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Descubierta en los años 40, el ácido fólico es considerado como una vitamina hidrosoluble que
pertenece al complejo B. También se lo conoce como folacina o folatos cuya etimología proviene
del latín 'folium' que significa hoja.
Esta vitamina es fundamental para llevar a cabo todas las funciones de nuestro organismo. Su gran
importancia radica en que el ácido fólico es esencial a nivel celular para sintetizar ADN (ácido
desoxirribonucleico), que trasmite los caracteres genéticos, y para sintetizar también ARN (ácido
ribonucleico), necesario para formar las proteínas y tejido del cuerpo y otros procesos celulares.
Por lo tanto la presencia de ácido fólico en nuestro organismo es indispensable para la correcta
división y duplicación celular.
Este ácido se forma en el intestino a partir de nuestra flora intestinal. Se absorbe principalmente en
el intestino delgado (yeyuno), luego se distribuye en los tejidos a través de la circulación sanguínea
y se almacena en el hígado. Se excreta por orina y heces.
Consideraciones
A su vez, se aconsejan suplementos de folatos dada la dificultad de mantener niveles de
ingesta adecuada de esta vitamina (600 μg/día)51 y la relación entre hipofolatemia materna
durante el primer mes de embarazo y riesgo incrementado de malformaciones del tubo
neural73-76, y posteriormente con anemias macrocíticas e hiperhomocisteinemia 73-76. El tema
del Fe es controvertido ya que recuperar los niveles de hemoglobina y la reserva de Fe
requiere tiempo y no son pocos los problemas relacionados con el exceso de hierro en el
feto (p.e. hemorragias, problemas de crecimiento)69. Por eso la SEN51 (tabla II) no
incrementa en sus recomendaciones las cantidades de hierro durante la gestación, ya que
considera que la absorción de hierro durante la gestación se eleva del orden de 2,5 veces
respecto a la situación pregestacional y que no existen pérdidas uterinas menstruales. No
obstante otras entidades52,53,55, considerando que las reservas de hierro están reducidas ya
pregestacionalmente y que difícilmente se adecúan a 18 mg/día durante la gestación,
elevan las ingestas dietéticas de referencia a 27 mg/día para dicho mineral (tabla II), lejos
aún del valor de 45 mg/día de las ingestas máximas tolerables (UL) para dicho
mineral53 (tabla III).
9) Un alto consumo de ajo, perejil, cebolla, albahaca, orégano, cúrcuma, anís, sésamo,
canela y otras especias.