La problemática, de si existe o no el dios cristiano o un dios en general, no es para

nada nueva. Muchos conocedores lo han debatido, y otros muchos se han cansado de
discutirlo. No es fácil cuestionar algo con lo que ha tenido que ver todo el desarrollo
cultural a gran escala, sobre todo pensando en que este dios es una herencia de la
edad media, en la cual, eran aquellos hombres religiosos y llamados a si mismo
conocedores de dios, quienes tenían todo el poder, y manejaban en todo ámbito, el
desarrollo cultural. No es menor la cuestión de si existe o no un dios, pues si dios no
existe, se derrumbaría uno de los mitos más grandes de la historia, junto con más de
2000 años de antigüedad, y caerían con el también, muchos hombres que hacen de
este dios, su economía, y otros tantos más, que verían que su vida de “sacrificio y
entrega a dios” ha sido en vano, causando esto quizás, un gran problema
existencialista.

De esa manera, la pregunta que se formulara y analizara en este trabajo es

¿Es el hombre una creación de dios, o es dios una creación del hombre?

Quienes defienden la postura de que dios existe, preguntan él para que se inventaría
un dios, y esta es una cuestión fácil de responder, pues sabido es, que el hombre,
desde sus primeros rasgos de racionalización y cuestionamiento a tratado de encontrar
explicación a hechos inexplicables como la lluvia, los relámpagos, la primavera, la
existencia del sol, etc. cuestiones que son netamente naturales y que hoy tienen
completa respuesta científica.

Y se preguntaran, ¿si todas estas cosas se han comprobado científicamente, y de la

misma manera no tienen contra postura que sea válida, porque entonces, este dios es
tan trascendental y ha sobrevivido a estos hechos? Y es fácil responder a esto también,
pues la historia de este dios, es la mejor historia contada, una historia que no ha
descuidado detalles, que no ha dejado nada al azar, una historia escrita por más de un
hombre, en donde el ingenio, ha tomado completa participación. En la cual se ha
procurado no interferir mucho con la naturaleza y el entorno, si no, se preocupa casi en
su totalidad, de forma antropología de los problemas que aquejan al hombre.

No obstante, hubo un elemento que no se tomó en cuenta dentro de esta historia, un

error fatal, que marcó la diferencia entre creer y no creer. Estos hombres pensaron, que
aquellos a quienes se les impusiese su historia, se contentarían nada más con creer
que un dios creo todo, y que todo tiene un porque divino, pero para su pesar, hombres
muchos, no se contentaron con creer todo esto, y empezaron a investigar por su
cuenta, resolvieron el problema de la lluvia, dándose cuenta que esta, se producía por
la condensación de agua en las nueves, las cuales luego, repletas de moléculas
acuosas y con un pequeño cambio de temperatura, caía en forma de agua a la tierra. Y
de esta forma, comienza a nacer la ciencia (de la cual es madre la filosofía), la peor
enemiga de la religión, la cual demostró de forma exacta, y con detallados y minuciosos
estudios los hechos naturales.

Creer en la existencia de dios, luego de analizar ciertos hechos científicos, es un poco

difícil, sobre todo luego de ver como las grandes religiones actúan de forma
inconsecuente a su dogma, se contradicen, y pelean a sus feligreses.

Si se analiza la historia de la tierra, de forma científica, nos damos cuenta de que

nuestro planeta, tiene más de 5.000.000.000 de años, en cambio, la historia religiosa,
no puede tener más de 6.000 años.

Cabe preguntarse, ciertas cosas tratadas en la biblia con respecto a la creación del
mundo. Como, por ejemplo, ¿si dios creo el cielo, la tierra, a los animales y al hombre
en solo siete días, como se explicaría entonces, la existencia de los dinosaurios?
Siendo que estos, vivieron unos cuantos y humildes millones de años antes que
aparecieran los primeros homo-Sapiens en la tierra, y vivieron estos grandes animales,
durante grandes y humildes periodos de millones de años.

Se puede preguntar también, ¿cómo sería la imagen de dios cuando creó al hombre, si
los primeros homos, eran prácticamente monos? ¿Cómo, subsistió la especie humana,
si este dios, creo solo a un hombre y a una mujer, los cuales tuvieron solo a dos hijos,
ambos varones, de los cuales, uno mato al otro? La biblia no dice en ninguna parte que
Adán y Eva tuviesen más hijos. Entonces, ¿Cómo se perpetuo la especie?

Los creyentes, tratarían de responder a esto, diciendo que “hay enigmas divinos que
jamás se resolverán, de los cuales, solo dios tiene la respuesta”
Pero responder de esta forma, es totalmente básica e ignorante. Pues esos enigmas de
los cuales dios tiene respuesta, ya la ciencia ha encontrado con que responder, y se
están haciendo experimentos que concreten definitivamente el método científico.

De otra forma, si dios existiese, y tuviese las respuestas a estos enigmas, ¿Por qué le
ocultaría sus respuestas, a su más noble, problemática y perfecta creación? Si dios es
bondad, es amor, ¿porque dejaría que su creación (el hombre) se rompiera la cabeza
preguntándose tantas cosas?
Nietzsche dice desde su tumba, a los locos del otro lado de la pared que, “Dios ha
muerto”, cuya frase se refiere a la capacidad del hombre en tiempos pasados, de ver la
verdad, de comprender, y de seguir el comportamiento del rebaño. Pero por otro lado,
Nietzsche si creía en la existencia de Jesús, pero no como dios, si no, como “El Súper
Hombre” que tanto profesaba, y condenaba fuertemente a los cristianos por hacer de
Jesús su mártir, y dar una visión errada del hacia el mundo.

Otros personajes, han intentado con esmero, complementar la historia religiosa con la
científica, pero les ha sido en vano.

Por mucho que se intente tratar de complementar a la ciencia con la religión, jamás se
podrá hacer, puesto que tienen lados totalmente diferentes en cuanto a historia se
refiere.

Aquellos, que no han podido responder a la pregunta, de porque creen en dios,

simplemente dan la respuesta de que creen porque necesitan algo en que creer para
poder vivir... Si así fuese, ¿Porque no creer entonces en un árbol, en un trozo de tierra,
o en otra cosa? o mejor aún, ¿Porque no creer en uno mismo?

Los tiempos ya no están para creer en míticos dioses, (sin ofender), tal vez eso está
bien para los mayas, los aztecas, los incas, quienes no tenían un conocimiento tan
cierto como el que tenemos hoy, proporcionado por las ciencias. Ahora si los dioses
griegos, nórdicos, etc. Son solo un mito para las personas, entonces ¿porque este dios
cristiano o cualquier dios de las religiones actuales deben existir?

Aun así cabe aclarar que el escrito no va en contra de ninguna doctrina ni concepto
religioso, sino simplemente expone algunos cuestionamientos sobre la existencia de un
ser superior, cuya definición ha cambiado a través de la historia, pero que aun así ha
pasado durante generaciones de la misma
Ahora surge la cuestión de si sería posible que sin depender de Dios sería posible
tener su idea en el interior, ante lo cual surgen posibilidades como el de que por los
azares químicos y físicos del cosmos se haya dado la existencia de todo lo que
conocemos y así mismo se haya implantado la idea de Dios desde ésta misma
realidad. Ésta posibilidad es bastante improbable ya que la idea de un ser perfecto no
es posible que se origine solo por cuestiones biológicas.

Al pensar en un ser perfecto como un dios inevitablemente se tiene la idea de su

existencia ya que sin una existencia real ya no existiría perfección. La perfección de
este ser no puede limitarse a una simple imagen o pensamiento sino que debe implicar
una existencia real e infinita que le brinde éste atributo.
Dentro de ésta dinámica y dentro de la lógica racional, si se piensa en dios, por ésta
misma lógica ha de concluirse que Él existe, ya que no sería posible tener la idea de un
ser perfecto al cual le falte la existencia verdadera, sería una contradicción.

Ante éstas evidencia que nos ha legado Descartes y su método racionalista se podría
concluir que por medio de la razón se prueba la existencia de Dios, pues por lógica se
concluiría que el solo hecho de detenerse en la idea de la posibilidad de la existencia
de un ser infinito y todopoderoso es la garantía de su existencia.

Citas
Nietzsche, F, (1895). El Anticristo, maldición sobre el cristianismo, ’’ En otro
sentido, se verifica continuamente el logro de casos Singulares en los diversos
puntos de la tierra y de las más diversas culturas, con las cuales se representa en
realidad un tipo superior: una cosa que, en relación con el conjunto de la
humanidad, es un superhombre. Semejantes casos afortunados de gran éxito
fueron siempre posibles, y acaso serán aún siempre posibles. También
generaciones enteras, razas, pueblos, pueden en ciertas circunstancias constituir
un efecto afortunado de esta especie’’