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ISSN: 0120-0062
revideva_fchbog@unal.edu.co
Universidad Nacional de Colombia
Colombia
radica también la justificación del respe- Marina, J. Por qué soy cristiano.
to por las creencias religiosas como deri- Barcelona: Anagrama, 2005.
vado del más amplio derecho de libertad Elias, N. Compromiso y distanciamiento.
de conciencia. La postura de Dawkins Barcelona: Península, 2002.
no es en este caso intentar hacer que la
religión obedezca este pacto, civilizar-
la, sino procurar su exterminio, pues ve Ramiro Ceballos M.
una continuidad con pocas fisuras entre Universidad de Pamplona, Colombia
fundamentalismo y religiosidad mode- ramirocem@yahoo.es
rada. Esto confiere al texto un especial
tono polémico, un cierto aire de deses-
peración y una cota de jocundidad, que
constituyen la ganancia en oro literario Moreno, J. C., coord. Descartes vivo.
para el lector. Ejercicios de hermenéutica cartesiana.
Por último, su negativa a ver en la re- Barcelona: Anthropos, 2007. 286 pp.
ligión, y específicamente en el cristianis-
mo, un factor determinante de la mo- Se trata de una recopilación de 12 artí-
ralidad moderna, comporta todos los culos sobre el pensamiento y la figura de
ingredientes de la ceguera histórica y so- René Descartes, elaborados desde muy
ciológica. No comprende que su propio diversas perspectivas. Entre ellos hay 3
canon moral, el Zeitgeist moral moder- de la pluma del coordinador, Juan Carlos
no, ha sido producto de un proceso evo- Moreno, quien orienta en cierta forma
lutivo. Aplicándole una frase de Elías a el sentido global del libro. Sin embargo,
propósito del conocimiento, diríamos hay algunos de ellos que se apartan de su
que Dawkins no puede imaginar cuán- orientación y hasta la contradicen.
to de lo que sabe que es correcto es posi- Pues bien, yo me atrevería a decir que
ble no saber que lo es (cf. Elias 2002: 119). lo que más me interesó del libro fue pre-
Lo que es digno de ser aclarado es cómo, cisamente aquello que menos me con-
de fuentes tan moralmente sembradas venció, porque siempre he considera-
de minas, se pudo con todo decantar un do que son aquellos que no comparten
conjunto de principios tan intachables nuestras ideas, quienes, cuando desarro-
como la libertad, la igualdad, la solidari- llan su pensamiento de manera coheren-
dad. ¡Qué mérito extraño el de unos tex- te y sustentada, más enriquecen nuestra
tos sagrados como esos! ¡Y qué tortuosa manera de pensar.
debió ser su depuración, su asimilación Veamos entonces qué fue lo que en
como valores laicos! realidad no me convenció, aunque me
haya servido para enriquecer mi conoci-
Bibliografía miento. Se trata de la defensa del pensa-
Blackburn, S. Pensar. Barcelona: Paidós, miento o de la persona de Descartes (a
2001. veces no es claro lo que se pretende de-
Wilson, E. Consilience. Barcelona fender), cuyo propósito es liberarlo del
Círculo de Lectores, 1999. señalamiento de haber sido uno de los
Küng, H. El principio de todas las cosas. grandes pilares del pensamiento moder-
Madrid: Trotta, 2007. no. Porque tanto Moreno, el compilador
Gardner, M. Los porqués de un escriba fi- y autor, como algunos de los otros cola-
lósofo. Barcelona: Tusquets, 1989. boradores, pretenden convencernos de
que Descartes no pensó tal como lo en- como meros ejercicios mentales, hay
tendieron, tanto sus contemporáneos, que tener en cuenta que lo más impor-
como quienes vinieron después de él. tante de un pensador que ha merecido
Que no fue él quien le dio un marcado con creces un lugar en la historia del
impulso a las ciencias físico-matemáti- pensamiento occidental, no es lo que él
cas, al convertirlas en el modelo de todo haya podido pensar o vivir, sino la in-
conocimiento, y que el mecanicismo ra- fluencia que sus escritos han tenido con
dical con el cual buscó sacar las famosas el correr del tiempo.
formas aristotélicas del ámbito de la rea- De ahí que el segundo recurso, que
lidad sensible, sólo ha sido una mala in- consiste en considerar que las tesis car-
terpretación por parte de sus descuida- tesianas no deben ser tomadas tan al
dos lectores. pie de la letra como pareciera que su
Ahora bien, las estrategias que de- autor las formula, tampoco sea un ex-
sarrollan para llevar a cabo su inten- pediente válido a la hora de evaluar su
to son varias e interesantes. Unos, como pensamiento. Lo que realmente impor-
Moreno, claramente pretenden afirmar ta es el impacto que sus ideas han teni-
que Descartes no dijo lo que dijo, por- do en el desarrollo posterior de la his-
que si uno se fija en la vida que llevó y lo toria. Y nadie podrá negar que críticos
que escribió en algunas de sus cartas, eso como Heidegger están mucho más cerca
que dijo hay que interpretarlo de mane- de haber comprendido de manera ade-
ra muy diversa. Es claro que esta estra- cuada ese impacto, de lo que se halla
tegia no puede convencer, aunque se la Moreno cuando pretende exonerarlo de
esgrima con inteligencia y con una muy esas atribuciones.
abundante erudición. Porque, o bien se Aquí convendría traer a cuento el ex-
trata de mostrar que Descartes fue una celente estudio elaborado hace algu-
persona que no vivió de acuerdo con nos años por Antanas Mockus, el mis-
las consecuencias que se derivan de sus mo que luego ha llegado a ser alcalde
convicciones filosóficas, lo cual no resul- de la ciudad de Bogotá en dos ocasio-
ta muy difícil de mostrar, o bien se bus- nes, titulado “Representar y disponer”
ca decir que sus tesis filosóficas no deben (Universidad Nacional de Colombia,
ser tomadas tan seriamente como él pa- 1988). En ese escrito Mockus no sola-
rece formularlas. mente corrobora con gran cuidado las
En el primer caso, resulta claro que tesis de Heidegger con respecto al giro
una visión estrictamente cartesiana producido en la Modernidad, y en el
de la vida no es posible, y eso lo sabía cual Descartes jugó un papel decisivo,
el mismo Descartes. Sólo que ello no sino que lleva más adelante sus consi-
le impidió desarrollar un pensamiento deraciones al preguntarse si con ello no
que buscaba de manera desaforada, no hemos llegado a una comprensión real-
la verdad, sino la seguridad o la certe- mente nueva e irreversible de lo que sig-
za inconmovible, pagando para ello el nifica conocer.
precio de renunciar a toda la gama de Ahora bien, lo que resulta todavía
realidad que escapaba a su concepción más interesante en el intento que ha-
matematicista del mundo. Y si uno, en cen algunos de los escritores del libro
beneficio de la discusión, aceptara que que reseñamos para liberar a Descartes
Descartes no esperaba que sus tesis fue- de los que ellos consideran malos en-
ran tomadas con tanta seriedad, sino tendidos, es el propósito que pareciera
Ideas y Valores • número 137 • agosto de 2008• ISSN 0120-0062• Bogotá, Colombia
[16 0] r eseñas
En total, un libro que vale la pena tesis más comprometidas con mostrar el
leer, y que constituye un aporte intere- desarrollo de su pensamiento desde una
sante a la bibliografía filosófica de ha- perspectiva del contexto de la época, te-
bla hispana. niendo en cuenta los objetivos propios,
compromisos y preocupaciones, que tan-
to Boyle como muchos pensadores del si-
Jorge Aurelio Díaz glo XVII compartían.
Universidad Nacional de Colombia Paralela a este tipo de interpretación,
jadiaz9@cable.net.co se ha desarrollado una lectura más filo-
sófica de su obra, analizando desde nue-
vas perspectivas conceptos tradicionales
como el de materia, la distinción entre
Severgnini, H. Robert Boyle: cualidades primarias y secundarias, los
Mecanicismo y experimento. Un estu- problemas del experimento y los com-
dio sobre el vínculo entre intervención y promisos ontológicos que éste involucra,
representación en un naturalista baco- el problema de las explicaciones mecáni-
niano. Córdoba (Argentina): Encuentro cas, la relación entre la filosofía natural
Grupo Editor/Editorial Brujas, 2007. 262 y la religión, etc. Se trata de temas fre-
pp. cuentes en las nuevas investigaciones y,
dependiendo de los intereses de los es-
Durante los años noventa surgió una tudiosos, esos análisis se ofrecen den-
renovación evidente y una producción tro una contextualización histórica, o
notable de estudios sobre la filosofía de simplemente se rastrea y problematiza la
Robert Boyle que se ha venido mante- trama conceptual involucrada. Y si bien
niendo hasta ahora. Lo importante de la mayoría de esos estudios provienen
esta relectura es que ha ofrecido un Boyle aún de países de lengua inglesa, lo cual
diferente en muchos sentidos. Por ejem- puede ser explicable por la poca influen-
plo, se ha mostrado la importancia que cia que el pensamiento de Boyle ejerció
la alquimia (un tema vedado por muchos en pensadores españoles –por no men-
intérpretes cuando se trataba de autores cionar a nuestros pensadores latinoame-
como Boyle o Newton) tuvo en la formu- ricanos–, es muy interesante notar que
lación de su proyecto de filosofía natural. se pueden encontrar ahora distintos ar-
De la misma manera, se han destacado tículos, capítulos de libros e incluso te-
los compromisos sociales y religiosos in- sis doctorales sobre algunos aspectos de
volucrados en toda su filosofía. También la filosofía de Boyle realizados por estu-
se ha estudiado la enorme influencia que diosos latinoamericanos. Trabajos reali-
ejerció sobre él Francis Bacon, y se han zados en Brasil por la profesora Luciana
hecho muchos esfuerzos por compren- Zaterka y por Kleber Cecon (próximo a
der el porqué de su prudencia al elabo- terminar su tesis doctoral sobre los expe-
rar sistemas filosóficos para su filosofía rimentos químicos de Boyle); en México
natural, sin por ello perder el valor e im- por Lucío Birbiescas (cuya tesis doctoral
portancia de su proyecto experimental. también está a punto de finalizar), o en
En cierta medida, se ha revaluado la ima- Colombia por quien escribe estas líneas,
gen tradicional de héroe de la Revolución son una muestra del interés que poco a
Científica creador del método experi- poco este filósofo natural ha venido des-
mental moderno, por un conjunto de pertando entre nosotros. Y a pesar de
Ideas y Valores • número 137 • agosto de 2008• ISSN 0120-0062• Bogotá, Colombia