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DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS
ESCUELA DE ESTADÍSTICA
23 DE ABRIL DE 2018
DAYAN ANCHAPAXI/ LOURDES POZO/ JOSELYN ROSILLO/ BRYAN YUPA
AULA:31
RESUMEN
La edad moderna empieza en el año 1492 y termina en 1789 d.c, las primeras
corrientes del pensamiento económico moderno (el mercantilismo y la
fisiocracia) se desarrollan en una época de grandes cambios, políticos,
económicos, sociales, religiosos y geográficos
Los mercaderes ejercieron su dominio sobre los artesanos, ya que eran ellos
quienes ponían en contacto la oferta (es decir a los productores de
determinados bienes) con la demanda (a aquellas personas que deseen
adquirir esos bienes).
Mercantilismo
Estas ideas expresaban sobre todo los intereses y ambiciones de los mercaderes,
que formaban parte de una nueva clase social en ascenso: la burguesía.
Este entro en crisis a finales del siglo XVIII y prácticamente desapareció para
mediados del siglo XIX. Ante la aparición de las nuevas teorías fisiócratas y
liberales, las cuales ayudaron a Europa a recuperarse de la profunda crisis del
siglo XVII y las catastróficas Guerras Revolucionarias Francesas.
Adam Smith
En 1759 publica su libro Teoría de los Sentimientos Morales, que trata de las
fuerzas morales que frenan el egoísmo y unen a las personas en una sociedad
variable y sobre el concepto de hedonismo.
En 1776 público la “Riqueza de las Naciones”, explicando en ese libro cómo las
diferentes naciones adquirían sus niveles de riqueza de bienestar a través del
trabajo, siendo este libro el primero de economía fundamentado en la ciencia
y matemáticas. Se derivan dos teorías importantes para el comercio
internacional que simplemente trataba de justificar porque algunos países eran
más ricos que otros, conocidas como la Teoría de la Ventaja Absoluta y la Teoría
de la Ventaja Competitiva.
Adam Smith, teoría económica y política que defiende las libertades y derechos
individuales tales como:
Libre comercio
Para Smith debería existir el libre comercio, es decir, los países deberían poder
comerciar entre ellos completamente en libertad, sin pagar aduanas, impuestos
o aranceles.
Libre elección
Las personas son libres de elegir racionalmente que hacer, vender, comprar. El
egoísmo lleva a la prosperidad individual y por derrame a la prosperidad de
todos.
Libre empresa
Los individuos son libres de emprender con su capital privado las empresas que
consideren convenientes, con la mínima regulación estatal o gremial.
Así mismo pensaba que el mercado pensaba que el mercado se podía regular
solo, lo que llamamos la teoría de Laissez-faire, o “dejar hacer”, postula que la
oferta y demanda se regulan libremente llegando siempre al valor más racional.
Smith aboga por la división del trabajo, ya que considera que el trabajo
realizado por distintas personas, cada una especializada en una determinada
actividad, en distintos estadios de la producción, resulta más productivo que
una solo persona realizando un trabajo desde el principio hasta el final. Y ello
sería posible, gracias a tres motivos: la mayor habilidad y agilidad del trabajador
especializado, el ahorro de tiempo al no cambiar de actividad el trabajador
durante el proceso productivo, y al desarrollo de máquina que faciliten el
trabajo. Smith advirtió también del riesgo de una excesiva especialización, lo
cual resolvió planteando la necesidad de una educación adecuada al sistema.
Ahora bien, esto nos lleva a una situación en la que nos encontramos hombres
que solo pueden contar con lo que producen, con lo cual se hace necesario
obtener lo que necesitan por otro medio. Este medio será el cambio, deviniendo
entonces en una sociedad comercial, pero como no todos necesitan lo que
otros tienen para cambiar, se hace necesario utilizar el dinero, lo cual le llevaría
luego a plantear la cuestión del valor del cambio.
En su Teoría de los salarios, Smith propone que el salario natural del trabajo será
el resultado del producto del trabajo, antes del propietario y del capitalista,
quedando está reducida al trabajador. Una vez que ya están presentes estos
otros dos elementos, el trabajador tiene que compartir lo que produce, teniendo
que concertar la subida o bajada de los salarios. Una mayor demanda puede
llevar a la subida de los salarios, pero esto tiene como requisito previo el
aumento de los ingresos y del capital, y por tanto de los “fondos destinados” al
pago de los salarios. Por el contrario, unos salarios bajos son síntomas de unas
condiciones económicas estacionarias que no estimulan el aumento de la
demanda de trabajo