Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
No sin razón. Las primeras mujeres que sentirían la necesidad de reclamar sus derechos
civiles serán precisamente aquellas mujeres de la elite nacional que se sentirían
desamparadas legalmente a la hora de defender sus herencias en el caso de estar unidas en
matrimonio a “despilfarradores”. Extraña mezcla entre progresismo y conservadurismo,
Progresismo para defender las herencias de las hijas, conservadurismos en mantener el
orden de dominación patriarcal. (p.145)
Politica de hijas ( se le llama a las acciones de los partidos conservadores en las legislaciones
en base a las mujeres)
Esta politica de las hijas con el correr del siglo veinte se transformara en la política de las
mujeres de elite que desde el credo liberal exigirán sus derechos civiles, por sobre todo, y
mas tarde sus derechos políticos. (p.149)
Si bien aquello es cierto, no será menos verdadero que serán los regímenes populistas de
comienzos de siglo los que asumirán, con seriedad, los proyectos tendientes a promover la
igualdad entre hombres y mujeres en Chile. Serán el alessandismo, primero, y el ibañismo,
después, las formas políticas mas afines a dicho feminismo liberal. (p.149*150)
Desde esta perspectiva, me gustaría sostener que la configuración del feminismo liberal en
Chile que se desarrollará en la forma de partidos políticos femeninos durante los años 1922
y 1953 será primero alessandrista y luego ibañista. (p.150)
Con Ibáñez en 1927 se reprimen los partidos políticos y por tanto se obliga al Partido
Femenino Demócrata a dejar sus funcionas política. Además, en 1932 se fusiona con el
Comité Permanente del Congreso Femenino internacional adoptando el nombre de Bando
Femenino Internacional.
El Partido Femenino Demócrata era de afinidad alessandrista y tenía como principal objetivo
la “educación cívica” de las mujeres para lograr el voto municipal
Amanda Labarca quien a ver que deja de funcionar el Consejo Nacional de Mujeres, junto a
otras organización culturales, sociales y políticas, por orden de Ibáñez tiene conflictos con
él.
Gabriela Mistral también tuvo conflictos con Ibañez por la supresión de su pensión de
maestra en Europa, ella es abiertamente anti Ibañista, sobre todo en su segundo gobierno.
Gabriela Mistral durante las elecciones del 50’ deja su distanciamiento de la política y
comienza una campaña en contra de Ibáñez donde incluso apoya la campaña de Matte (un
candidato de derecha). Al salir Ibáñez y por un incidente de una colega de Gabriela en un
asesinato, Gabriela pide un indulto presidencial y se lo otorga. A raíz de esto las relaciones
entre Gabriela Mistral e Ibáñez sufren un giro e incluso la invita a Chile y ella accede
(después de 14 años fuera del país) [está mal redactado porsiacaso] p.154 – 155
(En relación a María de la Cruz presidenta del Partido Femenino Chileno) “el impulso de
su fundadora quien, con el dinamismo de su personalidad, convence y arrastra en su
campaña feminista a mujeres de todos los estratos socioeconómicos. Las dirigentes que
la acompañan pertenecen a la clase media; sin embargo, de acuerdo a sus propias
palabras, las bases están en los sectores populares, en los estratos bajos.” [p.159]
El inicio de actividades del Partido Femenino Chileno despertará fuerte interés nacional
como internacional. Prensa Norteamericana “De Chile parte un mensaje de Unidad
Femenina dirigido a Latino América”
A raíz del anticlericalismo y del hecho que una mujer dela directiva del Partido Femenino
Chileno fuera divorciada, el partido perdió numerosas afiliadas y se gestó por parte de las
mujeres de elite conservadora llamados a la abstinencia de la participación de esta
colectividad política [p.162]
“Es conocido el entusiasta apoyo a Ibáñez otorgado por las mujeres en su segunda
campaña presidencial. Tal es el apoyo que se ha llegado a decir que son precisamente las
mujeres quienes aseguraron su triunfo.” Si bien las organizaciones políticas trabajaron en
el triunfo de Ibáñez el universo electoral activo de mujeres no superaba el 10%. Pero
“Ciertamente este dato no contradice el hecho que efectivamente muchas mujeres
optaron por Ibáñez entre ellas el Partido Femenino Chileno, así lo indica la importante
militante y la historiadora Felicitas Klimpel [p.163]
“Con la crisis de los gobiernos radicales, las mujeres políticas de la época debido a su
interés por generar un discurso político de inclusión amplia se sintieron atraídas por el
discurso de corte populista de Ibáñez” esta crisis hace alusión según yo a la ley maldita
[163].
El populismo y el feminismo estuvieron muy ligados, ya que según el contexto local en
toda América Latina estaba cobrando mucha fuerza. “El éxito del populismo radicaría, así
en la capacidad en la elaboración de una política “nacional-popular” desde el Estado
fusionando en ella cultura de masas y política moderna.
Este apoyo a Ibáñez por parte de las mujeres no se verá defraudado. Al menos así lo
demuestra la alta participación de mujeres durante el segundo Gobierno de Ibáñez.
Saldrán de las filas del Partido Femenino Chileno una Ministra de Educación, una
Senadora, una Diputada y varias Gobernadoras.