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FACULTADAD DE ARQUITECTURA

ESCULA ACADÉMICO PROFESIONAL DE ARQUITECTURA

INFORME
Alpinismo

ALUNMO
Valverde Arce Marco Antonio

ASESOR

AÑO
I Siclo

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN:
Informe - Investigación

HUARAZ - PERÚ
2014

1
INDICE

ALPINISMO…………………………………………………………………………….3

CONCEPTO DE ALPINISMO………………………………………………………..3

ORÍGENES DEL ALPINISMO………………………………………………………..4

EL ALPINISMO EN LOS SIGLOS XIX y XX………………………………………..5

EQUIPO PARA EL ALPINAJE……………………………………………………….7

A) Vestimenta
B) Equipo Técnico
C) Equipo de acampada
D) Orientación
E) Medicamentos y Botequín.

ALIMENTACIÓN……………………………………………………………………….9

PREPARACION FISICA DE LOS ALPINISTAS………………………………….10

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ALPINISMO

El alpinismo es la más antigua y completa de las modalidades deportivas de


montaña. Podría definirse como la acción de subir montañas, pero siempre por
afán de superación, como respuesta a un impulso personal distinto en cada
uno o por el placer de alcanzar una cima y observar el terreno que se abre ante
los ojos.

Pese a que el hombre ha tenido que ascender montañas desde antiguo, el


montañismo como deporte surge cuando se empieza a apracticar no como
obligación, sino para satisfacer las inquietudes de quien lo practica. Este
cambio se produce a finales del siglo XVIII cuando un grupo de ingleses
viajaron a los Alpes con la atención de explorar lo desconocido hasta entonces.
En poco tiempo, los Alpes fueron lugar de encuentro de aquellos quienes
querían “subir montañas” por el simple placer de subirlas. Así en 1786 Jacques
Balmat y Michel-Gabriel Paccard, alcanzaban por primera vez la cima de Mont
Blanc, la cumbre más alta de los Alpes con 4.810 m., toda una proeza para la
época.

Poco a poco el Alpinismo ha ido evolucionando, hasta el concepto actual. Hoy


en día el buen alpinista ha de saber esquí de montaña, escalar en roca, hielo o
terreno mixto (aquel que combina roca y hielo), pero también ha de tener
nociones de orientación.

La FEDME, que en sus inicios se denominó Federación Española de Alpinismo,


ha tenido este deporte siempre como una de sus actividades fundamentales.
Actualmente, sigue siendo considerada como esencial en la organización, y de
esta modalidad parten iniciativas como el Grupo de Alta Montaña Español
(GAME), el Equipo Español de Alpinismo o el Equipo Femenino de Alpinismo,
cuyos miembros han logrado resultados históricos tanto para el alpinismo
nacional como internacional.

CONCEPTO DE ALPINISMO

Deporte que consiste en la ascensión a las cumbres de las altas montañas.


Tiene como base la marcha, pero el alpinismo propiamente dicho empieza con
la escalada. Se clasifica según el riesgo y la dificultad en seis grados, fácil el
primero y muy difícil el sexto. El alpinista emplea un complejo equipo, cuyos
útiles varían según que la ascensión se realice sobre roca o sobre hielo. En el
equipo están comprendidas también las prendas especiales de abrigo, las
tiendas para pernoctar, etc. La práctica de este deporte requiere refugios y
campamentos que se van instalando progresivamente distintas altitudes a
media que se progresa en la ascensión.

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ORÍGENES DEL ALPINISMO

La montaña ha constituido desde el principio de las civilizaciones, un misterio


para el hombre que siempre ha querido desentrañar. En sus comienzos la
ignorancia de la climatología, morfología y condiciones que rodean la montaña,
acarreó muchas dificultades a todos los que trataron de acercarse a ellas. Esto
no fue un obstáculo para el hombre, que continuó intentando conquistar las
montañas más atractivas que tenían a su alcance.

En Asia la concepción de la montaña estaba relacionada estrechamente con


las divinidades, se les atribuía ser las moradas de los dioses; esta idea
entroncaba con el concepto de misterio en Europa. Este hecho pudo ser
constatado cuando se conoció el nombre tibetano del Everest, Qomolongma,
cuya traducción significa “Diosa madre del país”.

Según todas las investigaciones sería Petrarca el iniciador del alpinismo


cuando en 1336 subió al Mont Ventoux. Casi al mismo tiempo, Dante subió a
los montes Falterona y Prato coronó el Soglio, poco más tarde, en 1358,
Rotario d´Asti ascendió al Rocciamelone, y ya en 1492 se sabe de un Antoine
de Ville que escaló el Mont Aiguille con una cordada de nueve hombres.

Los primeros textos científicos sobre el tema datan en 1574, se trata de la


primera geografía descriptiva de los Alpes, una obra de Josias Simler que junto
con Tschudi y el filólogo suizo Gesner realizaron diversos estudios y
experimentos que ayudaron en su época a desentrañar un poco este entorno
misterioso.

En el Renacimiento cambió la concepción de la montaña como algo anárquico,


indomable e inaccesible y pasó a ser algo bello, alcanzable y que componía un
orden estable en la naturaleza. Esta concepción se ve reflejada en las pinturas
de Masccio, Giorgione y Miguel Ángel.

Fue el siglo XVIII el que vio el nacimiento del alpinismo moderno. Por una parte
por los aristócratas deseosos de imitar a los científicos, de explorar nuevas
tierras, y por otra, una progresiva expansión del turismo, convirtió a Chamonix
en el primer gran centro montañero. Fue de este lugar desde el que salieron
expediciones hacia diferentes montañas de los Alpes. En 1786, Gabriel
Paccard y el guía Jacques Balmat, financiados por el filósofo-geólogo Horace-
Bénédict de Saussure, hincaron la ascensión al Mont Blanc (2807) y
consiguieron coronarlo el 8 de Agosto. También desde Chamonix salió Marie
Pradis en 1827 para escalar el mismo monte. Hachos como éste cambiaron la
vida de los habitantes de este valle que vieron transformada su vida y pasaron
a ser ganaderos o agricultores a constituirse en guías de montaña de los Alpes,
cuerpo que tomó consistencia a principios del siglo XIX y que continúa todavía.

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EL ALPINISMO EN LOS SIGLOS XIX y XX

El concepto del alpinismo nace con la generalización de estas actividades


subiendo a las cumbres más representativas de los Alpes; el Ortles en 1804, el
Jungfrau, en 1811, el Monte Rosa, en 1855, el Gran Paradiso, en 1860 y la
Marmolada, en 1864. Con la proliferación de estas prácticas nacen los primeros
clubes de montaña; en 1857, se creó en Londres el Alpine Club, sus
componentes pertenecían a la vieja aristocracia, alta burguesía y profesiones
con más prestigio. Los clubes crecieron por todas España y a ellos se deben
las construcciones de refugios de montaña por toda la cordillera de los Alpes.

Esta proliferación de clubes logró a establecer una competencia importante y


se llegaron a crear potentes equipos de alpinistas; entre los más valorados
estaban los británicos y los italianos (Club Alpino italiano de Turín). Los
austriacos y alemanes no fueron tan valorados como los anteriores a pesar de
haber conseguido importantes logros en el Tirol y la Dolomitas. El club pionero
español data de 1876, es el Centre excursionista de Cataluña.

El primer revés que sufrió el alpinismo internacional fue la tragedia sufrida por
la cordada que conquistó por primera vez el mítico Cervino (4478 m) en 1865.
Esta cordada estaba capitaneada por el dibujante y periodista inglés Edward
Whymper. Cuando descendían de la cumbre cuatro de los siete componentes
(Croz, Hadow, Hudson y Douglas) perdieron el equilibrio y cayeron al vacío. En
aquel momento la sociedad inglesa criticó ferozmente las prácticas alpinas
aduciendo lo innecesario que era subir a lugares peligrosos e inaccesibles, tal
fue el revuelo armado que la reina Victoria barajó la posibilidad de prohibir la
práctica del alpinismo.

El periodo comprendido entre los años 1865 y 1920 es considerado por los
historiadores como los años dorados del alpinismo de vanguardia. Existían
diversas divergencias en este periodo entre las diferentes escuelas alpinas que
se crearon en Europa, unas abogaban por no suprimir el riesgo que entrañaba
la subida a una montaña y otras defendían la actividad alpina exponiendo al
mínimo los riesgos existentes. En el primer caso no utilizaban guías para
realizar las ascensiones y practicaban las ascensiones libres, uno e sus
exponentes más significativos fue Preuss que tuvo muchos seguidores,
algunos de los cuales perdieron la vida intentando emularle. En el segundo
caso, defendían el estilo clásico de escalada y tenían como condición
primordial la seguridad para conseguir el objetivo, lo más representativo fueron
Díaz, Dimai y Rey.

A partir de este momento se produce un sensible avance técnico del alpinismo


y una popularización de la actividad, estos dos hachos hacen fijar la atención
de muchos alpinistas fuera de los límites del continente, el Himalaya, las
Montañas Rocosas, los Andes, etc. Estas montañas eran diferentes a lo que
habían conocido hasta ahora y les llevó mucho tiempo la adaptación y el
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estudio de los nuevos problemas que se les presentaba. Un ejemplo ilustrativo
de estas condiciones diferentes lo constituyen los intentos por coronar el monte
McKinley, situado a sólo tres grados del Círculo Polar Ártico con una altura de
6187 m, consideraba como una de las montañas más difíciles de la Tierra; su
latitud permite que se acumule gran cantidad de hielo en sus laderas, tiene
glaciares de 50 Km. de longitud, y los que lo intentan subir tiene que soportar
temperaturas de hasta 50° bajo cero y vientos de 100 km/h. Este pico fue
conquistado el 13 de Abril de 1910 por un grupo de mineros de la ciudad de
Fairbanks, sus nombres eran Tomy Lloyd, Billy Taylor, Pete Anderson y
Charley McGonogall.

En América el pico más alto es el Aconcagua de 6959 m en la cordillera de los


Andes, esta cima fue alcanzada por primera vez en 1897 por varios miembros
de una expedición dirigida por E. Fitzgerald.

Ya en nuestro siglo, durante la década de los años 20 a 30 se consiguieron un


gran número de cimas o de paredes que hasta ese momento no habían podido
ser coronadas, por una parte gracias a los medios innovadores con los que ya
se contaba -entre ellos cabe destacar la utilización de suelas de goma en las
botas- y por otra, a la destreza de los alpinistas más destacados de la época
como Wiessner, Micheluzzi, Comici, Cassin, Gervasutti y Boccalatte, que
consiguieron subir la pared norte del Lavaredo, al sur de la Marmolada, las
paredes este y norte de los Jorasses y la pared norte del Eiger, que fue la
ascensión que seguramente trascendió más allá de las fronteras. Después de
cobrarse muchas vidas el 22 de Julio de 1938 los austriacos Kasperek y
Hames y los alemanes Heckmair y Vorg lograron conquistar la cima.

Al mismo tiempo comenzaba en América un alpinismo que tenía como fin el


juego y el ejercicio físico sin ningún contenido filosófico ni cultural. Estas
actividades tuvieron lugar en el valle de Yosemite y en las montañas de Tetón.
La técnica no era muy depurada, pero consiguieron abrir grandes vías de
escalda en roca.

En 1951, Waltar Bonatti y Luciano Ghigo, después de escalar la pared del Gran
Capucín, introdujeron la técnica de escalada artificial, esta técnica supuso un
avance considerable y facilitó el acceso a nuevos lugares. A partir de este
momento, y aunque con anterioridad se habían hecho muchas expediciones
con objetivos muy dispares -levantar mapas de la zona, o escalar sus grandes
cimas- se centró la atención en la cordillera del Himalaya y concretamente en
su pico más representativo, el Everest. El conocimiento de la zona y sus
dificultades para vencerlo fue una tarea complicada y sobre todo llevó mucho
tiempo. El 3 de Junio de 1950 Maurice Herzog y Louis Lachenal pisaron la
cumbre del Annapurna, primer pico de más de 8000 m que se conquistaba;
esta expedición tuvo muchos problemas y tanto los dos alpinistas que
coronaron (les tuvieron que amputar varios dedos de los pies, por congelación)

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como sus compañeros Gaston Rébuffat y Lionel Terray, estuvieron a punto de
perecer en el decenso hasta el campamento base.

Por fin, el 29 de Mayo de 1953 se consiguió el sueño de coronar el techo del


mundo -el Everest-. Fueron el neocelandés Edmun Hillary y el serpa Tenzing
Norgay y los que lograron ascender a la cumbre. La expedición la dirigió el
coronel británico John Hunt junto con C. Evans y T. Bourdillon. Esta hazaña fue
posible gracias a la aplicación de nuevos materiales y nuevos conceptos en la
forma de atacar una montaña, hechos que fueron adoptados por las
expediciones posteriores a grandes alturas.

Una vez conseguida la cumbre más soñada la cordillera del Himalaya ha


seguido siendo visitada y se ha intentado conseguir otros picos representativos
de la zona, todos ellos por encima de los 8000 m, tales como el Makalú,
Manaslú, Dhaulagiri, K-2, Kanchejunga, etc.

EQUIPO PARA EL ALPINAJE

El Equipo es uno de los puntos más importantes para practicar un alpinismo


seguro. En un mismo día en la montaña, la temperatura puede oscilar entre los
veinticinco grados y los diez grados bajo cero. La mañana puede ser soleada, y
la tarde convertirse en una furiosa tormenta de granizo. Hay que ir preparados
para cualquier eventualidad.

A) Vestimenta:
En la montaña nos vestimos con el sistema de capas. La
primera capa es de material sintético, que absorbe fácilmente la
humedad generada por la sudoración. Por encima se lleva una
capa de ropa de abrigo, de material como el Polartec, para
aislarnos del frío. La tercera capa es de ropa impermeable, tipo
Goretex, que nos protege del viento, nos permite mantenernos
secos bajo la lluvia o una nevada, y al mismo tiempo nos ayuda a
conservar el calor corporal. Por último, se usa una chaqueta de
plumas para las paradas que se hacen a temperaturas bajas. A
todo lo anterior, solo habría que añadir unos buenos guantes y un
gorro o pasamontañas.

La regla del oro del sistema de capas es que no hay que pasar ni frío ni
calor; a lo largo del día, el alpinista se quita y se pone ropa, según cambian las
condiciones climáticas. Esto nos permite conservar energía durante las largas
jornadas en altura.

 Botas: Son fundamentales para proteger los tobillos, y para mantener


los pies calientes, y para escalar sobre roca y hielo. Suelen ser de suela
rígida, y permitir la fijación de crampones automáticos. Es

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importantísimo no estrenar unas botas en una salida larga; si te compras
unas botas nuevas, debes “domarlas” en sucesivas marchas de
montaña.
 Casco: Protege la cabeza del posible impacto de piedras o bloques de
hielo, e incluso de una caída o impacto con una pared o con el suelo. Es
el elemento más importante. El 80% de las muertes en la montaña se
habrían evitado llevando esta protección.

B) Equipo Técnico
 Arnés: Permite asegurarse a la cuerda, y también
mantener el piolet unido al alpinista en caso de caída. De
este cinturón puedes colgar material de escalada, como
mosquetones o empotradores.
 Piolet: Esta herramienta en forma de pico nos permite
frenarnos en caso de resbalar en un glaciar. También nos
sirve para mantener el equilibrio, y para tallar peldaños en
el hielo.
 Crampones: Estas suelas puntiagudas de metal se atan a
nuestras botas, nos permiten clavarnos en la nieve o el
hielo e impiden que nos resbalemos montaña abajo.
 Gafas de glaciar: De vital importancia, pues el resplandor
del sol sobre la nieve podría provocarnos ceguera en
cuestión de horas. También protegen los ojos de una
ventisca o del granizo.

C) Equipo de acampada:
Si contemplas pasar la noche en altura, necesitarás una tienda
(casa de campaña), un saco de dormir, y una colchoneta que te
aísle del frío suelo. También agradecerás mucho tener un hornillo,
que te permitirá calentarte una comida, o simplemente fundir
nieve para poder hidratarte.

D) Orientación:

 Mapa (actualizado), brújula y altímetro


 GPS

E) Medicamentos y Botequín.

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Alimentación

 Bebida: indispensable cantimplora para llevar agua y beber cuando se


necesite. Importante llevar también alguna bebida isotónica.
 Comida: generalmente el recorrido es largo y no es probable encontrar
donde abastecerse de alimentos, además en caso de retrasarse o perderse
es importante contar con comida. Vale la pena llevar elementos energéticos
como chocolate, frutos secos o barras de cereales, ya que proporcionan
bastante energía ocupando muy poco. Dependiendo de la duración del
viaje, puede ser conveniente añadir manzanas, nueces, naranjas,
melocotones, frutas en almíbar, gelatina, chocolates, miel, mermeladas,
galletas, té, leche para preparar, queso, jamón, salami, etc.

PREPARACION FISICA DE LOS ALPINISTAS:

Algunos alpinistas, dedican diariamente entre 1 y 2 horas diarias al


entrenamiento y mucho más el fin de semana. El mejor medio para mantener y
aumentar la forma física no obstante es la práctica del alpinismo.

Fijar-se objetivos:

La primera meta de todo programa de entrenamiento es fijar tus objetivos y una


agenda y lugares de entreno.

Para la escalada en roca o hielo, prever varios entrenamientos a la semana


tanto en muro artificial como en muro natural. Para mejorar tu técnica incorpora
un programa de musculación para la parte alta del cuerpo, trabaja la
elasticidad, las artes marciales o el yoga son buenos métodos para logra-la.

Si tu objetivo se encuentra en altitud, planifica un entrenamiento a 6 meses,


destina tu tiempo a preparar tu cuerpo para los desafíos de anaerobia que vas
a encontrar en altitud.

Para un entrenamiento orientado a grandes travesías que requieran aguante,


concentrad el entrenamiento en vuestras piernas, espalda y riñones.

Un programa completo:

Aguante cardiovascular: este corresponde a la capacidad del cuerpo en


soportar actividades duras que impliquen el uso de diversos musculos, corazón
y pulmones. Tu frecuencia cardiaca máxima se puede calcular de una forma
muy sencilla. Multiplica tu edad por 0,7 a 207 les sustraes el resultado anterior
(la cifra 207 puede variar según edad, años de practica y condición física).

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Aumenta gradualmente las sesiones y establece un entrenamiento en aerobia.
si te gusta correr aumenta cada semana un 10% la cantidad de tiempo para
evitar lesiones.

Entrenamiento en aerobia: este entrenamiento, demanda mucho oxigeno


durante su desarollo y puede llegar a usar entre un 60 y un 80 % de nuestra
fquencia cardiaca. Escoje una actividad de entreno cercana a la que sera
finalmente tu objetivo:
.- randone en montaña, subida de escaleras
.- raquetas, esqui de fondo de montaña o telemark
.- jogging, rollers y ciclismo
.- entreno en interior: remo, tapiz, ciclismo estatico etc…

Entreno anaerobico: este es el que va a forzar al maximo tu ritmo cardiaco. El


cuerpo va a experimentar un deficit de oxigeno. La mayor parte de las personas
soportan durante cortos periodos de tiempo estos ejercicios, es decir entre 1 y
2 minutos.
.- interval training: repetir la ascension de una cuesta una y otra vez, encuentra
una cuesta que requiera entre 2 y 3 minutos de ascension, pon peso en tu
mochila. Eñieza con sesiones de 20 minutos y poco peso. Aumenta el peso y el
tiempo a medida que ganas fuerza.

Fuerza muscular:

Debes desarollar tu fuerza muscular, ya que en montaña en la mayor parte de


las situaciones la vas a necesitar. Para tus salidas llena bidones de agua,
vaciaos en la cima. Ves a comprar a pie y lleva la compra en tu mochila. En
una barra de tracción fortalece tus muñecas.

Estiramientos:

Después de un esfuerzo intenso es importante realizar estiramientos antes de ir


a dormir o subir al coche. Las artes marciales pueden ayudar mucho en ese
sentido.

Lesiones y recuperación:

Descansa, reposa y duerme correctamente. La noche antes de realizar una


salida, descansa de forma correcta, planifica sesiones de musculación y
escalada con 48 horas de antelación a una salida para que los tendones,
ligamentos y músculos tengan tiempo de recuperarse.

Si en un entrenamiento te sientes cansado o encorvado, aligera el mismo y si


es necessario, toma unos días de reposo.

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