5 Prioridad de los paradigmas.

Los paradigmas de una especialidad dada o de una comunidad revelan un conjunto de ilustraciones recurrentes y casi normalizadas de
diversas teorías. Estos se pueden encontrar documentados en diversos libros, conferencias y ejercicios, ya que por medio de estos es
como aprenden la profesión los miembros de esta especialidad.

La determinación de paradigmas compartidos requiere algo más que buscar reglas compartidas, necesita descubrir elementos aislables,
explícitos o implícitos que pueden haber abstraído los miembros de la comunidad científica. La búsqueda de reglas es más complicada
que la búsqueda de paradigmas y esto ocurre porque quizás algunas pueden coincidir entre distintas ciencias, pero habrá otras que
tendrán un matiz demasiado fuerte en la ciencia en la cual se aplican, por ello es que para comprender la investigación en términos de
reglas se necesita una base común para el campo en que se desea aplicar.

La ciencia normal en general puede determinarse por medio de la inspección directa de los paradigmas. Para Ludwig Wittgenstein esto
consiste en ser conscientes o intuitivamente saber que es cada cosa, debemos conocer los atributos en común de ciertos elementos y
que los definen. Lamentablemente dado al modo en como usamos el lenguaje no existe un conjunto de atributos que sea aplicable solo
a los miembros de una clase y a ninguno más. Muchas veces que vemos una actividad similar a otra como un juego, le llamamos así
porque tiene un parecido de familia.

Para Wittgenstein las cosas son familias naturales las cuales están constituidas por una red de semejanzas que se superponen y se
entrecruzan, lo que lo hace suficiente como para que podamos identificar al objeto o la actividad correspondiente, ahora si estas familias
naturales se entrecruzan nos permitiría identificar con éxito un conjunto de características comunes, algo que también puede ser útil
para diversos problemas y técnicas de investigación, ya que puede que no satisfagan un conjunto conocido de suposiciones si no que
en lugar de ello pueden relacionarse con alguna parte del cuerpo científico de una comunidad que, en cuestión la reconozca como una
de sus realizaciones establecidas.

Los científicos trabajan a partir de modelos adquiridos por medio del estudio, y muchas veces sin conocer plenamente o sin necesidad
siquiera de saber qué características han conferido a tales modelos la condición de paradigmas comunitarios. Y dado que no es así, no
necesitan un conjunto completo de reglas. En síntesis, los paradigmas podrían determinar la ciencia normal sin la intervención de reglas
descubribles.

Lo anterior es posible porque:

1- Existe una gran dificultad para descubrir reglas que han guiado las tradiciones particulares de la ciencia normal.
2- Los científicos nunca aprenden conceptos, leyes y teorías por sí mismos en abstracto y por sí mismos. Por el contrario, estas
herramientas intelectuales se encuentran desde el principio en una unidad histórica y pedagógicamente previa que las muestra
con sus aplicaciones y a través de ellas. Una teoría novedosa se anuncia siempre junto con sus aplicaciones a algún abanico
concreto de fenómenos naturales, sin los cuales ni siquiera podría ser un candidato a la aceptación.
3- La ciencia normal puede avanzar sin reglas sólo mientras que la comunidad científica pertinente acepte las soluciones concretas
a los problemas que ya han sido llevadas a cabo. Las reglas, por tanto, deben volverse importantes, desvaneciéndose la típica
falta de interés por ellas, siempre que se considere que los paradigmas o modelos son inseguros. El período anterior al
paradigma está marcado por debates frecuentes y profundos acerca de los métodos, problemas y normas de solución
legítimos. Pero en tanto los paradigmas se mantengan firmes, pueden funcionar sin un acuerdo sobre la racionalización o sin
ningún intento de racionalización en absoluto.
4- Se pueden dar revoluciones pequeñas, así como otras grandes; algunas revoluciones afectan tan sólo a los miembros de una
subespecialidad profesional, y para tales grupos incluso el descubrimiento de un fenómeno nuevo e inesperado puede resultar
revolucionario. Las reglas explícitas, cuando existen, son normalmente algo común a un grupo científico muy amplio, cosa que
no tiene por qué ocurrir con los paradigmas. No todos los físicos manejan el mismo paradigma, si se dedican a campos distintos.
Un cambio que incida tan sólo en una u otra aplicación de la mecánica cuántica, sólo será revolucionario para los miembros de
una subespecialidad profesional particular. Aunque la mecánica cuántica sea un paradigma para muchos grupos científicos, no
es el mismo paradigma para todos ellos. Como consecuencia, puede determinar de modo simultáneo diversas tradiciones de
ciencia normal que sin ser coextensivas, coindicen.