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Experiencia Pedagógica.

Teatro en Tu Sala: Irrupción del teatro dentro del aula.

La experiencia vivida tras la creación y realización de Teatro en Tu Sala, ha permitido


extraer características y comportamientos propios de los centros educativos, que visualizan
la necesaria revisión del cómo se insertará la Ley que incluye al teatro dentro de curriculum
escolar. Este artículo desea entregar un camino a la comprensión del entorno social y real
de la comunidad educativa, valorizando al teatro como una herramienta de desarrollo
artístico inherente en cada grupo humano, con proyección y mirada hacia la construcción de
una nueva ciudadanía.
Conceptos clave: Teatro como herramienta pedagógica- Intervención directa en el aula-
Proyecto ley de inclusión del teatro en el currículum- Ley 20.911 Plan de Formación
Ciudadana.

A las 7:30 de la mañana tomamos nuestros bolsos y mochila para partir rumbo a alguna
escuela que usualmente está ubicada en sectores como Quinta Normal, Quilicura, La Granja,
Cerro Navia, Puente Alto. Nunca encontramos taco, al contrario todos se amontonan por
llegar hasta el centro mientras nosotros viajamos hasta un punto lejano en algún contorno de
la urbe. Eso es muy decidor de nuestro programa: trabajar con los establecimientos más
apartados del centro. Al llegar a la escuela o liceo correspondiente, somos recibidos siempre
con un cariño que sorprende, a veces en forma de sonrisa, otras de abrazo u otras veces, más
sorprendentes todavía, el cariño es expresado con un desayuno que jamás es mal recibido a
esa hora de la mañana. Tras vestirnos con nuestros oberoles y preparar nuestras herramientas
de trabajo somos conducidos hasta el aula que será intervenida, allí unos 30 ó 40 estudiantes
nos reciben con gracia y extrañeza, pero cuando nos reconocen la acogida es de sincera
alegría. De hecho es inolvidable un joven de La Florida que, al vernos por la ventana, se puso
a bailar, saltar y decir “Tío, me encanta el teatro que ustedes hacen”.

Teatro en tu sala es una intervención directa en el aula, de unos 35 minutos de duración,


realizada por una actriz y un actor. Nace el año 2011 como apoyo al programa Todos al
Teatro, ambos pertenecientes a la Corporación de las Artes de la Representación y la
Educación (CARE), que durante 9 años ha permitido que más de 350.000 estudiantes asistan
por primera vez a un espectáculo teatral. En las salas de clases, con el apoyo de medios
audiovisuales simples y recursos escénicos teatrales, los actores facilitan un primer
acercamiento al lenguaje de la obra teatral a la que asistirán los estudiantes. También se trata
de relacionar este lenguaje con el período social, artístico, económico y político en que cada
obra y dramaturgo se encuentran insertos. Con cada intervención nos urge transmitir la
importancia de estas obras para el canon occidental y que éstas no perviven estáticas en
ningún tipo de panteón lejano de la realidad, sino nacen de una relación dialéctica entre el
autor, su público y la época. Nuestro trabajo formador de nuevas audiencias busca situarse
cada vez más en el escenario del siglo XXI. Hoy, en que las tecnologías y nuevos medios
avanzan de forma exponencial ¿Cómo vincular a los estudiantes con la tradición teatral de
Shakespeare, del Siglo de Oro español, en el Teatro del Absurdo, las Vanguardias del SXX?
Quizás más importante aún ¿Por qué hacerlo? Esperamos que el espectador se reconozca en
nuestros montajes y que los valores transmitidos por éstos, hagan íntima resonancia en los
niños, niñas y jóvenes que nos visitan, que puedan identificarse con ellos y descubrir por sí
mismos el valor de nuestro arte: el teatro es un espejo del mundo, un ejercicio de creatividad
que también requiere cierta capacidad crítica.
Teatro en Tu Sala ha sido una herramienta fundamental para este programa educativo. A
través de su ejecución hemos podido conocer las aulas de clases de más de mil
establecimientos con índices de alta vulnerabilidad escolar de las Regiones Metropolitana, de
Antofagasta, La Araucanía y Los Ríos. El camino recorrido en estos 5 años de
intervenciones, está lleno de encuentros que nos permiten reconocer ciertas necesidades que
el ejercicio teatral puede satisfacer, no sólo en los estudiantes, sino en los docentes y
comunidad educativa en general. De cara a la actual discusión en torno a la inclusión del
Teatro dentro del currículo escolar en nuestro país, quisiéramos usar este espacio para
reflexionar en el cómo es entendido el teatro hoy en nuestros establecimientos y el efectivo
potencial como herramienta de apoyo pedagógico.

La identidad y el colectivo dentro del aula.


12.45 pm, Mayo del 2013. Nos encontramos en un Liceo de Maipú terminando nuestra
intervención sobre las Vanguardias y el Teatro del Absurdo. Un estudiante especialmente
participativo pregunta "-Tío ¿Se dice muéranse o mueránse?-" Extraño, esta pregunta nada
tiene que ver con los contenidos. Aún así, llenos de una ingenua confianza, respondemos "-
Se dice MUÉRANSE-" Acto seguido todos los estudiantes caen “muertos” en el piso, en sus
mesas, por toda la sala. Todo el curso participa, sin excepción, enseñándonos cómo son
capaces de organizarse lúdicamente en torno a una dinámica grupal que es performativa.
Nosotros, que vinimos a hablar del teatro, terminamos siendo espectadores de un ejercicio
actoral colectivo. Dicho en buen chileno: “Vinimos por lana y salimos trasquilados”.

Reconocemos este hecho como un lenguaje único, en donde el teatro ingresa al aula de forma
natural y sin conducción docente ¿Cómo queremos insertar al teatro dentro del curriculum?
¿Como una experiencia externa o una herramienta inherente y existente en cada grupo
humano? Ingresar al aula de clases de una comunidad educativa es entrar en un espacio de
confianza, poseedor de características únicas, íntimamente conectadas con las relaciones
interpersonales que allí se desarrollan, sus códigos y sus lenguaje. Cada visita es un nuevo
entendimiento sobre la identidad que cada aula posee. Hemos podido comprobar que se hace
preciso escuchar y usar su lenguaje y códigos para lograr confianza, o por lo menos cierta
apertura que entendemos como el punto de inicio a una nueva disposición al aprendizaje. El
presente total con que trabajamos las actrices y actores ayuda a agudizar esa escucha; no sólo
venimos a pasar contenidos, sino a compartir con los estudiantes. A través de nuestra
intervención buscamos ser una puerta de entrada al ejercicio teatral, sin embargo, anécdotas
como la recién descrita nos demuestran que los niños, niñas y jóvenes habitan la
performatividad como lenguaje propio en las aulas y los patios de nuestros establecimientos.
Nos preocupa que el teatro sea visto únicamente como la puesta en escena de un fenómeno
literario, sin reparar en el proceso de creación teatral como un germen capaz de potenciar
habilidades de trabajo en equipo, motivar la cooperación transdisciplinaria, el intercambio
respetuoso de ideas y reflexiones nuevas.

No en un aula particular, sino que en la gran mayoría de las salas de clases en las cuales
ingresamos, los estudiantes usan el espacio del aula según su rol y sus relaciones dentro del
grupo humano. Pareciera ser que la sala de clases es una puesta en escena. Por ejemplo,
hemos observado que usualmente quienes no se sienten parte del sistema educativo utilizan
como mecanismo de defensa, o resistencia, sentándose al final de la sala. No es raro que ellos
sean quienes más actúen con nosotros, llamando nuestra atención con interrupciones que
causan risa al colectivo. Se sienten cómodos en el espacio teatral, responden nuestras
preguntas, a veces formulan nuevas, participan de los juegos, son capaces de proponer nuevos
y así quienes partieron sentados en la galería se transforman en unos actores más. Incluso
aquellos que se sienten excluidos del grupo por su baja autoestima, o por el hecho de ser
distintos, disruptivos, encuentran en la intervención un espacio para participar con sus
respuesta precisas, con preguntas que abren ventanas hacia contenidos nuevos, observaciones
que surgen a partir de análisis profundos. La irrupción de este ambiente teatral dentro del aula
permite una actitud inclusiva, vinculante, capaz de dar valor a la diversidad y al dinamismo
de los roles dentro del grupo. Cuán beneficioso podría resultar para la comunidad educativa
amplificar lo que sucede en el aula con el establecimiento completo. El aula posee
disposición, identidad y juego, una comunidad por lo tanto es aquello que sostiene esta
estructura. La inclusión del teatro dentro del currículum podría ser el puente de unificación y
entendimiento identitario de toda la comunidad educativa.

“-¡Ah Profe! ¿Cómo nos va hacer clases ahora?-” suelen decir los estudiantes cuando nos
retiramos de la sala, los profesores a veces nos tiran la pelota bromeando “-Me dejaron la
vara alta pues chiquillos”. Tenemos claro que este acto disruptivo no sólo es una
interpelación al estudiantado, sino también una muy directa al docente, quienes también
sienten la necesidad de revisar la noción de aula y refrescar el rol que cada uno representa en
ella. Nuestra intervención es sin duda un aporte al desarrollo y traspaso de contenido
correspondiente al género dramático, pero el gran desafío se instala al constatar que las
nuevas formas de aprendizaje comienzan a empujar efectivamente la revisión de los recursos
que los profesores y profesoras utilizan dentro del aula. Es por ello que creemos que la labor
docente también debe fortalecerse con la inclusión del teatro en el currículo escolar. Primero
entendiendo que son ellos y ellas los actores reales y conocedores de la realidad estudiantil,
segundo apoyando esta labor desde una inclusión acorde a las necesidades curriculares y/o
habilidades a desarrollar y tercero ejerciendo injerencia desde la difícil realidad en la cual
conviven la gran mayoría de los establecimientos educacionales en nuestro país. Esta
inclusión del teatro en el aula promueve establecer al profesorado como eje fundamental en la
aparición de las formas en que entendemos la participación y desarrollo identitario de la
comunidad escolar, creemos que una posible noción del docente como performer y el aula
como un espacio escénico puede ayudar mucho en esa revisión. Entonces el desafío
nuevamente es colectivo.

Hacia la formación ciudadana.


Año 2017, volvemos al mismo Liceo de Maipú e ingresamos a una de las salas intervenidas.
4 años después, nos encontramos con una cara conocida, pero más madura, de hecho este
estudiante cursa segundo medio. “-Nosotros lo conocemos a usted...-” comentamos
sorprendidos. “-Si pues, tío. Nosotros les hicimos esa broma… ¿Se acuerda?-” pregunta con
un dejo de picardía en los ojos. ¿Cómo no nos vamos a acordar? Ese tipo de encuentros son
indelebles, los aprendizajes significativos no sólo los viven ellos. 4 años después, volvemos a
repetir el chiste “Muéranse”. A propósito del paso del tiempo, nos preguntamos ¿Cómo
Teatro en tu sala es capaz de estar a la altura de la contingencia educativa nacional? Tras 6
años de ininterrumpido funcionamiento visitando cientos de establecimientos de nuestros país
¿Cuál es el futuro de esta herramienta? Movidos por una incómoda sensación de
desvinculación de nuestros contenidos con el presente de nuestra sociedad y del territorio que
habitamos, sumado a la omisión del desarrollo escénico en nuestro país como un contenido
tan provocador como Shakespeare o el Siglo de Oro español es que este año comenzamos el
diseño de una nueva intervención que llega como respuesta a esta y otras interrogantes:
“Teatro en Tu Sala: Formación Ciudadana”.

En esta búsqueda de nuevos referentes conocimos la ley 20.911 impulsada por el Ministerio
de Educación. Dicha ley, establece que los establecimientos educacionales reconocidos por el
Estado deberán incluir en los niveles de enseñanza parvularia, básica y media un Plan de
"Formación Ciudadana”, que entre sus objetivos principales cabe mencionar: formar una
ciudadanía activa en el ejercicio y cumplimiento de sus derechos y deberes, fomentar en los
estudiantes el ejercicio de una ciudadanía crítica, responsable, respetuosa, abierta y creativa,
fomentar en los estudiantes la valoración de la diversidad social y cultural del país y
fomentar la participación de los estudiantes en temas de interés público. Nos sentimos
profundamente interpelados por este plan, ya que reconocemos en él inquietudes comunes.
Creemos que debemos hacernos parte de la implementación de acciones concretas que
permitan cumplir con estos objetivos por medio del teatro. Por ello, tras el estudio de esta ley
y el informe de Orientaciones Curriculares del Ministerio de Educación, elaboramos una
nueva intervención para ser implementada por la Corporación de las Artes de la
Representación y la Educación. Teatro en Tu Sala: Formación Ciudadana.

El enfoque de este proyecto, postulado a financiamiento FONDART 2017, pretende entregar


a miles de estudiantes una visión y relación entre puntos clave en el desarrollo del teatro en
Chile y la construcción social, política e histórica a lo largo de la historia de nuestro país. Si
bien nuestra intervención ha demostrado ser una herramienta eficiente en el traspaso de
contenido correspondiente al género dramático, y el teatro es actualmente un aporte a la
educación en Chile gracias a distintas instancias, agentes e instituciones culturales de carácter
público y privado, creemos que nuestra misión como educadores en el arte radica en formar a
ciudadanos atentos a los cambios sociales, críticos ante su realidad y profundamente
enraizados a una identidad que muchas veces se encuentra escondida por el sistema sesgado
que muchos establecimientos proponen. Sinceramente queremos que este acuerdo de ley de
inclusión del teatro dentro del currículum formal, no comprenda al teatro como un contenido
más dentro de tantos otros que resultan ser impuestos y lejanos de la realidad del
estudiantado. Más bien, buscamos lograr que el contenido teatral sea una herramienta que
mueva a la acción de la comunidad educativa completa a través de la identificación con el
lenguaje performativo que, como hemos podido constatar, nos resulta tan propio a todas y
todos. Nuestra preocupación por no quedar atrás de los procesos que nuestro país vive nos
tienen cruzados entre el acuerdo de ley que incluiría la inclusión de teatro dentro del
currículum formal y la ley 20.911 que promueve formar a ciudadanos conscientes de la
realidad política del lugar donde viven, hoy queremos que Teatro en tu sala abra a la
reflexión sobre el cómo podemos, actrices y actores, aportar al desarrollo de los profundos
avances educativos que desde hace un tiempo requerimos de forma urgente como sociedad.
La educación en torno al arte y sus múltiples aristas, permiten que hoy fijemos nuestra
atención en la comunidad como un ente activo y participativo de las reformas educacionales.
Estudiantes, profesores y artistas en busca de una educación acorde con las necesidades y
características reales de nuestro país, un camino que debemos urgentemente crear e imaginar.

Gabriela Arroyo Cifuentes, Jorge Ortiz Coloma.


Corporación de las Artes de la Representación y la Educación, C.A.R.E.

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