Hace no más de quince días , El Tribunal Constitucional (TC) estableció (a través de

la sentencia N°6040-2015 que el transexualismo “no debe ser considerado como una
patología” y modificó los criterios para el reconocimiento del derecho a la identidad de
género de las personas trans en nuestro país transgrediendo todo los valores morales
en cuanto a respeto del ser, identidad y respeto de la persona y de los grupos básicos
de la sociedad nombrados como familia los cuales están próximos a la desaparición y
debemos de ver que es lo que aún se puede rescatar.

Es penoso observar que los trastornos personales de estas personas sean justificados en
una igualdad a su modo , en una diversidad que es un rasgo innato y profundo que es el
motivo y pie del desarrollo de la humanidad y que se sustente en una libertad existencial
que va más allá de una correcta visualización del hombre como fin sino que es medio
para lograr la banalización de su mundo ideal y la cosificación así argumentando que se
debe respetar su proyecto personal y que no se vulnere sus derechos cuando ellos vienen
vulnerando nuestros derechos a vivir en bien común y en un marco de respeto y buenas
costumbres.

En el párrafo anterior se mencionaba la libertad de su “yo Soy” y que a partir de ello

exigen un reconocimiento objetivo de su yo de su liberalismo trastornado y enfermo que
justifican en una personalidad, con conductas razgos de otra índole y que para ello el
cambio del derecgi fundamental de la identidad lo quieren acoplar a un pseudo respeto a
una igualdad no adquirida sino esbozada en un trastorno que perjudica a una sociedad y
que vulnera lo primordial de ello que es la familia ern sus funciones y con el respeto de
ello va en contra de la determinación de ella como celula básica de la sociedad la cual se
ve seriamente afectada ya que esa caracterización o individualización que es existencial y
que permite una identificación biológica determinada inviolable en la cual la persona está
totalmente demarcada y no se puede alterar ya que es un sello intrínseco que es único,
irrepetible e intransferible y que esta seriamente en juego.

La vergüenza que se da ante las distintas organizaciones que buscan que se dé a mano
fácil la posibilidad del reconocimiento legal del género como un sello disponible y que se
altere aso con ello se trasgreda lo más importante de la persona por una preferencia
traumatizada, sin conculcar otros derechos humanos en una sociedad tan decadente e
insensata que no quiere ya considerar la verdadera identidad estática que ha sido el pilar
de la sociedad desde sus inicios , esta es muy importante ya que el pilar jurídico depende
de la identidad y reconocimiento de la persona con su rol que esta impuesto en su
persona

Es deplorable que las decisiones intimas y personales de cada una de estas personas la
tomen como parte esencial de su vida y su proyección la cual quieren construir un pseudo
proyecto alterando todo lo genéticamente determinado a su favor y que construye acorde
a su liberalismo en relación con su orientación, identidad y expresión de su elección lo
cual denota que debemos de estabilizar las conductas y pronunciamientos en pro del bien
común , con ello todo lo estructurado en defensa de la sociedad conservadora y con
valores fundamentados en la ética, respeto y consideración de lo permitido , con ello el
tribunal constitucional ha demostrado que se está en contra de defender lo correcto y que
la consideración de estas personas en relación a la esfera personal y que sus decisiones
personales acorde a su proyecto de vida son y deben ser aceptados para que confluyan
su desarrollo en un esboce de igualdad y lo que en realidad es la aberración del siglo
presente

En conclusión el derecho que tiene todo individuo de ser reconocido en todos sus
aspectos sin discriminar lo como es y en el modo que es en relación a su individualización
sea esencialmente de carácter objetivo (nombres, seudónimos, registros, herencia
genética, características corporales, etc.) y otros que son derivados del propio aspecto de
desarrollo personal que son de carácter subjetivo (ideología, identidad cultural, valores,
reputación, etc. ", es por ello que la identidad desde un punto central no permite una
visión unidimensional y que La identidad desde la perspectiva descrita no ofrece, pues,
como a menudo se piensa, una percepción unidimensional sustentada en los elementos
estrictamente objetivos o formales que permiten individualizar a la persona. Se encuentra,
además, involucrada con una multiplicidad de supuestos, que pueden responder a
elementos de carácter netamente subjetivos, en muchos casos, que es relevante la visión
de que en tanto y en cuanto la persona tiene un sexo genético, se debe respetar ello y no
atentar contra la moral y las buenas costumbres hechos que en entendimiento de tal
derecho alegados por ellos denigran a la persona y hace que haya un caos inmediato de
manera integral en la estabilidad de la moral y rectitud de una nación laica, católica
apostólica que vulnera los designios de Dios y que por consiguiente, no puede
concebirse.