Chinchilla de cola larga

(Chinchilla lanigera)

Ha habido épocas dónde las chinchillas se han puesto muy de moda como animales
de compañía, y de hecho es posible que hayas tenido o sigas teniendo una chinchilla
en casa. Estamos hablando de chinchillas domésticas.

Sin embargo, la chinchilla de cola larga, que se trata de la chinchilla salvaje, se

encuentra actualmente en peligro de extinción, y además se ha catalogado su estado
como crítico. El rápido declive de su población en los últimos quince años, ha hecho
que su situación actualmente sea preocupante.

CARACTERÍSTICAS
La chinchilla de cola larga también se le conoce como chinchilla chilena o costera, así
como chinchilla costina o menor.

Tiene una longitud de cuerpo que se sitúa en los 26 centímetros aproximadamente,

mientras que su cola mide unos trece centímetros. Destaca por sus orejas de grandes
dimensiones en comparación con el resto del cuerpo, pudiendo alcanzar los 4.5
centímetros. El peso de esta especie oscila entre los 600 y los 800 gramos, siendo las
hembras en este caso, más grandes que los machos.

Destaca también por su cola característica que la usa como contrapeso en el momento
de correr de las garras de sus depredadores, y le permite así asumir velocidades
elevadas.

Tiene un pelaje sedoso y muy suave, pudiendo ser este uno de los motivos por los que
en muchas ocasiones se ha optado por tener una chinchilla como mascota. Su pelo es
de color gris con tonalidades blancas, así como alguna banda en color negro. El pelaje,
que puede alcanzar los cuatro centímetros de largo, le protege de las condiciones
extremas de sequedad o frío, en el hábitat dónde se encuentra.

Tampoco pasan desapercibidos sus bigotes llamados vibrisas, que pueden llegar a
tener una longitud de 13 centímetros. Su actividad es nocturna, aunque también
puede verse durante el día, en el momento que hay temperaturas bajas en el entorno.

Su dieta se compone de todo tipo de hierbas, pastos y plantas, y cambia durante las
diferentes épocas del año, alimentándose de las especies botánicas de cada
temporada. En ocasiones también se alimenta de insectos o incluso huevos de aves, y
no necesitan consumir agua, ya que tienen suficiente con el agua de las plantas que
ingieren.

LOCALIZACIÓN Y HÁBITAT
La chinchilla de cola larga es propia de América del Sur, pudiendo encontrar
ejemplares de esta especie por todos los Andes y montañas de la costa de Talca, así
como en el norte de Chile. También se postula la posibilidad de que puedan haber
pequeñas familias en Argentina, pero todavía no se ha confirmado dicha información.

Busca zonas áridas para convivir, así como zonas escarpadas y montañosas de los
Andes. Suele encontrarse entre los 400 y los 2.000 metros de altitud. Puede soportar
temperaturas superiores a los 30º en verano, mientras que en invierno convive con
una temperatura media de 7º.
AMENAZAS
La explotación del terreno por parte del ser humano se mantiene como una amenaza
presente para la chinchilla de cola larga, ya que se encarga de destruir su hábitat.

Por otro lado, ha incrementado la población de uno de sus principales depredadores,

el zorro, por lo que viven en peligro constante. En definitiva, puede ser que de cara a
los próximos años, la chinchilla de cola larga, en estado salvaje, termine
desapareciendo.