§ LOS RECURSOS

§ GENERALIDADES
Recurso significa regresar a un punto de partida y hacer de nuevo lo que ya se
hizo. Los recursos procesales en general, han sido creados para corregir los errores
en que pueden incurrir los jueces en sus decisiones.

1. Elementos de los recursos.

1) Un tribunal.
2) El tribunal debe dictar una resolución judicial.
3) Que esa resolución judicial agrave a una parte, es decir, le cause un perjuicio.
4) Que la parte pretenda corregir, enmendar o dejar sin efecto ese error.
5) Que el mismo tribunal que dictó la resolución, o que otro tribunal de grado
superior, pueda deshacer el error o agravio.

2. Fundamentos de los recursos.

Todo acto jurídico es susceptible de ser revocado, de dejarlo sin efecto. Y esto
sucederá cada vez que ese acto no responda a las exigencias, sociales, históricas o
económicas de la época, y por tanto es necesario reemplazarlo o dejarlo sin efecto.
La sentencia, del mismo modo, puede incurrir subjetivamente en una injusticia
para alguna de las partes, y por tanto, esa injusticia se debe poder corregir. No puede
ser que la jurisdicción sea una fórmula sin sentido, injusta. Por ello es importante dejar
siempre abierta la posibilidad de corregir esa injusticia.
Por otro lado, tampoco resulta justo que se mantenga la incertidumbre en el
tiempo, que nunca se sepa cuál es la justicia definitiva, y por tanto, llega un momento
en que aparentemente hay una pugna entre dos aspectos de la justicia; en primer lugar,
cuando la justicia va en contra de una de las partes; y por otro lado, que nunca se sepa
cuál es el punto final, cuando ya no hay posibilidad de volver a corregir. Es decir,
hablamos de una necesidad de justicia y de certeza.
 En el derecho español antiguo, la certeza de las resoluciones eran muy difíciles de
encontrarlas, ello llevaba al campo de la mismísima ciencia jurídica a poder dejar
abierta la puerta, para poder buscar la justicia, es decir invocar la justicia, por ello es,
que se la legislación española las apelaciones tuvieran 1 año de plazo.
Hoy en día, los juicios tienden a ser mucho más rápido o expeditos de lo que eran
en el pasado, con ello, el nivel de certeza jurídica es mucho más expedita, pero no
siempre dicha certeza responde al carácter de la justicia, que es lenta. De ahí un dicho
que dice: “la justicia tarda pero siempre llega”, dejando claro, que las puertas a los
recursos tienden a ser los medios o mecanismos para encontrarla.
En definitiva, los recursos responden a la necesidad de corregir los errores en que
puede incurrir un juez en sus decisiones. Estos errores pueden ser básicamente de dos
tipos:
1) Desvío del juez en el camino para llegar a una decisión (error en el
procedimiento, meramente formal, nulidad formal).
2) Cuando el juez se aparte de la ley, es decir, aplica injustamente la ley.

3. Clasificación de los recursos.

Los recursos pueden ser:
1) Recursos ordinarios. Son aquellos que proceden contra todo tipo de
resoluciones. Para interponerlos, se necesita únicamente una parte agraviada, una
parte que se crea perjudicada. Son recursos ordinarios la reposición y la apelación.
En estos recursos, el tribunal llamado a conocerlos, tiene las mismas atribuciones,
la misma competencia que el tribunal que dictó la resolución, es decir, tiene
atribuciones amplias.
2) Recursos extraordinarios. Son aquellos que la ley concede por un motivo
determinado, por una razón cierta, y solo contra determinadas resoluciones judiciales.
Lo que caracteriza a los recursos extraordinarios es el motivo de su interposición,
que siempre está establecido en la ley, y marca esencialmente la competencia del
tribunal llamado a conocerlo, es decir, el tribunal superior tiene una competencia
limitada, constreñida a la causal. Solo puede referirse a la existencia o inexistencia
del motivo de agravio, del motivo que llevó a reponer.
También los recursos pueden ser:
3) Recursos de reforma. Es aquel en que un tribunal distinto al que dictó la
resolución es llamado a conocerlo, y por tanto, ese tribunal puede reformar la
resolución.
4) Recursos de revocación o retractación. Es aquel en que el mismo tribunal
que dictó la resolución puede modificarla. En nuestra legislación, un recurso típico de
retractación es el de reposición.

4. Características generales de los recursos.

1) Son una mera facultad de las partes. Obedecen estrictamente al principio
dispositivo. Por tanto, las partes pueden desistirse. No existen los recursos de oficio.
2) El plazo para entablarlos es fatal. En todos los recursos se extingue el
plazo por el solo transcurso del tiempo.
3) Están dirigidos a enmendar resoluciones jurisdiccionales de los
tribunales. Esa es la regla general, sin embargo, existen recursos que tienen un
carácter constitucional, como lo son el recurso de protección, el recurso de amparo y
el recurso de inaplicabilidad por inconstitucionalidad, aunque los primeros dos no son
recursos, pues no están destinados a enmendar resoluciones judiciales, son más bien
acciones constitucionales.
También existen otros recursos de carácter disciplinarios, que no enmiendan
resoluciones judiciales, sino que tienen por objeto establecer sanciones a funcionarios
públicos, como lo son el recurso de queja.
Y por último, hay recursos que atacan las facultades económicas de un tribunal,
como lo son el recurso de aclaración, rectificación y enmienda.
4) No atacan decisiones firmes o ejecutoriadas. También es una regla
general, pues lo firme o ejecutoriado produce efecto de cosa juzgada. Sin embargo,
hay una única excepción a esta generalidad, como lo es el recurso de revisión.
 5) Se interpone ante el mismo tribunal que dictó la resolución para que sea
conocido por el tribunal superior o por el mismo tribunal. Aquí también
encontramos una excepción.
En material penal, hay un recurso en que existe una competencia per saltum, esto
es, del tribunal de primera instancia que dictó resolución, se va a ir derechamente a la
Corte Suprema. Esto es el recurso de nulidad en materia penal, cuando se recurre
por errónea interpretación de la ley, o con infracción a los derechos constitucionales
de tratados internacionales.
Hay otros recursos que se interponen directamente al tribunal superior, que son el
recurso de protección, el recurso de habeas corpus y el recurso de queja.
 § RECURSO DE ACLARACIÓN, RECTIFICACIÓN Y ENMIENDA.

1. En qué consiste.
Art. 182, número 1. Notificada una sentencia definitiva o interlocutoria a alguna
de las partes, no podrá el tribunal que la dictó alterarla o modificarla en manera alguna.
Podrá, sin embargo, a solicitud de parte, aclarar los puntos obscuros o dudosos, salvar
las omisiones y rectificar los errores de copia, de referencia o de cálculos numéricos
que aparezcan de manifiesto en la misma sentencia.

Fuera del tema del desasimiento del tribunal (este recurso es una excepción a ello),
y según lo subrayado en el artículo 182, puede la parte, pedir aclarar los puntos
obscuros o dudosos, salvar las omisiones y rectificar los errores de referencia, de copia
o de cálculo.
A solicitud de parte, se puede pedir en primer lugar, aclarar un punto obscuro o
dudoso. Esto quiere decir que se puede explicar el sentido de la decisión, haciendo
coincidir el querer con la expresión. Se trata de un defecto de expresión, y no de un
defecto del querer. El querer del juez es claro, pero su expresión es obscura. Por
consideración, lo que se debe aclarar es esa expresión. Aquí no se trata de
interpretar, porque quien interpreta una resolución judicial debe elegir entre dos o
más alternativas, y en este recurso no hay elección, el sentido y alcance es claro,
pero lo que se debe dilucidar es el modo de expresión. El juez conoce perfectamente
lo que él quiso, pero es la expresión la que hay que tratar de aclarar. Por tanto, existe
un solo sentido, no hay cambio de sentido en que se dictó la decisión.
En segundo lugar, permite salvar las omisiones, es decir, llenar los vacíos,
persiguiendo decisiones omitidas. No es que el juez, por medio de este recurso, pueda
resolver peticiones que no había resuelto, sino que son más bien omisiones
secundarias. Existe un recurso, que es la casación, que persigue la misma finalidad,
esto es, salvar las omisiones. Según el art. 170, el juez debe resolver todas las
peticiones y pretensiones, y si deja de resolver alguna, la parte puede pedir la nulidad
de la sentencia, y esa facultad de la parte se ejerce interponiendo el recurso de casación
en la forma (art. 768). Pero en la casación, la parte persigue anular la sentencia. En
cambio, en el recurso de rectificación solo se trata de salvar omisiones no
esenciales, omisiones que son anexas, que equivales a rectificar errores de
expresión.
Por último, se pueden rectificar errores de copia, de referencia o de cálculo
numérico.

2. Naturaleza jurídica.
Ante la pregunta de si estamos ante un recurso o no, debemos responder
afirmativamente, pues si bien con la aclaración no cambia la decisión de la resolución,
existe una corrección de errores, una aclaración de conceptos. Sin embargo, dejamos
en evidencia la constante conflictiva de los tratadistas, al plantearse si es o no un
recurso.
En nuestra legislación, en materia civil, no se le llama recurso, sino que se habla
de la solicitud, y el art. 189 habla de reclamación. Aquí no hay necesidad de que
haya una parte perjudicada, como es necesario en todo recurso. Aquí lo que se
persigue es una corrección, y puede pedirla cualquiera parte, aunque no sea agraviada.
Esta solicitud procede incluso cuando la sentencia está ejecutoriada. Incluso,
el tribunal de oficio puede en cierto modo hacer uso de esta aclaración. Por ello,
más que un recurso, se puede entender que realmente es un incidente dentro de un
proceso.

3. Procedencia y tramitación de la solicitud de aclaración.

Las partes no tienen plazo para recurrir, y pueden interponer esta aclaración
incluso cuando se han interpuestos otros recursos.
También, los tribunales pueden, de oficio, rectificar los errores de copia, de
referencia o de cálculo numérico que contiene la resolución, dentro de los 5 días
siguientes a la primera notificación de la sentencia.
 La rectificación que pueden hacer de oficio los tribunales es exclusivamente de
rectificación de errores y no de aclaración, ni de omisiones (art. 184). Es una
excepción a los principios de pasividad y de desasimiento.
Una vez hecha la presentación por la parte (solicitud de aclaración, rectificación o
enmienda) el tribunal puede acoger la solicitud de plano, o decidir escuchar a la otra
parte. Si decide escuchar a la otra parte puede o no suspender el curso del juicio
y la ejecución de la sentencia.

4. Recursos que proceden en contra de la resolución que aclara o rectifica.

Puede ser apelable, siempre y cuando la cuantía de lo aclarado admita recurso de
apelación (art. 190)

5. El recurso de aclaración, rectificación o enmienda en materia penal.

El nuevo sistema procesal penal no se contempla esta posibilidad, pero el Código
Orgánico de Tribunales, al hablar de competencias o facultades de la Corte Suprema,
si se refiere a él, a propósito del recurso de nulidad penal.
Por ello, admite discusión la procedencia de este recurso en materia penal. Pero de
acuerdo con el art. 52 del Código Procesal Penal, que es una norma remisora al Código
de Procedimiento Civil, por tratarse de un trámite procesal, no cabe duda de que sí
procede en materia penal esta aclaración, rectificación o enmienda.
Art. 52 del Código Procesal Penal. Aplicación de normas comunes a todo
procedimiento. Serán aplicables al procedimiento penal, en cuanto no se opusieren a
lo estatuido en este Código o en leyes especiales, las normas comunes a todo
procedimiento contempladas en el Libro I del Código de Procedimiento Civil.
Sin embargo, el problema reside en el art. 352 del Código Procesal Penal, que
limita los recursos procesales a los medios y en los casos expresamente establecidos
en la ley penal, lo que podría hacer dudar de su procedencia.
Artículo 352 del Código Procesal Penal. Facultad de recurrir. Podrán recurrir en
contra de las resoluciones judiciales el ministerio público y los demás intervinientes
agraviados por ellas, sólo por los medios y en los casos expresamente establecidos en
la ley.
Es decir, el libro III del Código Procesal Penal, “Recursos”, Título I,
“Disposiciones generales”, art. 352, habla de que solo pueden recurrir a los recursos
en materia penal; uno, el ministerio público y dos, los intervinientes agraviados por
las resoluciones judiciales en materia penal, y ya vimos que el recurso de aclaración,
rectificación o enmienda, no hay partes agraviadas. También el precepto habla solo
de medios y casos expresamente establecidos en la ley y, el Código Procesal Penal no
contempla el recurso de aclaración, rectificación o enmienda expresamente.
§ RECURSO DE REPOSICIÓN.