Vous êtes sur la page 1sur 3

TEMA: Los sistemas de partidos políticos actuales en el Perú, clasificación y

Justificación de la pertinencia de cada uno de ellos.

Autor: Juan Wilder Cabrera Morey.

Nuestro sistema electoral, reposa sobre un marco normativo constitucional,


como fuente que le otorga legitimidad, así tenemos que el artículo segundo,
inciso 17 de la Carta Magna, establece el derecho todo ciudadano “A participar,
en forma individual o asociada, en la vida política, económica, social y cultural
de la Nación. Los ciudadanos tienen, conforme a ley, los derechos de elección, de
remoción o revocación de autoridades, de iniciativa legislativa y de referéndum”.
Es decir, consagra la libertad de asociación política, asignando derechos para
elegir, remover o revocar autoridades que provengan de elección popular o
mandato gubernamental.

Sin embargo, es el artículo 35° de la Constitución Política del Perú, el que


reconoce, ampara e incorpora como bien jurídico del Estado, el funcionamiento
de un sistema de Partidos Políticos, al expresar: “Los ciudadanos pueden ejercer
sus derechos individualmente o a través de organizaciones políticas como
partidos, movimientos o alianzas, conforme a ley”. Siendo de vital importancia
para la vida del Estado, su existencia, como visagra entre el Estado y la Sociedad
Civil, nuestro máximo contrato social, las ubica como: “Organizaciones que
concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular”.

El Estado, garantiza y regula mediante el desarrollo de un conjunto de normas,


el inicio de vida de cada organización política, mediante su inscripción en el
registro correspondiente, concediéndoles personalidad jurídica (inscripción ante
el Registro de Organizaciones Politicas del JNE). De igual forma, la ley establece
normas orientadas a asegurar el funcionamiento democrático de los partidos
políticos, y cautela a su vez que exista un marco jurídico destinado a regular la
transparencia en cuanto al origen de sus recursos económicos y el acceso
gratuito a los medios de comunicación social de propiedad del Estado, tomando
como base en forma proporcional los resultados del último resultado electoral
general.

Actualmente, existe un Sistema de Partidos Políticos, desde la estructura


normativa, pero que no descansa propiamente sobre una realidad o el cabal
cumplimiento por parte de quienes dirigen dichas organizaciones, ya que siendo
las clases dirigenciales los llamados a formar en la ciudadanía, desde sus
partidos políticos: conceptos, ideas y corrientes de opinión y pensamiento para
el desarrollo de políticas y debates en función al bien común, muchas veces no
permiten que el Sistema se fortalezca, empezando por el enquistamiento
dirigencial, que no permite la aparición y formación de nuevos cuadros políticos,
así como el poco trabajo en las bases partidarias, sobre todo en épocas no
electorales. Es ahí que no se nutren de la fuerza propia del fomento de la
democracia interna, sino más bien, se perpetuan en los niveles de poder, para
regir los destinos de sus organizaciones de acuerdo a sus propios intereses.

Asimismo, una vez electos, desde el foro político más importante de toda
nación, como lo es el Congreso de la República, no promueven precisamente los
cambios legislativos, para dotar al sistema de partidos políticos, de mejores
herramientas para la selección de candidatos, la inscripción y vigencia de los
partidos, el sistema de cuotas, el financiamiento y la transparencia en la
administración y el manejo de sus economías, y bloquean muchas veces las
iniciativas de reforma electoral.

Aún falta mucho por desarrollar por ejemplo en la clasificación de los partidos
políticos, nuestro sistema es muy permisible y cada vez, hay mayor interés en
facilitar la aparición de nuevos partidos, sin ideología ni estructura, solo basados
en el respaldo de la recolección de firmas, mas no un respaldo de militantes
disciplinados que fomenten una mayor cultura política en nuestros ciudadanos.

Actualmente podemos afirmar, que existe en nuestro país una débil


institucionalidad en nuestro sistema de partidos políticos, caracterizada por una
organización, poco unida y frágil y donde no existe transparencia en la forma de
recepcionar los aportes financieros. Valgan verdades, esta se podrá denominar
como una herencia recibida de la clase política y dirigencial de hace 50 años u
80 años, donde se privilegió el sistema hegemónico, en el cual solo se prestó
valor e interés en buscar al caudillo que salve al país, y que gobierne con firmeza
para equiparar los años de diferencia con los países del primer orden. Así
también tuvimos episodios de preminencia del sistema de partido único (ello se
aprecia con la aparición del partido civilista en el Perú).
Esto guarda mucha relación, en nuestra tradición histórica política, por el
sistema de gobierno que imperó en el antiguo Perú, el cual reposaba
únicamente sobre la autoridad y poder del Inca, es allí donde adquirimos la
concepción caudillista o monárquica, que hasta la fecha es muy valorada en el
Perú.

Resulta, pertinente fomentar en nuestra sociedad una mayor cultura política,


donde el ciudadano, se sienta cercano a las ideologías y pensamientos de
diversa índoles, pero donde se rescaten y valorizen los principios democráticos,
para el crecimiento y desarrollo de fuerzas políticas que finalmente logren
representarnos, ya sea en el poder ejecutivo o legislativo con verdadero espíritu
democrático.

Ica, 05 de Julio del 2017.

Vous aimerez peut-être aussi