Emociones y Decisiones

Pueden y saben amar los hombres es el título de la segunda parte del libro “Intimidades
Masculinas” de Walter Riso publicado en el año 1998 por el Grupo Editorial Norma. El mismo
puede ser utilizado como una respuesta a varios artículos publicados en páginas web. En esta
parte del texto el autor nos habla de tres razones por las cuales el varón posee la capacidad
innata de expresar afecto a sus seres queridos, pero esto no significa que deba dejar
que los sentimientos influyan en la toma de sus decisiones.

Según Riso, “en los hombres prevalece en una antiquísima dicotomía emocional, mal
planteada y aparentemente sin solución”. Al parecer, esta dicotomía nos quita fuerza interior y
nos confunde. Riso nos explica que muchas veces no queremos enfurecernos, pero lo
hacemos, mientras que en algunos casos queremos llorar, pero nos aguantamos. Por otro lado,
Brett Y Kate McKay señalan que “sin importar la posición en la que se esté, un hombre debe
manejar sus emociones sin permitir que estas tengan algún efecto en él”. Ellas nos indican en
su artículo 7 Características vitales de un hombre que la habilidad para suprimir los
sentimientos personales hace a los hombres capaces de seguir adelante sin importar las
circunstancias. Este es el tipo de comportamiento que debería ser utilizado por los hombres de
la sociedad actual. Los hombres que son líderes de verdad se caracterizan por no dejar que las
emociones afecten las decisiones que ellos toman.

La sensibilidad es la principal diferencia entre hombres y mujeres, nos informa Elena Sanz.
“La sensibilidad es un rasgo esencial ya que permite diferenciar entre personas que son
sensibles, sentimentales, intuitivas, blandas o mentalmente débiles, y aquellas que son
utilitarias, objetivas, poco sentimentales o duras.” Mientras que Sanz dice que la sensibilidad es
una característica femenina, Riso comenta que “la sensibilidad masculina también ha hecho de
las suyas. Para sorpresa de muchos y muchas, el hombre ha dejado las huellas de su sentir
en diversos campos de la creatividad humana (espiritualidad, arte, ciencia)”. En nuestra
sociedad, los hombres no son conocidos por tener gran sensibilidad, ya que un hombre así
sería considerado un gran “marica”. Definitivamente debemos ser fuertes sin mostrar partes
sensibles porque si lo hacemos los demás se aprovecharan de nosotros.

¿Los niños necesitan ambos parientes para desarrollarse de una buena manera? Riso
afirma que si, él comenta que hay algunas actividades que las mujeres realizan, pero los
hombres lo hacen mejor; por ejemplo, hablar sobre la conquista de las mujeres, jugar deportes,
etc. Por otro lado, Yaiza Martínez explica que “en definitiva, afirman los científicos, la ciencia
demuestra que los niños que crecen con progenitores de un mismo sexo se desarrollan igual
de bien que los niños que crecen con progenitores de sexo distinto”. No importa si la pareja es
de dos mujeres, de una mujer y un hombre o simplemente una mujer sola, un padre
competente es mejor que dos que sean incompetentes.
En síntesis, la sociedad exige a gritos un hombre posicionado en su rol sin dejar de lado la
emotividad. Ella tiene que entender que los hombres si sabemos expresar nuestro afecto, pero
no podemos dejar que nos abrumen las emociones al momento de tomar decisiones. Un
hombre con inteligencia racional sabe cuándo expresar sus sentimientos y cuando echarlas a
un lado y “ponerse los pantalones”. Como diría Donald Trump “Un hombre tiene claro lo que
quiere y hace lo que sea para obtenerlo sin ningún tipo de límites”.