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RECURSOS JUDICIALES Osvaldo Alfredo Gozaini Cee Tesi Cle Roberto Omar Berizonce Isidoro Eisner Geman J. Bidart Campos Beltran Gambier Juan Carlos Cassagne Osvaldo A. Gozaini Juan Pedro Colerio BIEN Or Te oM silica Francisco D’Albora Jorge L. Kielmanovich Mabel A. De los Santos José Levitan Alfredo J. Di Iorio Eduardo D. Oteiza Federico G. Dominguez Efrain Hugo Richard Gualberto Lucas Sosa Caprfruto VII PROCEDIMIENTO ORDINARIO EN SEGUNDA INSTANCIA (Un estudio “ius comparatista” argentino) Gualberto Lucas Sosa 1. Bl pénico de la segunda instancia, - 2. La funcién revisora - 3. Poderes de la alzada: 3.1. Examen de la forma de concesign del recurso; 3.2. Potesiades insiructorias; 3.3. ‘Omisiones de la sentencia de primera instancia; 3:4. La declaracién de nulidad de la sentencia de primera instancia; 3.5. Cuestiones que no fueron abordadas en (a ins- tancia de origen en razén del contenido impreso a la sentencia; 3.5. Cuestiones so- brevinientes a la sentencia de primera instancia (hechos constitutivos, modificativos 1 extintivos): 3.7, La apelacién implica: 3.8, La apelacién incidental; 3.9. “lura novit Curia” ; 3.10, Costas y hanorarias, - 4, Limites alos poderes de la alzada: 4.1, Principio de congruencia: 4.2. Tipo procesal dispositive; 43. Prohibicidn de la “Reformatio in peius”, 5. Procedimiento en la apelacién libre: $.1. Trémite previo: $2, La demanda de apelacién: expresion de agravios. Carga a satisfacer. Traslado; 5.3. Fundamento de las apelaciones diferidas, Actualizacién de cuestiones y pedido de apertura a prueba: 3x4. La contestacién a la expresién dle agravios; 5.5. La produccién de prueba en segunda instancia; 5.6, Las alegaciones de conelusién: Alegatos. Informe "in voce”. Llamamiento de autos; $.7.Sorteo-de la causa, Estudio y acuerdo. Sentencia de segunda instancia, 6, Procedimiento en la apelacién abreviada. Sentencias definitivas. Senten- cias interlocutorias. Providencias simples. 7. Colofén, 1, EL PORTICO DE LA SEGUNDA INSTANCIA Penetrar en el pértico de Ia segunda instancia significa instalarse en un hito de Ia tramitacién del proceso escriturario, que ha concluido con una sentencia de mérito, o bien con una sentencia interlocutoria, 0 ya con una providencia simple, que causa un gravamen que no puede ser reparado por la sentencia definitiva. < Son los supuestos de hecho que el legislador ha previsto. por via de principio, como susceptibles de ser impugnados a través del recurso de 138 RECURSOS JUDICIALES apelacién '. y que tiene como objeto mejorar el resultado de ka tramitacién de un proceso, a través de un nuevo examen por un Grgano judicial “ad quem”, que debe verificar si se ha incurrido por el “iudex a quo™ en un error en la apreciacién de los hechos. Ia valoracién de la prueba o la aplicacién del derecho al dictar la resolucién judicial, y con Ia finalidad de arribar a la solucién mas justa del caso. " Prevé en tal sentido ef art. 242 del Ci que “El recurso de apelarién, salve dispesicid de: Procesal Civil y Comercial de le Nacién, ‘en contrario, provederd solamente respecte 1, Las semtencias defintivas 2. Las sentencias mierlocuorias 4. Las pravidencias simples que causen un gravamen que no pueda ser reparadle por la sentencia defiantva. Serén inapelables las sentencias definitivas ¥ las demds reseluciones cualquiera fuere su nawraleca que se dicten en procesos en lox que el valor cuestionade wa exveda de kt suma de veinte millones dle austrates 14 20,000.00, Dicho monto se determinard atendienda ex clusivamente al capital reclamado en ta demavala actualizade si corresponliere a ta fecha de la resoluctin, de acuerdo con fos indices oficiales de variucion de precios imayoristas. ne agropecuarios. Esta disposicisn no serd aplicuble a los procesos en que se pretenda ef desaloja de innuebles” EI mismo eriterio observan los Cédigos Procesal Civil y Comercial de Chubut y Santa cw, BI primero de los nombnudos siguiende este modelo alude a 1a moneda de cien pesos argentinos, aftadiendo que “dicho monte se determinaré atendiendo exclasivamente el capital rreclamado en fa demanda. actualizudo si correspondiere a ta fecha de la resoluctin, de acuerdo con los ices oficutes de variaciin de precios mayoristas no agrapecuarios..° (an. 242 El ordenamiento de Santa Cruz, a su vez, toma como Limite para la admisiblidad que el valor euestionado “..exceda de mes veces el mionto miximo fijade para determinar ta compe tencia en crwnia al monto de tas jueces de Paz y vigente a la fect de la sentencia 0 reso lucid, A su tumo, los e6digos de Buenos Aires (art, 242), Catamarca (art. 242), Chavo (ait. 242), Entre Rios (an. 239), Formosa (ait. 242), La Pampa (art. 244), Misiones (art, 242), Neuguén (at, 242), Rio Negro (art, 242), Salta (art. 242), San Juan (art. 247), San Lis (an, 242), y santiago del Estero (a. 242p, si bien observan él mismo temperamento en punto a ki admi- sibilidad de! recurso de apelacign, no comienen ta limitacién que detenmina et apartado final del art. 242 ue la legislacidn que rigs n jurisdiceidn federal El an. $240 del c6digo de Céndoba manejando un critetio mis easuisticn prescribe, que “el recurse de apelacién salvo lo dispuesto para casos especiales, procederd solamente 1°) De las sentencias definitivas sobre lo principal. en toda clase de ju jvisdiccisn volanaria, jos y actos de 2 De tos autos que resuelven incidentes. siempre que causen gravamen irreparable que no pueda ser reparudo por la sentencia definitiva 3) De las providencias 0 autos de mero trémite, que cambien la natuvaleza del juicio que la ley prescribe para ta wecién entablada, 4) De las providencias « autos que inporten la paraltzacién del juicio » incidente™ Con fa salvedad que ha suprimido el ine. 3© y que el ine, 4 pasa a ser 3% el art. 346 del ondenamiento de Santa Fe tiene un vonisnid idgatice a la noma precedentemente transcript La legislacidn adjetiva de Corrientes de iodo mis genérico edicta en el ant. 238 que “el recurso de apelaciéin sélo se oworgani respecte ie las sentencias definitivas y de Tas inter emtorias que decidan articulo en lox demis casen expresamente determinados par 140 RECURSOS JUDICIALES La gran amplitud de esta concepeién, terminaba por requerir un gran dispendio de actos procesales, y un consumo cnorme de tiempo. que desvirtué las ventajas concebidas primigeniamente, ‘Termin6 asi por prevalecer cl criterio més estricto de sujetar el pro- cedimiento de segunda instancia al examen de la sentencia apelada, res- petando el principio de congruencia, y excluyendo de ese modo el plan- teamiento de cuestiones que no habian sido formuladas oportunamente ante el jucz de la instancia de origen. Simplemente cabia, a modo de excepcién, adinitir los hechos nuevos relacionados con Ia cuestién litigiosa. y producir pruebas com relacién a ellos, con ventaja para los principios de economia y celeridad procesal. Es la solucién plasmada en la Iegislacién hispanica. de la revision de la sentencia a la luz de los elementos de juicio obrantes en autos, que ha gravitado en las legislaciones procesales patrias, y que a partir de las reformas de 1924 y 1933 a la Ordenanza Procesal Civil alemana, adhiriendo a la solucién ausiriaca (art. 482 de ka ZPO austriaca). se ha afianzado en Europa Mas quede en claro que ta funcién de revisién de la sentencia de la instancia de origen, en modo alguno significa que se limitan los poderes del Tribunal de Apelacién, pues puede ejercitar como autoridad del pro- cedimiento en segunda instancia las medidas instructorias necesarias para esclarecer Ia verdad de los hechos controvertidos, en funcién del aleance de la expresién de agravios y los términos en que quedara trabada Ja litis 3, PODERES DE LA ALZADA 3.1. Examen de la forma de concesién del recurso En primer lugar la Camara de Apelacién, como juez del recurso. tiene la potestad de examinar la forma de concesién del recurso, y modificar Io decidido en Ia instancia de origen. Estando en juego principios de orden pablico que hacen a la jurisdiccién de la Alzada y a la competencia fun- cional, deja de tener aplicacién el principio dispositivo y, por lo tanto, cabe descartar todo efecto preclusivo sobre lo decidido en punto a la forma de concesiOn del recurso en Ia instancia de origen * Sobre el particular la mayorfa de los ordenamientos procesales, en la uniformidad operada en las jurisdicciones locales, al compas de ta in- fluencia del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién —dec. ley » SCBA, Ac. y Sent, 1970-11-486 © DIBA, t. 92, p. 50.0 La Ley, 144, p. $44, 27.178- 8: Ae. y Sent, 1971-1166; 1976-I1-454 0 DIBA, t. 11, p. 57:1. 126. p. 185. y jurisprudencias citada por MokslLo-Sosa-Bextzosce, Céudigas Pracesales, 2a. ed, v. Ill, p. 395 via. Foko DE ESTUDIOS DE DeRECHO PROCESAL 141 17.454—., prescriben que “Si la apelacién se hubiese concedido libremente, debiendo serlo en relacién, el tribunal de oficio-o a peticién de parte hecha dentro de tercero dia, asi lo declararé, mandando a poner ef expediente en secretaria para la presentacién de memoriales en los términos del art 246, Si el recurso se hubiese concedido en relacién debiendo serlo lie bremente, la Cdmara dispondré el cumplimiento de lo dispuesto en el art 260" +. La praxis judicial ha difundido en torno a ello, que el Tribunal de Apelacién cuenta con el poder indelegable de examinar oficiosamente la admisjbilidad del recurso de apelaciGn, antes de entrar a examinar el fondo de la causa, sin estar obligada ni por la voluntad de las partes, ni por la concesi6n hecha por el juez de la instancia de origen, por mas que se halle consentida *, De ello se sigue que es legitima la actuaci6n de oficio de las potestades indicadas. y por fo tanto, la Cimara puede determinar, de oficio, si quien dedujo el recurso de apelacidn es parte. si tiene interés en su interposicién, {Ast lo edcia el an. 276 del C6digo Proceéal Civil y Comercial de ta Nacién, Una redaccign andloga contienen los eigos procesales de Buenos Aires (at. 271), Calamarca (ne 276), Chaco (an. 274), Chubut (an. 276), Eni Rios (an. 268), Formosa (at. 274), La Papa {ar. 274), Misiones (art, 276), Neuguén (art. 276), Rio Negro (at. 276), Salia (an, 210) Son juan (at 276), San Luis (ar. 276), Santa Cruz (an. 275), Santiago del Estero (an. 271) y Tucuman (art, 771) ~lucign similar consagra el ant. 135, V del Cédigo Procesal Civil de Mendoza, desde que dijwnt que."el recurso puede ser denegado o modificado, mediante auto, st hubiere aula imal concedido, de ofcio 0 a peticién del imeresado y antes de sistanciarle El ordenamiento santafesino, sin referitse expresamente a Ia actuacién oficiosa del Te buna. ‘aungue Ia misma estéimplicitamente referida en el texo de la noma, preseibe gue ralvo lo dispuesto por casos especiales, el auto por el que se conceda tm recurso no sand recurrible, y slo podrd ser revocado o reformado en custo al modo o efecto en gue hava sido concedido, por el superior” (an. 385). Con una redacciGn menos feliz, prevé el an. 1285 de la leislacisn adjetiva de Cérdoba gue “el auto en que se concede el recurso no es apelable, pero puede ser revocudo por ol superior a soliciuul de parte 0 reformado en cuando al modo) efecto en que hve vce egneedido™ Sanya cl eric Procesal correntino se refiere a la actividad de oficio que incumbe al Tribunal como juee del recurso, prescrbiendo solamente el an. 290, que sal spelante pretendiese que el recurso ha debido otorgdrselelibremente pod satin dawn ae tercer dia de noticado de ta providencia de autas, que se declare y sete dé termine pura expresar agravios; el Tribunal resolverd sobre esta peticion sin tramitacion algunacuccedinvla g,tesando, en el primer caso se sustanciard el recurso, sesiin queda prevenide, pora al de 4a apelacién libremente concedio De todos modes, pete a que la buena técnica legislatva aconseja en este aspecto, que la ona se refers ala actividad oficiosa del Tribunal, como juez del recurso, cabe considers Be haciendo ello ata esencia de as potestades del Srgano "ad quem enté implicit oe lee ‘Rpulaciones que no lo sefalan de modo expres, 3 SCBA, Ac. 44306, 10-9.91; Véase asimismo jurisprudencia citada por Moksiio-Soea- Baatzovee, ob, cit. en nota 3,1. cit p. 393. RECURSOS JUDICIALES si la resolucién es apelable. si ha sido deducido en plazo, y si se ha concedido con el efecto que corresponde *. Ello no obstante dentro de las singularidades que suelen ofrecer los sos, recordamos que. prescindiendo de los principios precedentemente resefiados, se ha Hegado a decidir con un criterio que no compartimos, que corresponde deelarar desierta la apelaci6n si el recurrente consintié con su lencio que cl recurso se concediese en relacién cuando debid serlo libre- mente y no present en tiempo cl memorial de agravios 7. 3.2. Potestades instructorias Luego del examen oficioso de la admisibilidad del recurso de apela- cidn, surge como una de las potestades que adquiere mayor significacién, ¥y que requiere un responsable cjercicio de la misma por parte del Tribunal, ia relativa a “ordenar las diligencias necesarias para esclarecer la verdad de los hechos controvertides, respetando el derecho de defensa de las partes”, segin ast lo deteimina el ine, 2" del art, 36 del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacion * Hacemos hincapié en que ya no cabe hablar de Jas denominadas “mn didas para mejor proveer™. que prevefan los eédigos de viejo cuito, sino que dentro de los nuevos roles que incumben al 6rgano judicial, éste ejercita potestades instructorias, con un criterio mas amplio en miras a privilegiar Ja verdud y pronunciar de ese modo una sentencia més justa, La posicién restrictiva de otrora, no caber frente al juez autoridad, y en consecuencia, subrayamos desde ese vértice que el Tribunal “ad quem", en la tamitacién del proceso en segunda instancia, cuenta con las mejores posibilidades al realizar el examen integral del caso, en funciGn de los agravios deducidos, de cumplir un razonable activismo judicial. y excluir toda duda razonable sobre si los clementos de juicio obrantes en los autos * SCHLA, Ac. 43.080, 18-9-90, Véane asimimo MoneLLo-Sosa-Buxizonce, ob. cit v. cit p. 393 SCBA, Ac, 34916, 26-88 —mayoris—. La posicién minortara, que a nuestro juicio es la ceria, declré en esta aus que la remisién que ef ar, 271 del ordenumiento procesal bonaerense hace en sv segundo piiralo del ant, 258 del mismo revela el adecuado erteio de no Instn el derecho de defensa cuando el recuse ha sido concedido en relacin, debiendo haber sido lbvemvnt. Situacin en que la Alzada debe practicar las nolifcaciones del caso sonforme el at. 254 * Una redaccién con el mismo contenido se encuentra en los cuerpos legislativos de Buenos Aires, Clanrca, Chaco, Chubut, Foros, Misiones, Neuguén, Rio Negro, Salta, Santa Gauz, San Lois (at. 36 inc. 25, Entre Rios (art. 33 ine. 2, La Pampa (art. 37 ine. 2), San Sua (art 35 sinc. 29 y Saniago del Ester (ar 36, ine. 2) Disposiciones silanes se hallanen los ordenanientos procesales de Cordoba (at 347 ine. 41, Comricntes (a, 68), Jujuy fats. Hy 15), La Rioja ns. 10 y 11), Mendoza (art 46 ine, $°), Santa Fe ans. 20 y 21) y Tucumén (ar, 39) Rupee eaiae 8 Foro be estupIos DE Derectio ProcrsAL 143 responden al valor axiolégico de la verdad, susceptible de conducir a la mas justa solucién del caso, Obviamente. cuando el plexo probatorio no ofrece intersticio alguno ¥ produce la plena conviccidn necesaria para abastecer al principio cardinal de Ta Justicia, no cabrii tansitar por el andarivel del dictado de medidas instructorias, Mas si ello ocurre. haciendo una aplicacién razonable del respeto del echo de defensa de los justiciables, cudn valioso es dar virtualidad al cipio de inmediacién, bastando para satisfucer ello requerir personal- mente explicaciones a las partes en una audiencia. tal como lo preven los ordenamientos procesales *. La experiencia en el laboreo jurisdiccional indica que a través del conocimiento directo de los justiciabies, al margen de las posibilidades que atin existen en ese estadio de la conciliacion, el 6rgano judicial esta en condiciones de ai eder al conocimiento de la verdad. Y desde luego. todas las medidas instructorias posibles. relacionadas con Ia prucha de testigos. pericias, informes ", 0 la agregacién de docu. mentos “. reconocimiento judicial ". € incluso Ia potestad de disponer * Siemta en punto a elo el ine. 4° del art, 36 del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién. que “aun sin requeriniento de parte, los jueces y tibunates padi “disponer 1 cualquier momento, ta comparecencia personal de las partes para intentur und concthaciin @ requerir las explicaciones que estimen necesurias al abjeto del pleito... Ello ex rviterado Por las legislaciones aujetivas de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Formosa, Misiones, re Rios (att. 33, inc, 4), #7 Neuquén, Rio Negro, Sal 1 Cruz, San Luis (art 36 ine. 4 La Pampa (art. 37. ine. 4°), San Juan (art 35, ine, 4) y Santiago del Estero (an 36. ine ‘Tambign se halla previsto de modo andlogo en los eédigos de Cortientes (ar. 68. ine Jujuy (art. 15. 2° apartado), Mendoza (am. 46 ine. $8, Santa Fe (an. 19) y Tucumén (ats 39, inc, 19). 2 ATE! inc. 5 del eitado an. 36 del ordenamiento prealudido dispone que el tribunal puede “decid en cunalyuier momento ta comparecencia de los peritas y de les testiges pura incre garios acerca de todo aquello que ereveren necesarie Del mismo modo lo detenninan os eédigos procesales de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Formosa, Misiones, Neuyuén, Rio Negro, Salta, Santa Cruz, San Luis tor 36 ine, $9, Entre Rios (am, 33 ine. 5°), La Pampa (art 37 ine. $°) y ine. 55), ‘regulavion similar establecen las legislaciones adjetivas de Cénlobs (at. 347, ine 4°) Jujuy (ar. 15), Mendova (art 46 ine, $8), Santa Te (art, 21. 2° apart) y Tucuman (are 39, inc. 15, "'Citamos en punto a ello que el inc. 6° del art. 36 del Cédigo Procesal Civil y Comercial ie la nacién, sienta de modo especifico que los Tribunales pueden “mandar con las forma. lidades prescriptas por dicho Cédigo, que se agreguen documentos existenten bn pealeh de los partes ode las terceros en los términos de los articulas 387 a 389 Una situacién coincidente se ofrece en los ordenamientos de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Formosa, Misiones, Neuguén, Rfo Negro, Santa Cruz, San Luis tant. 36, ine 6. Entre Rios (art, 39 ine, 61, La Pampa (amt. 37 ine. 68) y San Juan (art, 35, ines De modo anlogo ello es reiterado por los edigos de Cérdoba (art. 347, inc. 44), Corrientes far. O8 inc. 19, Mendoza (an. 46 ine. $9, Santa Fe (art. 21, 28 apartado) y Tucumn (ar, 39, ine, 4), ""Traemos a eolacién Jo que dispone el an. 479 del Cédigo Procesal Civil y Comercial 144 RECURSOS JUDICIALES oficiosamente de otros medios de prueba “siempre que no afecten la moral, la libertad personal de los litigantes o de terceros, 0 no estén expresamente prohibidos para el caso...” "', brindan valiosos pardmetros para acceder a la verdad. y tornar eficaz la funcién jurisdiccional. 3.3. Omisiones de la sentencia de primera instancia Una de las situaciones en que se abre a jurisdiccién amplia para el Tribunal de Alzada se configura, cuando la sentencia dictada por el “iudex a quo” menoscabando el principio de congruencia incurre en alguna omisin en el tratamiento de alguna de las cuestiones planteadas oportunamente, pronunciando una sentencia “citra petia™. En tal caso, aun cuando no se hubiera interpuesto actaratoria de a instancia de origen, si el justiciable formula la pertinente peticién ante la Alzada, surge una jurisdicci6n positiva, debiendo, sin devolver los autos a la primera instancia, resolver directamente subsanando la omisién, sa- tisfaciéndose mejor de ese modo los principios de celeridad y economia procesal. Debe repararse que no se esta frente a un recurso extraordinario de casacién, donde s6lo se ejercita el “iudicium rescindens” reenviando la causa al Srgano “a quo” para que ejerza el “iudicium rescissorium, sino ante Tribunales ordinarios de apelacién donde en ta actividad decisoria, prevaleciendo las notas caracteristicas de la concentracién, no sdlo se debe ejercitar cl “iudicium rescindens” sino también simulténeamente el “iudi- cium rescissorium” “ y como corolario de ello no sélo rescinde sino que resuelve. Lo contrario, so pretexto del apego a un concepto riguroso de doble instancia, olvidando que ya se cumplié tal actividad pues hubo un acto decisorio del juez de grado, llega a configurar un verdadero dispendio. de la Nacisn, en tomo al ordenamigato de oticio del reconocimiento judicial de lugares o de ‘cosas, incluso con la concurrencia de peritos y/o testigos. Principios similares se encuentran e slaciones adjetivas de buenos Aires (art. 477), ‘Catamarea (art. 479), Chaco (art. 457), Chubut (art. 479), Entre Rios (art, 465). Formosa (an 4476), La Pampa (art. 455), Misiones (att, 479), Neuguén (art. 479), Rio Negro (art. 479), Salta (art, 879), San Juan (art. 479), Santa Cruz (art. 457), San Luis (art. 479), Santiago del Estero (art. 471) y Tucumin (arts. 39 y 368) Mencionamos asimismo las regulaciones concondantes de Cérdoba (art. 347, ine. 39, Corrientes (at. 68 ine. 3°), Mendoza (art. 202). y Santa Fe (art. 227). '.Cédigos Procesal Civil y Comercial de la Nacin (art. 378), Buenos Aires (art. 376), ‘Catamarea (art. 378), Chaco (ait. 356), Chubut (art. 378), Enire Rios (art. 364), Formosa (art 378), La Pampa (an. 356), Mendoza (ant. 181), Misiones (art: 378), Neuguén (at 378), Rio Negio (art, 378), Salta (art. 378), San Juan (art. 378), San Luis (art. 378), Santa Cruz (art. 356), Santa Fe (an, 147), Santiago del Estero (art. 370) y Tucumxin (art. 314). "Véase Hrrrens. J. C. Téenica de los recursos ardinarios, ob. cit n® 1, p. 5 y #21. p. 53. y MoseLo-Sosa-BERiZ0Nce, ob, cit. en nota 3, teil. p. 424 y jurisprudencia all citada Foxo be EsTubios DE DekecHo PRocesaL. 145 Prescribe en tal sentido el art, 278 del Cédigo Procesal Civil y Co- mercial de la Nucién que “el Tribunal podré decidir sobre los puntos omitidos en la sentencia de primera instancia, aunque no se hubiere pedido aclaratoria, siempre que se solicitare el respectivo pronunciamiento al expresar agravios”. constituyendo dicho eriterio una solucién normativa que se reitera en las legiskiciones locales ", 3.4. La declaracién de nulidad de la sentencia de primera instan Igualmente en el supuesto que el 6rgano “ad quem’ verificare que la sentencia es nula por vicios que afectaren a la misma, se abre una juris- diccién amplia para la Cimara de Apelacién, desde que ello la habilita no s6lo para declarar la nulidad del pronunciamiento —“iudiciwn rescin- dens" —. sino para resolver en el mismo acto sobre el fondo de la cuestién iudiciunt rescissoriunt —"*, y sin perjuicio de remitirnos a los principios expuestos precedentemente 3.3.. subrayamos en esta parcela que ello se impone ademas por 1a naturaleza del recurso de nulidad por defectos de la sentencia, puesto que el mismo ha sido absorbido por el de apelacién. En consecuencia, y por aplicacién de los principios en materia de nulidades procesales, si el vicio es reparable por el recurso de apelacién, 1a nulidad pierde virtualidad. Como correlato de todo ello el segundo apartado del art, 253, intro- ducido por la ley de facto 22.434, del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Naci6n edicta, que “si ef procedimiento estuviere ajustado a derecho y ef tribunal de alzada dectarare la nulidad de la sentencia por cualquier otra causa, resolveré también sobre el fondo del litigio”. Ello ha sido reiterado en los sendos articulos 253 de los ordenamientos procesales de Chubut, Rio Negro y Santa Cruz, que han seguido sus aguas. Dentro de It misma corriente legislativa, ya el cédigo de la materia de Entre Rios lo habia previsto ", Io mismo que el de Salta '. 'SLa fuente de esta norma que se encuentra en el segundo apartado del art. 246 del ordenamiento provesal de Santa Fe, ha sido receptada también en las legislaciones adjetivas dde Buenos Aires (art. 273), Catamarea (art. 278), Chubut (an. 278), Entre Rios (art. 270), Formosa (ait, 276), La Pampa (art. 276), Mendoza (art. 141, V), Rfo Negro (art, 278), Salta (ant. 272), San Luis (an. 278), Santiago del Estero (art, 273) y Tucumain (ant. 775). Cf. Patacio, Lino: Derecho Procesal Civil, ed. Abeledo Perrot, Bs. As., 1975, t. V, n° at 667, p. 462. "Establece ef apartado final del art, 250 del Cédigo de Entre Rios, a propésito de la nulidad por defectos de la sentencia, que “el tribunal al declararla, resolverd también sobre el fondo det litigio” De modo similar el segundo apartado del art. 252 de la legislaci6n adjetiva de Salta prevé fn punto a los poderes de la Alzada y Ia nulidad por defectos de la sentencia, que "si ef procediniento estuiere ajustado a derecho y el tribunal de alzada dectarara la nulidad de Ja sentencia por cualquier otra causa, resolverd también sobre el fondo del ltigio™. 561. 146 RECURSOS JUDICIAL Es el criterio legislative que también ha sido receptado por el art, 1267 del Codigo adjetivo de Cérdoba. al disponer que “si ef procedimiento estuviera arreglado a derecho ¥ la nulidad consistiese en la forma de la sentencia, el superior la declarard nula y resolverd sobre el fondo de Ja cuestién litigiosa’. reiterando es solucién los ordenamientos de Corrien- tes, Jujuy *. Mendoza”. y Santa Fe También ese temperamento debe ser observado en las restantes juris diceiones locales, aun ante ka falta de una regulaci6n expresa en los per- tinentes eddigos. como ocurre en Buenos Aires. Catamarca, Chaco, For- mosa. La Pampa, Misiones. Neuguén, San Juan, San Luis y Santiago del Estero. pues ki doctrina de la concentracién en la instancia ordinaria del “judicium rescindens ” ¢ “iudicium rescissorium™ conducen a que cl drgano id quent” s¢ pronuncie sobre el fondo *. En cambio, si se hubiere deducido un incidente de nulidad sustentado en vicios procesales que se suscitaron con anterioridad a la resolucién judicial, la jurisdiccién de ta Alzada queda limitada a verificar si se han Lipificado los presupuestos de la nulidad del procedimicnto, y en caso positivo, cl pronunciamiento se limita a ¢jercitar cl “iudicium rescindens™. En tal caso, como es necesario realizar una nueva actividad procesal en Ja instancia de origen, para recign poder emitir la sentencia con observancia del debido proceso Icgal. no existe la posibilidad que la Camara de Ape- laci6n ejercite el “iudiciuan rescissorium™ * De alli. que los cédigos yuc han regulado especiticamente este supuesto en el recurso de nulidad, se determine como ha ocurrido en el ordenamicnto niente provesal de Corrientes establece sobre EI segundo apartado del art. 255 de ode cl particular que “si ef procedimient esnusiese arreglade u derecho y ta mulidd consisticre ten las formu de la sentencia, el Tribunal dectavard a ésta ruta y dictard muevat sentencia’ nivale jujedo bajo el ebiulo “Devisitn previa sobre nulidaates” inervar. previamente, si en eb escrito en E] an. 228 del one prevé que "EV juez 0 tribunal de apelacién deber que se tnterpuse el recurse nee lia hecho vale” la mulidad de ta sentencia «dle los actos de primera instancia, Si por efectos de Jorma de la resolucién, ella fucre anulada, el superior deckird sobre el fondo de la cuesndn litiginsa. abe deducie de la armonizacidn de fos ingisos LV y V del art 141 del Codigo Procesal Civil de Mendoza, y en cuanto el primero de los citados prevé que si el Tribunal *.. eiterado por el exdigo de Tucumén, desde que determina en cl an. TX] que “del escrito ravios se correrd traslado a la parte contraria por el place de nueve dias” EE plazo cs més reducido en el digesto procesal civil de Jujuy, ya que en tomo a la substanciacién de la apela « prescribe que “del escrito de apelacién se conferiré traslado por seis dias ul upelade, 1° apartadoy cexpresin de a 160 RECURSOS JUDICIALES forma prevenida por el legislador. el incumplimiento de esa carga traerd aparejada. en los ordenamientos que coinciden con la solucién normativa del cédigo procesal civil que rige en jurisdiccién federal, la consecuencia de tener por no presentado cl escrito y con ello sobrevendréi la desercién del recurso *. 5.3. Fundamento de las apelaciones diferidas. Actualizacion de cues- tiones y pedido de apertura a prueba 4@) Innovaciones. La legislacién adjetiva que rige en el tuero federal, y que fuera adoptada en la mayoria de las jurisdicciones locales, al innovar Sobre el sistema tradicional vino a incorporar los institutos de la apelacién diferida y del replanteo de prueba. a tos ya existentes de la invocacién de hechos nuevos en segunda instancia y a la produccién de la prucba en la Alzada. b) Apelacién diferida. Desde cl Angulo de la apelaci6n diferida cabe recordar que en el juicio ordinario, segin la dimensién normolégica con- sagrada en la linea de cédigos uniformes, ~...1oda apelacién sobre impo- sicidn de costas y regulacién de honorarios se concederd en efecto diferido, salvo cuando el expediente hubiese sido remitido a la Camara como consecuencia del recurso deducido por algunas de las partes contra la resolucién que decidié el incidente™ ®. “Debe repararse en este aspecto In carga procesal que sienta el art. 120 del Cédizo Procesal Civil y Comercial de la Nacién, en tomo al acompafiamiento de copias cuando debe darse traskado de todo escrito, remitigndonos en este aspecto a la obra de la que somes coautor con MoweLio ¥ Bexzosce, (eb. cit, t UB, a® 301, pp. S70 y ss. y t IL, 8 449, pp. 347/341 ¥ pp. 366/367), Dicha regulacign ha sido reiterada por fos ondenamientos procesales de Buenos Aires (at 120), Catamarea (att, 120), Chaco (ar. 120), Chubut (art. 120), Entre Rios (art, 117), Formosa (art, 120), La Pampa (art, 121}, Misiones (ait. 120), Neuguén (art. 120), Rio Negro (art Salta (art. 120), San Juan (art. 120), San Luis (ar. 120), y Santiago del Estero (art. 120) Con relacign a ellos, cabe submayar que a excepeidn del Codigo de Santa Cruz, que adopts Ja reforma introducida por la ley 22.434, y que ef ordenamiento de Salta nada dice sobre la intimacién previa, el esto de los eédigos procesales precitados mantenen el texto printigenio en punto a que “no cumplido este requisito, ni subsanada la omisién dentro del dia siguiente ‘se fendré por no presentado ef escrito o el documento, en su caso, sin que se requiera tnti- mucin previa, y se dispondré su devolucién al interesudo, dejdndose constancia en el expe- diente™ (an. 120), Destacamos a su vez, que el cédigo de Ia materia de Tucumdn establece en el segundo apartado del art. 129, que cuando no se diera cumplimiento a la carga procesal de acompaiar las copias para el traslado, que “al dia siguiente de notificada en Secretaria actuarta la pro- videncia que asi lo disponga, ef juez ordenard ta devotucién del escrito sin mds trdmite ni recurso la devolucién dlel escrito, La incidencia a que diera motivo esta cuestidn, en ningiin ‘caso interrumpird ef curso de la causa”, Cabe correlacionar esta norma con el an. 163 que regula la notifica * Céaigo Procesal en lo Civil y Comercial de la Nacién (an. 69, 3 apart.) y ordenamientos procesiles de Buenos Aires (ar, 69), Catamarea (at. 69), Chaco (art 69). Chubst (art 69), a “ministerio legis’ Foro bE ESTUDIOS DE DrRECHO PRocEsaL, 161 el hecho nuevo es “apelable en Asimismo. la resolucién que rechaz efecto diferido™ * Cabe aftadir con relaci6n al Codigo Procesal Civil y Comercial de la situacidn especifica de que todos los recursos que se interpongan, ya sea, en el juicio ordinario, plenarios abreviados 0 de ejecucin, “durante el transcurso del plazo probatorio, se concederén con elevacion diferida. (art, 247), Retornando al grupo mayoritario de cédigos enrolados en ta uniformi- dad, en el dmbito de los procesos plenarios abreviados “las apelaciones deducidas contra las resoluciones que desestimen las excepciones previstas en los ines. 6, 7 y 8 del art, 347 —cosa juzgada, transaccién y defensas temporarias—, se concederdn en efecto diferido” *. Dejando de lado las apelaciones con tratamiento diferido previstas en los procesos de ejecucisn. por ser ajenas al procedimiento de segunda instancia aqui abordudo, recordamos simplemente que el legislador por razones de economia y celeridad procesal y en correlucién con el principio de concentracién, estimé que resultaba ventajoso postergar la funcién de revisién de algunas cuestiones. que por su naturaleza no obstan al de: del proceso, para la oportunidad en que se Hevara a cabo la revis la sentencia de mérito. Es asi, como se ha previsto que dentro del plazo de cinco dfas de la nolificacién personal o por cédula de la providencia que dispuso expresar agravios, debe cumplimentarse la carga procesal de fundamentar los recur- 0s que se hubiesen concedido con tratamiento diferido. Si ast no se acttia sobreviene el consentimiento tacito de aquellas resoluciones que fueron objeto de impugnacién en su debida oportunidad. y cuya fundamentacién qued6 postergada para esta oportunidad del pro- cedimiento en segunda instancia. La regulaci6n normativa de las legislaciones locales que dentro de la postura de la uniformidad, ha seguido las aguas del cédigo adjetivo. que Rios (at. 66). Formosa (art, 69), La Pampa (art. 70), Misiones (att. 69), Neuguén (an, 69). Rio Negro (at. 69), Salta (ait, 69), San Juan (art. 69), San Luis (art. 69), Santa Crvz (art. 69) y Santiago del Estero (art, 68), sienlan en Tineas generales Ia misma regla nonnativa. Asi lo establece el art, 366 del Cédigo Provesal Civil y Comercial de la Nacién, y lo reiteran los onlenamientos adjetivos de Buenos Aires (an. 364), Catamarca (at, 366), Chaco (art. 344), Chubut (ant, 366), Entre Rios (art, 352), Fomosa (ait. 366), La Pampa (att. 344), Misiones (ast. 206), Neuqusn (art. 366), Rio Negro (art. 366), Salta (amt. 366), San Juan (art 366), San Luis (art. 366), Santa Cruz (att, 366), Santiago del Estero (art. 358) ‘*Céuigo Procesal Civil y Comercial de la nacién (ast, 496, apart. 3°) y legislaciones djetivas de Buenos Aires (art. 494, apart. 38), Catamarea (ait. 496 apart. 39, Chaco (an. 474, part. 3°), Chubut (art. 496 apart, 3°), Entee Rios (art, 482, ineluye también a la desestimatoria de La nulidad), Fomnosa (art. 496 apart, 38), Misiones (art. 496 apart. 38), Neuquén (art. 496 apart. ®), Rio Negro (art, 496 apart 38), San Juan (art. 496 apart. 3%), San Luis (art. 496 apact 3°), Santa Cruz (art. 496 apart. 3), y Santiago. del Estero (art. 488, apart 3°), 162 RECURSOS JUDICIALES rige en jurisdiccién federal. prevé en funcién del principio de concentra- cidn, que “dentro de quinto dia de notificada la providencia a que se refiere el articulo anterior y en un solo escrito, las partes deberén “1. Fundar los recursos que se hubiese concedido en efecto diferido, Si no lo hicieren, quedarén firmes las respectivas soluciones” *. La situaci6n singular que exhibe la legislacidn adjetiva de ta provincia de Salta, determina que la elevacién diferida se cumple cuando ha concluido la etapa probatoria, prescntindose los memoriales en la instancia de ojigen en esa ocasiGn, elevaindose los autos al superior al efecto pertinente. y si el recurso fuera fundado se fijard un plazo adicional para que la prucba se produzea ante el juez “a quo” *. Acotamos. que la aludida fundamentacién de los recursos concedidos con tratamiento diferido, requiere Ia pertinente substanciacién a los fines de abastecer el principio de bilateralidad de la audiencia, pues cabe conterir al apelado el derecho de contestar los agravios del apelante *, ¢) Replanteo de prueba. Desde otro dngulo subrayamos, que dentro del grupo de uniformidad de los ordenamientos procesales, las resoluciones sobre produccidn, denegacién y sustanciacin de la prucba, no son ape- lables, por via de principio, La excepeién. como ya lo expusiéramos. la ofrece el Cédigo Procesal Civil y Comercial de Salta. en cuanto prevé que la denegatoria de una Céaligo Provesal Civil y Con ial de la Nacién (art, 260, inc. 18) y digestos de Buenos Aires (art. 255), Catamarca (art, 260, inc, 18), Chaco (an. 258, ine. 18), Chubut (art, 260, ine. 14), Entre Rios (ant. 252), Formosa (an. 260. inc. 18), La Pampa (art. 259, inc. 1"), Misiones (ant, 260, ine. 18), Neuyuén (art 260, ine. 1°), Rio Negro (amt. 260, ine. 1*), San Juan (art 260, ine. 18), San Luis (an. 260, ine. 18), Santa Cruz (an. 260, ine. 18) y Santiago del Estero (att 255, ine. 1" "Prescribe en tomo a ello el at. 247 eitado en punto a la elevacién diferida que “cuando 1 las juicias ordinario, sumarie ode ejecuetin se interpongan recursos de apelacién durante ef transcurso del plaze probatorio, se concederin von elevacion diferida, uerpuestes los recursos, el secretario los proveerd inmeditamente pero el plazo para fundarlos correrd desde 1a providencia que ordene poner les autes en la oficina para la presentacion de los mernoruales or los apelantes, la que se dictard luegn de vencido el plazo probatorio y sus ampliaciones ¥ de recibida tls la prueba pendiente ne afectada por tos recursos, Presentadas los mena- rales v sus cantestaciones en Tes plazas sevalados en el articulo anterior, se elevarin lox autos «al Superior. El tribunal de alzada resolverd todos os recursos @ un mismo tiempo ¥ en 430 de corresponder fijard el iérmino adicional en que las pruebas pertinentes se deberi pronlucir dante el juez inferior *Prescriben expresamente exe traslado los Cédigos procesales de la Nacién (art. 261), Buenos Aires (art. 256), Catamarea (art. 261), Chavo (an, 259), Chubut (art, 261), Etre Rios (ar, 253), Formova (at. 259), La Pampa (aa. 260), Misiones (art, 261), Neuguén (ait. 261), Rio Negro (art. 261), Salts cat, 258), San Juan (att. 261), San Lis (ar 261), Santa Cruz (an 260) y ‘Sautiago del Estero tart. 256), ‘Observamos que ol ordenamiento procesal de Salt por eédula jade que dicho traslado se notitivans Foko DE EstUvios F DERECHO ProcesaL, 163 medida de prueba es apelable “con elevacion diferida postergdindose su consideracién (ant, 247) Ahora bien. volviendo al grupo mayoritario de legisliciones adjetivas, Ia mentada inupelabilidad no tiene electos preclusivos. pues existe In Posibilidad de revertir esta situacidn en el procedimiento en segunda in lancia, si dentro del referido plazo de cinco icacidn personal © Por eédula de que debe expresurse agravios. se demuestra. a través de una fundamentaciGn razonable. que aquella resoluci6n judicial padece de un error “i iudicando” 0 un error “in procedendo™ que la descalitica, Elle Supone cumplimentar la carga procesal de Hevar a cabo una critica concrete 2 favonada de Ia resolucién que le privara del derecho de producir prueba, pile declarara negligente en la produccién de la misma. 0 bien decreting la’ caducidad de la prueba, Se prescribe en tal sentido, que en el referide plavo de cinco dias las artes deben “indicar las medidas probatorias denegadas en primera ings Lancia o respecio de las cuales hubiere mediado declaracién de negligencian gue tengan interés en replantear en los términos de los arts. 399 y 38S in fine, La peticién serd fundada, y resuelia sin sustanciacién alguia™ 8 Tnsistimos en que debe aetuase cumpliendo el rol que debe satisfacerse a través de una expresién de agravios 0 memorial. 0 sea, demostrando los errores © yerros que encierra la resolucién que ha frustrado la actividad Probitoria. En consecuencia, sino se abastece dicha carga procesul. ta Peticidn deviene infundada y el corolario de ello seri la desestimatoria del replanteo de prucbaa ; Perjuicio que compartimos esa posicién, no podemos dejar de nar otro criterio ponderable que no ha predominado, segin el cual qnetualizar™ cuestiones o revisidn de to decidido en primera instancia, pues 9 A estd frente al mecanismo propio del objeto del recurso de apelacion, al margen de si la resoluciGn es 0 no ajustada a derecho. lo que importa cS verificar si través de la peticién que se formula se puede lograr un mayor esclarecimiento de la verdad. conjugando el interés juridico a tatelar y la necesidad de sanear el proceso. todo ello en funcién de la utilided que Pueda brindar a la luz de una visién final de la causa ya sentenciads’ art. 379 “in fine"), ra la conclusién de la ctpa probatoria igo Procesal Civil y Comercial de ta Nac faa agg iS {2 285 inc: 2, Camara (an. 260 ine. 29, Chaco (aa 389 ie ee ter aye nei Ett Rios at. 253 ine. 2, Vormosa (an. 258 ines 5, La Pama ee ae cones (ars 260 ine. 2), Neus (ar. 260 inc. 2, Rio Negro tat Se ines oe Jie oes 3.8m Las ca 260 ine. 2, Sama Cruz tart. 259 ines 2.9 Sontag 1 y ordenamientos de tero (an Se impor noma prealudida de la legislacion adjetiva de La Pampa, ecalea expr ea apartado Final el ine. 2, que “wo waded efrecerae pruchy se precanan €m primera instancia por negligencia del inter eee Nos remitinios en punto a la jurisprudencia existe fizacién de la misma en Mowit.o-Sosn-Binizusce, of et te sobre el particular, a la sistema cit, Pp. 28S y ss. y pp. 309 y a8 166 RECURSOS JUDICIALES Es menester poner de resalto. que si bien se ha prescindido del requisito del juramento en punto al desconocimiento de la existencia de documentos anteriores. es menester que se suministren los fundamentos que abonen la verosimilitud de tal solicitud. En cambio algunos de los cédigos anteriores conservan el recaudo del juramento. como presupuesto de admisibilidad respecto de los documentos que se dicen se desconocfan *!. En ambos casos. sin perjuicio de ta potestad del Grgano jurisdiccional de desestimar “in limine™ la agregacion de documentos extempordneos que resultaren manifiestamente improcedentes © dilitorios. se impone correr traslado a la contraria ™. Si mediare un desconocimiento expreso de Ia autenticidad de los mismos, corresponde la apertura a prucba en segunda instancia, aplicandose los principios comunes sobre el cotejo que se observan en Ia instancia de origen ¢) Confesion judicial. También dentro del criterio tradicional se recep- 16 la prucba de confesién en segunda instancia, 1o cual ha sido ratifieado en cl grupo de cddigos que transitan por el andarivel de la uniformidad, dos tres dias siginentes..° a citacidn para la sentencia on segunda instancia “pode fas partes preremar decuentes que a prudicron aconpanar oportinanente, por causes qe no tes Jueren onpuater..", abadicndo ot segundo apartado, que “se adnitirdn de plano tes dect- ‘mentos. pero la parte contraria podni oponerse «su agregaciin dentto de les seis dias st respectiva aleganula que es estempordnea @ presemar las descar gos gulentes la notficwe er apartado disponiendo, «ue “el incdente se decidird en la sen. (que taviere™, Finaliza el tencia definitiva, la que anes dle promunciarse sobre la apelacién resolverd si se admiten 0 rechacau los documentos De med similar el at, 783 de la legislacisn adjetiva de ‘Tucumén, detemina a propésito de los documentos posteriones que “con fay excritos de expresién de agravios ¥ su contestactén, porrcionar en tiempo por ser las partes podrdn presemar los documentos que no prulicron pr de fecha posterior « la providencia dle autos para sentencia de primera instancia™ ¥ acota en el segundo apartado, yue “de las del recurrente se correrd traslude conjuntameste con si expresién de agravios, De los del apelucdo, se corverd traslado por tres dias al apelunte *!Mencionamos entre los orenamientos que exigen como presupuesto de admisibilidad cl juramento de no habeelos conocido, el de Corrientes, cuyo art, 261 establege, que con los esscitos de expresiin de agravios o su eontestacién ™..las partes poaiin presentar fas docu ments a que se refiere la parte final del art. 109 y hasta ta sentenciar defintiva tos demis de que juren no haber tenido hasta entonces conocimient, a no haber pealide proporciondrselo en Tiempo eportuno. En este iltimo caso. el Tribunal dispandrd. respecte de los documentos, 1a sustanciucién que corresponda en uso de sus facultades para mejor proveer. De lo que cada parte presente se carrerd traslado a la ota" Dentro de est misma cortiente, el ar. 138 del edigo de la materia mendocino dispone en punto la prueba en la Alzada, yue “al expresar @ contestar agrastos, los litigantes podrdn proponer medidas de prueba. en las siguientes cases: 1) Que se trate de documentos que bajo juramento afirmen haber conovide & pesido proporciondrselas recién después de pasada la ‘opornmidad de ofvecertos en primera instancia” ‘éase los e6digos de Corrientes (ant. 261) y Mendoza (art, 138), citados en la nota precedente Foko bE ESTUpIos DE DERECHO PROCESAL 167 Se sienta en tal sentido, que es viable que las partes sin nec requerir la apertura a prueba, pucden solicitar ante la Alzada, siempre dentro del referido plazo de cinco dias. que ta contraria ubsuelva posiciones sobre hechos conducentes ajenos a los que fuera matcria de dicha prueba ante el Grgano “a quo”. Se prescribe en punto a ello, que los justiciables pueden “exigir con- Jesién judicial a la parte contraria sobre hechos que no hubieran sido objeto de esa prueba en la instancia anterior” ®, Esta petici6n no se substancia, desde que no ha sido incluida entre las que debe correrse traslado ™, Sentado ello acotamos, que se esti ante un medio de prueba comple- mentario del que se produjera con anterioridad, debiendo considerarse que en virtud de cllo si el mismo no tuvo lugar, no resulta admisible ante la Alzada. Importa asimismo puntualizar que estos principios no son aplicables a los procesos plenarios abrevisidos, pues mientras no se trate de los su- puestos de hechos nuevos o del replanteo de pruebas, no cube la confesién en segunda instancia *, El Codigo de forma de Cérdoba determina desde el vértice del pro cedimicnto ante la Alzada. que “hasta e! decreto que ordena pasar a estudio la causa, podra pedirse la confesional siempre que se refiera a hechos 0 circunstancias que no hayan sido objeto de esa prueba en primera instan- cia” (art, 1297), De modo similar el art. 262 del ordenamiento de Corrientes edicta que “podrdn también las partes, hasta la citacién para la sentencia exigirse confesién judicial, con tal que sea sobre hechos que no hayan sido objeto de otras exigidas en primera instancia, y con sujecién a lo dispuesto en el art. 136 Y siguientes” "Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién (art, 260 ine. 49) y te jetivas de Buenos Aires (art. 255 ine. 4), Catamarca (art. 260 ine. 4), Chaco (art. 258 ine. 4), Chubut (art. 260 ine. 4, Entre Rios (an. 252 inc. 4%), Fomosa (ait, 258 ine. 4"), Misiones (art, 260 ine. 45), Neuguén (at. 260 ine, 4), Rio Negro (art, 260 ine. 4°), Salla (art. 257 ine. 25), San Juan (art, 260 ine, 47, San Luis (an. 260 ine. 4°), Santa Cruz (art 259 ine. 4% y Santiago del Estero (art. 255 ine. 4), El ordenamiento de 1a Pampa (ant. 259 inc. 4), limita la confes alegades «documentos nuevos presentados”: %Véase los eédigos citados en nota precedente. “Asi lo establece el art. 274 del Codigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién, y lo teiteran los vigentes en Buenos Aites (an, 269), Catamarea (ant 274), Chaco (art. 272), Chubut (ant. 274), Lntte Rios (art. 266), Formosa (ait. 272), Misiones (art, 274), Neuguén (art. 274), Rio negro (an. 274), Salta (art, 26%), San Juan (ait 274), San Luis (art. 274), Santiago del Estero (an. 26%), EI Cédigo de La Pampa no hace tal exclusign y sujeta a las mismas reglas lo relative al ofrecimiento y produccién de nda instancia, ya se trate del juicio ondinario © plenarios abreviados (art, 272), in a “los hechos nuevos 168 RECURSOs JUDICIALES El c6digo adjetivo de Jujuy simplemente seffala que dentro de tercero dia de la citacién para la sentencia, las partes podréin presentar documentos con el alcance que ya hemos expuesto, “y ponerse reciprocamente posi- ciones™ (art. 225. 1* apart, “in fine”). A su turno los cédigos de Santa Fe (art. 157, 3* apart.) y de Tucumén (art. 319), establecen solamente que no se podri usar de este medio pro- batorio mas de una vez en cada instanci A) Apertura a prueba. Hechos nuevos. Dentro de las variaciones sus- ceptibles de sobrevenir en la dindmica de las relaciones o situaciones juridicas en el curso de la litis, suelen acaccer hechos que se imbrincan én los alegados oportunamente y que suelen adquirir una gravitacién decisiva en la solucién del caso. Es por ello. que siempre el legislador previ6 Ia invocaci6n de hechos nuevos. y desde luego frente a la controversia planteada en torno a los mismos. regul6 la apertura a prueba y la produccién de la pertinente actividad probatoria, En el cuadrante de la uniformidad de los cédigos procesales se sienta que las partes podriin, siempre en el aludido plazo de cinco dias. “pedir que se abra la causa a prueba cuando: se alegare un hecho nuevo posterior 4@ la oportunidad prevista en el art. 265, 0 se watare del caso a que se refiere el 2° parr, del art. 366;" *, De la misma se desprende desde el vértice de su admisibilidad tem- Poral, que el acaecimiento del hecho nuevo invocado o su conocimiento debié sobrevenir con posterioridad al vencimiento del plazo de cinco dias, computado desde la notificacién del auto de apertura a prueba en primera instancia, Desde la perspectiva de la admisibilidad intrinseca debe tener relacién directa con la cuestién que se ventila y aflorar dentro de los elementos constitutivos de la pretension, ya que no puede importar en modo al una alteraci6n de los mismos ni por ende. su transformacién, Insistimos en puntualizar que el hecho nuevo debe estar necesariamente comprendido dentro del marco del “thema decindendum”. También cabe dectarar la admisibilidad del hecho nuevo cuando hubiera sido desestimado indebidamente en primera instancia, y se hubiera funda- do el pertinente recurso de apelacién concedido con tratamiento dife- “Es la nonna consagnada por el art. 260 ine. 5°, apart. a, del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién, asi como por los ordenamiientos de Buenos Aires (art. 255 inc. $° a). Catamarea (art, 260 ine. 5*a), Chaco (art. 258 ine. $® a), Chubut (art, 260 inc. S® a), Entre Rios (art. 252 ine. $* a), Formosa (art, 258 ine: S® a), La Pampa (art, 259 ine. S® a), Misiones (a. 260 inc. 5* a), Neuguen (art. 260 ine. 5° a), Rio Negro (art. 260 ine. $* a), Salta (art. 287 ine. 3%), San Juan (art. 260 ine, $® a), Sun Luis (art, 260 ine. $* a), Sama Cruz (art. 259 inc. 5° a) y Santiago del (art 255 ine. 3° 3, | FoRo DE ESTUDIOS DE DERECHO PRocEsaL, 169 rido, satisfaciendo la carga procesal, segiin lo hemos expuesto *ur supra” a). A su vez es viable Ia apertura de la causa a prueba en el caso que se hubiere declarado fundado el replanteo de prueba, prescribiendo sobre el particular el apart. “b”. que cuando “se iubiese formulado el pedido a que se refiere el inc. 2° de este articulo” asi debe procederse. Aitadimos que el pedido de apertura a prueba basado en la exi de un hecho nuevo, requiere substanciacién, No ocurre lo mismo tratdndose de la peticién del replanteo de prueba, pues en tal hipstesis no corresponde decretar el traslado * Contestacién a la expresin de agravios Como consecuencia del trastado al apelado del libelo de expresién de agravios. que en el sistema de 1a uniformidad procesal se decreta por diez - Seguin se esté ante un juicio ordinario 0 un proceso plenario abreviado. respectivamente. y que debe notificarse por ministerio de la ley, surge la carga procesal de contestarla *, Consideramos que la contestacién a ta expresién de agravios por el apelado, contribuye no s6lo a un mejor ejercicio del derecho de defensa, sino también importa una apreciada colaboracién con el Grgano jurisdic. cional, a tono con el principio de buena fe y lealtad procesal. Debe repararse que en la etapa de la visién final de la apreciacién de los hechos, y de la valoracién de la prueba, adquiere singular trascendencia © Véase los e6digos citados en nota $5. “Céuigos procesales de la Naci6n (art. 265 “in fine"), Buenos Aires (ant, 260 “in fine”), ‘Catamarea (amt. 265 “in fine”). Chaco (art. 260 “in fine"), Chubut (art. 265 “in fine”), Entie Rios (att. 257 “in fine”), Formosa (art. 263 “in fine”), Misiones (ast. 265 “in fine”), Neuguén (art, 265 “in fine), Rio Negro (art. 265 “in fine”), San Juan (art. 265 “in fine”), San Luis (at. 265 in fine"). Santa Cruz (art. 264 “in fie”) y Santiago del Estero (art, 260 “in fine”). Dentro de las particularidades el ordenamiento de La Pampa, acorde con Io establecido {8 propésito del plazo tnico para expresar agravios de diez das, también unifica el plazo para ‘contestarla del mismo modo (art. 263), A su vez, el ondenamiento procesal de Salta prevé la notificacién del traslado por eédula 58), Con relaci escrito de apelacién libre —que contiene los agravios. al apelado (art. 223, 1° apart) ‘A su vez operando con el plazo de nueve dias, la legislacisn adjetiva de Cénloba prevé €l traslado por ese lapso (art. 1287) La misma solucién normativa se halla en a legislacion adjetiva de Corrientes (art. 256! 3 apart), Tucumén (art. 781) y Mendoza, con el alcance que esta dltima legislacién dispone la notificacién a domicilio (as. 136, 2° apart, El codigo santafesino confiere, a su tumo, traslado por la expresién de agravios por el Blazo Ue diez dias (art. 366), los e6digos procesales ajenos a la uniformidad, el de Jujuy prevé que del debe conferirse traslado por seis dias 170 RECURSOS JUDICIALES Jo expongan sus puntos de vista sobre los agravios vertidos que el ape ilismo de guardar silencio, por el recurrente. y no que se replicgue en el fa Es importante, por lo tanto, que se aporten argumentaciones fécticas y juridicas que a la vez que rebatan las alegaciones criticas del apelante, abonen 0 complementen al contenido que da sustento al allo de primera instancia Y aun cuando las regulaciones procesales no contengan otro apere bimiento que cl propio de los efectos de 1a preclusiGn, pues se dispone que si el apelado no contestare el escrito de expresion de agravios dentro del plazo fijado en el art. 265, no podré hacerlo en adelante y ta instancia seguir su curso” ™, Io cierto es que no puede dejar de evaluarse ¢ conducta displicente a la luz de las circunstancias de la causa. A su turmo, cuadra destacar que el érgano “ad quem’. en funcidn del principio de apelacién implicita, aun en caso de silencio del apelado, debe considerar las defensas que introdujera en los escritos constitutivos de la litis, remitiéndonos a, lo expuesto “ur supra” —3.7 5.5. La produccién de la prueba en segunda instancia Sin la Alzada se hubiere abierto la causa a prueba incorporado documentos o ya si fuere admisible la confesién judi instan devienen de aplicacién en lo pertinente los principios comunes relativos al diligenciamiento de la prueba en la instancia de origen, Prescribe al respecto la regulacién normativa a nivel de la uniformidad procesal. que “las pruebas que deban producirse ante la cdmara se regirén, en cuanto fuere compatible, por las disposiciones establecidas para primera instancia...”, observandose un criterio andlogo en los restantes cuerpos legales ®, “Céaigo Provesal Civil y Comercial de la nacién (art, 267), y legislaciones aujetivas de Buenos Aires (art. 262), Catamnarea (art. 267), Chaco (art. 262), Chubut (art, 267), Entre Rios (an, 259), Formosa (ar. 265), La Pampa (aft. 265), Misiones (art, 267), Neuguén (ant. 267), Rio Negro (art. 267), San Juan (art. 267), San Luis (art 267), Santa Cruz (ar. 266) y Santiago del Estero (art. 2621, En el eéigo salto se requiere fa peticisn relardataria de la acusacidn de rebeldfa, para {gue se produzea el electo preclusivo (an. 259) Blex 1s comparatista” con los restantes e4digos procesales veméculos muestra ‘en esle axpecto un panorama semejante partiendo por el de la provincia de Cérdoba que sienta que si ef apelade no contestare la expresién de agravios, la tnstancur seguird su curso coma 21 Lo hubiera hecho” (an, 1291) y que reteran el de Corrientes (an. 258) y Tueuman (ant. 782), ¥y de modo implicito lox ordenamientos de Mendoza (an, 140) y Santa Fe (arts. 70 y 368). ™Cédigos procesales de la Navi6n (art. 262, 1* apart), Buenos Aires (art. 256 1" apart.) Catamarea (art, 261 1* apart), Chaco (ant. 259 1 apart), Chubut (art. 268, 1* apart), Entre Rios (an. 254, 1" apart, Formosa (art. 260, 1 apart. La Pampa (art. 261, 1° apart), La Pampa (a. 261, 1" apart), Misiones tart, 262, 1" apan.), Neuqugn (ant. 262, 1" apart, Rio Negro (ar. Foo DE ESTUDIOS DE DERECHO PROCESAL 71 Es decir, que habra que aplicar las disposiciones que en torno a kas normas generales en materia de prueba resultan de aplicacién para el juicio ordinario y en lo pertinente para los procesos plenarios abreviados, en cuanto no existan normas espe sobre el particular. De esos preceptos legales adquiere singular signi mn el de inme- diacidn, y tal es asi, que el legislador lo ha ratificado expresamente de- terminando dentro de la dimensi6n de. la uniformidad, que “los miembros del tribunal asistirén a todos los actos de prueba en los supuestos que la ley establece 0 cuando ast lo hubiese solicitado oportunamente alguna de las partes en los términos del art. 34, inc. 1. En ellos Hevard la palabra el presidente, Los demas jueces, con su autorizacién, podrén pregunar lo que estimaren oportuno™ De ello se sigue que tratndose de las actuaciones de prucba que deben practicarse dentro del radio urbano de ta sede del Tribunal, los jueces de la Cimara de Apelacién deben recibirla directamente. Sdlo cuando esa actividad deba realizarse fuera de dicho radio, cabe la posibilidad de comisionar su recepcidn, con el alcance que traténdose del reconocimiento judicial pueden trasladarse los jueces nacionales o federales a cualquier lugar de la Repdblica donde deba tener lugar la diligencia, criterio que también ha sido receptado, en principio. por algunos de los cédigos pro- vinciales ” . 262, 1* apart), Salta (ant. 260, 17 apart), San Juan (art, 262, 1" apart, San Luis (art, 262, 1°" apan.), Santa Cruz (art. 261, 1" apart.) y Santiago del Estero (art, 257. 1* apart.) Principios simitares se Consagran ea los restantes eddigos provesales, como el de Cérdoba (ant 1299), Corrientes (ant. 264), Mendoza (art. 138, ine. 4°, 3" apan.), Santa Fe (an. 371) y ‘Tucuman (at. 786), eon el alcanee que este Ultimo alude a fos plazos que no podrdn exceder de 20 dias y de 40 dias en el extraoruinario, determinando que la prueba debe ofrecerse dentro de los cinco primeros dias » Céuligos procesales de la N, Buenos Aives (art, 258), Catamarca (a. 263), Chubut (an. 263), Entre Rios (art. 285), Formosa (at, 261), La Pampa (art. 262), Misiones (at. 263), Neuuén (art, 263), Rio negro (an, 263), Salta (ae. 260), San Juan (art, 263), San Luis (an. 263), Santa Cruz (an. 262) y Santiago del Estero (an. 258) Dentro de este grupo, el ediigo de Chaco, sin variar la esencia det contenido de estas nnommas, detennina que “la Sala de Apelaciones dictard resolucidn con respecto a la apertura @ prueba y en ef caso de que ésta se adnitiera fijard ta duracién del término probarorio. afadiendo que "...us pruebas que deben proalucirse ante la Sala, se regirdn en cuanto fucre compatible. por las disposiciones establecidas para la produccidn y recepeién de prueba en primera instancia™ (an. 268, 1" apart.) E] att. 787 del Codigo de la materia de Tucumsin coincide con la solucién normativa sobre el rol de los jueces del tribunal en funcién del principio de inmediacién, **Céuigos procesales de la Nacién (arts. 381 y 382), Buenos Aires (arts, 379 y 380), Catamarea (ans. 381 y 382), Chaco (arts. 359 y 360), Chubul (atts 381 y 382), Entre Rios (ats, 368 y 369), Formosa (arts. 378 y 379), La Pampa (ans. 359 y 360). Misiones (arts. 381 y 382), Neugueén (ants. 381 y 382), Rio Negro farts, 381 y 382), Salta (arts, 380 y 381), San Juan (ans [305 y 366), Sam Luis (ats. 381 y 382), Santa Cruz (ams. 359 y 360} y Santiago del Estero (ats 373 y 374). ‘Algunos ordenamientos tratindove de! reconocimiento judicial fo limitan a la jurisdiceién provincial (Enire Rios (art. 368) y Salta (amt, 382), 172 RECURSOS JUDICIALES Y una vez més hacemos hincapié en punto a los roles protagénicos que incumben a los jueces del érgano “ad quem” en la actividad probatoria en segunda instancia, cuando se tiene una perspectiva integral del material litigioso y es menester esclarecer algtin aspecto para arribar al conocimiento de la verdad y satisfacer el valor axiol6gico Justic 5.6. Las alegaciones de conclusion, Alegatos. Informes “in voce”, Llamamiento de autos Finalizado el debate probatorio en segunda instancia, por aplicacién de los principios que existen sobre las alegaciones de conclusién, se abre la facultad de los justiciables de alegar de bien probado, si asi correspon- diere en funcidn de la clase de proceso. Desde este tiltimo punto de vista, la exclusi6n de alegar en los procesos plenarios abreviados, que originariamente preveia el Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién (art. 495, I apart.), fue dejada sin efecto por la ley de facto 22.434, que vino a incluir esta nueva etapa. Salvo las legislaciones de Chubut (art. 495), Rio Negro (art. 496) y Santa Cruz (art, 473), que se adecuaron a la reforma producida en el orden nacional, y las legislaciones de La Pampa (arts. 261 y 472) y de Salta (art. 495), que admiten los alegatos en los procesos plenarios abreviados, en los restantes c6digos integrantes del grupo de la uniformidad a saber Buenos Aires. Catamarca, Chaco, Entre Rios, Formosa, Misiones, Neuquén, San Juan, San Luis, y Santiago del Estero, no cabe la posibilidad de alegar en esta clase de procesos. Sentado en ello subrayamos que cabe remitirse a las normas sobre la conelusién de la causa para definitiva, con el alcance de la regulacién especifica en punto a que no pueden retirarse los autos, a diferencia de lo que ocurre en Ia instancia de origen. Sobre el particular dentro del vértice de la uniformidad, se establece que “para alegar sobre su mérito, las partes no podrén retirar el expe- diente...", afiadiéndose a comtinuacién que “el plazo para presenar el alegato sera de seis dias", coincidiendo en este dltimo aspecto con las reglas genéricas en la materi Desde el ngulo del “informe in voce”, cabe puntualizar que algunos ”'Cédigos procesales de la Naci6n (ant, 262, 2° apan.), Buenos Aites (art. 257, 2° apart), ‘Catamarca (art. 262, 2* apan.), Chubut (ant. 262, 2° apart), Enire Rios (art. 254, 2° apart), Formosa (an. 260, 2 apart), Misiones (art. 262, 2° apar.), Neuguen (art. 262, 2 apan.), Rio Negro (art 262, 2* apart), San Juan (ant, 262, 2° apart), San Luis (art. 262, 2 apart), Sania Cruz (an. 261, 2° apart.) y Santiago del Estero (an, 257, 2° apart), Dentro del que denominamos grupo de uniformidad, el Cédigo de Chaco dispone en el tercer apartado del art. 265 que “vencido ef término de prueba, se” dispondré su clausura, ordenindose correr traslado a las partes para que aleguen sobre el mérito de las pruebas TUDIOS DE DERECHO PROCESAL. 173 Foro br ordenamientos procesales no lo han previsto. como ocurre con la legislacién de Chaco y La Pampa, que s6lo contemplan los alegatos escritos. En otros casos. se los ha excluido expresamente. como sucede en el Cédigo adjetivo de Corrientes (art, 268). Debe repararse, a su vez. que el ejercicio de este derecho requiere co- mo presupuesto de admisibilidad. que se exteriorice esa peticion dentro del plazo de quinto dia de la notificacién del auto que dispone expresar agravios Si bien una interpretacién flexible autoriza a interpretar que estos informes son viables tanto en el juicio ordinario como en el plenario abreviado, cuando se ha producido prueba en segunda instancia, la expe- neia indica que en las legislaciones que los admiten, los abogados que asisten a las partes. 0 que las representan, no suelen hacer uso de los mismos, pudiendo concluirse que este atisbo de oralidad queda ahogado Por las costumbres escriturarias, Varias son las alternativas que conducen a Ia finalizacién de los momentos finales del procedimiento de segunda instancia, En primer lugar la situacién més frecuentemente se produce cuando se han expresado agravios. y se ha levado a cabo la pertinente substan. ciacion. Ya sea que se haya contestado aquella o que se hubiere dejado de hacerlo, los efectos preclusivos conducen al lamamiento de autos para sentencia, Y en el caso que hubiere existido una actividad probatoria, con los alegatos 0 los informes “in voce", 0 ya con el transcurso infructuoso del tiempo para producirlos, se esté en condiciones de Hamar autos para sen- tencia, Prescriben en tal sentido la generalidad de los ordenamientos proce- sales, que “con la expresién de agravios y su contestacién, 0 vencido el plazo para la presenacién de ésta y, en su caso, sustanciadas y resueltas fas cuestiones a que se refieren los arts, 260 siguientes, se lamaré autos * aportadas. E! plazo para presentar el alegato serd de seis dias para cada parte y en el orden ‘que determine el auto respectivo, que serd notificado personalmente o por cédula” El ondenamiento tucumano fija para cada una de las partes el plazo de tes dias para alegar, ¥ mantiene la prohibici6n de retirar los autos de la oficina (art. 789), ™ Cédigos procesales de 1a Nacién (art. 264), Buenos Aires (ant, 259), Catamarca (art. 264), Chubat (art. 264), Entre Rios (art. 256), Formosa (an. 262), Misiones (art. 264), Neugueén (ar 264) Rio Negro (art. 264), San Juan (an. 264), San Luis (art. 264), Santa Cruz (art. 263) y Santiago del Estero (ar. 259). ™ Cédigos procesales de la nacién (ait. 268), Buenos Aires (at. 263), Catamatca (ait. 268), Chaco (at. 266), Chubut (at 268), Entre Rios (a. 260), Formosa (art. 266). La Pampa (ar 266). Misiones (art. 268), Neuquén (ait. 268), Rio Negro (art. 268), Salta (art, 262), San Juan (art. 268), San Luis (ant. 268), Santa Cruz (an. 267) y Santiago del Estero (art. 263). De modo similar el ar. 140 del eéuigo mendocine establece que “comtestada la expresion 174 RECURSOS JUDICIALES Sorteo de la ci instancia . Estudio y acuerdo. Sentencia de segunda Con el consentimiento de ta providencia de “autos”, el procedimiento de segunda instancia encuentra la faz. preclusiva, agotindose el mismo. Cesa a partir de ullf la carga procesal de instar que incumbéa a las partes, A su vez s¢ produce el saneamicnto de dicho procedimiento, y sobreviene el trimite de ta formacidn de la sentencia que debe pronunciar el érgano ad quem’, en funcidn de las particularidades propias del colegio. Prescriben en general sobre el particular los cédigos procesales que consentida dicha providencia de “e! expediente pasaré al acuerdo sin mds tramite. El orden para el estudio y votacién de las causas serd determinado por sorteo, el que se realizaré al menos dos veces en cada mes” ™. En atencidn al ndmero de causas que cuenten con el Hamamiento de autos consentido, se distribuyen proporcionalmente las mismas entre los jueces que integran el Tribunal. Al realizarse tal adjudicacién se suele tener en consideracién kt mayor © menor complejidad de las mismas. de modo tal de mantener una razonable distribuciGn del quehacer jurisdiccional, Hecha esa previa clasificacién desde el doble punto de vista cuantitativo y cualitativo, se procede a sortear de modo alternativo entre dichos m: gistrados, cual de cllos ha de estudiar en primer término el caso y quiénes en segundo 0 tercer término. segin correspondiere, cuidando siempre observar un criterio iguilatorio EI niimero minimo de sorteos es de dos veces mensuat excluye que kts oportunidades en que se realice puedan aleanzar un ndmero. s. lo cual no nayor de agravios 0 vencide el place para hacerlo »finalizada la recepeién de fa prueba en su caso. a causa quedaré en estado de sentencvia conforme al art, 88, ine, Vs el place pure dictarla sedalade pur el art. So, empecard u conver desde dia siguiente al de la nenficacian por lista del sorte! “EI secretario provederd al sortea del expediente, conforme a la acordada que lo regla art, 372 del eSdigo santalesino Uispone que una vez que se han producido oy alegatos, ‘se Hamard autos para sentencia Una solucién cvincidente respecto del Hamamiento de autos para sentencia consagra el an. 790 del onlenamieato ucumano, regulando a gontinuaciéa en el am, 791 fo relavionado fon el estudio y sorico del eapediente. Dive esta dltima noma que “el orden de estudio de Teas juicies y su votuvién serd determinade pur sorteo, La Cdmara resolverd de acuerde a ta nataraleza del asunto el términe durante el cual permaneverd ef expediente en poder de catla tuna de fas miembros del tibuinal, nw puadiendo aquel exceder de quince dias” ™Remisidn eduigos cilados en nola que antecede. Prescribe en punto a ello el cusito apanado del an. 269 del eddigo de Cor ma los efectos de wns equitativa disiribuctin del trabajo y para evitar que los sorteas ave © perjudiquen, en nimero de casas, a uno de los Selores Jucces de Camara o Vacales del Superior Tribunal, éste dictara una Acordada reglamentaria de tos mismos”. Foko bE EsrupIos DE DrRECHO PROCESAL. 175 El sorteo de expediente queda documentado en un libro que toma dicho hombre. que sirve para el contralor del laboreo en cl expediente, desde que alli se consigna en primer lugar la fecha de la desinsaculacion del expe- diemte, asi como la de su remisién a los magistrados y también la de la devolucidn por éstos de kis actuaciones. Se sienta en general, por lo tanto, que “la secretaria Ilevaré un libro que podrd ser examinado por las partes, sus mandatarios 0 abogados, en el cual se hard constar ta fecha del sorteo de las causas, la de remision de los expedientes a los jueces y la de su devolucién™...". Habra de repararse la correlacién que existe con los plazos para dictar sentencias en los érganos colegiados y las consecuencias juridicas que se derivan del incumplimiento de tal deber. Se ha asignado asimismo importancia regular el aspecto relative al estudio de ta causa, que obviamente requicre ta actividad personal del juez, estableciendo que “los miembros de la cémara se instruirén cada uno personalmente de los expediemes antes de celebrar los acuerdos para pronunciar sentencia” ®. Es lo que sucede en la prictica. pues cada juez en funcién del orden del sorteo procede a estudiar el caso, y en atencién a las singularidedes que pueda revestir el mismo sucle intercambiar opiniones con el colega 0 *Céaigos Procesal Civil y Comercial de ta Nacién (at, 269), Buenos Aires (aft. 264), Catamarea (art, 269), Chaco (art. 267), Chubut (art, 269), Entre Rios (art. 261), Formosa (ant. 267), La Pampa (art. 267), Misiones (ar. 269), Neaguen (art. 269), Rio Negro (art. 269), Salta (att. 263), San Juan (art, 269), San Luis (art. 269), Santa Cruz (aft. 268), Santiago det Estero (art. 264), EI segundo apariado del af, 140 del ordenamicnto procesal de Mendoza prescribe que cel secretario debe entregar e] expediente sorteado “ul juez de camara que debe votar en primer Ingar, ejando comstancia de ta fecha, baja la firma le quien to recibe y la suya, en un libro destinado a tal fin De manera similar prevé ef an, 373 del eddigo de Santa Fe, que “el aetavio pondrd comstancia en autos de la fecha en que sean entregados y en que te sean devueltos. En eada secretaria, existrd a la vista ule los tnteresudtes, tua lista de los expedicntes que estuvieren «a estudio, con expresién de la fecha en que fueron pasados a cada vocal y al de su devolucién. En punto al control en cuestién, ef art, 792 de la legislacién adjetiva de Tucumén edicta “ead vez que se pase lox autes a los magistrados, se anotard por el secretaria et dia en que se entreguen x el dia que dehen ser devueltos..", en funcién de lo previsto por el art 2 respecto de la Rsponsabilidad, que se deriva por el vencimiento del plazo para dictar ja, sin que se haya cumplido con exe deber. *Céwligos Procesal Civil y Comercial de 1a Nacién (art. 270), Buenos Aires (af. 265), Catamarea (art, 270), Chaco (art. 268), Chubut (art. 270), Entre Rios (art. 262), Formosa (ar. 270), La Pampa (art. 268), Misiones (art. 270), Neuguén (art. 270), Rio Negro (at. 270), Salta {art 265), San Juan (art. 271), San Luis (art. 270), San Luis (ast. 271), Santa Cruz (art. 270), Santiago del Estero (art. 266), ‘También el primer apantado del art, 269 del e6digo provesal de Corrientes preseribe que mura o ef Superior Tribunal se instruirén cada uno privadamente de “los miembros de la C Jas expedientes. antes dle celebrar los acuerdos para promunciar sentencia.”, 176 RECURSOS JUDICIALLS Colegas que le siguen en orden de votci6n, antes de redactar el proyecto de voto. 0 bien directamente procede a la redaccién del mismo, so dolo a la consideracién del par 0 pares. elign- Es decir. que el andlisis y la discusi6n del caso puede ser previa a la exteriorizacién del voto a través de la escritura, 0 ya con ulterioridad, una vez que ha sido plasmado por escrito por el juez que debia emitirlo en primer lugar. La sentencia definitiva de segunda instancia se caracteriza por la existencia del voto individual de los jueces. que integran el Tribunal. A través de dichos votos surge cual es la opinidn individual de los magis- trados. constituyendo esa suma de opiniones el acuerdo necesario para formar dicha sentencia, El mismo puede traducirse en una unanimidad de opiniones o bien en una mayorfa de juicios. como resultado del proceso sobrevenido a medida que el estudio de a causa se hicicra personalmente por los miembros de la Camara de Apelacién. Generalmente el acuerdo cuaja a través de la conformacién del voto emitido por el jucz que fuera sorteado en primer término, por los restantes Jueces que componen el drgano “ad quem”, quienes suclen adherir a dicho voto, subrayando que en ese quehacer. a raiz. del intercambio de opiniones suelen lograrse modificaciones o cambios en la motivacién, hasta la redac- cién definitiva del voto. Puntualizamos como regla, que la mayorfa de las legislaciones adjetivas declaran admisibics los votos de adhesién, con ventajas para los principios de economfa y celeridad procesal pues evita la reiteraci6n de motivaciones ya desarrolladas. Urge asimismo poner de relieve que en el sistema escriturario aunque ¢l Tribunal esté integrado por tres jueces. puede viilidamente dicho colegio de jueces actuar con dos de los magistrados que lo componen, siempre que los mismos estén de acuerdo en los fundamentos y resultados de la funcién de revisién, lo que se ajusta a los principios de economia y celeridad procesal. sin quiebra del debido proceso legal. Ello marca una diferencia notoria con lo que ocurre en el sistema oral de la instancia nica. informado por otros principios y donde la inmedia- cidn requicre de Ia labor conjunta de la actuacién de tres jueces. En cam- bio. en el procedimiento de segunda instancia, en el andarivel de la ape- laci6n. es vilido el cometido jurisdiccional realizado por dos de los jueces habile Hecha tal aclaracién de naturaleza previa, puede suceder que el juez que se expida en segundo 0 tercer término, no obstante que se adhiere a todas las motivaciones que dan sustento al voto del primer juez opinante, suminisire consideraciones concordantes. Ha de cuidarse en este aspecto, ue debe mantenerse la coherencia en los juicios emitidos, pues de lo contrario no habria mayoria de fundamentos y en definitiva no existirfa Foro DE ESTUDIOS DE DERECHO PROCESAL, 7 acuerdo, lo cual conduciria al supuesto disvalioso de un pronunciamiento jurisdiccional invalido. Otra situacién podria configurarse cuando el voto surgido en primer lugar, no suscite la conformidad del 0 de los otros mbros de la Camara de Apelacién y aflore una opinién u opiniones discordantes. Frente a esa disidencia total parcial de fundamentos, es menester que el juez. que emite su voto cn tercer lugar. adhiera a una u otra de las posiciones disidentes, La labor jurisdiccional en segunda inst por su naturaleza ordinaria, queda limitada a la actuacién de tres jueces, no siendo dable integrar el colegio con nuevos miembros para lograr la mayorfa necesaria, pues ello desborda el cometido impreso al érgano “ad quem” y esté en pugna con los principios de economfa y celeridad procesal. En tal caso, el juez que vota en tercer término, si no estuviere de acuerdo con ninguna de las posturas disidentes, debe dejar a salvo su opinion y con tal aleance adherir a alguna de ellas, En suma, a través del trdnsito sucesivo del estudio del caso por dos © tres de los jueces. cuando se logra una mayorfa de opiniones o una unanimidad, sobre las cuestiones fcticas o juridicas que hacen al “thema decidendum’ y han sido sometidas a ta funcién de la revision de la Alzada, queda perfilado el acuerdo. Con tal alcance cabe entender to normado por el grupo mayoritario de ordenamientos procesales. cuando establecen que “el acuerdo se rea- lizaré con la presencia de todos los miembros del tribunal y del secretario. La votacién se hard en el orden en que los jueces hubiesen sido sorteados Cada miembro fundard su voto 0 adherird al de otro. La sentencia se dictard por mayoria, y en ella se examinarén las cuestiones de hecho y de derecho sometidas a la decision del jue= de primera instancia que hubiesen sido materia de agravios” °Céigos Procesal Civil y Comercial de la Nacién (ant, 271), Buenos Aines (art. 266), Ctamarea (art. 271), Chaco (art, 269), Chubut (art. 271), Entre Rios cart. 263), Forinosa (ait 269), La Pampa (art. 269), Misiones (art. 271), Neuguén (art. 271), Rio Negro (art, 271), Salta (art, 266), San Juan (art, 271), San Luis (art 271), Santa Cruz. (art. 270), Santiago vel Estero. (at, 266), Denito de este grupo Ue cédigos, el de E los vocules se hullaren conformes con la sentencia apelada, podri ser ct Jundamentos prescindiéndose de la formalidad det acuerdo” A su tumo, el eédigo de la provincia de Salta prevé que “en caso de wnanimidlad la sentencia podrdreductarse en forma impersonal” Son soluciones nomativas que pueden altemar eatre uno y olto modelo seg: © no los principios que consagren los teslos constitucionales. provineiales Respreto de otros e6digos traemos a colacién ef art 1334 del ordenamiento procesal de Cérdoba. que como notas singulares exhibe el carter puiblico del acto jurisdiccional, pros- cribiendo el voto de adhesién. Euicta ayuella nonna que “las sentencias serdn dictadas en ‘audiencia piiblica con asistencia de todas tos vocutes, yen presencia del secretario respectivo El pronuncianiento se ajustard a un cuestionario fijdla al efecto por el Tribunal. El vote sobre Rios prevé la posibilidad que “cuando todas virmada por sus Jo autoricen 178 RECURSOS JUDICIALES. Acotamos que tratindose de jueces de la instancia ordinaria tienen una compctencia amplia para dbordar todas las cuestiones de naturaleza factica, que giren en torno a la apreciacién de los hechos 0 la valoracion de las pruebas, asi como las de indole juridica, en funcién de la naturaleza y extensién de los agravios. Sefialamos igualmente que en este proceso de formacién de la sentencia de segunda instancia, el secretario actuando como funcionario publico. da fe de los actos procesales cumplidos. Una vez obtenido el acuerdo de tos miembros del colegio. se redacta la sentencia por medios mecanografiados 0 computadora, la que debe ser firmada por los jueces intervinientes y el secretario. como fedatario, Un cjemplar se incorpora en el expediente y otro se reserva en un bibliorato, cada una de las cuestiones serd funado y se emitird en el orden que determine ef sorteo. La ‘obligactén de fundar el voto no se considerardé cumptida con la simple adhesin a otre vere" Respecto de la situacién en que no pudiere obtenerse mayoria de votos, se prevé la integracisn del Tribunal con dos conjueces (ait. 1338), los que pueden ser recusados (art 1339) {La aciuacidn de los conjucees queda supeditada & que no se supere en una nueva deliberacién de los miembros del Tribunal la disideneia (art. 1341), y si la misma subsistiera, se limitard es no hubiera existido mayoria (art, 1340), teniendo derecho lexpresar que a punto o puntos acerca de los e los miembros del tribunal que no estuviesen conformes con la opinién mayoritar lo hacen en disidencia, suscribiends en todos los casos la sentencia (art. 13421, La legislacign adjetiva de Corrientes prové que “las resoluciones de la Camara de Ape lavién... serin pronunciadas @ mayoria de vores” (art, 274), remitiéndose en punto a la inte- aracién, en caso de discordia, a lo que detemnine la Ley Organica de los Tribunales (art. 275) En el esdigo provesal de Jujuy se sienta respecto de las sentencias definitivas de instancia, que “salvo dispasicidn en contrario, resolvertin inicamente las cuestiones que Iuiesen side sometidas a ta devisin lel inferior » que son materia de recurso...” (att. 41 1 apa.) aadiendo que “wads ve que se estinen suficientes los fundamentos del a quo. pexiré recurridi.." (ae 47, 3° apa), el pronunciamienta adherir a la vesalurtc Respecto de esta materia el eédign de Mendoza establece en el art, LT, Le que “estudiado el expediente por tudes los jueces de cimara, el presidente semulard dia para el acuerdo, Se ccomsiderarin las diversos aspectas dela cuestisn o cuestiones a resolver ¥ lnega votarin, sunesivamente, teas des jueves. en ef arden del sortedrs. Resulla complementado en el apartado HI, disponiendo que “las acterdas se tomarin por ue deba conocer, simple maxoria de votos de ta tenalidad dle tax miembros del tribunal 0 Sal puudiender integrarse en caso de discord en la fora que corresponda Fin el dimbito jurisdiccional de Tucunxin, luego de prever el art. 796, que “el acuerdo se verifcard con dsistencia de los vacates» en presencia del secretario..." ve sienta que deben establecense “previumente las cuestiones que el tribunal juzgue necesurias para ta mejor solucién del asunt Se afade desde ef punto de vista de las formas de la semtencia, que “el vote sobre cada tuna de tas cuestiones serd fundudlo ¥ ta vouucién se efectuaré en el orden...” predeterminado.: siendo viable et voto de adhesién, Y desde la perspectiva de postulado de congruencia, en correlacién con lo preseripto por el art. 280. se determina que “los vocules deberdin pronunciarse sobre todas las euestiones que cada uno hubiere adoptade, si la decisién Propuestas. con inlepenlencia de la selue Foko bE ESTUDIOS DE DERECHO PROCESAL 179 para formar al finalizar cl aio judicial el libro de sentencias, a través de la pertinente encuadernacién, Prescriben ka mayorfa de los cddigos procesales que “concluido ef acuerdo, seré redactado en el libro correspondiente suscripto por los jueces del tribunal y autorizado por el secretario. Inmediatamente se promunciaré la sentencia en el expediente precedida de copia integra del acuerdo, autorizada también por el secretario...° En el texto de la norma prevalece el sentido historico, cuando todos los libros que se utilizan en ta Camara de Apekacisn se escribian en forma manuscrita, reiterando que el acto procesal decisorio en la segunda instancia | ofrece una unidad documentada en folios, los que por un lado, se agregan al expediente y por el otro, se reservan hasta su encuadernacién anual 6. PROCEDIMIENTO EN LA APELACION ABREVIADA. SENTENCIAS DEFINITIVAS. : SENTENCIAS INTERLOCUTORIAS Y PROVIDENCIAS SIMPLES a Comenzamos por sefialar que preferimos utilizar la expresién recurso I concedido en forma abreviada, tal como correctamente lo recepta cl Cédizo Procesal Civil de Mendoza. ya que la denominacign en “relaci6n” s6lo tiene un sentido histérico. justificado en los origenes del procedimiento, cuando i " Cédigos Procesales en lo Civil y Comercial de fa Nacién (ait, 272), Buenos Aires (an =e 267), Catamarca (att. 272), Chaco (at. 270), Chubut (ant. 272), Entre Rios (art, 264), Formosa (art, 270), La Pampa (art, 270), Misiones (art. 272), Neuguén (art, 272), Rio Negro (art, 272) Salta art 267), San Juan (art. 272), San Luis (art. 272), Santa Crve (at. 271), Santiago deh Estero (an. 267) Disposiciones similares surgen de los as. 271, 272, y 273 de ordenamiento adjetive de Corseates eb El.eidigo procesal de Cordoba sienta en el an. 1335 sobre el puticula, que “acto continua se pronunciard la sentencia, la que. precedida del acuerdo, serd redactada en original y copia ¥ suseripta por las miembros del Tribunal, incerpordndose el primero al protocol correspon iene y la segunds al expediente E in otras Hormas complementarias se pre tencia por parte de alguno de los miigmbeos del Tribunal, la ue se suple fie que diere sobre ef particular ef actuasio (art, 1338) Elan. 797 del esdigo tucumano determina respecto de la sentencia de segunda instancia, ‘que “concluide ef acuenta, serd redactade en doble gjemplar que serin jirmados por las intervinientes. Uno de elles se agregar a los autes y el otro se protecelizard™ aaa Ja eventual imposibilidud de suscribista sen etinitiva por ka Prevé asimismo en dich nomia lo relative a 1a integracién det ‘Tribunal en ease de itiéndose a to que etablece la Ley Onginiea y Acordaday de la vacancia © impedimento, re P Cont. Se regula asimismo la devolucion del expediente y Ia responsabilidad que esa sobre el j seeretario, en caso de incumplinient, 180 RECURSOS JUDICIALES ” debian actuar los relatores en el trdnsito hacia la segunda instancia, y que rece de aplicaci6n desde hace mucho tiempo. En cambio, 1a denominacién “apelacién abreviada” se ajusta a la realidad que trasunta ese procedimiento en segunda instancia. pues los trdmites por su simplicidad que lo diferencia notoriamente del que se imprime a la apelacién cuando se ha concedido en forma libre o amplia. Remitiéndonos a lo ya expuesto, resulta obvio, que cabe distinguir entre las senteneias de mérito dictadas en el juicio ordinario y los plenarios abreviados, de los restantes supuestos comprensivos de todas las otras resoluciones judiciales que se pronuncien en los procesos de conocimiento, de ejecucidn y cautelares y obviamente de los de la denominada jurisdiceién voluntaria, Mientras respecto de la primera categoria el recurso se concede en forma “libre”, en todas las demés situaciones el recurso se concede en “relacién” o “apelacién abreviada”, Ello conduce a que, segiin la genera- lidad de los e6digos procesales vernéculos, la tramitacién a observar varie. Asi, en la primera situaci6n, el procedimiento en segunda instancia tiene una amplitud mayor, pues, como hemos visto, cabe la posibilidad de invocar hechos nuevos, asf como producir pruebas *. Por el contrario, ello queda vedado en las restantes situaciones ®, Sentado ello media una similitud inicial, pues la apertura de la segunda Elan, 260 del Cédigo Procesal Civil y Comercial de la Nacién, aslo posibiita, a igual ‘que las normas simiaves de los ordenamientos procesales de Buenos Aires (art, 255). Catamarca, (art, 260), Chaco (art. 258), Chubut (an. 260), Entre Rios (ant. 252), Formosa (art. 258), La Pampa (ait, 259), Misiones (art. 260), Neuguén (art. 260), Rfo Negro (art. 260), Salta (art. 257), San Juan (art. 2670), San Luis (art. 260), Santa Cruz (art. 259), Santiago del Estero (art 255). Eaicta en tal sentido el segundo apartado del art. 275 del Cédigo Procesal Civil y Si el recurso se hubiese concediddo en relacién... No se admits Comercial de Ia Nacién, que la apertura a prueba ni la alegacién de hechos nuevos De manera andloga también lo prevén los Cédigos ue Buenos Aires (art. 270), Catamarca (an, 295), Chaco (art. 273), Chubut (an. 275), Entre Rios (art. 267), Formosa (art. 273), La Panypa (at, 273), Misiones (art. 275), Neuguen (art. 275), Rio Negro (an. 275), Salta (art. 269), ‘San Juan (amt. 275), San Luis (art. 275), Santa Cruz (art. 274), Santiago del Estero (art. 270), Ello tambign surge de moda expreso del ant. 142 del c6digo mendocino, en cuanto dispone (que “en ef trdmite de ta apelacion abreviada no procederd... ni ofrecimiento ni praduccién de prueba” (éltimo apantado). Lo mismo sucede en la legislacin agjetiva de Tucumén, pues no admite la apertura a prueba ni la alegacion de hechos nuevos, tratindose del procedimiento en el recurso denon ‘nado “en relaciSn” (an, 800). A su ver, la redaccién menos acertada de los arts. 278 y 279 de la legislacién adjetiva de Corrientes, permite deducir que también se ha excluido la posibilidad de producir pruebas e invocar hechos nuevos. En cambio, los eédigos de Cérdoba (an. 1313), y Santa Fe (arts. 379 y 380), autorizan la produccién de pruebas y alegatos, desdibujindose las diferencias que deben exist entre la regulacién de la apelacién libre y la apelacién abreviada | | | | | ; é i e ' at Foxo be ESTUDIOS DE DeRECHO PROCESAL, 181 instancia se produce con la concesi6n del recurso de apelacién. También existe otra identidad, ya que si no existe prevencidn debe designarse la Sala que ha de conocer. y desde Iuego sobreviene 1a pertinente notificacién personal 0 por cédula a los fines de la eventual recusacién con expresién de causa si existiere motivo para ello. Si hubiere mediado prevencién, los autos se remiten directamente a la Sala correspondiente, debiendo dictarse sin mas trimite la resolucién, Y si no hubiere mediado prevencién, luego de amarse “autos” y de estar consentida dicha providencia, que se notifica por ministerio de la ley, debe emitirse el pronunciamiento del caso. EI wamite precedentemente expuesto, muestra a su vez la diferencia esencial con el procedimiento que cabe observar cuando se esti frente a una sentencia definitiva, dictada en el juicio ordinario o plenario abreviado, y a la cual nos hemos referido con anterioridad —5.1.—. La raz6n estriba, en primer lugar, en que cuando se concede el recurso “en relacién” 9 “apelacién abreviada”, como los memoriales debieron presentarse en la instancia de origen, donde fueran substanciados los mismos, ha quedado superada esa etapa. A su vez, como tampoco en ese andarivel existe la posibilidad de invocar hechos nuevos producir pruebas, todo se reduce a que la Alzada se pronuncie sobre la cuestién sometida a su funcidn de revisi6n, Prescriben en torno a ello 1a mayorfa de los cédigos procesales que ‘si el recurso se hubiese concedido en relacién, recibido el expediente con sus memoriales, la cémara, si el expediente tuviere radicacién de sala, resolverd inmediatamente. En caso contrario dictard la providencia de autos. No se admitivé la apertura a prueba ni ta alegacién de hechos nuevos. Cuando la apelacién se concediere en efecto diferido, se procederé en la forma establecida en el art, 260 inc. 2." *, Respecio de la apelacién concedida con tratamiento diferido, nos remitimos a lo ya dicho con anterioridad —5.3.a)—. Respecto de las formas de la sentencia a dictarse por la Alzada, habré de cuidarse las prescripciones constitucionales que existan sobre el parti- cular, pues si se est ante una sentencia de mérito dictada en los procesos sumarisimos 0 interlocutoria con fuerza de definitiva dictada en cualquier clase de proceso, que termina el pleito o hace imposible su continuacién, ™ Véase cOdigos citados en la primera pane de la nota que antecede, Afiadimos que el eédigo procesal en lo civil y comercial de Tucumién, regula de modo especifico lo relativo al examen de la fonna de concesién del recurso (art. 799), lo relacionado con el sorteo, estudio y control (art. $01), la forma impersonal de la sentencia (art. 802) y la disidencia (art. 803) i 182 RECURSOS JUDICIALES ser4 necesario ajustarse al voto individual de los jueces, tal como lo requiere en la jurisdiccién bonaerense 1a Constitucién provincial (art. 156). De Io contrario, el fatlo al haber quebrantado las formas constitucio- nales, queda descalificado ala luz, del recurso de nulidad extraordinario (art, En cambio, si se estuviere ante una mera sentencia interlocutoria que no tiene la calidad de definitiva, cabe atenerse a la forma simple de la redacci6n impersonal, quedando excluida la necesidad del referido voto vidual de los jueces. En punto a las providencias de trdmite que puedan sobrevenir en segunda instancia, que en Ia generalidad de los casos son dictadas por 21 Presidente del Tribunal, son susceptibles de revocatoria ante la Sala. Prescriben en punto a ello, 1a mayorfa de los ordenamientos procesales, que “las providencias simples serdn dictadas por el presidente. Si se pidiere revocatoria, decidird el tribunal sin recurso alguno” *, 7. COLOFON Quedan esbozados en este estudio “ius comparatista” verndculo las cuestiones mas comunes que suclen presentarse en la ardua tarea que incumbe a jueces y abogados, en cl Ambito de la segunda instancia en el afin comin que los vincula en punto a obtener el mejor rendimiento de la funcién jurisdiccional en torno a Ia justicia del caso. 5 remitimos a MokELLo-Sosa-BeRizonce, ob. cit. v. IIL, n® 487, pp. 802 y ss "Céuigos procesales Civil y Comercial de la Nacidn (ai. 273), Buenos Aires (art. 268), Catamarea (art. 273), Chaco (art, 271). Chubut (art. 273), Enire Rios (art, 265), Formosa (art 271), La Pampa (art. 271), Misiones (art. 273), Neuguen (art, 273), Rio Negro (art. 273), Juan fart. 273), San Luis (an. 273), Santa Cruz. (ar, 272), Santiago del Estero (att, 273) La legislaci6n adjetiva de Salta introduce Ig variante que “las providencias simples serdn dictadas por el secretario...", afidiendo que "si se puiere repesicién decidird el tribunal sin recurso algano” (art. 264), El ower (que se dicten en el curso de la instancia de apelacidn, solo serin recurribles en la forma y '9.y 237", emitigndose a los principios comunes namiento de Corrientes preseribe que “lus providencias meramente interlocutorias Daj las reglas establecidas por los articule del recurso de reposicidn, ie ‘A través de la regulacién procesal del e6digo jujeito se sienta que “en los ribunales colegiados. las providencias de tnimite serén pronunciadas por su presidente. Si se reclamara de ellas, decidiré directamente el Cuerpo, sin lugar a recurso alge...” De modo similar el ar. 131, apan. IV del Cdigo Procesal Civil de Mendoza, establece ‘que también procede et recurso de reposicidn contra las providencias dictadas por el Presidente de los tribunales volegiados, debiendo ryoiver la Sata et mismo, Una solucién andloga prevé el art. 370 del eddigo santafesino cuando dispone que “contra el decreto de la presidencia concediendo v denegando la apertura a pruebt, procederd el recuse de reposicién ante el tribunal”

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