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Proyecto
Bogotá D.C
2017
Bogotá cachaca.
Proyecto
Bogotá D.C
2017
Introducción.
Este proyecto tratará acerca del análisis de distintos puntos o lugares turísticos de Bogotá, a
medio virtual, la resolución de un problema paso a paso, objetivos planteados a partir del
observar como desarrollan las actividades comprendidas en estos lugares, se determinará la causa
La presente investigación busca informar a la población sobre los diferentes sitios turísticos que
importancia que representan estos lugares con su respectivo aporte a la sociedad para los
visitantes, intentando encontrar una posible solución, recopilar la información más importante de
Se busca concientizar a los visitantes para que aprovechen al máximo los recursos que ofrecen
los distintos lugares turísticos en Bogotá, para que empleen de forma responsable y activa el
Pregunta problema.
¿Por qué los visitantes de los distintossitios turísticos de Bogotá no conocen la verdadera
Delimitación.
Analizar la conducta de los visitantes en los distintos sitios turísticos para obtener la información
necesaria para determinar el uso de los recursos brindados por estos lugares turísticos, estructurar
Objetivos Específicos.
Limitación.
Se ha determinado la falta de interés por aprender por parte de los visitantes de los lugares
posibilidad de usar el tiempo en este sitio para aprender en lugar de esto, se usa más de ocio, y el
información ofrecida en estos sitios. Una posible solución sería, cambiar los temas de interés
desde la educación, ya que al ser un tema cultural solo un cambio a temprana edad puede
cambiar la futura situación de las personas en el país, otra posible solución sería reducir la
información en estos sitios solamente nombrando las características más importantes de cada
tema.
Marco Teórico.
con una cultura democrática pobre, son algunas de las características de la mayoría de bogotanos,
Si usted es el bogotano clásico no es porque almuerce ajiaco y diga ala. El gobierno de Bogotá,
después de entrevistar a 13.010 capitalinos en la más grande fotografía que se haya hecho en la
ciudad, la Encuesta Bienal de Culturas, acaba de descubrir quiénes son los bogotanos
Si usted es bogotano de nacimiento (como el 58 por ciento), con mamá y papá venidos de otros
municipios (más del 65 por ciento), vive acompañado (97 por ciento), vive en la misma casa
desde hace 5 o más años (60 por ciento), no se autodefine de ninguna raza en particular (el 58
por ciento), e hizo parte o terminó la secundaria (53 por ciento), ya pagó su casa propia o la está
pagando (51 por ciento), trabaja o estudia o las dos (71 por ciento) y tiene un nivel
socioeconómico bajo (51 por ciento), una mayoría de capitalinos se parece mucho a usted.
En general, dice Otty Patiño, uno de los diseñadores de la encuesta director del Observatorio de
Mauricio Silva, otro de los autores de este retrato de la cultura bogotana: "Hay una mayor
apropiación de los derechos y la tolerancia con perspectivas de mejorar. Los cambios culturales
son lentos". La encuesta se hizo para saber más precisamente cómo son los bogotanos, y poder
enfocar la acción política, localidad por localidad, según las necesidades de la gente.
En materia de opiniones hay contradicciones fuertes. Pero entre tanta opinión distinta entre
viejos y niños, mujeres y muchachos, pobres y ricos, sí se pueden encontrar unas cinco
tendencias mayoritarias. A grosso modo se podría decir que los bogotanos comparten valores de
más preocupante, su cultura democrática es pobre y hay grupos minoritarios que aún tienen
Los bogotanos según la entrevista, en promedio creen en Dios y siguen normas conservadoras,
acusan a las demás personas sin conocerlas, ya que creen que todos piensan igual que ellos,
juzgándolos por lo que parecen ser y no por lo que en realidad son, con el autoconvencimiento
como arma si en algún momento se demuestra lo contrario, no saben lo necesario sobre política,
pero aún así critican la misma al ser influenciados por el pensamiento de la mayoría, es irónico
que critiquen la forma de gobierno del estado, pero que cuando se presente un problema lo
“Puede que usted no se sienta reflejado en estas cinco tendencias porque son generalizaciones a
partir de las respuestas más comunes. Por eso a continuación encontrará un poco más detalle
1. Civilizados:
Las dos terceras partes de los capitalinos dicen que cumplirían una norma absurda porque hay
que cumplir las normas, y otra gran mayoría opina que si todos cumpliéramos la ley habría
menos violencia. Reconocen que cuando hay basura tirada es sobre todo responsabilidad de los
Y el asunto no parece ser sólo de labios para afuera porque cuando les preguntan cuáles son los
problemas del vecindario, nos sentimos de pronto trasladados a Suiza, pues el problema que más
mencionan es que las mascotas de otros ensucian, el segundo que la gente no saca la basura, y el
tercero que hagan fiestas ruidosas. (Aunque un 40 por ciento dice que las peleas de borrachos
son graves, y que los jóvenes son violentos). También es síntoma de civilidad que al 70 por
ciento le gustaría que prohibieran las armas de fuego, con o sin salvoconducto. Un dato notable
que si cumpliesen las normas, todo estaría mejor, conocen que es lo que daña a la ciudad, pero
“La solidaridad también se adivina. Apenas un 7 por ciento reconoce que no paga las cuotas de
civilización. El 70 por ciento dice que se ayuda con los vecinos, y uno de cada cuatro cuenta que
suele organizar o participar en las fiestas navideñas del vecindario. Y si lo molestan con música
estridente a media noche, 89 por ciento acude a medidas razonables: hablar con el vecino, llamar
a la policía o tratar de ser tolerante con quien se está divirtiendo y no hacer nada. “
Analizando lo anterior, más que solidaridad, se puede pensar que si las personas se ayudan entre
sí para pagar la administración, es porque saben que sin ayuda no podrían hacerlo y deciden
similar.
“Es que, después de tanto martillar los gobiernos que hemos tenido, sobre el espacio público, la
gente lo defiende: un 77 por ciento dice que no aprueba que los negocios ocupen el andén y el 68
que tampoco les gusta que lo ocupen los vendedores ambulantes. Aún cuando se trate de la
seguridad propia, la mitad de la gente responde que no justifica que cierren un barrio para
protección de los vecinos. Anuncian que consideran espaciosos sus parques y espacios
quedara más fácil amar de lejos que cuando conocen demasiado. Un poco más de la mitad confía
en los vecinos, algo bastante en una gran ciudad cosmopolita y fría como Bogotá.
La gente está agradecida con su ciudad; más de las tres cuartas partes reconoce que esta les ha
Civilizados sí, pero nada participativos. Más bien, un poco indiferentes. No les molesta si alguien
cambia de partido, religión, nombre, aspecto o nacionalidad (en todas más del 60 por ciento), una
señal que puede leerse como liberalidad, pero que en conjunto pareciera más un síntoma de que
les tiene sin cuidado. El 62 por ciento no pertenece a grupo alguno, y entre los que pertenecen
También muestran moderación en materia política, una tercera parte dice que no sabe si es de
izquierda o de derecha y otro tanto se define de centro en el espectro político. De todos modos la
No hay pertenencia a un grupo, es decir no saben que ideas apoyan, todo se centra en buscar
vivir de manera sostenible, existe indiferencia hacia temas políticos, si no se afecta a la persona o
si hay algo que aún pesa mucho en la sociedad bogotana son los valores conservadores frente a la
familia. Un 77 por ciento se dice católico y otro 14 por ciento, cristiano. Uno de cada cinco que
dice pertenecer a cualquier organización, dice que es miembro de una iglesia. Confían sobretodo
en su familia (el 94 por ciento en algún grado), son más reacios al aborto de lo que la ley permite
(un 48 por ciento dice que debería estar prohibido a toda costa). Una cuarta parte no quiere vivir
en la casa de al lado de un gay y uno de cada diez no desearía que su vecino fuera de la
farándula.
En el terreno de cómo tratar a las minorías gays la encuesta arroja mucha confusión. Porque una
población considerable, el 39 por ciento, dice que defendería a alguien de la población LGBTI si
es atacado. “
hace de forma inconsciente por la cultura, ya que comúnmente al escuchar a una persona
juzgando a la población LGBTI, al preguntarle por qué es malo dice, que es porque eso le
“Explica Otty Patiño: "Con respecto a anteriores estudios creo que ha disminuido la intolerancia
hacia los homosexuales, pero por las noticias de la pederastia la gente equipara a ser gay con ser
corruptor. De todas maneras pensaría que marcamos mejor que otras ciudades".
Sus ideas sobre la educación de las mujeres son también tradicionales: la mitad piensa que las
niñas deben ser educadas para ser madres y esposas, y un grupo pequeño de 16 por ciento, pero
muy considerable a estas alturas de la historia, opina que si ocupan cargos directivos perderán su
Esto se podría ver desde otro lado. Y pensar que a pesar de la urbanización reciente y los escasos
años de educación que tienen las mayorías bogotanas, es notable que ya haya grupos grandes de
la sociedad que piensen que una educación adecuada para mujeres no debe ser decirles como ser
esposa y madre (el 45 por ciento) o con que no tengan problema con que homosexuales sean
3. Prejuiciosos:
En esta materia, las noticias que nos trae la encuesta son menos buenas. Aunque no sea la
opinión mayoritaria, creencias tan discriminatorias como pensar que muchas religiones dañan los
valores, o que "por sus características los negros siempre tendrán limitaciones" son compartidas
por grupos considerables. El 48 por ciento en el primer caso, y un escandaloso 28 por ciento en
el segundo.
Hay otros prejuicios populares que han llegado a calar en las mayorías como que los
homosexuales no deben ser profesores de colegio (57 por ciento), los pobres suelen ser más
delincuentes (62 por ciento), y hay barrios de gente peligrosa (71 por ciento). Esos prejuicios
sociales causan dolor a los conciudadanos. El 15 por ciento que confiesa haberse sentido
discriminado dice que fue por su apariencia física, su edad o sus condiciones económicas.
"Este tema de la discriminación contra los pobres es el más escandaloso, por ser pobre ya se
considera a la persona sospechosa –dice Patiño–. La ironía es que mucha gente es pobre porque
no es propensa al delito".
Una sorpresa revela el estudio de opinión sobre la sensibilidad bogotana frente a los enfermos de
SIDA, un rotundo 81 por ciento dice que no hay que aislarlos. Algo similar sucede con los ex
drogadictos, y un 60 por ciento es tan liberal al respecto que dice que no ve lío con que les den
cargos directivos. En muchos países con seguridad la cosa sería bien distinta. “
Observación.
Al ir al parque botánico José Celestino, pude darme cuenta que había una diversidad muy
generosa de personas que al parecer iban por paseos de familia, o de amigos. Algunos que
estudiaban este lugar, y también aquellas que iban para ver la verdadera hermosura de aquel
lugar. A medida que iba avanzando y admirando el lugar, pude darme cuenta del verdadero
interés y respeto que le tiene la sociedad a este lugar, yo pensaba que tal vez no lo valoraba, pero
lo hace como debería hacerlo, las personas se veían felices y la mayoría al parecer ya conocía el
jardín. A decir verdad y hablar con una persona sobre su opinión acerca de este espacio, en pocas
palabras me dijo que no era su primera vez allí y que conocía perfectamente cada planta que
estáallá, que desde hace tiempo atrás que el asistía, las personas siempre guardaron un profundo
allí, lo que mayor se observó, fue como tomaban fotos a cada objeto, pero no se tomaban el
tiempo para leer la descripción de los mismos, habían varias familias que solo admiraban lo que
les parecía curioso o extraño, observé a un extranjero el cual si se tomó el tiempo suficiente para
observar cada cosa detenidamente, como hablaba otro idioma, tuvo que preguntarle a un amigo
que si podía entender la descripción, fue interesante ver que aunque fuese un poco molesto para
él tener que preguntar por cada cosa, igual lo hizo, su cultura es diferente. En Monserrate, vi
mucho interés en el recorrido, pero para ser Semana Santa no detecté un interés hacia la iglesia ni
a la actividad realizada allí, no se consideró como lo más relevantes o al menos no por todos, ya
Experimentación.
algo increíble, excepto por el transporte, pero bueno, el conocer de verdad los diferentes lugares
en persona y llenarnos de orgullo al conocer las bellezas que tiene esta ciudad, nos motivan a
seguir nuestra misión, Ya hemos visitado algunos lugres, y a decir verdad, hemos aprendido y
pasado ratos muy agradables en familia, además de que el ambiente y conocimiento que ofrecen
estos lugares son los ideales para sentirse a gusto y hasta identificado, solo nos llevamos muy
buenas impresiones de cada lugar, y sabemos que los demás, nos ofrecerán mejores experiencias
La comunidad turística que tiene como objetivo a Bogotá Colombia, se desempeña en crear
tendencias por medio de las TIC, dejando a un lado la verdadera importancia de estas, los
Bogotanos como ejemplo directo, no saben la verdadera historia que está en cada una de las
formas que se manifiestan en estos lugares, ya que ellos también crean tendencia, pero no
conocimiento, y este error, es la actualidad, los productos de la globalización, y las personas que
no tienen identidad.
Referencias.
http://www.semana.com/nacion/problemas-sociales/articulo/un-retrato-cultura-ciudadana-
bogotanos/115625-3