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Preguntas introductorias

0. ¿Cuáles son las cinco emociones básicas y cuál es su función?: que todas las
emociones son necesarias y tienen su función a la hora de tomar decisiones: miedo,
que nos mantiene alejados del peligro; asco, que nos hace rechazar cosas que nos
podrían hacer daño; ira, que nos incita a luchar; tristeza, que nos ayuda a afrontar las
pérdidas; y alegría, que nos insta a ver el lado bueno de las cosas y disfrutar de todo
cuanto nos rodea.

1. ¿Cuáles son las “Islas de la personalidad”?: Riley tiene sus intereses y pasiones, que
incluyen hockey, los amigos, la familia y la diversión déjalos que sean ellos quienes den
prioridad a cada uno de sus intereses.

2. ¿Qué sucede cuando la ira ésta está a cargo?: Cuando La ira se apodera del Cuartel
General, las cosas dejan de funcionar. Este es el caso de nuestro cerebro, también.
Cuando la ira se hace cargo, se detiene la lógica, no podemos tomar decisiones
racionales. La forma en que las otras emociones resuelven este problema es el
mensaje clave de la película, porque a veces es necesario permitirnos sentir tristeza
para liberar la ira.

3. ¿Quién está a cargo en su Cuartel General?: Alegría está en control de los mandos de
Riley, pero cada quien tiene su carácter y también días.

4. ¿Qué función tiene el miedo? ¿Cómo nos protege?: El miedo desempeña un papel
importante en mantener a Riley fuera de peligro, y es que el miedo es una parte
importante de nuestras vidas, excepto cuando lo dejamos que controle el “Cuartel
General”.

5. ¿Qué son los “recuerdos esenciales”?: Nuestros recuerdos nos conectan con lo que
somos: la película presenta un proceso de consolidación de la memoria, que convierte
la memoria a corto plazo recogidas cada día en recuerdos a largo plazo, almacenados
dentro laberinto colorido y confuso de Riley. Los recuerdos de Riley son el motor de su
personalidad. Nuestros recuerdos y cómo los percibimos nos ayudan a formar nuestro
sentido de identidad.

6. ¿Cómo trabajan en conjunto Alegría y Tristeza?: Al comienzo la alegría no entiende


que papel juega la tristeza en el cuartel general, pero pronto se da cuenta de que la
expresión de la tristeza no la aparta de la felicidad general, e incluso a veces puede
enriquecerla.

7. ¿Qué personaje es el que más escucha?: Importancia de la escucha activa: En un


punto crucial en la película, Alegría observa cómo Tristeza consuela otro personaje
escuchando y conectando con su decepción. La inclinación de la Alegría es para
distraer el dolor, pero ella ve que la supresión no puede resolver el problema. Permitir
que la tristeza se haga cargo durante un tiempo puede ayudar a la persona seguir
adelante.

8. ¿Qué deja Riley atrás para poder crecer?: Dejar ir es una parte importante del
crecimiento. Es difícil ver la progresión de Riley a la adolescencia, una sensación de
pérdida impregna la narración de la película, pero la pérdida también proporciona
crecimiento.

9. ¿Hay emociones buenas y malas, mejores o peores?: Las emociones no son malas:
Incluso las emociones “negativas” como la ira, el miedo, el asco y la tristeza juegan un
papel importante en hacer que una persona sea completa.
10. ¿Quién decide lo que sentimos?: Los padres no deben decirles a los niños cómo se
sienten: Es un mensaje sutil en la película, pero los padres de Riley ejercer presión
sobre ella para estar siempre feliz. A menudo enviamos mensajes a los niños acerca de
nuestras expectativas, sin darnos cuenta. Cuando están tristes tratamos de arreglarlo,
y cuando tienen miedo que les decimos que no se preocupen. Sin embargo, debemos
escuchar y permitir experimentar sus emociones, esto les dará las herramientas
necesarias para convertirse en adultos racionales.

11. ¿Qué pasa si el cuartel general se queda sin tripulación?: Del revés pone alegría a
cargo de Riley por defecto en el cuartel general, que en la película se muestra como
una serie de palancas y botones para las emociones pueden dictar el comportamiento.
Si este centro se deja sin tripulación, una persona aparece apático, como Riley hace un
momento cuando se muda a San Francisco.

Manualidades de la película ‘Del Revés (Inside Out)’


1. Alegría

Alegría, la emoción que nunca se rinde y que domina los recuerdos de nuestros
primeros años de vida. Para hacer la primera manualidad necesitas un tubo de papel
higiénico, papel de colores, goma EVA con brillantina, tijeras, pegamento, rotuladores
de colores y un par de ojos móviles. Para la segunda te hacen falta dos platos
desechables de cartón, pinturas y pinceles, tijeras, pegamento y rotuladores de
colores.

2. Tristeza

Tristeza, esa emoción que se manifiesta en la preadolescencia, y que a veces resulta


complicado asumir y manejar. Para estas manualidades necesitas: en el primer caso, un
tubo de papel higiénico, papel o cartulina azul, un calcetín viejo, ojos móviles,
limpiapipas e hilo para bordar o lana fina, tijeras, pegamento y rotuladores; en el
segundo caso: un plato desechable, cartulina azul, tijeras, pegamento y rotuladores

3. Miedo

Miedo nos mantiene alerta y evita que nos hagamos daño. Para nuestro primer ‘miedo’
necesitas un tubo de papel higiénico (o uno más estrecho, de papel de aluminio por
ejemplo), un par de ojos móviles, limpiapipas, tela o cartulina estampada con pata de
gallo y un lazo estrecho. Para el segundo ‘miedo’ usaremos cartulina morada, blanca y
negra y limpiapipas. En ambos casos necesitas rotulador negro, pegamento y tijeras.
4. Asco

Asco nos hace rechazar aquellas cosas que nos disgustan y nos desagradan, y al igual
que miedo evita que nos hagamos daño. La primera opción puedes hacerla con un tubo
de papel higiénico, papel o cartulina verde claro y oscuro, limpiapipas, hilo para bordar,
ojos móviles y lazo estrecho. La segunda opción se hace con un plato desechable,
pintura verde, cartulina o papel verde y morado y brillantina. Como en todos los casos
es imprescindible contar con rotuladores de colores, tijeras y pegamento.

5. Ira

Ira nos da fuerzas para luchar y afrontar determinadas situaciones, y como todas las
demás emociones, es necesario aprender a controlarla. En el primer caso te hace falta
un tubo de papel higiénico cortado, pintura o papel rojo, cartulina o goma EVA blanca,
ojos móviles, papel celofán rojo, rotulador negro, pegamento y tijeras. En el segundo
caso, cartulinas de colores, rotus, pegamento y tijeras.

Actividades 
C

ESTA DE LAS EMOCIONES

Para ayudar a los niños a descubrir e identificar las emociones, podemos usar una
cesta con objetos físicos que simbolicen cada una de las emociones que queremos
trabajar. Se trata de transformar de alguna forma en concreto aquello que es tan
abstracto que de otra manera sería incomprensible para ellos.

 MURAL DE “HOY ME SIENTO…”


En Educación Infantil nos gustan mucho las rutinas, y una de las mejores
es preguntarnos a nosotros mismos cómo nos sentimos, ponerle nombre a nuestras
emociones de manera cotidiana e investigar internamente sobre las causas de las
mismas. En este sentido he encontrado un par de ideas para los murales bastante
chulos, ambos sencillos y con imprimibles:
En cuanto a actividades menos rutinarias y más específicas, encontramos:

 JUEGO DE MESA
Me gusta la idea de un juego de mesa porque en estas edades todavía no juegan a
juegos de reglas pero podemos ir introduciéndolos de manera gradual para que vayan
aprendiendo a ganar y perder, a esperar su turno… Éste que os propongo relaciona las
emociones no sólo con el personaje de la película sino sobre todo con los colores, y
creo que puede ayudar a cotidianizar el hecho de sentir diversas emociones, que no
siempre es fácil reconocer. Además, al caer en casillas especiales hay que explicar un
momento en el que sentimos esa misma emoción en nuestro pasado, y eso me parece
un ejercicio muy sano y adecuado. También viene con imprimibles, con las
instrucciones del juego y todo.
 ASOCIACIAR PALABRAS A CADA EMOCIÓN
A veces hablamos de emociones sin darnos cuenta, y es que hay muchas palabras que
podemos relacionar con cada una de ellas. Así que otro juego podría ser asociar
distintas palabras (ya sean expresiones, onomatopeyas, sinónimos…) a cada emoción, y
podríamos hacerlo con el imprimible que hay a continuación si lo queremos en inglés,
haciendo nosotros mismos algo parecido en castellano, o, por qué no, dejando que sean
los propios niños lo que piensen dichas correspondencias, porque seguro segurísimo
que nos sorprenden e incluso nos enseñan algo.

 HABLAR SOBRE LA PELÍCULA CON LOS NIÑOS. Así, en general. No


la entenderán como nosotros, ni hace falta que la entiendan de una manera profunda,
pero seguro que podemos hablar de la importancia de todas las emociones o de su
verbalización, entre otras cosas, y que sacan sus propias conclusiones al respecto,
estoy segura que mucho mejores de lo que podemos imaginar.

 SELECCIONAR IMÁGENES CON EXPRESIONES DE LAS


PERSONAS PARA RELACIONARLAS CON UNA EMOCIÓN , de maenra que
luego podríamos comprobarlo según la emoción que está actuando dentro de su
cabeza. O justo al revés: buscar momentos en los que se exprese una emoción
concreta. Podríamos incluso darle forma de concurso.

 PENSAR EN UNA EMOCIÓN QUE AÑADIRÍAN a las que se ven en la


película, y con ello, dibujar cómo la imaginan, pensar en qué momentos actuaría y de
qué manera, que expresiones faciales usaría… todo vale para enriquecer la experiencia.

Otros conceptos a trabajar


Las emociones como causantes de nuestra conducta: es la
razón principal para trabajar la educación emocional, no sólo por cómo nos
comportamos con los demás sino también por cómo lo hacemos con nosotros
mismos. Si queremos tener el control de nuestro propio cuerpo y de nuestro
propio pensamiento, debemos saber reconocer nuestros sentimientos y
aprender a gestionarlos en el momento oportuno. En realidad yo diría más bien
que las emociones afectan a nuestro pensamiento racional, pero es cierto que
a veces, si éstas son intensas, nos hacen saltarnos ese paso y actuamos
dejándonos llevar por lo que sentimos en el momento.

La importancia de verbalizar nuestros sentimientos . Riley no


le cuenta a nadie lo que le ocurre hasta el final, y no se siente mejor porque
sus padres cambien de parecer y vuelvan a mudarse a su lugar de origen, sino
porque le dice a su familia lo que siente, y ellos aceptan sus sentimientos,
dándole, por supuesto, todo el cariño que necesita al estar pasando por una
situación tan difícil para ella. Para mí ésta es la acertadísima gran moraleja de
la película.
Los recuerdos no permanecen inalterables como en la película, sino que cada
vez que recordamos algo, volvemos a crear una imagen de lo que hemos
vivido, una imagen que se irá deformando cada vez que lo recordemos. Las
emociones tienen un importante pepel en esta “deformación”, cuando Tristeza
toca algún recuerdo, aunque no lo cambie significativamente sino que sólo
haga que Riley recuerde sus recuerdos alegres con tristeza. Me parece una
simplificación necesaria.

Solucionar conflictos manejando las emociones:


Al oír a mi hijo explicar tan elocuentemente cómo se sentía y con algo tan
visual seguí en su linea de explicación y le pregunté: “Unai, ¿tú crees que tal
vez lo que te pasa es que estás triste pero Ira le ha quitado los mandos a
Tristeza?” Asintió. “¿Donde está Alegría Unai?” “En los tubes, mamá”.
“¿Puedes llamarla? Si quieres, ¿por qué no esperas a que vuelva y cuando la
sientas, vas a jugar o algo que te apetezca?” Al poco rato, se sintió mejor y
se fue a jugar.

La importancia del descanso y el sueño:


En ‘Inside Out’ podemos ver que, cuando Riley está durmiendo el cerebro es
cuando se pone en funcionamiento. Al mismo tiempo que hablamos en
casa de ese tema, explicamos la importancia de las memorias y los diferentes
tipos.

Entender cuales son los eventos más importantes de la


vida:
Hablar en casa de nuestras islas se ha convertido en un juego que practicamos
casi a diario durante la comida y permite hacerles entender que lo que ocurre
en sus vidas, los eventos que suceden, dan forma a sus personalidades,
condicionan las amistades que eligen y en definitiva sus vidas. Os lo
aconsejo, es muy entretenido.

La importancia de TODAS las emociones


Al principio Alegría habla con voz en off y presenta a las demás emociones y su utilidad.

Alegría: se encarga de mantener positiva a Riley, de celebrar los éxitos, de que siempre esté
optimista y de buen humor. La alegría es la responsable de que repitas ciertas conductas que para ti
han sido buenas.
Asco: se encarga de que no olamos mal, de ir bien vestidos, de no comer ni beber algo en mal
estado, de no ir por sitios sucios o malolientes, etc. En definitiva, se encarga de protegernos y de
que no hagamos algo que nos vaya a sentar mal.

Miedo: se encarga de la supervivencia, así de sencillo y así de complejo. Decidir cuál es el límite
entre lo seguro y el peligro. Eso sí, el miedo actúa tanto ante un peligro real como ante uno
imaginario. Si no sintiéramos miedo no sobreviviríamos.

Ira: encargada de defender nuestra propiedad y a nuestros seres queridos. La ira entra en escena
cuando vulneran nuestros límites, cuando “nos sacan de nuestras casillas”. También es el
responsable de actuar cuando algo es injusto. En definitiva, es el defensor de la integridad y la
coherencia.

Tristeza: es la emoción marginada por las demás, sienten que no es útil y que no hace más que
estorbar. Sin embargo, la tristeza es de las emociones más importantes y es un pilar fundamental en
el crecimiento personal. La tristeza se encarga del recogimiento y de dedicarnos tiempo a nosotros
mismos, de pensar y meditar en los cambios para cerrar etapas. Esto no se ve hasta el final de la
película y tiene su explicación. La tristeza es la emoción necesaria para reintegrarnos como
personas después de habernos “hecho trizas” por cualquier causa: una ruptura, un despido, una
pérdida, etc.

Cómo se forman los recuerdos


Los recuerdos son mostrados en la película como esferas luminosas de un determinado color
dependiendo de la emoción que haya forjado ese recuerdo. Esto es un detalle fantástico de la
película ya que de hecho las emociones tienen un papel fundamental en la creación de recuerdos.
Cuanto más intensa es la emoción, más potente es el recuerdo. En la película existen los llamados
recuerdos esenciales que son más importantes que el resto de recuerdos, y se forman cuando la
impronta emocional es más fuerte. ¿Qué recuerdos conservas de tu infancia? ¿Qué recuerdos
importantes tienes de tu adolescencia? Seguro que recuerdas aquellos momentos donde tus
emociones eran más fuertes. Eso es un recuerdo esencial.

La personalidad
En la película, los recuerdos esenciales forman lo que llaman las islas de la personalidad. Me
pareció una representación gráfica ideal de la complejidad de nuestra mente.

Un recuerdo lo suficientemente potente puede forjar un antes y un después en nuestra vida y pasar a
formar una isla de la personalidad. Y es igual en la vida real, ya que los logros que tenemos de
pequeños hacen que nos comportemos de una determinada manera o que nos inclinemos a unas
aficiones u otras: la primera vez que fuiste a un concierto, el primer premio de un concurso de
dibujo, cuando te aplaudieron por hacer aquel discurso… La personalidad se forja por diversas
vivencias con alta carga emocional e influye en la autoestima.

La personalidad cambia conforme crecemos y vivimos, y eso lo reflejan muy bien en la película
cuando las islas de la personalidad se derrumban. Al final, lo que podemos ver son más islas de la
personalidad que son mezcla de las de la infancia, dando paso a una personalidad más “seria” y más
adulta.

El subconsciente
Dos policías guardan la puerta de la cárcel del subconsciente, donde están los elementos que no
deberían salir a la luz, como tus mayores miedos o traumas que has tenido en la infancia: el
payaso de aquella fiesta, las escaleras al sótano, la misteriosa casa donde vivía una persona mayor
(que tú pensabas que era una bruja), etc.

Los sueños
Esos elementos del subconsciente de los que te he hablado suelen salir en los sueños. En la película,
los sueños son elaborados por una compañía de cine, como si de una gran producción se
tratase. Cada día se mezclan las vivencias de ese día con miedos, esperanzas e inquietudes. Los
guionistas se encargan de hacer un cóctel con todos esos ingredientes y elaborar sueños de lo más
disparatados y crear elementos únicos: unicornios de arcoiris, perros partidos por la mitad, etc.

Pensamiento abstracto y demás capacidades


El pensamiento abstracto, entre otras, es una capacidad que se aprende conforme maduramos. Los
niños muy pequeños no pueden comprender conceptos abstractos como la solidaridad, la tolerancia,
el altruismo… Por eso en la película aparece un centro del pensamiento abstracto representado
como una fábrica o un pequeño ordenador donde se fragmentan y alteran conceptos hasta volverlos
más asequibles a la mente.

La memoria a largo plazo


Cada noche, los recuerdos que se han vivido ese día pasan a la memoria a largo plazo. La memoria
a largo plazo queda representada como un laberinto enorme de estanterías donde están almacenados
los recuerdos. De ahí pueden volver a ser recordados o bien olvidados para siempre. De esto se
encargan unos monigotes muy graciosos que se dedican a deshacerse de recuerdos “grises” que ya
no son útiles. En la película se olvida de los presidentes de los EEUU y de las clases de piano
(guardando sólo el recuerdo del “Para Elisa” de Beethoven. Puntazo).

Los amigos imaginarios


Es una película tierna sobre todo, y al hablar de la mente de un niño es imposible no hacer mención
a los amigos imaginarios. En el caso de Riley, su amigo imaginario era Bing Bong, un ser hecho de
algodón de azúcar, elefante, delfín, cola de mapache, bigotes de gato… todo lo que un niño puede
imaginar. Este adorable personaje desaparece en el basurero mental, culminando uno de los
momentos más emotivos del film, porque es momento de dejar paso a otra etapa en la vida de Riley.
No existen amigos imaginarios en la adolescencia.

La imaginación: Imaginalandia
En la película representan la imaginación como un lugar enorme donde todo es posible: un castillo
infinito de naipes, una fábrica de amigos imaginarios, una ciudad de nubes, etc. Me gusta señalar
que la imaginación no es algo puramente infantil, sino que es un área que todos tenemos en
nuestra mente, aunque esté más o menos desarrollada. Todos tenemos imaginación y todos podemos
usarla a nuestro favor.

La formación de las creencias


Un detalle que pasa desapercibido en la película (y lo más gracioso es que sea así) es cuando van en
el tren del pensamiento y hay dos cajas: una contiene hechos y la otra opiniones. En un traspiés,
Alegría las tira al suelo derramando su contenido y cuando intenta ordenarlas dice: “estos hechos y
opiniones se parecen mucho, es imposible distinguir cuál es cuál” y dice Tristeza “tranquila, eso
pasa mucho”.

Esta es la explicación original que da la película a la formación de creencias, que son las encargadas
de guiar nuestra vida pensando que las opiniones son en realidad hechos inamovibles. Las
creencias (potenciadoras o limitantes) cuesta cambiarlas por esto mismo, porque le damos una
veracidad absoluta como si fueran hechos y verdades universales. Hasta que no cambiamos el chip
y nos damos cuenta que esas creencias están basadas realmente en opiniones (por ejemplo: “todo
me sale mal”, “en los días lluviosos siempre lloro”, etc).

La importancia del duelo para cerrar etapas de la vida


La película trata de la etapa de todo niño cuando deja la infancia y pasa a la preadolescencia. Es una
etapa complicada, llena de cambios a nivel corporal y mental, y hasta que Tristeza no se hace con el
control de la situación (al final de la película) y transmite lo que realmente siente Riley, no puede
cerrar la etapa infantil y pasar página. Al dedicarle el tiempo necesario y el duelo necesario, Riley
pasa de la edad infantil a la preadolescente. Incluso al final de la película se ve cómo el ordenador
central aumenta de tamaño y le añaden más botones (incluido uno llamado “Pubertad”).

Me encantaría ver una segunda parte de la película en la que la pubertad hiciera de las suyas a nivel
emocional…

La infancia se caracteriza por tener emociones puras: o tristeza, o alegría, o miedo, o ira… No son
emociones muy elaboradas. Sin embargo, conforme crecemos las emociones se entremezclan y eso
queda muy bien representado en la película, ya que al principio los recuerdos son monocolor
(dependiendo de la emoción que haya predominado en ese recuerdo, la esfera luminosa es amarilla,
azul, verde, etc). Al final de la película, las esferas luminosas que representan los recuerdos
tienen distintos colores (amarillo azulado, verde rojizo, etc).

Porque no es lo mismo sentir alegría, tristeza, miedo, que sentir nostalgia, atracción, estrés, etc. Los
adultos la mayor parte del tiempo sentimos una mezcla de emociones, como si fuera un cóctel, y
actuamos de acuerdo a lo que sentimos. Eso queda muy bien representado en la película y es algo
que me gustaría que quedara claro: las emociones son útiles, todas ellas.

Cuando crecemos…
En determinadas partes de la película podemos ver qué pasa en la mente de los padres. Es curioso
ver que en la mente de la madre, el centro de mando lo preside Tristeza. Esto lo interpreto como que
en el rol de madre prima la preocupación, interés, cercanía, escucha activa… Sin embargo, en el
centro de mando de la cabeza del padre, la mesa la preside Ira, porque se suele decir que los
hombres son más de acción, más temperamentales. Además de los padres, en la película se ve
también la mente de un conductor de autobús (guiño gracioso) en la que su centro de mando están
cinco emociones… y las cinco son Ira.

El papel de las emociones en nuestras vidas:


Riley es una niña de once años que se encuentra en un momento crucial de su vida, su familia se
traslada por cuestiones de trabajo y debe enfrentarse a una nueva ciudad, nueva casa, nuevas
amistades… Por primera vez, entraremos en la cabeza de un personaje para entender cómo procesa
nuestra mente y cómo nos movemos y percibimos la realidad a través de las emociones.
Aunque tenemos más emociones de las que nos presenta la película, se muestran las más
importantes y se personalizan en distintos personajes que nos ayudarán a conocer y comprender
cada uno de sus estados.

Desde el campo de la neurociencia se ha demostrado que el elemento esencial en el aprendizaje es


la emoción, aprendemos porque queremos y aprendemos aquello que nos emociona, que conecta
con nuestra realidad al igual que enseñamos aquello que nos apasiona, el resto es simplemente
trasvase de información, contenidos, que al no anclar en nada que motive ni que tenga una utilidad
contextualizada, pasará a engrosar ese gran número de recuerdos aspirados por “Los olvidadores”.

¿Cómo tomamos las decisiones?.


Cada persona tiene un tablero de control, en Riley, está dominado por Alegría, que es su estado
anímico dominante, pero es importante observar que en cada persona, puede dirigir una emoción
diferente. Esto nos ayuda mucho a comprender la teoría de la mente y a ver que ante una misma
situación, cada persona puede sentir emociones diferentes y tomar decisiones distintas. El final de la
película es uno de los momentos más clarificadores y divertidos, ya que se ve el interior de distintas
personas y animales y cómo se entienden sus actos al ver lo que ocurre en su cabeza.

Un aspecto que se ha criticado en la película es que no se nombran otros aspectos que influyen en la
toma de decisiones, además de las emociones, nos influye el pensamiento lógico y nuestra
experiencia pasada.

¿Nuestras emociones tienen identidad?


Un aspecto que me llamó la atención fue que los personajes que describen las emociones en la
cabeza de Riley representan a ambos sexos, podría decirse que Alegría, asco y tristeza serían
personajes femeninos y miedo e ira masculinos. En cambio, cuando se muestran cerebros adultos no
ocurre así, por ejemplo, todas las emociones de la madre llevan algunos de sus rasgos
identificativos como su pelo y sus gafas y adoptan poses “femeninas”. Lo cual está genial porque
personajes masculinos como miedo o ira, se tiñen de una androginia fantástica.

Lo mismo ocurre con el padre, todas sus emociones aparecen con bigote, pelo corto y camisa y
corbata, pero no dejan de perder sus atributos sexuales y nos encontramos a alegría y asco con
pecho y bigote. Sin duda, es una gran oportunidad para trabajar aspectos como la identidad de
género, hablar de sexo-género, personas transgénero y transexuales, la imposición de roles de
género, etc.

Nuestra personalidad nos hace únicos:


Cada persona es única y todas igualmente valiosas. Esta idea se muestra a través de las Islas, que
definen quién eres. Riley es quien es gracias a sus islas: payasada, sinceridad, familia, hockey y
amistad.

Algo importante que nos enseña Del revés es que cuando no eres fiel a quién eres, vas en contra de
tu propio ser, tu mundo se desmorona y te vuelves una persona “anodina” sin emociones.

Este mensaje lo resalto siempre de las películas porque es necesario que nuestrxs peques luchen por
ser quienes son y den valor a lo que les hace ser así. Para una buena aceptación y equilibrio
emocional es necesario, pero si además le añadimos que hay personas que puedan sentir que ser
como son no es bueno o aceptado (cuestión de género, orientación, identidad, diversidad
funcional…) se convierte en un principio a reforzar.

Cómo funciona nuestra mente:


En muchas escuelas se está empezando a poner en práctica estrategias para desarrollar hábitos de la
mente, destrezas de pensamiento y trabajar la metacognición. Entender cómo funciona nuestra
mente nos va a ayudar a comprender cómo somos, por qué actuamos de una u otra forma y cómo
aplicarlo además a nuestra vida diaria (relaciones, aprendizaje…) Esto se une a otro proceso
igualmente necesario, entender que la mente de cada persona es única y empatizar con ellas. A
grandes rasgos, a través de esta película aprenderemos aspectos relacionados con:

* La memoria a largo plazo:

* El pensamiento abstracto:

* El tren del pensamiento:

* Los recuerdos: Se almacenan como fotogramas en pequeñas bolas. Es Importante


explicar a lxs peques que los recuerdos no son películas fijas y estáticas tal como nos muestran en la
película, no siempre las recordamos tal como ocurrieron, con el tiempo podemos olvidarnos, no
siempre lo que recordamos es real, a veces esos recuerdos se mezclan con sueños, películas que
hemos visto, cosas que nos han contado…
* Los olvidadores: Dedicaría un corto a estos personajes, que tan felices vivirían en
nuestras escuelas. Su función es importantísima y se trata de aspirar aquellos recuerdos que no son
importantes, útiles, etc. para dejar paso a otros nuevos. Estoy convencida de que la mitad de las
bolas aspiradas de Riley y de cualquier peque tendrán que ver con contenidos. Espero que las
nuevas metodologías educativas que por suerte se empiezan a implantar en muchas aulas llenen las
cabezas de nuestro alumnado de cientos de bolas de colores luminosas.

* Los sueños producciones:

* El subconsciente-Los miedos-las pesadillas:

* La imaginación-Imaginalandia:

–La imposición de la felicidad vs la necesidad de vivir el


duelo.
Riley no tiene motivos para estar feliz, tiene derecho a sentirse triste y a vivirlo, ha perdido todo lo
que conocía, su casa, sus amistades, su colegio, su equipo de hockey… es necesario expresar los
sentimientos, todos son buenos, compartirlos, no negarlos y arroparse en las personas que te quieren
y quieres.
Las emociones que llenan de “falsa alegría” pasan antes y hacen menos daño,
pero no es cierto, más tarde o más temprano todo lo que no hemos sentido o
expresado sale de una u otra manera. Lxs niñxs, las personas con diversidad
funcional, también pasan su duelo, cada persona siente y procesa de una forma
diferente, pero a todas nos afectan los cambios y es importante poder hablar de
ello.

A veces, explotamos con las cosas más pequeñas, las más absurdas, estar en un
sitio nuevo, con paisajes nuevos, nueva cultura, gastronomía… está bien cuando lo
hemos elegido y aún en esos casos, es normal que nos entre nostalgia y echemos
de menos lo conocido. Viajar, probar cosas diferentes, tener nuevas experiencias
nos pueden ayudar muchísimo a ampliar horizontes y crecer.

No hay emociones buenas o malas. Todas son necesarias.


Todas las emociones juegan un papel, y todas en una medida equilibrada son útiles
y necesarias. A lo largo de la película, vemos momentos en que estas emociones
se sobrepasan, actúan de manera independiente y no llevan a Riley por un buen
camino. Un buen ejemplo lo vemos en el final de la película, cuando Riley
aprovecha cada una de sus emociones en el partido de hockey, cada una aporta
algo, hasta la ira que puede estar vista de forma negativa, es precisamente la que
le da el coraje, la fuerza para avanzar.

El mundo real es cambiante:


Una de las críticas principales que han tenido siempre las películas de dibujos
animados es que no muestran la realidad, son fantasía, cuentos… Pixar desde sus
inicios le ha dado la vuelta por completo a este argumento y nos enseña la vida
real, y la vida precisamente en un momento crucial para esta familia. Entender
que la vida es cambiante, que lo que parece estable e inamovible puede variar nos
ayudará a flexibilizar, a adaptarnos de la mejor posible y poder aprovechar o ver
los aspectos positivos en los cambios. Crecemos, avanzamos, cuando nos
enfrentamos a las dificultades y ponemos en marcha estrategias para resolverlas.

Alegría nos ayuda a darle la vuelta a la situación, a buscar nuevas ideas para ver
oportunidades en cada situación. Por ejemplo, una casa vacía a la que no van a
llegar los muebles de la mudanza y que hay que limpiar puede ser una gran
oportunidad para iniciar una partida familiar al hockey y animarse lxs unxs a lxs
otrxs.

El amor real no es idílico.


El amor de verdad implica conocerse, nadie es perfectx y la familia de Riley se
muestra tal cual, con sus imperfecciones, con sus dificultades en la comunicación,
en ocasiones, con sus planes y sueños comunes, con su apoyo mutuo. Me encanta
la escena cuando la madre, en el partido, lo mira con esa certeza de saber que a
pesar de todo, estas son las cosas que hacen que lo quiera, refiriéndose a la gran
idea que tuvo de pintarse para animar a su hija.

“Amor no es mirarse el uno al otro, sino


mirar los dos en la misma dirección”
— Antoine de Saint-Exúpery

La diversidad como valor. Cooperatividad: Se crece


sumando.
Siempre está en presente en los dibujos, se consiguen solucionar las cosas,
siempre en equipo. En esta ocasión, gracias a tristeza. Con un único punto de vista
no vemos la totalidad de una situación, Alegría no quería que tristeza tocase los
recuerdos porque pensaba que los teñía de tristeza, no era capaz de ver que ella
también formaba parte de ellos. Por ejemplo, en el recuerdo pierde el partido y
Riley se sientan en una rama de un árbol triste, pero en seguida viene su familia y
amistades a consolarla y su equipo la vitorea feliz.
De todas las personas podemos aprender, cada una tiene
su valor:
Alegría, se permite parar por un momento, poner en práctica la escucha activa y
observar cómo tristeza es capaz de consolar y ayudar a Ding Dong. De cada
persona podemos aprender y cada persona, a su manera puede aportar.

Si no nos consideran, no nos dan un papel, algo en lo que sentirnos importantes,


será muy difícil creer que podemos. Tristeza sentía que era un estorbo, alegría la
tenía entretenida, le pedía que no saliera del círculo de tiza que le pintaba, cada
vez que tocaba o hacía algo estaba mal… Solo cuando alegría entiende el poder de
Tristeza, le da la oportunidad para que ocupe su lugar, le ofrece tomar las riendas,
y lo consigue, porque cree en ella y eso es motivación suficiente para que tristeza
comience a tener valor también.

Unido a esto, podemos aprovechar la situación que nos presenta la película para
tratar la “acogida”, la inclusión, el sentimiento y la necesidad de pertenencia a un
grupo.

El comienzo de curso es un momento fantástico para trabajar la acogida, una de


nuestras funciones en el aula será la de mantener la cohesión grupal, conseguir
que el grupo al completo se sienta parte integrante, ayudar a fortalecer los lazos y
sacar lo mejor de cada unx. La inclusión, por desgracia, no se da sin más, hay que
intervenir, educar, actuar en cada momento, enseñar a nuestro alumnado a
tratarse en igualdad, a valorar las diferencias y sentir que es una oportunidad
rodearse de personas que piensan, actúan y sienten de manera diferente.

Morajela final: por qué deberías ver Inside Out


La moraleja final de la película es que no escondas ni huyas de tus emociones. No escondas tu ira,
no espantes al miedo, no inhibas tu alegría, no ahogues tu tristeza… muéstralas todas,
experiméntalas, vívelas. Cada emoción es energía y necesita su espacio. La tristeza es tan útil como
la alegría, y el asco es tan válido como el miedo.

No te calles, no te reprimas. Llora, ríe, ama, enfádate, tiembla… Todas tus emociones son tuyas y
quieren lo mejor para ti.

Aprender a desarrollar la inteligencia emocional no es fácil ni rápido ya que en su mayor parte es


involuntaria e inconsciente y las emociones están controladas por regiones del cerebro
evolutivamente muy antiguas. Controlar las emociones no es algo que podamos aprender de la
noche a la mañana, sino que es un viaje durante toda la vida. Sin embargo, trabajar nuestra
inteligencia emocional es muy gratificante y tiene resultados muy positivos para nuestra vida:
comunicarnos mejor, sufrir menos, vivir plenamente, desarrollarnos personal y profesionalmente,
etc.

Aprende a mejorar la habilidad de la inteligencia emocional, poco a poco y con el tiempo. Nadie es
experto en esto, nadie tiene el título de “maestro emocional”, pero puedes aprender mucho de ti
mismo si escuchas a tus emociones.

Si quieres avanzar en el control de tus emociones, puedes mejorar tu inteligencia emocional con mi
curso Bienestar Emocional.

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