Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Las primeras civilizaciones en suelo europeo se encuentran en el Ego. En Creta quedan restos de
una primera carretera, que a través de un puente de piedra conducía hasta el palacio de Cnosos,
centro de la civilización minoica, contemporánea de la egipcia y la mesopotámica.
La enorme extensión que llego a abarcar el Imperio Romano, hizo de las comunicaciones una
cuestión esencial para la propia administración y control de los diversos pueblos.
El poderío militar y el comercio de los dos principales pilares de Roma, difícilmente habrían podido
resistir durante siglos si la movilidad que les proporcionaban las vías de comunicación no hubiera
multiplicado la eficacia de unos medios limitados. Ellos hicieron posible la omnipresencia de los
ejércitos romanos.
LAS CALZADAS :
Las vías de comunicación dentro del Imperio Romano tejieron una amplia red por gran parte del
territorio, uniendo entre sí y con la capital, Roma, las principales ciudades y puestos militares
estratégicos.
Siguieron en principio las primeras rutas que abrieron las tropas en sus conquistas de nuevos
territorios y las vías seguidas por el comercio.
En su inicio fueron simples caminos, que libres de vegetación y de grandes obstáculos facilitaban
enormemente el avance de los carros o la marcha rápida de ejércitos pero pronto comenzaron a
realizarse mejoras, en especial en aquellos que unían los puntos más importantes.
Algunos caminos se reforzaron con adoquines o losas de piedra que permitieron transitar por
lugares que la lluvia y el lodo impedían con anterioridad. Otros se convirtieron, por así decirlo, en
prolongaciones de las avenidas de entrada y de salida de Roma, que a lo largo de cientos de
kilómetros constituyeron las vías principales. Constaban de una base apisonada sobre la que
colocaban los adoquines y las losas sementads, reforzándose los bordes con piedra formando
arcenes y bordillos. La estructura de las vías principales era de gran robustez hasta el punto de que
todavía en la actualidad son transitables.
LAS CARRETERAS:
Las carreteras como tal las conocemos en la actualidad son muchas veces el perfeccionamiento de
antiguas rutas y caminos existentes ya en tiempos que se remotan a menudo a muchos siglos. Así,
numerosos ejes de comunicación principales en todos los países europeos siguen rutas ocupadas
antaños por calzadas romanas, estando muchos casos superpuestas a ellas.
A comienzos del siglo XIX, con la creciente necesidad de vías de comunicación a consecuencia de la
industrialización generalizada, el británico J Mac Adam creó un sistema de afianzamiento de los
caminos, conocido como macadán y que consistía en cubrir la superficie con una capa de piedras
trozadas que se apisonaban, aportándole así la consistencia adecuada y además dándole una
ligera forma arqueada de modo que el agua de lluvia no se encharque y corra hacia las cunetas
laterales.
Construcción y estructura. Sobre la base del macadán, los avances tecnológicos han permitido ir
perfeccionando la pista de rodadura, adecuándola a las necesidades de los vehículos modernos. El
elemento fundamental de una carretera es la calzada, que consta de una base y una capa de
rodadura.
Desarrollo de las carreteras. En Norteamérica las carreteras fueron construyéndose durante el
siglo XIX de manera simultanea a las vías del ferrocarril, aunque desde comienzos del siglo XX
aquellas han experimentado un avance mucho mayor. Una vía destacada es la carretera
panamericana, que desde Estados Unidos, discurre por todo el continente americano hasta llegar
al sur de Chile. En Europa el desarrollo ha seguido la larga tradición romana y en la actualidad una
densa red une todas las localidades del continente.
La Autopista. Constituye un avance notable sobre la carretera y es resultado directo de la
importancia cada vez mayor que en le curso del presente siglo ha adquirido el automóvil. Se le
define básicamente como una vía de circulación rápida de dos calzadas separadas por una valla o
una franja de terreno mas o menos ancha, sin cruces y con accesos restringidos.
La construcción de una autopista sigue, en principio las mismas pautas que las de una carretera
convencional, aunque el propio fin al que esta destinado impone unos condicionantes particulares,
es decir, garantizar una elevada velocidad y una masa de trafico importante.
Los carriles de ferrocarril. El avance que suponía el desplazamiento de carretillas sobre un carril,
empleado en la minería, tuvo también sus aplicaciones en otras actividades. Así, a finales del siglo
XV encontramos cortas vías de dos carriles que se empleaban para desplazar materiales y
maquinarias en las construcciones militares y también para mover plataformas en los canales. La
ventaja del empleo de carriles es evidente, sobre todo en las galerías de las minas, donde
difícilmente hubiera sido posible arrastrar carretillas.
Las líneas aéreas comerciales están sujetas a mayor numero e normas de seguridad que los
automóviles, y vuelan a lo largo de vías aéreas o de carriles aéreos tal como los automóviles hacen
en las autopistas terrestres. La Jet Eighty, por ejemplo, es la principal arteria aérea que cruza la
zona central de los Estados Unidos. Las rutas aéreas no conectan necesariamente las ciudades;
siguen las ondas de radio emitidas desde los controles de vuelo, que distan entre 320 y 480 Km.
Excepto cuando deben desviarse debido a malas condiciones de tiempo, los pilotos siguen las vías
aéreas de control en control.
Para vuelos de larga duración se utilizan computadoras que establecen las rutas más veloces que
impliquen un menor consumo de combustible. El coste del combustible conforma el 25% del coste
global el vuelo. También se disponen las altitudes que permiten el vuelo más rentable, en otros
tiempos se creía que lo más idóneo era viajar a la mayor altitud posible, pero un jet cargado de
carburante consume excesivamente antes de alcanzar dicha cota, por lo tanto, se va ascendiendo
por etapas, a medida que el avión se aligera, puesto que va consumiendo combustible.
Los vuelos de largas distancias dirigidos por computadoras, siguen rutas que difieren bastante de
las que se establecerían mirando en el mapa tradicional que presenta el mundo plano. El tiempo y
las condiciones de tráfico ayudan a determinar la mejor ruta. Los vuelos de Los Ángeles a Londres,
por ejemplo, quizás crucen en diagonal a los Estados Unidos o vuelen en dirección norte a
Winnipeg, cruzando sobre Canadá, Groenlandia e Islandia, para luego dirigirse al sureste hacia
Londres.