La verdadera mirada sobre la realidad, tiene que ser capaz de
medirse con las víctimas del mal, de la injusticia y de la violencia
en este mundo: el pobre, el enfermo, el infeliz, el marginado.
POBRE ENFERMO
INFELIZ MARGINADO
Ahí reside la prueba de la conversión, del amor a Dios y del
respeto al otro y del deseo de servir a ambos.
El contexto presente está marcado por:
Una hegemonía capitalista neoliberal que reina
soberana, sin balance de poder, con su dañina propuesta de una teología de la prosperidad. El vaciamiento de las ideologías que favorece a los diferentes proyectos políticos, con una preferencia de los objetivos individuales por sobre los sociales. El cuestionamiento suscitado a las religiones respecto de los grandes problemas de la humanidad: justicia, paz, etc. que están todavía pendientes.
Por eso pretendemos reflexionar sobre las siguientes preguntas:
1. ¿Cómo hacer teología hoy de cara a estos desafíos?
2. ¿Cómo lograr que nuestra teología ayude en verdad a la