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Dress for success: ¿en quién impacta tu ropa?

Lo que llevas puesto también afecta tus pensamientos y tus habilidades de negociación (y
hasta tus niveles hormonales).

Dice el dicho: “Vístete para el puesto que deseas, no para el que tienes”. Ese es el significado
de la buena impresión. Pero la ropa que usamos y la forma como nos arreglamos no sólo
impacta en quienes nos ven. La autopercepción y nuestro desempeño físico y mental también
están en juego.

Un estudio de Social Psychological and Personality Science del 2015 encontró que cuando los
hombres que realizaron algunas pruebas usaron ropa formal mejoraron su pensamiento
abstracto —base de la creatividad y las estrategias de largo plazo— frente a cuando usaron
ropa informal.

Los resultados están ligados a la sensación de poder propio. La psicóloga americana Amy
Cuddy lo explica en el TED Talk más visto de la historia: hay una relación entre nuestra
postura corporal y cómo nos adueñamos del ‘espacio’ en el que nos desenvolvemos. Cómo te
vistes, cómo te arreglas y cómo te paras potencian tu confianza, la seguridad en ti mismo y,
por ende, tu desempeño.

Otros estudios e investigaciones publicados en Journal of Experimental Pychology y Journal of


Sport and Exercise Psychology mostraron que:

 Al dividir a los sujetos en estudio en dos grupos, unos con terno y otros con ropa
deportiva, los primeros ejercieron mayor dominio, negociaron mejores tratos e incluso
presentaron niveles de testosterona más altos.
 Al dividir a los sujetos con bata blanca en dos grupos, y decirle al primero que eran
guardapolvos de pintores y al segundo, que eran batas de doctores, el segundo grupo
estuvo más enfocado en las tareas y fue más cuidadoso con los detalles

 En las Olimpiadas los atletas de deportes de combate y fuerza que usaron camisetas
rojas, en lugar de azules, tuvieron más fuerza y mayor frecuencia cardiaca.

 A mujeres que usan anteojos de sol caros, cuando se les dijo que eran falsos, tendieron a
hacer trampa y a tener un comportamiento menos ético.

 Los alumnos de secundaria mejor vestidos y arreglados causaron una mejor imagen
académica entre sus compañeros y maestros.

 Los asistentes académicos y jefes de práctica universitarios con apariencia más formal
fueron percibidos como más inteligentes e interesantes que sus pares.

Es inevitable que nos formemos una opinión de los demás por cómo lucen y que ellos se
formen una opinión sobre nosotros por lo mismo. Sólo los afortunados que conocen bien las
reglas, logran quebrarlas con éxito y destacar positivamente por su individualidad en medio
del riesgo que implica.

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