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ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Antes del S. XVII el término latino medieval “Geología” se oponía al de Teología y hacía
referencia a todo aquello que tuviese que ver con la vida terrenal.
A finales del S.XVIII fue cuando se propuso el término geología para describir el estudio
de la historia de la tierra, sobre todo cuando en el último cuarto del siglo Abraham
Gotteleb Werner y James Hutton aplicaron el método científico en éste campo del
conocimiento.
Hasta el S.XVII el interés por el conocimiento de la tierra y sus elementos se centró en
interpretar el problema de los fósiles interpretándolos como juegos de la naturaleza (o sea
piedras que parecían plantas o animales), desechos caídos del taller del creador, restos de
seres ahogados en el diluvio universal e incluso (en la Edad Media y el Renacimiento)
como simples objetos curiosos.
- El danés Niels Stensen (Nicolás Steno) (1638-1686) en “De sólido intra solidum
naturaliter contento” al estudiar la región de Toscana diseñó un diagrama donde se
reflejaba la disposición de estratos observándose que la capa más antigua era la más
profunda, cubierta por capas sucesivamente más modernas. Consideraba que los
hundimientos de las cavidades internas (provocadas por el fuego interno o el agua)
provocaba la aparición de valles y colinas. Posteriormente el mar invadía los valles
depositando sedimentos en el fondo, al retirarse el mar y quedar las capas de sedimentos,
se destruían las inferiores causando el hundimiento de las superiores formando nuevos
valles y colinas.
- A finales del S.XVII tomaron gran auge las teorías diluvistas que consideraban el diluvio
como un motor de transformación del paisaje. Estas teorías fueron emitidas por tres
naturalistas ingleses: Thomas Burnet (1635-1715), John Woodward (1665-1722) y Willian
Whiston (1667-1752).
Durante gran parte del SXVIII las teorías diluvistas fueron las dominantes hasta que, a
finales del siglo, surgieron:
Jean Batipste de Monet, caballero de Lamarck (1744-1829) es conocido por sus ideas
sobre la evolución y se le considera el fundador de la Paleontología de invertebrados.
Consideraba que en la Tierra se dan cambios constantes pero de una lentitud excesiva
en relación con la duración de una vida humana.
Sus ideas fueron poco aceptadas por contradecir la explicación creacionista y temporal
del origen de la Tierra que se recogía en la Biblia pues opinaba que la antigüedad de la
Tierra era casi infinita, mucho más que los 6000 años con que la databan los geólogos que
seguían el Génesis.
El sistema geológico catastrofista
Charles Bonnet (1720-1793) opinaba que la Tierra había pasado por “revoluciones”
graduales que actuaban de siglo en siglo (debidas al mar, volcnes, terremotos,....) y
“revoluciones” generales que habían cambiado enteramente la faz de la tierra.
Según su contemporáneo De Luc los continentes actuales habían sido en el pasado el
fondo del mar que emergió por una “revolución” relativamente reciente. Opinaba que en
su origen la Tierra estaba cubierta por un “líquido primitivo” pero que había “cavernas”
rellenas de “fluidos expansibles” que tras cada catastrofe se hundian y hacian que los
sedimentos precipitados del “líquido” fuesen diferentes . Al penetrar en el globo todo el
líquido primitivo cesaron las causas de los cambios por lo que en el presente la superficie
se encontraba en un etado estable dando lugar a la acción de los fenómenos actuales (pj.
la erosión contínua de las aguas).
Deodat de Dolomien (1750-1801) consideraba que hubo una primera creación de las
grandes cadenas montañosas, en las que las materias que las componían y su posición
indicaban una causa y origen diferente al resto de las montañas. La segunda creación,
donde entraría el resto de elementos geográficos y geológicos, se caracterizaba por una
tendencia a la disposición horizontal.
Georges Cuvier (1769-1832) observó que en todos los terrenos geológicos aparecían
fósiles marinos (incluso a altitudes elevadas), esto probaba que la cuenca oceánica habia
cambiado en extensión o situación. Los cambios en la altura de las aguas observables por
la sucesión de estratos (desgarramientos, enderezamientos e inversiones de capas más
antiguas) se debían a súbitas catástrofes o revoluciones como demostraba la última de
dichas catástrofes:
Decía que las aguas habían inundado y a continuación se habían retirado de los
continentes actuales por ello se conservaron en los paises del Norte cadáveres de grandes
mamíferos conservados en hielo y que no eran autóctonos de tales lugares pues no
podían vivir a tan bajas temperaturas. Según él en un instante bajó la temperatura a un
estado glaciar y mató a los animales. Consideraba que esa misma idea de súbito
instantánea y sin gradación se podía aplicar a todas las anteriores revoluciones.
Al examinar las causas físicas que actuaban en el presente en la superficie terrestre
consideraba que los agentes acutales no tenían por qué ser iguales a los de otras épocas.
A Curier se le considera el fundador de la Anatomía Comparada y establecer el
“principio de correlación de órganos” según el cual cualquier animal, jherbívoro o
carnívoro, tiene adaptados sus órganos al tipo de alimentación. ANECDOTA: Un estudiante
se disfrazó de diablo y entró en su dormitorio diciendo “soy el diablo y vengo a comerte”,
a lo que Curier contestó “Llevas cuernos y pezuñas, por tanto eres herbivoro así que no
puedes comerme”.Y dándose la vuelta siguió durmiendo.
Alcide D’Orbigny (1802-1857) es el mejor exponente de la teoría de las creaciones
múltiples que no es más que el sistema catastrofista aplicado a la Paleontología. De sus
estudios realizados en sudamérica dedujo hasta 26 periodos diferentes, cada uno con su
propia fauna, que se habían sucedido unos a otros por extinciones bruscas.
Leonce Elie de Beaumont (1798-1874) sugirió que las “revoluciones” violentas postuladas
por el catastrofismo eran el resultado de levantamientos sucesivos de montañas.
El motor de éstos levantamientos era, según él, el enfriamiento secular de la Tierra, es
decir, la pérdida del calor primitivo al que los planetas debían su forma esferoidal.
El uniformismo geológico
En torno a ésta cuestión se planteó un debate cuando se descubrió en 1858 en unas rocas
precámbricas del este de Canadá un especimen que se denominó: Eozoon canadense. El
problema estaba en la antigüedad del fósil (mayor que la supuesta para el origen de la
vida estimado hasta entonces) y en que apareció en rocas metamórficas.
El debate en torno al caracter orgánico o inorgánico del Eozoon duró casi medio siglo
hasta que a final del siglo en (1899) se aceptó definitivament el carácter inorgánico del
Eozoon.
En prinicipio, y durante mucho tiempo, se consideró y clasificó como un foraminifero
por su similitud con fósiles de éste ripo descubiertos en calizas de otras zonas.
La importancia de determinar el verdadero carácter del Eozoon radicaba en que si era
orgánico apoyaba las tesis de los que sostenían una mayor duración de la vida sobre la
Tierra (pj. Darwin) y un aumento de la complejidad orgánica a partir de una “forma
primordial única”, y contradecía la tesis de la “fauna primordial”.
Los seguidores de cada una de las teorías vistas intentaron explicar el origen de las
montañas desde su propia perspectiva: pj.:
- Los volcanistas hablaban de unos “empujones verticales” causados por el magma.
- Algunos catastrofistas consideraban que como consecuencia del enfriamiento del
planeta se producían arrugas o abollamientos de la corteza producidos en catastrosfes
esporádicas.
- Aquellos catastrofistas que abrazaban hipótesis actualistas pensaban que podían
deberse a movimeintos regulares y en ocasions violentos debidos a la contracción del
núcleo (por enfriamiento) junto a la cada vez mayor rigidez de la corteza. Esta situación,
opinaban, dará lugar a fuerzas verticales y horizontales que causarían el plegamiento de la
corteza en unos lugares y su fractura en otros.
Fijistas
Su origen lo podemos buscar en 1859 cuando el americano Asaph Hall estudiando los
Apalaches observó que las rocas plegadas de las montañas tenían más grososr que las
depositadas en regiones cercanas en igual época. Hall concluyó que antes que la orogenia
debía existir una cuenca de sedimentación con espesores enormes (más de 10 km).
También observó (mediante el estudio de indicadores de profundidad que son fósiles de
seres que viven a cierta profundidad) que los sedimentos de las cadenas montañosas se
habían depositado a profundidades no muy grandes; consecuencia: la cuenca debe sufrir
una subsidencia importante.
Los seguidores de Hall llamaron geosinclinales (grandes concavidades) a esas cuencas
sedimentarias que, gracias a la subsidencia, reciben grandes espesores de sedimentos.
Hall propuso que los materiales del fondo podrían fundirse y en su elevación los
magmas deformaban los materiales no fundidos.
Sus seguidores observaron que en muchos casos existían fuerzas tangenciales (asimetría
de las cadenas y los mantos de corrimiento) y sugirieron como motor la contración por
enfriamiento.
A finales del XIX y comienzos del s. XX se rechaza éste argumento por varias razones:
- Para los Alpes, p.ej. se necesitaría un enfriamiento de 2400ºC (el centro de la Tierra
está a 6000ºC).
- Si fuese así en un par de orogenias la Tierra habría perdido todo el calor interno (y en
total se han dado unas doce)
- Posteriormente, incluso, se demostró que la Tierra no disminuye de volumen con el
tiempo.