresar mi agradecimiento al comité editorial de la re-
vista, estimular a mis colegas a que publiquen su trabajo y para contar qué ha ocurrido, luego de
que este artículo apareciera en la revista.

Dos semanas después de la publicación, se comunicó conmigo una periodista del diario
El Mercurio de Santiago, quien estaba muy interesada en el tema, el cual había conocido a través
de la lectura de la revista. Contactó a la Directora de Horizonte y finalmente, a través de ella,
concretamos una entrevista que fue publicada en el periódico. Esta publicación ha resultado en
un reconocimiento a mi trabajo con la hipnosis, logrando mi objetivo de incentivar a más colegas
en su uso y aplicaciones.

Quisiera comentar que, durante el proceso de envío del primer texto para revisión, se me su-
girieron varias correcciones. Por una cuestión de tiempo, pensé en desistir de reenviar el artículo
corregido; sin embargo, debo resaltar dos cosas. Por un lado, que las indicaciones que se me
dieron para las correcciones fueron muy claras y orientadoras. Segundo, que en todo momento
fueron muy cálidas y entusiastas en motivarme a terminar el artículo; demostrando mucho interés
por mi trabajo, lo que constituyó el principal aliciente a finalizarlo.

Luego, cabe destacar, que se me mantuvo al tanto del proceso, y en constante comunicación
conmigo.

Escribir este artículo ha sido el descubrimiento de un área del quehacer de la profesión, que
todos debemos tener como vocación, el generar nuevos conocimientos y compartir nuestras
experiencias acerca del cuidado.

Por esta razón es que quisiera que esta carta sirva para motivar a los profesionales de En-
fermería a mostrar lo que hacemos, a investigar, a retomar constantemente el estudio, pues
nuestros esfuerzos son valiosos para el crecimiento de la profesión.

En este sentido, la Revista Horizonte de Enfermería, no solo es un espacio oportuno que da


cabida a nuestros trabajos, es también una instancia de apoyo a la investigación y la comunica-
ción del conocimiento, pues a través de su Comité Editorial, y de cada una de las personas que
contribuye a ella, han desarrollado una recepción muy cálida que estimula al autor, a continuar
en este trabajo.

Finalmente, quisiera decir que no basta con sentarnos a mirar críticamente lo que pasa con la
Enfermería, sino que estamos llamados a formar parte del cambio, de las mejoras, de las ideas; en
otras palabras, debemos dejar la orilla y adentrarnos en el mar profundo de nuestra profesión, así
cuando dirijamos nuestra vista hacia al frente veremos un “Horizonte”, pero cada vez más cercano.

Atte.

E.U. Erik Álvarez Mabán


Docente Carrera de Enfermería
Universidad Católica de la Santísima Concepción
Cartas al Editor

Evolución de la valorización del VIH/SIDA en Chile

El VIH/SIDA es un gran problema de salud, social y económico en todo el mundo. Sus con-
secuencias consideran efectos a corto, mediano y largo plazo que afectan profundamente la
vida de personas, familias y la sociedad en general. En Chile, es un problema que apareció en
el año 1984, pero solo fue reconocido por el gobierno como un problema de salud pública en el
año 1990, cuando se inició la Comisión Nacional del SIDA (CONASIDA) dentro del Ministerio de
Salud.

Sorprendentemente, miembros de la sociedad civil fueron quienes reconocieron esta amena-


za a la salud de los chilenos en al año 1986. Con apoyo anónimo de una enfermera y un médi-
co, personas afectadas por la enfermedad fundaron organizaciones no gubernamentales. Ellas
representaron en ese momento el único espacio de trabajo para la prevención del VIH/SIDA y el
apoyo a personas que ya habían adquirido la enfermedad. Son los miembros de estas mismas
organizaciones quienes han perpetuado un trabajo hasta hoy. Ellos han reconocido y abordado
el VIH/SIDA como un problema social, cuyos orígenes yacen en responsabilidades compartidas
de la sociedad chilena contemporánea.

A pesar de hoy contar con financiamiento del Fondo Global y estructuras interdisciplinarias
con diversos actores sociales, hoy en Chile aún no existe un abordamiento del tema desde un
discurso social unificado. A la luz de esta realidad, la decisión de la Revista Horizonte de En-
fermería, de contar con un número específico que abordara el tema del VIH/SIDA creo amerita
reconocimiento.

Ese número es una muestra de un esfuerzo académico que permite el diálogo, integración
social, participación en un reconocimiento y aceptación de tradiciones culturales. La publicación
está representada por distintos actores sociales que son claves en el enfrentamiento de esta
pandemia. Autores miembros de organizaciones no gubernamentales, académicos y personas
viviendo con el virus, fueron quienes dieron a conocer las complejidades de este problema hoy y
cuán necesario sigue siendo un trabajo conjunto.

Es importante reconocer esta iniciativa de enfermería, quienes dejan en su revista evidencia


concreta de respeto y valoración de cada individuo dentro de la sociedad. Ejemplos como
este permiten seguir avanzando en parar la expansión del VIH/SIDA y sus efectos en nuestra
sociedad.

Dra. Lilian Ferrer


Directora Proyectos Mano a Mano
Iniciativa en Prevención de VIH/SIDA
Escuela de Enfermería
Pontificia Universidad Católica de Chile
Investigación Uso de sustancias en mujeres con desventaja social y VIH

USO DE SUSTANCIAS EN MUJERES CON DESVENTAJA SOCIAL:


UN FACTOR DE RIESGO PARA VIH/SIDA

SUBSTANCES USE AMONG SOCIALLY DISADVANTAGED WOMEN:


AN HIV/AIDS RISK FACTOR

Rossina Cianelli *
PhD, Académica Escuela de Enfermería Pontificia Universidad Católica de Chile, Adjunt Profesor
University of Miami, University of Illinois at Chicago.
Lilyan Ferrer
PhD, Académica Escuela de Enfermería Pontificia Universidad Católica de Chile, Adjunt Profesor
University of Miami, University of Illinois at Chicago.
Margarita Bernales
MP, Psicóloga, Instructora asociada Escuela de Enfermería Pontificia Universidad Católica de Chile.
Sarah Miner
BSN, Escuela de Enfermería Pontificia Universidad Católica de Chile.
Lizette Irarrázabal
BSN, Instructora asociada Escuela de Enfermería Pontificia Universidad Católica de Chile.
Y. Molina
Ps, Alumno Magíster Escuela de Psicología Pontificia Universidad Católica de Chile.

Artículo recibido el 30 de septiembre, 2006. Aceptado en versión corregida el 30 de noviembre, 2006

RESUMEN
Antecedentes: La caracterización epidemiológica en Chile apunta a feminización, pauperización y hetero-
sexualización de la epidemia del VIH, lo que implica un mayor riesgo para las mujeres en desventaja social.
Si a esto se suma la utilización de sustancias, la vulnerabilidad de este grupo frente al VIH/SIDA aumenta.
Objetivo: Describir el uso de sustancias en mujeres con desventaja social e identificar factores de riesgo de
contagio de VIH, asociados a este consumo. Material y Método: 52 mujeres fueron entrevistadas como parte
del proyecto “Testeando una intervención en prevención de VIH/SIDA en mujeres chilenas” GRANT # RO1
TW 006977. Se describen variables sociodemográficas, consumo de sustancias y factores de riesgo para
VIH; y se analiza la relación entre variables a través de pruebas de correlación. Resultados: Los resultados
indican un perfil sociodemográfico que sitúa a las mujeres en situación de vulnerabilidad frente al contagio de
VIH/SIDA, con alto índice de uso de sustancias que acentúa el riesgo. Conclusiones: Los hallazgos apuntan
a la necesidad de considerar intervenciones que se enfoquen en la prevención de VIH en mujeres, abordando
los riesgos asociados al consumo de sustancias. Palabras Clave: Síndrome de inmunodeficiencia adquirida/
transmisión, mujeres, Chile.

ABSTRACT
Background: The epidemiological characterization of HIV/AIDS in Chile points to the feminization,
pauperization and heterosexualization of the epidemic, which indicates increased risk for socially
disadvantaged women. When the use of substances is added to this, the vulnerability of this group in terms
of HIV is magnified. Objective: To describe substance use in socially disadvantaged women and to identify
HIV/AIDS risk factors associated with it. Material and Method: 52 women were interviewed as part of
the project “Testing an HIV prevention intervention in Chilean women” GRANT # RO1 TW 006977. Socio-
demographic variables, substance use, as well as risk factors for HIV/AIDS are described using descriptive
stats, and the relationship between variables is analyzed using correlation tests. Results: The results reveal
a socio- demographic profile that places women in a vulnerable situation regarding transmission of HIV/
AIDS, with high indices of substance use amplifying risk. Conclusions: These findings indicate the need for
interventions focusing on HIV prevention in women that incorporate the risks associated with the consumption
of substances. Key Words: Acquired immunodeficiency syndrome/ transmission, women, Chile.

*2006, Horiz Enferm,


Correspondencia e-mail: 17, 2, 15-22
: rciane@uic.edu 15
Investigación Cianelli, R.

INTRODUCCIÓN des: relacionarse sexualmente con parejas


Las estimaciones del Programa Conjunto que hayan presentado síntomas de infec-
de Naciones Unidas para la infección por ciones de transmisión sexual, relacionarse
VIH/SIDA muestran que hasta fines del 2002, sexualmente con más de una pareja en el úl-
había en el mundo un total de 42 millones timo trimestre y presentar inconsistencia en
de personas viviendo con VIH/SIDA, de los el uso de preservativo. Según datos de la pri-
cuales 19,2 millones correspondían a mujeres mera Encuesta Nacional de Comportamiento
(Programa Conjunto de Naciones Unidas Sexual realizada en Chile, las mujeres decla-
sobre el VIH/SIDA [ONUSIDA], 2003). En ran tener en promedio 1.9 parejas sexuales
chile, la tasa de notificación anual de VIH/SIDA en la vida (MINSAL, 2000).
ha experimentado un sostenido aumento, Las conductas de riesgo de contagio de
en 1984 se reportaban 0,05 casos por cada VIH asociadas al uso de drogas, pueden di-
100.000 habitantes, cifra que ha aumentado vidirse en dos tipos: riesgo directo, referido
a 9,9 casos en el año 2004 (Ministerio de al contagio por vía intravenosa en el inter-
Salud de Chile [MINSAL], 2006). cambio de jeringuillas; y riesgo vicario, rela-
Las variaciones en la caracterización de cionado al aumento de la probabilidad de in-
la epidemia en Chile, permiten distinguir tres currir en prácticas de riesgo sexual (Grulich,
fenómenos en el contagio de VIH: pauperiza- De Visser, Smith, Rissel & Richters, 2003),
ción, feminización y heterosexualización. El como consecuencia del uso de sustancias
fenómeno de pauperización, propio de Amé- (Cooperman, Falkin & Cleland, 2005; Na-
rica Latina y el Caribe (Organización Pana- deau, Truchon & Biron, 2000; Vaughn, 2004).
mericana de la Salud [OPS], 2000), refiere a En relación con el riesgo vicario, que asocia
la incidencia de factores relacionados con la consumo de sustancias y conducta sexual
inequidad socioeconómica, que favorecen la riesgosa, se ha visto que las mujeres que
propagación del VIH en grupos poblaciona- usan o abusan de sustancias tienen más pro-
les de menores ingresos (Comisión Nacional babilidades de participar en comportamien-
de SIDA [CONASIDA], 2003). tos que involucran riesgo sexual (CDC, 2006;
La feminización indica un crecimiento Cooperman et al., 2005). Estas conductas
mayor a lo largo del tiempo de los casos de sexuales de riesgo se asocian al aumento de
infección por VIH en mujeres, comparati- la cantidad de parejas sexuales, mantener
vamente con el número de casos de hom- relaciones sexuales sin protección, intercam-
bres. El VIH está afectando severamente a biar sexo por dinero o drogas, tener sexo con
mujeres, en quienes el modo predominante parejas que se inyectan drogas, y evitar con-
de transmisión es la relación sexual hete- versación acerca del preservativo al interior
rosexual. Actualmente son las mujeres con de la pareja (Morrison, Diclemente, Wingood,
pareja estable las que concentran la mayor & Collins, 1998; Cooperman, 2005).
cantidad de nuevos contagios (CONASIDA, De la misma forma se ha visto que, aun-
2005, ONUSIDA, 2003). que las mujeres reporten tener conocimiento
Según la Organización Mundial de la sobre los riesgos sexuales, el efecto de las
Salud (Organización Mundial de la Salud drogas sobre sus cogniciones provoca una
[OMS], 2003) la rápida propagación de VIH pérdida de autoeficacia para la realización
ha sido favorecida por el uso de sustancias de conductas de protección. Se favorece el
y la adopción o realización de conductas de predominio de creencias equivocadas sobre
riesgo sexual (ONUSIDA, 2003), trasformán- el riesgo de sus parejas y aumenta el deseo
dose ambos modos en las principales formas sexual, lo que incrementa considerablemen-
de contagio (Centers for Disease Control te el riesgo de contagio (Nadeau et al., 2000;
[CDC], 2004; Pan American Health Organi- American Academy of Pediatrics Committee
zation [PAHO], 2001). on Pediatric AIDS, 2006).
La conducta de riesgo sexual es definida Según el Estudio General de Drogas rea-
como el ejercicio de las siguientes activida- lizado por el Consejo Nacional para el Con-

16
Uso de sustancias en mujeres con desventaja social y VIH

trol de Estupefacientes (CONACE, 2004) que En Brasil, se estima que 50% de los per-
evalúa el consumo de drogas en la población sonas que se inyectan drogas son VIH po-
chilena, la tasa de consumo de drogas ilícitas sitivo y entre hombres que se inyectan dro-
asciende a 5,83%. Las drogas con mayores gas, se encontró que 83% reconocen no uti-
índices de consumo son marihuana, clorhidra- lizar preservativos con sus parejas sexuales
to de cocaína y pasta base, con una tasa de (PAHO, 2001). Un estudio cualitativo en los
consumo en la población general de 5,29 %, Estados Unidos entre mujeres viviendo con
1,28 % y 0,62 % respectivamente. Se obser- VIH, concluyó que la mitad de la muestra (n=
va que los hombres consumen considerable- 24) se había contagiado con VIH a través de
mente más drogas que las mujeres. contacto heterosexual con una pareja que se
En relación al uso de alcohol, los datos inyectaba drogas (Neundorfer, 2005).
muestran un sostenido aumento en los últi- De acuerdo a los antecedentes presenta-
mos 10 años, acentuándose la tasa de con- dos, es posible establecer que la incidencia
sumo desde 38,86% en 1996 hasta 56,80% de VIH/SIDA en Chile, podría estar media-
en el 2004. Aunque aún es mayor la cantidad da entre otros factores, por el consumo de
de hombres que usan y abusan de alcohol en sustancias en la población. El objetivo del
Chile, este incremento también ha afectado a presente estudio es describir el uso de sus-
las mujeres donde la tasa de consumo aumen- tancias en mujeres con desventaja social e
tó de 29,93 % en 1996 a 49,90 % en el 2004. identificar factores de riesgo de contagio de
Asimismo, la cifra de dependencia en mujeres VIH, asociados a este consumo.
ha subido a un 6,76%, y se estima que ha-
bría dos mujeres dependientes del alcohol por METODOLOGÍA
cada cinco hombres (CONACE, 2004). Los datos para este artículo provienen de
Consistentemente con los estudios cita- un estudio financiado por los Institutos Na-
dos, las mujeres chilenas, identifican el uso cionales de Salud de Estados Unidos (NIH)
de sustancias y alcohol como un factor de denominado “Testeando una intervención
riesgo para la transmisión de VIH (Cianelli, en prevención de VIH/SIDA en mujeres chi-
2003). Asocian además dichas conductas lenas”, GRANT # RO1 TW 006977 (PI, Cia-
adictivas a violencia sexual, infidelidad, pros- nelli). Utilizando un diseño mixto, durante la
titución y promiscuidad, todas conductas que primera fase son exploradas las necesida-
han demostrado ser un riesgo para la adqui- des de la población con técnicas cualitativas,
sición del virus. con el fin de adaptar una intervención para
Si bien una conducta de riesgo puede ser mujeres en desventaja social, de acuerdo a
evaluada individualmente, es importante tomar sus necesidades específicas. En la segunda
en cuenta que el comportamiento de la pareja fase, en curso actualmente, utilizando técni-
sexual es crucial, por la influencia que esta tiene cas cuantitativas se evalúa la efectividad de
en el nivel de riesgo individual. En relación con la intervención creada. Para ello se aplica un
este tema, se ha visto que el consumo de drogas instrumento previo a la intervención, inme-
de la pareja es un factor importante que incre- diatamente posterior a ella y luego de tres
menta considerablemente el riesgo de contagio meses. Diversas escalas forman parte del
(Neundorfer, Hanis, Britton & Lynch, 2005). En instrumento, las que evalúan variables socio-
este sentido, se ha observado que existe una demográficas, conocimientos en torno a VIH/
relación negativa entre la utilización de drogas SIDA, actitudes relacionadas con la preven-
inyectables y el uso de medidas de prevención ción de VIH/SIDA y conductas de riesgo re-
para VIH/SIDA. Esto origina un incremento en lacionadas con el contagio de VIH, entre las
el riesgo de contagio para las parejas de estas que se cuentan el consumo de sustancias.
personas, que constituyen un grupo de riesgo En el presente artículo se reportan resul-
para el contagio de VIH/SIDA a pesar de no ser tados preliminares cuantitativos, de los datos
ellas quienes consumen las sustancias ilícitas iniciales de la segunda fase del estudio, rela-
(Neundorfer et al., 2005; PAHO, 2001). cionados con VIH/SIDA y uso de sustancias.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 15-22 17


Investigación Cianelli, R.

Tabla 1: Ejemplos de preguntas realizadas.

Variables Sociodemográficas

Ejemplo de preguntas, cada pregunta presenta alternativas de respuesta:


¿Cuál su estado civil actual?
¿Cuál es el nivel más alto de educación que usted ha completado?

Historia Sexual

Ejemplo de preguntas, cada pregunta tiene por respuesta el número mencionado por la mujer:
¿Con cuántos hombres ha tenido usted relaciones sexuales durante toda su vida?
¿Con cuántos hombres ha tenido usted relaciones sexuales durante los últimos tres meses?

Consumo de Sustancias

Ejemplo de preguntas, cada pregunta presenta alternativas de respuesta:


¿Ha usado usted alguna vez en su vida Marihuana?
¿Ha usado usted alguna vez en su vida Alcohol?
¿Ha usado usted alguna vez en su vida Cocaína?
En los últimos tres meses, ¿cuántas veces ha estado drogada?
En los últimos meses, ¿cuántas veces su pareja ha estado drogada?
En los últimos meses, ¿cuántas veces ha estado tomada (ebria) o drogada antes de tener relaciones sexuales?
En los últimos meses, ¿cuántas veces ha estado su pareja tomado (ebrio) o drogado antes de tener relaciones sexuales?

El estudio se desarrolla en 10 centros de sa- Ética de la Escuela de Enfermería de la Ponti-


lud ubicados en dos comunas en desventaja ficia Universidad Católica de Chile.
social del área suroriente de Santiago. Las En el artículo se presentan las caracte-
comunas seleccionadas para el estudio son rísticas sociodemográficas que definen a
similares en términos de ingreso económico la muestra y se realiza una descripción del
y características de la población: bajo ingreso uso de sustancias, utilizando la información
per cápita, bajo nivel educacional y alta inci- obtenida de preguntas insertas en el instru-
dencia de violencia y consumo de sustancias. mento del estudio original (Tabla 1). Para el
El reclutamiento de las participantes se realizó análisis de datos se utilizó el software esta-
en las salas de espera de los centros de salud. dístico SPSS 12.0, calculando estadísticos
La muestra quedó constituida por 52 mujeres, descriptivos: promedio, desviación estándar
que representan el total de la muestra hasta y frecuencias. Para establecer asociación
el momento de la realización de este artícu- entre uso de sustancias y conductas de ries-
lo. El proyecto original contempla la participa- go para VIH se utilizó prueba de correlación
ción de 500 mujeres. Los criterios de inclusión de Pearson y Spearman.
para este estudio fueron: 1) tener entre 18 y
49 años de edad; 2) vivir en una de las dos RESULTADOS
comunas del estudio; 3) haber estado casada Descripción de la muestra
o haber tenido pareja en los últimos seis me- Las edades de las mujeres se encuen-
ses; y 4) aceptar participar voluntariamente en tran entre 18 y 49 años, con un promedio de
el estudio. La obtención de la información se 33,9 ± 8.9. Todas las participantes refieren
realizó a través de una entrevista estructura- tener pareja al momento del estudio y 78,8%
da, cara a cara, utilizando el instrumento dise- manifiesta estar viviendo con su pareja. Del
ñado para el estudio original. Cada entrevista total un 51,9% refiere estar casada.
tomó aproximadamente sesenta minutos y En relación al número de hijos, el rango
fue realizada por encuestadores entrenados. se encuentra entre 0 y 5 con un promedio
Todas las participantes firmaron un consenti- de 2,4 ± 1.3. Casi sesenta y dos por ciento
miento informado aprobado por el Comité de de la muestra (61,5%) manifiesta ser católi-

18
Uso de sustancias en mujeres con desventaja social y VIH

ca y 15,4 % declara no pertenecer a ninguna Considerando el uso de alcohol, del total


religión. En relación al nivel educacional de de mujeres 19,2 % refiere haber estado una o
las mujeres, el 34,6% finalizó la enseñanza dos veces ebria durante los últimos tres me-
básica, el 51,9% la enseñanza media y 9,6% ses. En relación a sus parejas, 48,1% refiere
la enseñanza técnica (3,8% no responde). que ellos han estado ebrios al menos en dos
Respecto a su situación laboral 55,7% ocasiones durante los últimos tres meses y
de las mujeres no trabaja. Este porcentaje 5,8% habría estado drogado.
se distribuye en 26,9% que declara encon-
trarse sin trabajo y 28,8% que manifiesta ser Conductas de riesgo para VIH/SIDA
dueña de casa. El 44,3% que trabaja lo hace Considerando factores de riesgo para VIH
principalmente en actividades de servicios. se describen uso de sustancias al momento
El ingreso mensual total de los hogares es de tener relaciones sexuales, tener múltiples
en promedio $188.269 (US$ 349). En cuanto parejas sexuales, tener un estado serológico
a las personas que viven con ese ingreso, desconocido de algún miembro de la pareja
el rango se encuentra entre 1 y 9, siendo el sexual y uso de preservativos. Las mujeres
promedio 4,4 personas ± 1.66. El cálculo del reportan lo siguiente.
ingreso per cápita mensual es $48.502 (US$ Referente al consumo de sustancias du-
91). En relación al seguro de salud con que rante los últimos 3 meses, un 3,8% de las
cuentan las mujeres, 75% declara pertenecer mujeres manifiesta haberse encontrado ebria
a FONASA y 23,1% manifiesta encontrarse al momento de tener relaciones sexuales,
sin previsión. Un 1,9% declara tener otro sis- ninguna de ellas manifiesta uso de otra sus-
tema de salud. tancia en la misma situación.
El rango de número de parejas sexuales
Uso de Sustancias durante toda la vida es entre 1 y 10, con un
En relación a uso de sustancias, un 79 % promedio de 3. Del total de mujeres 32,7%
de la muestra había consumido sustancias al refiere haber tenido una pareja sexual en su
menos una vez en su vida. En la Tabla 2 se vida y el porcentaje restante varía entre 2 y 4
presenta el tipo de sustancias que las mu- parejas (42,3%) y más de 5 parejas (25%).
jeres reportan haber utilizado en algún mo- En relación a uso de preservativo, las mu-
mento de su vida, las de mayor uso son: al- jeres reportan su utilización en forma aislada
cohol (67,3%), marihuana (32,7%) y cocaína solo como método de planificación familiar.
(11,5%). Respecto a drogas inyectables, un Referente al examen de VIH, 65,4% de las
1,9% de las mujeres reportan su uso. mujeres señala no habérselo realizado, de
aquellas mujeres que se lo realizaron 34,6%
Tabla 2: Tipos de sustancias consumidas señalan que el resultado fue negativo, el res-
por las mujeres alguna vez en su vida* to no conoce el resultado. Adicionalmente,
3,9% de las mujeres manifiestan que su pa-
TIPO DE SUSTANCIA % reja se ha realizado el examen de VIH du-
rante los últimos tres meses, de ese total, el
Alcohol 67,3
Marihuana 32,7 75% afirma que los resultados del examen
Cocaína 11,5 habrían sido negativos, el porcentaje restan-
Heroína 5,8 te (25%) señala no conocer el resultado.
Pasta Base 3,8 Al analizar la correlación entre factores de
Cigarrillo de Marihuana
riesgo para VIH y el uso de sustancias, dos
mezclado con otra droga 3,8
Crack 1,9 factores aparecen como estadísticamente
Cualquier droga inyectable 1,9 significativos. Estos son número de parejas
Pegamento 1,9 sexuales y haberse realizado el test de Elisa
Éxtasis 0,0 para VIH. El uso de sustancias durante toda
* Las mujeres podían seleccionar más de un tipo de la vida se correlaciona positivamente con nú-
sustancia. mero de parejas sexuales en el mismo perío-

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 15-22 19


Investigación Cianelli, R.

do de tiempo (p< 0.05). Existe una asociación influencia de alcohol o sustancias, por parte
negativa entre uso de drogas durante toda la de su pareja.
vida y haberse realizado el Examen de VIH En relación a la correlación entre uso de
en algún momento de la vida (p< 0.05). sustancias y número de parejas sexuales
durante toda la vida de la mujer, reafirma el
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN riesgo potencial que existe entre uso de sus-
La caracterización epidemiológica en Chi- tancias y comportamientos de riesgo sexual,
le apunta a la feminización, la pauperización ya que el uso de sustancias conlleva un ma-
y la heterosexualización de la epidemia del yor número de parejas sexuales, y, por ende,
VIH (CONASIDA, 2003), lo que implica un mayor vulnerabilidad frente al VIH/SIDA.
mayor riesgo para las mujeres en desventaja Otro aspecto a considerar en el riesgo de
social que tienen pareja estable. Las caracte- adquirir VIH/SIDA, es el conocimiento res-
rísticas de las mujeres en estudio, apuntan a pecto al estatus serológico personal y en la
un perfil similar al descrito. Si a esto se suma pareja. Respecto a esto, dos tercios de las
la utilización de sustancias, su vulnerabilidad mujeres refieren no haberse realizado nun-
frente al VIH aumenta (Riehman, Wechsberg, ca el examen para VIH y de aquellas que sí
Francis, Moore & Morgan-López, 2006). lo realizaron, es posible asumir que tuvieron
El objetivo de este estudio fue describir el acceso al examen a través de su control pre-
uso de sustancias en mujeres con desven- natal, no siendo requerido en forma espontá-
taja social e identificar factores de riesgo de nea. En cuanto a su pareja, solo 3,9% se han
contagio de VIH, asociados a este consumo. realizado el mencionado examen. Lo anterior
De acuerdo a este objetivo, como se apre- indica desconocimiento del estado serológi-
cia en los resultados, las mujeres presentan co por parte de las mujeres y sus parejas,
un consumo durante su vida mayor que el re- exponiéndolas a mayor riesgo de contagio.
flejado en el estudio realizado por CONACE Los hallazgos de este estudio apuntan a
(2004), pudiendo representar estas cifras un la necesidad de considerar intervenciones en
mayor consumo de sustancias en población mujeres que se enfoquen en la prevención
con desventaja social. En cuanto al tipo de de VIH, y los riesgos asociados al consu-
sustancias utilizadas por la muestra se apre- mo de sustancias. Las limitaciones de este
cia una tendencia al uso de drogas similares estudio radican en su tamaño muestral, se
a la población nacional (alcohol, marihuana sugiere replicar el estudio con una muestra
y cocaína). Importante es la diferencia entre mayor, en una población similar y, además,
la prevalencia del consumo de alcohol en la en población de mujeres que no se encuen-
muestra (67,0%) y la prevalencia a nivel nacio- tren en desventaja social, lo que permitirá te-
nal (49,9%), observándose una notoria alza de ner una visión amplia de las mujeres chilenas
este grupo en comparación con el país. en relación a la epidemia del VIH. A pesar
Respecto al consumo de drogas inyecta- del tamaño muestral pequeño, sí se pudo
bles, 1,9% de las mujeres manifiestan su uti- identificar factores de riesgo para VIH, signi-
lización, lo que las pone en riesgo directo de ficativamente mayores en mujeres que usan
contagio de VIH en caso de compartir agujas sustancias.
con otros usuarios. El uso de drogas no inyec-
tables conlleva un riesgo de contagio indirec- AGRADECIMIENTOS
to para VIH (Cooperman et al., 2005; CDC, El apoyo para realizar este estudio pro-
2006) asociado a mantener comportamien- viene de los Institutos de Salud Pública de
tos que involucran riesgo sexual. Las muje- Estados Unidos (NIH) Fogarty International
res de la muestra presentan un porcentaje de Center Grant # 1 R01 TW00 6977, PI, Cia-
consumo de sustancias que las sitúa en una nelli. Cabe destacar, el apoyo recibido de los
posición de vulnerabilidad frente al contagio Grant # D43 TW01419, PI, Levy; Grant # 1
de VIH. Se suma a lo anterior el riesgo aso- RO1 NR08058, PI Norr, K.
ciado a mantener relaciones sexuales bajo la

20
Uso de sustancias en mujeres con desventaja social y VIH

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22
Investigación Consumo de sustancias en estudiantes

CONSUMO DE SUSTANCIAS EN ESTUDIANTES DE EDUCACIÓN TÉCNICA


SUPERIOR

DRUG CONSUMPTION IN A STUDENT GROUP

Daniela Fuentes*
Enfermera-Matrona. Instructora Asociada. Departamento de Salud del Niño y Adolescente.
Escuela de Enfermería.
Pontificia Universidad Católica de Chile

Artículo recibido el 20 de junio, 2006. Aceptado en versión corregida el 2 de diciembre, 2006

RESUMEN
El abuso de sustancias constituye en el mundo un serio problema de salud, por sus nefastos efectos
en todas las áreas de las personas y que cada vez es más frecuente en todos los estratos de la
población. El artículo presenta la investigación realizada con el fin de conocer las características del
consumo de sustancias en un grupo de estudiantes de la carrera de técnico superior en enfermería
de un centro de formación técnica de la Región Metropolitana, en el marco de un proyecto estudiantil
financiado por el Tercer Fondo Nacional de Proyectos de Prevención de Drogas en el Ámbito de
la Educación Superior. Estudio retrospectivo, transversal y descriptivo, sobre un universo de 535
estudiantes, muestreo no probabilístico, intencionado (197). Para la recolección de datos se utilizó
cuestionario autoaplicado. Los resultados obtenidos muestran que este grupo de estudiantes
presenta un alto consumo de alcohol (73,6%) asociado al consumo de tabaco (55,3%), con una
frecuencia, en el caso del alcohol, de más de una vez a la semana (24,8%) y en el caso del tabaco,
de más de una vez al día (42,2%). La tercera sustancia más consumida es la marihuana (27,4%),
con una frecuencia de, al menos, dos veces al año (61,1%). Para las tres sustancias mencionadas,
la edad de inicio del consumo corresponde para el 80% de los casos entre los 14 y 19 años. El 73%
de los encuestados que afirmó consumir algún tipo de sustancias, manifestó no requerir ayuda con
el consumo que presentaba. Solo un 18% de ellos afirmó necesitarla. Palabras clave: Trastornos
relacionados con sustancias, educación superior, Chile, estudiantes del área de la salud.

ABSTRACT
The use and abuse of substances is a serious health problem on a global level due to its negative
effects on biological, psychological social and spiritual well being (González et al., 2005) It is a
phenomenon that has continued to increase dramatically throughout the world. The objective of the
following article is to better understand the consumption of substances among a group of students
studying to be “ Técnico Superior en Enfermería” (Nursing Assistant) in the Professional Institute and
Center for Technical Formation of the Metropolitan Region, as part of the student Project financed by
the Third National Fund for Projects in the Prevention of Drug Use in the Academic Environment. The
study is retrospective, transversal and descriptive, with a universe of 535 students belonging to the
major, with a purposeful, non-probability sample, arriving at a sample of 197 students (36,82%). Data
collection was done using a self-administered questionnaire, inquiring into aspects such as substance
use, type of substance consumed, frequency of consumption, age at which first consumed, motives for
use and need for help. Results obtained demonstrate that this group of students present a high level
of alcohol consumption (73,6%) associated with tobacco consumption (55,3%), with a frequency, in
the case of alcohol, of more than once a week(24,8%) and in the case of tobacco, of more than once
a day (42,2%). The third most commonly used substance is marijuana (27,4%), with a frequency of
at least two times a year (61,1%). Regarding the three substances mentioned, the age of first use
corresponded to, in over 80 % of the cases, adolescence between 14 and 19 years old. 73% of those
answering the questionnaire that stated use of some type of substance manifested that they did not
need help with their present consumption. Only 18% stated the need for it. Key Words: Substance
related disorders, education higher, Chile, students health occupations.
2006, Horiz Enferm, 17, 2, 23-30 23
* Correspondencia e-mail: dfuenteo@puc.cl
Investigación Fuentes, D.

INTRODUCCIÓN Por otra parte, las diversas razones que


Según la Organización Mundial de motivan el consumo en adolescentes se
la Salud [OMS], droga es toda sustancia relacionan entre otras, con la búsqueda del
que, introducida en el organismo por placer, la liberación de tensiones, alivio del
cualquier vía de administración, produce dolor, obtención de placer o incremento de
una alteración, de algún modo, del natural sensaciones placenteras. Se considera que
funcionamiento del sistema nervioso central algunos factores del medio ambiente, como
del individuo y es, además, susceptible de la pobreza, la miseria, las tensiones sociales
crear dependencia, ya sea psicológica, y la ausencia de relaciones interpersonales
física o ambas (OMS, 1974). estables y armónicas, aunadas a factores
En nuestro país, los problemas privativos del individuo, tales como los
asociados al uso de alcohol y otras drogas trastornos emocionales y la pérdida de
constituyen la principal causa de mortalidad autoestima, suelen crear condiciones que
y discapacidad en hombres menores de 45 impulsan a las personas a buscar un alivio
años, y la dependencia a estas sustancias artificial para sus conflictos internos, alivio
es una de las 10 principales causas de que puede derivar en el desarrollo de un
Años de Vida Saludables Perdidos por cuadro de abuso o, más grave aún, un cuadro
Discapacidad o Muerte Prematura [AVISA] de dependencia (American Psychiatric
en toda la población (Ministerio de Salud de Association [APA], 2005).
Chile [MINSAL], 2001). El uso y abuso de El uso de drogas se concentra en la
sustancias constituye a nivel mundial un serio población más joven y nuestro país no es
problema de salud por sus nefastos efectos la excepción. Varios estudios realizados
a nivel de todas las áreas de las personas en Chile dan cuenta de esta realidad
y su entorno (González et al., 2005). Es un (Araneda & Cumsille, 2004). Al observar
fenómeno que ha venido en aumento en el discurso que sostienen los menores en
forma dramática en el mundo, y sobre el torno a la marihuana, es posible afirmar
cual han llamado la atención organizaciones que esta sustancia se aleja cada vez más
internacionales ampliamente reconocidas, de la definición de “droga” construida
como la Organización de Naciones Unidas colectivamente en la representación social,
[ONU] y la OMS entre otras, caracterizándola al relacionarla con calificativos como la
como una verdadera problemática que está inocuidad y la baja toxicidad, lo que la
afectando negativamente a la humanidad en distancia significativamente del “daño”,
su conjunto y a los individuos consumidores, siendo esto último una característica propia
en sus roles sociales, económicos y de de las sustancias a las que sí le otorgan la
salud, situación de la cual nuestro país no es categoría de droga (Consejo Nacional para
la excepción. El tabaquismo, el alcoholismo el Control de Estupefacientes [CONACE],
y la drogadicción provocan problemas 2002). Existen diversos trabajos que han
sanitarios graves, tanto a nivel físico y mostrado la asociación de diversos factores
psíquico de los individuos, como a nivel psicosociales, tales como eventos vitales,
social y familiar (OMS, 1986). Se asocia a apoyo social y autoestima, con el consumo
problemas psiquiátricos, como depresión, de sustancias en adolescentes (Alvarado et
ansiedad y desórdenes de personalidad al., 2001).
antisocial; contribuye directamente y de
modo indirecto a la epidemia del Virus FUNDAMENTACIÓN
de Inmunodeficiencia Humana [VIH] y, En Chile, se ha realizado un gran núme-
junto con el uso de alcohol, contribuye ro de trabajos que aborda el tema, lo que
considerablemente a la morbilidad y muestra su magnitud. En especial se ha
mortalidad infantil (Centers for Disease dedicado a ello el CONACE, el cual realiza
Control and Prevention & Drug Use [CDC], estudios a nivel nacional, regional y comu-
1991). nal, para evaluar la magnitud del problema

24
Consumo de sustancias en estudiantes

en población general y escolar (Rodríguez, relacionan con el individuo (historia familiar


Hernández & Cumsille, 2005). de consumo, experiencias de abuso físico,
De acuerdo al Sexto Estudio Nacional emocional o sexual en la infancia, conducta
de Drogas en Población Escolar de Chile agresiva, de aislamiento o hiperactividad en
presentado el año 2006 por CONACE, en la infancia), factores del entorno cercano
los escolares entre 8o básico y 4o medio se (conflictos dentro de la familia, separación
observó que la prevalencia del consumo de de los padres, modelos familiares en el con-
marihuana aumentó a un 15,2% en compara- sumo de drogas, poca dedicación a la es-
ción con un 13,1% el año 2001 y un 14,7% cuela, fracaso o abandono escolar, uso de
el año 2003. Las mayores tasas de consumo drogas por los amigos, actitudes favorables
se observan en 3° y 4° año de enseñanza hacia el uso de drogas por parte del grupo
media (22,4% y 27,1% respectivamente), de pares y conducta antisocial o delincuen-
en colegios particulares no subvencionados cia entre sus amigos) y los factores del am-
(15,2% municipalizados, 14,6% subvencio- biente social (deprivación social y pobreza,
nados y 17,0% particulares). El consumo de desorganización comunitaria, disponibilidad
pasta base y cocaína no ha experimentado y accesibilidad a las drogas, percepción so-
grandes cambios, con variaciones porcen- cial del riesgo y las normas y leyes de la co-
tuales de aproximadamente 0,1%. El con- munidad).
sumo de pasta base y cocaína mantiene una En el ámbito de la Educación Superior,
prevalencia estable de alrededor de un 4%, CONACE, como organismo del Gobierno de
mientras que el uso de éxtasis aumentó de Chile, es el responsable de las políticas de
1,3% a 2,0%, lo que es estadísticamente drogas que hoy se implementan en el país.
significativo. El 42% de la población esco- Para esto ha elaborado diversas estrategias
lar consume tabaco, lo que significa un au- para que los ciudadanos no consuman dro-
mento en relación al 38% detectado el año gas, o si ya lo están haciendo, poder frenar
2003. El consumo de alcohol aumentó de un su avance y evitar que se convierta en un
39% a un 44% entre los años 2003 y 2005 problema mayor (CONACE, 2005). Estas
(CONACE, 2006a). estrategias pretenden evitar y reducir el con-
Es muy importante destacar del mismo sumo de drogas en jóvenes de educación
estudio, que el grupo de desertores esco- superior técnica y universitaria. Algunos de
lares (menores en edad escolar que tra- los aspectos que aborda son el desarrollo de
bajan o buscan trabajo) registra la mayor actitudes, valores, habilidades y conocimien-
tasa nacional de consumo de marihuana, tos para evitar el consumo de drogas y pro-
cifra que bordea el 25%. Este mismo grupo mover estilos de vida saludables, la inser-
está también ampliamente expuesto al uso ción del tema drogas en las mallas curricula-
de pasta base y cocaína. Por otro lado, los res de las carreras de pre y postgrado para
niños, niñas y adolescentes que se encuen- formar técnicos y profesionales capacitados
tran escolarizados, consumen cinco veces en el problema, el desarrollo de una política
menos que aquellos que no asisten a la es- preventiva al interior de los establecimientos
cuela regularmente (CONACE, 2006a). En de educación superior, el fortalecimiento de
la misma línea, Araneda y Cumsille (2002) entornos saludables, y por último la imple-
mencionan en un estudio acerca del consu- mentación de programas de extensión a la
mo de drogas en la población adulta, que en comunidad en el ámbito de la prevención,
los jóvenes entre 19 y 25 años el consumo tratamiento y reinserción social (CONACE,
reciente de marihuana alcanza una tasa de 2006b).
14%, el de cocaína un 4,4% y la pasta base Para el logro de estas actividades,
un 1,5%. CONACE y la Red Universitaria de
En un estudio de Alvarado, Neves y Vidal Promoción y Autocuidado [Red UPRA]
(2003), se mencionan como factores aso- organizan desde el año 2002, la distribución
ciados al consumo de sustancias los que se de recursos económicos a proyectos

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 23-30 25


Investigación Fuentes, D.

estudiantiles que realicen actividades de sultó por el consumo de tabaco, alco-


prevención del consumo y promoción de hol, marihuana, cocaína, anfetaminas,
estilos de vida saludables. Es así como pasta base, éxtasis, dando la posibili-
el año 2005, el Tercer Fondo Nacional de dad de mencionar “otras” diferentes de
Proyectos de Prevención de Drogas en el la lista predeterminada.
Ámbito de la Educación Superior, seleccionó, - Frecuencia de consumo: para las sus-
mediante concurso público, a un grupo de tancias antes mencionadas, se con-
6 estudiantes pertenecientes a la Carrera sultó por la frecuencia de consumo en
de Técnico Superior en Enfermería de un unidad de tiempo, dando como posibles
Instituto Profesional y Centro de Formación opciones el no consumo, consumo 1
Técnica de la Región Metropolitana al que vez cada 6 meses, 1 vez cada 3 meses,
denominaremos “grupo responsable”. 1 vez al mes, 2 o 3 veces al mes, 1 vez
Dentro del proyecto estudiantil denomi- a la semana, más de 1 vez por semana,
nado “Todos somos parte...”, se contempló 1 vez al día y más de 1 vez al día.
la realización de esta investigación cuyo - Edad de inicio del consumo de la sus-
propósito es conocer la realidad de con- tancia.
sumo de algunos jóvenes pertenecientes - Motivos de consumo de la sustancia:
al instituto, con el objetivo de identificar las con la posibilidad para que el estudiante
características del consumo de sustancias al manifestara libremente su parecer.
interior de un grupo particular de estudiantes - Necesidad de recibir ayuda: en el caso
de educación técnica superior. que el alumno considere que su con-
sumo le es problemático.
METODOLOGÍA Para el análisis de los datos se utilizo el
Se realizo un estudio retrospectivo, software SPSS versión 11.0.
transversal y descriptivo. El universo
corresponde a 535 jóvenes estudiantes RESULTADOS
pertenecientes a la carrera de Técnico Su- De los 197 jóvenes que conforman
perior en Enfermería de un Instituto Profe- el grupo en estudio, el 80,7%, 159 es-
sional y Centro de Formación Técnica de tudiantes, señalaron que habían probado
la Región Metropolitana. La muestra fue alguna sustancia, al menos, una vez en
no probabilística, intencionada y quedó su vida. De estos, el 30,1%, solo han pro-
constituida por 197 alumnos, lo que repre- bado un tipo de sustancia, siendo la más
senta el 36,82% de la población. frecuente el alcohol en un 75,0% de este
El procedimiento utilizado para la re- grupo. Su consumo se inició a una edad
colección de datos fue la aplicación de un promedio de 17 años. En el caso de los
cuestionario autoaplicado diseñado por el estudiantes que reportaron consumir dos
“grupo responsable”, compuesto por tres sustancias (64 jóvenes, lo que equivale a
preguntas cerradas y una abierta. Este se un 40,25% del total), un 85,9% de ellos
aplicó en el mes de octubre del año 2005, asocia el tabaco al consumo de alcohol,
dentro del horario habitual de clases. con una frecuencia de “una vez al día” o
El cuestionario consta de los siguientes “más de una vez al día”, en el 74,5% de
ítemes: los casos. El 28,3% de los estudiantes
- Consumo de sustancias: para clasificar reportan consumir tres o más sustancias,
el consumo la variable se dicotomizó, siendo la marihuana la tercera asociación
de forma tal que se consideró “consu- mencionada en el 97,7% de los casos.
mo positivo” cuando al menos se había El consumo de tabaco descrito en la
consumido una de las drogas y “con- totalidad de los alumnos que participan
sumo negativo” cuando nunca se ha del estudio asciende al 55,3%, con una
utilizado alguna droga. frecuencia de consumo de “más de una
- Tipo de sustancias consumida: se con- vez al día” en el 42,2% de los casos

26
Consumo de sustancias en estudiantes

Tabla 1: Frecuencia de consumo de sustancias

Frecuencia de Consumo tabaco alcohol marihuana cocaína


N° %A %R N° %A %R N° %A %R N° %A %R

no consumo 87 44,2 - 48 24,4 - 134 68,0 - 172 87,3 -


1 vez cada 6 meses 2 1,0 1,8 19 9,6 13,1 12 6,1 22,2 6 3,0 66,7
1 vez cada 3 meses 5 2,5 4,6 10 5,1 6,9 10 5,1 18,5 1 0,5 11,1
1 vez al mes 4 2,0 3,7 19 9,6 13,1 11 5,6 20,4 2 1,0 22,2
2 a 3 veces al mes 5 2,5 4,6 31 15,7 21,4 9 4,6 16,7 0 0,0 0,0
1 vez a la semana 5 2,5 4,6 28 14,2 19,3 4 2,0 7,4 0 0,0 0,0
más de 1 vez a la semana 19 9,6 17,4 36 18,3 24,8 6 3,0 11,1 0 0,0 0,0
1 vez al día 23 11,7 21,1 0 0,0 0,0 0 0,0 0,0 0 0,0 0,0
más de 1 vez al día 46 23,4 42,2 2 1,0 1,4 2 1,0 3,7 0 0,0 0,0
no contesta 1 0,5 - 4 2,0 - 9 4,6 - 16 8,1 -

Total 197 100,0 100,0 197 100,0 100,0 197 100,0 100,0 197 100,0 100,0

N°= Número alumnos


%A= En base a total de alumnos
%R= En base a total de alumnos que consume

Tabla 2: Edad de inicio del consumo de la sustancia en los alumnos

Sustancia tabaco alcohol marihuana cocaína


Edades N° % N° % N° % N° %

10 1 1,20 0 0,00 0 0,00 0 0,00


11 1 1,20 0 0,00 0 0,00 0 0,00
12 3 3,61 1 1,03 0 0,00 0 0,00
13 3 3,61 4 4,12 1 2,78 0 0,00
14 14 16,87 11 11,34 2 5,56 0 0,00
15 24 28,92 21 21,65 8 22,22 0 0,00
16 13 15,66 20 20,62 4 11,11 0 0,00
17 10 12,05 18 18,56 5 13,89 1 25,00
18 8 9,64 13 13,40 8 22,22 2 50,00
19 3 3,61 2 2,06 5 13,89 0 0,00
20 2 2,41 7 7,22 3 8,33 1 25,00
21 1 1,20 0 0,00 0 0,00 0 0,00

Total 83 100,00 97 100,00 36 100,00 4 100,00

N°= Número de alumnos


%= Porcentaje de alumnos

(Tabla 1). La edad de inicio del consumo En el caso de la marihuana, el 27,4% del
de tabaco se ubica en el 83,1% de los grupo de jóvenes refiere haberla consumido,
casos, entre los 14 y 18 años (Tabla 2). con una frecuencia, en el 61,1% de los ca-
Del total de la muestra, el 73,6% refiere sos, que se describe como “una vez al mes”
haber consumido alcohol alguna vez, con o menos (una vez cada 3 o 6 meses) (Tabla
una edad de inicio entre los 14 y 18 años en 1). La edad de inicio del consumo de mari-
el 85,5% de los casos (Tabla 2). En el 24,8% huana, es entre los 15 y 19 años en el 83,3%
de este grupo, el consumo se describe con de los casos (Tabla 2).
una frecuencia de “más de una vez a la se- El 4,5% de los participantes del estudio
mana” (Tabla 1). refiere haber consumido cocaína alguna

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 23-30 27


Investigación Fuentes, D.

Tabla 3: Motivos de consumo de sustancias en los alumnos

Consumo de 1 sustancia N° Consumo de 2 sustancias N° Consumo de 3 o + sustancias N°

En celebraciones 9 Dependencia 20 Porque me gusta 16


Para compartir 5 Porque me gusta 11 Dependencia 9
Para desestresarme 5 Consumo social 8 Carrete 7
Porque me gusta 4 Monería 5 Monería 5
Otras 1
Total 44 Total 37
Total 24

vez, con una edad media de inicio de con- necesidad de solicitar ayuda (9). Es impor-
sumo de 18 años (Tabla 2). En el caso de las tante mencionar que el 33,5% del grupo de
anfetaminas, 2 alumnos refieren haberlas estudio no respondió a esta consulta (66)
consumido (1,01%), un 0,5% refiere haber (Tabla 4).
consumido pasta base y el 1,52% éxtasis
(Tabla 1). Tabla 4: Necesidad de recibir ayuda
Al preguntar los motivos por los cuales
los estudiantes consumen estas sustancias, Necesidad de recibir ayuda N° %
ellos refieren distintas razones. El grupo de
estudiantes que consume una sustancia, No consume 31 15,7
Sí 18 9,1
con un total de 24 comentarios, menciona Tengo dudas 9 4,6
en 9 de ellos relacionar el consumo a las No 73 37,1
celebraciones sociales como cumpleaños, No contesta 66 33,5
bautizos, matrimonios o “al obtener buenas
calificaciones”. Otras razones mencionadas Total 197 100,0
son “compartir con los amigos” (5) y “para
aliviar el estrés” (5) (Tabla 3). N° = Número de alumnos
El grupo de estudiantes que consume % = Porcentaje de alumnos
dos sustancias, con un total de 44 comen-
tarios, menciona en 20 de ellos “depender” CONCLUSIÓN
de la sustancia ingerida, 11 atribuyen el con- El 80,7% del grupo de estudio ha con-
sumo al “gusto” que sienten por consumirla y sumido al menos una vez en su vida una
8 refieren que el motivo de consumo se rela- sustancia como alcohol, tabaco o mari-
ciona con celebraciones sociales (fiestas, huana. Entre estos estudiantes, destaca el
año nuevo y cumpleaños) (Tabla 3). grupo que reporta consumir dos sustancias
El grupo de estudiantes que consume (40,25%) por sobre el que consume solo una
tres o más sustancias (con un total de 37 (30,1%) y tres o más sustancias (28,3%).
comentarios), mencionan en 16 de ellos el En el grupo de estudiantes que consume
“gusto” que sienten por consumirlas, 9 men- solo una sustancia, la más consumida es el
cionan “depender” de las sustancia ingeridas alcohol (75% del grupo en estudio). En el
y 7 de ellos atribuyen el consumo al “carrete” grupo que reportó consumir dos sustancias,
(fiesta con amigos) (Tabla 3). el tabaco es la droga más asociada al con-
Finalmente, al consultar por la necesi- sumo de alcohol (85,9%). La mayoría de los
dad de recibir ayuda, el 37,1% de los alum- estudiantes que consume tres sustancias o
nos que participan del estudio respondió no más, asocia la marihuana a las dos mencio-
necesitar ayuda (73), mientras que el 9,1%, nadas anteriormente en un 28,3%, lo que
respondió sí necesitarla (18). El 4,6% de los se asemeja considerablemente al 27,1%,
alumnos mencionó tener dudas frente a la entregado por CONACE (2006a) a nivel na-

28
Consumo de sustancias en estudiantes

cional, pero dista de aquellas cifras señala- sociales como cumpleaños, bautizos y ma-
das por otros trabajos como los de Araneda trimonios, mientras que la muestra en es-
y Cumsille (2002), en que se señala que solo tudio que consume dos sustancias refiere,
un 14% de los jóvenes asociaría marihuana en aproximadamente el 50% de los casos,
al consumo de alcohol y tabaco. consumir por que “depende” de la sustan-
En el caso de los estudiantes que cia ingerida. Y cerca del 40% de los jóvenes
reportaron consumir tabaco (55,3%), la etapa participantes de la investigación que refieren
de inicio del consumo es en la adolescencia. consumir tres o más sustancias, manifiestan
Este grupo cumple, al menos, uno de los que su motivación es el “gusto” que siente
criterios de Abuso de Sustancias (First, por consumir. Se destaca que en este grupo
Frances & Pincus, 2005). también se menciona, en aproximadamente
A diferencia de los datos aportados por el 24% de ellos, la “dependencia” de la sus-
el CONACE (2006a), la cifra de consumo de tancia como motivo de consumo.
alcohol es la más alta dentro de las sustan- Por último, es importante destacar que
cias mencionadas en el cuestionario, con un el 73% del grupo estudiado que afirmó con-
73,6%. Llama la atención en este grupo la sumir algún tipo de sustancias, manifestó no
elevada frecuencia de consumo de la sus- requerir ayuda con el consumo que presen-
tancia; cerca de un 25% de la población en- taba. Solo un 18% de ellos afirmó necesitar
cuestada consume alcohol más de una vez ayuda, lo que confirma el hecho que la dis-
a la semana. ponibilidad de drogas y la baja percepción
También se encuentran diferencias en los de riesgo, favorecen el uso de estas sus-
resultados obtenidos en esta investigación tancias. Ello demuestra además, la nece-
respecto al consumo de marihuana, ya sidad de incrementar la tarea preventiva
que según Araneda y Cumsille (2002), la con los jóvenes en la educación superior,
cifra en población entre los 19 y 25 años con el fin, por un lado, de aumentar el nivel
bordea un 14%, en cambio en este grupo se de información y conocimiento de los estu-
encontró que cerca del 27% refiere haberla diantes respecto a las drogas y sus efectos,
consumido. incorporando un enfoque que considere sus
Al analizar los datos aportados por el necesidades y cuestionamientos propios de
CONACE (2006a) respecto a la prevalencia su etapa evolutiva distinguiendo a la vez la
del consumo de cocaína, se observa que la escalada de consumo de drogas para dife-
cifra es similar al grupo de estudio de esta renciar puntos de quiebre en la estrategia
investigación donde el 4% refiere consumo preventiva y, por otro, estar atentos y aler-
de esta sustancia, lo mismo sucede respecto tas a aquellos jóvenes que perciben que
al consumo de éxtasis (1,5%). El consumo requieren ayuda y no lo han solicitado para
de pasta base se diferencia en aproximada- apoyarlos a que puedan establecer relación
mente un 2,5% de los datos aportados por el con personas o entidades que los puedan
CONACE (2006a), diferencia que puede atri- acoger y atender.
buirse a diferentes factores como el sesgo Finalmente y a propósito del debate en
en la selección de la muestra, escolaridad, la sociedad chilena respecto de la calidad
carrera a la cual pertenecen los estudiantes, de educación, entre las cuales la de nivel
nivel socioeconómico de los estudiantes, en- superior, cabe una reflexión e interrogante
tre otras, factores que podrían ser analiza- acerca del impacto y efecto que produce en
dos en un estudio posterior. el proceso de aprendizaje y formación de
La información que se obtuvo del grupo estos jóvenes y su futuro desarrollo profe-
de investigación con relación a los motivos sional, el alto nivel de consumo pesquisado
de consumo, muestran diferencias de acuer- en ellos.
do a la cantidad de sustancias consumidas. Es necesario preguntarse qué tipo de
El grupo que consume solo una sustancia, capital humano y social está apostando el
refiere hacerlo por motivo de celebraciones país para su desarrollo futuro.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 23-30 29


Investigación Fuentes, D.

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30
Revisión de Literatura Efectividad en el tratamiento de las adicciones

EFECTIVIDAD EN EL TRATAMIENTO DE LAS ADICCIONES

EFFECTIVENESS IN THE TREATMENT OF THE ADDICTIVE DISORDERS

Gianni Canepa
Psiquiatra Director programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía
Claudia Chomalí
Psicóloga, miembro programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía
Jaime Fuenzalida
Psicólogo, miembro programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía
Marianne Grass
Psicóloga, miembro programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía
Macarena López
Psicóloga, miembro programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía
Gustavo Quijada*
Psiquiatra Director programa de tratamiento de adicciones Clínica Santa Sofía

Artículo recibido el 2 de noviembre, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de diciembre, 2006

RESUMEN
La información científica sobre la efectividad en el tratamiento de los trastornos adictivos es
creciente. El tratamiento adecuado puede reducir el consumo, la conducta delictiva, el deterioro
social y el daño a la salud asociado al abuso de drogas. Existe dificultad para determinar lo
realmente efectivo por la diversidad de modalidades de intervención terapéutica, la duración de
los procedimientos y el momento del proceso en el que se evalúan los indicadores. Se agrega la
dificultad para homogeneizar los grupos de pacientes, por ser una patología multideterminada, con
frecuente comorbilidad, con factores asociados según el momento de evolución y con pacientes con
distintos grados de motivación. Se analizan estudios sobre resultados de tratamientos en personas
con patología adictiva. Se concluye que los tratamientos son efectivos al corto y mediano plazo,
encontrándose semejanzas entre estudios norteamericanos y europeos. La mayoría coincide en
que la probabilidad de buena respuesta aumenta en relación a la duración del tratamiento y tienden
a mantenerse en el tiempo. Las tasas de abstinencia a 5 años son alrededor de un 50%, la cesantía
disminuye en un 50% y la criminalidad en un 10%. El costo de tratar a pacientes portadores de
trastornos adictivos es menor que el costo asociado al uso de los servicios de salud y social,
la criminalidad y el uso de los servicios de justicia. Palabras clave: Rehabilitación, trastornos
relacionados con sustancias.

ABSTRACT
The scientific information about the effectiveness in the treatment of the addictive disorders is
increasing. The suitable treatment can reduce the consumption, the criminal conduct, the social
deterioration and the damage to the health associated with the abuse of drugs. Difficulty exists
to determine what is really effective, for the diversity of modalities of therapeutic intervention, the
duration of the procedures and the moment of the process in which the indicators are evaluated. The
article analyzes studies on results of treatments in persons with addictive pathology.. It concludes
that the treatments of addictions are effective to the short and medium term, being similarities
among North American and European studies. They coincides with that the probability of good
response increases in relation to the duration of the treatment and to be kept in time. The rates
of abstinence to 5 years are of about 50 %, the decrease of the unemployment is 50 % and the
criminality in 10 %. The cost of treating carrying patients of addictive disorders is minor that the
cost associated with the use of the services of health and social, the criminality and the use of the
services of justice. Key words: Rehabilitation, substance related disorders.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 31-38


* Correspondencia e-mail: gustavoquijada@gmail.com
31
Revisión de Literatura Canepa, G.

INTRODUCCIÓN & Wilbourne, 2002; Burns et al., 2005). En


La información científica sobre la efec- algunos de los estudios analizados, particu-
tividad en el tratamiento de los trastornos larmente los del grupo de la Universidad de
adictivos es abundante y creciente. Estas Pensilvania, se cuestiona la forma general
investigaciones subrayan que el tratamiento de evaluar los tratamientos de adicciones,
adecuado puede reducir no solo el consumo dado que tradicionalmente se realiza bajo el
propiamente tal, sino también la conducta paradigma del tratamiento agudo y se miden
delictiva, el deterioro social y el daño a la los resultados de una intervención específica
salud general asociado al abuso de drogas después de un período de tiempo determi-
y la adicción (Leshner, 1997). nado, lo que no necesariamente da cuenta
Los resultados relativos al impacto de de la efectividad de los tratamientos. Es por
las principales formas de tratamiento es- esto que se plantea la utilidad de evaluar los
tructurado son notablemente similares programas de tratamiento de adicciones bajo
en todas las naciones y culturas (Orga- el paradigma de las enfermedades crónicas,
nización de las Naciones Unidas [ONU], y medir el impacto de un tratamiento a través
Oficina contra las Drogas y el Delito de un sistema de cuidados y monitoreo con-
[ONUDD], 2003). Sin embargo, es difícil tinuo en el tiempo, como se realiza en enfer-
determinar qué es realmente efectivo, ya medades como la diabetes o la hipertensión
que los datos son poco comparables de- arterial (Mc Lellan, McKay, Forman, Cacciola
bido a la diversidad de modalidades de & Kemp, 2005).
intervenciones terapéuticas investigadas,
la duración de los procedimientos y el mo- PRIMER GRUPO DE ESTUDIOS
mento del proceso en el que se evalúan los Drug Abuse Treatment Outcome Studies
indicadores (Gossop, Marsden, Stewart & [DATOS] (1991-1993), es la última de una
Kidd, 2003; Miller & Wilbourne, 2002). Se serie de tres evaluaciones en los Estados
suma a ello, la dificultad para homogeneizar Unidos iniciadas en 1983, que proporciona
los grupos de pacientes: se trata de una datos para describir resultados en el corto
patología multideterminada, con frecuente y largo plazo de tratamientos en pacientes
comorbilidad, con diversos factores aso- adictos (Simpson & Sells, 1982; Hubbard,
ciados según el momento de evolución y Marsden, Rachal, Harwood, Cavanaugh
con pacientes con diferentes grados de & Ginzburg, 1989). Incluye una muestra
motivación, la cual además cambia, duran- grande de pacientes y tiene la gran ventaja
te el tratamiento (Sadock & Sadock, 2000; de agruparlos en solo cuatro modalidades
Miller & Wilbourne, 2002; Burns, Teson & de tratamiento: programas de Metadona,
O’Neill, 2005). tratamiento residencial de larga duración,
En base a la revisión realizada, se pueden tratamiento ambulatorio de larga duración
distinguir dos grupos de investigaciones, y hospitalización breve. Esto permite homo-
uno derivado de estudios financiados por los geneizar la muestra a pesar de los distintos
gobiernos (debido a su alto costo), que pro- tratamientos.
porcionan datos de muestras grandes estu- Aunque el objetivo principal ha sido
diadas a partir de gran cantidad de variables. conocer los resultados en el primer año de
Estudios que entregan información sobre el tratamiento, también se incluyen estudios de
estado del consumo en un país determinado seguimiento que investigan efectos a largo
y su énfasis está en la evaluación de la efi- plazo, identificando algunas variables que
ciencia de los programas de atención. Un se- podrían influir, de manera significativa, en
gundo grupo, y el más numeroso, está com- la mantención de los efectos positivos del
puesto por investigaciones llevadas a cabo proceso terapéutico (Hubbart, Craddock &
en muestras de pacientes de menor tamaño Anderson, 2003).
y que acotan las mediciones a efectos de El análisis de seguimiento de 1 y 5 años
variables específicas en el tratamiento (Miller muestra disminución del 50% en la preva-

32
Efectividad en el tratamiento de las adicciones

lencia de uso semanal, o más frecuente, Los pacientes que solicitaron admisión y
comparado con la medición pretratamiento, mostraron buena respuesta a tratamientos
especialmente para cocaína. También se libres de drogas (ambulatorio), presentan
constata reducción del 50% de la cesantía tasas de consumo similares a la de los paci-
y del 10% en la conducta delictiva. Este re- entes en tratamientos residenciales, pero sin
sultado es más probable cuando el paciente el deterioro social y la actividad delictiva que
está en tratamiento por más de seis meses. ellos tienen. La mitad de los pacientes había
La mayoría de los pacientes que presentan estado en programas de tratamiento anteri-
buena respuesta, la mantuvieron en ambas ormente, los que ingresaron a tratamiento a
evaluaciones. programas residenciales de corto tiempo y
Para los pacientes dependientes de respondieron satisfactoriamente, mostraron
heroína en programa de Metadona el niveles menores de consumo, niveles más
punto de corte en relación a la duración del altos de escolaridad, mejores empleos y
tratamiento es de un año. Los pacientes menos problemas judiciales (Valencia &
con más educación, más de treinta años Perez, 2004; Handelsman et al., 2005; Miller
y experiencias terapéuticas previas, & Wilbourne, 2002). Por otra parte, Han-
tuvieron, en general, mejores resultados. Se delsman et al., (2005), realizaron un estu-
destaca que los resultados de seguimiento dio que considera distintas variables con el
respaldan la efectividad de los tratamientos fin de predecir la disposición a tratamiento
para pacientes adictos a pesar de las en adolescentes y adultos (n= 10010). Las
modificaciones que se producen en los variables predictoras más significativas en
procedimientos terapéuticos, los patrones de ambos grupos fueron la dependencia y sín-
consumo y las variables socioambientales tomas de abuso de múltiples sustancias,
en las últimas dos décadas (Gossop et al., problemas de salud, familias irregulares y
2003). Es importante hacer énfasis en que mala relación con pares.
los resultados solo son alcanzados si los
pacientes permanecen el suficiente tiempo National Tretment Outcome Research
en tratamiento. Study [NTORS] (1994), es el primer estu-
Otro acierto de esta serie de estudios es dio prospectivo nacional sobre los resulta-
la identificación de aspectos similares en las dos obtenidos con distintas modalidades de
distintas modalidades de tratamiento efec- tratamiento para las adicciones en el Reino
tivas, entre las que destacan la inclusión Unido, que incluyen programas especializa-
de terapia de apoyo grupal, monitoreo de dos hospitalarios, programas residenciales
muestras de orina, talleres de prevención de de rehabilitación, programas de mantención
recaídas e ingreso a grupos de autoayuda de Metadona y programas de reducción de
una vez finalizado el proceso terapéutico Metadona (Gossop et al., 2003). Los dos úl-
(Hubbart et al., 2003). timos en settings comunitarios, es decir las
Del mismo modo se logra establecer personas reciben la droga, ya sea en dosis
diferencias en los resultados según el tipo estables o intentando disminuirla, en dis-
de pacientes admitidos a los distintos tipos tintas clínicas o lugares especializados en
de tratamiento. En general, es posible esta- Inglaterra. Algunos de sus resultados son los
blecer que los mejores resultados para pa- siguientes: la abstinencia promedio para toda
cientes dependientes a opiáceos se obtiene sustancia a 5 años es del 48,75%, tomando
con programas de Metadona. Pacientes con en conjunto todas las modalidades de trata-
mal funcionamiento social, cesantía, par- miento (Gossop et al., 2003). Además, una
ticipación en actividades ilegales, policon- vez producida la abstinencia, esta tiende a
sumo e ideación suicida, solicitan atención mantenerse (Gossop, Marsden, Stewart &
y responden bien a programas residenciales Treacy, 2002) lo mismo que los problemas
de largo plazo (Handelsman, Stein & Grella, asociadas como salud, comorbilidad y crimi-
2005). nalidad (Gossop, Marsden, Stewart & Rolfe,

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 31-38 33


Revisión de Literatura Canepa, G.

2000) los que disminuyen en la medida que sea reforzándola a través de contratos, o
se mantiene la abstinencia. Existe similitud interviniendo en contingencias sociales que
en los resultados según género (Stewart, favorecen el cambio. Menos respaldo tu-
Gossop, Marsden, Kidd & Treacy, 2003). A vieron los métodos diseñados para educar y
pesar de los diferentes perfiles de problemas confrontar, métodos aversivos o de shock y
pretratamiento, hombres y mujeres tienen, los que promueven insight buscando la natu-
por igual significativa reducción al año de raleza y las causas del alcoholismo (Miller &
seguimiento del uso de drogas, problemas Wilbourne, 2002).
de salud y conducta delictual. Esta realidad A pesar de las diferencias metodológicas,
solo es diferente en el caso del mayor riesgo los autores de Mesa Grande encontraron
de contagio de enfermedades a través del considerable convergencia entre distintas
uso de jeringas que se observa en las mu- revisiones. Citan a Finney y Monaham (1996,
jeres (Bennett, Velleman, Barter & Bradbury, citado en Miller & Wilbourne, 2002), quienes
2000). encuentran que los tres tratamientos con
La reducción con mayor peso estadístico soporte empírico son el refuerzo comunitario,
es la del uso de opioides ilícitos y benzo- el entrenamiento en habilidades sociales
diazepinas no prescritas entre los usuarios y la terapia matrimonial conductual. Estos
de metadona en régimen residencial (abs- tratamientos también aparecen en los cinco
tinencia de 66% a los 5 años). Los peores más importantes del “box score meted”
resultados se observa en pacientes alcohóli- utilizado por Holder, Longabaugh, Millar y
cos severos y en consumidores de crack y Rubonis (1991) y en los seis más importantes
cocaína (Gossop, Marsden, Stewart & Kidd, de los métodos conductuales de la revisión
2002). realizada por ellos.
Se muestra claramente que el costo de A su vez, Mc Crady (2000, citado en Miller
tratar a pacientes portadores de trastornos & Wilbourne, 2002), utilizando los crite-
adictivos es menor que el costo asociado al rios de la American Psicologycal Asociation
uso de los servicios sociales y de salud, la [APA], encontró que tres de los cinco más
criminalidad y el uso de los servicios de jus- importantes de Mesa Grande unían los cri-
ticia (Stewart, et al., 2003). terios de eficacia de la APA: intervenciones
breves, entrenamiento en habilidades socia-
ESTUDIOS ESPECÍFICOS les (incluido en su revisión en prevención de
Mesa Grande. Es una revisión del año 2001 recaídas) y fortalecimiento motivacional. Por
que incluyó 361 estudios controlados de tra- primera vez, en la revisión de Mesa Grande
tamientos de alcoholismo, con requerimien- dos intervenciones farmacológicas tuvieron
tos metodológicos mínimos determinados un importante respaldo: la terapia con an-
por los autores, abarcando una población tagonistas opioides (naltrexona, nalmefene)
total de 72.052 clientes (Gossop et al., 2003; y el acamprosato.
Miller & Wilbourne, 2002).
Entre los tratamientos psicológicos con Alcohol. En la misma línea que el estudio
mayor evidencia de efectividad se desta- anterior, es decir, con metodología similar y
can los que incluyen intervenciones breves, centrado en el alcoholismo, Moss y Bernice
entrenamiento en habilidades sociales, re- (2002), realizaron un seguimiento de hasta
fuerzo comunitario, contratos conductuales, ocho años. Los autores se focalizaron en la
terapia conductual de pareja y manejo indi- intensidad y duración del tratamiento y los
vidual de casos. Los tratamientos más efec- resultados obtenidos en el primer y octavo
tivos además, realizan intervenciones en las año de seguimiento, las características de
redes sociales y de apoyo de los pacientes, las muestras no presentan diferencias sig-
enfatizan las habilidades personales (auto- nificativas. También consideran el efecto de
eficacia, autocuidado) para detener o reducir la duración e intensidad de tratamiento en
el consumo y trabajan con la motivación, ya individuos que no ingresaron a este.

34
Efectividad en el tratamiento de las adicciones

Es importante revisar si se obtiene be- tipo de tratamiento indicado a los pacientes


neficio con un tratamiento adicional corto (terapia cognitivo-conductual, programa de
o de baja intensidad o si un tratamiento doce pasos y terapia motivacional) (Cutler &
largo y más intensivo obtiene mejores, ya Fishbain, 2005). Es evidente, al seguimiento
que la mayoría de los estudios muestra de tres años que el programa de doce pasos
que la duración del tratamiento puede ser muestra mejores resultados que la terapia
el factor esencial. Al revisar la literatura se motivacional (Longabaugh, Wirtz, Zweben &
demuestra que las personas que ingresan Scout, 1998).
inmediatamente a tratamiento después de Las siguientes variables se asociaron
buscar ayuda tienen mejores resultados con menores tasas de abstinencia y más
que aquellos que lo retrasan. Una pregunta problemas asociados al año de seguimien-
clave es si los que retrasan el tratamiento to (en forma independiente del tratamiento
tienen mejores resultados que aquellos indicado): antecedentes de deterioro social
que no entran nunca. Las personas que asociado al consumo, red social que incluye
rechazan una primera ayuda, van a estar usuarios de droga o bebedores excesivos de
menos motivados al cambio y será más alcohol y comorbilidad psiquiátrica (Weisner,
difícil establecer una alianza terapéutica (Di Matzger & Kaskutas, 2003).
Clemente & Hughes, 1990 citado en Moos y
Bernice, 2002). Quienes realizan tratamiento Otras drogas. El estudio metodológicamente
en el primer año tienen mejores resultados destacado, con un seguimiento de cinco
al año y octavo año de seguimiento que años, para distintas drogas ilícitas, es
aquellas personas que no reciben ayuda. el realizado por Gossop et al., (2003).
Después de un año, la duración del trata- Los datos se recolectaron al comienzo
miento predice mejores resultados en tres del tratamiento, al año, a los 2 años y a
mediciones: patrones de consumo de alco- los 4-5 años. Se midió uso de drogas
hol (abstención, problemas y síntomas de ilícitas, conducta de inyectarse y compartir
dependencia), funcionamiento psicológico jeringas, uso de alcohol, salud psicológica
(autoeficacia y depresión) y funcionamiento y criminalidad. Los resultados indican que
social (participación en actividades sociales, la abstinencia de drogas ilícitas aumenta
cantidad y calidad de amistades). después de tratamientos residenciales y
Los resultados relevantes del segui- comunitarios. Se encontraron reducciones
miento a ocho años son que las mujeres en la frecuencia del uso de heroína,
reportan menos síntomas de dependen- Metadona no prescrita, benzodiazepinas,
cia, mejores índices de autoeficacia y me- conducta de inyectarse y compartir jeringas
jor funcionamiento social. Las personas y problemas conductuales. Para la mayoría
casadas presentan menos síntomas de de las variables las reducciones fueron
dependencia y son más autoeficaces que evidentes al año con resultados que se
las solteras. La duración e intensidad de mantuvieron alrededor de ese nivel o
tratamiento se asoció con abstinencia me- continuaron disminuyendo. Los resultados
dida tanto al primer año postalta como a para crack, cocaína y alcohol no fueron
los ocho años. Quienes recibieron un trata- significativamente diferentes a los 4-5
miento breve tuvieron mejores resultados años de seguimiento que al comienzo
que los no tratados. Los pacientes que del tratamiento (Gossop et al., 2003).
recibieron una intervención más larga ex- Metodológicamente destacado por ser
perimentaron mejores resultados en todas un estudio longitudinal, prospectivo y
las mediciones que los no tratados. con diseño de cohorte. Los datos fueron
En este punto cabe mencionar los resul- recolectados con entrevistas estructuradas.
tados del proyecto MATCH, un complejo y La muestra comprendió 418 pacientes de
costoso estudio en dependientes a alcohol, 54 lugares en las cuatro modalidades de
que intenta relacionar los resultados con el tratamiento NTORS

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 31-38 35


Revisión de Literatura Canepa, G.

DISCUSIÓN y el retorno a un estilo de vida adaptativo.


La mayoría de la información sobre re- Esto implica en lo terapéutico, vigilancia en
sultados de tratamientos en pacientes adic- aquellos aspectos que no se han tratado
tos proviene de Estados Unidos o Europa. suficientemente, redefinición de las situacio-
En América Latina es aún escasa y está en nes de alto riesgo de acuerdo al desarrollo
sus inicios. Esta información, principalmente del paciente, rápido abordaje de los nuevos
de estudios realizados con pacientes alco- consumos y mantención de la motivación y
hólicos o usuarios de programas de Meta- percepción de autoeficacia.
dona, es consistente y apoya desde el punto Desde el punto de vista de la investig-
de vista clínico y económico, la efectividad ación de resultados, se observa la nece-
de los tratamientos de pacientes adictos. La sidad de desarrollar nuevos indicadores que
probabilidad de buena respuesta aumenta puedan ayudar a mejorar la medición de la
en relación a la duración del tratamiento y efectividad de los tratamientos que se utili-
estos resultados tienden a mantenerse en el zan en el proceso terapéutico de las perso-
tiempo. Es interesante señalar que a pesar nas con trastornos adictivos.
de las diferentes poblaciones y programas Es importante hacer algunas
de tratamiento estudiados en el Reino Unido consideraciones sobre la metodología
y en los Estados Unidos, se encuentran si- empleada en estas investigaciones. Por
militudes en los resultados de estudios de ejemplo, no se debe olvidar que se trata de
gran escala multicéntricos. estudios que se realizaron hace más de una
Existe creciente información sobre qué década y por lo tanto, la muestra no representa
tipo de pacientes adictos responde mejor a necesariamente las características de los
una intervención terapéutica determinada; consumidores en la actualidad. Otro tema
así, los equipos clínicos y las instituciones relevante es la definición de “respuesta a
que financian estos tratamientos, pueden tratamiento” utilizada. Mientras para DATOS
equilibrar mejor tanto la duración e intensidad, se evalúa el porcentaje de pacientes que
como el tipo de cuidado posterior. Aspectos bajaron su consumo a un episodio a la
como intensidad del consumo, policonsumo, semana o menos (no necesariamente
comorbilidad psiquiátrica, nivel educacional, abstinencia), NTORS informa porcentajes de
funcionamiento laboral y conducta delictual, abstinencia (cero consumo), lograda por los
son algunas variables cuya incidencia es pacientes en los programas de tratamiento y
bastante clara en los procesos terapéuticos. la mantención de la misma (Godfrey, Steward
Se considera un gran aporte del estudio & Gossop, 2004). Otro sesgo es que la
DATOS (Handelsman et al., 2005), el definir mayoría de las investigaciones se realizan en
claramente los tipos de tratamientos y analizar poblaciones que buscan tratamiento y por lo
los resultados por separado. En relación con tanto, los resultados debieran considerarse
este esfuerzo por definir claramente distintos solo aplicables a este subgrupo de pacientes
perfiles de presentación clínica, los estudios dependientes. También es importante unificar
que han considerado la diferenciación por criterios sobre drop out y seguimientos, es
edad y género objetivan las diferencias entre decir cuál es la línea de base y cuáles son los
mujeres y jóvenes, tanto en perfiles como en procedimientos para asegurar adherencia a
factores pronósticos. tratamiento durante el período de estudio. En
Es muy importante considerar los resul- el futuro, es esperable que las investigaciones
tados que son más efectivos para el diseño logren definir cada vez mejor la relación entre
de programas de tratamiento y la posterior perfil clínico y tipo de intervención, así como
medición de resultados. Es necesario anali- aislar el peso que tiene en el resultado final
zar estos trastornos como una enfermedad cada variable en particular. Se espera que la
crónica, es decir, un cuadro que debe ser investigación a nivel latinoamericano permita
monitoreado permanentemente tras la inter- definir mejor las características particulares
vención aguda que logra la compensación de nuestra población.

36
Efectividad en el tratamiento de las adicciones

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38
Revisión de Literatura Familia y adicciones: una mirada sistemática

FAMILIA Y ADICCIONES: UNA MIRADA SISTÉMICA

FAMILY AND DRUGS: SYSTEMIC APPROACH

Angelina Dois *
Enfermera- Matrona, Terapeuta Familiar y de Parejas. Profesor Auxiliar, Escuela de Enfermería,
Pontificia Universidad Católica de Chile.

Artículo recibido el 15 de junio, 2006. Aceptado en versión corregida el 28 de noviembre, 2006

RESUMEN
Las adicciones pueden ser entendidas como un problema que afecta a una persona en particular
o como la forma en que se expresa un conflicto al interior de una familia. El enfoque sistémico
permite comprender cómo la adicción puede ser necesaria para la mantención del sistema
familiar, y cómo se transforma en la única respuesta posible a un conflicto familiar más amplio
y complejo. El presente artículo pretende hacer una revisión de la literatura en torno al enfoque
sistémico para dar cuenta de cómo ocurre el fenómeno de la adicción a drogas y cómo este
puede ser necesario para la mantención del sistema familiar. Palabras Clave: Familia, relaciones
familiares, trastornos relacionados con sustancias.

ABSTRACT
Drug addiction can be understood as a problem that affects a particular person or as a way in
which a familial conflict is expressed. This systemic approach enables us to see how addiction can
become necessary for the maintenance of the Family unit, and how drugs become the only possible
response to a more complex and ample family conflict. This article attempts to conduct a revision
of literature related to the systemic approach in order to better understand the phenomenon of
drug addiction, how it happens, and how it can be necessary for the maintenance of the family
system. Key Words: Family, family relations, substance related disorders.

*2006, Horiz Enferm,


Correspondencia 17,
e-mail: 2, 39-44
adois@uc.cl 39
Revisión de Literatura Dois, A.

INTRODUCCIÓN están desarrollando, lo que asegura su man-


En Chile, de acuerdo a los resultados del tención como totalidad a lo largo del tiempo
último estudio de Consejo Nacional de Con- (Stephenson, Henry & Robinson, 1996).
trol de Estupefacientes [CONACE] (2004), la Las familias, en tanto sistemas abiertos,
prevalencia de consumo de drogas ilícitas en tienden a funcionar en modalidades de ex-
el último año, alcanzó a 5,83%. Como ha sido pansión en su fase de crecimiento y de au-
la tendencia, la droga ilícita más consumida torregulación en su fase de equilibrio. La
en Chile es la marihuana (5,29%), seguida alternancia de estas dos fases es un índice
por el clorhidrato de cocaína y la pasta base de adaptabilidad a las condiciones de super-
(1,28% y 0,62%, respectivamente), siendo la vivencia del sistema en relación con su me-
tasa de consumo mayor en hombres que en dio (Bertalanffy, 2000). Estos procesos son
mujeres. además sinérgicos y recursivos, es decir, los
Según grupo etario, las mayores tasas integrantes del sistema familiar influyen y son
de consumo se presentan en los jóvenes influidos por el sistema mismo y a su vez son
entre 19 y 25 años de edad, seguido por causa y efecto de los procesos que ocurren
aquellos entre 26 y 34 años y luego el de en la familia.
los adolescentes entre 12 y 18 años (16,1%, En el plano familiar, los patrones de con-
7,6%, 6,6%, respectivamente). ducta son estilos de respuesta que tienen los
Estas cifras no reflejan la complejidad del miembros del sistema y que coinciden con
fenómeno de la adicción a sustancias, el que una gama de respuestas viables en ese grupo
puede ser entendido como un problema que en particular para mantener bajos los niveles
afecta a una persona en particular o como la de estrés de la familia (Herrera, 1997)
forma en que se expresa un conflicto al inte- Es por esto, que para comprender el com-
rior de una familia. El presente artículo pre- portamiento humano se debe considerar el
tende hacer una revisión de la literatura en contexto general y familiar en que este se
torno al enfoque sistémico para dar cuenta desarrolla.
de cómo ocurre el fenómeno de la adicción En este sentido las adicciones aparecen
a drogas y cómo este puede ser necesario como patrones de conducta posibles dentro
para la mantención del sistema familiar. En de una familia y adquieren un significado
este sentido, la adicción puede transformarse simbólico o metafórico que, sin descuidar los
en la única respuesta posible a un conflicto componentes más estrictamente biológicos,
familiar más amplio y complejo. se conectan con algo que debe ser
Por último, se revisan algunos elementos comunicado, sin haber podido elaborar una
necesarios de considerar al momento de respuesta mejor (Dois, 2002; Onnis, 1990).
planificar el cuidado de enfermería. La familia, como una respuesta al estrés
que genera la inestabilidad producida por difi-
LA FAMILIA COMO SISTEMA cultades individuales, intrafamiliares o con el
Los seres humanos y las organizaciones contexto, desarrolla formas de organización
sociales que los agrupan funcionan como familiar que mantienen la conducta de con-
sistemas abiertos, es decir, están en pro- sumo como solución temporal del conflicto
cesos permanentes de retroalimentación que (Iraurgi, Sanz & Martínez - Pampliega, 2004;
les permiten mantener el equilibrio entre la Anderson & Henry, 1994)
estabilidad y el cambio, en interacción con En relación con la persona, la conducta
el medio en el que están insertos (Jutoran, adictiva se convierte en una alternativa de
2004). solución a la necesidad de expresión del
La familia es un sistema abierto que a lo conflicto y por lo tanto, adquiere un doble
largo del ciclo evolutivo vive distintos pro- significado en relación con el sistema, por un
cesos de transformación y reestructuración lado, denuncia el desequilibrio y por el otro,
que le permiten adaptarse a las exigencias lo restablece, lo que configura su potencial
de sus miembros y del contexto donde se estabilizador (Dois, 2002). De esta manera

40
Familia y adicciones: una mirada sistemática

puede ser vista por un lado, como una ga- Wolin & Reiss, 1985; Roizblat, 1985). Por
nancia primaria de la situación y por el otro, otro lado, si este patrón es subestimado por
los comportamientos que se le asocian a ni- la familia y la percepción de riesgo es baja, la
vel individual como familiar, pueden ser vistos probabilidad de ocurrencia y mantención de
como ganancias secundarias (prolongación una conducta adictiva es mayor (Macaulay,
del aislamiento o de la dependencia). Griffin, Gronewold, Williams & Botvin, 2005;
La adicción se transforma en el aviso Wu et al., 2004)
de una persona que está siendo exigida en Entre las pautas relacionales que más
algún sentido, más allá de lo que permiten se asocian al consumo de sustancias se
su organización y posibilidades (Schnake, encuentran aquellas en que puede observarse
1999) una relación simbiótica entre la madre y sus
Minuchin y Palazolli (1974 citados en Onnis, hijos, lo que dificulta la individuación de los
1990) sugieren que los sistemas familiares mismos o alianzas muy estrechas entre uno
que tienden a presentar un número mayor de los padres y su hijo(a). Estos procesos
de episodios sintomáticos en sus miembros tienden a que la persona use el consumo
tienen modelos interactivos y organizativos como una ilusión de diferenciación y control
con características disfuncionales típicas. sobre sí mismo que paradójicamente lo
Entre ellas se encuentra el aglutinamiento, hace aún más dependiente de su familia.
la sobreprotección, la rigidez y la baja Situación similar ocurre cuando la persona
tolerancia al conflicto, lo que es reforzado con busca en el grupo de pares adictos refugio
lo encontrado por Stanton y Heath (2005) ante situaciones de conflicto intrafamiliar con
en relación a la frecuencia de contacto que la consecuente generación de una ilusión
establecen los adictos con sus familias de de independencia (Stanton et al., 1988;
origen, incluso en personas adultas. Steinglass et al., 1985).
Por otro lado, Stanton y Heath (2006) Otros elementos que destacan en las
definen ciertos factores estructurales de dinámicas familiares que sostienen las
las familias que aumentan la posibilidad de adicciones se refieren a las dificultades de
aparición del fenómeno en sus miembros. los padres en el rol modelador de la conducta
Dentro de estos, se reconocen estilos de los hijos, proveer límites y supervisar sus
relacionales que, por un lado, no promueven acciones (Macaulay et al., 2004)
la búsqueda de la identidad de sus miembros
y por otro, los hacen percibirse como menos CONSIDERACIONES FINALES
queridos y aceptados. El enfoque biomédico tradicional centra
En el mismo sentido, una baja percepción su intervención en la enfermedad, es decir,
de satisfacción de los integrantes de la familia en la adicción. En ese sentido se limita a
con el nivel de funcionamiento al interior de probar esquemas terapéuticos, a prescribir
ella y de esta con su entorno también aumenta medicamentos y a reforzar la designación de
la probabilidad de ocurrencia de conductas la persona en el rol de paciente adicto. Esta
adictivas. Además, la conducta adictiva se perspectiva ofrece a la enfermera una visión
asocia con pocos, escasos o insuficientes sesgada de una realidad de mayor compleji-
recursos familiares en el manejo del estrés y dad, en que la conducta adictiva se plantea
la vulnerabilidad de la misma (Iraurgi, et al., como una respuesta a una situación familiar
2004). e involucra personas y dinámicas interaccio-
Sin embargo, no puede desconocerse la nales que se sostienen en la adicción.
influencia de los patrones adictivos familiares, En este sentido, la enfermera debiera
es así que la probabilidad de consumo es mayor preguntarse ¿al servicio de qué está el con-
cuando hay una frecuencia multigeneracional sumo y el comportamiento del consumidor? y
en el patrón de consumo (sustancias, juego, así comenzar a desenmarañar las relaciones
etc.) (Wu, Lu, Sterling & Weisner, 2004; que sostienen y mantienen el consumo al in-
Stanton et al., 1988; Steinglass, Bennett, terior de la familia pudiendo de esta manera,

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 39-44 41


Revisión de Literatura Dois, A.

comprender la función que la adicción está los miembros de la misma (Aylwin & Solar,
cumpliendo como síntoma en la organización 2002; Hidalgo & Carrasco, 1999) lo que por
familiar. un lado, puede aumentar la comprensión de
Si por un lado se reconoce la forma en que la situación, y por el otro, permitirá buscar
supuestos culturales operan en la construcción y experimentar distintas formas de afronta-
de las experiencias, y por el otro, se releen los miento y de solución (Vargas & Zago, 2005),
síntomas según la construcción que cada per- coconstruyendo una narrativa alternativa que
sona hace de ellos la enfermera podrá com- permita visualizar un camino donde el cambio
prender las emociones y conductas que se han es posible (Strong & Tomm, 2006).
desencadenado y planificar un cuidado de en-
fermería centrado en la persona y sus dimen-
siones, creado de acuerdo a sus necesidades REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
y que la considere como un agente activo y
participante de su propio cambio. Anderson, A. & Henry, C. (1994). Family sys-
En ese sentido, algunos elementos im- tem characteristics and parental be-
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2006, Horiz Enferm, 17, 2, 39-44 43


Revisión de Literatura Efectos del uso de drogas en el embarazo

EFECTOS DEL USO DE TABACO, ALCOHOL Y COCAÍNA EN EL EMBARAZO


Y SU DESCENDENCIA

EFFECTS OF THE USE OF TOBACCO, ALCOHOL AND COCAINE IN


PREGNANCY AND ITS DESCENDANTS

Paula Medeiros*
Enfermera Matrona, Licenciada en Enfermería
Lauren Poupin
Enfermera Matrona, Magíster en Salud Pública, Profesora Adjunta, Escuela de Enfermería,
Pontificia Universidad Católica de Chile

Artículo recibido el 20 de mayo, 2006. Aceptado en versión corregida el 2 de noviembre, 2006

RESUMEN
El consumo de sustancias adictivas constituye un problema de salud pública. El mayor consumo en mujeres se
produce en plena edad reproductiva, lo cual las expone a riesgos en su salud reproductiva y su descendencia.
Objetivo: Conocer efectos del consumo de tabaco, alcohol y cocaína en el embarazo. Metodología: Se realizó una
búsqueda en bases de datos científicos, cuyos límites incorporaron la revisión de artículos con menos de 6 años de
antigüedad, de acceso libre y texto completo. Se encontraron 5.591 artículos, de los cuales se rescataron 24 para
el estudio. Resultados: El consumo de tabaco lleva a parámetros menores en el crecimiento neonatal, predispone a
mayor excitabilidad e hipertonía, y lleva a mayor riesgo de cólico infantil y síndrome de muerte súbita. El consumo
de alcohol aumenta el riesgo de parto prematuro, bajo peso de nacimiento, mortinato, aborto espontáneo en el pri-
mer trimestre, alteración del metabolismo de ácidos grasos fetales, abolición de la modulación del óxido nítrico en la
función vascular de la embarazada, y lleva a riesgo neurológico en el recién nacido. Frente al consumo de cocaína
se observa menor peso de nacimiento, talla y circunferencia craneana, aumento del riesgo de malformaciones o
patologías en el periodo neonatal, y lleva a menor desarrollo y madurez del sistema nervioso central. Conclusiones:
El consumo de tabaco, alcohol y cocaína prenatal altera el crecimiento intrauterino y lleva a alteraciones neurológi-
cas. Consumir tabaco aumenta el riesgo de cólico infantil y muerte súbita; al beber alcohol hay mayor riesgo de pre-
maturez, aborto espontáneo y mortinato; y el de cocaína predispone al recién nacido a malformaciones, síndrome
de abstinencia y a una problemática social. Los profesionales de la salud deben estar atentos a prevenir el uso de
sustancias desde la etapa escolar y a pesquisar los casos de consumo durante el embarazo para una intervención
oportuna. Palabras clave: Embarazo, mujeres embarazadas, trastornos relacionados con sustancias.

ABSTRACT
The use of addictive substances is an important public health problem in Chile. It is astonishing to find that the
highest consumption rates are in women of reproductive age, exposing them to complications in their pregnancies.
Objective: Identify the effects of tobacco, alcohol and cocaine use during pregnancy. Methods: A scientific database
search was conducted with the following limits; articles less than 6 years old and free full text access. 5591 articles
were found and of them 24 were used in the study. Results: Consumption of tobacco leads to lower growth
parameters and predisposes newborns to greater excitability and hypertone, as well as higher risk of infantile colic
and sudden infant death syndrome. Alcohol use is related to risk of preterm delivery, stillbirth, and spontaneous
abortion in the first trimester, alteration of the vascular function and fatty acid’s metabolism and neurological risk.
Cocaine consumption makes newborns prone to low birth weight, decreased length and cranial circumference, as
well as increasing risk of malformations or other pathologies in the neonatal period and leads to under development
and lack of maturity of the central nervous system. Conclusions: Consumption of tobacco, alcohol and cocaine
affects intrauterine growth parameters and leads to neurological alterations. Tobacco consumption also increases
risk of infantile colic and sudden infant death syndrome. The use of alcohol increases risk of preterm delivery,
spontaneous abortion and stillbirth. Cocaine can predispose newborns to malformations, abstinence syndrome
and to social problems. Due to the acknowledgment of these effects on perinatal outcomes, health professionals
must be attentive to detect all cases of drug use in order to provide adequate interventions for the diminishing or
cessation of these habits. Key words: Pregnancy, pregnant women, susbstance-related disorders.

2006, Horiz Enferm,


* Correspondencia e-mail:17, 2, 45-54
: ptmedeir@puc.cl 45
Revisión de Literatura Medeiros, P.

INTRODUCCIÓN rrollo psicomotor, muerte súbita e hipertonía


Los efectos dañinos del consumo de ta- (Aguilera & Izarra, 2005), como también, ries-
baco, alcohol y cocaína, asociados al emba- go de hematoma retroplacentario, insuficien-
razo es un tema que cobra gran importancia cia placentaria, aborto espontáneo, síndrome
en Chile, donde existen las mayores tasas de hipertensivo del embarazo (Lugones & Israel,
consumo a nivel mundial (Consejo Nacional 2005), alteraciones conductuales y estructu-
para el Control de Estupefacientes [CONACE], rales en el cerebro, y síndrome de abstinen-
2005). El mayor porcentaje de consumo en cia en el recién nacido (Echeverría, 2003).
la mujer, se produce en la edad reproductiva El propósito de la siguiente revisión bi-
(CONACE, 2005). bliográfica es conocer los efectos que estas
Según un estudio del CONACE realizado substancias producen en el embarazo y en
en el año 2005, 4 de cada 10 mujeres fuma el período postnatal, para encontrar formas
(39,5%). Más de la mitad de la población de de intervenir y fomentar el autocuidado. Para
mujeres chilenas (53,5%) consume alcohol, esto, se formuló la siguiente pregunta de in-
siendo dependientes de este un 5% de ellas. vestigación: ¿Qué efecto tiene el consumo
En relación al consumo de drogas ilícitas por de tabaco, alcohol y cocaína en el embarazo
mujeres, el mayor consumo se encuentra en- y en el período postnatal?
tre los 19 y 25 años de edad, siendo la mari- Objetivo General: Conocer el efecto que
huana la droga más usada (2% de la pobla- tiene el consumo de tabaco, alcohol y cocaí-
ción), seguida por la cocaína (0,5%) y luego na en el embarazo y en la etapa perinatal.
la pasta base (0,1%). A pesar que el consu- Objetivos Específicos:
mo de drogas es más bajo en mujeres que en - Determinar el efecto del tabaco, alcohol
hombres, ellas presentan mayores niveles de y cocaína, dependiendo del periodo del
dependencia a pasta base y cocaína. embarazo en el cual se consumen.
Por otra parte, en Chile nacen aproxima- - Identificar los efectos perinatales y post-
damente 250.000 niños al año (Instituto Na- natales del consumo de tabaco, alcohol y
cional de Estadísticas [INE], 2003), de acuer- cocaína durante el embarazo
do a la prevalencia de consumo dada por el - Determinar en qué medida afecta la can-
CONACE, se puede deducir que un 53,5% tidad de sustancia adictiva consumida
de estos niños podrían estar expuestos a - Identificar los efectos producidos cuando
los efectos del alcohol, un 39,5% expuestos se consume más de una sustancia
a tabaco, y un 0,5% a cocaína. Problema
importante de salud pública, que tiene com- METODOLOGÍA
plicaciones y secuelas en la descendencia, El estudio bibliográfico se realizó a partir
como son, frente al uso de tabaco, el parto de la búsqueda de artículos, encontrándose
prematuro, la restricción del crecimiento in- 24 estudios en las bases de datos: Pubmed,
trauterino, bajo peso para edad gestacio- Highwire, Scholar, Lilacs. Los límites de
nal, circunferencia craneana pequeña, bajo búsqueda utilizados fueron publicaciones
puntaje en Apgar, muerte fetal y neonatal y a partir del año 2000, escritos en inglés o
malformaciones, entre otras (Aguilera & Iza- español y de texto completo con acceso
rra, 2005). En cuanto al uso de alcohol, sus gratuito. Las palabras clave utilizadas
efectos en el embarazo incluyen el síndrome fueron: Pregnancy and alcohol, Pregnancy
alcohólico fetal (SAF), bajo peso nacimien- and smoke, Pregnancy and substance use,
to, prematurez e hipertonía (Aguilera & Iza- Tobacco and pregnancy, Pregnancy and
rra, 2005). El consumo de cocaína prenatal Cocaine, Embarazo y droga, Embarazo y
puede producir desprendimiento prematuro alcohol, Embarazo y tabaquismo.
de placenta normoinserta, ruptura de mem- Se presentan los artículos seleccionados
branas, bajo peso de nacimiento, restricción según substancia adictiva estudiada. Se des-
del crecimiento intrauterino, malformaciones, criben los efectos obstétricos y aquellos que
anomalías cromosómicas, retraso en el desa- alteran el crecimiento, desarrollo y comporta-

46
Efectos del uso de drogas en el embarazo

miento neurológico del recién nacido. Luego la edad gestacional frente a la exposición
se analizan los efectos de dichas sustancias a tabaco ambiental (Goel, Radotra, Singh,
dependiendo del periodo del embarazo en el Aggarwal & Dua, 2004). Sin embargo, a
cual se consume, cómo afecta la cantidad de diferencia de lo descrito por Alonso et al.
consumo, y los efectos cuando se consume (2005), este estudio no encontró diferencias
más de una sustancia. en el peso de los recién nacidos. Por otro
lado, Nakamura et al. (2004), estudiaron
Frecuencia de consumo de drogas duran- los efectos del tabaquismo activo y pasivo,
te el embarazo concluyendo que fumar predispone a una
En el estudio de Faneite, Rivera, Fanei- mayor tasa de recién nacidos de bajo peso.
te, Guinand y Delgado (2004) para conocer Frente al tabaquismo, no varió la tasa de
la frecuencia del consumo de tabaco, alco- cesárea, el riesgo de prematurez, ni la
hol, café y bebidas cola en embarazadas, se relación peso nacimiento-edad gestacional,
midió su consumo durante los periodos pre- a diferencia de lo observado por Goel et al.
concepcional y embarazo. En comparación (2004).
con estudios anteriores sobre la misma po- Otro estudio, que midió los efectos del
blación, encontraron una disminución en el tabaquismo materno en el comportamiento
consumo de tabaco, y un aumento en el de neurológico, a través de una escala de neu-
alcohol. Shahul, Ebrahim, Decoufle y Palaka- rocomportamiento denominada Neonatal
thodi (2000), entre 1987 y 1997 estudiaron Intensive Care Unit [NICU] Network Neuro
el consumo de tabaco y alcohol por mujeres behavioral Scale [NNNS] concluyó que los
en edad reproductiva. Observaron cómo en recién nacidos expuestos a tabaco eran más
mujeres embarazadas el consumo de ambas excitables, hipertónicos y mostraban más
drogas disminuía significativamente pasando signos de estrés/abstinencia en el sistema
de un 5,4% a un 3% en los primeros años y nervioso central, gastrointestinal y en el área
manteniéndose luego estable durante el res- visual, y que además requerían más atención
to del estudio. Observaron también que tras para mantenerse alertas (Law et al., 2003).
conocer su embarazo 8 de cada 10 mujeres Por otro lado, Søndergaard, Henriksen,
suspendían su consumo de tabaco, lo que Obel y Wisborg, (2001) evaluaron la aso-
concuerda con el estudio de Faneite et al. ciación entre tabaquismo materno y cólico
(2004) en el que el consumo de tabaco antes infantil (CI), encontrando que un 31,2% del
y después del embarazo disminuía de 6,4% total de niños con CI eran hijos de madres
a 4,2%. fumadoras.
Huang, Wang, Dergacheva y Mendelowitz
Efectos del uso prenatal de tabaco (2005), realizaron un estudio para comprobar
Sánchez, Téllez y Hernández (2004) la hipótesis del mecanismo de la hipoxia/
evaluaron el efecto del tabaquismo, en el hipercapnia y su posible relación con la
peso y la talla de recién nacidos, encontrando exposición prenatal a nicotina, lo cual haría
que los hijos de madres fumadoras, pesaron susceptibles a los recién nacidos expuestos,
154 g menos y midieron 0,79 cm menos que a presentar síndrome de muerte súbita.
los de no fumadoras. Hallazgo similar al Luego de exponer a ratones preñados y
encontrado por Alonso, Cano, Girón, Yep y no preñados, expuestos y no expuestos a
Sánchez (2005), quienes al evaluar el efecto nicotina, a situaciones de hipoxia/hipercapnia,
del tabaquismo activo y pasivo en el peso de se estableció un mecanismo neuroquímico
nacimiento, observaron una disminución de para la respuesta del gasto cardíaco frente
168 g al tratarse de madre fumadora y de 59 a hipoxia/hipercapnia determinándose un
g cuando el padre era fumador. Otro estudio, enlace entre la exposición a nicotina y la
que midió los efectos del tabaco pasivo, bradicardia exagerada durante la hipoxia/
encontró una mayor incidencia de parto hipercapnia, que puede llevar a muerte
prematuro y recién nacidos pequeños para súbita. Aunque la causa de muerte súbita es

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 45-54 47


Revisión de Literatura Medeiros, P.

desconocida, se sabe que la exposición fetal Cook, Zhang y Davidge (2001) estudiaron
a nicotina aumenta el riesgo de 2 a 4 veces. la función vascular en ratones preñados y no
preñados tratados con alcohol, para determi-
Efectos del uso de alcohol en el embarazo nar el efecto de este en la mediación que ejer-
Albertsen, Nybo, Olsen y Grønbæk, (2004) ce el óxido nítrico [ON] en las adaptaciones
evaluaron la asociación entre cantidad y tipo de la función vascular durante el embarazo.
de alcohol consumido durante el embarazo, Se encontró que el alcohol abolió en parte la
y riesgo de parto prematuro. Se encontró que modulación del ON en la función vascular del
beber 7 o más tragos/semana se asocia a embarazo, es decir la vasodilatación media-
riesgo de parto prematuro. No hubo aumento da por ON fue afectada por el alcohol.
en el riesgo de parto prematuro en mujeres
que consumían menos de 4 tragos/semana. Efectos del uso de cocaína en el embarazo
No se vieron diferencias entre el efecto de Kuhn, Kline, Ng, Levin y Susser (2000)
distintos tipos de alcohol, sobre el parto pre- investigaron la asociación entre consumo
maturo. de cocaína y restricción del crecimiento
En 2002, Kesmodel, Wisborg, Olsen, intrauterino, tamaño de circunferencia
Henriksen y Secher, realizaron dos estudios craneana y prematurez. Concluyeron que el
relacionados con el consumo de alcohol en peso del recién nacido disminuye en 182 g,
el embarazo. El primero estudió la asocia- y que tanto el peso como la circunferencia
ción entre consumo, y riesgo de mortinato y craneana disminuyen en mayor medida
muerte infantil, concluyendo que las mujeres frente a mayor dosis de cocaína. No se
que consumen ≥ 5 tragos/semana tienen un observó aumento de prematurez frente al
riesgo casi 3 veces mayor de tener un mor- consumo de cocaína, a diferencia de lo visto
tinato, que las que consumen menos de 1 en el estudio realizado por Bandstra et al.
trago/semana. Se observó que el alcohol (2001) para estimar el efecto de la exposición
aumenta el riesgo de recién nacido de bajo prenatal a cocaína en el crecimiento fetal y
peso y parto prematuro. No se encontró aso- la prematurez; donde se encontró que los
ciación entre consumo de alcohol y muerte recién nacidos expuestos tendieron más a ser
infantil. El segundo estudio, examinó la aso- prematuros, que aquellos no expuestos. En
ciación entre consumo de alcohol y riesgo de el estudio de Bandstra et al. se concluyó que
aborto espontáneo, observando un 1,4% de la cocaína llevó a una disminución en peso,
aborto espontáneo en el 1er trimestre, al con- talla y circunferencia craneana. Además, se
sumir menos de un trago/semana; y un 8,9% pudo afirmar la hipótesis de que la influencia
al consumir 5 o más tragos/semana. No hubo de la cocaína en el peso de nacimiento está
asociación entre consumo y aborto espontá- mediada en parte por el efecto de esta en el
neo en el 2° trimestre. aumento de parto prematuro.
En 2005, Beblo et al. estudiaron el efec- Otro estudio realizado en Chile, por
to del consumo de alcohol en la composición Mena, Navarrete, Corvalán y Bedregal
fetal de ácidos grasos, específicamente el (2000) para estudiar las características
ácido docosahexaenoico (DHA) y ácido ara- clínicas y sociales de niños expuestos a
quidónico (AA). Se encontraron porcentajes pasta base de cocaína en el embarazo,
más altos de DHA y AA en vasos umbilica- concuerda con Bandstra et al. (2001) en
les de mujeres bebedoras que en abstemias, que el consumo de cocaína aumenta el
diferencias que se acentuaban frente a una riesgo de prematurez, encontrando que se
borrachera (más de 5 tragos por vez de con- produjo 3 veces más en Recién Nacidos
sumo). Se concluyó que existe un efecto di- [RN] expuestos que en estándares normales
recto del alcohol en el metabolismo de ácidos de la población. También se observó que la
grasos maternos, lo cual puede alterar los talla fue significativamente más baja y que
ácidos grasos fetales, muy importantes en el los recién nacidos tendieron a ser pequeños
crecimiento intrauterino y desarrollo cerebral. para la edad gestacional. En estos niños se

48
Efectos del uso de drogas en el embarazo

observaron ciertas características clínicas análisis de llanto. Los resultados indicaron


anormales como rasgos cráneo-faciales que recién nacidos expuestos a cocaína
semejantes a RN con síndrome alcohólico tuvieron menor despertar, menor regulación
fetal y otros. Hallazgos semejantes encon- y mayor excitabilidad, y que estos efectos
traron Marti et al. (2001) al estudiar a recién se intensificaban a mayor dosis. Se sugieren
nacidos expuestos a diferentes drogas, dos perfiles de recién nacidos expuestos a
quienes hallaron un 8,8% de malformaciones, cocaína, unos excitados y otros deprimidos.
16,7% de patologías infecciosas, 6% de Se encontraron signos de estrés/abstinencia
patologías respiratorias y 5,1% de patologías solo en recién nacidos expuestos a opioides
neurológicas. Se encontró que 23% de los y a marihuana. No se evidenció el daño del
embarazos concluyeron antes de las 36 cigarro en la escala NNNS o análisis del
semanas, en contraste con lo visto por Kuhn llanto, a diferencia de lo encontrado por
et al. (2000). Marti et al. (2001) concluyeron Law et al. (2003). Las características del
que la patología neonatal más frecuente fue análisis del llanto que reflejan reactividad y
el síndrome de abstinencia, presentada en el compromiso del control neural y respiratorio,
51,6% de los recién nacidos. se vieron alteradas con cocaína, opioides,
Se puede decir que aunque el porcenta- alcohol y marihuana. Se deduce que los
je de patologías y malformaciones en recién recién nacidos con riesgo neurológico más
nacidos expuestos a abuso de drogas no es alto son los expuestos a opioides y cocaína,
tan alto, estas alteraciones junto a las com- y alto consumo de alcohol.
plicaciones producidas por el uso de cocaí- Dempsey et al. (2000) quisieron determi-
na, se enfrentan con una problemática social nar si la exposición a cocaína estaba asocia-
que dificulta su control, ya que luego de la da a examen neurológico anormal, al contro-
hospitalización, los recién nacidos general- lar la variable tabaco. Concluyeron que se
mente llegan a hogares donde se continúa altera el tono, predominando la hipertonía, lo
consumiendo droga o donde los cuidados cual se atribuyó al tabaquismo materno y no
recibidos no son óptimos (Marti et al., 2001), a la cocaína, la cual también fue observada
lo que los hace más vulnerables. por Law et al. (2003).
Shankaran et al. (2004) buscaron deter- En otro estudio (Scher, Richardson & Day,
minar los efectos de distintos patrones de 2000), se investigaron los efectos del uso de
uso de cocaína, alcohol, tabaco y marihuana cocaína en patrones Electroencefalogáficos
durante el embarazo, en la talla, peso y cir- [EEG] del sueño, lo cual mide el desarrollo
cunferencia craneana del recién nacido. El del SNC. La cocaína llevó a menos
peso se vio afectado en 250 g frente a bajo conexiones interhemisferios al nacer. Al
consumo de cocaína (1 o 2 días/3 meses) y año, se corroboró alteración en desarrollo
entre 103 g, y 232 g según patrón de uso de y función del Sistema Nervioso Central
tabaco, coincidiendo con lo encontrado por [SNC]. La exposición a alcohol, marihuana
Sánchez et al. (2004) y Alonso et al. (2005). y tabaco afectó interconexiones neuronales
El alcohol y la marihuana no afectaron el a nivel subcortical y cortical, lo cual altera
peso. La talla fue afectada solo por el taba- la regulación de estado y de actividades
co, con un déficit de 0,82 cm, muy similar corticales.
a lo que se vio en el estudio de Sánchez et Un estudio que evaluó el riesgo de
al. (2004). La circunferencia craneana fue resultados adversos, relacionado con la
menor frente al uso de cocaína (0,98 cm) y ausencia de hogar y uso de substancias
tabaco (0,72 cm). en mujeres embarazadas, concluyó que
Lester et al. (2002) estudiaron los el uso de substancias lleva a riesgos, que
efectos de la exposición a cocaína y/u son principalmente parto prematuro, recién
opioides en el neurodesarrollo de recién nacido de bajo peso o peso insuficiente, y
nacidos al mes de vida, a través de una pequeño para la edad gestacional (Little et
escala de neurocomportamiento (NNNS) y al., 2005).

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 45-54 49


Revisión de Literatura Medeiros, P.

Efectos en el feto según periodo del em- todo el embarazo). El patrón de consumo de
barazo en que se consume alcohol y tabaco en descenso y bajo, se re-
Según Faneite et al. (2004) el consumo lacionó con mayores pesos, talla y circunfe-
de tabaco durante el embarazo disminuyó de rencia craneana. El patrón en descenso se
un 4,68% que fumaba en la primera mitad del asoció a pesos más altos y mayores tamaños
embarazo a un 4,18% en la segunda mitad. de circunferencia craneana en relación a los
El consumo de alcohol habitual (≥ 3 veces por otros patrones. Se pudo observar que al dis-
semana) disminuyó de 7,97% a 7,47%, sin minuir el consumo a lo largo del embarazo,
embargo, el consumo ocasional (≤2 veces a los efectos de las substancias son menores,
la semana) aumentó de 8,37% a 8,86% en el lo cual es importante para tratar a las muje-
segundo periodo. En el estudio realizado por res que llegan al control prenatal consumien-
Scher et al. (2000) se observó que la mayoría do, ya que se puede afirmar que disminuir el
de las mujeres que consumían cocaína en el consumo disminuye los riesgos.
embarazo, lo hacían solo en el primer trimes-
tre, Lester et al. (2002) concuerdan en esto. Efectos según cantidad de consumo
Søndergaard et al. (2001) concluyeron Lester et al. (2002) encontraron un 23,6%
que fumar en el embarazo y postparto consti- de mujeres con alto consumo de tabaco (≥
tuía el mayor riesgo de CI, y fumar solo en el 10 cigarros/día), un 15,4% de alto consumo
postparto lleva a riesgo menor. Albertsen et de alcohol (≥ 0,5 trago al día) y un 33,2% de
al. (2004) observaron que el 55% de las mu- alto consumo de cocaína (≥ 3 días a la se-
jeres se abstuvieron de beber alcohol duran- mana). El estudio realizado por Shankaran
te el 1er trimestre del embarazo. Kesmodel, et al. (2004) encontró que un bajo consumo
Wisborg, Olsen, Henriksen y Secher, (2002), de tabaco (< 9 cigarros/día) se relacionó con
confirmaron la existencia de mayor riesgo de pesos de nacimiento más altos y tamaño de
aborto espontáneo al consumir en el 1er tri- circunferencia craneana mayor comparados
mestre. con los de alto consumo. Law et al. (2003)
Mena et al. (2000) vieron que la mitad encontraron que a mayor número de cigarros
de la muestra consumió pasta base durante al día, los recién nacidos presentaron más
toda la gestación. Según Scher et al. (2000), signos de estrés/abstinencia. Algo similar
las mujeres que consumían cocaína en el 1er concluyeron Dempsey et al. (2000), obser-
trimestre del embarazo tenían mayor tenden- vando que al aumentar la concentración de
cia a consumir tabaco, alcohol y marihuana cotinina aumentaba el riesgo de hipertonía.
que aquellas que no consumían cocaína en Søndergaard et al. (2001) observaron un
el 1er trimestre. Consumidoras de cocaína doble riesgo de cólico infantil si las madres
en el 3er trimestre tuvieron menos controles fumaban 15 o más cigarros/día durante el
prenatales y más alteraciones del embarazo, embarazo o postparto.
que aquellas que no consumieron en el 3er Kesmodel et al. (2002) concluyeron que
trimestre. Se encontraron diferencias signifi- consumir ≥ 5 tragos/semana tiene un riesgo
cativas entre las alteraciones producidas en casi 3 veces mayor de aborto espontáneo en
el EEG de sueño de recién nacidos expues- el 1er trimestre, y de mortinato que consumir
tos a cocaína en el 1er y 3er trimestre, con los menos de 1 trago/semana. Según Albertsen
expuestos en el 2° trimestre del embarazo et al. (2004) las mujeres que consumen en-
(Scher et al., 2000). tre 4 y 7 tragos/semana tienen mayor riesgo
Shankaran et al. (2004) observaron el de parto prematuro, y que beber más de 7
efecto de cocaína según distintos patrones tragos/semana predispone a parto prematuro
de uso: alto (consumo en todo el embarazo), antes de las 32 semanas.
en aumento (mayor consumo en 2° y 3er tri- Kuhn et al. (2000) analizaron el consumo
mestre), moderado (consumo moderado en de cocaína en examen de pelo y orina, con-
todo el embarazo), en descenso (menor en cluyendo que aunque el test de pelo identifi-
2° y 3er trimestre), y bajo (consumo bajo en có a más mujeres como usuarias de cocaína,

50
Efectos del uso de drogas en el embarazo

este examen no fue relevante para evaluar presión del potencial genético del crecimien-
el efecto en el peso de nacimiento, ya que to fetal; observando un descenso del peso en
no se observaron alteraciones del peso en 103 g a 232 g frente a madre fumadora acti-
concentraciones bajas de cocaína. El efecto va, y una disminución del peso en 59 g frente
de la cocaína en la restricción del crecimien- a padre fumador (Alonso et al., 2005), y ma-
to, es dependiente de la dosis, sin embargo, yor tasa de bajo peso nacimiento en madres
no se encontró riesgo de prematurez frente a fumadoras pasivas (Nakamura et al., 2004).
mayor concentración de cocaína. Se concluye también que genera una dismi-
nución de la talla, en un promedio de 0,8 cm
Efectos del consumo de más de una subs- (Shankaran et al., 2004), y una disminución
tancia de la circunferencia craneana en 0,72 cm
Un estudio que estimó la asociación entre (Sánchez et al., 2004). Otros efectos produ-
la cantidad de comportamientos nocivos (ta- cidos frente al consumo de tabaco son riesgo
baco, alcohol, drogas) durante el embarazo y de cólico infantil (Søndergaard et al., 2001),
el desarrollo de bajo peso al nacimiento, se y muerte súbita (Huang et al., 2005). Para
encontró que al aumentar el número de di- efectos de este estudio no es concluyente si
chos comportamientos aumentaba el riesgo el consumo de tabaco prenatal aumenta el
de bajo peso de nacimiento. Siendo el taba- riesgo de prematurez, ni si afecta la relación
co el mayor condicionante de bajo peso, so- edad gestacional-peso de nacimiento.
bre todo al asociarse con alcohol (Okah, Cai El alcohol se asocia con un aumento del
& Hoff, 2005). riesgo de parto prematuro (Albertsen et al.,
Según Shankaran et al. (2004) en el gru- 2004), mortinato y aborto espontáneo en
po expuesto a cocaína, hubo mayor cantidad el primer trimestre (Kesmodel et al., 2002).
de mujeres que usaron tabaco, alcohol y ma- También se observa que el consumo materno
rihuana, que en el grupo no expuesto. Lester de alcohol altera el metabolismo de ácidos
et al. (2002) encontraron que un 70,3% del grasos fetales, lo cual incide en el crecimiento,
grupo expuesto a cocaína consumía alcohol, desarrollo y funcionamiento cerebral del feto
un 38,6% consumía marihuana y un 81,6% (Beblo et al., 2005). El efecto del alcohol
fumaba tabaco. prenatal en la modulación del ON en la
Dempsey et al. (2000) hacen referencia función vascular de mujeres embarazadas,
a estudios en animales que indican que una puede explicar la vasocontricción que lleva a
baja dosis continua de nicotina, es más da- disminución del flujo placentario y por lo tanto,
ñina para el desarrollo del sistema nervio- alteraciones en el crecimiento y desarrollo
so central que el consumo esporádico de fetal (Cook et al., 2001). Sin embargo, en
cocaína, y que los efectos de esta podrían esta revisión, no es concluyente el efecto que
estar explicados por el tabaquismo materno. produce el alcohol en el peso de nacimiento.
Sin embargo, en el estudio de Bandstra et La exposición prenatal a cocaína altera
al. (2001) se confirmó que la alteración del parámetros del crecimiento, encontrándose
crecimiento y el riesgo de prematurez encon- una disminución del peso de nacimiento
trada en recién nacidos expuestos a cocaína, de 182 g y 250 g (Kuhn et al., 2000);
depende de la cocaína y también del tabaco, disminución de la talla (Bandstra et al.,
y que al controlar la variable tabaco igual se 2001); y disminución de 0,98 cm en la
evidencian dichas alteraciones. circunferencia craneana (Shankaran et al.,
2004). Se observaron malformaciones y
CONCLUSION síndrome de abstinencia (Marti et al.). En
Siendo el propósito de este estudio biblio- esta revisión bibliográfica se encontraron
gráfico, conocer los efectos del uso prenatal algunos desacuerdos en torno al efecto de la
de tabaco, alcohol y cocaína en el embarazo cocaína sobre el riesgo de parto prematuro,
y periodo postnatal, se puede decir, en cuanto sin embargo, la evidencia en gran mayoría
al consumo de tabaco, que este afecta la ex- apoya que este aumenta frente a su uso.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 45-54 51


Revisión de Literatura Medeiros, P.

Se encontraron alteraciones neurológicas, zar en el inicio de una nueva vida y la prác-


derivadas de un menor desarrollo y madurez tica del consumo de drogas en el embarazo
del sistema nervioso central, en recién naci- afecta a la madre, pero especialmente a su
dos expuestos a tabaco (Law et al., 2003), descendencia con secuelas irreversibles en
alcohol y cocaína (Lester et al., 2002). su crecimiento y desarrollo. Para esto, es
Los efectos neurológicos de la cocaína en necesario que los profesionales de salud
el feto son sutiles y pequeños en magnitud, encargados de la prevención, conozcan los
sin embargo preocupantes, ya que podrían efectos perinatales y enfoquen estas campa-
afectar el desarrollo y futuro comportamiento ñas a evitar los riesgos producidos en el re-
neurológico de los niños. cién nacido y posteriormente en la infancia.
Además, a los efectos de la cocaína En Chile el consumo de sustancias es alto,
prenatal, se agrega el hecho que los recién y continúa en aumento, por lo tanto, es un
nacidos al alta, llegan a un ambiente gene- tema recurrente en los controles prenatales,
ralmente hostil desde un punto de vista so- donde es fundamental hacer una adecuada
cioeconómico, lo cual junto con las alteracio- valoración del problema, pesquisar a las
nes manifestadas en el periodo neonatal, los mujeres que consumen y a las que están en
hace más vulnerables a lo largo de su infan- riesgo de consumir, para lograr una interven-
cia (Marti et al., 2001). ción de calidad, que apoye a estas mujeres
Se ha visto que si se disminuye el consu- y las ayude a practicar un buen autocuidado
mo durante el embarazo o si este está limita- durante su embarazo y a lo largo de toda su
do a una sola etapa de la gestación, el riesgo vida, lo cual requiere del conocimiento y de
de presentar alteraciones es menor. la toma de conciencia de las consecuencias
Los efectos negativos del consumo de que esta conducta tiene.
tabaco, alcohol y cocaína en el embarazo,
son dependientes de la dosis. Es intere-
sante mencionar la alta frecuencia con la REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
que se produce policonsumo de substan-
cias en mujeres embarazadas expuestas a Aguilera, C. & Izarra, A. (2005). Abuso de
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54
Revisión de Literatura Validación empírica de la entrevista motivacional

VALIDACIÓN EMPÍRICA DE LA ENTREVISTA MOTIVACIONAL 1

EMPIRICAL VALIDATION OF THE MOTIVATIONAL INTERVIEW

Claudio Valeria*
Médico Psiquiatra, Unidad de Adicciones, Departamento de Psiquiatría, Pontificia Universidad
Católica de Chile

Artículo recibido el 2 de noviembre, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de diciembre, 2006

RESUMEN
La aproximación a individuos con problemas adictivos cuya motivación al cambio es escasa o nula,
puede ser realizada de diversas formas. Algunas de ellas pueden ser poco adecuadas, en especial
para aquellos individuos que no aprecian la necesidad de dichos cambios o los beneficios que puedan
obtener de estos. La Entrevista Motivacional brinda la posibilidad de obtener mejores resultados en
la aproximación al individuo que requiere atención, ya que provoca modificaciones en el estadio del
Proceso de Cambio. El manejo convencional de un paciente ingresado a un programa de tratamiento
incluye procedimientos como la información verbal o escrita, educación, entrevistas informativas o
confrontacionales, métodos que no se acercan a los resultados obtenidos con la Entrevista Motiva-
cional. Estos últimos son comparables a otras técnicas de manejo para pacientes adictos como la
Terapia de Prevención de Recaídas u otras Técnicas Cognitivo-Conductuales. Es también aplicable al
tratamiento de pacientes consumidores de distintas sustancias como alcohol, tabaco y otras drogas
de abuso, así como en diversos tipos de encuadre (internación y ambulatorio), con todo tipo de grave-
dad de consumo y con diferentes características de los clientes. Se concluye que aquellos resultados
que se correlacionan con los atributos del terapeuta son posibles de entrenar y que la técnica tiene
utilidad en sí misma, o como intervención previa a otras modalidades de tratamiento. El objetivo del
siguiente artículo es revisar, mediante el análisis de los escasos trabajos publicados, la validez de
los resultados de este tipo de técnica en pacientes adictos. Palabras clave: Entrevista motivacional,
entrevista psicológica, drogas ilícitas, trastornos relacionados con sustancias.

ABSTRACT
Approaching individuals with addictive problems, whose motivation for change is scare or non-
existent, can be done in various manners. Some of these may be inappropriate, especially for those
individuals that do not perceive the need for change or benefits that could be obtained from it.
The Motivational Interview offers the possibility of obtaining better results when approaching the
individual requiring attention as it induces modifications in the phases of the Change Process. The
conventional management of a patient admitted to a treatment program includes procedures using
verbal or written information, education, informative or confrontational interviews, all methods which
are not able to obtain the same results as the Motivational Interview. Those methods are comparable
to other techniques for addictive patient management such as Prevention Therapy for Relapse and
other Cognitive-Behavioral Techniques. It is also applicable for those patients with multi-substance
abuse, such as alcohol, tobacco, and other drugs, as well as in different treatment modalities (internal
or ambulatory), with varying degrees of severity and different client characteristics. It is concluded
that those results which are correlated with these attributes are possible to teach and the technique
itself is useful, possibly as an intervention to be used previous to treatment. The objective of the
following article is to review, analyzing the few articles published, the validity of the results of this
technique in patients with addictions. Key Words: Motivational Interview, psychological interview,
street drugs, substance related disorders.

1
Conferencia dictada en el II Congreso Iberoamericano de Trastornos Adictivos. Santiago de Chile, septiembre de 2005
* Correspondencia e-mail: cvaleriaa@yahoo.com
2006, Horiz Enferm, 17, 2, 55-62 55
Revisión de Literatura Valeria, C.

INTRODUCCIÓN cas de un determinado caso o en momen-


Dentro de la salud en general es tal vez el tos particulares de la vida de un sujeto. En
ámbito de los trastornos adictivos, una de las ambos escenarios se mantiene la premisa
situaciones clínicas en que más claramente básica que cada individuo tiene el derecho
se pone de manifiesto la oposición entre el de elegir la forma que le parezca más ade-
legítimo deseo del clínico de promover com- cuada para orientar su vida y que de todas
portamientos más saludables y el también formas, el cambio debe originarse y ser ll-
legítimo derecho de los pacientes de elegir evado adelante por el mismo individuo.
respecto de sus vidas. De acuerdo a lo anterior, cobran vital
La elección, no obstante, debiese ser importancia todas aquellas instancias que
ejercida en un contexto de conocimiento permitan potenciar las motivaciones propias
acerca de la mayor cantidad de consecuen- del individuo y aquellas que fomenten pau-
cias y repercusiones de la opción. Este con- latinamente estilos de vida más saludables,
ocimiento puede ser logrado a través de la en este caso, abandonando el consumo pro-
información y la educación. Aún así, la may- blemático de sustancias.
or parte de las conductas, encierran no solo Se plantea entonces la interrogante de si
el conocimiento intelectual sobre el tema, si la Entrevista Motivacional otorga al individuo
no que también conllevan aspectos emocio- con consumo problemático de sustancias, la
nales que muchas veces, tienen incluso más posibilidad de acceder al cambio al mismo
peso que la información teórica conocida. tiempo que potencia las propias motivacio-
Frecuentemente, las personas tienen nes, por lo que el objetivo del presente ar-
algún tipo de deseo de cambio respecto de tículo es evaluar la validez de los resultados
conductas que considera más o menos des- de este tipo de entrevista en los pacientes
adaptativas. Si no existe ese deseo, el indi- adictos, mediante una revisión acerca del so-
viduo puede potencialmente llegar a tenerlo, porte empírico de este tipo de intervención,
si se dan ciertas condiciones particulares y considerando que la existencia de trabajos
especiales en la vida. publicados en el tema es limitada.
En el ámbito clínico, particularmente en El material revisado pertenece a 14
el de manejo y tratamiento de las adiccio- artículos de revistas científicas y 3 textos
nes, es muy frecuente encontrar que la moti- especia-lizados en los temas de Consumo
vación al cambio a la que se hacía referencia de Sustancias y de Entrevista Motivacional,
previamente, es escasa o nula en la mayoría publicados entre los años 1993 y 2005.
de los individuos. Frente a este escenario, el
acercamiento a la persona puede realizarse ENTREVISTA MOTIVACIONAL
de formas muy diversas, cobrando vital im- Las técnicas motivacionales se basan
portancia entonces, la implementación de principalmente en el respeto al paciente, a
los recursos que generen en el paciente el sus creencias y a su escala de valores.
deseo de llevar a cabo dicho cambio. Para Este tipo de “entrevista”, haciendo espe-
muchos de estos individuos, las formas de cialmente énfasis en que no la llamaremos
acercamiento pueden ser poco o nada ade- “tratamiento”, “terapia” o “consejería”, es una
cuadas, en especial aquellos que no pueden metodología que se centra en el paciente, es
apreciar la necesidad de dicho cambio o los decir, centrando los objetivos de intervención
beneficios que el este puede significar. en el mismo sujeto para aumentar la propia
En razón de lo anterior, el modo de acer- motivación a través de la exploración y reso-
carse a quien tiene problemas con el consu- lución de sus ambivalencias. Se acepta en
mo de sustancias puede variar desde la in- consecuencia, que en muchos casos la mo-
formación, la argumentación y la persuasión, tivación no tendrá cercanía a la motivación
hasta incluso medidas como la coerción. No existente del terapeuta, que será en general
obstante, cada una de estas formas puede activa respecto a que abandone el consumo
ser de utilidad al considerar las característi- de sustancias.

56
Validación empírica de la entrevista motivacional

Principios Generales de la Entrevista es preguntar en qué quisiera ser informado y


Motivacional (Miller & Rollnick, 2002) cuanta es la información que está dispuesto
Los principios fundamentales en que se a recibir. Mejor aún es dejar al paciente
basa la Entrevista Motivacional se originan buscar y encontrar su propia necesidad de
en las características que para Carl Rogers cambio y ante esto mostrar, por ejemplo, la
(1966) se definían como “decisivas”, es inconveniencia y angustia generada por la
decir, aquellas que deben estar presentes indecisión y el no cambio.
en un terapeuta centrado en el cliente, estas
son, la empatía, la calidez emocional y la Modelo Teórico y Técnicas de la Entrevista
autenticidad. Los principios que derivan de Motivacional (Hettema, Steele & Miller,
los conceptos anteriormente señalados, son 2005)
para la Entrevista Motivacional: El modelo y la teoría detrás de la
Entrevista Motivacional surgen solo después
Expresar empatía: Significa aceptar y de los principios de esta misma entrevista.
respetar al paciente, aunque eso no signifique La teoría, desarrollada por William Miller y
compartir sus puntos de vista o aprobarlos. por Stephen Rollnick en el año 2002, se basa
Implica por tanto, cierta solidaridad emocional principalmente en los principios teóricos de
intentando ponerse en el lugar de aquel para Rogers (1966) antes mencionados, pero
comprender el predecible dolor que significa incluye además los de James Prochaska,
el cambio para el paciente y que este sienta J. Norcross y Carlo Di Clemente (1995) res-
que tendrá un apoyo para enfrentarlo. pecto a los Estados del Cambio.
Apoyar la autoeficiencia: Parte fundamen- Las técnicas comúnmente utilizadas, y que
tal del Proceso de Cambio implica una evolu- solo mencionaremos, son:
ción desde el concepto de “querer cambiar” Preguntas Abiertas: Descritas como aque-
al de “creer en que se puede cambiar”. Este llas que no pueden ser contestadas solo
proceso puede ser exitoso en el paciente re- con afirmaciones o negaciones, o solo con
alizando una potenciación de las metas par- un par de palabras. Estimulan al paciente
ciales, las que en conjunto llevarán a metas a elaborar la información y las emociones
más globales, aumentando la sensación de asociadas a lo explicitado.
auto eficacia en el individuo. Fundamental Escucha Reflexiva: Disposición activa del
en el trabajo del terapeuta es el hecho que terapeuta que utiliza la repetición de frases
no se debe olvidar que es el paciente el re- o palabras mencionadas por el mismo
sponsable de escoger entre las distintas op- paciente, reconstruye frases con las mismas
ciones y de realizar o llevar a cabo su propio palabras o sinónimos de estas, muestra
cambio. al paciente sus sentimientos (o lo que en
Desarrollar las discrepancias: Implica ese momento proyecta ante determinados
llevar al paciente a reconocer dónde se temas) y usa cuidadosamente y de manera
encuentra y dónde desea estar, aumentando entrenada del silencio como estimulador de
el conflicto entre su situación real y su la autorreflexividad.
situación ideal. Es importante trabajar la Reestructuración Positiva: Se hacen
incomodidad que genera la duda y la mejor explícitos sus logros al paciente, mostrando
técnica para lograrlo es la verbalización de la comprensión desde el terapeuta.
estas discrepancias. Esta técnica también aumenta la propia
Trabajar las resistencias: Esto se realiza autoescucha, la autocomprensión y el
evitando argumentar o discutir con el sentido de autoconfianza que desarrolle el
paciente sobre la conveniencia del cambio, paciente.
hechos que desencadenan inevitablemente Resumir: Intenta destacar del relato
un aumento de la resistencia. No es expresado por el paciente, lo que parece
necesario intentar convencer ni informar al más crucial y lo que mejor permita entender
paciente, por el contrario, lo recomen-dable su problema.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 55-62 57


Revisión de Literatura Valeria, C.

Afirmaciones de automotivación: Requie- fundamentales del modelo propuesto por


re que el terapeuta esté siempre atento a Miller y Rollnick (2002).
indagar por la intencionalidad del cambio y La Mayoría de los estudios evaluaron la
el sentimiento que este motiva al paciente, eficacia de técnicas de Entrevista Motivacional
lo que puede ayudar en el proceso. como única intervención, mientras que solo
una minoría la evaluaron como proceso
El Modelo del Proceso de Cambio previo a otras técnicas terapéuticas (Miller &
desarrollado por Prochaska et al. (1995), Rollnick, 2002).
ampliamente conocido, establece distintas En estos estudios que utilizaron la Entre-
etapas que se pueden describir desde una vista Motivacional como técnica previa a otro
ceguera total en la Etapa Precontemplativa, tipo de intervención, se encuentra que las
a la Contemplación del problema, la Decisión Técnicas de Potenciación de la Motivación
de Cambio, la Acción e Implementación fueron superiores al “Tratamiento como
del mismo y el Mantenimiento, incluyendo es usual” (denominándose de esta forma
en el proceso las Recaídas, que pueden a la comparación con los procedimientos
estar insertas en cada una de las descritas habituales seguidos en un determinado
anteriormente. En consecuencia, las lugar, por ejemplo: una sesión de descripción
sucesivas etapas describen, en vez del del programa de tratamiento, una sesión
círculo del cambio, una espiral del cambio, informativa, un control médico de rutina
en que cada Recaída, se realiza en una o incluso la lista de espera propia de un
etapa que ya no es igual que la anterior. determinado sitio).
No debe olvidarse, que el terapeuta tendrá Entre estas investigaciones se encuentra
un Proceso de Cambio muy diferente al del el estudio clínico randomizado de Bien, Mi-
paciente, ya que siempre estará decidido y ller y Boroughs del año 1993, que incluyó a
proactivo respecto al cambio, y sus fugas 32 pacientes adultos alcohólicos severos en
temporales o permanentes del Proceso, un encuadre ambulatorio. En él se comparó
se deben a la frustración de que su propio los resultados obtenidos a 3 y luego a 6
Proceso de Cambio es muy diferente al del meses posteriores al alta. Estos pacientes
paciente. El que cambia es el paciente, y por recibieron dos sesiones de Entrevista
tanto es al Proceso de Cambio del paciente Motivacional o dos breves sesiones de
al que se debe estar atento. información y retroalimentación acerca del
Programa de Alcoholismo. Los resultados
¿Es útil la Entrevista Motivacional? describieron que la Entrevista Motivacional
El número de publicaciones sobre obtuvo resultados superiores al “Tratamiento
Entrevista Motivacional ha aumentado como es usual” cuando el seguimiento es
notablemente en la última década, tanto en realizado en un corto período de tiempo
publicaciones acerca de la técnica, como (3 meses), pero no cuando la evaluación
en estudios sobre los resultados de esta se realiza a un plazo más prolongado de 6
(Hettema et al., 2005). meses (Bien, Miller & Boroughs, 1993).
Al indagar acerca del soporte empírico En el estudio, también randomizado,
de este tipo de intervención, se encuentra de Brown y Miller del mismo año (1993),
literatura que hace referencia a una serie de se evaluó en 28 adultos la Entrevista
sustancias de abuso: Motivacional versus el “Tratamiento como es
usual” (Entrevista Informativa), como etapa
Alcohol previa a la internación. Se encontró que en
Hasta mediados del año 2005, se habían el seguimiento a 3 meses, los pacientes
publicado alrededor de 31 estudios acerca que recibieron Entrevista Motivacional
de la eficacia de técnicas de Entrevista presentaban una significativa reducción
Motivacional respecto a otras técnicas que de la cantidad estandarizada de alcohol
diferentes o no, contemplen los principios ingerido respecto al grupo que solo recibió

58
Validación empírica de la entrevista motivacional

información acerca del tratamiento que siguió servicios de urgencia, a los que se les realizó
a continuación (Brown & Miller, 1993). una sesión de Entrevista Motivacional de 30 a
Respecto a 3 estudios realizados en 40 minutos de duración, versus los cuidados
pacientes con consumo abusivo de alcohol habituales de la sala de urgencias con
que recibieron Entrevista Motivacional versus información acerca del consumo perjudicial
pacientes no tratados, encontramos que: de alcohol. Se encontró a 6 meses una
El estudio de Borsari y Carey del año significativa reducción de conducción bajo
2000, incluyó a 60 estudiantes con consumo efectos de alcohol, violaciones de tránsito y
compulsivo de alcohol, los cuales recibieron daños relacionados al alcohol. (Monti et al,
una sesión de Entrevista Motivacional o 1999).
ninguna intervención. Se observó que a 6 Handmaker, Miller y Manicke (1999) reali-
semanas de seguimiento, los estudiantes que zaron un seguimiento a 42 embarazadas
habían recibido la Entrevista Motivacional bebedoras en las que se comparó una sesión
tuvieron reducción tanto del número total de de Entrevista Motivacional versus una carta
consumos, como del número de consumos sobre riesgos del beber en el embarazo.
compulsivos y de la frecuencia de consumo Se encontró una reducción no significativa
(Borsari & Carey, 2000). por muestra pequeña a 2 meses, tanto en
El estudio de Heather, Rollnick, Bell abstinencia y peaks de alcoholemia como
y Richmond del año 1996, evaluó a 174 en el consumo estandarizado de etanol. Las
adultos hospitalizados, catalogados como mayores diferencias ocurrían en bebedoras
“bebedores duros”. En ellos se comparó más graves (Handmaker et al.,1999).
una sesión de Entrevista Motivacional, una El estudio de Miller del año 1993, de tipo
sesión breve de Consejería en Habilidades clínico randomizado, incluyó a 42 bebedores
o un “control” durante la hospitalización sin problema autorreferidos, y comparó una
intervención. Se observó que existía una sesión de evaluación más una sesión de
reducción del consumo en los dos grupos Entrevista Motivacional versus sesiones
con intervención a 6 meses, pero una de Consejería Confrontacional o Lista de
notoriamente más significativa en el grupo Espera de 6 semanas. El seguimiento fue
de Entrevista Motivacional respecto al que realizado por 12 meses y los resultados
recibió Consejería en Habilidades, grupo de también fueron mejores con la Entrevista
pacientes que el autor describió como no Motivacional tanto en los beber/día o beber/
estar listos aún para el cambio (Heather et semana, como en las alcoholemias positivas
al., 1996). y frecuencia de consumo (Miller, Benefield &
El estudio de Glen Marlatt del año 1998, Tonigan, 1993).
que incluyó a 348 estudiantes también El Proyecto Matching Alcoholism
considerados grandes bebedores, evaluó Treatments to Client Heterogeneity [MATCH:
una sesión de Entrevista Motivacional versus Emparejar Tratamientos del Alcoholismo
la sola evaluación y se encontró que en el a la Heterogeneidad del Cliente] comparó
seguimiento a largo plazo de 2 años, había Terapia de Potenciación de la Motivación,
una notoria diferencia en los que recibieron Terapia Cognitivo-Conductual y Terapia
Entrevista Motivacional, tanto en el consumo de Facilitación de 12 pasos, en un estudio
y frecuencia, como en los problemas randomizado que incluyó a 1.726 pacientes
asociados al consumo de alcohol (Marlatt et de distintos sitios. Cada una de las técnicas
al., 1998). tuvo una duración de 12 sesiones y se
Otros estudios en el tema compararon realizó un seguimiento de 15 meses, para
sesiones de Entrevista Motivacional respecto concluir con una evaluación a un año de
a otros tipos de tratamiento, como la entrega la intervención (Project MATCH, 1997a,
de información verbal y escrita: 1997b).
El estudio de Monti del año 1999 comparó Los resultados de este estudio dem-
a 94 adolescentes consultantes a distintos ostraron que al evaluar qué tipo de trata-

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 55-62 59


Revisión de Literatura Valeria, C.

miento tenía mejores resultados respecto Los resultados de la Entrevista


a las características del cliente, el único in- Motivacional fueron comparables a otras
dicador en que había diferencias entre las técnicas de mayor consistencia como
3 técnicas fue la severidad psiquiátrica, en Terapia de Reducción del Daño o Prevención
las que resultaba más efectiva la Terapia de de Recaídas Grupal (Baker et al., 2001;
Facilitación de 12 pasos, seguida por la Te- Stephens, Roffman & Curtin, 2000).
rapia Cognitivo Conductual (Project MATCH, DISCUSIÓN
1997a, 1997b). La Entrevista Motivacional o técnicas
A diferencia del primero de ellos, en el similares (Terapia de Potenciación de la
estudio de 1998 se evaluó la importancia Motivación u otras técnicas basadas en los
que ejercía el terapeuta en los resultados principios de la Entrevista Motivacional),
obtenidos. Se observó que, independiente obtienen mejores resultados que no tratar
de la técnica, de la severidad basal del o hacer el manejo usual de pacientes
paciente y de las diferencias entre los sitios ingresados a programas de tratamiento en los
del estudio, los atributos específicos del que se emplean técnicas como la Información
terapeuta eran predictivos del progreso del verbal o escrita, educación, entrevistas
paciente. Sin embargo, el mayor efecto en informativas o confrontacionales.
las diferencias observadas se debía a los La Entrevista Motivacional presenta
pobres resultados de los terapeutas menos resultados comparables a otras técnicas
exitosos (Project MATCH, 1998). conocidamente adecuadas para el manejo
de pacientes adictos como son la Terapia de
Tabaco Prevención de Recaídas, Terapia Reducción
Si bien a la fecha hay seis estudios de de Daños, Terapia Cognitivo-Conductual,
Entrevista Motivacional en tabaquismo, aún Entrenamiento en Habilidades y Terapia de
no se cuenta con evidencia lo suficientemente Facilitación de 12 Pasos.
sólida como la acumulada respecto del La Entrevista Motivacional obtiene
alcohol, ya que el número de pacientes buenos resultados en estudios de pacientes
estudiados sigue siendo escaso. consumidores de alcohol, tabaco y otras
En el estudio de Colby del año 1998, drogas de abuso, existiendo también un
se realizó una comparación entre la estudio considerado positivo en Juego
Información (estilo breve y autoritario) y Patológico, no mencionado en esta revisión.
Entrevista Motivacional a tres meses. La Además, presenta utilidad en diversos
Entrevista Motivacional es superior en tipos de encuadre, tanto en la internación
todas las mediciones, pero no en forma como en el tratamiento ambulatorio, con
estadísticamente significativa (Colby et al., todo tipo de gravedad de consumo y con
1998). diferentes características de los clientes.
Por otra parte, las sesiones son breves
Otras Drogas de Abuso (en promedio 30 a 40 minutos) y se requieren
A la fecha existen solo 14 estudios del pocas intervenciones (habitualmente 1 ó
efecto de la Entrevista Motivacional en otras 2), con resultados cuantificables a corto y
drogas de abuso. La gran mayoría de ellos largo plazo, llegando incluso hasta 4 años.
estudiaron el uso de Entrevista Motivacional Es importante destacar que la técnica tiene
como metodología previa a otros tipos de utilidad en sí misma o como intervención
tratamiento. previa a otras modalidades de tratamiento.
Se obtuvieron resultados significativa- Los resultados que tienen importante
mente superiores al comparar Técnicas Mo- correlación con atributos del terapeuta son
tivacionales respecto al no tratar o al uso de entrenables, tales como la calidez, la empatía
técnicas menos consistentes como solo In- y la autenticidad, los que desarrollados
formación o solo Educación (Baker, Boggs & positivamente mejorarían los resultados
Lewin, 2001). obtenidos por los pacientes.

60
Validación empírica de la entrevista motivacional

Por último, y tal vez lo más importante among heavy drinkers identified on
de destacar, es que esta técnica provoca general hospital wards. Drug and
modificaciones en el estado del Proceso de Alcohol Review, 15(1), 29-38.
Cambio del Paciente. Hettema, J., Steele, J. & Miller, W. (2005).
Debido a lo relativamente simple de A Meta-Analysis of Research on
aplicar y a sus buenos resultados, se Motivational Interviewing Treatment
propone esta técnica, como un procedimiento Effectiveness. Annual Review of
eventualmente posible de agregar a otras Clinical Psychology, 1, 91-111.
técnicas e intervenciones de programas de Marlatt, G., Baer, J., Kivlahan, D., Dimeff, L.,
tratamiento de adicciones. La técnica es Larimer, M., Quijgley, L. et al., (1998).
breve, fácilmente entrenable y fácilmente Screening and brief intervention for
combinable con otras intervenciones high-risk college student drinker:
pudiendo servir para aumentar globalmente Results from a 2-year follow-up
la efectividad del tratamiento. assessment. Journal of Consulting
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62
Programa de Intervención Recursos en familias llamadas multiproblemáticas

RECURSOS EN FAMILIAS LLAMADAS MULTIPROBLEMÁTICAS

RESOURCES FOR FAMILIES WITH MULTIPLE PROBLEMS

Daniza Pérez *
Psicóloga, Terapeuta familiar ICHTF. Programa familia área de prevención CONACE
Carolina Palacios
Psicóloga, Terapeuta familiar ICHTF

Artículo recibido el 20 de octubre, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de diciembre, 2006

RESUMEN
En el presente artículo se revisa el concepto y clasificación de “familias multiproblemáticas”;
concepto útil para comprender las dificultades de la familia, pero que al mismo tiempo contribuye
a invisibilizar los recursos y fortalezas presentes en ellas y que determina intervenciones que
tienden a la desvinculación entre sus miembros.
Se propone una nueva manera de concebir a las familias, centrada en el desarrollo de sus pro-
pias capacidades, sus recursos psicológicos y sociales (que tienen individuos y comunidades)
para resolver sus propios problemas. En este enfoque el papel del agente externo sería promover
la confianza y activación de los propios recursos, habilitándolas y restituyéndoles el poder sobre
sus vidas, evitando la dependencia a instituciones externas. Cobran importancia conceptos como
la autogestión como sistema promotor de cambios psíquicos y sociales. Al mismo tiempo, se en-
fatiza la necesidad de operadores sociales que faciliten la emergencia de recursos, respetando
las diversas historias y maneras de ser familia, sin descalificarlas per se, procurando su partici-
pación proactiva, fortaleciendo vínculos familiares e inclusión social. Por ultimo, se proponen una
serie de habilidades factibles de transferir y entrenar en aquellos profesionales u operadores so-
ciales que trabajan con familias, que contribuyan a lo anteriormente planteado. Palabras clave:
Familia, relaciones familiares, problemas sociales.

ABSTRACT
The present article reviews the concept and classification of “Problematic Families” or families
with multiple problems; a useful concept for understanding the difficulties confronted by families
but at the same time one which contributes to the concealing of resources and strengths present
in them and which may lead to interventions which tend to create disengagement among family
members.
A new way of understanding families is proposed, centered in the development of their own ca-
pacities, and psychological and social resources (present in both individuals and communities)
in order to resolve their own problems. Using this focus, the role of the external agent will be to
promote the activation of, and confidence in these resources, enabling them to restore their power
over their own lives while avoiding dependency on external institutions. Important concepts such
as self-management as a system for promoting psychological changes are covered. At the same
time, emphasis is placed on the need for social operators that facilitate the emergence of resour-
ces while respecting the diversity of the family unit without discrediting them per se, promoting
active participation, strengthening family ties and networks and social inclusion. Finally, a series
of feasible skills for training professionals or social operators who work with families are proposed.
Key Words: Family, family relations, social problems.

2006, Horiz Enferm,


* Correspondencia e-mail:17, 2, 63-72
dperez@conace.gov.cl 63
Programa de Intervención Pérez, D.

INTRODUCCIÓN NUEVO ENFOQUE PARA LA GESTIÓN


Se fundamenta la necesidad de adoptar DEL CAMBIO REHABILITADOR
una manera distinta de aproximarse a las El enfoque propuesto hace una apuesta
familias, que tradicionalmente han sido cla- por la fuerza que poseen los individuos y sus
sificadas como “multiproblemáticas”, pues familias, pues se basa en la habilitación y em-
si bien tal concepto ha sido útil para com- poderamiento de las personas para enfrentar
prender sus dificultades, al mismo tiempo las diversas situaciones que se le presentan
ha contribuido a invisibilizar sus recursos y en la vida cotidiana.
fortalezas, a la vez que las restringe al po- El supuesto básico es la confianza en los
ner el foco en sus múltiples problemas. recursos psicológicos y sociales que tiene el
Se revisa cómo las instituciones que individuo y la comunidad para resolver sus
brindan apoyo social, en su afán de resol- propios problemas. Según este enfoque, el
ver las dificultades y apoyar a estas fami- papel del agente externo sería el de ayudar
lias, muchas veces generan desvinculación a descubrir los recursos propios, facilitar su
en vez de promover la conexión entre sus activación y contribuir a recobrar la confian-
miembros. za en ellos. Por lo tanto, las intervenciones
Se sostiene la urgencia que los equipos se centran en fortalecer la confianza en sus
de profesionales y/u operadores sociales recursos para enfrentar situaciones de crisis,
que trabajan en temas que involucran a la de manera que los sujetos puedan encontrar
familia, desarrollen una aproximación distin- sus propias respuestas, sin generar depen-
ta para poder acceder a ellas y movilizar- dencia a las instituciones externas.
las. Esto plantea un desafío que demanda En este sentido, se releva la autogestión
una nueva manera de mirar y mirarse, des- como sistema promotor de cambios psíqui-
de una perspectiva más integral, sistémica cos y sociales en los grupos. Esto plantea un
y centrada en los recursos, la que influye nuevo desafío para los profesionales: creer
y determina la intervención en distintos ni- en la capacidad de autogestión de las fami-
veles: necesidad de transformar la relación lias para poder ver sus recursos, proceso
que establece el operador con las familias que muchas veces se ve teñido por dificulta-
llamadas multiproblemáticas, a partir de un des de los propios profesionales.
cambio de actitud desde el prejuicio a con- Por ello, es fundamental un modelo de
fiar en los recursos; definición de las habi- intervención que permita a los profesionales
lidades que se requiere entrenar en estos y operadores sociales, llegar precozmente a
equipos de profesionales, para mirar los re- todo tipo de familias, que considere sus ca-
cursos de las familias y definición de quié- racterísticas e identidad particulares, su his-
nes se incluyen de la familia y en qué mo- toria de supervivencia y también de vulnera-
mento, determinando intervenciones más o bilidad social, y que apunte a reinsertarlos a
menos excluyentes. la comunidad, a restituir sus derechos como
Esta remirada sistémica y desde los re- ciudadanos, y ofrecerles oportunidades para
cursos, es un cambio de énfasis que abre un desarrollo integral, que apunte a los si-
un mundo de posibilidades de intervención, guientes objetivos: reconstruir la confianza y
y es una invitación a perder el miedo a incluir reparar los vínculos deteriorados temprana-
a las familias desde el inicio de los procesos, mente, restablecer lazos con la comunidad,
a la vez que plantea al profesional el desafío hacer posible nuevos vínculos familiares,
de descubrir o resignificar conductas, carac- apoyarlos en el proceso de reinserción edu-
terísticas y funcionamientos que tradicional- cacional y/o laboral, reconociendo sus capa-
mente han sido considerados como “patoló- cidades e intereses y acompañándolos en un
gicos”, “disfuncionales” o “multiproblemáti- proceso de “construcción personal positiva” y
cos”, para poder verlos –mejor– como recur- proyecto de vida socialmente integrado.
sos y fortalezas de las familias. Esto puede A pesar que históricamente las institucio-
llegar a ser la llave para el cambio. nes de asistencia social se han encargado

64
Recursos en familias llamadas multiproblemáticas

de resolver los problemas de las familias nales y de las Instituciones que obstaculizan
más vulnerables, la tendencia de los profe- la adopción de este cambio de mirada; cómo
sionales ha sido a estigmatizarlas, llamán- transferir esta nueva mirada; transformación
dolas tradicionalmente “multiproblemáticas”, que se requiere por parte de los profesiona-
excluyéndolas en la toma de decisiones de les y operadores sociales; competencias y/o
su propia vida y bienestar, no confiando en habilidades que se requiere transferir y en-
sus capacidades y recursos que tienen para trenar en los equipos, para poder mirar los
sobrevivir. Las consecuencias han sido ne- recursos en las familias; y sugerencias de
gativas, pues, a pesar que esas intervencio- instrumentos de trabajo que facilitan la adop-
nes son necesarias, suelen desarticular las ción de esta mirada en los equipos.
estructuras familiares, ya que se realizan sin
tomar en cuenta los vínculos emocionales Necesidad de mirar a las familias desde
positivos y anulan potenciales recursos de la los recursos.
propia familia. Por una parte, las familias pro- A pesar que el solo uso del concepto
gresivamente se aíslan, fragmentan, descon- de “familias multiproblemáticas”, tiene una
fían y excluyen más de los servicios sociales, connotación negativa que nos hace pen-
lo que confirma su desesperanza respecto sar inmediatamente en “disfuncionalidad” o
a que sus problemas no tienen solución, y “problemas” en las relaciones familiares, se
por otra parte, los equipos se vuelven cada sostiene que las familias hasta en las peores
vez más estigmatizadores, se desgastan y condiciones, conservan elementos de flexibi-
rotan de institución en institución, perdiendo lidad y cambio que les permiten mecanismos
la oportunidad de encontrar recursos en las compensatorios. Coletti y Linares (1997) se-
carencias o dificultades, junto con nuevas so- ñalan que: “cuando deterioro y disarmonía
luciones al interior de las familias. Es urgente coinciden, el ecosistema no permanece pa-
que los equipos puedan comenzar a confiar sivo y pone en marcha procesos protectores
en que las familias tienen recursos para re- que garantizan la continuidad de la vida”. Es-
solver sus propios conflictos, encontrando en tos mecanismos compensatorios no provie-
ellas mismas las respuestas y herramientas nen solo de la propia familia, sino que tam-
para enfrentarlos. bién de su medio ambiente, entre los cuales
El problema es cómo transferir a los equi- destacan agentes de apoyo externo.
pos de las instituciones que trabajan con fa- Según Minuchin, P., Colapinto,S., Minu-
milias, la necesidad que puedan transformar chin y Negrotto (2000) tradicionalmente se
su manera de mirar y sean capaces de reco- estigmatiza y pasan por alto los vínculos
nocer que en estas existen recursos y poten- afectivos existentes en las familias multipro-
cialidades para gestionar su propio bienestar. blemáticas (de lealtad y de afecto recípro-
En la medida que puedan reconocer la exis- cos), pues sus vidas parecen situaciones
tencia de estos recursos y luego mirarlos, se muy caóticas e ilógicas. Es así que al aproxi-
puede contribuir a producir el cambio, movi- marse a una familia multiproblemática, los
lizando y transformando realidades, sin que operadores no identifican las conexiones,
se imponga el fantasma de lo “disfuncional” y afectos, estructuras ni pautas que describen
“multiproblemática” que se han considerado su funcionamiento considerándolas caóticas.
históricamente a estas familias. Lo que deben incorporar los operadores so-
A continuación se presentan conceptos ciales es que esta inestabilidad, es parte de
que fundamentan la necesidad de adoptar un estilo de vida, y a la vez resultado, de la
esta manera distinta de aproximarse a las fragmentación que han provocado las inter-
familias. A lo largo del artículo se desarrollan venciones sociales.
los siguientes puntos: necesidad de mirar a Se requiere, en consecuencia, un abor-
las familias desde los recursos; algunos con- daje distinto, que permita a estas familias, la
ceptos útiles para aprender a mirar los recur- oportunidad de dar su propia versión de quié-
sos en las familias; factores de los profesio- nes son, qué les preocupa y cuáles son sus

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 63-72 65


Programa de Intervención Pérez, D.

fortalezas y recursos para el cambio. En el por medio de sentimientos y percepciones, y


esfuerzo de lograr este cambio de mirada es está presente en la narración que hacen sus
fundamental el poder denominarlas de una miembros de sus historias, el estilo, las acti-
manera distinta, que contribuya a la posibi- tudes, es lo que se llama “historia familiar”.
lidad de que afloren sus recursos, y no de La otra cara del afecto familiar es el con-
una manera en que enfatice sus dificultades, flicto. Todas las familias tienen diferencias y
crisis, problemas y déficit. conflictos que deben aprender a manejar. Lo
Este abordaje distinto ocurre cuando se que hay que preguntarse es si esos métodos
reconoce que la familia tiene estructuras, han sido efectivos en el tiempo. A veces las
vínculos afectivos, pautas recurrentes y familias se desintegran pues no pueden su-
fronteras con un sentido, a pesar que no perar los conflictos, a pesar del cariño.
funcionen bien (Minuchin et al., 2000). Solo La mayoría de las familias tiene un siste-
así se puede empezar a buscar personas ma de señales, una especie de umbral que
importantes en la red familiar, aceptar tipos si traspasan, se activa una alarma que avi-
de familias no convencionales, reparar en sa que hay que calmarse y evitar el peligro.
los subsistemas y las reglas que rigen las Es importante que esa señal se reciba con
interacciones de la familia, tanto en las que anticipación de manera que la familia pueda
provocan crisis como en las que indican evitar o controlar la crisis a tiempo.
fortalezas. Enfoque de desarrollo y modelo de
Frente a esta realidad constatada, se pro- competencias. La necesidad de reconocer a
pone un modo distinto de trabajar, que sea las familias y creer en su capacidad de auto-
más integrado y sistémico y que brinde ma- gestión. Un enfoque que da luces acerca de
yor apoyo a las familias. Para esto se utiliza cómo intervenir desde las políticas sociales,
como marco una orientación sistémica y un en poblaciones vulnerables y vulneradas, es
enfoque centrado en la familia. el enfoque de desarrollo. En este, el centro
es el desarrollo integral, entendido como un
Algunos enfoques para mirar los recursos “proceso continuo y gradual, donde se lleva
en las familias a cabo su formación o aprendizaje social, en
A continuación se presentan algunos interacción permanente con el medio, a tra-
conceptos útiles para desarrollar este cambio vés de la estimulación de sus capacidades
de mirada en los equipos. El poder mirar a y potencialidades, el entrenamiento de habi-
estas familias, incorporando dichos concep- lidades y destrezas, y la satisfacción de las
tos, puede ser un aporte a una mejor com- necesidades físicas, psíquicas y sociales”
prensión de su funcionamiento, más positiva (Palestro, 2001).
y esperanzadora. El enfoque de desarrollo tiene como cen-
Enfoque de las familias como siste- tro la habilitación y empoderamiento de las
mas. Es importante ver a las familias como personas para enfrentar las diversas situa-
sistemas y comprender su estructura, con la ciones que se le presentan en la vida coti-
presencia de pautas, subsistemas, transicio- diana.
nes, etc. Aquí cobra importancia la autogestión
Enfoque de las familias como peque- como sistema promotor de cambios psíqui-
ñas sociedades. Entender a la familia solo cos, y sociales, especialmente válidas para
como un sistema, resulta impersonal si no se sectores de la población que padecen situa-
incluyen los sentimientos y las complejidades ciones de marginación y/o cronicidad de dis-
propias de la interacción humana. Los miem- tinta índole en las familias. Zukerfeld (1996)
bros de una familia sienten que existe entre define autogestión como: “un conjunto de
ellos una conexión: un lazo familiar, una unión procedimientos que se desarrollan entre un
afectiva, vínculo que constituye como un re- grupo de personas que: a) se reúnen por se-
curso al momento de ayudar a la familia a mejanza en su problemática, b) construyen
cambiar. Este “sentido de familia” se expresa modelos para resolverla y c) realizan trans-

66
Recursos en familias llamadas multiproblemáticas

formaciones tangibles en su realidad”. El pro- Formación de profesionales. Se re-


fesional debe considerar la incorporación de quiere de una formación integral y compleja,
este tipo de intervenciones en la medida que que permita dar respuesta a la persona en
va potenciando el que las familias desplie- su contexto más amplio, aplicando procedi-
guen sus recursos, los potencien unas con mientos curativos que movilicen al sistema y
otras, lo que a la vez, disminuye el malestar vayan más allá del sufrimiento individual.
que ocasiona la frustración terapéutica de la
intervención individual exclusiva. Como transferir esta nueva mirada.
Enfoque de bienestar psicosocial o Para promover este cambio en los profesio-
modelo de competencias. Arón (1992) se nales, es necesario transferir una “nueva
centra en las fortalezas psicológicas o com- manera de mirar” que es posible lograr me-
petencias. El supuesto básico es la confian- diante la incorporación en el personal, de un
za en los recursos del individuo y de la comu- desarrollo conceptual y de ciertas habilida-
nidad para resolver sus propios problemas; des prácticas, susceptibles de entrenar. De
el papel del agente externo (especialista, acuerdo a Minuchin, et al. (1998) este entre-
operador social, etc.) sería el de ayudarle a namiento debiera estar dirigido a dos gran-
descubrir sus propios recursos, a activarlos y des objetivos: facultar al profesional en la ex-
recobrar su confianza en ellos. ploración del conflicto familiar y desarrollar la
En consecuencia, se propone interven- habilidad para evaluar el potencial de cambio
ciones que fortalezcan la confianza en los que posee toda familia.
propios recursos para enfrentar situaciones A continuación se presenta una sistema-
de crisis, que ayude a activar las fuentes de tización de las habilidades conceptuales y
apoyo, que normalice las reacciones emocio- prácticas en las que se requiere capacitar a
nales como parte de una reacción adaptativa, los profesionales desde un enfoque familiar
de manera que los sujetos puedan restable- sistémico. Los autores revisados proponen
cer su equilibrio, sin generar dependencia a este cambio a dos niveles, el individual y el
las instituciones externas. familiar, al que las autoras agregan el grupal.
Individual. Será necesario restablecer
Factores que obstaculizan la adopción de relaciones psicoterapéuticas con miembros
una nueva mirada. significativos del sistema. Los autores propo-
La naturaleza de la burocracia. Con los nen realizar psicoterapia en terrenos narra-
años la burocracia encargada de la asistencia tivos ya que es allí donde el sujeto acepta
social se ha vuelto complicada, impersonal y transacciones y negociaciones con mayor
rígida, El problema es que cuando un siste- flexibilidad. Esto supone un trabajo en los
ma complejo está organizado rígidamente, espacios emocional, cognitivo y práctico,
cuesta mucho introducir cambios de enfoque que debe tomar en cuenta las características
(Minuchin et al., 1998) tanto del profesional- terapeuta como de las
La actitud de la sociedad hacia las per- familias. En relación al profesional, este debe
sonas en situación de pobreza. Lo anterior elegir una vía de actuación de acuerdo a su
se ve agravado por una concepción pragmá- formación, su rol y a sus características per-
tica, moralizadora y estricta de lo que son las sonales. Aquí cobran importancia el trabajo
relaciones sanas y protectoras. Con esto, el en equipo y la supervisión que se constitu-
personal define qué hacer, quiénes están en yen en una estructura y un apoyo continuo
condiciones de apoyar y a quiénes excluir, al profesional. Los objetivos a nivel indivi-
culpando y criticando a las familias, conside- dual serán: calmar ciertas emociones, como
rándolas una carga para la sociedad. A esto la ansiedad, la hostilidad o la tristeza, que
se suma un “espíritu misionero” cuando se ve por su intensidad, interfieren seriamente en
a las personas como víctimas. En resumen, las dinámicas personal y familiar; potenciar
se las considera “parte del problema y no de el espacio cognitivo estimulando ideas y
la solución”. percepciones nuevas que introduzcan va-

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 63-72 67


Programa de Intervención Pérez, D.

riedad y riqueza; amortiguar y limitar las - Si el profesional es capaz de ver recur-


tendencias actuadoras, poniendo freno a la sos, tiene la posibilidad de tomar esos re-
impulsividad. cursos, reciclarlos y transformarlos.
Familiar. Se busca una transformación de - Aprender a identificar prolijamente recur-
la familia, de manera que la organización sea sos, que pueden estar implícitos y/o suti-
menos caótica. Los objetivos a nivel familiar les y que potencian los vínculos desde las
serán: ampliar el espacio en el que se com- posibilidades de conductas disponibles y
parten emociones; relativizar sin confrontar, propias de cada familia.
los valores y creencias familiares, para que - Aprender a tolerar e incorporar las crisis
surjan otros nuevos; fomentar el desarrollo de las familias. Solo así se posibilita el
de ritos familiares. despliegue de estos mecanismos y la apa-
Grupal. Parece interesante incorporar un rición de los recursos en estas familias.
tercer nivel de intervención que diga relación - Disposición a mirar la propia familia, tra-
con la promoción de grupos de autogestión bajando en uno mismo las resonancias.
de familias que han sufrido múltiples crisis. El - Aprender a escuchar. Saber mirar a las
encuentro con semejantes con los que pueda familias es poder quedarse en silencio
empatizar ayuda a movilizar recursos desde frente a ellas, favoreciendo el despliegue
las experiencias y lugares comunes que les de la familia v/s el despliegue del profe-
ha tocado vivenciar. sional desde el saber.
- Trabajar el narcisismo del profesional. El
Transformación de los profesionales y narcisismo y la omnipotencia, muchas ve-
operadores sociales. ces obstaculizan los procesos de cambio
El profesional podrá transformar su mane- en las familias y grupos.
ra de mirar en la medida que esté dispuesto
y aprenda a desplegar sus propios recursos. En definitiva se trata de adoptar un nuevo
Esto implica realizar los siguientes cambios rol que implica ocupar una posición menos cen-
conductuales y actitudinales: tral que la acostumbrada y realizar un esfuerzo
- Superar la identidad profesional específi- menos activo para resolver problemas, que los
ca en pro de una identidad más poliva- mismos miembros de la familia deberían resol-
lente. Para Félix Castillo, esto se traduce ver (Minuchin et al., 2000).
en el uso de instrumentos y la adopción
de un perfil profesional, abierto, flexible, Competencias y/o habilidades que se re-
creativo y dispuesto a asumir una multi- quiere transferir y entrenar en los equi-
plicidad de funciones. pos:
- Aprender a ver las relaciones de la familia - Incorporar a la familia desde el inicio. La
como una ventaja y una fuente de recur- admisión es una oportunidad para formar
sos, más que un “ruido” molesto. sociedad con la familia.
- Aprender a mirar sistémicamente, más - Obtención de información, intercambiar
allá de lo individual (reconocer elemento información y evaluar a la familia.
de identidad familiar, historia familiar, na- - Valorar las virtudes de la familia.
rrativas, pautas, transiciones, etc.). - Reencuadramiento de los supuestos de
- Ayudar a los equipos a que se saquen la la familia.
venda de que las familias multiproblemá- - Exploración de pautas alternativas de in-
ticas o en riesgo social son muy malas. teracción.
- Confiar en que todas las familias tienen - Habilidad para reconstruir historias y es-
recursos que solo surgen si se despliegan pacios comunes. Devolver Identidad a la
los mecanismos de autorregulación que familia.
les permiten enfrentar las crisis. Las fami- - Tolerancia y disposición a trabajar en las
lias disfuncionales saben mejor que nadie crisis y conflictos.
cómo se deja de ser disfuncionales. - Búsqueda de la familia extensa.

68
Recursos en familias llamadas multiproblemáticas

- Restablecer la posibilidad de que ambos nales. Este cambio de mirada requiere una
miembros puedan ejercer sus funciones transformación que es factible de transferir
parentales. y entrenar. Esto plantea el desafío para las
- Ayudar a las familias a revincularse. instituciones educativas priorizando la inser-
- Habilidad para promover cambios organi- ción curricular de estos elementos en la for-
zacionales. mación de profesionales, así como la incor-
- Habilidad para incorporar esta mirada de poración de espacios de entrenamiento de
recursos en las técnicas e instrumentos estas habilidades.
utilizados. Esta manera de mirar contribuye a la in-
clusión social de estas familias, por lo que
Para el abordaje con estas familias, no también el Estado tiene una responsabili-
basta solo con que el profesional adop- dad ineludible en impulsar políticas de de-
te las habilidades señaladas. También es sarrollo social inclusivas, tanto sectoriales
importante que incorpore en su quehacer, (educación, salud, previsión social, justicia,
ciertos instrumentos, tanto para disminuir vivienda y equipamiento urbano), como tam-
el desgaste que supone el trabajar con bién específicas de alivio y superación de la
esas familias, como para mantener la pro- pobreza.
fesionalidad y competencias necesarias La postmodernidad ha demandado a la
(Vega, 1997). Dentro de estos instrumen- sociedad abrirse a distintas maneras y op-
tos los más necesarios son los instrumen- ciones válidas de ser familia. Esto constituye
tos de admisión, el trabajo con la persona un desafío para la familia actual: cómo facilita
del terapeuta, el trabajo en equipo, el for- en sus miembros el proceso de búsqueda de
talecimiento de las redes, la supervisión y identidad pudiendo mantener y desarrollar
entrenamiento permanente. elementos de identidad familiar, que se cons-
tituyen en factores protectores de problemáti-
CONCLUSIÓN cas psicosociales que afectan a las familias.
En la medida que se siga viendo a la fa- Este paradigma requiere aumentar los ni-
milia desde una óptica “multiproblemática”, veles de participación de las familias, lo que
desde sus déficit, seguirán existiendo dificul- restituye el poder a las personas, de trans-
tades para incorporarla como un recurso en formar e influenciar las instituciones.
las intervenciones. Una comprensión frag- Por lo tanto, el desafío para los progra-
mentada y lineal del funcionamiento de las mas sociales y las instituciones públicas
familias asistidas por los servicios sociales, es acercarse a las familias y devolverles el
contribuyen aún más a dicha fragmentación, poder. Para esto es condición necesaria el
lo que disminuye las posibilidades para que comenzar por validarlas en su particular ma-
los profesionales se conecten con los poten- nera de ser y hacer familia, sin la idea de
ciales recursos de las personas destinado cómo debe ser en relación a una norma o
a promover el cambio. Al mismo tiempo, se ideal establecido. Esto, porque las familias
acentúa cada vez más la desvinculación de son válidas en sus distintos modos, opcio-
las familias con las instituciones, así como la nes y posibilidades, no existiendo una única
fragmentación entre sus miembros, perpe- manera que garantice la felicidad y el cumpli-
tuándose la exclusión en la que viven. miento de las funciones sociales.
Es por esto que se hace imperioso desa- El desafío para el profesional u operador
rrollar servicios más humanos en los cuales social que trabaja con familias es por lo tanto,
las relaciones familiares se potencien y no validar los distintos modos de ser familia, re-
sean descalificadas, sean efectivamente vis- conociendo la existencia de una identidad fa-
tas como una ventaja y una fuente de recur- miliar con recursos para el cambio, en todos
sos, más que un ruido molesto. los particulares modos de ser familia.
Para que ello acontezca es necesario un Por lo tanto, es importante que los equi-
cambio de mirada por parte de los profesio- pos puedan desarrollar la capacidad para

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 63-72 69


Programa de Intervención Pérez, D.

mirar recursos en todas las familias. En la de su disciplina, dignificar a la persona,


medida que el profesional modifique positi- instalando elementos de salud mental, que
vamente su actitud, hacia confiar en que to- van en beneficio tanto de los equipos como
das las familias tienen recursos, posibilitará de las familias. El poder mirar los recursos
la aparición de estos, que solo surgen, si se en las familia tiene efectos preventivos no
despliegan los mecanismos de autorregula- solo en ellas mismas (beneficiarios directos),
ción que les han permitido históricamente, sino también en los equipos, en la medida
enfrentar las crisis. que contribuye a desestigmatizar favorece
Los profesionales que logren ver a la el autocuidado e instala capacidades en los
familia desde el inicio del proceso, como una equipos.
fuente de información y un aliado, también Reconocer la necesidad de incorporar va-
verán a la familia como un recurso crucial riables familiares que recojan recursos en los
para el trabajo posterior. instrumentos de admisión (cuestionarios, en-
El esfuerzo de lograr este cambio de trevistas de ingreso, formularios, reuniones
mirada se ve facilitado si se denomina a las de admisión, permite mirar lo que se requiere
familias de manera distinta a la denominación ver en estas familias y en consecuencia lo-
“familias multiproblemáticas”, vulnerables gra intervenciones más integrales, eficientes
y en crisis, que enfatice más en sus logros y efectivas.
que en sus dificultades, en sus cambios que
en sus crisis, en sus oportunidades que en AGRADECIMIENTOS
sus problemas y en sus activos más que sus Agradecimientos especiales a Carla Vidal
déficit, pues ello contribuye a la posibilidad Pollarolo, por respetar los tiempos y particu-
que afloren sus recursos, que son los mismos larmente los recursos de las autoras.
mecanismos de autorregulación que han
desplegado ante situaciones de crisis. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Finalmente, para que el personal pueda
realmente incluir a la familia a lo largo de Arón, A.M. (1992). Modelo de salud men-
todas las etapas del proceso, realizando tal comunitaria en Chile. En F. Lolas.
cambios tanto de actitud como estructurales, Ciencias sociales y medicina. Pers-
se requiere de un fuerte compromiso pectiva latinoamericanas. Santiago:
institucional, desde la flexibilidad en Universitaria.
el manejo de los tiempos, hasta la Bernales, S. (2002). Familia y mediación:
disponibilidad de nuevos instrumentos que una mirada previa.
incorporen la orientación familiar. El éxito de Chile, Ministerio del Interior, Consejo Nacio-
la puesta en práctica del enfoque familiar, nal para el control de Estupefacien-
depende en igual medida de las habilidades te. (2005). Intervención psicosocial:
de los profesionales, como del apoyo que prevención selectiva del consumo de
brinden las instituciones. Es por esta razón drogas, para niños y adolescentes en
que resulta urgente la revisión de los vulnerabilidad social.
procedimientos establecidos, de manera de Cirillo, S., Berrini, R., Cambiaso, G. & Mazza,
determinar cuáles facilitan o no un enfoque R. (1999). La familia del toxicodepen-
familiar para flexibilizarlos y modificar diente. Barcelona: Paidós.
aquellos que se requieran. Colapinto, J. (1997, nov/dic). Los patrones
Esta propuesta permite instalar en los que desconectan. Acerca del sistema
equipos de técnicos y profesionales, un modo de hogares de guarda. Family Therapy
distinto de trabajar que, a pesar que requiere Networker.
cambios profundos y estructurales por parte Coletti, M & Linares, J. (1997). La intervención
de las instituciones, también significan sistémica en los servicios sociales
interesantes oportunidades para los equipos, ante la familia multiproblemática.
de ampliar su mirada, cuidar el ejercicio Barcelona: Paidós.

70
Recursos en familias llamadas multiproblemáticas

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2006, Horiz Enferm, 17, 2, 63-72 71


Nuevos Horizontes: Revisión de Literatura Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar

MUJER, DROGA, ROL MATERNO Y VIOLENCIA INTRAFAMILIAR

WOMAN, DRUGS, MATERNAL ROLE AND DOMESTIC VIOLENCE

Cristina Oteíza *
Egresada de Enfermería, Escuela de Enfermería, Pontificia Universidad Católica de Chile

Artículo recibido el 20 de junio, 2006. Aceptado en versión corregida el 2 de diciembre, 2006

RESUMEN
El consumo de drogas en la mujer y su influencia en el rol materno y la violencia intrafamiliar es un
tema poco abordado en las investigaciones que se refieren a este fenómeno. La escasa evidencia
existente en la actualidad registra un importante aumento del consumo de alcohol y drogas en las
mujeres como consecuencia de la inserción en el ámbito laboral, altos niveles de competencia y
exigencia, estrés y costumbres asociadas al consumo de sustancias. Se observa también que el
consumo de drogas surge en un contexto de inestabilidad laboral, familiar, económica y personal,
situación frente a la cual no se cuenta siempre con las herramientas suficientes para afrontar y
superar dichas circunstancias. La experiencia de las mujeres que consumen alcohol y drogas es
compleja, ya que conviven, en la mayoría de los casos, con una pareja que también consume. Ellas
tienen hijos a cargo, experimentan dificultades en el rol materno y enfrentan obstáculos más graves
al comienzo del tratamiento; además presentan traumas por maltrato físico y sexual y trastornos
psiquiátricos concomitantes. El correcto abordaje de esta problemática de salud es fundamental
para enfermería ya que es este profesional uno de los agentes de salud más cercanos al sexo fe-
menino en las distintas etapas del ciclo vital, hecho que se traduce en la posibilidad de prevenir el
consumo o de ofrecer oportunamente un tratamiento. La búsqueda y desarrollo de nuevos espacios
de intervención son fundamentales, trasformándose en un desafío para enfermería el intervenir en
esta problemática que se convierte rápidamente en una epidemia. La metodología utilizada consiste
en una búsqueda sistemática de la literatura utilizando las bases de datos LILACS, PROQUEST,
DOYMA, PUBMED, MEDLINE y SCIELO. Palabras Clave: Mujeres, Chile, trastornos relacionados
con sustancias, identidad del género, condiciones sociales/mujeres, violencia doméstica.

ABSTRACT
The objective is to analyze the drug consumption in the woman and her influence in the intrafamiliar
violence and maternal roll. The feminine consumption of substances is a little boarded subject in the
investigation of the phenomenon of drugs, since this one is made from a rather masculine approach.
At the present time an important increase of the consumption of drugs and alcohol by the women
is registered which is consequence of the new scales of values, coexisting in symmetrical form in
scopes of competition, stress and the recreational customs associated to the high consumption of
substances. The experience of the woman who consumes alcohol and drugs is difficult because
they have less resources than the men, coexist most frequently with pairs that also undergo that
problem, have children that to take care of, experience difficulties in the maternal roll and confront
more serious obstacles in the beginning of the treatment; in addition they display traumas by sexual
and physicist damage and concomitants psychiatric upheavals. This one subject is central for the
nursing since it is the agents of health closest to feminine sex in the different stages from the vital
cycle, and therefore can in time take part in the prevention and opportune treatment of the drug
addiction. This intervention in fundamental becoming in a challenge stopping this one problematic
one that becomes an epidemic quickly. The used methodology consists of a systematic literature
review using the databases LILACS, PROQUEST, DOYMA, PUBMED, MEDLINE and SCIELO.
Key Words: Women, Chile, substance-related disorders, gender identity, social conditions/women,
domestic violence.

*2006, Horiz Enferm,


Correspondencia 17,
e-mail: 2, 73-82
cfoteiza@uc.cl 73
Nuevos Horizontes: Revisión de Literatura Oteíza, C.

INTRODUCCIÓN a aquellos artículos de libre acceso, textos


Es difícil formarse una imagen completa completos y publicados entre los años 2000
del consumo de sustancias por parte de las y 2006. Las palabras claves usadas son
mujeres, porque con frecuencia los estudios mujer, adicciones, violencia intrafamiliar,
de ámbito internacional, nacional y local so- maternidad, consumo femenino, rol de mujer,
bre la prevalencia de este fenómeno y los equidad, género y enfermería.
problemas conexos no abordan las cuestio- De un total de 1.485 artículos de fuente
nes de género (Organización de Naciones primaria encontrados, 30 se consideran rele-
Unidas [ONU], 2005). vantes para el tema, de estos se seleccionan
El consumo de drogas en las mujeres, 13 artículos para la presente revisión según
generalmente se ha considerado un fenó- el propósito anteriormente mencionado.
meno menos prevalente que en los hombres,
y las prácticas de intervención tienden a ho- Drogas en la mujer
mogeneizar tratamientos para hombres y mu- En Chile, las mujeres de 12 a 18 años han
jeres como si unos y otras tuvieran las mismas aumentado el uso de alcohol, presentando
necesidades y sin tomar en cuenta que, tanto en el 2002 tasas de prevalencia similares a
los patrones de consumo, como sus causas las de los hombres (CONACE, 2004).
y consecuencias, les afectan de manera dife- El informe más reciente de las Naciones
rente (Consejo Nacional para el Control de Unidas en que se examinan las diferencias de
Estupefacientes [CONACE], 2004). género con respecto al uso indebido de sus-
Estas características distintas respecto tancias, titulado Tendencias Mundiales de las
a los varones, son fundamentalmente el Drogas Ilícitas del año 2002, indica que las
desarrollo de una adicción de una gravedad mujeres representan un porcentaje estimado
mayor, que repercute en consecuencias del 10% de los consumidores en algunas so-
familiares y sociales más acusadas y en ciedades asiáticas tradicionales, el 20% en
una dificultad añadida a la hora de intentar los países de la antigua Unión de Repúblicas
abandonar el consumo (Rekalde & Vilches, Socialistas Soviéticas y los de América Lati-
2003). na, y alrededor del 40% en América del Norte
En general, las mujeres que tienen pro- y algunos países europeos (ONU, 2005).
blemas de consumo de sustancias tienen Aumento en el consumo de drogas y al-
menor acceso a educación, empleo o in- cohol que se observa como consecuencia de
greso que los hombres, conviven con mayor nuevas escalas de valores, la inserción en el
frecuencia con parejas que también sufren ámbito laboral con mayor nivel de competen-
este problema, tienen hijos a cargo y afrontan cia y exigencia, el estrés y las costumbres
mayores dificultades al comienzo del trata- recreativas asociadas cada vez más a un
miento. Además, presentan mayores traumas alto consumo de alcohol (CONACE, 2004).
que los hombres por maltrato físico y sexual y Sin embargo, la mayoría de la investigación
trastornos psiquiátricos concomitantes, prin- en torno al uso de drogas por las mujeres
cipalmente estrés postraumático y trastornos suele utilizar teorías y modelos desarrollados
del ánimo y ansiedad (ONU, 2005). para explicar la experiencia de los varones,
En la presente revisión se realiza un análi- aplicándolos a las diferencias de género, sin
sis del consumo de drogas en la mujer y su haberse producido, de este modo, un desa-
influencia en el rol materno y la existencia de rrollo específico. Las pautas de la drogadic-
violencia intrafamiliar. ción femenina se han derivado de los resulta-
dos de estudios efectuados exclusivamente
METODOLOGIA con hombres (Rekalde & Vilches, 2003).
Se realizó búsqueda sistemática de Para una mujer con consumo problemáti-
bibliografía utilizando las bases de datos co de drogas, algunos temas tales como las
LILACS, PROQUEST, DOYMA, PUBMED, tensiones al interior del hogar, la violencia
MEDLINE y SCIELO. Se delimitó la búsqueda en la familia, la no valoración de su aporte

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Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar

social, la tendencia a ubicarse en un lugar Las mujeres que utilizan drogas son fre-
secundario y/o postergado, y conflictos en cuentemente rotuladas como negligentes y
su mayoría derivados de su rol sexual, son se las relaciona con estereotipos de mujeres
temas que adquieren una importancia central agresivas, promiscuas y que no cumplen su
en el proceso de su dependencia y, general- papel doméstico, esto afecta sus sentimien-
mente, no son considerados en su proceso tos al asumir el papel maternal, en una so-
de tratamiento (CONACE, 2004). ciedad donde las madres tienen obligación
La presencia de patologías en la familia, con el bienestar de sus niños (Bernal, Frari &
ruptura de lazos, pérdidas, separaciones, O’Brien, 2005).
conflictos matrimoniales entre los padres, A su vez la mujer reconoce la influencia
historias de alcoholismo y/o drogadicción negativa del consumo de drogas en su rol
y altos índices de violencia y abuso sexual materno, como una forma de separación de
son situaciones frecuentes vividas por las sus hijos o de inadecuación en el cuidado
mujeres consumidoras de drogas. Además, hacia ellos (Bernal et al., 2005). Para la mu-
estudios realizados arrojan que el 80% de jer adicta, la satisfacción de ser madre se
las mujeres con consumo problemático de relaciona con el hecho de sentirse orgullosa
drogas presenta uno o más diagnósticos por ser madre y creer que podría ser buena
psiquiátricos adicionales (CONACE, 2004). madre si no consumiera droga; además de
tener siempre el deseo de quedarse con sus
Rol Materno y Drogas hijos o recuperarlos en el caso de haberlos
La identidad maternal considera el ideal perdido (Frari et al., 2005). Esto involucra
de ser madre, lo que incluye mantener la uni- una fuerte lucha que produce sufrimiento al
dad de la familia que tiene por función satis- definirse respecto a los hijos como buena o
facer las necesidades emocionales y ayudar mala madre y al tener separaciones verda-
en el proceso de socialización de los hijos, deras o potenciales de sus hijos. Sin embar-
como forma de prepararlos para la vida adul- go, muchas de ellas reconocen después que
ta y que puedan tener relaciones sociales siendo adictas no eran buenas madres, deja-
satisfactorias y se transformen en personas ban de lado a sus hijos y, en algunos casos,
responsables para la sociedad (Frari, Bernal los inducían al consumo de alcohol u otras
& O’Brien, 2005). drogas, por lo que algunas aceptan que sus
Si se analiza el rol materno de la mujer hijos están mejor lejos de ellas (Bernal et al.,
que consume algún tipo de sustancia, se 2005).
observa que una madre que abusa de sus- Por otra parte, los niños afectados por un
tancias es incapaz de protegerse a sí misma deficiente apego maternal, como consecuen-
o a sus hijos como víctimas de maltrato; en cia de la drogadicción materna, enfrentan un
consecuencia, muchas veces la mujer drogo alto nivel del riesgo por una acumulación de
dependiente es vista como mala madre, y factores ambientales que los hacen vulnera-
en general temen que, por su condición de bles a los problemas físicos, sociales y emo-
adictas, puedan perder a sus hijos, indepen- cionales. Además, la mayoría de estos niños
diente de la sustancia que hayan consumido experimentó la exposición prenatal al alco-
(Chait & Zulaica, 2005). Así, además del es- hol, otras drogas y el humo del cigarrillo, lo
tigma asociado a ser “mujer adicta”, desde que influye negativamente en su crecimiento
su espacio privado la mujer es juzgada en el y desarrollo (Conners et al., 2004).
ejercicio de su rol materno, ya que no brinda En este contexto, la madre que consume
el cuidado socialmente esperado a sus hijos/ sustancias generalmente siente culpabilidad
as y, desde lo público, es vista como alguien por consumir droga durante el embarazo o
que no es capaz de controlar su situación fa- por drogarse delante de sus hijos. A su vez,
miliar, por tanto, alguien en quien no se pue- también experimenta dificultad para expresar
de confiar en otros ámbitos, como el laboral cariño y amor, teniendo como justificación
(CONACE, 2004). la falta de percepción de amor y cariño

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Nuevos Horizontes: Revisión de Literatura Oteíza, C.

durante la niñez, o porque la droga impide puede facilitar el acceso a comportamientos


hacer algo con los propios hijos (Bernal et al., cercanos a las drogas (Sanz et al., 2004).
2005). Esto provoca que los hijos de mujeres Una relación afectuosa protege a los hi-
adictas se vuelvan insensibles ante el dolor jos del consumo, mientras que, relaciones
que están viviendo, les cuesta expresarse, inadecuadas, con un alto grado de conflicto
identificarse, entenderse y tienden a ocultar y falta de vinculación entre padres e hijos,
sus sentimientos, aunque están cargados de aumenta el riesgo de problemas de conduc-
dolor, soledad, desesperación y presentan ta, como el consumo de alcohol y de otras
problemas relacionados con el sentimiento drogas. La existencia de buenas relaciones
de culpa (Valverde & Pochet, 2003). entre padres e hijos puede servir como un
Estos niños al vivir en un medio donde sus factor de resistencia capaz de reducir la in-
progenitores fueron o son consumidores de fluencia de los iguales en el consumo (Sanz
alcohol y otras drogas tienden a establecer et al., 2004).
vínculos afectivos y familiares con personas Finalmente, el rol materno disfuncional o
adictas o cuya personalidad concuerda con la inexistente causado por la adicción, es recu-
de un adicto potencial; de esta forma, no es perado, en cierta medida, cuando la mujer
raro que hijos de adictos se casen o vinculen entra en una comunidad terapéutica, pues
afectivamente con otros adictos (Valverde & recuperan su rol de madre, lentamente re-
Pochet, 2003) capacitan y tratan de mermar el daño que
Estos datos destacan la naturaleza en- le han provocado a sus niños y en algunos
tre la generación del abuso de sustancias y casos, recuperan el cuidado de aquellos que
problemas relacionados. Una parte impor- les habían sido quitados por consumir droga
tante de este grupo de madres proviene de (Frari et al., 2005).
hogares donde eran comunes el abuso de
sustancias, el conflicto de la familia y el abuso Drogadicción y Violencia Intrafamiliar
físico y/o sexual. Sus niños parecen volver a La violencia afecta a las mujeres
vivir experiencias de la niñez de sus madres independientemente de la cultura, clase
y, sin intervención, hay pocas razones para social, etnia, educación y orientación sexual.
creer que este grupo de niños podrá evitar Estudios realizados revelan que a nivel
los problemas que sus madres enfrentaron mundial, al menos el 25% de las mujeres han
(Conners et al., 2004). sido abusadas (Bonifaz & Nakano, 2004).
Desde la perspectiva del efecto que En Latinoamérica en el siglo XXI, el
provoca la disfunción del rol materno en proceso de la globalización contribuye a la
los hijos, percepción de menor estabilidad, liberalización del comercio internacional de
mayor percepción de relaciones de amor y productos, servicios, dinero y tecnología,
hostilidad con la madre y menor percepción de en tanto facilita el aumento del consumo
relaciones de control de la madre se asociaría de drogas y de la violencia, cambios en
con una mayor frecuencia de consumo de las estructuras de la familia, costumbres y
alcohol. Por otra parte, el consumo de drogas valores sociales (Miotto, 2002).
ilegales y haber probado un mayor número de En Chile, la Ley No 20.066 de Violencia
ellas se asociaría también a un mayor grado Intrafamiliar publicada en octubre de 2005
de conflicto marital percibido por los hijos y define como “violencia intrafamiliar” todo
a un mayor grado de despreocupación en la maltrato que afecte la vida o la integridad
relación con la madre (Sanz et al., 2004). física o psíquica de un miembro de la fa-
Asimismo, el consumo de tabaco y al- milia sobre otro. En la violencia intrafamiliar,
cohol de los padres está relacionado con el entre muchos factores implicados, merece
consumo de estas sustancias por parte de especial consideración el consumo de sus-
los hijos. El consumo de drogas legales de tancias tóxicas de carácter adictivo, tanto en
los padres proporciona modelos de conducta el maltratador como en la víctima. Algunas
que son transmitidos a los hijos y que les investigaciones han estimado que la inciden-

76
Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar

cia de problemas de alcohol en las familias que los hombres se consideran con el poder y
que experimentan violencia puede situarse la facultad para agredir a las mujeres (Bonifaz
entre un 50% y un 75%. En el contexto de las & Nakano, 2004). Estas mujeres son princi-
agresiones físicas, cerca de la mitad (47%) palmente víctimas de violencia psicológica y
de las personas involucradas en las agresio- sexual, y en mayor magnitud de violencia física
nes habían estado bebiendo con anterio- (Bonifaz & Nakano, 2004). El alcohol, genera
ridad a los episodios de violencia, según lo en el consumidor comportamientos irrespe-
expresado por las víctimas (Chait & Zulaica, tuosos, de celos, de dominación, atropellos,
2005). violencia verbal y física hacia los integrantes
Entre los principales elementos precipi- de la familia, lo cual produce inestabilidad al
tantes de la actitud violenta del agresor se interior del hogar (Tobo & Zago, 2005).
encuentra la ingesta de alcohol y/o drogas, Violencia que altera la dinámica familiar,
constituyéndose en “factor desencadenante” el grado de disfunción se relaciona directa-
cuando propicia violencia en el ámbito fami- mente con el maltrato; pues en la medida en
liar, o en “efecto” en tanto las drogas se con- que la familia sea menos capaz de resolver
vierten en refugio o escape de una persona sus problemas y adaptarse, la situación de
para sobrellevar situaciones de violencia violencia aumentará (Tuesca & Borda, 2003).
familiar (Bonifaz & Nakano, 2004). En este En el caso particular del consumo de bebidas
contexto, el consumo de alcohol de la mujer alcohólicas en forma frecuente, este interfiere
o su pareja, así como consumir algún tipo de en el mantenimiento de una buena relación
sustancia psicoactiva, constituye un factor de social y emocional, dificulta la relación con la
riesgo para el maltrato físico (Tuesca & Bor- pareja y la posibilidad de asumir la respon-
da, 2003). Un gran número de mujeres que sabilidad de los actos frente a su compañera
consumen drogas experimenta violencia do- y a su descendencia (Tobo & Zago, 2005).
méstica perpetrada por su conviviente (Farris Las familias que viven en una situación
& Fenaughty, 2002). El estudio realizado por de violencia intrafamiliar, constituyen en sí un
Tuesca et al. en el año 2003 muestra que el espacio que tiende a generar en los jóvenes
10% de las mujeres que habían experimen- problemas de delincuencia, drogadicción y
tado violencia registraba consumo de alguna alcoholismo. De esta manera, el consumo
sustancia psicoactiva con anterioridad o al problemático de drogas se transforma en una
momento del estudio. causa y consecuencia de la violencia en la
Las adicciones hacen más vulnerable a familia (CONACE, 2004).
la víctima, las mujeres que abusan de drogas La sumatoria del consumo de sustancias
son más propensas a convertirse en víctimas con la disfunción familiar incrementaría la
de la violencia doméstica. A su vez, el mal- violencia, ya que esto aumentaría las dificul-
trato predispone a la adicción a la víctima, tades de comunicación entre los miembros,
las mujeres maltratadas pueden presentar aumentaría el nivel de estrés y permitiría que
comportamientos autodestructivos como la se perpetúe el nivel de pobreza (Tuesca &
automedicación, el suicidio y el abuso de al- Borda, 2003).
cohol y otras drogas. El abuso de sustancias Para la mujer que convive con el abuso
puede surgir como una estrategia para hacer de alcohol y violencia por parte de su pareja
frente a la situación de violencia, para afron- la vida es un sufrimiento, existiendo constan-
tar su miedo e ira y poder continuar con su temente el sentimiento de impotencia, frus-
vida diaria, como si se tratara de una especie tración y tristeza originada por el comporta-
de medicación (Chait & Zulaica, 2005). miento de su cónyuge, pues, al pensar en su
Por otro lado, los varones agresores ge- futuro y el de sus hijos, ven un retardo en
neralmente son consumidores de sustancias los diferentes procesos intrafamiliares (Tobo
tóxicas, porque la mayoría de ellos fueron & Zago, 2005). Sin embargo, a pesar de lo
criados por padres que abusaban de drogas que implica vivir con un agresor y con el con-
o alcohol, asociado a la cultura machista en sumo de drogas, las mujeres toleran esta

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 73-82 77


Nuevos Horizontes: Revisión de Literatura Oteíza, C.

situación, lo que puede ser explicado porque DISCUSIÓN


las víctimas de violencia consideran que los Esta revisión permite analizar algunas de
problemas de pareja se deben resolver en el las causas y áreas en las cuales se puede
hogar, siendo fundamental la obediencia al dar el consumo de drogas en las mujeres.
esposo (Bonifaz & Nakano, 2004). Otras ra- Sin embargo, las investigaciones en el tema
zones para permanecer en esta situación son son escasas, sobre todo en el contexto na-
los factores económicos, la poca preparación cional.
para asumir responsabilidades, sentimientos Aun conociendo sobre el tema, y los da-
de afecto y cariño que las unen a sus cón- ños que produce impresiona lo perjudicial
yuges, y la protección de los hijos (Tobo & que puede ser en la vida de una mujer ya que
Zago, 2005). esta es uno de los pilares fundamentales de
Pese a esto, en la mujer subsiste el sen- la familia, unidad básica de la sociedad, por
timiento de haber sacrificado muchas cosas de lo que es urgente abordar el tema de adic-
su desarrollo personal por alternar el manejo ción en ellas, recordando que son y serán las
y la adaptación a las diferentes situaciones vi- madres de la humanidad futura. Si bien deja
venciadas en la familia (Tobo & Zago, 2005). un sabor amargo vislumbrar que la droga se
En este afrontamiento, la mujer puede encuentra en todos los ámbitos de la vida,
utilizar o no soportes psicosociales, cultura- se transforma en un desafío el intervenir y
les, religiosos, educativos, ambientales y detener esta problemática que se convierte
económicos que, de acuerdo a la necesidad rápidamente en una epidemia.
identificada, pueden contribuir a que la per- Actualmente el consumo de drogas es
sona se haga menos vulnerable frente a los un problema en el mundo, que ya no solo
problemas y conflictos de su cotidianeidad, se asocia al hombre, la mujer, en su camino
así como la utilización de recursos internos hacia la igualdad de géneros en independen-
de la familia (Tobo & Zago, 2005). cia, autosuficiencia y profesionalismo, tam-
Sin embargo, el aislamiento de amigos y bién ha igualado aspectos negativos, como
de la comunidad presente en la mujer que es la drogadicción. El consumo de drogas
experimenta violencia intrafamiliar, asociado femenino es una causa y a su vez, una con-
a consumo de sustancias por parte de ella secuencia de ciertas situaciones que afectan
o del agresor, puede disminuir su capacidad la vida de la mujer, así como son la violen-
de acceder a recursos emocionales de ayuda cia intrafamiliar ejercida por sus cónyuges,
y de salud necesarios (Farris & Fenaughty, la enorme carga que significa trabajar para
2002). El aislamiento social sirve de alimento contribuir a la economía de sus hogares y a
para nuevas y mayores relaciones de abuso, su vez cumplir con los roles de madre, es-
contribuyendo a perpetuarlas. Generalmente, posa y dueña de casa. La violencia que se
la mujer consumidora de drogas puede tener ejerce en contra de la mujer aún, solo por ser
como pareja otro consumidor, mantenién- mujer, haber nacido y crecido en ambientes
dose relaciones muy destructivas por los nocivos, sin amor, sin atención parental y en
efectos del consumo a largo plazo (irritabi- un contexto donde la droga y el alcohol son
lidad, agresividad, impulsividad, depresión, los principales protagonistas, las hará sus-
ansiedad, etc.) (Chait & Zulaica, 2005). ceptibles de repetir estos patrones haciendo
Intervenir para disminuir este aislamien- que proporcionen una calidad de vida similar
to es fundamental, las mujeres físicamente a sus hijos, convirtiéndose en un círculo vi-
abusadas que reciben ayuda social de redes cioso autoperpetuante.
informales como los amigos, muestran que Se observa que el consumo de drogas
esta ayuda desempeña un papel importante surge en un contexto de estrés, ya sea laboral,
en la toma de decisión respecto a su relación familiar, económico y personal, situación
de pareja, en el inicio para un tratamiento de frente a la cual no se cuenta siempre con
rehabilitación y en los resultados del trata- las herramientas suficientes para afrontar
miento (Farris & Fenaughty, 2002). y superar dichas circunstancias. Las redes

78
Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar

de apoyo social son claves para disminuir como el problema de las drogas, no pueden
el daño y lograr superar dicha enfermedad, ser enfrentadas en forma descoordinada o
siempre y cuando la mujer afectada presenta sin considerar los macrodeterminantes del
la motivación mínima para el cambio. problema (Rebolledo & Costa, 2005).
El efecto producido por el consumo de En este contexto, la formación de
drogas en la mujer toca temas como la fa- enfermeras debe contemplar la preparación
milia y las relaciones interpersonales, existe de profesionales capaces de actuar en la
el miedo a perder la custodia de los hijos o la reducción y demanda de las drogas, siendo
preocupación por la mala realización del rol fundamental el convertir la educación en un
materno, la necesidad de permiso de la pare- modelo pedagógico para la promoción de la
ja para recibir tratamiento, el miedo a que la salud, caracterizándola en dos momentos,
pareja las abandone y, generalmente, la con- el de prevención primaria para reducir la
vivencia con otro consumidor de drogas, la demanda y el uso de drogas y el de mejorar
estigmatización y la vergüenza, la sanción el estado de salud en los aspectos físicos,
y la crítica social asociada a la visión mas- psíquicos y sociales (Vásquez & Pillón,
culina del consumo de drogas y alcohol y el 2005). La prevención socioeducativa es
aislamiento social como efecto directo de la considerada crucial, con el desarrollo de
vergüenza sentida. Todas estas consecuen- verdaderos liderazgos para el ejercicio de la
cias actúan como obstáculos sociales, cul- multiplicación de la información sobre drogas,
turales y personales, alejando aún más la po- fundamentada en conocimientos científicos y
sibilidad para que las mujeres puedan acce- basada en experiencias exitosas (Mendes,
der a un tratamiento oportuno que les brinde 2005). Existe la necesidad de sensibilizar a
una mejor calidad de vida en el futuro. las instituciones de educación superior para
El problema de la droga es un fenómeno que den mayor importancia a la entrega de
relevante que merece estudios profundos contenidos sobre alcohol y otras substancias
que estimulen procesos creativos de trans- psicoactivas en los alumnos de enfermería
formación social (Mendes, 2005). El consu- (Vásquez & Pillón, 2005).
mo de drogas en la mujer se hace relevante La enfermera puede desempeñar un
para enfermería, ya que es uno de los pro- importante papel en la promoción de la salud
fesionales de salud más cercano al sexo mediante algunos aspectos, como son la
femenino en las distintas etapas del ciclo propuesta de proyectos y programas que
vital, y por tanto, puede intervenir a tiempo ayuden a disminuir la demanda de drogas y
en la prevención y tratamiento oportuno de a mejorar la calidad de vida de los usuarios
la adicción. En esta lógica, el saber que la de las mismas, y la formación y capacitación
enfermera(o) adquiere en su formación aca- de profesionales de salud para atender la
démica conocimientos que le permiten con- reducción y la demanda de alcohol y drogas;
siderar las necesidades de las personas con por lo tanto, la atención de enfermería puede
una visión holística, provoca un quiebre al ser un recurso esencial en la asistencia de
confrontarse con una infinidad de cuestio- las personas, familiares y comunidades
namientos al trabajar con personas usuarias con problemas relacionados con el uso de
de drogas lícitas e ilícitas y en enfrentamien- substancias psicoactivas (Vásquez & Pillón,
to de situaciones de miseria, pobreza, mar- 2005).
ginalidad, discriminación, violencia, silencio, La problemática de las drogas trasciende
uso de drogas, dependencia química, entre a los enfoques de salud pública, judicial, edu-
tanto otras adjetivaciones (Vásquez & Pillón, cacional o legislativa, ya que ninguna de es-
2005). tas miradas ha podido llamar a la cohesión
El traslado del modelo biomédico a la de los demás sectores o dar real cuenta del
confrontación de las dependencias ha propi- fenómeno en su totalidad. Solo en una mira-
ciado un abordaje microsintomático insufi- da multidimensional e integradora podremos
ciente, pues las cuestiones multifactoriales, obtener resultados en el cuidado de la salud

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 73-82 79


Nuevos Horizontes: Revisión de Literatura Oteíza, C.

de las personas y comunidades afectadas vención de ellas, a través del continuo con-
por el fenómeno de la droga (Rebolledo & tacto con las personas y sus vidas, comple-
Costa, 2005). mentando el actuar de otros profesionales.
El profesional de enfermería se constituye
en un recurso humano imprescindible en
esta mirada multidimensional para enfrentar REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
la drogadicción, ya que desempeña un rol
fundamental en el proceso de interacción y Bernal, C., Frari, S. & O’Brien, B. (2005). Per-
comunicación con los diferentes grupos de cepción del papel maternal de las mu-
la comunidad, así como presenta capacidad jeres que viven el contexto de la droga
para enfrentar y solucionar situaciones y la violencia [versión electrónica]. Re-
de salud cotidianas, con seguridad, vista Latino-Americana Enfermagem.
conocimientos y liderazgo (Vásquez & Pillón, 14(2), 155- 162.
2005). Bonifaz, R. & Nakano, A. (2004) La violen-
Ante la realidad sociocultural, la cia intrafamiliar, el uso de drogas en
problemática de adicciones no se puede la pareja, desde la perspectiva de la
asumir solamente en el contexto de las mujer maltratada [versión electrónica].
sustancias o de las acciones que hacen Revista Latino-Americana Enferma-
adictas a las personas, sino que se gem. 12 (número especial), 433-438.
debe orientar a procesos más amplios Chait, L. & Zulaica, B. (2005). Mujeres dro-
involucrados en la generación de la adicción. godependientes maltratadas: análisis
De esta forma, la primera acción importante para la intervención. [versión electróni-
para enfrentar eficientemente el fenómeno ca]. Trastornos Adictivos, 7(2), 104-111
de las adicciones es entenderlo siendo en Consejo Nacional para el Control de Estupe-
este contexto los profesionales de la salud faciente (2004). Mujeres y tratamiento
y los educadores los primeros llamados a de drogas: orientaciones técnicas para
develar los mitos y a poner en evidencia las la incorporación de la variable género
fuerzas que han generado y sostenido esta en el tratamiento y rehabilitación de
problemática (Rebolledo & Costa., 2005). mujeres con problemas de drogas.
La enfermera juega un rol importante en Santiago, Chile: CONACE.
la intervención en el ámbito cultural y en la Conners, N., Bradley, R., Mansell, L., Liu,
prevención en los niños desde muy temprana J., Roberts, T., Burgdorf, K. et al.
edad, promoviendo valores que estimulen la (2004). Children of mothers with
autorresponsabilidad, el compromiso social serious substance abuse problems:
y los hábitos de vida saludable. Estos hábi- An accumulation of risks. [versión
tos de vida y la construcción de solidaridad electrónica]. The American Journal of
social quizás sean la piedra filosofal para Drug and Alcohol Abuse. 30(1), 85–
enfrentar los efectos globales de las dro- 100.
gas, pero ya no como un fenómeno aislado Farris, C.& Fenaughty, A. (2002). Social
al que hay que combatir, sino entendiéndolo isolation and domestic violence
en el contexto de una sociedad que prioriza among female drug users. [versión
los valores como triunfalismo económico, in- electrónica]. The American Journal of
dividualismo y hedonismo, por sobre el cui- Drug and Alcohol Abuse. 28(2), 339-
dado de la salud, la vida en comunidad y la 351.
mutua dependencia solidaria (Rebolledo & Frari, S., Bernal, M. & O’Brien, B. (2005).
Costa, 2005). Mujeres viviendo en el contexto de
Los múltiples factores que influyen en el drogas (y violencia): el papel maternal.
fenómeno de la droga justifican un abordaje [versión electrónica]. Revista Latino-
en equipo, la enfermera puede ser parte para Americana Enfermagem 13 (número
el tratamiento de las adicciones y en la pre- especial), 813-819.

80
Mujer, droga, rol materno y violencia intrafamiliar

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ocio-perpspectivas-genero-k.pdf Enfermagem. 13 (número especial),
845-853.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 73-82 81


ASOCIACIÓN CHILENA DE
EDUCACIÓN EN ENFERMERÍA
Es una Corporación de Derecho Privado, de carácter científico, sin fines de lucro, regida por las
normas del Título XXXIII del Libro Primero del Código Civil, por el Reglamento sobre Concesión
de Personalidad Jurídica del Ministerio de Justicia. Creada en 1963 como “SOCIEDAD CHILENA
DE EDUCACIÓN DE ENFERMERÍA”, cuyo nombre se modificaría en 2001, llamándose en lo
sucesivo “ASOCIACIÓN CHILENA DE EDUCACIÓN EN ENFERMERÍA”.
Su Misión es constituirse en un referente consultora y reguladora de la Educación Superior en
Enfermería, que basada en principios éticos, fortalece el trabajo colaborativo entre los socios,
con respeto por la autonomía y la diversidad y establece vínculos internacionales.

La Corporación tendrá por objetivo general impulsar y coordinar el desarrollo de la educación


superior de Enfermeras/os en el país.
En el plano específico pretende:
a) Contribuir a orientar el desarrollo de los planes de estudio conducente al Licenciado en
Enfermería, procurando la homogeneidad y actualización del cumplimiento de los objetivos
de Educación en Enfermería y de las necesidades de cuidado de la comunidad.
b) Impulsar y coordinar iniciativas y actividades que relacionen la Enfermería con las políticas
y programas de salud.
c) Impulsar el intercambio de información sobre programas docentes y de investigación entre
las Facultades, Escuelas, Departamentos y/o Carreras de Enfermería.
d) Mantener intercambio de información relacionada con la educación en enfermería, con
instituciones nacionales e internacionales.
e) Contribuir con los órganos del Estado, en materia de Salud y Educación, entre otros,
aportando resultados de estudios que justifiquen cambios curriculares en la formulación de
programas de estudios.
f) Actuar como entidad asesora en acreditación de diferentes niveles de formación en
Enfermería.
g) Participar en la entidad certificadora de especialidades en Enfermería.
h) Representar los intereses de los asociados ante los órganos del Estado reguladores de la
Salud y Educación.
i) Representar los intereses de los asociados ante organizaciones gremiales y de educación
nacional e internacional u otras asociaciones de carácter análogo a la Asociación Chilena de
Educación en Enfermería.

Son miembros activos de la Asociación, las Unidades Académicas que han sido incorporadas
como socios jurídicos y las socias individuales que trabajan en docencia en las Unidades
Académicas asociadas. Beneficios:
• Obtener asesoría en temas de educación • Participar en Proyectos patrocinados por
en enfermería, a través de la Comisión la ACHIEEN o el CIIENF a nivel nacional
Currículo. o internacional.
• Mantener un valioso intercambio • Obtener apoyo económico para la
de experiencias con colegas de la presentación de trabajos aceptados en
docencia. eventos nacionales y del extranjero.
• Tener disponible la literatura de enfermería • Obtener asesoría en la formulación de
(libros y revistas) de la ACHIEEN y del proyectos de investigación, a través del
CIIENF que se encuentran ubicadas en CIIENF.
el Centro de Documentación del Colegio • Recibir periódicamente información
de Enfermeras de Chile (Miraflores 563 de interés, a través del Boletín de
Santiago). ACHIEEN.
• Participar en cursos, seminarios y • Acreditar antecedente curricular
congresos de enfermería patrocinados relevante.
por la ACHIEEN con descuento en su
cuota de inscripción. Sitio web: www.achieen.cl
Artículos Misceláneos: Investigación Presencia de dolor en un grupo de trabajadores

PRESENCIA DE DOLOR EN UN GRUPO DE TRABAJADORES DEL SECTOR


SALUD

MEASURING PAIN IN A GROUP OF HEALTHCARE WORKERS

Ximena Aqueveque*
Enfermera Universitaria, Magíster en Salud Pública Universidad de Chile, Diplomada en Cuida-
dos Paliativos Universidad Católica del Maule, Coordinadora Regional del Programa de Salud del
Adulto Servicio de Salud del Maule
Mirtha Núñez
Licenciada en Enfermería Universidad Católica del Maule, Profesor Adjunto Escuela Enfermería
Universidad Católica del Maule. Candidata Magíster Salud Pública Universidad de Chile

Artículo recibido el 20 de abril, 2006. Aceptado en versión corregida el 28 de noviembre, 2006

RESUMEN
El dolor, experiencia sensorial y emocional que dificulta la calidad de vida de las personas que a pesar
de ser subjetivo, puede ser evaluado mediante escalas creadas para ello. En el país no se evalúa
en forma sistemática la presencia de dolor en la población adulta presuntamente sana, los exámenes
de Medicina Preventiva no lo incluyen. El presente trabajo tiene por objetivo generar conocimiento
sobre la presencia de dolor en población trabajadora presuntamente sana. Se aplica encuesta auto
administrada, voluntaria y anónima a trabajadores de la Dirección del Servicio de Salud del Maule. Se
utiliza escala EVA numerada. Se encontró que solo un 33,7% de los funcionarios no presenta dolor,
en cambio un 66,3% presenta dolor mientras se encuentra en su lugar de trabajo y según la inten-
sidad del dolor, se observa que un 10,1%; de los trabajadores presenta dolor leve, un 24,7% dolor
moderado, un 18% presenta dolor intenso y el 13,5. % de la muestra presenta dolor severo.
El grupo de 61 años y más es el único que no presenta dolor y en el grupo de 51 a 60 años un 65% de los
trabajadores presenta dolor; la ubicación física del dolor es en la mayoritaria en la espalda con rango de 1
a 8 de intensidad, seguido por el dolor de cabeza con intensidad de 1 a 10. Se concluye que el dolor está
presente en un porcentaje significativo de la población estudiada se encuentra en su puesto de trabajo.
Se muestra la necesidad de incluir la evaluación del quinto signo vital, el dolor, en exámenes preventivos.
Palabras clave: Dimensión del dolor, dolor, salud laboral, medicina preventiva, examen físico, Chile.

ABSTRACT
Pain, an emotional and sensory experience that complicates a person’s quality of life, although
subjective, can be evaluated with scales designed for its measurement. Nationally, there is no
systematic evaluation of the presence of pain in the healthy adult population and preventative medical
examinations do not include it. The current article has as its objective the generating of knowledge
regarding the presence of pain in a presumably healthy working population. An anonymous, voluntary
and self administered questionnaire is used with workers from the Office of Health Services in Maule.
The numbered EVA scale is used. Results found that 33.7% of employees did not present pain, none
the less, 66.3% did report pain while in the workplace, and regarding pain intensity, it is observed
that 10.1%; of workers present light pain, 24.7% moderate pain, 18% intense pain and 13.5. % of the
sample present severe pain.
The age group of 61 years and older was the only one to not present pain, and 65% of those in the
range of 51-60 years presented pain; physical location of pain is mostly in the back with a range
between 1-8 of intensity, followed by head aches with a range of 1-10 in intensity. It is concluded that
pain is present in a significant percentage of the population while in the workplace, and results are
similar to those found in other studies regarding location of pain. The need to include the evaluation
of the fifth vital sign, pain, in preventative examinations is demonstrated. Key Words: Pain measure-
ment, pain, occupational health, preventive medicine, physical examination, Chile.

2006, Horiz Enferm,


* Correspondencia e-mail:17, 2, 85-92
xaqueveque@ssmaule.cl 85
Artículos Misceláneos: Investigación Aqueveque, X.

INTRODUCCIÓN Los factores psicosociales tienen mayor


“El dolor es una desagradable experien- relevancia en el último nivel del modelo de
cia sensorial y emocional que se asocia a Loeser. Los factores psicológicos influyen
una lesión actual o potencial de los tejidos o claramente en la percepción del dolor y la
que se describe en función de dicha lesión. conducta dolorosa, a través de tres dimen-
El dolor es siempre subjetivo. Cada individuo siones del paciente, la dimensión sensorio
aprende a aplicar ese término a través de discriminatoria, la dimensión motivacional
sus experiencias traumáticas juveniles. In- afectiva y la dimensión cognitiva evaluativa
dudablemente, se trata de una sensación en (MINSAL, 1999).
una o más partes del cuerpo y supone una Las complejas interacciones entre estas
experiencia emocional” (Ministerio de Salud tres dimensiones, regulan la experiencia del
de Chile [MINSAL], 1999). dolor y sus manifestaciones conductuales
El dolor físico es una sensación subje- (MINSAL, 1999).
tiva de molestia de alguna parte del cuerpo.
Esta sensación es trasmitida hacia el siste- EVALUACIÓN DEL DOLOR
ma nervioso central por los nervios periféri- El dolor es una experiencia subjetiva, sin
cos, además de los mecanismos de control embargo existen varios métodos de medición
espinal de la transmisión nociceptiva; las del dolor según la edad y la condición del pa-
vías descendentes se originan en tres zonas ciente (Montero & Manzanares, 2005).
importantes: la corteza, el tálamo y el tallo Aunque el dolor puede ser conceptualizado
cerebral. Cuando el organismo sufre alguna y descrito a partir de distintos parámetros
enfermedad, lesión o infección las termina- tales como la intensidad, la frecuencia
ciones especiales de dolor envían mensajes e incluso la duración, la revisión de la
al cerebro para informar del daño o de los literatura evidencia claramente que ha sido
estímulos desagradables interpretados como el parámetro de la intensidad el que se ha
dolor (MINSAL, 1999). convertido en el principal protagonista. Así,
El dolor físico se divide en dos grandes la medición subjetiva simple aborda el dolor
grupos, el dolor agudo y el dolor crónico. El desde un concepto unidimensional, como
dolor agudo es aquel que tiene una duración un fenómeno unitario y por lo tanto mide tan
limitada, horas o unos pocos días y el dolor solo su intensidad (Montero & Manzanares,
crónico es aquel que se prolonga en el tiem- 2005).
po por al menos más de tres meses (Montero Entre los instrumentos que evalúan el
& Manzanares, 2005). dolor están la Escala Descriptiva Simple o
Loeser (1980 citado en MINSAL, 1999) de Valoración Verbal introducida por Hiele en
define varios niveles en la experiencia del el año 1948 (Montero & Manzanares, 2005).
dolor. En primer lugar se debe producir la Esta utiliza un abordaje muy básico para medir
nocicepción, que al ser percibida por la el dolor a través de la elección de la palabra
persona en forma consciente se denomina que refleja la intensidad del dolor: ausencia
propiamente dolor. Una vez percibido el de dolor (0); dolor leve (1); dolor moderado
dolor, se genera una respuesta afectiva que (2); dolor severo (3); y dolor atroz (4).
integra las experiencias previas. La matriz Otro instrumento es la Escala Numérica,
afectiva varía de acuerdo a las circunstancias es una de la más utilizadas, que fue
actuales y anteriores, y la significación del desarrollada por Downie en 1978 (Montero
dolor para la persona (MINSAL, 1999). & Manzanares, 2005). En ella se le pide
Finalmente la experiencia sensorial al paciente que le asigne al dolor un valor
o emocional no placentera, produce una numérico entre dos puntos extremos de cero
respuesta global del individuo que se describe al diez, donde el cero corresponde a “dolor
como conducta dolorosa y que representa en suave” y el a diez “dolor insoportable”.
realidad el único índice clínico observable de La Escala Visual Análoga [EVA] fue ideada
dolor (MINSAL, 1999). por Scotl-Huskinson en 1976 (citado en

86
Presencia de dolor en un grupo de trabajadores

Montero & Manzanares, 2005). Se compone ciado si es mencionado por la persona o si


de un dibujo con una línea continua con los es consultado por el equipo de salud.
extremos marcados por dos líneas verticales Según la Agencia Europea para la Salud
que indican la experiencia dolorosa. Esta y Seguridad en el Trabajo (2000) en la in-
escala se denomina análoga solamente vestigación denominada Work Related low
cuando se emplean palabras en sus back disorders, un 30% de los trabajadores
dos extremos, tales como “no dolor” y el europeos refieren dolor de espalda. El Havis
“máximo dolor imaginable” o “no alivio” y Allen Goup en el estudio que realiza a 1.000
“alivio completo”. Se denomina “gráfica” si empleados en encuesta vía Internet en Esta-
se establecen niveles con las palabras de dos Unidos, observó que el 29% de los tra-
referencia. Se ha modificado con el fin de bajadores presentaban dolor.
aumentar su sensibilidad, ya que alrededor En la IV Encuesta Nacional sobre las
de un 9% de los pacientes son incapaces de condiciones del trabajo publicada por el
completarla (Montero & Manzanares, 2005). Ministerio del Trabajo y Asuntos Sociales de
Por otra parte, a pesar de contar con España (2003) se observó que el motivo de
instrumentos disponibles se desconoce la consulta médica relacionada con problemas
prevalencia e intensidad del dolor en la po- de salud derivados del trabajo, era en un
blación adulta presuntamente sana, ya que 20,4% por dolor de espalda y en un 10,2%
en general no se mide y no se encuentra in- por dolor de cuello.
corporado a los exámenes de salud preven- La Federación de Sanidad de CC.OO,
tivos, como el Examen de Salud Preventivo en Andalucía, con la colaboración del De-
del Adulto [ESPA]. Examen que se realizó partamento de Ciencias Sociosanitarias de
desde el año 1995 al 2005 en la población la Universidad de Sevilla, llevaron a cabo un
beneficiaria del sistema público de 20 a 64 estudio en 1.168 trabajadores sanitarios de
años, a partir de entonces se comenzó a distintos estamentos y centros del Servicio
aplicar el Examen de Medicina Preventiva Andaluz de Salud para conocer la frecuen-
del Adulto [EMPA], aprobado por ley y que cia de alteraciones músculo esqueléticas y
entró en vigencia el 1 de julio del año 2005 y las condiciones de trabajo relacionadas con
que no incorpora la evaluación del dolor en dichas dolencias. En este estudio se encon-
la población objetivo. tró que el 94% de los trabajadores manifestó
Tampoco se midió en la Encuesta Na- haber tenido episodios de dolor sobre la co-
cional de Salud realizada por el Ministerio lumna, el cuello, los hombros y las manos.
de Salud de Chile en el año 2003 (MINSAL,
2003). En noviembre del año 2004 el Minis- OBJETIVOS
terio de Salud de Chile a través de la Circular De acuerdo al conocimiento que existe
2a/46 (MINSAL, 2004) norma la evaluación sobre el tema y la experiencia de las autoras
del dolor como quinto signo vital, el cual se propuso estudiar la presencia del dolor en
debe quedar escrito en los registros clínicos población trabajadora presuntamente sana,
de toda persona que se encuentre recibi- con el propósito de conocer la incidencia de
endo atención médica, dicha evaluación se este síntoma en la vida cotidiana del adulto
debe realizar a través de la Escala EVA o y contar con evidencia que apoye la inclu-
método Análogo Visual de Soctt-Hukinsson sión de la valoración del quinto signo vital
(MINSAL, 2004). en los Exámenes de Medicina Preventiva.
Es así como desde fines del año 2004 la Se espera además, contar con información
evaluación del dolor está normada y queda que sirva a los empleadores para el diseño
circunscrita a la población consultante de los de actividades preventivas que contribuyan
establecimientos de Salud. No obstante, sa- a mejorar la calidad de vida del trabajador
ber que la población general padece de dolor en su puesto de trabajo y por ende su pro-
por los procesos físicos y biológicos propios ductividad y satisfacción personal. Según los
del envejecimiento solo puede ser eviden- antecedentes mencionados, se estimó con-

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 85-92 87


Artículos Misceláneos: Investigación Aqueveque, X.

veniente realizar un estudio que permitiera en cuatro plantas físicas diferentes, consti-
contribuir al conocimiento sobre la presencia tuyendo un total de 174 personas.
e intensidad del dolor en población trabaja- La selección de la Muestra es intencio-
dora presuntamente sana en la comuna de nada, se eligió a los trabajadores que se
Talca, Chile. El trabajo se desarrolló con los desempeñan en la planta física principal de
trabajadores de la Dirección del Servicio de la Dirección del Servicio de Salud donde se
Salud del Maule, Séptima Región. encuentra el mayor número de trabajadores.
El objetivo general fue conocer la pre- La muestra quedó constituida por 93 traba-
sencia del dolor en población trabajadora jadores. Criterio de exclusión son aquellos
presuntamente sana. Los objetivos específi- trabajadores ausentes en la semana de in-
cos fueron: Evaluar la presencia e intensidad vestigación y no pertenecientes a la planta
del dolor en la población trabajadora presun- seleccionada.
tamente sana que labora en la Dirección La información del estudio se recolectó a
del Servicio de Salud del Maule, describir través de encuesta autoaplicada que cuenta
la categoría del dolor según Escala EVA nu- con información sobre características de-
merada, describir las diferentes categorías mográficas de la población en estudio con
de dolor por grupo de edad, sexo, actividad demográficos tales como edad, sexo y activi-
e intensidad de expresión de dolor. dad funcionaria; mide información sobre la
presencia o no de dolor al momento de estar
METODOLOGÍA trabajando y si existe dolor evalúa su inten-
Se realizó un estudio no experimental, sidad y localización. Al momento de aplicar
descriptivo y transversal. la encuesta se solicita consentimiento infor-
El universo del estudio son los funciona- mado de manera oral. La operacionalización
rios que trabajan en la Dirección del Servicio de las variables se muestra en la tabla 1.
de Salud del Maule, los que se distribuyen

Tabla 1: Operacionalización de las variables

VARIABLE CATEGORÍAS VARIABLE CATEGORÍAS

EDAD 20 a 30 años CLASIFICACIÓN ESCALA EVA-NUMÉRICA


INTENSIDAD
DEL DOLOR

31 a 40 años Sin Dolor= Puntuación 0


41 a 50 años Dolor Leve= Puntuación de 1-2
51 a 60 años Dolor Moderado= Puntuación de 3-4
61 y más años Dolor Intenso= Puntuación de 5-6
Dolor Severo= Puntuación de 7 a 10

ACTIVIDAD M = Masculino UBICACIÓN Según expresión declarada


FUNCIONARIA Profesional Directivo DEL DOLOR
Profesional Asesor
Técnico (Administrativo,
Contador y otros)

Oficial Administrativo
Secretaria
Auxiliar Servicio (Incluye
Chofer)

88
Presencia de dolor en un grupo de trabajadores

Descripción conceptual de algunas va- lor intensidad 6 un 2,2; dolor intensidad 7 un


riables del estudio: Actividad funcionaria 3,4%; dolor intensidad 8 un 7,9%; dolor in-
se refiere a la función administrativa que tensidad 9 un 1,1% y dolor intensidad 10 un
desarrolla el trabajador en dependencia de 1,1%. (tabla 2).
la Dirección del Servicio. Se establecen seis
categorías: Directivo: funcionario que tiene Tabla 2: Intensidad de dolor en los traba-
responsabilidad de jefatura; Profesional jadores - D.S.S. Maule
asesor: funcionario con título universitario
Intensidad dolor Número Porcentaje %
que cumple tareas de apoyo en su área de
formación; Técnico: funcionario con título Sin dolor (0) 30 33,7
técnico que cumple fundamentalmente ta- 1 3 3,4
reas administrativas; Oficial administrativo: 2 6 6,7
funcionario sin título técnico que desarrolla 3 11 12,4
4 11 12,4
actividades administrativas delegadas; Se-
5 14 15,4
cretaria: funcionaria que realiza acciones de 6 2 2,2
secretaria; Auxiliar: funcionario que realiza 7 3 3,4
actividades de aseo, estafeta, se incluye aquí 8 7 7,9
a los conductores de vehículos. 9 1 1,1
10 1 1,1
Evaluación de la intensidad del dolor: Se
utilizó la Escala EVA numerada, para facilitar Total 89 100
la autoaplicación, con rango de 0 al 10, sien-
do 0 sin dolor y 10 el máximo dolor experi-
mentado. Se agrupan en cuatro categorías Al agrupar la intensidad del dolor, sin do-
según la intensidad del síntoma: sin dolor lor un 33,7% del total de la muestra, el 10,1%
(0); leve (1-2); moderado (3-4); intenso (5-6) presentaba dolor leve (1-2); un 24,7% dolor
y severo (7 a 10). moderado (3-4); un 18% dolor intenso y un
Método de análisis de la información: Se 13,5% dolor severo (tabla 3).
realiza a través de datos tabulados de los
resultados obtenidos de la Encuesta, espe- Tabla 3: Clasificación del dolor en los traba-
cificando cada variable en estudio, llevados jadores D.S.S. Maule
a una planilla Excel y SPSS 11.5 para Win-
dows. Categoría Intensidad N %

RESULTADOS Sin dolor 0 30 33,7


Dolor leve 1-2 9 10,1
De una muestra establecida de 93 traba-
Dolor moderado 3-4 22 24,7
jadores, respondieron la encuesta 89 perso- Dolor intenso 5-6 16 18,0
nas (el 96%), de estos el 59,6% correspondió Dolor Severo 7-10 12 13,5
al sexo femenino y un 40,9% al sexo mascu-
lino. La evaluación del dolor fue amplio de 0 Total 89 100
a 10 con un promedio de 3. No obstante, al
despejar los resultados eliminando a aquellos Al relacionar la intensidad del dolor con
que no tenían dolor o dolor cero, el promedio la edad de las personas se observó que en
se elevó a 4,6. el grupo de 20 a 30 años: un 40% sentía do-
Según la Escala EVA numerada del 0 al lor moderado. En el grupo de 31 a 40 años,
10, la intensidad de dolor que sentían los tra- sentían dolor leve un 12%, dolor moderado
bajadores al momento de aplicar la encuesta un 32%, un 20% dolor intenso y un 16% dolor
fue: sin dolor un 33,7%; dolor intensidad 1 severo. El grupo de 41 a 50 años, registraron
un 3,4%; dolor intensidad 2 un 6,7%; dolor dolor leve el 11,4%, dolor moderado el 22,9%,
intensidad 3 un 12,4%; dolor intensidad 4 dolor intenso un 20% y dolor severo un 8,6%.
un 12,4%; dolor intensidad 5 un 15,7%; do- El grupo de 51 a 60 años presentó dolor leve

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 85-92 89


Artículos Misceláneos: Investigación Aqueveque, X.

un 9,5%, dolor moderado un 19%, dolor in- Al agrupar el lugar del cuerpo donde se
tenso un 19% y dolor severo un 23,8%. El localiza el dolor, en un 39% de las personas
grupo de 60 años y más, no presentaba dolor que tenían dolor este se ubicaba en la co-
de ninguna intensidad tabla 4). lumna (espalda y cuello), en un 20,3% en ar-
ticulaciones (hombro, muñecas y rodillas), en
Tabla 4: Clasificación de la intensidad del
un 15% en la cabeza y un 13,5% en extremi-
dolor por grupos de edad trabajadores D.S.S.
dades (brazos, piernas y pie). Es interesante
Maule
mostrar que el dolor de cabeza fue el único
dolor que mostró rango de intensidad desde
Edad años 0 1-2 3-4 5-6 7-8-9-10 Total el 1 hasta el 10.

20-30 3 0 2 0 0 5 DISCUSION
31-40 5 3 8 5 4 25
Al finalizar el estudio se comprueba la
41-50 13 4 8 7 3 35
51 -60 6 2 4 4 5 21 presencia de dolor en la población adulta
61 y más 3 0 0 0 0 3 presuntamente sana que trabaja en la
Dirección del Servicio de Salud estudiada. Dos
Total 30 0 22 16 12 89 de cada tres trabajadores sentía dolor mientras
desarrollaban sus funciones. Un 13,5% de los
Al relacionar la intensidad del dolor con funcionarios presenta dolor severo (7 a 10).
la actividad que realiza en la organización De ellos solo uno tenía dolor de intensidad
se observó que un 37,5% de los directivos 10, correspondiente a cefalea. Es interesante
presenta dolor moderado, el resto no pre- destacar que no existe presencia de dolor
senta dolor. En los profesionales asesores, severo en los grupos de edades extremos: 20 a
un 46,1% no tenía dolor y en los demás la 30 y 60 y más años y que el grupo de edad con
intensidad del dolor fluctúa entre 1 a 5. Los mayor dolor severo fue el de 51 a 60 años.
técnicos registraron dolor leve un 25%, dolor Se observa que si el síntoma del dolor
moderado un 8,3%, dolor intenso un 33,3% y no se pregunta, en general no se declara.
dolor severo un 16,7%. Los oficiales adminis- Por otra parte es importante destacar que
trativos, no presentaron dolor leve, un 14,3% algunas personas encuestadas solicitaban
con dolor moderado, un 19% con dolor in- agregar el dolor que sentían en el “alma” en
tenso, un 33,3% con dolor severo, en este ese momento.
grupo se registra además el dolor máximo de El estudio presentado es válido solo para
la escala. En las secretarias el dolor leve fue el grupo de estudio, no obstante, motiva a
de 27,2%, dolor moderado, intenso y severo, la búsqueda intencionada del síntoma en la
un 18,2% cada uno. En los auxiliares se ob- población adulta beneficiaria del Sistema Pú-
serva dolor leve en un 9,1%, dolor moderado blico de Salud de la Región del Maule.
un 36,4%, dolor intenso un 27,2% y dolor Al relacionar lo encontrado en este estu-
severo un 9% (ver tabla 5). dio con la bibliografía revisada (Ministerio del
Tabla 5: Intensidad del dolor según funciónque desarrolla trabajadores D.S.S. Maule
Función Intensidad del dolor Total

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Directivo 5 -- -- 3 -- -- -- -- -- -- -- 8
Profesional 12 1 1 3 6 3 -- -- -- -- -- 26
Técnico 2 -- 3 1 -- 3 1 -- 2 -- -- 12
OFA 7 -- -- 1 2 4 -- 3 2 1 1 21
Secretaria 2 1 2 1 1 2 -- -- 2 -- -- 11
Auxiliar 2 1 -- 2 2 2 1 -- 1 -- -- 11

Total 30 3 6 11 11 14 2 3 7 1 1 89

90
Presencia de dolor en un grupo de trabajadores

Trabajo y Asuntos Sociales de España, 2003; REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS


Agencia Europea para la Salud y Seguridad
en el trabajo, 2000) el estudio a trabajadores Agencia Europea para la Salud y Seguridad
administrativos de la Universidad de Popayàn en el Trabajo. (2000). Work-related
Colombia (Vernaza-Pinzòn & Sierra-Torres, low back disorders.
2005), en relación a la frecuencia de dolor y Chile, Ministerio de Salud (1999). Norma
zona del cuerpo se observa que los diseños programa nacional alivio del dolor y
existentes son diversos pero todos conclu- cuidados paliativos a pacientes con
yen en resultados similares sobre la presen- cáncer, serie 01.
cia del dolor en la población de trabajadores, Chile, Ministerio de Salud. Departamento de
incluso con frecuencias menores a lo encon- Epidemiología (2003). Encuesta Na-
trado en esta investigación. Se destaca que cional.
la presente investigación describe la inten- Chile, Ministerio de Salud (2004). Circular
sidad del dolor tal como se presenta en la 2A/46. Evaluación del dolor como
vida cotidiana del trabajador no asociado a signo vital.
patologías y sin embargo encuentra cifras España, Ministerio del Trabajo y Asuntos So-
similares a lo encontrado en estudios donde ciales (2003). IV Encuesta nacional
la búsqueda estaba dirigida a trabajadores de las condiciones del trabajo.
que presentan dolor. Es por esto, que se de- Federación de Sanidad de CC.OO de Anda-
muestra la necesidad de incorporar en las lucía (s.f.). Encuesta frecuencia de
actuales pautas de medicina preventiva la alteraciones músculo esquelético y
medición del dolor como una condicionante condiciones de trabajo en trabajador
asociada a la aptitud y satisfacción del fun- Sanitarios.
cionario en su puesto de trabajo. Montero, R. & Manzanares, A. (2005, 25 de
febrero). Escala de valoración del
AGRADECIMIENTOS dolor. JANO, 68 (1553), 41-44.
A las autoridades de la Dirección del Vernaza-Pinzón, P. & Sierra-Torres, C.
Servicio de Salud del Maule y a los funcio- (2005). Dolor músculo-esquelético y
narios que trabajan en el edificio principal su asociación con factores de riesgo
que permitieron llevar a cabo esta inves- ergonómicos, en trabajadores ad-
tigación. ministrativos. Revista Salud Pública,
7 (3), 317-326.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 85-92 91


Artículos Misceláneos: Investigación Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

DESARROLLO Y BIENESTAR DEL ADULTO MAYOR: DESAFÍOS PARA LA


IMPLEMENTACIÓN DE LA POLÍTICA PÚBLICA

DEVELOPMENT AND WELL-BEING OF THE ELDERY: CHALLENGES FOR


PUBLIC POLICY

Martínez, M. Loreto*
PhD, Académica Escuela de Psicología, Pontificia Universidad Católica de Chile
Hernández, Bárbara
Ps, Licenciada en Psicología, Pontificia Universidad Católica de Chile.
Reyes, María Angélica
Ps, Licenciada en Psicología, Pontificia Universidad Católica de Chile.

Artículo recibido el 22 de septiembre, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de diciembre, 2006

RESUMEN
El envejecimiento de la población chilena plantea desafíos a la sociedad, particularmente a los ser-
vicios sociales y de salud. Las políticas públicas dirigidas al adulto mayor están inspiradas en la pro-
moción del envejecimiento óptimo, proceso que fomenta la capacidad de agencia y la integración
social del adulto mayor. En la práctica, sin embargo, estas orientaciones requieren concretarse a
través de procesos de educación y de la implementación de modelos comunitarios de salud. Se
informan los resultados de un estudio de caso realizado en un grupo de autoayuda de adultos ma-
yores que combinó una metodología cuantitativa (aplicación de una encuesta sociodemográfica) y
cualitativa (observaciones grupales y entrevistas en profundidad) a las participantes. Los hallazgos
revelaron la orientación asistencialista y el énfasis puramente recreativo de los programas, como
también la debilidad de las conexiones institucionales y comunitarias del grupo de adultos mayores.
Las participantes perciben su estatus social disminuido y la escasez de recursos. Se analizan las
necesidades psicosociales y evolutivas de las participantes que requieren atención en la planifi-
cación de salud y promoción del bienestar de los adultos mayores. Se discuten las implicancias de
los hallazgos para la implementación de la política pública del adulto mayor y se entregan sugeren-
cias para fomentar la participación activa de estos grupos en la promoción de su salud y bienestar.
Palabras clave: Adulto mayor, políticas públicas, envejecimiento, relaciones interpersonales.

ABSTRACT
Aging of the Chilean population raises new challenges to the provision of social and health services.
National policy to advance the health and well-being of the elderly is inspired on the principles
of optimal aging, process which promotes the capacity of agency and the social integration of
the Elderly adult. .However, in practice in order to establish this type of approach, educational
processes and the implementation of community health models are required. Findings from a
case study of a self-help group of older adults, that combined a quantitative (socio-demographic
survey) and qualitative (group observations and semi-structured interviews) methodology to
assess socio-demographic characteristics and developmental tasks are reported. Qualitative
findings revealed the needs orientation and the recreational emphasis of the programs targeting
the aged. Participants identified developmental and relational needs that are unmet by current
programs targeting the elderly. The self-help group is weakly connected to the community health
center and to other local institutions. Participants perceive their lessened social influence and
scarcity of resources. Implications for the implementation of programs aimed at enhancing health
and well-being of the elderly that build on empowerment and strengthening their social support
systems are discussed. Key Words: Aged, aging, public policies, interpersonal relations.

*2006, Horiz Enferm,


Correspondencia 17,
e-mail: 2, 93-104
mlmartig@uc.cl 93
Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

INTRODUCCIÓN La política incluye propuestas que van


La población chilena está envejeciendo desde la creación de espacios de recreación,
de manera paulatina, pero sostenida. La hasta el quiebre de los mitos y prejuicios
expectativa de vida de los chilenos se acerca respecto a la vejéz que tiene la sociedad. Una
a los ochenta años y, a la par, ha disminuido expresión de dicha política son los cursos y
el índice de natalidad (Instituto Nacional de actividades recreativas para adultos mayores
Estadisticas [INE], 2003). Los datos de la que se llevan a cabo en centros comunales e
Encuesta de Caracterización Socioeconómica instituciones de salud.
[CASEN] indican que los adultos mayores En septiembre de 2002 se promulgó la
(toda persona que ha cumplido 60 años) Ley 19.828 que crea el Servicio Nacional
alcanzan el 11,5% de la población total, del Adulto Mayor [SENAMA], organismo
registrando un aumento de 0,5% en los que inició sus funciones en enero del 2003.
últimos tres años (Ministerio de Planificación A través de la propuesta de políticas y la
y Comercio de Chile [MIDEPLAN], 2003). coordinación de acciones, este servicio se
Esta realidad demográfica refleja cambios propone resguardar la plena integración
en la sociedad que han obligado a los go- del Adulto Mayor a la sociedad, protegerlo
biernos a crear políticas públicas para enfren- del abandono e indigencia, hacer valer sus
tar las consecuencias económicas, sociales y derechos constitucionales y velar por la no
culturales del envejecimiento de la población. discriminación y marginación de este grupo
Al extenderse la expectativa de vida, se vuelve etario (SENAMA, 2005).
imperativo mejorar la calidad de vida de las per- La política nacional requiere articulación a
sonas que envejecen. En pos de este objetivo, nivel local, es por esto que el propósito del pre-
además del Estado, deben involucrarse todos sente artículo, es ilustrar cómo se implementa
los agentes sociales, dentro de los cuales se en la actualidad la política pública dirigida al
encuentran los profesionales de la salud. adulto mayor a través del análisis de los ha-
A la luz de la nueva política, es importante llazgos de un estudio de caso. La presentación
considerar al adulto mayor como un agente comienza con una revisión bibliográfica del
de su desarrollo, asignándole un rol activo marco social y cultural en que se insertan los
dentro de su propio destino. Los resultados programas para el adulto mayor. A continuación
de la Encuesta CASEN apoyan esta premisa, se presentan los hallazgos cuantitativos y cua-
pues revelan el alto grado de participación litativos de un diagnóstico psicosocial realizado
de los adultos mayores en las organizacio- en un grupo de autoayuda de mujeres adultas
nes sociales y comunitarias. El 35,1% de la mayores. Finalmente, se compara el ámbito
población mayor participa en organizaciones ideológico de las propuestas públicas para la
sociales y, dentro de ellas, las mujeres se in- adultez mayor con la realidad de la puesta en
teresan más (37%) que los hombres (35%). práctica de estas. Este análisis se desarrolla
Los hallazgos de la Encuesta sugieren que desde el marco de las necesidades psicosocia-
el rol de la participación social y de la activi- les del adulto mayor, entendidas estas, desde
dad (e.g., tener reuniones, salir, juntarse con las tareas de su etapa vital y las condiciones
pares) es clave en la calidad de vida de los que favorecen el envejecimiento óptimo.
adultos mayores, pues los conecta a las re-
des de apoyo que ofrece la sociedad. UN NUEVO MARCO SOCIAL Y CULTURAL
La necesidad de participación de la po- La nueva política pública plantea un cam-
blación adulta mayor fue plasmada por el bio profundo en la sociedad en la manera de
Estado en la Política Nacional de Envejeci- pensar y de ver el proceso de envejecimiento.
miento y Vejez formulada el año 1993. Esta Con frecuencia los programas sociales y de
postula “la participación real y efectiva de los salud se han enfocado desde una perspec-
propios interesados” como principio orienta- tiva asistencialista, en la cual, las instancias
dor para el logro de un desarrollo social (Uni- de participación, son creadas por agentes
versidad de Chile, 1996). externos al adulto mayor, ya sean profesio-

94
Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

nales o no profesionales, situación que no la participación de estos en actividades y pro-


fomenta las competencias ni las capacidades gramas intergeneracionales que los vinculen
de agencia e iniciativa del adulto mayor. Ge- a redes de apoyo social y comunitario. Más
neralmente, estos pueden responder con una aún, si se considera que el número de profe-
baja motivación a participar. sionales de la salud que se especializan en la
Alternativamente, de acuerdo al principio atención del adulto mayor es reducido (Salva-
del reciclaje de los recursos, al involucrar al rezza, 1998). A este hecho se debe agregar,
adulto mayor como agente activo de su propio que aún falta un cambio de actitud para dis-
bienestar se reemplaza la mirada asistencialista minuir los prejuicios y creencias respecto a las
por un enfoque de empoderamiento y competencias del adulto mayor, de manera
validación de sus competencias (Silva & de facilitar su inserción a la sociedad como
Martínez, 2004; Zimmerman, 2000 citado en agente activo-participante de su bienestar.
Rappaport & Seidman, 2000). Este enfoque El apoyo social puede ser entendido como
disminuye la vulnerabilidad de la persona que la ayuda o los recursos de apoyo psicológico
envejece y aumenta los recursos protectores, que provienen de personas significativas, lo
puesto que aminora el temor a la dependencia que le indica a la persona que existe preocupa-
y los sentimientos de inutilidad. Un avance ción, cariño y estimación por ellos, es decir, les
en esta materia es la creación de SENAMA, hace sentir parte de una red de comunicación
que da cuenta de un verdadero interés del y obligaciones mutuas (Mella et al., 2004). No
Estado por insertar al adulto mayor como obstante lo anterior, hay que considerar que
participante activo-ciudadano en la sociedad. el verdadero apoyo social, es decir, aquel que
Lo anterior se refleja en su programa de Fondo impulsa al desarrollo, debe incluir que aquel
Nacional Concursable del Adulto Mayor, que que recibe el apoyo, también tenga espacios
financia proyectos ideados y ejecutados por para prestarlo, pues la provisión de apoyo
organizaciones de adultos mayores (SENAMA, maximiza los beneficios para el bienestar y el
2005). Otros espacios de participación para sentido de competencia (Maton, 2000).
el adulto mayor (e.g., grupos de autoayuda y Según Pereiro y Salvador (1993 citados
clubes) funcionan en varias municipalidades en Mella et al., 2004) el apoyo social puede
del país, en algunos casos, en coordinación modular la experiencia de estrés. Al cambiar
con los Centros Comunitarios de Salud la apreciación subjetiva del evento de estrés,
Mental [COSAM]. La creación de estos modifica las estrategias de afrontamiento,
espacios ciertamente ofrece oportunidades. aumenta la motivación y/o autoestima y al-
Sin embargo, el impacto de estos programas tera el estado de ánimo, lo que disminuye el
dependerá también de la medida en que estos grado en que el estresor afecta.
se basen en una evaluación de las necesidades La vinculación en sistemas de apoyo
y características de los adultos mayores social (e.g., vínculos intergeneracionales)
para responder mejor a sus expectativas de beneficia a todos los grupos etarios que
desarrollo. participan de ellos. Los jóvenes adquieren
La necesidad de adoptar una perspectiva conocimientos de vida de la experiencia de
proactiva se ilustra a través de los resultados los adultos mayores, y a estos últimos, les
de un estudio de caso realizado a un grupo permite experimentar nuevos roles. Para
de autoayuda de adultos mayores, cuyos la sociedad, los vínculos intergeneraciona-
hallazgos se informan a continuación. les permiten un mejor aprovechamiento de
recursos y la cooperación entre grupos. Lo
Bienestar del adulto mayor: Integración y anterior se transforma en un factor protector
apoyo social para el adulto mayor y un optimizador de re-
La importancia de este tema radica en la cursos, ya que disminuye los gastos en que
necesidad de discutir orientaciones para los incurre el Estado en salud y asistencia social,
servicios educacionales, sociales y de salud capitalizando en los beneficios de los siste-
dirigidos al adulto mayor. Así como también mas naturales de apoyo social.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 93-104 95


Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

METODOLOGÍA de vida de una muestra de las integrantes del


Presentamos los hallazgos del estudio de Grupo, desde una perspectiva evolutiva. Con
un grupo de adultas mayores realizado en este fin se realizaron entrevistas en profundi-
un COSAM de la zona poniente de Santiago, dad las cuales fueron analizadas de acuerdo
donde funcionan quince clubes de tercera al cumplimiento de tareas vitales y grado
edad. El COSAM facilita el espacio físico para de envejecimiento óptimo, utilizando codifi-
que los adultos mayores se reúnan, organicen, cación abierta y axial.
y desarrollen actividades en coordinación con La participación en el estudio fue volun-
el Departamento de Desarrollo Comunitario taria. Para ambos niveles, las participantes
[DIDECO] del cual estos grupos de adultos dieron su consentimiento verbal. Se res-
mayores dependen directamente. De este guardó en todo momento la confidencialidad
modo, los grupos de adultos mayores funcio- del grupo y de cada una de las integrantes.
nan en una modalidad que se puede calificar El trabajo se realizó en dos etapas, cada
de autoayuda. Durante el año 2003, en co- una respondía a uno de los dos niveles
laboración con un equipo profesional de salud estudiado. La primera etapa se centró en
mental, se realizó un diagnóstico de nece- observaciones del funcionamiento del grupo
sidades psicosociales en un grupo de adultos durante sus reuniones, estudio de la historia
mayores, utilizando metodología cualitativa. del Grupo por medio de conversaciones con
Los hallazgos del estudio entregaron una las integrantes y con el equipo de COSAM,
visión de cómo se materializan en terreno y en la realización de una caracterización de
las políticas públicas dirigidas al adulto las condiciones de vida de sus integrantes,
mayor, y la necesidad de articular el trabajo a través de la aplicación de una encuesta
de los profesionales de la salud mental con sociodemográfica. La encuesta fue aplicada
redes y recursos de la comunidad para individualmente a las integrantes durante
optimizar el bienestar del adulto mayor. La una sesión regular del grupo. De este modo,
muestra fue intencionada ya que el estudio se obtuvo una impresión global del Grupo,
surgió en respuesta a una petición hecha en relación a su historia, su estructura y
por los profesionales del Programa de comportamiento, la situación social, económica
Trastornos Emocionales y del Ánimo en y de salud de sus integrantes. En la segunda
Adultos del COSAM a la primera autora. La fase, se profundizó en la vivencia de la vejez
selección del grupo estudiado fue realizada de las integrantes del grupo por medio de
por el equipo profesional del COSAM, entrevistas semiestructuradas, con la finalidad
quienes solicitaron una evaluación de las de explorar los procesos de cambio que vive
necesidades psicosociales (e.g., estudiar la el adulto mayor producto de las transiciones
función del grupo y detectar las necesidades del ciclo de la vida. Las preguntas de las
no cubiertas) del grupo con el fin de definir su entrevistas exploraron cinco ámbitos centrales
futura vinculación con el COSAM. de esta etapa: a) la disminución de la fortaleza
El diagnóstico se realizó desde una mi- física y psíquica; b) la jubilación; c) la viudez,
rada evolutiva del adulto mayor, informada el tema de la muerte y las pérdidas; d) los
por las características de las condiciones de cambios en las relaciones con la pareja, los
vida, el contexto familiar y comunitario en nietos, los hijos, y e) las redes sociales y los
que estas transcurren. grupos de pertenencia.
El estudio del grupo incorporó dos niveles,
uno colectivo, en el cual se analizó el funcio- RESULTADOS
namiento del grupo, tanto en sus aspectos A continuación se presentan los hallazgos
formales de estructura y organización, como de cada etapa.
en el ámbito de la significación que cada in-
tegrante le otorga a su pertenencia y partici- Historia y funcionamiento del grupo.
pación en este. El segundo nivel incluyó un El Club (como las integrantes llaman
análisis en profundidad de las experiencias al Grupo) se inició hace 11 años, dirigido

96
Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

por una terapeuta ocupacional, como un criterio de adaptación y de validación de su


grupo terapéutico orientado al desarrollo propio bienestar. Esta conexión responde
personal, al trabajo físico y la relajación. también a la necesidad de ocupar el tiempo
El grupo evolucionó hasta constituirse en libre de los adultos mayores con actividades
un grupo autónomo. Las redes sociales significativas, puesto que la jubilación y la
institucionales del grupo incluyen, en primera partida de los hijos demandan crear nuevas
instancia, conexiones con la Municipalidad, estilos y rutinas de vida (Kalish, 1996).
organismo del cual dependen y con quien se La vinculación con la actividad y proyec-
coordinan a través de reuniones mensuales tos significativos son esenciales para un
o bimensuales. En estas revisan aspectos buen desarrollo en la adultez mayor. Según
concretos informativos como el calendario plantea la teoría de la actividad, cuanto más
anual para la oferta de talleres y actividades activa permanezca una persona mayor, más
de la Municipalidad, pero no reciben ayuda satisfactoriamente envejecerá. Así, los adul-
directa de esta, situación que las participantes tos mayores para sentirse bien necesitan de
plantean como crítica, ya que se les ha un nivel de actividad elevado, ser útil a los
prometido la presencia de monitores que, a la demás y rendir de algún modo (Blanc & Car-
fecha, no se ha concretado. Al momento de mona, 1986). Los beneficios máximos de la
la evaluación, las integrantes señalan que el actividad, sin embargo, se producen cuando
vínculo con la Municipalidad se ha debilitado estas conectan con proyectos o metas im-
(menor frecuencia de reuniones) por falta de portantes para los adultos mayores. Más allá
una agenda compartida. Las observaciones de los objetivos en pos de la salud mental,
anteriores dan cuenta de la precaria inserción el Club en sí, se constituye en red de apoyo
social de las organizaciones de adulto mayor, social para sus integrantes, particularmente,
y consecuentemente, la escasa validación ante eventos de vida estresantes. Para las
social de sus iniciativas. integrantes es muy importante asistir al Club
Una segunda vinculación institucional del pues encuentran compañía y entretención.
grupo se da con el COSAM. Los clubes de Ellas refieren intercambios de apoyo social
adultos mayores pueden utilizar los espacios instrumental y emocional, siendo actualmente
del Centro, acceder a atención en el consul- este el objetivo central del grupo. Estos inter-
torio, en el Programa de Trastornos Emocio- cambios ilustran el potencial de los sistemas
nales y del Ánimo, y participar en talleres de de ayuda mutua para paliar los efectos nega-
gimnasia para hipertensas. tivos de las transiciones de vida (Levy, 2000
El Club cuenta con una estructura citado en Rappaport & Seidman, 2000).
clara que se refleja en reglas y normas
de funcionamiento (e.g., horario de Caracterización sociodemográfica.
funcionamiento, uso del espacio físico), El Club está compuesto por 24 mujeres,
normas de comportamiento (e.g., rutinas cuyas edades fluctúan entre 52 y 80 años
estipuladas para el funcionamiento del grupo) (promedio 70 años). La mayoría está casada
y una jerarquía. La labor de la directiva es o viuda. En relación a la situación laboral,
organizar y representar al grupo ante el el 30% de las integrantes están jubiladas,
COSAM y otras instancias. Esta estructuración en tanto que un 25% son dueñas de casa.
es reconocida por sus integrantes como Aun cuando ya no están trabajando, aproxi-
algo positivo y probablemente, responde madamente, el 33% refiere ser el sostén
a la necesidad de los adultos mayores de económico de su familia o aportar al presu-
conservar pautas conductuales, situacionales puesto familiar. Con respecto a la residencia,
e interaccionales. De esta manera, les resulta el 37% de las integrantes del grupo vive, al
más fácil evaluar si mantienen un ajuste menos, con un familiar, mientras que el 16%
apropiado respecto de su grupo generacional. vive solo. Con respecto a la calidad de las
En otras palabras, esta conexión a través de relaciones familiares, el 42% del grupo afirma
actividades y proyectos conjuntos, les da un tener una buena relación con sus familiares

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 93-104 97


Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

(e.g., están en contacto constantemente, son Aspiraciones.


unidos y tienen buena comunicación); solo el El Club hace notar su necesidad de tener
12% califica sus relaciones familiares como voz, de ser escuchadas y de sentirse incluidas
regulares. Al mismo tiempo, el 50% de las en la organización y la toma de decisiones, es
participantes refiere tener al menos una per- decir, tener la experiencia de ser validados por
sona de confianza a quien pueden recurrir en parte de la Municipalidad. Las participantes
caso de problemas o necesidad de apoyo. demandan un apoyo real y directo, acceso a
Respecto a la salud, si bien todas las ent- recursos (e.g., monitores, talleres) y mayores
revistadas reportaron tener alguna molestia posibilidades de autogestión. Refieren
o enfermedad, la mitad del grupo califica su aspiraciones similares en su relación con
salud como buena y las restantes, se dividen el COSAM. Al comienzo el Club contaba
equitativamente entre quienes creen que su con un monitor y con talleres, pero estos
salud es “regular” o “mala”. En el ámbito de recursos no se mantuvieron en el tiempo.
la salud mental, el 33% describe su estado Al momento del estudio, las participantes se
de ánimo como “bueno” y el 21% lo describe constituyen en un grupo de autoayuda que se
como “malo” o “más o menos”. Todas las per- reúne para hacer manualidades, compartir y
sonas que reportaron un estado de ánimo acompañarse, pero no cuenta con un apoyo
malo o regular afirmaron tener algún prob- profesional para los talleres que ellas mismas
lema psicológico (e.g., problemas de memo- gestionan, de modo de mantener un estatus
ria, desgano o depresión). de productividad y capacidad de agencia
como grupo. Esta observación hace evidente
Participación e interacción social. la necesidad de que los profesionales de la
Solamente el 33% de las encuestadas salud articulen redes de colaboración con
participa en alguna otra organización fuera grupos no profesionales (e.g., de apoyo social,
del Club, siendo la más común la Iglesia de autoayuda) y canalicen estos recursos en
Evangélica, seguida de los cursos para el pro del bienestar y la salud mental (Jacobs &
adulto mayor de la Municipalidad. Además, Goodman, 1989).
el 42% de las encuestadas indicaron tener
algún pasatiempo, siendo este en todos los Capacitación.
casos, una actividad manual. Las participantes solicitan que se les den
Respecto a su participación en el Club, las herramientas para crear talleres que las
todas las integrantes asisten regularmente ayuden en el área de salud física, de las
a las reuniones semanales. Los motivos que relaciones sociales y con la familia y en el
adujeron para el ingreso a este pueden cla- enfrentamiento de las pérdidas y duelos.
sificarse en cuatro tipos: por soledad; ser En otras palabras, manifiestan gran interés
invitadas por alguien del Club; por recomen- por aumentar sus capacidades internas y de
dación médica (en sus comienzos el Club re- promover su propio crecimiento personal.
alizaba actividad física); y por tener alguna Esperan que tanto la vinculación con las
distracción. Todas las participantes esperan instituciones y las organizaciones locales
básicamente lo mismo del Club: compañía, (e.g., Municipalidad, COSAM) les den acceso
amistad, cariño y entretención. A nivel indi- a recursos y les posibiliten colaborar con
vidual, muchas de las integrantes reconocen otros sistemas locales.
sentirse solas, y buscan que el grupo, en par- Las observaciones anteriores, dan cuenta
te, disminuya este sentimiento. Sin embargo, de la necesidad del adulto mayor de conec-
plantean que este resulta más que nada un tarse y de integrarse socialmente y refuerza la
lugar para “pasar un rato” (e.g., solo se dedi- urgencia de crear estas oportunidades en pro
can a realizar manualidades), y destacan su de su desarrollo. Los programas dirigidos al
deseo de compartir con mayor profundidad, adulto mayor debieran ser pensados con un
reconociendo de esta manera, el potencial enfoque comunitario e incorporar en sus ob-
benéfico de las relaciones cercanas. jetivos la vinculación de estos grupos a la vida

98
Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

de la comunidad. En las entrevistas, y en con- En cualquier ámbito, es importante que los


traste con la encuesta, las integrantes del Club programas fortalezcan o creen un sistema de
manifestaron que las relaciones con sus famili- apoyo e integración social para el adulto mayor
ares tienden a ser superficiales ya que sus hi- (e.g., conectándolos con otros), y que promue-
jos y parientes les dirigen la vida, y no las con- van la agencia y gestión de los participantes.
sideran competentes para tomar decisiones. Está empíricamente demostrado (Fernán-
Esto las hace sentir que han perdido estatus y dez-Ballesteros, 2002) que el apoyo social
vigencia en sus relaciones cercanas. En forma –entendido como la densidad de la relación
similar, algunos programas que buscan ayudar social de un individuo, el grado en que se
al adulto mayor pueden aumentar la vivencia interrelaciona con otros, cuánto da y recibe
de pérdida de estatus, por el enfoque asisten- afecto, el apoyo instrumental y/o los servi-
cialista con que orientan su acción, sin incor- cios– se asocia con indicadores de salud,
porar al adulto mayor al proceso de creación y bienestar subjetivo y la calidad de vida. Los
gestión de sus propios recursos. programas que incorporan este elemento
permiten el aprovechamiento de actividades
Promoción del desarrollo individual. y la gestión de proyectos, a la vez que au-
Además de fomentar la identidad grupal y la mentan el bienestar físico y psíquico del
conexión a instituciones sociales, los grupos adulto mayor. Para este fin, deben articularse
de adultos mayores deben dar lugar a la y fortalecerse redes institucionales, formales
individualidad, de modo que permitan que e informales, y fomentar la vinculación del
la persona que envejece haga una revisión adulto mayor de manera que se convierta en
e integración de las experiencias de su vida un gestor de su propio desarrollo.
en un espacio contenedor. Esta tarea es
esencial para un proceso de envejecimiento Nuevos roles.
óptimo. Para Erikson (1978) durante la vejez Las integrantes del Club destacan como
la persona enfrenta la crisis de la integridad una necesidad importante el sentirse útiles,
versus la desesperanza, de cuya resolución sienten que pese a padecer enfermedades o
positiva emerge el logro de la sabiduría. Es deterioro físico, conservan energía y ganas
necesario que el individuo que envejece de hacer cosas ahora que se encuentran
realice una revisión de su vida, lo que permite jubiladas. Uno de los grandes obstáculos
darle sentido a esta e integrar las pérdidas, y para esto es la visión negativa de la vejez
aceptar que lo que no fue no será. que impera actualmente en occidente, ya que
Unido a esta revisión de la vida y a la mayor la adultez mayor es vista como una etapa en
conciencia de finitud, se da una necesidad de la que predominan el deterioro y pérdidas.
trascender. Esto pudo observarse en el gru- Fernández-Ballestero (2002) señala que un
po, cuyas integrantes mostraron gran interés estereotipo muy común es la creencia que
en participar en el estudio, especialmente en los mayores son los miembros improductivos
las entrevistas en profundidad. Esta necesi- y pasivos de la sociedad, que solo reciben
dad de trascender se conecta con la necesi- el cuidado y los bienes de esta. El adulto
dad de relacionarse, vincularse, y de revelar mayor representa todo aquello que la cultura
a los otros aspectos significativos de su vida. individualista y hedonista repudia, ya que
Las integrantes del grupo refieren que para personifica la declinación de los ideales
ellas es muy importante el contacto con los narcisistas de belleza, éxito, y juventud
jóvenes y poder conversar con ellos, ya que (Lipovetsky, 1996). Esto hace que el adulto
sentían que tenían mucho que aportar. mayor sea rechazado y marginado, pues
Los programas que aspiran solo a lo recre- actúa como depositario de todo aquello que
ativo no son suficientes para promover el de- la sociedad narcisista actualmente niega.
sarrollo del adulto mayor. Otras necesidades Sin embargo, la constatación de que la
evolutivas de este grupo incluyen el ámbito vejez se acompaña de declinación en algu-
físico-médico, relacional-afectivo, y espiritual. nas funciones y pérdidas no implica que el

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 93-104 99


Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

adulto mayor se convierta en un ser inútil ser reemplazada por una mayor flexibilidad
para la sociedad y se frene su crecimiento de los roles en la vejez. Este autor plantea
personal. De hecho, estudios longitudinales que el envejecimiento puede ser satisfacto-
recientes (Schaie & Willis, 2002) demuestran rio si se tiene autonomía suficiente, lo que
áreas de ganancia en el desarrollo cognitivo permite una continuación de la integridad
del adulto. La concepción actual de las poten- del self; si se cultivan relaciones agradables
cialidades y limitaciones de un adulto mayor con los demás; si existe un nivel razonable
debiera estar fundada en el conocimiento que de confort personal, corporal, mental y físico;
hoy se dispone acerca del progreso de su de- y se estimula suficientemente la mente y la
sarrollo. Desafortunadamente, la investigación imaginación. Para esto, es esencial que el
en adultos mayores chilenos es aún escasa. adulto mayor tenga un rol activo en la cre-
El cambio valórico que requiere la socie- ación e implementación de programas, lo
dad en su concepción del proceso de enve- que además favorece la participación y per-
jecimiento plantea desafíos para el cambio manencia en estos. Así, se deben incorporar
de actitudes. Los profesionales de la salud componentes más individualizados y relacio-
tienen un rol clave en esta tarea educativa. nales que fortalezcan la identidad personal y
El que un adulto mayor adopte un rol acti- permitan desarrollar la capacidad de agencia
vo no solo favorece la disminución de este que el adulto mayor mantiene.
prejuicio, sino que también, es un índice de
envejecimiento óptimo (Erikson, 1978). Tareas evolutivas y envejecimiento óptimo.
De lo anterior se desprende que la vejez
DISCUSIÓN también puede ser vista como una etapa vital
Envejecimiento óptimo equilibrada y creativa; el transcurso del tiem-
El adulto mayor debe realizar ajustes que po y la experiencia de las etapas anteriores
le permitan vivir provechosamente esta etapa hacen del adulto mayor una persona con
del ciclo vital. Para Havighurst (1972 citado nuevas potencialidades como la sabiduría, la
en Schaie & Willis, 2002) es importante que el serenidad de juicio, y la experiencia personal
adulto mayor pueda ajustarse a la disminución y social. Estas capacidades son recursos
de la fortaleza psíquica y de la salud, a la para la adaptación que compensan, de cierto
jubilación y la reducción de ingresos, y a la modo, las limitaciones propias del envejecer
muerte del cónyuge. Además, es necesario (Schaie & Willis, 2002).
que pueda establecer una asociación En las participantes del estudio se
explícita con el grupo de pares, junto con pudo observar la importancia que tiene el
adoptar roles sociales de manera flexible enfrentamiento apropiado de las tareas
que faciliten la adaptación y una aceptación evolutivas planteadas por Havighurst para un
satisfactoria de vida. En estas tareas se envejecimiento óptimo. La muerte aparece
aprecia la necesidad de aceptar y ajustarse como un tema central en sus vivencias,
a las pérdidas, pero además, aparece la tanto por la pérdida de otros significativos,
importancia de adquirir nuevos roles, formas como por la vivencia de la propia muerte y la
de relacionarse y de participar en la sociedad conciencia de finitud en sus vidas. Asimismo,
que alejen el fantasma de la dependencia y las participantes del Club destacan que la
pérdida de autonomía al que tanto temen. vejez trae consigo cambios en el modo de
Schaie y Willis (2002) plantean que las relacionarse con otros y con el cónyuge, ya
personas necesitan establecer un balance que producto de la partida de los hijos del
entre un medio apoyador y la autonomía que hogar y de la jubilación, se puede compartir
promueve un medio estimulador. más tiempos juntos. Con los hijos, se da
Sin embargo, es difícil para este grupo una cierta inversión de roles pues son ahora
etario mantenerse activo y sentirse autónomo los hijos quienes se encargan de cuidarlos;
cuando la sociedad les define un “rol sin rol”. y con los nietos cumplen un rol importante;
Para Kalish (1996), esta concepción debe la “abuelidad”, que les trae gratificaciones

100
Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

al sentirse útiles. Respecto a las relaciones su integración y participación efectiva. Para


sociales, sienten que estas se reducen, pero lograr dichos objetivos, las políticas y reco-
se vuelven más sinceras. Además plantean mendaciones van desde corregir mitos y
que han podido encontrar en el Club un prejuicios sobre la vejez, y generar espacios
lugar para poder desarrollar esta cercanía de recreación y participación, hasta la inser-
con su grupo de pares. Aún más, critican la ción del adulto mayor al sistema laboral. A
poca profundidad de los vínculos sociales, través de estos procesos se busca fortalecer
reconociendo el potencial de las relaciones la identidad y la organización del grupo de
cercanas para el bienestar personal. adultos mayores, de manera de aumentar su
En el grupo estudiado, el cumplimiento de capacidad de influencia social y de dirigir sus
estas tareas era dispar, lo cual probablemente vidas (Bravo & Caro, 2002).
refleja diferencias individuales y en la calidad Sin embargo, la implementación práctica
de las redes sociales de las participantes. En de estas políticas no está exenta de dificul-
algunos casos, las redes sociales estaban tades, algunas de las cuales apreciamos du-
mejor preparadas para prestar la contención rante la realización misma del estudio. Por
que necesita el adulto mayor para revisar la ejemplo, ni el equipo profesional de salud
vida en profundidad, expresar temores frente mental que solicitó el estudio ni el equipo
a la muerte, e integrar sus experiencias de de investigación incorporó a la directiva del
vida. En cambio, las redes sociales de otras Club de adultos mayores en la planificación
participantes, ponían trabas al cumplimiento de la investigación.
de las tareas evolutivas de la vejez, debido La precariedad de la inserción social del
al temor que les producía el enfrentarse a la adulto mayor y la escasa participación en
finitud de la cercanía de la muerte y la deca- la toma de decisiones se reflejaron también
dencia física. en otros momentos del estudio. Al comienzo
del proceso de investigación se dieron
Desafíos de la puesta en práctica de las discrepancias entre la directiva del Club y el
políticas públicas equipo profesional de salud mental acerca
Para que el adulto mayor pueda realizar de la realidad, disposición, y las expectativas
las tareas propias de su etapa es necesario del grupo de adultos mayores. Inicialmente,
que esté inserto en la sociedad y que esta se observó resistencia por parte del grupo
le abra espacios de participación. Con la fi- a participar en el estudio por temor a la
nalidad de generar estos espacios de partici- evaluación del funcionamiento de este; las
pación, el gobierno creó políticas públicas di- participantes anticipaban que si la evaluación
rigidas a dicho grupo etario en nuestro país. no era positiva, les quitarían el espacio físico
Estas políticas tienen como objetivo aumen- para realizar sus reuniones. Esta ansiedad
tar las oportunidades de integración para fue calmada resaltando la valoración del
una participación social activa de los adultos grupo, y su sentido de pertenencia al centro
mayores en la creación e implementación de de salud mental.
las políticas públicas dirigidas a ejercer sus Estas dos situaciones reflejan la necesidad
derechos para promover su bienestar y/o de optimizar la coordinación de estrategias y
a solucionar los problemas que les atañen la creación de canales de comunicación entre
como grupo etario (Universidad de Chile, grupos no profesionales (e.g., clubes de au-
1996). En forma más concreta, contribuirán a toayuda) y los equipos profesionales con el fin
satisfacer las necesidades intrínsecas y ma- de promover el bienestar. Los investigadores
teriales, y a apoyar las iniciativas de los adul- del estudio también observaron la importancia
tos mayores en pro de una vida autónoma. de considerar las características y preferen-
A la base de estas políticas está el prin- cias de los adultos mayores al diseñar los pro-
cipio de envejecimiento activo, que reconoce gramas, tales como la necesidad de una rutina
al grupo de adultos mayores como miembros y tener roles establecidos que sean aceptados
activos y útiles de la sociedad, promoviendo por la sociedad. De esta manera, el trabajo es

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 93-104 101


Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

más eficiente (e.g., incluir al Club como agente Los adultos mayores participantes de este
activo) y se maximizan los beneficios de la programa manifiestan haber adquirido agilidad
experiencia. intelectual con el aprendizaje de los relatos, se
Lo anterior da cuenta de la necesidad de sienten satisfechos por el rol participativo, la
potenciar más la preparación de las institu- vinculación con pares que persiguen un mismo
ciones y la capacitación de profesionales fin, y mayor diálogo intergeneracional.
para trabajar de forma colaborativa con gru- Además de capacitar a los profesionales
pos de adultos mayores en la promoción de e instituciones, la implementación de
la salud y el bienestar. políticas públicas para el adulto mayor
Para que se cumplan mejor las políticas requiere educar acerca de los objetivos de
propuestas por el Estado, es necesario des- las políticas y sus recomendaciones, para
tinar recursos económicos para contratar y eliminar prejuicios y creencias erróneas
capacitar a profesionales y fortalecer los con- sobre el envejecimiento.
textos comunitarios para promover la salud Para el adulto mayor, el apoyo social
y el bienestar desde los participantes. Asi- cumple un rol fundamental, ya que actúa como
mismo, es relevante la gestación de equipos factor protector de los efectos negativos de
comunitarios de salud que incluyan agentes los cambios de vida, al aumentar el bienestar
profesionales y no profesionales capaces de subjetivo y físico de los adultos mayores,
coordinar a diferentes actores que trabajan siendo esto último, vale decir, la salud física
con el adulto mayor, incorporando a estos una de las mayores preocupaciones de este
como gestores de la acción. grupo etario pues temen que la enfermedad
los lleve a depender de otros. El bienestar
RECOMENDACIONES subjetivo, por su parte, involucra la auto
La discusión anterior nos plantea la urgen- aceptación, autonomía, relaciones positivas
cia de gestar las condiciones para avanzar en con los demás, dominio de ambiente y
la implementación de la política pública de in- propósito de vida (Mella et al., 2004).
tegración y validación de los adultos mayores. Como grupo, es más probable que las
Las instituciones públicas no solo requieren redes de apoyo de los adultos mayores se
crear espacios físicos para que los propios vean alteradas por los eventos vitales propios
adultos mayores se organicen y agrupen, sino de esta etapa (e.g., jubilación, viudez, muerte
que estos espacios tienen que ser articulados de pares, enfermedades, institucionalización)
en relación a otros segmentos de la sociedad lo cual puede traducirse en menores
de manera de validar al adulto mayor y capi- oportunidades de contar con el apoyo social
talizar su aporte a la sociedad, particularmente (emocional, información e instrumental) para
a las generaciones más jóvenes. afrontar acontecimientos estresantes. Para
Buenas iniciativas son la participación paliar los efectos negativos del aislamiento y
en programas educativos en los que ellos la soledad, el rol y los espacios de asociación,
son los transmisores de conocimiento, la organización y emprendimiento que generen
reinserción laboral, o la participación activa las instituciones sociales y de salud es
en programas intergeneracionales con niños y fundamental para la promoción del bienestar
jóvenes. Un ejemplo es la creación del “Club de los adultos mayores.
de Narradores de Cuentos Infantiles” en el
Departamento de la Mediana y Tercera Edad CONCLUSIONES
en la Facultad de Ciencias de la Educación Chile se encuentra en un proceso de
de la Universidad Nacional de Entre Ríos transición en la implementación de políticas
(Paraná, Argentina). Esta iniciativa fomenta públicas para el adulto mayor. La política
el ejercicio intelectual, creativo, y recreativo actual prescribe una participación real del
en la mediana y tercera edad, y favorece las adulto mayor en la sociedad de manera de
relaciones intergeneracionales acercando los optimizar el proceso de envejecimiento a
libros y estimulando el hábito lector en los niños. nivel individual y colectivo.

102
Desarrollo y Bienestar del Adulto Mayor

Los hallazgos de nuestro estudio indican, importantes para el desarrollo de los adultos
sin embargo, que la puesta en práctica de mayores: la necesidad de contención y de
estas políticas dista de su objetivo y valores. trascendencia. El adulto mayor necesita
Se observa que los adultos mayores que encontrar ambientes de relación y contención
participan de los clubes de autoayuda cuen- que le permitan elaborar temores y dudas
tan con recursos como tiempo y experiencia, en relación a la muerte, las pérdidas, y la
pero enfrentan limitaciones en los roles que decadencia física y mental. El adulto mayor
se les asignan por prejuicios y estereotipos, necesita de la energía que le inyectan niños
y pocas oportunidades de interactuar con y adolescentes. A su vez, con su experiencia
instituciones formales e informales. A lo an- y sabiduría puede ser un importante aporte
terior, se suma el hecho que quienes más para estos grupos etarios.
participan en estos clubes son mujeres de Además de responder a la necesidad de
nivel socioeconómico medio-bajo o bajo, lo trascendencia, la generación de programas
que los instala como grupos marginales y de intergeneracionales contribuye a la solución
poca influencia en la sociedad. Estas limita- de problemas sociales (e.g., el cuidado de
ciones significan un techo en sus aspiracio- niños y adolescentes), fortalece los lazos en-
nes de desarrollar capacidades de gestión y tre generaciones, rescata la transmisión de
de envejecer óptimamente. las normas y el patrimonio cultural, fomenta
Los modelos de acción de los equipos una vida laboral activa entre generaciones,
profesionales como también el diseño de y comparte recursos entre ellas, todo lo cual
programas, reflejan una visión asistencia- fortalece las redes de apoyo y el capital so-
lista, que considera al adulto mayor, funda- cial de las comunidades.
mentalmente, como un sujeto de necesidad El impacto de la colaboración entre gener-
pero no necesariamente de derecho. Por aciones recae también sobre a) la economía,
tanto, un desafío pendiente es educar para pues todas las generaciones participan acti-
cambiar estereotipos y prejuicios en relación vamente en actividades económicas produc-
a las capacidades del adulto mayor, como tivas y compartan recursos en lugar de com-
también integrar al adulto mayor en la plani- petir por ellos; b) la sociedad, al promover
ficación de las acciones de salud como un la cohesión social, la solidaridad y la unidad
agente activo y competente. de las generaciones; c) sobre al aprendizaje,
Al considerarlo persona, con estatus so- pues dinamiza y enriquece procesos y prom-
cial y oportunidades reales de participación, ueve el desarrollo de habilidades para toda
no solo se fortalece el bienestar y las capa- la vida; y d) la salud ya que promueve la par-
cidades del adulto mayor; se beneficia tam- ticipación social y con esto el envejecimiento
bién la sociedad a través del reciclaje de óptimo (Cárdenas, 2003).
recursos que disminuye los gastos del país Segundo, la capacitación de profesionales
para atender a este grupo etario. en un enfoque comunitario que los habilite para
Por lo tanto, es urgente traducir el obje- desarrollar proyectos para el adulto mayor y
tivo de las políticas en prácticas orientadas en conjunto con este, para ello es indispens-
al empoderamiento (Bravo & Caro, 2002; able modificar las posibles creencias erróneas
Cossia, 2003) de los adultos mayores en dos y prejuicios respecto a esta etapa vital que el
sentidos. Primero, incorporando a los adul- profesional tenga, y se debe formar técnica-
tos mayores a la creación de proyectos y mente a estos para lograr un trabajo colabora-
programas que los inserte en una red social, tivo con las personas de la tercera edad.
que les permita generar vínculos con otros
segmentos de la sociedad (niños, jóvenes, AGRADECIMIENTOS
profesionales) y, de este modo, amplíe su Las autoras agradecen muy especialmente
acceso a recursos y su capital social. la colaboración de la psicóloga Francisca
Estas iniciativas se traducirán en mayores Loyola, las participantes del estudio y los
beneficios si atienden a dos aspectos alumnos del curso Ciclo Vital II de la Escuela

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 93-104 103


Artículos Misceláneos: Investigación Martínez, L.

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Long-man.
104
Artículos Misceláneos: Arte Cuento

CUENTO

Pablo Esteban Ruiz Cuevas, Escritor


Comunicador Audiovisual de INCACEA
Académico en INCACEA y Universidad de las Américas
Director Productora Suburbio

Artículo recibido el 20 de marzo, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de octubre, 2006

Lloraba desconsoladamente. Era como manos y le diera rehabilitación sin pedirlo.


si de un minuto a otro el mundo se posara Ahora sí, en realidad, me sentía airoso.
en mi pecho y lo aplastara de tal forma que Después, vino la repartija. No solo de una
me faltaba el aire. Mi garganta era un nudo gran cantidad de cocaína entre los detectives
de pañuelo húmedo que tiraba cada vez con que estábamos ahí, sino que además de la
más fuerza desde sus extremos. Lloraba plata. Qué mierda importaba, si provenía de
desconsoladamente, no me podía detener. la misma droga, así lo entendí o tal vez así
Sin embargo, peor aún: no me podía el lo quise entender.
cuerpo. Varios –no recuerdo quiénes–
intentaron levantarme del suelo, pero era –¿Qué piensas hacer con trescientas
inútil. Mis rodillas necesitaban el piso, lo cincuenta lucas mensuales? –dijo Mauricio,
mismo que mis brazos y mi rostro. el más viejo de los ratis.
Era mi primera redada. Estaba nervioso, –La paga es mala, y todos lo saben
pero no podía demostrarlo; mis superiores –agregó Marcelo, mi compañero– pero las
lo notarían, así que actué con normalidad. recompensas son mejores. Vamos, toma
Estábamos en Puente Alto. Sabíamos y estos paquetitos y diviértete.
siempre hemos sabido los lugares exactos – Pero cuídate –dijo Lautaro–. La plata va
donde se comercializa la droga, en este directo al patio trasero. Respecto a lo otro,
caso en particular, la cocaína. Tres kilos véndela. De repente, si tú quieres, tú sabes,
de cocaína de alta pureza. Irrumpimos con pero solo de vez en cuando. No seai hueón.
violencia, como era de esperarse y, según
lo estudiado, no encontramos resistencia. Así lo hice, y la verdad es que no me quejo.
Literalmente los pillamos con las manos en Tengo bien enterrados aproximadamente
la masa. Estuvo perfecto, más aún cuando el nueve millones de pesos, eso sin contar las
menor de los tres hermanos intentó arrancar. cosas en que he invertido: auto y arreglos en
No alcanzó a correr más de una cuadra la casa. Nada que se note mucho.
cuando lo reduje sin efectuar ni un disparo. Respecto a la cocaína, me gustó, me
Me creía un héroe, así me lo hicieron sentir gustó mucho, me gusta... Aunque al final
también los que ahora son mis colegas. Me no sé si es un placer, o un suplicio. Porque
llenaban de elogios y de manotones en la al principio estaba bien. Compartir con los
espalda. amigos, con mujeres, con conocidos, con
Pero había que probarla, saber que en putas que se acuestan con uno por droga
realidad se trataba de la droga. Era un ritual y que mientras uno les esté dando toda
en cada uno de los atracos, y no bastaba la noche, ellas están felices. Con dealers,
solo con meter el dedo en el polvo. sí, con los mismos traficas. Es costumbre,
Ahí estaba, frente a mi premio: una en una relación entretenida, de amistad de
maldita línea de cocaína, y las miradas no mentira, ellos nos proveen y nosotros los
solo de mis colegas, sino que además de dejamos trabajar tranquilos. Por otra parte,
los hermanos Pereira... Fue un masaje en el nos dan otros nombres que para ellos son
corazón, como si el polvo lo tomara entre sus pura competencia.

2006, Horiz Enferm, 17, 2 103-104 105


* Correspondencia e-mail: pabloeruizc@yahoo.es
Artículos Misceláneos: Arte Ruiz, P.

Y de nuevo. Atraco al narcotráfico, ce- todo se traduce en incesantes estados de


lebración con trago y por supuesto cocaína. mal humor.
Y cuando hablo de narcotráfico, hablo de Y ahora último este joven Cristóbal
microtráfico, porque el macro siempre es que vino con la misión, según él, de hacer
intocable, y no hablo de que sea intocable limpieza en la institución. Limpieza de qué,
para la policía, sino que habría que mezclarse si hasta donde yo sé, incluso la alta dirección
con políticos y jueces, y ahí sí que no hay está mojada, si no es por traficas, es por
nada que hacer. ladrones, por empresarios, por diputados y
Decía que al principio era un placer, pero senadores. Limpieza de qué, si aquí todos
a medida que pasaba el tiempo el consumo de alguna forma u otra tienen algo que
se hacía más intenso y era más difícil pasar esconder –por supuesto nada se comenta–
inadvertido. pero todos lo saben.
Era cosa de todos los días acostarse a Al tipo le dio con ponerme el ojo, no podía
las tres de la madrugada, completamente hueviar a Ramírez o a Ortega, tenía que ser
drogado, después de una agotadora jorna- a mí, que tengo familia, una esposa que me
da de trabajo. Ni hablar de pegar los ojos. ama y que amo, dos hijos pequeños y tenía
Levantarse y volverse a drogar a las seis y que hueviarme a mí. Tenía que preguntar y
media. No hay fuerzas. Con un dolor de ca- meter sus papeles y órdenes y grabaciones,
beza intenso, más que la cabeza, me dolía la y qué sé yo cuánta cosa, donde no le im-
nariz. No sé cómo aguantaba mi nariz. portaba, y acorralarme ahora con preguntas
Una tarde de domingo, volvíamos de que no tienen respuestas, que me sacan de
la plaza luego de jugar fútbol con mi hijo mis casillas.
Sebastián y cuando lo tomo en brazos, Entonces, sin pensar en esta sala donde
me pega sin querer en la nariz. Exploto en estamos solo él y yo, lo golpeé y lo golpeé,
sangre, salía por montones, el rostro, las apreté los dientes y lo golpeé. Y luego, lloré.
manos, la polera, todo inundado en san- Lloraba desconsoladamente. Era como
gre. Sebastián lloraba, y yo me consumía si de un minuto a otro el mundo se posara
en rabia, porque no paraba y no podía en mi pecho y lo aplastara de tal forma que
darle explicaciones convincentes a mi hijo. me faltaba el aire. Mi garganta era un nudo
Me lavaba y no quería parar. Sangraba y de pañuelo húmedo que tiraba cada vez con
sangraba. más fuerza desde sus extremos.
El trabajo se hacía cada vez más infer- Lloraba desconsoladamente, no me
nal, el mal humor, la cabeza, la bulla, la ca- podía detener, lo que era peor: no me podía
beza, y nuevamente el mal humor hacían las el cuerpo. Varios –no recuerdo quiénes–
relaciones imposibles. Informes cada vez intentaron levantarme del suelo, pero era
más mentirosos. Cubrirse las espaldas con inútil. Mis rodillas necesitaban el piso, lo
los novatos que creen que vienen a hacer mismo que mis brazos y mi rostro.
el bien, es algo de todos los días, y al final Dios, ¡necesito ayuda!

106
Artículos Misceláneos: Arte Cuento

PLACER CULPABLE

Autor anónimo

Artículo recibido el 4 de julio, 2006. Aceptado en versión corregida el 10 de noviembre, 2006

Carolina, recostada en un sofá, aparente- ¿Qué diablos pasa? ¿Por qué estoy in-
mente miraba la televisión, pero su mente quieta? La primavera antes me ponía feliz.
estaba muy lejos. Era una hermosa tarde de Apenas veía un día hermoso, salía para dis-
primavera, con una temperatura ambiental frutar hasta el último rayo de sol, y ahora...
agradablemente calida, el almuerzo había ¡me pone triste!
estado espectacular, ese postre preparado Se dirigió a su pieza y sacó del velador
especialmente para los fines de semana, un trozo de chocolate con almendras y,
la dejó plácida, con un delicioso placer cul- disfrutándolo placidamente, intentó descifrar
pable… lo que le estaba pasando. Entonces pensó:
Su hermana le hablaba, sin lograr sacarla ¡Prefiero el invierno!, ¡puedo usar harta ropa
de su mundo interior. para que no se noten mis rollos!, ¡puedo
comer comida rica! Total... hace frío... y
–¿Qué te pasa? Desde hace rato te hablo lo mejor de todo, mis amigas ya no se
y no me escuchas. Te pregunté si me acom- preocupan tanto de la figura, porque es fijo
pañas a dar un paseo. que se ponen a dieta, y a mí, no me queda
–Gracias, pero no quiero salir, deseo otra. Es lo mismo que ocurre con las mamás
descansar un rato. cuando tienen hijos pequeños: cada vez que
–Qué lata, ya nunca me acompañas, me ellas sienten frío, lo primero que hacen es...
preocupa tu falta de interés en todo. Anda, abrigar a sus niños. Lo mismo pasa con las
anímate y vamos! dietas de mis amigas, ellas se ponen a dieta
–Prefiero quedarme en casa, no tengo y la que deja de golosear ¡SOY YO!
ganas de salir. Otro día, a lo mejor... El ejercicio mental de intentar saber lo
–Bueno, así lo espero. Chao, nos vemos que estaba pasando despertó en Carolina
más tarde. unas ganas locas de comer algo rico. Qué
agrado sentía cada vez que disfrutaba de un
Cuando salió su hermana, Carolina se café acompañado de algo dulce. No podía
sintió nerviosa, algo le molestaba, pero no explicar esa gama de sensaciones que ex-
podía identificar qué era. Cada segundo perimentaba, solo se dejaba llevar y disfru-
estaba más inquieta... no quería pensar en taba.
nada. Se dirigió hasta el refrigerador, se sir- Pero esas sensaciones agradables
vió un trozo de pastel y volvió tranquilamente duraban poco, luego venía la gran culpa, los
al sillón; había recuperado la calma y disfru- eternos planes para dejar de comer, hacer
taba su tarde de descanso. ejercicios, comprar una caminadora, planes,
Durmió una corta siesta. Despertó con y más planes. Después llegaban los sueños:
una grata sensación y con ganas de hacer ser flaca, usar ropa linda, salir para donde
algo, pero no lograba identificar qué. Caminó estuviera vuelta y gozar de la vida como
hasta el jardín, recorrió toda la casa y ¡nada! antes.
¡Qué aburrimiento! No era eso lo que quería. Por unos escasos segundos se quedó
Nuevamente esa sensación de angustia, paralizada frente al espejo, pero sin mirarse
esas mariposas en el estómago y la peque- realmente, hacía años que no se miraba con
ña dosis de energía desapareció. detención, no le gustaba lo que veía.

2006, Horiz Enferm, 17, 2 103-104 107


Artículos Misceláneos: Arte Autor Anónimo

La tristeza que la embargaba en esos Nuevamente se puso a pensar en qué la


instantes, la impulsaba con mayor fuerza a impulsaba a comer, en las emociones que
esa dulce calma que le daban sus golosinas experimenta cuando come, y por qué no
y sus platos de comida preferidos. puede dejar de hacerlo.
Cada día despierta con la firme convicción Después de mucho, pensó que estaba
de iniciar una dieta. Muchas veces logra bajar harta de buscar excusas para poder comer,
algunos kilos, pero como son muchos, ¡no se siempre era lo mismo. La pena, la alegría, la
notan! Y, para colmo, cuando le preguntan angustia, todo se calma... ¡comiendo!
¿cuándo te vas a poner a dieta?, siente una Llegó entonces a la conclusión: ¡Soy una
enorme frustración que la impulsa a seguir adicta a la comida! No puedo DETENERME.
comiendo. Debe ser el mismo impulso que lleva al
Las penas, angustias, incertidumbres, adicto al cigarrillo o al alcohol.
siempre la llevan a lo mismo, a comer para
sentirse mejor, para mantener esa sensación ¡Necesito parar!
tan placentera.
¡POR FAVOR AYÚDENME!

108
Reseñas de Libros

TEMA: ADICCIONES

INTEGRATED TREATMENT FOR DUAL se debe a muchas más causas que la


DISORDERS simple casualidad o la complicación de un
A Guide to Effective Practice. cuadro con el otro (trastorno secundario a un
Kim T Mueser, Douglas L. Noordsy, Robert E. primario). También deja de lado la tradicional
Drake y Lindy Fox. hipótesis de la “automedicación” como única
The Guilford Press. explicación de dicha coexistencia.
1a Edición. 2003. Este texto, editado por académicos de la
470 páginas. Escuela de Medicina de Darthmouth en New
ISBN: 1-57230-850-8 Hampshire, no pretende profundizar mayor-
mente sobre nuevas hipótesis ni explicaciones
Cada día nos parece que los pacientes, y sobre estos trastornos. Es como su nombre lo
los pacientes adictos en particular, presentan indica, una guía práctica de tratamiento.
mayor complejidad y mayor gravedad. Parte Expone acerca de las intervenciones
de esta mayor complejidad está dada por la que muestran un mejor nivel de evidencia
presencia de múltiples comorbilidades que en el manejo de pacientes con patología
hacen más difícil el manejo terapéutico de dual con una particularidad: la integración
nuestros pacientes. de técnicas diversas en un campo donde
Con el tiempo las unidades de adicciones ninguna intervención aislada tiene beneficios
se van convirtiendo en unidades de manejo de de consideración. Tiene capítulos acerca
patología dual o adicciones complejas, dejando de Conceptos Básicos del tema, el Proceso
el manejo de las adicciones únicas o “simples” de Evaluación, Intervenciones Individuales,
en la atención primaria o secundaria. Grupales y Familiares, etc.
La patología dual, o sea, la coexistencia Un texto práctico para el especialista en
en un mismo individuo de un trastorno el área, que no busca en él un tratado más
adictivo y de un trastorno psiquiátrico académico sobre el tema.
mayor (tradicionalmente esquizofrenia,
trastorno bipolar, trastorno depresivo Dr. Claudio Valeria Aguirre
mayor o trastornos de ansiedad severos y Médico-Psiquiatra,
probablemente ampliable a los trastornos Unidad de Adicciones.
graves de la personalidad) nos acerca a un Departamento de Psiquiatría.
mundo donde la coocurrencia del trastorno Pontificia Universidad Católica de Chile.

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 109-112 109


Reseñas de Libros

TEMA: ADICCIONES

PATHOLOGICAL GAMBLING. A CLINICAL los autores Jon E. Grant y Marc N. Potenza


GUIDE TO TREATMENT es un texto que en sus 270 páginas, introduce
Editado por Jon E. Grant y Marc N. Potenza. a este importante problema de salud
American Psychiatric Publishing, Inc. pública. El texto invita a la profundización y
1a Edición. 2004. actualización acerca del tema a través de
270 páginas. capítulos de epidemiología y salud pública,
ISBN 1-58562-129-3 características clínicas, etiología y de
prevención y tratamiento.
El 7 de enero de 2005 fue promulgada El volumen, si bien breve por lo aún
la Ley N° 19.995 que establece las limitado del conocimiento en esta área, tiene
bases generales para la autorización, capítulos de llamativo interés, ya sea por lo
funcionamiento y fiscalización de casinos novedoso del tema, como también, por la
de juego. Anteriormente eran solo unas introducción de conceptos muy recientes en
pocas ciudades en Chile las que contaban la nosología de los trastornos psiquiátricos
con la autorización para tener casinos de como el que realiza Eric Hollander en el
juegos: Arica, Iquique, Coquimbo, Viña del Capítulo de Tratamientos Farmacológicos.
Mar, Pucón y Puerto Varas. Ahora podrá Un texto que me parece no solo de utilidad
existir un máximo de 24 casinos en Chile a para los clínicos especialistas en adicciones,
una distancia mínima entre cada uno de 70 sino para los equipos de salud mental en
kilómetros. general.
Esta realidad tiene importancia si
consideramos que existe probablemente Dr. Claudio Valeria Aguirre
un alto número de individuos afectados Médico-Psiquiatra,
de un tipo de las llamadas adicciones Unidad de Adicciones.
comportamentales: El Juego Patológico o Departamento de Psiquiatría.
Ludopatía. Pontificia Universidad Católica de Chile.
Este libro, editado por American
Psychiatric Publushing, Inc. El año 2004, de

110
Reseñas de Libros

TEMA: ADICCIONES

EL LENGUAJE SECRETO DE LAS ca en y para Chile. El libro, no solo define al


DROGAS EN CHILE. YERBA, GOMAS, modo de un diccionario términos tales como
JALE, NEO Y AFINES “católicas”, “yoins” o “speed”, sino que expli-
Autor: Leopoldo Sáez Godoy ca posibles derivaciones y su proveniencia,
Editorial de la Universidad de Santiago de más al estilo enciclopédico.
Chile. Este esfuerzo, realizado ya hace algunos
170 páginas años (1995) merece una continuación, es de
Edición: 1a Edición esperar que algún día podamos contar con
Año: 1995 una nueva edición más actualizada y más
ISBN: 956-7069-10-6 completa aún. De todas formas, esta primera
edición, de la que aún podemos encontrar
El trabajo clínico con pacientes adictos, ejemplares en librerías, es un volumen valio-
en especial cuando nos enfrenta con grupos so para nuestras bibliotecas sobre trastornos
en situaciones especiales tales como adictivos.
marginalidad, extrema pobreza, privación de
libertad, etc., nos pone dentro de las múltiples Dr. Claudio Valeria Aguirre
complejidades clínicas con una de tipo tal Médico-Psiquiatra,
vez “sociológico-lingüístico”, por llamarlo de Unidad de Adicciones.
alguna forma. Departamento de Psiquiatría.
Existe un tipo de nomenclatura especial Pontificia Universidad Católica de Chile.
dentro de los trastornos adictivos que es
conveniente conocer, para así no dejar pasar
problemáticas ni situaciones que de otra for-
ma no atenderíamos.
El esfuerzo del Profesor Leopoldo Sáez,
Profesor de Castellano y Alemán de la Uni-
versidad de Chile y Doctor en Filosofía de la
Universidad de Bonn, es notable.
Su texto tiene la particularidad de aden-
trarnos en una forma diferente de enfrentar
el problema de la droga en Chile, que es la
lingüística, y no una cualquiera, una lingüísti-

2006, Horiz Enferm, 17, 2, 109-112 111


Sitios web y películas sugeridas Sitios web y películas sugeridas

PELÍCULAS

ENTRE COPAS (SIDEWAY) LEAVING LAS VEGAS


Dirección: Alexander Payne. Director: Mike Figgis.
Estadounidense, año 2004. Actores: Nicolas Cage, Elizabeth Shue,
Actores: Paul Giamatti (Miles Raymond), Julian Sands entre otros.
Thomas Haden Church (Jack Lopate), San- Estadounidense, año 1995.
dra Oh (Stephanie), Virginia Madsen (Maya).
Esta impactante película, donde Nicolas
No todas las películas sobre alcohol Cage encarna a Ben, trata de un hombre que
tratan sobre alcohólicos y no todos los que decide un lento suicidio a través del alcohol y
beben terminaran con delirium tremens. Esta que encuentra en Sera (Elizabeth Shue) a una
comedia nos muestra a dos amigos que dulce compañera para este viaje final (papel
emprenden una especie de despedida de por el que Nicolas Cage obtiene un Óscar).
soltero de uno de ellos, a través de la ruta Nos muestra un mundo donde la soledad
del vino de California. Ambos amigos no de dos personajes solos y marginales, para
pueden ser más disímiles que el Merlot y el algunos incluso lo peor de nuestra sociedad
Pinot del que cada uno de ellos gusta, Jack (el borracho y la prostituta) pueden mostrarnos
un actor fracasado y con aires de playboy (en aún lo mejor de nosotros mismos. Aun en la
franca decadencia) que se enamora durante miseria puede haber entrega desinteresada.
el viaje y que decide abortar su boda. Miles Esta cinta sobrecogedora nos ofrece también
es el novelista fracasado y decepcionado gozos intensos, su banda sonora escuchada
del amor (tal vez por eso es fracasado, un al anochecer nos invitaría a acompañarla
novelista podrá rememorar un pasado amor o con un whisky en las rocas, siempre que no
anhelar el esquivo amor, pero ¿cómo puede hallamos visto la película muy recientemente
un novelista decepcionarse de él?), Miles recordando a Ben tembloroso pasando los
solo cree que puede gozar una copa de su síntomas de abstinencia.
idealizado Pinot en su propia soledad, pronto
descubrirá que una botella se bebe mejor de
a dos. Una cinta simpática, de dos hombres
que tratan de sobrepasar la mitad de la vida
con la única certeza de que la vida no es
siempre como uno la soñó. Para mi gusto
solo equivocan un punto: la fuerza y elegancia
de nuestro Carmenere de los Valles de
2006, HorizyEnferm,
Colchagua 17,sin
Curicó, es 2 109-110
duda más sublime 113
que el sobrevalorado Pinot Californiano.
PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE.
ESCUELA DE ENFERMERÍA.
ESTUDIOS BIBLIOGRÁFICOS. 2° SEMESTRE. AÑO 2006

Tema Alumnos(as) Profesor(a) Guía

“Cuidados de enfermería en el paci- Felipe Rodríguez S. Astrid Ourcilleón A.


ente con Infarto Agudo al Miocardio Marta Sánchez B. aourcill@uc.cl
sometido a trombólisis sistémica con
estreptokinasa”

“Burnout en profesionales de enfer- Carla Abarca Q. Astrid Ourcilleón A.


mería de cuidados intensivos” María Victoria Puentes A. Pamela Rodríguez N.
prodrign@uc.cl

“Uso de ventilación mecánica no inva- Paulina Figueroa V. Astrid Ourcilleón A.


siva” María Belén Pino N.

“Influencia del alcohol en el desarrollo Fabiola Guerra S. Astrid Ourcilleón A.


de patología coronaria e implicancias Carolina Oliveros H.
de este para enfermería”

“Cuidados de enfermería del paciente Sergio Cortés M. Astrid Ourcilleón A.


con Accidente Vascular Encefálico en Lucía Díaz F.
fase aguda”

“Calidad de vida en mujeres Pamela Cerda C. María Teresa Urrutia S.


histerectomizadas” Patricia Pino Ch. murrutis@uc.cl

“Calidad de vida en mujeres con Luz María Montes L. María Teresa Urrutia S.
cáncer cervicouterino” María José Millins P.

“Factores que influyen en el cuidado de Karina Díaz G. María Cecilia Arechala M.


los adultos mayores, cuando este es Ana María Marambio C. marechab@uc.cl
entregado por cuidadores informales”

“Métodos no farmacológicos en la María Ignacia Valdivia B. Mila Urrutia B.


prevención de trombosis venosa pro- María Magdalena Vásquez E. murrutia@uc.cl
funda en pacientes adultos durante el Paola Carrasco A.
período perioperatorio” dcarrasa@uc.cl

“Calidad de vida y sexualidad en la Bárbara Gómez M. Lauren Poupin B.


menopausia” lpoupin@uc.cl

“Factores de riego para infección Daniel Díaz S. Lauren Poupin B.


Chlamydial adquirida sexualmente”

“Características de la sexualidad de los Marcela Menas S. María Soledad Rivera M.


adultos mayores y percepción del per- mriverma@uc.cl
sonal de salud sobre el cuidado de la
salud sexual en esta etapa”
115
PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE.
ESCUELA DE ENFERMERÍA.
ESTUDIOS BIBLIOGRÁFICOS. 2° SEMESTRE. AÑO 2006

Tema Alumnos(as) Profesor (a) Guía

“Factores que influyen en la adher- Alejandra Fuenzalida Ll. María Cecilia


encia al tratamiento de los usuarios Miriam Rubio A. Arechabala M.
portadores de Diabetes Mellitus tipo 2
e intervenciones para lograr un adec-
uado control metabólico”

“Factores de riesgo en depresión Jocelyn Contreras V. Lauren Poupin B.


postparto” Sandra Maturana B.

“Terapias integrativas: utilización en Carolina Duque P. Lauren Poupin B.


mujeres con cáncer de mama” Paula Nualart F.

“Factores no médicos que influyen Camila Carvajal N. María Isabel Catoni S.


en la toma de decisión respecto a la Claudia Poblete D. mcatoni@uc.cl
elección de la modalidad de diálisis
en pacientes con insuficiencia renal
crónica terminal”

“Emociones negativas durante el em- Camila Livesey G. Lauren Poupin B.


barazo y sus implicaciones en el niño” Blanca Ossa G.

“ Efectos del uso del tabaco, alcohol y Paula Medeiros U. Lauren Poupin B.
cocaína en el embarazo y su descen-
dencia”

“Factores que influyen en la calidad Bernardita Gaete S. Ximena Ferrer S-G.


de vida de pacientes con colostomía xferrer@uc.cl
permanente por cáncer colorrectal”

“Beneficios de la visita y terapia asis- Carmen Astudillo S. Rina González R.


tida por animales en las personas con Angélica Gutiérrez S. rgonzalr@uc.cl
problemas de salud”

“Desafíos en enfermería telefónica: Yamil Álamo C. Ilta Lange H.


características, ventajas y limitaciones Vivian Sabat D. ilange@uc.cl
en el manejo de personas con enfer-
medades crónicas”

“ Alimentación oral en el recién nacido Marjorie Rosales V. Patricia Fernández D.


prematuro: transición de la sonda al pfernadi@uc.cl
chupete”

“Impacto de la visita domiciliaria en el Alicia Arévalo F. María Cecilia


cuidado de adultos mayores” Carmen Villalón L. Arechavala M.

116
PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE.
ESCUELA DE ENFERMERÍA.
DEFENSA DE TESIS. 2° SEMESTRE. AÑO 2006

Tema Alumnos(as) Profesor (a) Guía

“Necesidades de los familiares de los Yoshi Cortés B. Astrid Ourcilleón A.


pacientes hospitalizados en unidades María Fernanda Torres G. aourcill@uc.cl
de cuidados intensivos” Pamela Uribe D.

“ Prevalencia y características de er- Andrea Chirino H. María Cecilia


rores de medicación en un servicio Arechabala M.
general de un hospital de la Región marechab@uc.cl
Metropolitana”

“Percepción materna de los factores Natalia Jourdan P. Claudia Uribe T.


obstaculizadores del contacto precoz María Paulina Sibilla J. curibet@uc.cl
madre-hijo”

“Necesidades de información, preo- Ana Moya I. Rina González R.


cupaciones, creencias y medidas de Paulina Román C. rgonzalr@uc.cl
afrontamiento de los padres de niños
con daño neurológico del Instituto de
Rehabilitación Teletón y del Servicio
de Pediatría del Hospital Dr. Sótero
del Río”

“Calidad de vida en personas con an- María Paz González A. Patricia Fernández D.
tecedentes de prematurez y muy bajo Paola Pino A. pfernadi@uc.cl
peso de nacimiento”

117
REVISTA HORIZONTE DE ENFERMERÍA
INSTRUCCIÓN A LOS AUTORES

La revista Horizonte de Enfermería es SISTEMA DE REVISIÓN


una publicación periódica de la Escuela El editor recibe el trabajo enviado para
de Enfermería de la Pontificia Universidad publicación y confirma la recepción al autor
Católica de Chile. El propósito es ser un principal en los próximos 7 días de recibido
referente nacional en el ámbito de la salud el artículo. Luego de la revisión preliminar del
con énfasis en Enfermería, reconocida por su editor, el trabajo es enviado a tres revisores
aporte en la divulgación del conocimiento y del Comité Editorial. Se asegura el anonima-
por constituir un espacio de diálogo entre los to (del o los autores) en el proceso de evalua-
diferentes actores relacionados con la salud ción y aprobación de los trabajos.
de las personas. Una vez evaluado por el Comité Editorial,
La revista Horizonte de Enfermería se determina si el artículo se aprueba sin mo-
publica artículos inéditos en torno a un tema dificaciones, con modificaciones o se recha-
determinado. Los trabajos presentados en za. El resultado de la calificación del trabajo,
eventos (congresos, simposios, seminarios) junto con las sugerencias, se informará al
serán recibidos solo si no han sido autor vía correo electrónico.
publicados íntegramente en los anales o Se espera que el proceso de análisis y revi-
textos de resúmenes; en este caso el autor sión sea realizado en un plazo de 6 meses
deberá acompañar una carta de autorización promedio.
de los organizadores del evento para Los trabajos deben ser enviados en cua-
publicar el manuscrito. Excepcionalmente, tro copias, junto a un disquete o CD con el
serán recibidos trabajos en idioma distinto artículo idéntico al impreso. Se debe adjuntar
a la lengua española. Para la publicación carta de solicitud de publicación, declaración
de artículos ya publicados en revistas de autoría y lista de chequeo (ver anexos co-
extranjeras el autor deberá presentar carta rrespondientes).
con la autorización del Comité Editorial de la Los trabajos deben enviarse a: Editora
revista correspondiente. Revista Horizonte de Enfermería.
Las opiniones emitidas en los trabajos, así Escuela de Enfermería, Pontificia Universi-
como la exactitud, adecuaciones y proceden- dad Católica de Chile, Código postal 6904411
cia de las citas bibliográficas, fotos, tablas, Macul. Santiago - Chile, y a su vez vía correo
gráficos, citas textuales son de exclusiva res- electrónico a: revistahorizonte@uc.cl
ponsabilidad de los autores. En el caso de in-
cluir material de otras fuentes, debe señalar NORMAS DE PUBLICACIÓN
la autorización del autor. El artículo debe cumplir los siguientes re-
El autor al momento de enviar su artículo quisitos:
debe señalar la sección en la cual solicita se Extensión no mayor de 20 páginas; es-
publique. Las secciones son: investigación, crito en papel tamaño carta, por una cara; a
revisión de literatura, casos clínicos, proyec- doble espacio con margen de 3 cm en los
tos o programas de intervención, reflexiones cuatro bordes; letra Times New Roman # 12;
y temas misceláneos. La sección temas mis- con numeración en la parte inferior derecha.
celáneos considera artículos que no se rela- Las figuras, tablas, gráficos, incluidos en el
cionan al tema al cual será dedicado el nú- artículo, deben ser enviados en las páginas
mero, pudiendo ser de cualquier área (inves- finales del trabajo, previa indicación en el
tigación, reflexión, caso clínico, etc.), como texto. Los trabajos deben estar escritos en
también artículos que aporten a la visión del idioma español, en casos excepcionales se
tema propiamente tal, pero que no clasifican aceptarán publicaciones en otro idioma, las
en las secciones establecidas. cuales serán traducidas al idioma español.

119
Organización general del artículo: extensas, y solo cite a aquellos autores
1. Título y autores: En la primera página se relevantes. Las citas en texto deben ser
incluye el título del trabajo en español y señaladas según el formato APA 5ª edi-
en inglés, el cual debe señalar lo central ción: http://www.puc.cl/sw_educ/gnosis/
de la publicación; los nombres y apellidos citas/citas.htm
de los autores, título profesional, grados d. Metodología: Se debe describir la meto-
académicos, lugar de trabajo. Se debe dología utilizada en la investigación, se-
señalar cuál será el autor con el cual se ñalando: tipo de estudio, tamaño y méto-
establecerá correspondencia, con la di- do de selección de la muestra/sujetos en
rección postal, e-mail y teléfono de con- estudio, tipo de instrumentos utilizados
tacto. El autor del trabajo corresponde a (confiabilidad y validez) y procedimientos
aquel que participó en la creación y en de recolección de información, sistema
la ejecución del mismo. Aquellos que no de análisis de información, métodos es-
cumplen con el criterio de autoría pueden tadísticos y consideraciones éticas. Si se
señalarse en agradecimientos, si corres- emplearon instrumentos o métodos de
ponde. Incluya a pie de página fuente de recolección de información conocidos,
financiamiento si la hay, y conflicto de señale solo la fuente de referencia, de lo
interés. Se solicita completar el ítem de contrario agregue una breve descripción
participación señalado en la Declaración de estos.
de Autoría. e. Resultados: Debe tener un orden lógico
2. Resumen y Abstract: En la segunda pági- de acuerdo a los objetivos del trabajo.
na debe escribirse el resumen en espa- Los datos pueden presentarse en tablas
ñol, el que sintetiza el contenido del artí- o gráficos. Evite repetir información. Se
culo, de hasta 250 palabras, en espacio presentan solo resultados, no incluya
simple con 4 palabras claves, de acuerdo comentarios o discusión de ellos. La in-
a la lista de descriptores en ciencias de formación en tablas, figuras y gráficos
la salud (DECS) de BIREME (http://www. debe ser entregada en hojas separadas
bireme.br.). Incluya el abstract en inglés, del texto; cada una de ellas debe tener
que corresponde a la traducción del re- un título que explicite claramente la infor-
sumen, con las palabras clave corres- mación que aporta y numerarse según el
pondientes. La editora podrá modificar el orden de aparición en el texto.
resumen y el abstract, previa utorización f. Discusión y Conclusión: Consiste en la
de los autores. discusión de los resultados obtenidos
3. Organización del artículo: La organiza- en el trabajo en relación a resultados de
ción del artículo deberá realizarse según otras publicaciones en el tema. Se debe
el tipo de manuscrito enviado. A continua- explicitar las semejanzas y diferencias de
ción se explicita el orden según tipo de sus resultados con las de otras investiga-
publicación: ciones. Relacione los resultados con el
propósito del estudio. Evite concluir as-
Investigación: Se incluyen aquellos estudios pectos que no están respaldados. No es
que utilicen metodología de tipo cuantitativa una revisión de la literatura. No repita los
y/o cualitativa. datos presentados en la sección resulta-
a. Título y autores dos. Señale las conclusiones derivadas
b. Resumen y Abstract de la discusión. Proponga recomendacio-
c. Introducción: Se presenta la fundamenta- nes cuando sea pertinente.
ción del problema en base a una breve g. Agradecimientos: En esta sección se ex-
revisión de la literatura, descripción de presan los agradecimientos a aquellas
los objetivos y el propósito del estudio. personas o instituciones que contribuye-
Evite presentar revisiones bibliografías ron a su investigación.

120
Revisión de Literatura: tiene como objetivo en texto deben ser señaladas según el
entregar conceptos actuales sobre un tema, formato APA 5ª edición:
respaldados por referencias bibliográficas
acordes en calidad y cantidad. d. Caso Clínico: Describa la situación clíni-
a. Título y autores. ca ordenadamente, evitando entregar in-
b. Resumen y Abstract. formación poco relevante. No realice co-
c. Introducción: Se presenta una breve des- mentarios.
cripción del tema a revisar, la importancia e. Discusión: Establezca un análisis de los
de este, los objetivos de la revisión biblio- aspectos más relevantes del caso clínico
gráfica, el propósito y la organización de con respaldo de la literatura. Destaque
ella en el texto. solo aquellos aspectos que ameriten ser
d. Cuerpo del Texto: Aquí corresponde de- analizados. Establezca recomendaciones
sarrollar la revisión del tema propiamen- cuando sea pertinente.
te tal. Señale los títulos correspondien-
tes según la organización planteada en Proyectos o Programas de Intervención:
la introducción.Considere una revisión Se considera la presentación de proyectos o
de literatura actualizada en cada uno programas realizados o por ejecutar.
de los tópicos tratados, evitando hacer a. Título y autores
entrega extensa de información ya pu- b. Resumen y Abstract
blicada, lo cual se soluciona citando la c. Introducción: Se presenta una breve des-
fuente original. Se solicita citar fuentes cripción del fundamento de la realización
primarias de información, solo en casos del programa o proyecto de intervención,
excepcionalesrecurra a fuentes secun- basado en la literatura, que avala la rea-
darias. Explicite, cuando corresponda, lización del proyecto, el propósito y los
la discrepancia entre las fuentes consul- objetivos.
tadas. Las citas en texto deben ser se- d. Cuerpo del proyecto o programa: Se pre-
ñaladas según el formato APA 5ª edición senta el público objetivo, las etapas del
(http://www.puc.cl/sw_educ/gnosis/citas/ proyecto, los métodos a utilizar, sistema
citas.htm). de evaluación. Los aspectos señalados
e. Conclusión: Señale brevemente los as- deben estar respaldados por la bibliogra-
pectos a destacar de la revisión realiza- fía.
da, generando recomendaciones cuando e. Conclusiones: Señalar el aporte de esta
corresponda. intervención propuesta, aspectos desta-
f. Agradecimientos: En esta sección se ex- cables, recomendaciones.
presan los agradecimientos a aquellas f. Agradecimientos: En esta sección se ex-
personas o instituciones que contribuye- presan los agradecimientos a aquellas
ron a su investigación. personas o instituciones que contribuye-
ron en su programa.
Caso Clínico: Considera presentación de
temas clínicos con problemas de interés que Reflexiones: Corresponde al análisis del
ameriten ser publicados dada su prevalencia, tema desde la perspectiva de profesionales
evolución del caso en particular o la interven- de la salud así como de otras profesiones.
ción realizada. a. Título y autores
a. Título y autores. b. Resumen y Abstract
b. Resumen y Abstract. c. Introducción: Se presenta una breve des-
c. Introducción: Se presenta una breve cripción del tema a reflexionar, señalando
descripción del tema a tratar en el caso los aspectos más importantes a tratar y
clínico, la importancia de este y la orga- el objetivo y propósito de la reflexión pre-
nización de la presentación. Las citas sentada.

121
d. Cuerpo de la reflexión: Se presenta el de- b. Publicaciones no periódicas (incluye li-
sarrollo del tema, planteando los diver- bros, monografías, folletos, manuales).
sos puntos de vista, tantode desacuerdo Fernández, P., Caballero, E. & Lira, M.T.
como a favor de la postura propuesta. (1999). Problemas de salud infantil: inter-
Se sugiere respaldar dicha reflexión en vención de enfermería. Santiago: Edicio-
bibliografía pertinente. nes Universidad Católica de Chile.
e. Conclusiones: Señalar los aspectos más
importantes de la reflexión tratada, el c. Parte de una publicación no periódica (in-
aporte del artículo al respecto. cluye capítulo de libro).
Herrera, L.M & Cantwell, M. (1999). Ma-
CITAS EN TEXTO nejo de los principales problemas de
El estilo APA establece que el autor de un lactancia. En P. Fernández, E. Caballero
trabajo de investigación debe documentar & M.T. Lira. (Eds.), Problemas de salud
su estudio, identificando el autor y la fecha infantil: intervención de enfermería (pp.
de publicación de los libros, revistas, tesis, 115-130). Santiago: Ediciones Universi-
etc., utilizados. Este método de citar en el dad Católica de Chile.
texto mismo por autor-fecha [apellido y fecha
de publicación], permite al lector localizar la d. Publicaciones periódicas en línea.
fuente de información en orden alfabético, en Acevedo, I. (2002). Aspectos éticos en la
la lista de referencias al final del trabajo. Con- Investigación científica [Versión electróni-
sultar sitio web: ca]. Ciencia y enfermería, 8 (1), 15-18.

Silva, J. (2003, diciembre). Internet


REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS applied to nursing. Online Brazilian Jour-
Todos los trabajos enviados deben contar nal of Nursing, 2 (3). Recuperado el 30 de
con referencias señaladas según el sistema marzo de 2004, de
APA 5ª edición. La referencia bibliográfica
debe incluir solamente aquellos autores ci-
tados en el texto. Consultar sitio web: e. Tesis.
Mena, D. & Murillo, M. (2000). Familiares
de esquizofrénicos: vivencias del día a
Ejemplos: día. Tesis de Licenciatura no publicada,
Pontificia Universidad Católica de Chile,
a. Publicaciones periódicas. Santiago.
Stringer, J. & Rouse, D. (1999). Ra-
pid testing and zidovudine treatment to f. Materiales Audiovisuales (cinta cinemato-
prevent vertical transmission of human gráfica).
immunodeficiency virus in unregistered Scorsese, M. (Productor). & Lonergan,
parturients: A cost-effectiveness analy- K. (Guionista/Director). (2000). You can
sis. Obstetrics and Gynecology, 94 (1), count on me [cinta cinematográfica].
34-40. EE.UU.: Paramount Pictures.

122
HORIZONS JOURNAL OF NURSING
INSTRUCTIONS TO THE AUTHORS

The Horizons Journal of Nursing is a evolution of the particular case or the


periodic publication of the Nursing School of intervention. It must include the case’s
the Pontificia Universidad Católica de Chile. presentation along with a discussion of
The magazine’s purpose is to be a national the literature around the subject being
reference in the health area with emphasis on addressed.
Nursing, recognized for its contribution in the • Projects or intervention programs:
divulgement of knowledge and for creating a considered to be the presentation of
space for dialogue among the different actors completed or future projects and/or
related to the people’s health. programs.
Horizons Journal of Nursing publishes • Reflections: corresponds to the subject’s
articles related to a determined subject in analysis from the health professionals’
every issue. The works must be inedited perspectives as well as from other
and those presented previously in events professions.
(congresses, symposiums, seminars) will be • Miscellaneous Issues: considered as
received only if they have not been published the presentation of an article in any area
integrally in the annals or texts. The author mentioned before with subject which is
must present an authorization letter from the different than the central theme of the
event’s organizers to publish the manuscript. corresponding issue, as well as articles
In exceptional cases, works already that contribute to the vision of the area
published in foreign magazines and in addressed in the issue but that do not
another language different than Spanish will meet the criteria of the established
be received, as long as they are authorized sections.
by the Editorial Committee of the magazine in
which the articles were originally published. REVIEW SYSTEM
The author must also present the original The editor receives the work sent for the
source’s authorization letter. publication and confirms the reception with
The opinions expressed in the works, as the main author in the following 7 days after
well as the precision, adjustments and origin receiving it. After the editor’s preliminary
of the bibliographical citations, photos, tables, review, the work is sent to 3 reviewers of
graphics, and text citations are the exclusive the Editorial Committee. The identity of the
responsibility of the authors. If material is editor and/or author is anonymous in order
included from other sources, they should to ensure the integrity the received work’s
include that author’s authorization evaluation and approval process.
Eligible works are the following: Once evaluated by the Editorial Committee
• Investigations/Research: those studies it is determined if the article is approved without
that use quantitative and/or qualitative modifications, with modifications or rejected.
methodologies. The result, along with the suggestions, is sent
• Literature Reviews: those which have as to the main author via e-mail.
the objective to deliver current concepts The expected length of the analysis and
regarding a determined issue, backed review process is a period of 6 months.
up by bibliographic references in quality Four copies of the article, along with a
and quantity according to the subject. diskette or CD with an identical copy of the
• Clinical Cases: considered as the article, must be sent with the application. It
presentation of clinical issues with should also include a letter signed by all the
problems of interest that are worthy of authors, requesting publication, together with
publication given their prevalence, the a declaration of originality.

123
The works must be sent to: corresponding abstract in English,
Editor Revista Horizonte de Enfermería with the appropriate key words. The
Escuela de Enfermería editor will be able to modify the given
Pontificia Universidad Católica de Chile summary and abstract, with previous
Código postal 6904411 Macul authorization from the authors.
Santiago- Chile and at the same time by e- 3. Organization of Article: The organization
mail at: revistahorizonte@uc.cl. of the article should be carried out
according to the type of manuscript
PUBLICATION NORMS sent. The following give specific criteria
The article must fulfill the following according to the type of publication.
requirements:
Length of no more than 20 pages; written Research: Includes those studies that
on letter size paper, on one side; double space utilize any type of quantitative or qualitative
with 3 cm. margin in the four edges; Times methodology
New Roman # 12 Font; with numeration in a. Title and authors
the right inferior page. b. Synthesis and Abstract
The figures, tables, graphics included in c. Introduction: the problem’s founding
the article must be sent in the work’s lasts are presented based on a brief literature
pages, with previous indication in the text as review, description of objectives and
to where they appear. The works must be the study’s purpose. Avoid presenting
written in Spanish. extended bibliographic reviews and
General article’s organization: only mention relevant authors. The text
1. Title and authors: The first page should citations must be indicated according to
included the work’s title in Spanish and the APA format 5th edition: http://www.
English, and should indicate the focus puc.cl/sw_educ/gnosis/citas/citas.htm.
of the publication; the names and last d. Methodology: the methodology used
names of the authors, professional in the research must be described
titles, academic degrees, places of and indicate: Type of study, sample
work, mailing address, e-mail and size, method of selection/ subjects
telephone for each one of them. It being studied, type of instruments
must also indicate who will be the used (trustworthiness and validity)
author responsible for correspondence, and procedures for data collection,
with their address, phone number and system of data analysis, statistical
email. A working author should be a methods and ethical considerations.
person who participated in the creation If known instruments or methods of
and execution of said work. Those data collection were used were used,
who do not meet the criteria can be indicate only the reference source; if
mentioned in a a thank you section if not, add a brief description of them.
appropriate. Include funding source if e. Results: There must be a logical order
there is one, at the foot of the page, as according to the work’s objectives.
well as conflicts of interest. The data may be presented in tables
2. Synthesis and Abstract: The second or graphics. Only present the results,
page must include a summary in avoid repeating data and don’t include
Spanish that synthesizes the article’s comments or discussions of them. The
content, no more than 250 words, data in tables, figures and graphics
single space with 4 key words, must be delivered in separate pages
according to the descriptors’ list in from the text; each one of them must
health’s science (DECS) of BIREME. have a title that clearly explains
(http://www.bireme.br.) Include the the contributed information and be

124
numerated according to the order of 6. Thanks: in this section gratefulness is
appearance in the text. expressed to those people or institutions
f. Discussion and Conclusion: consists that contributed to the research.
of the discussion of obtained results of
the work in relation to other publications Clinical cases:
on the subject. It must specify the 1. Title and authors
similarities and differences of your 2. Synthesis and Abstract
results from other investigations. Relate 3. Introduction: Present a brief description
the results to the study’s purpose. of the subject addressed in the clinical
Avoid making conclusions that are case, the importance of it and the
not supported. This is not a literature presentation’s organization The text’s
review. Don’t repeat the data from citations must be in APA 5th edition
previous sections. Indicate conclusions format. (http://www.puc.cl/sw_educ/
derived from the discussion. Propose gnosis/citas/citas.htm).
recommendations when pertinent. 4. Clinical Case: Describe the clinical
g. Thanks: in this section gratefulness is situation in an organized manner,
expressed to those people or institutions avoiding irrelevant information. Do not
that contributed to the research. make commentaries.
5. Discussion: Establish an analysis of
Literature Reviews: the more relevant aspects of the clinical
1. Title and authors case with literature back up. Highlight
2. Synthesis and Abstract only those aspects that are worthy of
3. Introduction: Present a brief description analysis. Establish recommendations
of the theme to be reviewed, the when it’s pertinent.
importance of it, the bibliographic
review’s objectives and its organization Projects or Intervention Programs:
in the text. 1. Title and authors
4. Text’s Body: Here it is appropriate to 2. Synthesis and Abstract
develop the review of the subject as 3. Introduction: Present a brief description
is. Indicate appropriate title according of the foundation of the project or
to the organization established in the program intervention, based on the
introduction. Consider an updated literature, and the support for carrying
literature review in every one of the out said project, its purpose and
indicated topics, avoiding extended objectives.
delivery of previously published 4. Body of the Project or program: Present
information which can be resolved the public objective, the project’s
through the citation of the original phases, the methods to be used,
source. It is requested that only evaluation system. These aspects must
primary sources of information be be backed up by the bibliography.
cited, and only in exceptional cases 5. Conclusions: point out the proposed
secondary sources. Specify when there intervention’s contribution, remarkable
is discrepancy between consulted aspects, recommendations.
sources. The text citations must be 6. Thanks: in this section gratefulness is
made according to the APA format 5th expressed to those people or institutions
edition. (http://www.puc.cl/sw_educ/ that contributed to the research.
gnosis/citas/citas.htm).
5. Conclusion: briefly point out highlighted BIBLIOGRAPHIC REFERENCES
aspects of the review, offering All sent works must include references
recommendations when appropriate. according to the APA system 5th edition. The

125
bibliographic reference must only include Acevedo, I. (2002) Aspectos éticos en
those authors mentioned in the text. (http:// la Investigación científica. Ciencia
www.puc.cl/sw_educ/gnosis/citas/citas.htm). y enfermería, 8, 15-18. Recuperado
Agosto 15, 2002, de Base de datos
Examples: Scielo.
e. Thesis.
A. In relation to the type of references Last name, N., Last name, N. and Last
a. Periodic publications (includes name, N. (Publication year) Title of the
magazines articles, among others) thesis. No published Thesis, University,
Last name, N., Last name, N. and Last City, Country.
name, N. (Publication year). Title of the Mena, D. y Murillo, M.(2000). Familiares
article. Title of the magazine, xx, xxx- de esquizofrénicos: vivencias del día a
xxx. día. Tesis de Licenciatura no publicada,
Cianelli, R y Ferrer, L. (2001) Análisis Pontificia Universidad Católica,
de Concepto: Una estrategia para Santiago, Chile.
desarrollar conocimiento en enfermería.
Revista Horizonte de Enfermería, 12, B. In relation to the placing of the
46-52. bibliographic references:
b. Non periodic Publications (includes The bibliographic references must be in
books, monographs, handbooks, alphabetic order.
audiovisual material)
Last name, N., Last name, N. and Last
name, N. (Publication year). Title of the
work. Publication place: Editor.
Fernández, P., Caballero, E. y Lira, M.T.
(1999) Problemas de Salud Infantil:
Intervención de Enfermería. Santiago:
Ediciones Universidad Católica de
Chile.
c. Part of a non periodic publication
(includes book’s chapter)
Last name, N., Last name, N. and Last
name, N. (Publication year). Title of the
Chapter. In A. Editor, B, Editor and C,
Editor (Eds.), Book’s title (pp.xxx-xxx).
Publication place: Editor.
Herrera, L.M y Cantwell, M. (1999).
Manejo de los principales problemas
de lactancia. En P. Fernández, E.
Caballero y M.T. Lira. (Eds.) Problemas
de Salud Infantil: Intervención de
Enfermería (pp.115-130). Santiago:
Ediciones Universidad Católica de
Chile.
d. Periodic Publications on line.
Last name, N., Last name, N. and Last
name, N. (Publication year). Title of
the article. Title of the magazine, xx,
xxx-xxx. Retrieved month day, year,
source.

126
REVISTA HORIZONTE DE ENFERMERÍA
LISTA DE CHEQUEO

( ) Se señala la sección de la revista en la cual debe ser publicado el artículo (Investiga-


ción, revisión de literatura, etc.).

( ) Se adjuntan 4 copias impresas y un disquete o CD con el artículo.

( ) Se adjunta carta de solicitud de publicación, declaración de autoría y lista de chequeo.

( ) La extensión no es mayor a 20 páginas.

( ) El artículo se encuentra escrito en papel tamaño carta, por una cara, a doble espacio,
con margen de 3 cm en los cuatro bordes y letra Times New Roman # 12

( ) Se incluye el título en español y en inglés.

( ) Se señalan los nombres y apellidos de los autores, título profesional, grados académi-
cos, lugar de trabajo.

( ) Se señala el autor con el cual se establecerá correspondencia, con la dirección postal,


e-mail y teléfono de contacto.

( ) Se incluye al pie de página la fuente de financiamiento y/o agradecimientos cuando


corresponde.

( ) El resumen contiene un máximo de 250 palabras, en espacio simple con 4 palabras cla-
ve, de acuerdo a la lista de descriptores en ciencias de la salud (DECS) de BIREME.

( ) El abstract corresponde a la traducción del resumen, con las palabras clave corres-
pondientes.

( ) El artículo fue organizado de acuerdo a las Normas de la Revista

( ) Las figuras, tablas, gráficos se envían en las páginas finales y separadas del artículo.

( ) Las citas en texto se encuentran de acuerdo a la norma APA 5ª edición.

( ) Las referencias bibliográficas se encuentran de acuerdo al formato APA 5ª edición.

( ) Las referencias bibliográficas consideran solo aquellas fuentes citadas en el texto.

127
REVISTA HORIZONTE DE ENFERMERÍA
DECLARACIÓN DE AUTORÍA

Por intermedio de esta declaración, se señala que el artículo titulado: ___________________


__________________________________________________________________________ es
un trabajo original, que no ha sido ni será enviado a otra revista u otro medio para ser publicado.
Los autores señalan haber contribuido directamente al contenido del manuscrito y por tanto se
hacen públicamente responsables de la información contenida en él. Se explicita que no existe
conflicto de interés en este artículo, y si lo hay, será explicado en la primera página del artículo,
al momento de señalar la fuente de financiamiento.

Esta declaración es firmada por todos los autores del artículo, señalando la letra correspon-
diente al tipo de participación que tuvo cada uno de ellos.

Participación:
a. Concepción de la idea
b. Diseño del trabajo
c. Recolección de datos
d. Análisis de datos
e. Redacción del artículo
f. Revisión crítica del artículo
g. Asesoría estadística
h. Otras (definir qué tipo de contribución)

Nombre y firma del autor Participación

129
REVISTA HORIZONTE DE ENFERMERÍA
SUSCRIPCIÓN

Costo de Suscripción

ESTUDIANTE PROFESIONAL INSTITUCIÓN


(PRE Y POSTGRADO)

Nacional $5.000 $7.000 $16.000

América Latina y el US$ 15.00 US$ 20.00 US$ 25.00


Caribe

Otros países US$ 20.00 US$ 25.00 US$ 30.00

La suscripción por dos años considera el envío de un número anual.

Forma de pago

1. Deposite un cheque en la cuenta corriente correspondiente.

Nacional:
Dentro del país el depósito debe realizarse a nombre de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Las
alternativas de cuentas bancarias son:
- Banco Santander. Cuenta Nº 08-0104190-8.
- Banco Corp-Banca. Cuenta Nº 1402656-8.

Internacional:
Desde fuera de Chile, deposite en cualquier sucursal del BANCO CITIBANK de su país, según lo si-
guiente
Bank: Citibank
Beneficiary: Pontificia Universidad Católica de Chile
Adress: 111 Wall Street, New York - N.Y.
Account: 36996989
ABA: 021000089
Swift Code: CITIUS33

2. Enviar el comprobante de depósito junto con el boletín de suscripción por alguno de los siguientes medios.

* Al correo electrónico revistahorizonte@uc.cl como archivo attach


* Por fax, al número: (56) (2) 3547025.

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