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IGLESIA PENTECOSTAL UNIDA DE VENEZUELA COLÓN - CENTRAL

¿Debe callar o no la mujer en la congregación?

1Ti 2:9 Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con
peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos,
1Ti 2:10 sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad.
1Ti 2:11 La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción.
1Ti 2:12 Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar
en silencio.
1Ti 2:13 Porque Adán fue formado primero, después Eva;
1Ti 2:14 y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en
transgresión.
1Ti 2:15 Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con
modestia.

Para entender estos versículos, debemos entender la situación en la que trabajaban Pablo y
Timoteo. En el primer siglo de la cultura judía, a las mujeres no se les permitía estudiar. Cuando
Pablo dice que las mujeres deben aprender en silencio y total sumisión, les está ofreciendo una
sorprendente nueva oportunidad. Pablo no quiso que las mujeres de Éfeso enseñaran porque aun no
tenían suficiente conocimiento o experiencia. La iglesia en Éfeso tenía un problema particular con los
falsos maestros. Evidentemente las mujeres eran especialmente susceptibles a sus falsas
enseñanzas (2Ti 3:1-9) porque todavía no habían recibido instrucción bíblica suficiente para poder
discernir la verdad. Además, algunas de las mujeres, aparentemente, hacían alarde de su nueva
libertad cristiana usando ropa inadecuada (2Ti 2:9). Pablo decía a Timoteo que no debía poner a
nadie (en este caso, mujeres) en posición de liderazgo si todavía no era maduro en la fe (véase 1Ti
5:22).

1Ti 2:12 Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar
en silencio.

Algunos interpretan este pasaje como que las mujeres nunca deberían enseñar en las reuniones de
la iglesia. Sin embargo, otros dicen que Pablo no prohibió siempre a que la mujer enseñara. La
reconocida colaboradora de Pablo, Priscila, enseñó a Apolos, el gran predicador (Hechos 18:24-26).
Además, con frecuencia Pablo menciona a otras mujeres que tenían posiciones de responsabilidad
en la iglesia. Febe trabajó en la iglesia (Rom_16:1). María, Trifena y Trifosa eran obreras del Señor
(Rom_16:6, Rom_16:12) así como lo fueron Evodia y Síntique (Filipenses 4:2).

En la referencia de Pablo de que las mujeres estén en silencio, la palabra silencio expresa una
actitud de quietud y compostura. (Para comunicar "completo silencio" usualmente se utiliza en el
griego una palabra diferente.) Además, el propio Pablo reconoce que las mujeres públicamente
oraban y profetizaban (1Co 11:5). Aparentemente, sin embargo, las mujeres en la iglesia de Éfeso
estaban abusando de su recién adquirida libertad cristiana. Debido a que estas mujeres eran recién
convertidas, no tenían la experiencia necesaria, el conocimiento o la madurez cristiana para enseñar
a aquellos que ya poseían una buena educación bíblica.

Atentamente: Pastor. Andrés Bocanegra Rivera. Página 1


IGLESIA PENTECOSTAL UNIDA DE VENEZUELA COLÓN - CENTRAL

1Co 14:34 vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar,
sino que estén sujetas, como también la ley lo dice.

1Co 14:35 Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a sus maridos; porque es
indecoroso que una mujer hable en la congregación.

¿Significa esto que la mujer no puede hablar en los servicios de adoración a Dios hoy? Es claro, por
(1Corintios 11:5), que la mujer oraba y profetizaba en la adoración pública. También es claro, por los
capítulos 12 al 14 de 1 de Corintios, que a ella se le dan los dones espirituales y se la anima a
ejercitarlos dentro del cuerpo de Cristo. Las mujeres tienen mucho con que contribuir para participar
en los servicios de adoración a Dios.

En la cultura de Corinto no le estaba permitido a la mujer confrontar al hombre en público.


Aparentemente algunas mujeres que se convirtieron pensaban que el cristianismo les daba libertad
de hacerlo. Esto causó división en la iglesia. Más aún, las mujeres de aquella época no recibían
formación religiosa formal como los hombres. Ellas podían formular preguntas en el servicio de
adoración que podrían ser respondidas en la casa sin necesidad de interrumpir una actividad pública.
Pablo respondió que la mujer no podía alardear de su libertad en Cristo durante la adoración pública.
La exhortación de Pablo apunta a promover la unidad, no a enseñar acerca del rol de la mujer en la
iglesia.

Vemos claramente que Pablo, no quería hacer distinción entre la mujer y el hombre queriendo entrar
en un terreno machista, solo quería guardar el orden y unidad dentro del cuerpo de Cristo, y los
servicios públicos. Hoy en día esto lo vemos reflejado con los nuevos creyentes, ellos deben llegar a
ser firmes y sólidos en su fe antes de asumir el rol de líderes en la iglesia. Demasiado a menudo,
cuando la iglesia busca desesperadamente obreros, ubica a nuevos creyentes en cargos de
responsabilidad para los que no están preparados. La nueva fe necesita tiempo para madurar. Los
nuevos creyentes deberían tener un lugar de servicio pero no deberían ocupar puestos de liderazgo
mientras no se hallen enraizados firmemente en su fe, con un sólido estilo de vida cristiana y
conocimiento de la Palabra de Dios.

Lo mismo acontecía con las mujeres en Éfeso, no estaban aun preparadas para el liderazgo efectivo
en la iglesia y el Apóstol les hace esta observación.

Atentamente: Pastor. Andrés Bocanegra Rivera. Página 2

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