Vous êtes sur la page 1sur 11

Crisanto Gutiérrez es investigador en el Centro de Biología Molecular

Severo Ochoa, centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones


C”r§Üû•ZDÒ ë ›D 7§”èrÍÒ”fDf AæÜþ§«¡D fr $DfÍ” f» AZÜæD› ¡r§Ür rÒÜæf”D
›«Ò ¡rZD§” Ò¡«Ò fr Z««Íf”§DZ”þ§ r§ÜÍr › D µÍ«›”{rÍDZ”þ§ ë › D f”{rÍr§Z” D“
Z”þ§ Zr› æ› DÍ r§ r› frÒDÍÍ«› ›« èr†rÜD› »

B I OL OG ÍA DE L DE SARR OL L O

CÉLULAS
VEGETALES
MADRE Las plantas poseen células capaces de mantener un estado
indiferenciado y originar distintos tipos celulares
en cualquier momento de la vida del organismo adulto
Crisanto Gutiérrez

ċħĄĊąĉ ĶĈý÷Ąąĉ Ćąĉûû ċĄ ÿĄúÿČÿúċą ÷úċĂĊą úû ċĄ÷ ûĉĆû-

¿C
cie animal? Piense, por ejemplo, en una persona. Todos
sabemos que tenemos un cerebro, un corazón, dos pul-
mones, un hígado... ¿Y células? Aunque esta pregunta
resulta mucho más difícil de responder, podemos reali-
zar un cálculo aproximado. Según algunas estimaciones, nuestro cuer-
po contaría con unos 4 o 5 billones de células. Con independencia de la
exactitud de dicha cifra, podemos asegurar que dos humanos adultos no
se diferenciarán demasiado en ese aspecto. Sin embargo, cuando nos
planteamos el mismo tipo de preguntas acerca de una planta, nos en-
YedjhWcei Wdj[ bW Z_ÐYkbjWZ Z[ WfehjWh Y_\hWi jWd YedYh[jWi$ ;d bW cW-
yor parte de los casos, ni siquiera podremos aventurar el número de ór-
]Wdei (hW‡ Y[i" ^e`Wi e Ñeh[i) gk[ fei[[ kd [`[cfbWh l[][jWb WZkbje$
STERNENLAUS, BIRDY/WIKIMEDIA COMMONS/CC BY-SA 3.0

EN SÍNTE SIS

Una de las principales diferencias en- El crecimiento y desarrollo de una El equilibrio en los nichos de células Las células madre de animales y plan-
tre animales y plantas reside en los planta se deben a la actividad de los madre vegetales depende de una serie tas parecen utilizar estrategias seme-
procesos de formación de órganos. Al meristemos, grupos de células desde de bucles génicos que se autorregulan. jantes para resolver problemas biológi-
contrario que en los animales, la orga- los que se organiza la generación de Estos pueden originar un crecimiento cos similares. Sin embargo, la evolución
nogénesis vegetal constituye un pro- los diferentes tejidos. Los meristemos continuo, como ocurre con las hojas, u parece haber hallado diferentes meca-
ceso postembrionario que se prolonga poseen células análogas a las células otro que acaba con la formación del nismos moleculares para regular su
durante toda la vida. madre animales. ºà‘ D´¹j `¹®¹ ¨D Œ¹àÎ funcionamiento.

56 INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, agosto 2012


Brote de haya común (Fagus sylvatica). La orga-
nogénesis vegetal se prolonga durante toda la vida
de la planta adulta.

Agosto 2012, InvestigacionyCiencia.es 57


Ello no se debe a que el crecimiento de una planta proceda mos emplean para activar y detener los mecanismos de prolife-
de manera desordenada. Numerosos aspectos de su desarrollo, ración celular. Una planta adulta, constituida por células ya di-
como su tamaño, el de sus órganos o los lugares en los que se ferenciadas, conserva un gran potencial para iniciar dichos pro-
iniciará la formación de hojas, se encuentran sometidos a un cesos. Estos, sin embargo, no derivan en una transformación
estricto control genético. Sin embargo, las plantas poseen una celular oncogénica, como los que observamos en los animales.
característica muy peculiar: exhiben un crecimiento reiterativo Es más, las plantas son muy refractarias a engendrar tumores.
y continuo que, durante toda la vida del organismo adulto, po- Por tanto, los mecanismos moleculares que contribuyen a un
sibilita la reactivación de la división celular allí donde habrá de crecimiento vegetal ordenado y controlado revisten un gran in-
iniciarse la creación de nuevos órganos. terés no solo desde un punto de vista básico, sino también por
En un animal, el número, tamaño y posición de los órganos sus posibles implicaciones biotecnológicas y biomédicas.
ik[b[ gk[ZWh [if[Y_ÐYWZe ZkhWdj[ [b Z[iWhhebbe [cXh_edWh_e$ BW
organogénesis vegetal, por el contrario, constituye un proceso MERISTEMOS: ¿FUENTE DE ETERNA JUVENTUD?
fundamentalmente postembrionario. Incluso cuando ya ha com- El crecimiento y la organogénesis postembrionaria de la plan-
pletado su formación en la semilla, un embrión vegetal posee ta dependen de la actividad de ciertos grupos de células, rela-
aún una estructura muy primitiva. Algunas de sus células se en- tivamente pequeños pero muy especiales, denominados meris-
cuentran programadas genéticamente para generar diferentes temos (del griego meristós" »Z_l_i_Xb[¼)$ ;d [bbei" kdW feXbWY_Œd
tipos celulares nada más germinar y completar la formación de reducida de células —a veces, apenas una docena— posee ca-
los órganos embrionarios, como los cotiledones. Pero, por lo de- racterísticas citológicas no diferenciadas. Dichas células son
más, en él no se distinguen lo que serán los órganos de la plan- pluripotentes u originan células pluripotentes; es decir, aque-
jW WZkbjW" Yece bWi hW‡ Y[i" bWi ^e`Wi e bWi Ñeh[i$ Ik d‘ c[he o jW- llas con la capacidad de generar varios tipos de tejidos. En oca-
maño solo se determinará tras la germinación. Este proceso siones, algunas de ellas pueden producir todas las variedades
constituye una de las principales características del reino vege- celulares de la planta, en cuyo caso reciben el nombre de célu-
tal y uno de los recursos con los que cuentan las plantas para las totipotentes.
responder a los cambios del medio. Mientras que los animales Así pues, vemos que las células meristemáticas exhiben ca-
pueden reaccionar a las variaciones del entorno mudando de racterísticas análogas a las que se observan en las células ma-
localización, la mayoría de las plantas son organismos sésiles, Zh[ e fhe][d_jehWi Z[ bei Wd_cWb[i$ BWi Yƒ bkbWi cWZh[ i[ Z[Ð-
WdYbWZei W kd bk]Wh Ð`e [d bW j_[hhW$ 7i‡ " ik f[Ykb_Wh cWd[hW Z[ nen como aquellas capaces de dividirse y producir otras que, o
h[ifedZ[h W bei YWcX_ei WcX_[djWb[i Yedi_ij[ [d ceZ_ÐYWh bei bien permanecen como células madre, o bien pueden iniciar
patrones de crecimiento y formación de órganos. distintas rutas de diferenciación celular. En los animales, solo
Tales diferencias en el desarrollo de plantas y animales se [b p_]eje ([b Œlkbe \[YkdZWZe) o bWi Yƒ bkbWi h[ikbjWdj[i Z[ iki
plasman en las señales moleculares que ambos tipos de organis- primeras divisiones son totipotentes. Una planta adulta, por el

CORTESÍA DE B. DESVOYES Y S. OTERO, CENTRO DE BIOLOGÍA MOLECULAR SEVERO OCHOA (nicho de células madre); INVESTIGACIÓN Y CIENCIA (recreación de Arabidopsis thaliana)
CÉLULAS MADRE Y ORG A NOGÉNE SIS VE GETA L

Desarrollo continuo
Al contrario que en los animales, la organogénesis vegetal es un proceso postembrionario que se mantiene durante toda la vida del
organismo: las células vegetales poseen un enorme potencial para dividirse e iniciar nuevas rutas de diferenciación celular. En oca-
siones, una planta puede regenerarse por completo a partir de una porción de tallo, lo cual parece indicar que algunas células revier-
ten su estado diferenciado hacia otro proliferante, de célula madre o incluso de célula embrionaria. Es posible también que en el
órgano adulto queden células con capacidad para reprogramarse.

Células embrionarias
Se establecen en el embrión
las primeras células madre.

Células desdiferenciadas
Algunas células poseen la capacidad
Células madre de revertir su estado diferenciado
y volver a iniciar el ciclo.
Las células madre se
multiplican y comienzan
a diferenciarse.

Células diferenciadas Organogénesis


Células proliferantes La plántula crece, se desarrolla Formación de nuevos órganos,
Se inicia la formación de los y establece nichos adicionales `¹®¹ àD `yåj › ¹¦Då Ă Œ¹àyåÎ
primeros órganos tras la de células madre en varias
germinación de la semilla. localizaciones.

58 INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, agosto 2012


Ápice de la raíz: Las células del extremo de la raíz se encuentran Centro quiescente: En el interior del ápice de la raíz existe un
en continua división. Estas se identifican en el microscopio gra- grupo de apenas dos o cuatro células que forman el centro quies-
cias a sus paredes celulares (rojo). El núcleo celular se muestra cente (amarillo). Su función consiste en mantener las células que
en color verde. lo rodean en un estado de células madre.

contrario, cuenta con varias localizaciones en las que algunas temo se diferencian en un aspecto importante: mientras que el
de sus células mantienen durante toda la vida del vegetal la ca- c[h_ij[ce Z[ bW hW‡ p cWdj_[d[ ik WYj_l_ZWZ Z[ \ehcW _dZ[Ðd_ZW"
pacidad de reprogramarse para volver a un estado pluripoten- el meristemo apical del tallo puede llegar a convertirse en una
te o, incluso, totipotente. Un ejemplo sencillo de semejante fa- región cuya actividad cesa con el tiempo. Ello sucede cuando se
cultad lo apreciamos en la propagación vegetal por esquejes, en ][d[hW [b c[h_ij[ce ÑehWb" kdW [ijhkYjkhW cko [if[Y_Wb_pWZW
la que una planta se desarrolla por completo a partir de una YkoW jWh[W YedYbko[ Yed bW \ehcWY_Œd Z[ bW Ñeh$
porción de tallo fresco. En el laboratorio se ha logrado inducir Dada la falta de migración celular en las plantas, el número
este proceso de reproducción vegetativa en segmentos de órga- de células que componen una región meristemática y el volumen
dei ([nfbWdj[i)" Ykbj_l|dZebei Z[ \ehcW Wiƒ fj_YW o [ij_ckbWdZe que esta ocupa dependen de un estricto balance entre la produc-
mediante hormonas el desarrollo controlado de tallos u hojas. ción de células madre y la salida de ese estado hacia una senda
Sin embargo, aún no se ha averiguado con plena certeza qué cé- Z[ Z_\[h[dY_WY_Œd [if[Y‡ ÐYW$ ;dj[dZ[h bWi hkjWi ceb[YkbWh[i gk[
lulas vegetales poseen esa capacidad de desdiferenciación y pro- posibilitan esa proliferación continua pero equilibrada constitu-
CORTESÍA DE B. DESVOYES Y S. OTERO, CENTRO DE BIOLOGÍA MOLECULAR SEVERO OCHOA

liferación, ni tampoco cuáles son los mecanismos moleculares ye uno de los objetivos principales de la investigación actual.
que controlan dichos procesos.
Muy próximas a los extremos de la raíz y del tallo se encuen- CENTRO QUIESCENTE DE LA RAÍZ
tran sendas regiones meristemáticas que resultan decisivas para ;b [njh[ce Z[ bW hW‡ p i[ [dYk[djhW h[YkX_[hje feh bW YeÐW" kdW
el crecimiento de la planta. Estas agrupaciones de células, cuya capa protectora de forma cónica en cuyo interior se alberga el
_Z[dj_ZWZ i[ [if[Y_ÐYW ZkhWdj[ bW \Wi[ [cXh_edWh_W" h[Y_X[d [b meristemo apical de la raíz. En contacto inmediato con esta
nombre de meristemos apicales. Su función consiste en desarro- capa, hacia la zona más apical (la que se dirige hacia el interior
bbWh bWi hW‡ Y[i o bei Œh]Wdei Wƒh[ei Z[ bW fbWdjW (jWbbe" ^e`Wi o Ñe- Z[ bW j_[hhW)" i[ [dYk[djhW [b d‘ Yb[e eh]Wd_pWZeh Z[ bW WYj_l_ZWZ
h[i)$ ;d YWZW kde Z[ [bbei" kd Yed`kdje Z[ Yƒ bkbWi cWZh[ i[ [d- meristemática: el centro quiescente. Este se halla formado por
carga de proveer de células a los órganos en crecimiento. Duran- un pequeño grupo de apenas dos o cuatro células cuya tasa de
te este proceso, las células madre experimentan divisiones proliferación es muy lenta, cualidad a la que debe su nombre.
funcionalmente asimétricas: mientras que una de las descendien- Desde el centro quiescente y hacia la zona basal (la parte de la
tes permanece en el reservorio de células madre, la otra inicia hW‡ p [d YedjWYje Yed bW h[]_Œd Wƒh[W Z[ bW fbWdjW)" bW hW‡ p i[ Yec-
una senda de diferenciación. Tras varios ciclos reproductivos, di- pone de cilindros concéntricos de células que se organizan en
cho mecanismo dará lugar a los uno de los tejidos que compo- diferentes tejidos: el cilindro central, el periciclo, la endoder-
nen el órgano. A pesar de sus semejanzas, ambos tipos de meris- mis, la capa cortical y la epidermis.

Agosto 2012, InvestigacionyCiencia.es 59


BW \kdY_Œd Z[b Y[djhe gk_[iY[dj[ Yedi_ij[ [d cWdj[d[h [b [i- ferenciación. Estas se distinguen morfológicamente por la apa-
tado indiferenciado de las capas de células madre que se hallan rición de gránulos de almidón; su función, además de protecto-
en contacto con él y, posiblemente, ayudarlas también a conser- ra, se encuentra relacionada con la percepción de la gravedad
lWh ik dWjkhWb[pW$ Bei [nf[h_c[djei Z[ WXbWY_Œd Yed b|i[h" gk[ ZkhWdj[ [b Yh[Y_c_[dje Z[ bW hW‡ p$ BW YeÐW i[ Yecfed[ Z[ lWh_Wi
permiten la eliminación controlada de unas pocas células, han capas celulares, la más externa de las cuales se desprende a me-
resultado fundamentales para determinar la interacción entre dida que se van reponiendo nuevas capas desde el interior.
las células del centro quiescente y las de las capas de células ¿Qué mecanismos moleculares determinan la identidad de
cWZh[ WZoWY[dj[i (bWi Yƒ bkbWi _d_Y_Wb[i Z[ bW YeÐW" ^WY_W [b |f_- las células del centro quiescente? Estudios liderados por Ben
ce, y las células madre o iniciales del resto de la raíz, hacia el Scheres, de la Universidad de Utrecht, han demostrado que los
bWZe YedjhWh_e)$ genes PLETHORA1 (PLT1) o PLETHORA2 (PLT2) Z[i[cf[‹ Wd
BWi Yƒ bkbWi cWZh[ gk[ eh_]_dWd bW fWhj[ Y[djhWb Z[ bW YeÐW kdW \kdY_Œd YbWl[ [d bW [if[Y_ÐYWY_Œd Z[b Y[djhe gk_[iY[dj[ o
(Yebkc[bW) i[ Z_l_Z[d Wi_cƒ jh_YWc[dj[" Z[ ceZe gk[ bWi gk[ f[h- [b d_Y^e Z[ Yƒ bkbWi cWZh[ gk[ be heZ[W$ BW [nfh[i_Œd Z[ bei ][-
manecen en contacto con el centro quiescente se mantienen nes PLT se activa por acción de la hormona vegetal auxina. Cuan-
como células madre, pero las siguientes inician una ruta de di- do estos se expresan ectópicamente (en lugares diferentes de

NICHOS PLURIP OTENTE S

Células madre en la raíz y el tallo


Tras la germinación, el crecimiento y organogénesis de una planta dependen de la actividad de los meristemos, pequeños grupos de
células con la capacidad de originar varios tipos de tejidos. En el extremo superior del tallo y en el inferior de la raíz se localizan los
meristemos apicales. Allí residen los nichos principales de células madre de la planta, a partir de los cuales se forman las raíces, el tallo
y las hojas. Estas imágenes muestran una plántula joven de Arabidopsis thaliana unos cuatro días después de la germinación.

Meristemo apical del tallo

Hipocotilo

Zona
diferenciada Raíz

Zona
de transición
Zona
meristemática

Meristemo apical de la raíz Células


en división

En la parte aérea de la planta se En este detalle del meristemo


CORTESÍA DE E. RAMÍREZ-PARRA, CENTRO DE BIOLOGÍA MOLECULAR SEVERO OCHOA

distinguen los dos cotiledones, apical de la raíz se aprecia un


que comienzan a adquirir un tono grupo de células teñidas de
verde, sobre un pequeño tallo azul intenso. Estas se encuen-
denominado hipocotilo. Este tran expresando una proteína
continúa en la raíz, la cual se marcadora que se acumula al
compone de la zona meristemá- Š´D¨ my ¨D †Dåy G÷ my¨ `Ÿ`¨¹ my
tica (con las células en división), la división celular y se destruye
zona de transición (en que las durante la mitosis. Organización
células comienzan a diferenciarse) y´ Š ¨Då my `z¨ù¨Då
y la zona diferenciada.
La organización estructural del ápice de la raíz
se caracteriza por una disposición en cilindros
concéntricos, los cuales crecen a partir de
las células madre situadas cerca del extremo.
Las células han sido teñidas con un colorante
Œù¹àyå`y´ïy DĆù¨ Õùy ®Dà`D y¨ AD% ´ù`¨yDàÎ

60 INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, agosto 2012


R AÍZ

Crecimiento subterráneo
E§ -xßžäîx-¸ DÇž`D§ lx §D ßDŸą Ǹäxx ø³D ¸ß•D³žąD`ž¹³ xäîßø`îøßD§ ā …ø³`ž¸³D§ -øā Užx³ lx‰³žlDÍ EäîD lxÇx³lx lx ø³ •ßøǸ -øā ÇxÔøx¶¸ de
células denominado centro quiescente (rojo), las cuales son responsables del mantenimiento de células madre en la zona más apical
(hacia el interior de la tierra) y en la zona distal del ápice (hacia arriba), desde donde se originarán las capas concéntricas que confor-
man la raíz (esquema).

Ep
C
En
P Cilindro central
Epidermis Periciclo

CC Córtex Endodermis
Endodermis
CQ
Córtex
Cf Periciclo
Cl
Cilindro central Epidermis
CQ
Centro quiescente

Columela
Meristemo apical al microscopio óptico.
C¹Š D C¹Š D
Se observan gránulos de almidón (violeta) Columela
y´¨Då `z¨ù¨Då my ¨D `¹¨ù®y¨D my ¨D `¹ŠDj
implicadas en la percepción del estímulo
gravitatorio, que hace que las raíces
crezcan hacia el interior de la tierra.
En la parte superior se distinguen los
cilindros concéntricos de la raíz.

ZedZ[ be ^WY[d dehcWbc[dj[)" ied YWfWY[i Z[ _dZkY_h bW \ehcW- proteína retinoblastoma, homóloga del supresor de tumores en
ción de estructuras parecidas a un centro quiescente y estable- ^kcWdei) o Z[ bW h[fb_YWY_Œd Z[b 7:D [d bei fheY[iei Z[ Z_l_-
cer un nicho de células madre a su alrededor. sión de las células madre y de las células indiferenciadas en el
Sin embargo, los genes PLT no son los únicos implicados. meristemo apical de la raíz. Varios proyectos que estamos de-
BW h[]_Œd [d bW gk[ i[ [nfh[iWd i[ iebWfW Yed bW Z[ ejhei Zei" sarrollando en estos momentos intentarán determinar la rele-
SCARECROW (SCR) o SHORTROOT (SHR)" YkoW \kdY_Œd ^W i_Ze vancia del mantenimiento de la integridad del genoma en la pro-
Z[Ðd_ZW feh IY^[h[i o F^_b 8[d\[o" Z[ bW Kd_l[hi_ZWZ Z[ :ka[$ liferación y diferenciación de este nicho celular.
El gen SCR se expresa en las células del centro quiescente y les BWi fhej[‡ dWi I>H o I9H Z[i[cf[‹ Wd jWcX_ƒ d kd fWf[b YbW-
YedÐ[h[ ik _Z[dj_ZWZ$ Feh ik fWhj[" bW fhej[‡ dW I>H i[ i_dj[j_- ve para determinar la actividad de las células que, en contacto
za en las células del cilindro central de la raíz, pero se desplaza con el centro quiescente, funcionan como células madre de la
a las células vecinas; entre ellas, las del centro quiescente y las [dZeZ[hc_i o bW YWfW Yehj_YWb$ ;b h[ÐdWZe c[YWd_ice gk[ Yed-
iniciales de la endodermis y la capa cortical. Curiosamente, la trola la división de estas células y su posterior diferenciación
fhej[‡ dW I>H WYj_lW bW [nfh[i_Œd Z[b ][d SCR en las células a en células de la endodermis o del cilindro cortical ha sido iden-
CORTESÍA DE E. CARO, CENTRO DE BIOLOGÍA MOLECULAR SEVERO OCHOA (micrografía);

las que se ha movilizado, pero no en aquellas en las que se sin- j_ÐYWZe ]hWY_Wi W bei Wd|b_i_i ][dƒ j_Yei o bei [diWoei Z[ WXbWY_Œd
tetiza. Sin embargo, se desconoce qué mecanismo permite a la h[Wb_pWZei feh bei ]hkfei Z[ 8[d\[o o IY^[h[i$ 9kWdZe I>H bb[-
fhej[‡ dW I>H Z_ij_d]k_h i_ i[ [dYk[djhW [d bW Yƒ bkbW fheZkYje- ga a estas células, activa la expresión de SCR. A su vez, la acu-
ra o en la receptora. ckbWY_Œd Z[ bW fhej[‡ dW I9H _d^_X[ bW [djhWZW Z[ dk[lW I>H$
Cada una de las capas cilíndricas que se extienden desde BW Z_l_i_Œd Z[ bW Yƒ bkbW eh_]_dW kdW gk[ gk[ZW [d YedjWYje Yed[b
el centro quiescente hacia la zona basal se forma gracias a la Y[djhe gk_[iY[dj[ o gk[ f[hcWd[Y[ Yece Yƒ bkbW cWZh[$ BW
INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, SEGÚN EL AUTOR (esquema)

WYj_l_ZWZ Z[ YƒbkbWi cWZh[ [if[Y‡ ÐYWi o Yedj_]kWi Wb Y[djhe gk_[i- otra, tras una segunda división asimétrica, origina dos células
cente. Por tanto, una cuestión de fundamental importancia con- gk[ i[]k_h|d YWc_dei Z_ij_djei$ BW c|i _dj[hdW" Wgk[bbW gk[
siste en dilucidar los mecanismos que controlan la división ce- queda en contacto con el cilindro central, continúa producien-
lular en este nicho de células madre. En particular, ¿qué proce- Ze I>H o i[ Z_\[h[dY_W Yece Yƒ bkbW Z[ bW [dZeZ[hc_i$ BW i[]kd-
sos coordinan la proliferación celular y la toma de decisiones de ZW" gk[ de h[Y_X[ i[‹ Wb Z[ I>H" i[ Z_\[h[dY_W Yece Yƒ bkbW Yeh-
las células del nicho para adquirir una identidad determinada? tical. En cuanto al resto de las células madre que se hallan por
Bei [nf[h_c[djei h[Wb_pWZei feh dk[ijhe ]hkfe [d [b 9[djhe Z[ encima del centro quiescente, sabemos que originan todas las
Biología Molecular Severo Ochoa han contribuido a demostrar células del cilindro central, las de los vasos conductores de sa-
la importancia de ciertos reguladores del ciclo celular (como la via y las del periciclo. Sin embargo, aún no conocemos con de-

Agosto 2012, InvestigacionyCiencia.es 61


Desarrollo de una raíz lateral en una plántula de Arabidopsis thaliana de cuatro días. Teñidas de azul
aparecen las células que expresan un gen necesario para la replicación del material genético, lo que indi-
ca que dichas células se encuentran en división. El desarrollo de las raíces laterales se inicia con la activa-
ción de algunas células del periciclo, en la zona madura de la raíz principal (a). Después, se forma un pri-
mordio de raíz lateral (b) con células no diferenciadas en el que, más tarde, se establecerá otro meristemo
apical (c y d). Este contiene un nicho de células madre idéntico al de la raíz principal.

BWi _dl[ij_]WY_ed[i Z[ ?dpƒ " Wi‡ Yece bWi bb[lWZWi W YWXe feh
Jec 8[[YacWd" Z[ bW Kd_l[hi_ZWZ Z[ =Wdj[1 @kWd 9Whbei Z[b Fepe"
a b c d del Centro de Biotecnología y Genómica de Plantas de Madrid y
[b Wkjeh" [djh[ ejhei" ^Wd _Z[dj_ÐYWZe Wb]kdei Z[ bei Yecfed[d-
tes del mecanismo molecular por el que se produce y mantiene
la parada de dichas células en la fase G1. Este mecanismo pare-
ce depender de la acción combinada de varios factores. Uno de
[bbei [i bW fhej[‡ dW AHF(" bW YkWb _d^_X[ bWi gk_dWiWi Z[f[dZ_[d-
j[i Z[ Y_Yb_dWi (9:A" feh iki i_]bWi [d _d]bƒ i)" [dp_cWi gk[ h[-
]kbWd bWi Z_ij_djWi \Wi[i Z[b Y_Ybe Y[bkbWh$ 9kh_eiWc[dj[" AHF(
posee una región semejante a la que se encuentra en la proteí-
na humana p27Kip (W bW gk[ Z[X[ ik decXh[)" gk[ WYj‘ W jWcX_ƒd
como un potente inhibidor de las CDK.
talle los mecanismos moleculares que determinan la identidad El segundo componente es un factor de transcripción de la
y el destino de estas células. familia E2F, denominado E2Fc, relacionado estructural y fun-
cionalmente con los factores de la familia E2F en humanos; en
PERICICLO Y RAÍCES LATERALES concreto, con aquellos que actúan como potentes represores de
BW cWoeh fWhj[ Z[b i_ij[cW hWZ_YkbWh i[ [dYk[djhW Yedij_jk_Ze la transcripción de genes que intervienen en las distintas fases
por raíces laterales. Estas se forman a partir de unas pocas cé- del ciclo celular. En respuesta a señales de proliferación, E2Fc
lulas del periciclo, el tejido que rodea al cilindro central de la es degradado por el proteasoma, un macrocomplejo proteico
raíz. En estas células, el proceso reproductivo se detiene en cuan- encargado de eliminar proteínas cuya función ya no se requie-
je WXWdZedWd [b c[h_ij[ce Z[ bW hW‡ p fh_dY_fWb$ Ik i_jkWY_Œd Ð- re en la célula. Se cree que este proceso coincide con la desac-
siológica como células postmitóticas con cierto grado de dife- j_lWY_Œd Z[ AHF(" gk[" `kdje Yed fhej[‡ dWi Yece IAF(8 o
renciación citológica aún no se conoce por completo. Sin GATA23, y la señalización de las auxinas, desencadena una fase
embargo, los análisis transcriptómicos (encaminados a identi- de proliferación activa que provoca que las células del periciclo
ÐYWh [b fWjhŒd Z[ [nfh[i_Œd ]ƒ d_YW ]beXWb [d jeZe [b ][decW) acaben formando un primordio de raíz lateral.
h[Wb_pWZei feh :_ha ?dpƒ " Z[ bW Kd_l[hi_ZWZ Z[ =Wdj[" fWh[Y[d Cuando esas células protruyen hacia el exterior de la raíz
indicar que esas células se encuentran detenidas en la fase G1 principal tiene lugar un acontecimiento clave: las células indi-
del ciclo celular, la etapa anterior a la duplicación del material ferenciadas del primordio se convierten en las del meristemo
genético. Como respuesta a la acción de ciertas hormonas (auxi- apical de la nueva raíz lateral. Es decir, vuelve a establecerse un
dWi" ieXh[ jeZe)" i[ WYj_lWd YWiYWZWi Z[ i[‹ Wb_pWY_Œd gk[ Z[i[d- nicho de células pluripotentes que, una vez constituido, resul-
cadenan la división de algunas células del periciclo y la forma- jW _dZ_ij_d]k_Xb[ Z[b Z[ bW hW‡ p fh_dY_fWb$ BW _Z[dj_ÐYWY_Œd Z[ bei
ción de un primordio de raíz lateral. mecanismos que permiten la salida de la proliferación hacia el

CORTESÍA DE E. CARO, CENTRO DE BIOLOGÍA MOLECULAR SEVERO OCHOA (desarrollo de la raíz); CORTESÍA DEL AUTOR (flor)
establecimiento de un nuevo nicho de células madre constitu-
ye uno de los retos más apasionantes que habrán de afrontar
las investigaciones futuras.

TALLO Y HOJAS
Bei Œh]Wdei Wƒ h[ei Z[ bW fbWdjW Yh[Y[d W fWhj_h Z[ bWi Yƒ bkbWi Z[b
meristemo apical del tallo. En los ejemplares adultos de las plan-
tas dicotiledóneas, dicha estructura consta de una masa de célu-
las en forma de cúpula maciza que no posee una organización
jWd X_[d Z[Ðd_ZW Yece [b c[h_ij[ce Wf_YWb Z[ bW hW‡ p$ 9ed jeZe"
resulta posible distinguir algunas regiones tanto desde el punto
Z[ l_ijW WdWjŒc_Ye Yece Z[iZ[ [b \kdY_edWb$ BW YWfW c|i [nj[h-
dW Z[ YƒbkbWi h[Y_X[ [b decXh[ Z[ YWfW [f_Zƒhc_YW" e B'$ 8W`e [bbWi[
Wbe`W bW YWfW ikX[f_Zƒ hc_YW" e B($ BWi Yƒ bkbWi gk[ Yed\ehcWd
estas capas se dividen anticlinalmente (en sentido perpendicu-
bWh Wb fbWde gk[ \ehcWd)" feh be gk[ Yedjh_Xko[d Wb Yh[Y_c_[dje
ikf[hÐY_Wb$ BW pedW B)" beYWb_pWZW ^WY_W [b _dj[h_eh" Yecfh[dZ[
al resto de las células del meristemo. Estas se dividen en cual-
Flor de una planta del género Vinca: El meristemo floral
gk_[h Z_h[YY_Œd" feh be gk[ YWh[Y[d Z[ [ijhkYjkhWY_Œd Z[Ðd_ZW o
produce un número limitado de lo que pueden considerarse
Yedjh_Xko[d Wb Yh[Y_c_[dje [d lebkc[d$ BWi Yƒ bkbWi Z[h_lWZWi
hojas muy diferenciadas (las partes de la flor).
Z[ bW YWfW B' ied bWi fh[YkhiehWi Z[ bW [f_Z[hc_i Z[ bei Œh]Wdei

62 INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, agosto 2012


bWj[hWb[i" Yece bWi ^e`Wi" c_[djhWi gk[ bWi Z[ bWi YWfWi B( o B) námica de crecimiento? Estas preguntas han concentrado los
originarán sus capas internas. esfuerzos de un gran número de laboratorios durante los últi-
El destino de las células del meristemo viene determinado cei W‹ ei$ BWi _dl[ij_]WY_ed[i Z[ =[hZ @” h][di" Z[ bW Kd_l[hi_-
por la posición que ocupan en él, lo que permite distinguir tres ZWZ Z[ JkX_d]W" o J^ecWi BWkn" Z[ bW Kd_l[hi_ZWZ Z[ <h_Xkh]e"
regiones funcionales. En la cúspide se encuentra el núcleo de han contribuido a establecer la base molecular que controla el
células madre. Esta región, que incluye células de las capas ana- número de células madre y el tamaño del nicho: un bucle géni-
jŒc_YWi B'" B( o B)" h[Y_X[ [b decXh[ Z[ pedW Y[djhWb$ >WY_W iki co autorregulado en el que participan factores de transcripción
laterales se extiende la zona periférica y, por debajo de ambas, y reguladores del ciclo celular.
bW h[]_Œd _dj[h_eh" [d [b [`[ Y[djhWb Z[b jWbbe$ BW Z_l_i_Œd Z[ bWi BW fhej[‡ dW I>EEJ C;H?IJ;CB;II (IJC) [i kd \WYjeh Z[
células madre que componen la zona central produce células transcripción que se encuentra en todas las células del meris-
que se van desplazando hacia los laterales del ápice, tanto ha- temo apical del tallo salvo en las más periféricas, donde ya se
Y_W bW pedW f[h_\ƒh_YW Yece ^WY_W bW h[]_Œd _dj[h_eh$ Bei Œh]Wdei han establecido los primordios de los órganos laterales. Esta
laterales, como las hojas, se formarán a partir de las células de proteína se necesita para mantener la capacidad de prolifera-
la zona periférica. Estas cambian de identidad cuando pasan a ción de las células meristemáticas y para evitar que abandonen
formar parte del primordio de la hoja. el ciclo celular y adquieran la capacidad para diferenciarse. Sin
BWi _dl[ij_]WY_ed[i Z[ @Wd JhWWi" _dl[ij_]WZeh [d bW Kd_l[h- embargo, no interviene directamente en el establecimiento del
i_ZWZ Z[ Boed o bei Y[djhei \hWdY[i[i ?DH7 o 9DHI" ^Wd Yed- nicho de células madre. Este depende de la función de la pro-
tribuido de manera decisiva a entender la organización estruc- j[‡ dW MKI9>;B (MKI)" kd \WYjeh Z[ jhWdiYh_fY_Œd fh[i[dj[ [d
jkhWb Z[b c[h_ij[ce Wf_YWb Z[b jWbbe$ BWi Yƒ bkbWi gk[ [ijWXb[Y[d un reducido grupo de células situadas bajo las células madre de
un primordio foliar poseen un gran potencial de proliferación la zona más apical. Dicha agrupación de células conforma el
y diferenciación, muy bien coordinados en el tiempo y en el es- centro organizador, una región muy semejante desde el punto
pacio. Dicha capacidad de diferenciación, sin embargo, resulta de vista funcional al centro quiescente de la raíz.
menor que la que poseen las células madre de la zona central. BW fhej[‡ dW MKI WYj_lW bW [nfh[i_Œd Z[b ][d CLAVATA3
BW pedW f[h_\ƒ h_YW Z[ [ij[ c[h_ij[ce Yedij_jko[" feh jWdje" kdW (CLV3)" Wkdgk[ de be ^WY[ [d bWi Yƒ bkbWi Z[b Y[djhe eh]Wd_pW-
zona de transición entre las células madre, muy pluripotentes, dor, sino en las de la zona central. Es la expresión de CLV3 lo
y las del primordio de las hojas, con un espectro más reducido gk[ b[i YedÐ[h[ ik dWjkhWb[pW Z[ Yƒ bkbWi cWZh[$ BW fhej[‡dW
de destinos celulares. 9BL) [i kd f[gk[‹ e feb_fƒ fj_Ze YWfWp Z[ i[Yh[jWhi[ o
¿Qué mecanismos moleculares determinan que ciertas célu- WYjkWh en las células vecinas, donde, a su vez, inhibe la
las del meristemo apical del tallo adquieran la naturaleza de cé- expresión del gen WUS$ 9BL) de WYj‘ W Z[ \ehcW _dZ[f[dZ_[dj["
lulas madre? ¿Qué procesos dictan el tamaño del nicho y su di- i_de gk[ [`[h- Y[ ik \kdY_Œd Wb _dj[hWYY_edWh Yed bWi
fhej[‡ dWi 9B7L7J7'

TA L L O Y HO JA S

Crecimiento aéreo
El equivalente funcional del centro quiescente en el meristemo apical del tallo es un grupo de células denominado centro organizador.
Aø³Ôøx ³¸ •¸ąD lx ø³D xäîßø`îøßD îD³ Už x³ lx‰³ž lD `¸-¸ §D lx§ `x³î߸ Ôøž xä`x³îx lx §D ßDŸąj äøä `y§ø§Dä ž ³lø`x³ ā -D³îž x³x³ ø³ ³ž`š¸ de
células madre en las capas más apicales. También contribuye a regular el tamaño del nicho. Los esquemas muestran una sección
longitudinal del ápice del tallo. La organización de sus células puede describirse atendiendo a su anatomía, función o dominios de
expresión génica.

Primordios de las hojas

$yàŸåïy®¹ DÈŸ`D¨ Organización Organización Dominios


del tallo anatómica Dyåmy y¨ Èù´ï¹ funcional de expresión génica
my ÿŸåïD D´DﺮŸ`¹ se distinguen En cuanto a la capacidad de Se distinguen los siguientes:
tres capas celulares: L1 división de las células, pueden C"A<A5Añ, C"A<A5AÀ, WUSCHEL,
(epidérmica), L2 (subepidér- distinguirse la zona central, la 3H''5$E2I35E$"E33.
5D¨¨¹ mica) y L3j ¨D ®y´¹å myŠ´ŸmDÎ "Då zona periférica y el eje central. EåÈy`ŸŠ`D´ Ă ®D´ïŸy´y´ y¨ ´Ÿ`› ¹
`DÈDå "À Ă "÷ `¹´ïàŸUùĂy´ D¨ La velocidad de división celular de células madre, así como el
`ày`Ÿ®Ÿy´ï¹ åùÈyàŠ`ŸD¨è "ñ ¨¹ › D`y es elevada en las dos últimas, pero estado indiferenciado de las
al crecimiento en volumen. no así en la zona central. células del ápice.

Agosto 2012, InvestigacionyCiencia.es 63


(9BL') o 9B7L7J7( (9BL()" bWi YkWb[i \ehcWd kd h[Y[fjeh ^[- Z_ÐYWZWi" bWi YkWb[i Yedij_jko[d bWi Z_\[h[dj[i fWhj[i Z[ bW Ñeh0
terodimérico que se localiza en la membrana plasmática de la sépalos, pétalos, estambres y carpelos. En el interior de estos
célula. Este complejo, en conjunción con otras enzimas y pro- últimos se originan las células germinales de la planta (game-
teínas, activa una cascada que mantiene la capacidad de proli- jei)$ ;ij[ \[dŒc[de h[l_ij[ kd _dj[hƒ i fWhj_YkbWh" oW gk[ ikfe-
feración de las células madre de la zona central. ne otra de las grandes diferencias entre los reinos animal y ve-
´9Œce i[ fheZkY[ bW ^ec[eijWi_i Y[bkbWh5 BW [n_ij[dY_W Z[ getal: a diferencia de los animales, las plantas no poseen una
demasiadas células madre en el meristemo apical del tallo pro- línea germinal formada durante la embriogénesis, sino que esta
ZkY[ kd Wkc[dje beYWb Z[ bW YWdj_ZWZ Z[ fhej[‡ dW 9BL)$ ;ijW"a se inicia a partir de las células somáticas.
su vez, causa una reducción proporcional en el número de cé- Un hecho sorprendente reside en que la producción y man-
lulas que expresan el gen WUS, lo cual contribuye a reducir el j[d_c_[dje Z[ bWi Yƒ bkbWi cWZh[ Z[b c[h_ij[ce ÑehWb Z[f[dZ[
número de células madre y el tamaño del centro organizador, del mismo bucle génico que opera en el meristemo apical: el
que las mantiene en una sutil coordinación. No deja de sorpren- formado por los genes WUS y CLV3. Pero entonces, ¿cómo se
der la manera en que esta perfecta homeostasis celular, que des- ceZ_ÐYW ik Wkjehh[]kbWY_Œd fWhW Z[h_lWh [d kd Yh[Y_c_[dje
cansa en el bucle génico autorregulado formado por WUS y j[hc_dWb5 ;ijW Yk[ij_Œd ^W i_Ze [ijkZ_WZW" [djh[ ejhei" feh BWkn
CLV3, contribuye a uno de los aspectos más intrigantes y úni- o :[jb[\ M[_][b" Z[b ?dij_jkje CWn FbWdYa Z[ 8_ebe]‡ W Z[b :[-
cos del desarrollo vegetal: la producción continua de órganos iWhhebbe Z[ JkX_d]W$ Iki jhWXW`ei _Z[dj_ÐYWhed bW [n_ij[dY_W Z[
laterales en la planta adulta. ejhe i_ij[cW ]ƒ d_Ye gk[" YkWdZe i[ _d_Y_W bW ÑehWY_Œd" i[ ikf[h-
pone a la regulación del bucle WUS/CLV3. Dicho sistema está
UN NICHO TERMINAL DE CÉLULAS MADRE constituido por los productos de los genes AGAMOUS (AG) o
El meristemo apical del tallo posee la capacidad de producir un LEAFY (LFY)$ BW fhej[‡ dW 7= [i kd \WYjeh Z[ jhWdiYh_fY_Œd
j_fe cko [if[Y_Wb_pWZe Z[ c[h_ij[ce0 [b c[h_ij[ce ÑehWb$ 7 Z_- YkoW [nfh[i_Œd Z[f[dZ[" W ik l[p" Z[ bWi fhej[‡ dWi MKI o
ferencia del primero, que presenta un patrón de crecimiento in- B<O$ ;ijW
Z[Ðd_Ze" bW WYj_l_ZWZ Z[ bWi Yƒ bkbWi cWZh[ Z[b c[h_ij[ce ÑehWb ‘ bj_cW [i kd \WYjeh Z[ _Z[dj_ZWZ ÑehWb gk[ i[ WYj_lW Yed bWi i[-
j[hc_dW Yed bW ÑehWY_Œd$ ;ijW h[]_Œd c[h_ij[c|j_YW fheZkY[ kd ‹ Wb[i Z[ ÑehWY_Œd$ 7cXWi i[ kd[d Wb i[]kdZe _djhŒd Z[b d []
número limitado de lo que pueden considerarse hojas muy mo- AG para estimular su expresión. A su vez, la proteína AG repri-
me la expresión del gen WUS. Por tanto, al desaparecer progre-

Brote floral de Prunus: El meristemo apical del tallo posee la ca-


pacidad de producir un tipo muy especializado de meristemo: el
meristemo floral. Su actividad concluye con la formación de la flor.

CORTESÍA DEL AUTOR

64 INVESTIGACIÓN Y CIENCIA, agosto 2012


ME CANISMOS MOLE C ULARE S

Bucles génicos Meristemo


apical del tallo Merisïy®¹ Œ¹àD¨
La producción y mantenimiento de los nichos de células madre en
plantas depende de una serie de bucles génicos que se autorregu-
CLV3 CLV3
lan. Estos pueden originar dos tipos de crecimiento: uno perma- LFY
nente (hojas o raíces) y otro que termina con la formación del
¹ß•D³¸ É‹ ¸ßxäÊÍ
El crecimiento indeterminado y continuo del meristemo apical
del tallo depende de la actividad de un sencillo bucle génico WUS WUS AG
autorregulado en el que intervienen los productos de dos genes:
CLAVATA3 (CLV3) y WUSCHEL (WUS). Cuando a este bucle se
superpone la actividad de otros genes, sobre todo AGAMOUS (AG)
Activación
y LEAFY (LFY), el meristemo apical se convierte en un meristemo
‹ ¸ßD§Í Eäîx äx `DßD`îxßžąD ǸßÔøx äø D`îž þžlDl `xäD `¸³ §D …¸ß-D- Inhibición Otros genes
`ž ¹³ lx §D ‹ ¸ßÍ

sivamente la proteína WUS, también se reduce la concentra- ñales no son homólogas desde el punto de vista estructural, si
Y_Œd Z[ 9BL) o" Yece Yedi[Yk[dY_W" [b d_Y^e Z[ Yƒ bkbWi cWZh[ bien utilizan estrategias semejantes para solucionar los mis-
del meristemo acaba desapareciendo. mos problemas —o muy similares— de regulación funcional.
En las células animales, por ejemplo, los factores de transcrip-
CÉLULAS MADRE DE ANIMALES Y PLANTAS ción OCT4, NANOG y SOX2 son responsables de conferir la ca-
Durante los últimos años, la investigación con células madre de pacidad de funcionar como células madre. En las plantas, esa
animales, incluido el hombre, ha suscitado un enorme interés. función la desempeñan, en el meristemo de la raíz, los facto-
Ello se debe a sus aplicaciones potenciales en medicina y, tam- h[i FBJ'" FBJ(" I9H o I>H" bei YkWb[i de ]kWhZWd h[bWY_Œd Yed
bién, a los problemas éticos que plantea su uso. Por tanto, re- los anteriores.
sulta imprescindible encontrar salidas respetuosas pero racio- Animales y plantas han encontrado soluciones diferentes a
nales para avanzar en nuestro conocimiento sobre la biología una misma necesidad: el mantenimiento y reposición de célu-
Z[ bWi Yƒ bkbWi cWZh[ Wd_cWb[i$ ;d [ij[ Yedj[nje" bW _Z[dj_Ð# bWi ZkhWdj[ [b Z[iWhhebbe o [b Yh[Y_c_[dje$ Bei c[YWd_icei ce-
cación de células madre en plantas ha introducido un nuevo leculares que regulan la proliferación y diferenciación de las
|cX_je Z[ [ijkZ_e$ BW [n_ij[dY_W Z[ Yƒ bkbWi cWZh[ [d c_YheWc- células madre vegetales son aún poco conocidos. Sin duda, su
X_[dj[i Y[bkbWh[i cko X_[d Z[Ðd_Zei" ik cWdj[d_c_[dje o ik YW- estudio permitirá mejorar nuestro conocimiento de las célu-
pacidad de producir células con un enorme potencial de divi- las madre animales y revertirá en un mejor entendimiento de
sión y diferenciación parecen ser problemas con una base la regulación de la homeostasis celular, un proceso crucial para
conceptual común en animales y plantas. el desarrollo y el crecimiento de todos los organismos multi-
BW _d\ehcWY_Œd Z_ifed_Xb[ ^WijW [b cec[dje fWh[Y[ _dZ_YWh celulares.
que existen paralelismos entre las estrategias biológicas básicas Me gustaría concluir con una cita de Scheres sobre «la enor-
de ambos tipos de células madre. Un aspecto común reside en me emoción que nos provocaría saber que, en otro planeta, una
su capacidad de proliferación y en la asimetría funcional de los misión espacial ha descubierto cierta clase de criaturas verdes
productos de la división celular: en ambos casos, una célula hija que pueden vivir más de dos mil años y que mantienen su ca-
permanece en el nicho de células madre, mientras que la otra pacidad de crecimiento gracias a células madre que nunca en-
puede iniciar un proceso de diferenciación con varias rutas po- vejecen». Si semejante posibilidad nos parece extraída de un li-
sibles. Por otra parte, existen cada vez más indicaciones de que Xhe Z[ Y_[dY_W ÐYY_Œd [i fehgk[ de iecei YediY_[dj[i Z[ gk[
algunos procesos guardarían relación en ambos tipos de orga- esos seres ya existen entre nosotros. El estudio de los fascinan-
nismos. Un ejemplo lo constituyen los mecanismos responsables tes procesos que rigen la biología de las plantas puede conti-
de los cambios en la organización estructural y funcional de la dkWh fhefehY_edWdZe X[d[ÐY_ei _dYWbYkbWXb[i W bW ^kcWd_ZWZ"
YhecWj_dW [d h[]_ed[i ]ƒ d_YWi cko [if[Y‡ ÐYWi$ 7i‡ " bW pero requiere una mayor concienciación y medios para llevar-
[nfh[i_Œ d de algunos genes en células madre animales y lo a cabo.
vegetales depen- Z[ Z[ bW WYj_l_ZWZ Z[ Y_[hjei Yecfb[`ei
fhej[_Yei (FH9(" Z[b ]hk- fe FeboYecX)" Ykoei Yecfed[dj[i
ceb[YkbWh[i [ij|d Yedi[hlW- dos en ambos tipos de PA R A S A B E R M Á S
organismos. Uno de ellos, la proteína HX7f*.%f++ [d C¨Dÿyå ‘ y´zïŸ`Då my¨ myåDà๨¨¹ Œ¹àD¨Î E» $» $rërÍ«é”Üî r§ Investigación y Cienciad §»o 220,
Wd_cWb[i e CI?' [d fbWdjWi" \ehcW fWhj[ jWc- X_ƒ d Z[b r§rÍ« fr ®¨¨€» 2y‘ ù¨Dm¹àyå
Yecfb[`e 97<#'" [i[dY_Wb fWhW Z[fei_jWh bW ^_ijedW >)$' my¨ `ày`Ÿ®Ÿy´ï¹ ÿy‘ yïD¨Î 5» A›ÜDOr››D ë A» F» 5”OæÍZ”« r§ Investigación y Ciencia,
durante el proceso de replicación del ADN nuclear. Todo ello §»o 䨃 d ¡DÍî« fr äðð®»
Coupling cell proliferation and development in plants. C» GæÜ” ÷ÍÍrî r§ Nature Cell Biology,
contribuye a la estrecha relación entre el control de la expresión è«› » Öd µñ†Ò» €Þ€“ €ƒ ®d äðð€» 3ïy® `y¨¨
génica y la replicación del genoma, un proceso imprescindible ´Ÿ`› yåi %ùàåyàĂ à› Ă®yå D`à¹åå §Ÿ´‘ m¹®åÎ B» 3Z•rÍrÒ r§ Nature Reviews in Mo- lecular and
para un correcto funcionamiento celular. Cellular Biologyd è«› » sd µñ†Ò» Þƒ €“ Þ€ƒ d äððÖ»
Sin embargo, parece que las señales moleculares que regu- Plant stem cell niches: From signalling to execution. 2» 3DO›«éÒš ” r§ Current Opinion in Plant
Biologyd è«› » ®ƒ d µñ†Ò» ƒ “ ¨d äð®®»
lan ambos tipos de células madre han seguido sendas diver-
gentes a lo largo de la evolución de los dos reinos. Dichas se-

Agosto 2012, InvestigacionyCiencia.es 65

Vous aimerez peut-être aussi