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 E – 27-040-A-30

Práctica clínica
y electroneuromiográfica
de las lesiones nerviosas periféricas
de los miembros inferiores
F. Michel, L. Tatu, A. Cosson, S. Nollet

Una lesión del sistema nervioso periférico, en particular en los miembros inferiores, puede
afectar a los pies y, de un modo más general, a la marcha. El electroneuromiograma
(ENMG) es la prueba complementaria principal para la exploración del sistema ner-
vioso periférico. Algunos conocimientos anatómicos y fisiológicos son indispensables para
interpretar los resultados y las conclusiones de esta prueba. Un ENMG raramente está
contraindicado, y en algunos casos no está indicado. Si se trata de una lesión del sistema
nervioso periférico, la exploración física permite formular una hipótesis sobre el meca-
nismo lesional, orientando la investigación etiológica y la conducta terapéutica inicial.
El ENMG, como complemento de la exploración física, es útil para confirmar el origen
periférico y precisar el mecanismo y el sitio lesional, así como la gravedad de la lesión,
de la que depende el pronóstico de recuperación. En este artículo, los principales tron-
cos nerviosos del miembro inferior se describen en sus planos anatómico y funcional. Se
detallarán los sitios lesionales más frecuentes, así como las manifestaciones clínicas y la
exploración ENMG específica de estos troncos nerviosos.
© 2017 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: ENMG; Electroneuromiograma; Miembros inferiores; Neuropatías;


Electrofisiología; Diagnóstico; Sistema nervioso periférico; SNP

Plan mecanismo (lesión axonal, mielínica o mixta) y la gra-


vedad. También es útil para seguir la evolución, ya sea en
■ Introducción 1 el sentido de la recuperación o de la agravación. En la gran
mayoría de los casos, el ENMG no permite identificar la
■ Conceptos básicos de electrofisiología 1 etiología de las lesiones nerviosas. Sin embargo, al precisar
■ Organización anatómica del sistema nervioso la localización y el mecanismo lesional, permite orientar
periférico 3 la búsqueda etiológica.
■ Realización práctica del examen ENMG 4 En este artículo se analiza el lugar del ENMG para

la evaluación de las lesiones neurológicas periféricas del
Nervio obturador 6
miembro inferior. Sólo se detallan las dos técnicas princi-
■ Nervio femoral 7 pales de ENMG: la neurografía, o estudio de la conducción
■ Nervio isquiático 8 nerviosa, y la electromiografía, o estudio de la activación
■ Nervio peroneo común 8 muscular. Con un propósito didáctico, se estudiarán más
específicamente las lesiones que afectan al pie y a la mar-
■ Nervio tibial 11 cha de forma directa o indirecta.
Antes de presentar las distintas lesiones nerviosas peri-
féricas del miembro inferior y su exploración ENMG, se
mencionan algunos conceptos básicos fundamentales.
 Introducción
El estudio electroneuromiográfico (ENMG) corresponde
a la exploración electrofisiológica del sistema nervioso
 Conceptos básicos
periférico (SNP). Es una extensión de la exploración física de electrofisiología
y permite confirmar o refutar si la presunta lesión de un
elemento nervioso periférico es el origen de los síntomas Un nervio periférico está constituido por una gran
que tiene un paciente. Si se confirma la lesión nerviosa cantidad de axones dispuestos de forma paralela, cuyo
periférica, el ENMG permite precisar la localización, el cuerpo celular se sitúa en la médula espinal para las fibras

EMC - Podología 1
Volume 19 > n◦ 1 > febrero 2017
http://dx.doi.org/10.1016/S1762-827X(16)82632-2
E – 27-040-A-30  Práctica clínica y electroneuromiográfica de las lesiones nerviosas periféricas de los miembros inferiores

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A

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Figura 1. Organización esquemática del sistema nervioso peri-


férico. 1. Raíz dorsal; 2. raíz ventral; 3. fascículos nerviosos; 4,
unión neuromuscular; 5. ganglio espinal; 6. ramo dorsal del ner-
vio espinal; 7. plexo; 8. ramo ventral del nervio espinal; 9. tronco
nervioso; 10. perineuro; 11. epineuro.
C
Figura 3. Ejemplo de realización de un electroneuromio-
1 grama.
A. Estimulación distal (en el tobillo).
B. Estimulación proximal (en el cuello del peroné).
C. Pantalla de resultados. d1: Distancia entre el sitio de estimula-
4
ción distal y el sitio de recepción; d2: distancia entre los sitios de
estimulación distal y proximal; t1: tiempo que tarda el impulso
2 nervioso entre el sitio de estimulación distal y el sitio de regis-
tro; t2: tiempo que tarda el impulso nervioso para recorrer la
distancia entre los sitios de estimulación distal y proximal; Amp:
3 5 amplitud de las respuestas (en milivoltios); VCN: velocidad de
conducción nerviosa (= d2/t2 en metros/segundo).
Figura 2. Célula nerviosa periférica. 1. Dendrita; 2. cuerpo
celular; 3. axón; 4. vaina de mielina; 5. impulso nervioso.
desde la unión neuromuscular hacia la médula espinal
motoras y en el ganglio espinal para las fibras sensitivas para las motoneuronas y desde la médula hacia los recep-
(Fig. 1). El axón es la parte más larga de la célula nerviosa tores periféricos para las neuronas sensitivas.
periférica y puede alcanzar una longitud superior a 1 m El impulso nervioso transmitido por un nervio perifé-
en los miembros inferiores [1] . rico es la suma de los potenciales de acción transmitidos
La información es transmitida por los nervios perifé- por el conjunto de los axones que forman este nervio.
ricos como un impulso nervioso. Éste corresponde a la Por lo tanto, su amplitud es directamente proporcional al
suma de los potenciales de acción de los distintos axones número de axones que constituyen el nervio. Una dismi-
estimulados dentro de un nervio periférico. Estos datos nución del número de axones induce una disminución
son codificados en función de su amplitud (proporcional de la amplitud del impulso nervioso: se habla de pérdida
al número de axones reclutados) y de su frecuencia de axonal. Cuanto mayor es ésta, más baja es la amplitud de
repetición. Los nervios periféricos sólo tienen un papel de la respuesta. Puede tratarse de una pérdida axonal motora
transmisión de los impulsos nerviosos. De manera fisio- (neuropatía axonal motora), sensitiva (neuropatía axonal
lógica, esta transmisión es unidireccional: la estimulación sensitiva) o mixta (neuropatía axonal sensitivomotora).
se inicia en un extremo del axón y se propaga hasta el otro La velocidad de transmisión de los potenciales de acción
extremo, sin que sea posible su retroceso [2] . a lo largo de los axones está determinada por el diá-
La activación de las células nerviosas motoras perifé- metro del axón y la presencia de una vaina de mielina,
ricas (motoneurona periférica) se produce en la médula que forma una cubierta aislante alrededor de los axones
espinal por las células nerviosas centrales (motoneurona (Fig. 2) y permite acelerar la velocidad de transmisión de
central). Esta activación induce un potencial de acción los potenciales de acción. Así, una lesión de la mielina
que se propaga por el axón hacia la unión neuromuscular induce una disminución de la velocidad de conducción
(Fig. 2). nerviosa (neuropatía mielínica motora y/o sensitiva) [2, 3] .
El impulso nervioso sensitivo es desencadenado por la En conclusión, la amplitud de las respuestas en ENMG
activación de receptores situados en la piel, los tendones proporciona datos sobre el estado funcional de los axones,
y las articulaciones, y se propaga hacia la médula espi- mientras que la velocidad de propagación de los impulsos
nal. La transmisión se denomina ortodrómica cuando el nerviosos refleja el estado de la mielina (Fig. 3). En ambos
impulso nervioso sigue el sentido fisiológico, de la médula casos, el paciente puede tener síntomas idénticos.
espinal hasta la unión neuromuscular para las motoneu- Un nervio periférico puede lesionarse por mecanismos
ronas, y de la periferia hasta la médula espinal para las tóxicos o metabólicos (alcohol, medicamentos, urea en el
neuronas sensitivas. La transmisión se califica de antidró- paciente con insuficiencia renal, glucosa en el diabético,
mica cuando sigue una dirección contraria a la normal, etc.), inflamatorios (anticuerpos que atacan la mielina o

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1 T12

L1
A 2
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1 L5
2 S1
B 3
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Figura 4. Mecanismos lesionales del nervio periférico.


A. Neuropraxia. 1. Epineuro; 2. axón; 3. vaina de mielina.
B. Axonotmesis. Figura 5. Esquematización del plexo lumbosacro. 1. nervio
C. Neurotmesis. iliohipogástrico; 2. nervio ilioinguinal; 3. nervio glúteo superior;
4. nervio glúteo inferior; 5. nervio cutáneo lateral del muslo; 6.
el axón), isquémicos o mecánicos (sección, estiramiento,
nervio femoral; 7. nervio isquiático; 8. nervio cutáneo posterior
compresión) [4] . En todos estos casos, la gravedad depende
del muslo; 9. ramo femoral del nervio genitofemoral; 10. nervio
de la intensidad de la lesión axonal (Fig. 4). Al respecto, en
obturador; 11. nervio del músculo elevador del ano; 12. nervio
caso de afectación únicamente mielínica (neuropraxia), la
pudendo; 13. ramo genital del nervio genitofemoral.
mielina se regenera con rapidez y la recuperación clínica
puede llevarse a cabo en algunas semanas. Al contrario,
en caso de lesión axonal, la recuperación es más larga y geo. Tras su salida del conducto vertebral, cada nervio se
puede tardar más de 1 año. Hay que esperar la regenera- divide en una rama ventral y otra dorsal. La rama dorsal
ción axonal, cuya velocidad se calcula en 0,6-1 mm por inerva de manera segmentaria los músculos paravertebra-
día. Si se rompe la continuidad de la vaina (neurotmesis), les y el territorio cutáneo correspondiente. La rama ventral
la regeneración axonal es imposible, y sólo la hace posible participa en la formación de los plexos para el miem-
una sutura o un injerto nervioso. Al contrario, en caso de bro superior, el miembro inferior y la pelvis menor. En la
lesión axonal sin ruptura de la vaina externa (axonotme- región torácica, la rama ventral del nervio espinal forma
sis), la regeneración axonal es más fácil y las posibilidades el nervio intercostal. Así, las ramas ventrales de los nervios
de recuperación son mayores. Desde luego, los mecanis- espinales y sacros (de L1 a S2) se unen para formar el plexo
mos mielínicos y axonales pueden asociarse en un mismo lumbosacro (Fig. 5), que asegura la inervación motora y
paciente [5, 6] . sensitiva del miembro inferior. Después de esta unión se
constituyen los troncos nerviosos o nervios propiamente
dichos. Los troncos nerviosos de los plexos están forma-
 Organización anatómica dos por axones que proceden de raíces nerviosas distintas.
Por su parte, los axones procedentes de una misma raíz
del sistema nervioso nerviosa se distribuyen en troncos nervioso distintos [1] .
periférico El conjunto de los músculos inervados por un tronco
nervioso periférico corresponde a su territorio de iner-
El nervio periférico puede compararse con un cable eléc- vación motora. Este último es constante en una misma
trico formado por miles de fibras paralelas y envueltas especie animal. Lo mismo sucede con relación al territo-
por una vaina (Fig. 1). Esta vaina, denominada epineuro, rio de inervación sensitiva correspondiente al territorio
está formada por células conjuntivas y fibras de colá- cutáneo de un tronco nervioso (Fig. 6). En caso de lesión
geno. Dentro de la vaina, los axones se agrupan en de un tronco nervioso, esta sistematización permite pre-
fascículos, también rodeados por una vaina denominada decir el déficit sensitivo y motor del paciente. Cuanto más
perineuro. Esta organización en fascículos corresponde al distal es la lesión de un tronco nervioso, más parcial es el
agrupamiento de los axones según su función (sensitiva o déficit sensitivo y motor. Dado que los fascículos que salen
motora) y su territorio de distribución final. En este sen- del tronco nervioso proximal a la lesión están respetados,
tido, un nervio asegura la inervación motora de varios siguen asegurando la inervación de su territorio.
músculos. Los axones que inervan el mismo músculo se En el plano anatómico, también es posible clasificar
agrupan en el mismo fascículo. La mayoría de los ner- las lesiones del SNP. Una radiculopatía se define como la
vios periféricos son mixtos, es decir, están constituidos lesión de una raíz nerviosa. Esta última puede ser sensi-
por fibras sensitivas y motoras [1] . tiva, motora o mixta. En caso de lesión nerviosa radicular,
En el plano anatómico, el SNP se inicia en el nervio el paciente presenta un dolor en el trayecto del nervio
espinal, que sale de la columna vertebral por un agujero que termina en el territorio sensitivo de la raíz afectada
intervertebral y está formado por dos raíces (Fig. 1). La (Fig. 7). El dolor puede interrumpirse en su parte proxi-
raíz ventral transporta los axones motores, y la raíz dor- mal o en su parte distal. Si la lesión nerviosa es más grave,
sal está constituida por axones sensitivos. A cada sector puede asociarse un déficit motor de los músculos que per-
vertebral le corresponde un par de nervios espinales. Exis- tenecen al territorio de inervación motora de esta raíz.
ten 31 pares de nervios espinales: ocho pares cervicales, La etiología más frecuente es el conflicto mecánico de la
12 torácicos, cinco lumbares, cinco sacros y uno coccí- raíz (hernia discal, artrosis, etc.). La anamnesis se orienta a

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L2 L1
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2 S2
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4 11 4
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L5 L5

5 L4

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5 15
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Figura 6. Territorios sensitivos tronculares. 1. Ramo cutáneo


lateral del nervio iliohipogástrico; 2. nervio cutáneo lateral del
muslo; 3. nervio cutáneo medial e intermedio del muslo (nervio
femoral); 4. nervio cutáneo sural lateral (nervio peroneo común);
5. nervio sural; 6. ramo femoral del nervio genitofemoral; 7.
nervio ilioinguinal; 8. ramo genital del nervio genitofemoral o
del nervio iliohipogástrico; 9. nervio cutáneo medial del muslo Figura 7. Territorios sensitivos radiculares.
(nervio femoral); 10. nervio obturador; 11. nervio safeno (nervio
femoral); 12. nervio peroneo superficial (nervio peroneo común); radicular o troncular de los síntomas comunicados por
13. nervio peroneo profundo (nervio peroneo común); 14. ner- el paciente, sobre todo en presencia de dolores que se
vio cutáneo posterior del muslo; 15. nervios plantares medial y interrumpen y sólo afectan a la parte distal del territo-
lateral (nervio tibial). rio nervioso. Es en este caso que el ENMG adquiere toda
su importancia.
hacer describir al paciente el trayecto doloroso. Éste puede
reproducirse con la maniobra de Lasègue al hacer flexio-
nar sobre la pelvis el miembro inferior extendido de forma
pasiva. Se busca un déficit sensitivo y/o motor limitado
 Realización práctica
al territorio radicular. Los reflejos osteotendinosos pue- del examen ENMG
den estar disminuidos o abolidos de forma selectiva. En
caso de lesión extensa, pueden estar afectadas varias raíces Las exploraciones ENMG generalmente son efectuadas
nerviosas, lo que define una lesión multirradicular. por neurólogos, reumatólogos o un especialista en medi-
La lesión de un tronco nervioso define una mono- cina física y rehabilitación. Las técnicas utilizadas en la
neuropatía. Una polineuropatía es una lesión bilateral exploración ENMG se adaptan a las manifestaciones clí-
y simétrica de los troncos nerviosos. La polineuropatía nicas y a la indicación del examen. El aparato de ENMG
«dependiente de la longitud de las fibras» comienza en consiste en un ordenador común conectado a un esti-
los dedos de los pies y avanza de forma ascendente por mulador eléctrico y a un sistema de registro de datos
los miembros inferiores. Después afecta a los dedos de (Fig. 8). El paciente se instala en una cama o un sillón.
las manos y asciende por los miembros superiores. Los Para las técnicas de electromiografía de detección se usa
pacientes describen parestesias de los pies que pueden un electrodo de aguja intramuscular (Fig. 9) que registra
extenderse a las piernas. Puede asociarse también un défi- la actividad de las fibras musculares. La aguja se inserta
cit motor de los músculos distales. Si la polineuropatía en un músculo en reposo y se le solicita al paciente que
progresa, los trastornos sensitivos y motores tienden a efectúe progresivamente una contracción muscular hasta
agravarse y afectar a territorios cada vez más proximales su intensidad máxima. Se exploran varios músculos suce-
(evolución ascendente de los síntomas). En la explora- sivamente. Esta técnica permite analizar al mismo tiempo
ción física se detecta la disminución o abolición de los las fibras musculares (búsqueda de miopatía) y la acti-
reflejos osteotendinosos, un déficit sensitivo distal cuya vación muscular por el nervio periférico (compromiso
extensión es importante precisar, y, en las formas más de las motoneuronas). La exploración electromiográfica
avanzadas, un déficit motor distal. Estos signos son bila- determina el origen muscular o neuropático de un défi-
terales y simétricos. Las etiologías son numerosas, pero cit motor. Esta técnica se analiza de manera cualitativa y
las dos más frecuentes son la diabetes y la intoxicación depende de la tolerancia del paciente y de la experien-
alcohólica crónica [4] . cia del operador [3] . En las lesiones neurógenas periféricas,
La polirradiculoneuropatía corresponde a una polineu- cuando al paciente se le pide que contraiga el músculo
ropatía asociada a radiculopatías. La plexopatía define la explorado, se registran trazados de tipo neurógeno, es
lesión del plexo. Debido al cruce de las neurofibras en decir, pobre en potencial de unidad motora (PUM), que
el plexo lumbosacro, puede ser difícil precisar el origen indica una falta de axón nervioso motor. Si esta lesión

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es reciente, en reposo no se registra ninguna actividad ción muscular voluntaria. Al contrario, en caso de parálisis
muscular. En cambio, entre algunos días y 3 semanas, de origen periférico sin pérdida axonal (neuropraxia), se
en función del alejamiento del músculo en estudio con registran trazados de tipo neurógeno pero sin actividad
relación al sitio de la lesión nerviosa, en reposo se regis- muscular espontánea de reposo (Fig. 10). En caso de axo-
tran potenciales de actividad muscular espontánea como notmesis, ante una posible regeneración axonal se observa
indicio de una degeneración de los axones lesionados inicialmente una desaparición de los potenciales espon-
(por axonotmesis o neurotmesis). Así, la búsqueda de táneos de actividad muscular de reposo, seguida de la
estos potenciales espontáneos de actividad muscular en aparición de PUM mal sincronizados y de baja amplitud.
reposo permite distinguir una lesión reciente (sin acti- Estos últimos, también denominados PUM nacientes o
vidad espontánea de reposo) o semirreciente (presencia PUM de reinervación, no permiten una contracción mus-
de potenciales espontáneos de actividad muscular). En cular suficientemente eficaz como para ser comprobada
caso de degeneración del conjunto de los axones motores en el aspecto clínico. En cambio, expresan una reinerva-
que inervan el músculo explorado, se registra una activi- ción en desarrollo que debería manifestarse con rapidez
dad espontánea de reposo muy abundante, pero no hay por una contracción muscular eficaz.
ningún PUM cuando se le solicita al paciente una contrac- Las técnicas de electroestimulación se basan en un
estimulador eléctrico y un par de electrodos de registro
pegados a la piel del paciente (Fig. 9). En caso de estu-
dio del contingente motor de un nervio periférico, el
registro se efectúa a la altura de un músculo inervado
por este nervio. Para el estudio del contingente sensitivo,
los electrodos de registro se colocan directamente sobre
su trayecto o a nivel de su territorio sensitivo. La inten-
sidad de la estimulación eléctrica se aumenta de forma
progresiva hasta la obtención de una respuesta de ampli-
tud máxima. El paciente percibe la estimulación, pero
las intensidades son de baja amplitud, en general entre
5-20 mA. En todos los aparatos de ENMG, el límite de
la intensidad máxima de estimulación es de 100 mA.
Sólo pueden estimularse los nervios superficiales. En este
sentido, la corriente eléctrica es atenuada por los tejidos
subcutáneos. Si el nervio es demasiado profundo, la esti-
mulación eléctrica, incluso emitida con una intensidad
máxima, no puede alcanzarlo [3] .
El ENMG proporciona diversas respuestas:
• confirmación del origen nervioso periférico de los sín-
tomas;
• determinación del mecanismo fisiopatológico causal
(mielínico y/o axonal);
Figura 8. Aparato para electroneuromiograma. • localización de la lesión nerviosa periférica (raíz, tronco
nervioso, parte proximal o distal, etc.);
• evaluación de la gravedad de la afectación del SNP
(importancia de la pérdida axonal);
• evaluación del pronóstico de recuperación.
1 En general, el ENMG no revela la causa de la afectación
del SNP, pero orienta la búsqueda etiológica. Por ejemplo,
en caso de traumatismo de un tronco nervioso, el ENMG
2 precisa la localización y la gravedad de la lesión troncu-
lar. En cambio, el origen de la lesión debe buscarse en la
anamnesis (sección, compresión, estiramiento, etc.).
3 Las contraindicaciones de un ENMG son escasas, y la
mayoría surge del sentido común. El examen no puede
efectuarse ante un obstáculo que impide el acceso a
los sitios de estimulación o de registro (heridas lacera-
das, apósitos, yeso, etc.). La neurografía puede fallar en
caso de edema considerable de los miembros, ya que los
Figura 9. Material para electroneuromiograma. 1. Estimu- edemas aumentan la impedancia de los tejidos subcu-
lador; 2. electrodos-agujas intramusculares; 3. electrodos de táneos, impidiendo una estimulación nerviosa correcta.
registro para pegar a la piel. Lo mismo sucede con las cremas hidratantes, que, al

A B C
Figura 10. Trazados de electroneuromiograma (EMG).
A. Trazado EMG normal constituido por una multitud de potenciales de unidades motoras (PUM) de tamaño y morfología normales.
B. Trazado EMG de tipo neurógeno constituido por un solo PUM con una frecuencia elevada.
C. Trazado EMG de tipo miógeno constituido por una multitud de PUM (de morfología irregular y amplitud muy baja), demasiado rico
para una intensidad de contracción muscular entre mínima y moderada.

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L2 Figura 11. Distribución esquemática de los ramos del


nervio obturador.
L3
Nivel radicular
L4

Cavidad pélvica
(plexo lumbar)

Agujero obturador
Músculo obturador externo

Ramo posterior del Ramo anterior del


nervio obturador nervio obturador

Músculo pectíneo

Músculo aductor largo


Músculo aductor corto
Músculo aductor corto
Músculo aductor mayor Músculo grácil

Ramo sensitivo

crear una capa aislante entre la piel y el estimulador, del muslo. Esta deficiencia se presenta a menudo de
complican la neurografía. Además, en caso de inmovili- forma atenuada. Los pacientes refieren una dificultad para
zación de un segmento de miembro, el electromiograma mover los miembros inferiores, cruzar las piernas senta-
(EMG) de detección para estudiar la activación muscular dos o estabilizar la cadera en posición de pie. A algunos
voluntaria máxima resulta ininterpretable. De ser posible, pacientes les cuesta describir estas manifestaciones. Es
antes de una electromiografía de detección con electrodo- importante señalar que los músculos aductores contrala-
aguja intramuscular, los tratamientos anticoagulantes y terales son sinérgicos. Esto quiere decir que, para obtener
antitrombóticos deben interrumpirse debido al riesgo de una contracción muscular correcta, el paciente debe apre-
complicaciones potencialmente graves vinculadas a un tar ambos muslos al mismo tiempo. En caso de lesión
hematoma o una hemorragia. En caso de antecedente de grave, el reflejo osteotendinoso de los músculos aducto-
vaciamiento ganglionar proximal de un miembro, la elec- res (nivel radicular L3) puede estar abolido y rápidamente
tromiografía de detección sólo debe efectuarse en caso de se produce una atrofia muscular. Sin embargo, la atrofia
indicación formal. El EMG es un método poco invasivo y pocas veces es visible debido a que en esta zona la capa
las complicaciones son infrecuentes. Suele tolerarse bien, adiposa subcutánea es bastante abundante. Los signos
aunque en algunos casos puede reactivar los dolores de sensitivos ocupan un segundo plano, incluso pueden estar
manera transitoria. ausentes, y sólo conciernen a la cara medial del muslo
(Fig. 6). En cambio, los pacientes refieren con frecuencia
un dolor inespecífico en el pliegue de la ingle, que a veces
 Nervio obturador se irradia a la cara medial del muslo y se puede interpretar
como un dolor articular de la cadera. Genera entonces una
El nervio obturador es un nervio mixto sensitivomo- cojera de evitación, con el consiguiente error de deriva-
tor. Está constituido por axones procedentes de las raíces ción de los pacientes y la repetición de pruebas de imagen
lumbares L2 a L4 que se reúnen en el plexo lumbar, del de la cadera [8–12] .
cual este nervio es una de las ramas terminales. Su tra- Las lesiones del nervio obturador se producen en gene-
yecto inicial es intramuscular, en el músculo psoas, del ral en un contexto de patología nerviosa difusa (afectación
cual sale por la cara medial a nivel del proceso transverso asociada del plexo lumbosacro y/o del nervio femoral)
de la quinta vértebra lumbar. Luego sigue un trayecto ver- resultado de fracturas o de procesos compresivos en la pel-
tical, pasando por delante de la articulación sacroilíaca. vis. Si a los síntomas orientadores de una lesión del nervio
En la pelvis, su trayecto lo lleva hacia delante para unirse obturador se asocian un déficit o trastornos sensitivos que
al músculo obturador interno en la cara medial del hueso afectan a la cara anterior del muslo, hay que pensar en una
ilíaco, al que atraviesa por el agujero obturador. Se divide lesión nerviosa radicular L3 [9, 11, 12] .
entonces en dos ramas (anterior y posterior) que bajan Una lesión aislada del nervio obturador es infrecuente.
por la parte medial del muslo entre los músculos aducto- La mayoría de las veces se asocia a una lesión del nervio
res [1, 7, 8] . femoral y/o del plexo lumbosacro. El nervio puede estar
La rama anterior inerva los músculos pectíneo, aduc- comprimido en el agujero obturador. En atletas se han
tor largo, aductor corto y grácil, y da un ramo para la descrito casos de compresión entre los músculos aducto-
inervación sensitiva de la cara medial del muslo. El ramo res en la parte proximal del muslo. Las causas más típicas
posterior inerva los músculos aductores corto y mayor, de lesión del nervio obturador se detallan en el Cuadro
y da ramos sensitivos para las articulaciones de la cadera 1. Las complicaciones de una artroplastia de cadera for-
(Fig. 11). Cabe señalar que el fascículo inferior del aductor man parte de las causas más frecuentes. Se comprende
mayor frecuentemente está inervado por el nervio isquiá- que, ante un dolor de la ingle que aparece después de una
tico [1, 7, 9] . cirugía de cadera, las primeras hipótesis sean los dolores
La lesión del nervio obturador se expresa sobre todo posquirúrgicos y que el diagnóstico de lesión del nervio
por un déficit motor en la aducción y la rotación interna pueda retrasarse. Las otras causas frecuentes de lesión del

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nervio obturador son las complicaciones de un parto lateral. Durante su trayecto intrapélvico, el nervio femoral
difícil por vía baja, las cirugías pélvicas y las patologías da ramos colaterales, de los cuales los principales asegu-
ováricas (Cuadro 1). ran la inervación de los músculos ilíaco, psoas y pectíneo.
La exploración ENMG del nervio obturador es limitada, Corre entre los músculos ilíaco y psoas, para abandonar la
ya que debido a su trayecto profundo no es posible hacer pelvis pasando por debajo del ligamento inguinal (junto
un estudio neurográfico. Así, el examen del contingente a la arteria y la vena femorales). Rápidamente se divide
sensitivo es imposible. Sólo puede efectuarse la electro- en unos 10 ramos terminales. La mayoría de estos ramos
miografía de los músculos que inerva. En caso de lesión son motores e inervan los músculos del compartimento
del nervio obturador, se registran signos de desnervación anterior del muslo (músculos recto femoral, vasto medial,
de los músculos aductores. Es fundamental descartar los vasto lateral y vasto intermedio que constituyen las cua-
diagnósticos diferenciales (lesión nerviosa radicular L3 y, tro cabezas del cuádriceps, músculos sartorio y pectíneo).
sobre todo, lesión del plexo) explorando las cabezas mus- Algunos ramos terminales son sensitivos y aseguran la
culares del cuádriceps. También hay que tener en cuenta inervación de la cara anterior del muslo (ramos cutáneos
una posible inervación doble del aductor mayor por los mediales e intermedios del muslo) y de la cara medial de
nervios obturador e isquiático, que en ocasiones puede la pierna (nervio safeno) [1, 7, 8, 21] (Fig. 12).
explicar los sorprendentes resultados EMG en relación con Una lesión del nervio femoral provoca entonces un défi-
este músculo [9, 10] . cit motor proximal del miembro inferior, con un defecto
de flexión de la cadera y de extensión de la rodilla. En
ésta, el nervio femoral no es suplido por ningún otro ner-
 Nervio femoral vio. Ante una pérdida axonal considerable, en algunas
semanas se desarrolla una amiotrofia del compartimento
anterior del muslo. En caso de parálisis parcial, el paciente
El nervio femoral es un nervio mixto, sensitivo y motor,
describe un aflojamiento de la rodilla que puede provo-
cuyas neurofibras proceden de los niveles radiculares L2-
car caídas o dificultades en las escaleras, tanto para subir
L4. Se trata del ramo terminal más voluminoso del plexo
(déficit motor de flexión del muslo y de extensión de la
lumbar. Su trayecto inicial es intramuscular entre los dos
rodilla) como para bajar (déficit de bloqueo y aflojamiento
planos del músculo psoas, del que emerge por su borde
de la rodilla en extensión). El reflejo rotuliano está dismi-
Cuadro 1. nuido o abolido. El déficit motor suele estar en primera
Causas de lesión (aislada o no) del nervio obturador [8–20] . línea. Puede acompañarse de trastornos sensitivos como
hipoestesia y/o de disestesias de la cara anterior del muslo
Complicaciones de intervención quirúrgica en la articulación
y, en caso de lesión completa, de la cara medial de la
coxofemoral
rodilla y la pierna por lesión del nervio safeno (Fig. 6).
Complicaciones posquirúrgicas de intervención pélvica Este último, que no tiene función motora, puede estar
Patologías pélvicas (tumores, aneurisma de la arteria afectado de manera selectiva cuando pasa por el canal de
hipogástrica, procedimientos endovasculares en la arteria los aductores (en la cara medial de la rodilla). Es posible
femoral, endometriosis) la presencia de dolor en el pliegue inguinal y/o la cara
Embarazo y complicaciones de los partos por vía baja anterior del muslo (femoralgias), sobre todo si las causas
Fracturas y traumatismos de la pelvis (sobre todo, rama son compresivas (aneurisma de la arteria femoral, tumo-
iliopúbica del hueso ilíaco) res intrapélvicos, etc.). En caso de compresión del nervio
Hernia obturatriz
en el músculo psoas (por ejemplo, por un hematoma), el
paciente puede describir síntomas de psoítis, es decir, un
Tumores nerviosos
dolor intenso de la espalda que se irradia hacia la ingle
Atrapamiento (agujero obturador, fascia de los aductores en la y el muslo durante la flexión del muslo sobre la pelvis.
parte proximal del muslo en los atletas) En la exploración física hay que buscar otros signos que

L2 Figura 12. Distribución esquemática de los ramos del


nervio femoral.
Nivel radicular L3

L4

Cavidad pélvica
(plexo lumbar)
Músculo ilíaco
Músculo psoas
Ligamento inguinal

Músculo pectíneo

Músculo sartorio
Músculo recto intermedio
Muslo
Músculo recto femoral
Ramo cutáneo medial
Músculo vasto lateral
Ramo cutáneo intermedio
Músculo vasto medial

Canal de los aductores

Pierna

Nervio safeno

EMC - Podología 7
E – 27-040-A-30  Práctica clínica y electroneuromiográfica de las lesiones nerviosas periféricas de los miembros inferiores

Cuadro 2. Cuadro 3.
Etiologías de lesiones del nervio femoral (aisladas o asociadas a Etiologías de lesión aislada del nervio safeno [8, 10, 21, 38–44] .
otras lesiones nerviosas) [8, 10, 21–37] .
Complicación de intervención en la arteria femoral (derivación
Complicación de cirugía de la cadera femoropoplítea, trombectomía femoral)
Complicación de cirugía abdominal o pélvica, o de reparación Complicación de artroscopia de la rodilla
de hernia inguinal Complicación de cirugía venosa en la pierna (extirpación de
Complicación de parto por vía baja varices, extracción de injerto venoso para derivación coronaria)
Posición de litotomía Compresión con manguito en el muslo
Complicación de intervención arterial a través de la arteria Síndrome del canal de los aductores
femoral Tumores nerviosos o musculares, quiste meniscal o poplíteo
Complicación de anestesia local por bloqueo femoral
Hematoma o absceso del músculo psoas
explorarse el nervio safeno, cuyo territorio sensitivo
corresponde a la cara medial de la pierna. La estimula-
Fractura de la pelvis
ción del nervio se efectúa en la unión de los tercios medio
Traumatismos directos por arma blanca, arma de fuego, etc. y distal de la cara medial de la pierna, presionando el esti-
Lesión en el pliegue inguinal por claudicación vascular o mulador por detrás de la tibia. El registro con electrodos de
compresión por aneurisma de la arteria femoral o hematoma superficie se lleva a cabo por delante del maléolo medial.
Tumores abdominopélvicos, óseos o musculares que Estas respuestas son de baja amplitud y deben compa-
comprimen el nervio rarse con las obtenidas en la otra pierna [10] . Las causas
Tumores nerviosos de lesiones aisladas del nervio safeno se describen en el
Cuadro 3.
Diabetes (síndrome de Garland o plexopatía lumbosacra)

podrían orientar el diagnóstico diferencial. En caso de  Nervio isquiático


déficit motor de la flexión dorsal del tobillo (por pará-
lisis del músculo tibial anterior), hay que pensar en un El nervio isquiático, ramo terminal del plexo lumbo-
origen radicular L4. Asimismo, en caso de déficit asociado sacro, es un nervio mixto constituido por neurofibras
de los músculos aductores, hay que pensar en un origen procedentes de las raíces nerviosas L4 a S2. Se trata
radicular L3 [8, 10, 21, 22] . del nervio más largo y más voluminoso del organismo.
Las causas clásicas de lesión del nervio femoral se des- Está constituido por dos contingentes (peroneo común y
criben en el Cuadro 2. Las causas más frecuentes son tibial), rodeados por una vaina común. Frente a la región
las complicaciones de la cirugía de la cadera [23–25] , los glútea, sale de la pelvis con un trayecto arciforme hacia
hematomas del psoas [26, 27] y las complicaciones de un abajo por el agujero intrapiriforme, donde puede estar
procedimiento endovascular en la arteria femoral [28] comprimido. En la nalga corre por debajo del músculo
(coronariografía, colocación de catéter arterial femoral, glúteo mayor y después lo hace sobre los músculos geme-
tratamiento endovascular de patologías aórticas, etc.). los, obturador interno y cuadrado femoral. En el muslo,
Los hematomas del psoas suelen producirse de forma desciende en sentido vertical entre los músculos del com-
espontánea en pacientes tratados con anticoagulantes. Las partimento posterior: semitendinoso, semimembranoso y
complicaciones de una intervención de la arteria femo- bíceps femoral (Fig. 13). Los dos contingentes se separan
ral en el pliegue inguinal pueden deberse a una lesión en la parte inferior de la región posterior de la rodilla para
directa del nervio, a un aneurisma o a un seudoaneu- formar el nervio peroneo común y el nervio tibial [1, 7, 8, 45] .
risma de la arteria femoral con compresión del nervio. El El nervio isquiático inerva los músculos semitendinoso,
compromiso del nervio femoral es frecuente en las mono- semimembranoso y bíceps femoral, y en algunos casos
neuropatías diabéticas. En este caso, el paciente refiere participa en la inervación de la cabeza inferior del mús-
un dolor intenso de la ingle con impotencia funcional culo aductor mayor. Además del efecto motor de sus ramos
del miembro inferior. La intensidad del dolor disminuye terminales, la función motora propia del nervio isquiático
en algunos días y se instaura un déficit motor con amio- corresponde a la flexión de la rodilla. Su territorio sensi-
trofia cuadricipital. Este tipo de lesión, conocida como tivo corresponde al de los ramos terminales, los nervios
plexopatía lumbosacra [29] , radiculoplexopatía lumbosa- peroneo común y tibial, es decir, al conjunto del pie y
cra diabética o síndrome de Garland, afecta a menudo a de la pierna con excepción de su cara medial, inervada
las raíces nerviosas lumbares, al plexo lumbosacro y a sus por el nervio safeno, ramo terminal del nervio femo-
terminaciones, con más frecuencia el nervio femoral. ral [1, 7, 8, 10, 22, 45] .
El estudio neurográfico del contingente motor del ner- Debido a la localización profunda del nervio isquiá-
vio femoral por estímulo-detección es limitado debido a la tico, su exploración electrofisiológica es complicada. En
situación anatómica profunda del nervio. En este sentido, electroestimulación pueden explorarse sólo los ramos
sólo es estimulable en el pliegue inguinal con intensida- terminales. Sin embargo, el EMG de detección permite
des de estimulación muy elevadas. Así, la electromiografía demostrar una parálisis de los músculos inervados directa-
de los músculos del compartimento anterior del muslo mente por el tronco del nervio: músculos semitendinoso,
es la técnica más simple y fiable para explorar el nervio semimembranoso, bíceps femoral y, en ocasiones, la
femoral. Por su localización profunda, la exploración de cabeza inferior del aductor mayor [10, 45] .
los músculos ilíaco y psoas es más complicada. En caso El nervio isquiático puede lesionarse en la pelvis o en
de parálisis femoral, el EMG de detección revela signos la región glútea y, más raramente, en el muslo. Los meca-
de desnervación que permiten confirmar el origen perifé- nismos traumáticos son los más frecuentes, sobre todo las
rico del déficit motor y evaluar la gravedad de la lesión. fracturas y la cirugía de la cadera (Cuadro 4). Sin embargo,
También permite descartar los diagnósticos diferenciales la lesión proximal del nervio isquiático es mucho más
de lesión nerviosa radicular. Es posible estimular el nervio infrecuente que la de uno de sus ramos terminales, más
femoral en el pliegue inguinal y registrar una respuesta allá de la rodilla.
con un electrodo-aguja intramuscular insertado en las
cabezas musculares (técnica de latencia-aguja). Una pro-
longación de la latencia de la respuesta o la ausencia de  Nervio peroneo común
respuesta es indicio de una lesión del nervio femoral [10, 21] .
Los ramos sensitivos que aseguran la inervación del El nervio peroneo común es, junto con el tibial, uno de
muslo no son explorables. Por neurografía sólo puede los ramos terminales del nervio isquiático. Se trata de un

8 EMC - Podología
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L4 Figura 13. Distribución esquemática de los ramos


del nervio isquiático.
L5
Nivel radicular
S1

S2

Cavidad pélvica
(plexo lumbar-sacro)
Agujero
infrapiriforme

Región glútea

Músculo semitendinoso

Músculo bíceps femoral


Muslo
Músculo semimembranoso

Músculo aductor mayor


(fascículo inferior)

Rodilla
(fosa poplítea)

Nervio peroneo común Nervio tibial

Cuadro 4. nervios sensitivos cutáneo dorsal medial y cutáneo dorsal


Lesiones del nervio isquiático [8, 10, 17, 22, 25, 45–52] . intermedio. El nervio peroneo superficial asegura la iner-
En la pelvis Tumores, hematoma vación motora de los músculos peroneos largo y corto,
responsables de la eversión del pie. Su territorio sensitivo
Región glútea Fractura/luxación de cadera, cirugía de
corresponde al dorso del pie, con excepción del primer
cadera
espacio interdigital [1, 7, 8, 53, 54] (Fig. 14).
Tumores, hematoma
Traumatismos (heridas, inyección
El nervio peroneo profundo tiene un trayecto oblicuo
intramuscular, etc.) entre el peroné y la tibia a lo largo de la membrana inte-
Compresión por los músculos piriforme y/u rósea. En el tobillo pasa por debajo del retináculo de los
obturador interno extensores y termina en la cara dorsal del pie. Su territorio
Inflamación de la articulación sacroilíaca, sensitivo se limita al primer espacio interdigital. Asegura
osificación ectópica la inervación de los músculos tibial anterior, extensores
Rotación lateral extrema de cadera, posición largo y corto de los dedos del pie, y extensores largo y
de litotomía corto del dedo gordo [1, 7, 8, 53, 54] (Fig. 14).
En el muslo Proceso compresivo (hematomas, tumores, La lesión del nervio peroneo común es la más frecuente
etc.) de las lesiones tronculares del miembro inferior. El cua-
Traumatismos (fractura del fémur, heridas, dro clínico completo incluye un síndrome del «pie caído»,
compresión externa, etc.) trastornos sensitivos del dorso del pie y, más raramente,
de la cara lateral de la pierna (Fig. 6). Debido a su posición
profunda y protegida, es excepcional que las lesiones ner-
nervio mixto sensitivomotor, constituido por axones pro- viosas se localicen en la parte proximal del nervio peroneo
cedentes de las raíces lumbares L4 y L5 y de las raíces sacras común. Esto explica la ausencia de lesiones de los axones
S1 y S2. En el tronco del nervio isquiático, las neurofi- procedentes de los ramos colaterales del nervio peroneo
bras destinadas al nervio peroneo común están agrupadas común en su parte proximal, como el nervio cutáneo sural
en un fascículo específico. En la fosa poplítea, el nervio lateral, cuyo territorio de inervación corresponde a la cara
isquiático se divide en sus dos ramos terminales: el nervio lateral de la pierna. La ausencia de trastorno sensitivo de la
tibial y el nervio peroneo común. Éste sigue un trayecto pierna es, por tanto, bastante frecuente en caso de lesión
oblicuo desde la fosa poplítea hasta la cabeza del peroné. del nervio peroneo. El déficit motor debido a una lesión
Tras la salida del nervio cutáneo sural lateral (que pro- del nervio peroneo común afecta a los músculos eversores
porciona la inervación sensitiva de la cara lateral de la del pie, así como a los elevadores del pie y de los dedos. En
rodilla y de la pierna), rodea el cuello del peroné antes de el caso de una lesión selectiva de los ramos terminales del
dividirse en dos ramos: los nervios peroneos superficial y nervio peroneo común, un déficit motor con preservación
profundo. Durante su paso cerca del cuello del peroné, la de la eversión del pie y asociación a trastornos sensitivos
parte proximal de los nervios peroneo superficial y pro- limitados al primer espacio interdigital orienta hacia una
fundo está fuertemente adherida al periostio y sólo está lesión del nervio peroneo profundo. Al contrario, si pre-
cubierta por la piel y una capa fina de tejido subcutáneo valecen manifestaciones sensitivas del dorso del pie sin
adiposo [1, 7, 8, 53, 54] . alteración motora, lo más probable es que se trate de una
El nervio peroneo superficial desciende por la cara late- lesión aislada del nervio peroneo superficial. En este caso,
ral del peroné entre los músculos peroneo corto, peroneo a pesar de la ausencia de síntomas, la exploración física
largo y extensor largo de los dedos del pie. Al final per- puede revelar un déficit en la eversión del pie [8, 10, 22, 53–55] .
fora la aponeurosis en el tercio inferior de la pierna (sitio Las causas más frecuentes (Cuadro 5) de lesión del ner-
potencial de compresión), y en el tobillo proporciona los vio peroneo común son una compresión del nervio en el

EMC - Podología 9
E – 27-040-A-30  Práctica clínica y electroneuromiográfica de las lesiones nerviosas periféricas de los miembros inferiores

Figura 14. Distribución esquemática de los ramos


Nervio isquiático del nervio peroneo.
Muslo

Nervio tibial
Nervio peroneo común

Rodilla
(fosa poplítea)
Nervio cutáneo sural lateral
Cuello del peroné

Nervio peroneo superficial Nervio peroneo profundo

Pierna Nervio tibial anterior


Nervio extensor largo de los
Músculo peroneo corto
dedos del pie
Músculo peroneo largo Nervio extensor largo del dedo
gordo
Retináculo de los extensores

Nervio cutáneo
dorsal medial
Ramos sensitivos
del 1.er espacio
Pie
interdigital Músculo extensor corto
de los dedos del pie
Nervio cutáneo Músculo extensor corto
dorsal intermedio del dedo gordo

Cuadro 5.
Causas de lesión del nervio peroneo común [8, 10, 22, 53–65] .
Origen compresivo a Compresión externa Reposo prolongado en cama
Largo viaje en coche (compresión contra el salpicadero)
Piernas cruzadas (durante mucho tiempo o en la misma posición)
Sueño profundo por somníferos o intoxicación alcohólica aguda
Posición de litotomía
Parto (a causa del estribo de la camilla o por compresión de las manos de la parturienta)
Yeso demasiado ajustado
Pérdida acelerada de peso: slimmer’s paralysis
Posición en cuclillas prolongada: «parálisis del mosaiquista o del vendimiador»
Compresión interna Tumores nerviosos (schwannoma, perineurinoma, sarcoma, etc.)
Tumores óseos del peroné (osteocondromas, exostosis osteogénicas)
Aneurismas y seudoaneurismas en la región poplítea
Atrapamiento Síndrome del túnel peroneo en el atleta
Manifestación de una neuropatía hereditaria por hipersensibilidad a la presión
Origen traumático Complicación de cirugía de la rodilla (más raramente por artroscopia)
Fractura peronea, fractura del platillo tibial, fractura del fémur
Luxación de la rodilla, luxación de la articulación tibioperonea superior (infrecuente)
Heridas abiertas (laceración, herida por arma blanca, arma de fuego)
Esguince grave del tobillo, en inversión y por estiramiento (nervio bien fijado)
Quistes (articulación tibioperonea superior, menisco lateral), quiste mucoide endoneural
a
Uno de los más frecuentes debido a su vulnerabilidad durante su paso en contacto con el cuello del peroné. Es comprimido entre el hueso y la piel,
de la que está separado por un delgado pedículo adiposo.

cuello del peroné. Dicha compresión puede ser extrínseca músculos elevadores del pie y de los dedos. El trayecto
o deberse a una posición que aplasta el nervio peroneo doloroso comienza en la región lumbar baja y se irradia
común contra el hueso (posición prolongada en cucli- desde la nalga hacia la cara dorsal del pie, pasando por
llas). A menudo se detecta una pérdida de peso acelerada, la cara posterior del muslo y el borde posterolateral de la
voluntaria o involuntaria. En ocasiones se trata del único pierna. Sin embargo, este dolor puede estar interrumpido
mecanismo de la lesión nerviosa focal. Las lesiones ais- y comenzar más allá de la rodilla, lo que imita con pre-
ladas del nervio peroneo profundo son infrecuentes y se cisión el territorio sensitivo del nervio peroneo común y
producen sobre todo en el cuello del peroné. Las lesiones de sus ramos terminales. Casi todos los músculos de iner-
distales se deben al uso de zapatos ajustados, tacones altos vación radicular predominante L5 están inervados por el
con una tira anterior o calzado de esquí, a traumatismos nervio peroneo común. Sólo tres músculos están inerva-
repetidos del cuello del pie (fútbol, kickboxing), fractura dos por axones L5 que no corresponden al nervio peroneo:
de tobillo, esguinces recidivantes. Las lesiones aisladas del los músculos glúteo medio y tensor de la fascia lata, ambos
nervio peroneo superficial son más infrecuentes. inervados por el nervio glúteo superior, y el músculo tibial
El principal diagnóstico diferencial es una afectación posterior inervado por el nervio tibial. El músculo tibial
radicular L5. En este caso, la presentación clínica clásica posterior puede evaluarse clínicamente mediante el movi-
comprende un dolor lumbar y un déficit motor de los miento de inversión del pie [53] .

10 EMC - Podología
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Figura 15. Distribución esquemática de los


Muslo Nervio isquiático ramos del nervio tibial.

Nervio peroneo
Rodilla común Nervio tibial
(fosa poplítea) Nervio cutáneo sural medial
Músculo poplíteo
Músculo plantar
Músculo sóleo
Músculo gastrocnemio medial
Músculo gastrocnemio lateral
Músculo tibial posterior
Pierna
Músculo flexor largo de los dedos del pie
Músculo flexor largo del dedo gordo
Ramo calcáneo medial
Túnel tarsiano

Pie

Nervio plantar Nervio plantar


lateral medial

En caso de síntomas que orientan hacia una lesión del medial y lateral, el nervio tibial proporciona el ramo cal-
nervio peroneo común, mediante la exploración ENMG cáneo medial para los tegumentos de la región medial del
se trata de demostrar [10, 53, 64] : talón [1, 7, 8, 54, 66] (Fig. 15).
• una afectación nerviosa focal (enlentecimiento focal El nervio plantar medial inerva los músculos abductor
de la conducción nerviosa, disminución selectiva de la del dedo gordo, flexor corto de los dedos y flexor corto
amplitud de las respuestas sensitivas y/o motoras del del dedo gordo. Termina en tres nervios digitales comunes
nervio peroneo y de los signos de desnervación de los plantares que inervan los dos primeros músculos lumbri-
músculos de inervación peronea); cales y proporciona los nervios digitales propios plantares
• la ausencia de desnervación de los músculos tibial que inervan los tegumentos de los tres primeros espacios
posterior y glúteo medio (para descartar una lesión radi- interdigitales [1, 7, 54, 66] .
cular L5); El nervio plantar lateral se divide en un ramo superficial
• la intensidad de la lesión nerviosa (proporcional a la que proporciona los nervios plantares digitales comu-
pérdida axonal) para evaluar el pronóstico de recupera- nes y los nervios digitales propios plantares, para los
ción. tegumentos de la región del quinto dedo del pie y un
ramo profundo para los músculos interóseos, el músculo
aductor del dedo gordo y los tres músculos lumbricales
laterales [1, 7, 54, 66] .
 Nervio tibial El nervio tibial asegura la inervación de los músculos
del compartimento posterior de la pierna y de la planta
El nervio tibial es el ramo más grueso del nervio isquiá- del pie, lo que posibilita la flexión plantar y la inversión
tico. Sus fibras sensitivas y motoras proceden de las raíces del pie, así como la flexión, la abducción y la aducción de
L5, S1 y S2. Después de la división del nervio isquiá- los dedos. Su territorio sensitivo (Fig. 6) corresponde a la
tico en la parte inferior del muslo, el nervio tibial pasa planta y al borde lateral del pie [8, 10, 22, 54, 56] .
por debajo de los músculos gastrocnemios, después lo En caso de lesión proximal del nervio tibial se observa
hace por debajo del arco tendinoso del músculo sóleo y, una paresia de los músculos del compartimento poste-
más distalmente, entre los músculos flexor largo del dedo rior de la pierna y de los músculos intrínsecos del pie.
gordo y flexor largo de los dedos del pie. Entre los tendo- En reposo, el déficit de los músculos sóleo y gastrocnemio
nes de estos dos músculos llega a la cara dorsal del maléolo es responsable de pie cavo: los músculos tibial anterior
medial, al que rodea por el túnel tarsiano y se divide en y extensor largo de los dedos (inervados por el nervio
dos ramos terminales: el nervio plantar medial y el nervio peroneo) inducen una flexión dorsal del pie, mientras que
plantar lateral [1, 7, 8, 54, 66] . la tracción del músculo peroneo largo asociada al déficit
El primero de sus ramos colaterales es el nervio cutáneo de los músculos intrínsecos del pie acentúan la concavi-
sural medial, ramo sensitivo que se anastomosa al nervio dad de éste. El paciente no puede ponerse de puntillas ni
cutáneo sural lateral procedente del nervio peroneo para efectuar una inversión plantar. En los dedos sólo son posi-
formar el nervio sural. Éste corre en sentido lateral al ten- bles los movimientos de flexión dorsal. El déficit sensitivo
dón calcáneo, por detrás del maléolo lateral, al que rodea, afecta a las caras lateral y plantar del pie [66] .
y por el borde lateral del pie. Proporciona los ramos sen- En general, las lesiones distales del nervio tibial o de
sitivos, calcáneos laterales para los tegumentos de la cara sus ramos terminales se instauran de forma lentamente
lateral del talón, y el nervio cutáneo dorsal lateral para el progresiva y, por tanto, inducen manifestaciones atenua-
borde lateral del pie [1, 7, 8, 54, 66] . das de tipo disestesias, parestesias o incluso dolores. La
En la fosa poplítea, el nervio tibial proporciona ramos semiología en estos casos está dominada por los trastornos
motores para los músculos poplíteo, plantar, sóleo y gas- sensitivos, que afectan a toda la planta del pie o a una parte
trocnemios medial y lateral. El nervio tibial también de ésta, en función del ramo terminal afectado. Una lesión
asegura la inervación motora de los músculos tibial pos- aislada del nervio calcáneo induce trastornos sensitivos
terior, flexor largo de los dedos y flexor largo del dedo de la región del talón. La lesión del nervio plantar lateral
gordo. Antes de su división terminal en nervio plantar se manifiesta por síntomas sensitivos en la cara plantar

EMC - Podología 11
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Cuadro 6.
Causas de lesiones del nervio tibial [8, 10, 22, 54, 66–79] .
Lesión proximal en la fosa Traumática (heridas por arma blanca o por arma de fuego, hematoma sobre fractura ± luxación de la
poplítea rodilla)
Compresiva (aneurisma de la arteria poplítea, arco tendinoso, tumores locales)
Lesión en el túnel tarsiano Traumática y postraumática (fibrosis reactiva)
Microtraumática (estiramiento repetido en un pie valgo con hiperpronación dinámica, carrera a pie)
Aumento del contenido en el túnel tarsiano (masa tumoral, ganglionar o quística, músculo
supernumerario o hipertrofia muscular, tenosinovitis o tendinopatía)
Algunas endocrinopatías: diabetes, hipotiroidismo, acromegalia
Algunos reumatismos (artritis reumatoide)
Síndrome de atrapamiento
Lesión del nervio plantar Compresiva (tumor nervioso, quiste sinovial)
medial Atrapamiento del nervio en el canal del abductor del dedo gordo
Síndrome del túnel tarsiano limitado al nervio plantar medial
Neuroma de Joplin (lesión del nervio digital propio plantar medial del dedo gordo)
Lesión del nervio plantar Traumática
lateral Síndrome del túnel tarsiano limitado al nervio plantar lateral
Atrapamiento del nervio en el canal del abductor del quinto dedo.
Lesión tumoral
Lesión del nervio calcáneo Microtraumatismos repetidos del talón (carrera a pie)
inferior
Lesión del nervio calcáneo Traumatismos repetidos (carrera a pie)
medial (infrecuente)

del quinto dedo y la parte lateral del cuarto dedo. Una de las respuestas sensitivas de los nervios sural y plantares
afectación del nervio plantar medial induce una moles- medial y lateral, asociada a signos de desnervación de los
tia sensitiva desde la cara plantar medial hasta la mitad músculos del compartimento posterior de la pierna y de
medial del cuarto dedo. Si la lesión nerviosa es más grave, la cara plantar del pie. En el caso de una lesión más dis-
se observa un déficit motor de los músculos intrínsecos tal, el objetivo es distinguir mediante electromiografía de
del pie. Este déficit, asociado a la actividad de los mús- detección los músculos desnervados (distales a la lesión)
culos inervados por el nervio peroneo, es origen de una de los músculos sanos (proximales a la lesión). Si a nivel
deformación de tipo excavación del pie, dedos en garra del sitio lesional el trayecto del nervio es superficial, puede
y amiotrofia de las celdas plantares medial y/o laterales demostrarse un enlentecimiento focal de la conducción
en función de la localización de la lesión nerviosa [66] . Al nerviosa. Esto ocurre sobre todo en el síndrome del túnel
igual que en todas las lesiones nerviosas periféricas, una tarsiano. Sin embargo, demostrar una afectación focal de
afectación del nervio tibial puede generar trastornos cutá- los nervios plantares medial y lateral en el túnel tarsiano
neos. Éstos pueden acarrear complicaciones graves, ya que es difícil, sobre todo en ancianos y/o personas con sobre-
el pie es una zona muy solicitada. peso, o en caso de edemas de los miembros inferiores.
Las principales causas de lesión del nervio tibial son un El ENMG no permite demostrar las lesiones más distales,
traumatismo en su trayecto en la pierna [67, 68] y la compre- sobre todo un neuroma de Morton. En todos los casos,
sión en el túnel tarsiano [69–72] . La compresión se sospecha con esta exploración se intentan descartar los diagnósti-
con frecuencia, pero sólo se observa en los casos de trau- cos diferenciales (polineuropatía, compromiso radicular
matismo o de compresión externa grave (por ejemplo, S1 o lesión del tronco isquiático).
calzado de esquí). Las otras causas de lesión del nervio
tibial se describen en el Cuadro 6.
Los diagnósticos diferenciales de una afectación tron- Agradecimientos: A M. Emmanuel Laurent (infografista del labora-
cular del nervio tibial son la lesión radicular S1, las torio de anatomía, UFR Sciences Médicales et Pharmaceutiques de
polineuropatías incipientes y el síndrome de Morton. Éste l’Université de Franche-Comté), por las figuras de este artículo.
corresponde a una patología que se manifiesta por dolores
neuropáticos en el segundo y tercer espacio interdigi-
tal [73, 74] . Afecta más a las mujeres que a los varones.  Bibliografía
Los dolores aparecen durante la marcha, se agravan en
posición de pie y ceden con el reposo y tras quitarse el [1] Kahle W. Atlas de poche d’anatomie. Tome 3 : système
calzado. El dolor se reproduce en la exploración física nerveux et organes des sens. Paris: Flammarion Médecines-
mediante la palpación del espacio interdigital correspon- Sciences; 2002.
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tiene diversas causas: compresión crónica, microtrauma- membranaire et de la conduction nerveuse. En: Examen élec-
tismos repetidos, bursitis intermetatarsofalángica, colapso tromyographique. Cachan: Lavoisier; 2008.
del arco anterior y calzado demasiado apretado. Produ- [4] Bouche P. Chapitre 2 : Polyneuropathies et mononeuropathies
cen fibrosis perineuronal y hasta un neuroma, en uno multiples : diagnostic. En: Neuropathies périphériques, Tome
de los nervios interdigitales. El examen ENMG rara vez 1. Rueil-Malmaison: Doin; 2003.
[5] Fournier E. Chapitre 7 : Physiopathologie de l’excitabilité et
permite hacer el diagnóstico [75] , pero la resonancia mag-
de la conduction nerveuse. En: Examen électromyographique.
nética puede mostrar la presencia de un neuroma en el
Cachan: Lavoisier; 2008.
espacio afectado. [6] Vallat JM. Chapitre 5 : Lésions pathologiques élémentaires.
Con la exploración ENMG se trata de confirmar la sos- En: Neuropathies périphériques, Tome 1. Rueil-Malmaison:
pecha clínica de una lesión del nervio tibial, precisar la Doin; 2003.
localización en el trayecto nervioso y determinar la gra- [7] Kamina P. Précis d’anatomie clinique. Paris: Maloine; 2003.
vedad. Si el compromiso tibial es proximal, se registra [8] Craig A. Entrapment neuropathies of the lower extremity.
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Service de médecine physique et réadaptation, Hôpital Jean-Minjoz, CHRU de Besançon, 2, boulevard Fleming, 25030 Besançon, France.
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Service explorations et pathologies neuromusculaires, Hôpital Jean-Minjoz, CHRU de Besançon, 2, boulevard Fleming, 25030 Besançon,
France.
Laboratoire d’anatomie, UFR Sciences médicales et pharmaceutiques, Université de Franche-Comté, Franche-Comté, France.
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S. Nollet.
Service explorations et pathologies neuromusculaires, Hôpital Jean-Minjoz, CHRU de Besançon, 2, boulevard Fleming, 25030 Besançon,
France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Michel F, Tatu L, Cosson A, Nollet S. Práctica clínica y elec-
troneuromiográfica de las lesiones nerviosas periféricas de los miembros inferiores. EMC - Podología 2017;19(1):1-14 [Artículo E –
27-040-A-30].

Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

14 EMC - Podología

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