Universidad Abierta y a Distancia de México

Alumno: Daniel Rojas Espinoza (ES172017079)

Materia: Fundamentos de Administración

Grupo: MI-IFAM-1801-B2-005

Profa.: Jessica Judith Jiménez Lucio

Ciudad de México, a 19 de abril de 2018

 Pensamiento administrativo

Introducción

Además de las transformaciones tecnológicas, durante el periodo de la Revolución Industrial se

desarrollaron, principalmente, dos enfoques en el rubro de la Administración: el primero, la “escuela
científica” del ingeniero industrial Frederick Winslow Taylor, y la segunda, la “escuela empírica” del
ingeniero minero Henri Fayol. ¿Qué establecen dichas ideologías para haber permanecido hasta
nuestros días?

Desarrollo

En primera instancia, a pesar de su débil constitución física, paradójicamente, Taylor enfocó sus
estudios en hacer más eficientes diversas actividades, así como en el mejoramiento del rendimiento
del personal, esto por medio del análisis de los movimientos físicos y los tiempos. Tal vez uno se
pregunta, ¿cómo es posible medir el trabajo a través de esos dos puntos? Sin embargo, gracias a
dicho análisis se llegó a comprobar las gravísimas consecuencias que generan factores como la
fatiga, las demoras y los retrasos.

Para todo esto, el estadunidense fundamentó, de manera científica, su ideología en los siguientes
principios: la selección de obreros y la responsabilidad compartida, esencialmente. Aquí nos
preguntamos, ¿cuál es la ciencia en contratará a una persona? Simplemente, firma el contrato y
¡listo! Así era en el pasado; en la actualidad, las compañías forman a sus empleados, dotándolos de
mayores habilidades y aptitudes, por lo que es imperativo saber elegir a los individuos.

También, Taylor fue el primero en hablar sobre un “sistema de incentivos a trabajadores

productivos”… ¡Y vaya que debemos agradecérselo! Actualmente, ¿a quién no le agrada recibir un
bono por su puntualidad? Se ha comprobado que este tipo de sistemas, más allá de incrementar la
productividad, nutre el compromiso y el sentimiento de pertenencia entre las personas y las
organizaciones. Un vínculo sumamente fundamental para alcanzar ciertos objetivos, ¿qué harían las
empresas sin este sutil pero grandioso beneficio?

Por otro lado, después de trabajar por varios años en una firma minera, Fayol estableció 14
principios en su ideología administrativa, de las cuales, desde mi punto vista, se complementan.

El francés habla de respetar las normas y reglamentos establecidos dentro de una organización; ¿a
quién le agradaría estar en un constante conflicto con sus colaboradores y superiores? ¡A nadie! Por
eso, la disciplina es fundamental. De la misma manera, la división del trabajo, que permite, entre
otras cosas la especialización de los individuos en un área específica y, con ello, mejorar
continuamente. ¡No podemos ser sabelotodos!

Así como no podemos seguir órdenes de dos jefes con ideas totalmente polarizadas, ¿o sí? Lo único
que se genera es conflicto, cosa que nadie desea; por tal motivo, se debe establecer una unidad de
mando y dirección. Y, de la misma forma, se establecer un número reducido en la jerarquía, para
hacer más eficiente la cadena de mando, enfatizando en un equilibrado dictamen de órdenes
(relación Autoridad-Responsabilidad).

También dice que las personas trabajan mucho mejor si cuentan con la certeza de la estabilidad de
su plaza de trabajo. ¡Y claro que así es! En el momento en que comenzamos a percibir inseguridad
laboral, ya nada es igual. Un sentimiento que se puede llegar a percibir de la misma manera, o peor,
cuando el pago, la remuneración económica, no se encuentra en función con las actividades y el
desempeño de los empleados. No conozco a alguien que le encantaría ganar poco por todo el
esfuerzo que realiza.

Desafortunadamente, aunque no lo queramos así, las metas de las empresas deben ser siempre
supremas, subordinando los intereses individuales y, afectando, en cierta medida, el espíritu de
equipo.

Otros de los principios son: la centralización, el orden, la equidad y la iniciativa. Fayol aseguró que
seguir cada uno de los principios antes mencionados es la clave del éxito de toda empresa.
¿Disparatado? No, no lo creo así.

Conclusión

Sorprendente que en nuestra época se continúe considerando la implementación en diferentes

áreas de estos dos enfoques administrativos, diseñados en la segunda mitad del siglo XVIII en la
Europa Occidental y la America Anglosajona. A simple vista, cada una de ellas suena lógica, pero,
lamentablemente, en muchas ocasiones, las empresas no procuran a sus trabajadores, implicando
fallas en la gestión de las organizaciones mismas, así como pérdidas económicas. Ojalá todas las
firmas leyeran estos manifiestos que, sin duda alguna, traerá grandes beneficios a todos sus
integrantes y a sus intereses supremos. Un sueño un tanto utópico, sí, más no imposible porque
todos nos merecemos condiciones dignas de trabajo.
Referencias Bibliográficas

Educatina. YouTube. (2013). “Escuela Científica de la Administración Primera Parte (Taylor y sus
Aportaciones)”. [Consultado el 19 de abril de 2018 en https://youtu.be/VgcjX_mogeU]

Educatina. YouTube. (2013). “Escuela Empírica de la Administración Segunda Parte (14 Principios
Administrativos)”. [Consultado el 19 de abril de 2018 en https://youtu.be/FH_4NcMv2SQ]