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Ananí Gonzales Huamaní

MENORES INFRACTORES

1. INTRODUCCIÓN

En los últimos años, el Perú viene desarrollando una mayor violencia criminal, es
noticia de todos los días los asaltos con o sin arma de fuego, las violaciones sexuales,
el sicariato, entro otros. Lamentablemente muchas de las personas que perpetran
estas acciones delictivas son llevadas a cabo por menores de edad. Las estadísticas
son alarmantes, una noticia publicada en el diario La República1 nos señala que de
acuerdo al Poder Judicial, en los nueve centros juveniles del país hay cerca de 783
menores recluidos por los delitos de violación y homicidios. Así, 220 internados
(6,10%) están por asesinatos, de los cuales 14 permanecen bajo el régimen abierto y
206, bajo uno cerrado (privados de la libertad). Asimismo, 563 infractores (15,42%)
permanecen en estos albergues por violación sexual. De estos 200 están en un medio
abierto y 363, en uno cerrado.

La mayoría son menores de 18 años, muchos con familias desestructuradas, violencia


en sus casas, con apego a bandas criminales y con difíciles condiciones
socioeconómicas.

En el presente trabajo se expondrá algunas luces sobre este tema tan controversial
sobre los menores infractores en lo referido a la rebaja de la mínima de
responsabilidad penal. Así, se empezará con la normativa vigente en el Perú y la
vinculación con respecto a las normas Internacionales sobre la protección de los Niños
y Adolescentes. Se concluirá con la reflexión final sobre el tema.

2. MARCO NORMATIVO NACIONAL E INTERNACIONAL

A) Marco Nacional

Partamos bajo el concepto que se tiene por menores infractores. En nuestro


ordenamiento jurídico encontramos en el Código de Niños y Adolescentes, en el
artículo 183 en el que “se considera adolescente infractor a aquel cuya
responsabilidad ha sido determinada como autor o partícipe en un hecho punible
tipificado como delito o falta en la ley penal”, asimismo, en el artículo 184 del
mencionado código señala “El adolescente infractor mayor de catorce (14) años, será
pasible de medidas socio-educativas previstas en el presente Código. El niño o

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http://larepublica.pe/sociedad/1005685-cerca-de-800-menores-estan-recluidos-por-homicidio-y-
violacion

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adolescente infractor menor de catorce (14) años, será pasible de medidas de


protección previstas en el presente Código. Como se puede observar se considera,
para el adolescente infractor (mayor de 14 años), solo medidas socio-educativas.

En el artículo 214 del mencionado Código el juez remite al fiscal por el término de dos
días los autos que emita opinión, se expone los hechos, la calificación legal y la
responsabilidad del adolescente. De este modo, en conjunción con el artículo 217 del
mismo Código, es el mismo juez quien aplica las medidas socio-educativas como son:

a) Amonestación
b) Prestación de servicios a la comunidad
c) Libertad asistida
d) Libertad restringida; y
e) Internación en establecimiento para tratamiento

De otro lado, en el Código Penal Peruano, en su artículo 20, inc. 2 señala que el
menor de 18 años es considerado inimputable, por ello, la medida que estos reciben
no es cárcel efectiva, sino un internamiento en un centro de rehabilitación.

Sin embargo como se señaló párrafos arriba, en el Perú hay un incremento de la


violencia criminal, por ello, asalta la interrogante si esas medidas socio-educativas son
suficientes para resocializar a un “buen camino” del menor infractor, esto en el
entendido de casos tan graves como un asalto con arma de fuego como consecuencia
la muerte del agraviado o, más extremo aún, el sicariato. En consonancia con la
interrogante, el Gobierno aprobó la creación del Código de Responsabilidad Penal
para Adolescente, esto a través del Decreto Legislativo Nº 1348. Esta norma
representa cambios importantes al Código de los Niños y Adolescentes en relación a
los adolescentes entre los 14 y 18 años de edad que comentan delitos con pena
mayor a los seis años de cárcel, podrán ser internados en centro juveniles hasta por
10 años. Así, los menores de edad, podrán ser sometidos a un proceso penal bajo los
estrictos parámetros.2

En esta línea a decir de Luis Lama Puccio en una entrevista realizada por el Diario La
República3

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http://larepublica.pe/sociedad/837542-menores-de-edad-que-cometan-delitos-podran-ser-privados-
hasta-10-anos-de-su-libertad
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http://laley.pe/not/3739/lo-que-debes-saber-sobre-el-nuevo-codigo-de-responsabilidad-penal-de-
adolescentes

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“ahora se aplicará a los menores infractores los mismos fundamentos, criterios y


procedimientos que se utilizan en el Nuevo Código Procesal Penal. Por ello se crea toda
una jurisdicción penal especializada para adolescentes infractores, integrada por un juez
de investigación preparatoria, salas superiores y, además, se le otorgan mayores
atribuciones al Ministerio Público.

Antes los casos de menores infractores los veía el juez de Familia, que también tiene
otros casos. Además, ahora con el nuevo código el fiscal tiene un rol más activo y
promotor, incluso de medidas restauradoras" (Lamas Puccio 2017).

Para el Dr. Iván Meini, la concepción de inimputabilidad se define “como la


incapacidad de un sujeto para comprender la ilicitud de sus actos y la capacidad para
adecuar el comportamiento a esta compresión” (2012:39). Sin embargo, Meini alega
que para regular la inimputabilidad no solo es la perspectiva cognitiva y volitiva sino
también la del conocimiento y voluntad de una persona tanto en la dimensión afectiva,
emocional y cultural, por lo tanto, el derecho formal, asume al individuo como ser
racional. Bajo esta línea, el Dr. Meini cuestiona la inimputabilidad tradicionalmente
concebida como un defecto o un tara del sujeto, ya que bajo su entender solo es
posible entender “el tratamiento que se le da al inimputable, por ende al menor, es un
tratamiento peyorativo y hasta discriminador porque en realidad el inimputable menor
no es que tenga una concepción alterada de la realidad, concibe la realidad
eventualmente de una manera distinta a la que cual la concibe el resto, ni mejor ni
peor, simplemente distinta” (2012: 40). Así el Dr. Meini se decanta sobre la teoría que
más que determinar la edad para determinar la responsabilidad penal, se debe de
trabajar con las etapas del ser humano, es decir, con los momentos de desarrollo y as
determinar su responsabilidad penal.

Para conocer mayores alcances sobre la aplicación del nuevo D. Leg. 1348, líneas
abajo trataremos de explicar los puntos más resaltantes, para ello utilizaré la
clasificación hecha por Gaceta Jurídica4:

a) Se crean juzgados con competencias especializadas


El artículo 9 y 10 señalan las competencias del juez, realizar el control de plazo
de la detención policial, realizar el procedimiento para la actuación de la prueba
anticipada, como también conducir la etapa intermedia.
Para el desarrollo de este nuevo proceso se han creado juzgados con
competencias especiales, los cuales responden a la estructura del nuevo

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http://laley.pe/not/3739/lo-que-debes-saber-sobre-el-nuevo-codigo-de-responsabilidad-penal-de-
adolescentes

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Código Procesal Penal. Así, los Juzgados de Investigación Preparatoria del


Adolescente tendrán a su cargo la investigación y la etapa intermedia, mientras
que el juicio oral estará a cargo de los Juzgados de Juzgamiento del
Adolescente, estos pueden ser colegiados o unipersonales, integrados por 3
jueces. También estarán facultados para resolver las solicitudes de variación
de la medida y la semilibertad.
El artículo 11 señala que las Salas Penales que conozcan de procesos para
adolescentes infractores de las Cortes Superiores como son el recurso de
apelación contra los autos y las sentencias expedidos por los jueces de
investigación. También conocer el recurso de queja.
Finalmente, el artículo 12, señala que la Sala Penal de la Corte Suprema le
compete conocer del recurso de casación interpuesto contra sentencias y autos
expedidos en segunda instancia de las salas de las Cortes Superiores, como
también conocer el recurso de queja por denegatoria de apelación.

b) Medidas de coerción procesal en aplicación al adolescente


Las medidas de coerción procesal están comprendidas dentro del Título II entre
los artículos 34 y siguientes. En ellos se indica que las medidas solo se
imponen por el juez a solicitud del fiscal, para requerir una medida de coerción,
el Fiscal debe contar con el informe Técnico Interdisciplinario del Ministerio
Público, este informe debe contener un análisis de aspectos psicológicos,
sociales y familiares del adolescente.
Como primera medida está la detención (Capítulo II), esta puede ser policial
(artículo 39), esta detención es llevada a cabo por la policía, esta puede ser sin
mandato judicial previa cuando hay acción en flagrancia delictiva del
adolescente. También puede ser mediante arresto ciudadano (artículo 40), en
este caso se debe entregar inmediatamente al adolescente a la dependencia
policial más cercana, durante este arresto ciudadano se tiene que respetar las
derechos y garantías del adolescente.
La segunda medida es la detención preliminar judicial (artículo 41), para
proceder a esta detención el adolescente tiene que haber sido debidamente
individualizado, es decir, nombres y apellidos completos, edad, sexo, lugar y
fecha de nacimiento. Esta detención procede cuando al adolescente no se le
ha logrado la captura en flagrancia delictiva o cuando se hubiere fugado de un
módulo especializado. En general la detención policial no puede durar más de
24 horas a cuyo término el Fiscal decide si ordena la libertad del adolescente.

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Ananí Gonzales Huamaní

La medida más gravosa en la internación preventiva (artículo 47), esta lo


solicita el Fiscal, esta se tiene que llevar a cabo en un plazo máximo de 24
horas ante el juez.

c) Desarrollo del proceso


Se mantiene la estructura del Código Procesal Penal del 2004, que es una
etapa de investigación (artículo 84 y siguientes), luego una intermedia donde
se debate el sobreseimiento o la acusación, y finalmente el juicio oral.
Sobre este tema, el Código de Responsabilidad Penal de los Adolescentes
enfatiza la necesidad de brindarles especial protección. También se regula un
proceso de terminación anticipada.5

d) Salidas alternativas del proceso


El Decreto Legislativo 1348 regula medidas especiales como salidas
alternativas al proceso. Entre ellos está la remisión (artículo 127 y siguientes),
son aquellas instituciones de resolución de conflictos, con consecuencias
negativas que pueden originar el proceso judicial para el adolescente. Entre
estas salidas alternativas, este código, contempla la remisión (artículo 129) que
consiste en promover la abstención del ejercicio de la acción penal que no
reviste mayor gravedad, por lo tanto, está dirigida a lograr su rehabilitación y
reinserción social por medio de la aplicación de programas de orientación con
un enfoque restaurativo. La duración no puede exceder de doce (12) meses.
Otra medida es el acuerdo reparativo (artículo 137 y siguientes) que consiste
en el reconocimiento, por parte del adolescente, del daño que ha causado por
la infracción a la víctima y el compromiso por repararlo. Esta se puede aplicar
tanto a infracciones que atenten contra el patrimonio de la víctima. Mientras
sea posible el acuerdo de la víctima y del adolescente, dicha reparación del
daño se puede realizar a través de la restitución de un bien similar naturaleza o
valor. Finalmente, la víctima puede acordar el perdón de dicha reparación.

e) Responsabilidad penal especial y medidas socieducativas


El artículo I señala la Responsabilidad Penal Especial, el adolescente
comprendido entre los 14 y los 18 años es sujeto de derechos y obligaciones y
responde a una responsabilidad penal especial, esto en base a su edad y
características personales.

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De otro lado, por el artículo 148 y siguientes es respecto a las medidas


socioeducativas, estas deben de contener una función pedagógica positiva y
formativa en la finalidad de facilitar la resocialización y, por ende la
reintegración a la sociedad. Para ello, el control (artículo 152) es llevado por el
juez de juzgamiento, el cual debe de controlar periódicamente la medida
impuesta. Asimismo, los tipos de medidas se han dividido entre:
i) Medidas socioeducativas (artículo 156):
a) medidas no privativas de libertad, entre estas medidas tenemos la
amonestación (artículo 158), la libertad asistida (artículo 159), la libertad
asistida
y b) internación en un centro juvenil.
ii) Medidas accesorias (artículo 157), como es fijar lugar de residencia,
prohibición a frecuentar determinadas personas, no frecuentar bares u otros
lugares señalados por el juez, no consumir drogas, participar en programas
educativos que el juez considere necesarios.
iii)
no privativas de libertad como la amonestación (arículo 158), la libertad
asistida (artículo 159), prestaci

B) Marco Internacional

La Convención sobre los derechos del niño la cual fue suscrita el 26 de enero de 1990,
aprobada por el Congreso de la República mediante Resolución Legislativa N° 25278
del 03 de agosto de 1990, y ratificada por el Presidente de la Republica el 14 de
agosto de 1990, señala en su artículo 1º “Para los efectos de la presente Convención,
se entiende por niño todo ser humano menor de dieciocho años de edad, salvo que,
en virtud de la ley que le sea aplicable, haya alcanzado antes la mayoría de edad”.
Asimismo, en el artículo 40 detalle que todo niño que sea considerado acusado o
declarado culpable de haber infringido las leyes tiene derecho a que se respeten sus
derechos fundamentales y, en particular, el derecho a beneficiarse de todas las
garantías de un procedimiento equitativo, incluso de disponer de asistencia jurídica o
de otra asistencia adecuada en la preparación y presentación de su defensa. Siempre
que sea posible, se evitará recurrir a procedimientos judiciales y al internamiento en
instituciones.

La mínima intervención con respecto a los menores de edad tiene que estar acorde
con lo establecido por las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para la

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administración de la justicia de menores (Reglas de Beijing), estas fueron adoptadas


por la Asamblea General en su Resolución 40/33, con fecha 28 de noviembre de 1995.
La orientación básica se refiere a la política social de promover el bienestar del menor
con buenas prácticas desde la Justicia Penal Restaurativa como las medidas socio-
educativas incluidas en el Capítulo VII, como también las Medidas de Protección al
Niño que Cometa Infracción a la Ley Penal (Capítulo VIII). De este modo, las reglas
mínimas se han estipulado de manera que se apliquen en diferentes sistemas jurídicos
que reconozcan el concepto de mayoría de edad penal con respecto a los menores,
por ello, su comienzo no deberá fijarse a una edad demasiado temprana. Es decir, la
edad debe de estar acompañada de la madurez emocional, mental e intelectual, como
también que se aplicarán con imparcialidad y sin distinción alguna.

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