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Velocidades del agua

Desde un punto de vista cualitativo y cuantitativo, la utilización del agua es una


de las preocupaciones constantes de la acuicultura ya que condiciona a la vez la
elección de los enclaves de cultivo y de las especies explotadas, el diseño de las
instalaciones acuícolas presta escasa atención a la capacidad de controlar la
velocidad del agua en los tanques, que es el factor básico que condiciona la
actividad natatoria de la mayoría de especies (Alzieu, 1991).
La distribución de velocidades en el estanque es un factor importante en
términos de tiempos de mezcla y su homogeneidad. Existe una interrelación
entre velocidad del agua y actividad natatoria de los peces. Las velocidades del
agua y su distribución en el estanque de cultivo influyen en la salud de los peces,
el tono muscular, la respiración e incluso las zonas donde los peces se ubiquen,
por lo tanto, mantener sus valores dentro de rangos adecuados mejorará el
bienestar general de los peces y la calidad del producto final.

La velocidad del agua para lograr mínimos tiempos de mezcla debe ser lo mayor
posible pero restringida para evitar la fatiga física de los peces. Por otra parte se
requiere que la velocidad en el estanque supere los valores mínimos de tal
manera que permita a los peces realizar la cantidad de ejercicio necesario para
mantener la salud, el tono muscular y la respiración. De este modo las
velocidades óptimas de rotación dependerán de la especie y tamaño de los
peces cultivados.

Las velocidades mínimas y máximas recomendables para el cultivo de


salmónidos según su tamaño, desde 1 a 40 cm de longitud.
En general, el caudal de recirculación de un tanque viene determinado, en
primera instancia, por el consumo de oxígeno de la biomasa. En el caso de los
tanques rectangulares, para ajustar la velocidad del agua a los requerimientos
de la especie cultivada deberemos calcular:
1) el caudal de recirculación en función de la biomasa que vamos a introducir.

2) el volumen de agua del tanque en función de la biomasa admisible por unidad


de volumen.

3) la longitud y la sección transversal del tanque. En este punto debemos tener


en cuenta que la velocidad aumentará al aumentar la longitud y disminuir la
sección transversal del tanque.
En el caso de los tanques circulares y de los multivórtices la masa del agua del
tanque girará alrededor del eje central del vórtice, con velocidades tangenciales
que dependerán del impulso aplicado por el chorro de agua de entrada. Para un
mismo caudal de entrada, el impulso variará al variar el diámetro y la dirección
del orificio de entrada. Esto nos permite modificar las velocidades en el interior
del tanque variando las características de la entrada de agua. En cuanto a la
distribución de velocidades en el interior del tanque, éstas cambiaran de forma
muy sensible en función del emplazamiento de la salida de agua.

En la figura se muestra la distribución de las velocidades en dos tanques con


idéntico dispositivo de entrada. Uno de ellos con la salida en el centro y el otro
con la salida a través de la pared del tanque. Se observa que en el primer caso
las velocidades tangenciales en la parte interior del tanque aumentan de forma
muy considerable (Baradad Oca & Masalo Llora, 2001)

Para conocer el caudal es necesario calcular la velocidad de la corriente del


agua, el uso de flotadores es una técnica que determina necesariamente las
velocidades superficiales del agua, que son las únicas posibles de medir con el
uso de materiales sencillos, cuya recuperación no sea necesaria. Suelen ser
utilizados para este fin frascos tapados con un corcho y llenos parcialmente de
agua, de forma que quede sumergida un gran parte de ellos y que emerjan lo
suficiente para ser fácilmente visibles de la orilla, generalmente se necesitan
varios flotadores para repetir la prueba cuantas veces sea necesaria, con el fin
de obtener un promedio, después de eliminar todos los resultados excelsamente
dispares. El paso de estos flotadores deberá estar cronometrado entre dos
transversales normales del rio, lo suficiente mente alejadas entre si, como para
que los tiempos invertidos en el trayecto sean del orden de 30 a 130 segundos,
procurando que esta longitud elegida la corriente sea uniforme y el tramo del rio
recto. La velocidad de superficie es siempre ligeramente superior a la que
presenta el agua más profunda por lo que se estima que la velocidad media en
la vertical de un punto, es equivalente a 0,85, siempre que la profundidad sea
menor de dos metros (Blanco Cochafeiro , 1995).

Bibliografía
Alzieu, C. (1991). El agua. Medio de cultivo. En G. Barnane, Acuicultura Vol. 1 (págs. 3-7).
Barcelona-España: Omega.

Baradad Oca, J., & Masalo Llora, I. (26 de 11 de 2001). IPAC.ACUICULTURA. Obtenido de
DISEÑO DE TANQUES EN ACUICULTURA INTENSIVA:
http://www.ipacuicultura.com/noticias/divulgacion/18496/diseo_de_tanques_en_acu
icultura_intensiva.html

Blanco Cochafeiro , M. (1995). La instalacion piscicola. En M. C. Blanco Cochafeiro, La trucha,


Cria industrial (págs. 175-177). Madrid-España: Mundi Prensa.

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