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EL CONVENIO COLECTIVO DE TRABAJO

EN LA CONSTITUCION DE 1993 *

Jorge Toyama Miyagusuku


Profesor Adjunto de Derecho Laboral
Pontificia Universidad Católica del Perú
Asistente de Docencia de Derecho Laboral
Universidad de Urna

El presente artículo pretende abordar los temas


más importantes y controvertidos que se han ge-
nerado sobre el convenio colectivo de trabajo -en
adelante CCT-, a raíz de la dación de la Constitu-
ción de 1993.

El estudio del ccr, producto normativo natural


de la autonomía colectiva, será abordado desde
una perspectiva doctrinaria y dogmática, sin dejar
de tener en consideración los debates registrados
tanto en la Comisión de Constitución y de Regla-
mento como en el Plenario del Congreso Consti-
tuyente y Democrático que elaboraron la Consti-
La Constitución de 1993 incorpora una serie de tución Política de 1993.
modificaciones en relación a su antecesora. Estos
cambios son particularmente notorios en materia Primero, analizaremos el carácter normativo del
laboral. La regulación constitucional del convenio ccr y la inclusión de éste en el sistema de fuen-
colectioo de trabajo es el tema desarrollado en el tes estatal; posteriormente, el nivel jerárquico que
presente artículo desde una perspectiva doctrinaria ocupa el ccr en dicho sistema formal de fuentes
y dogmática, teniendo en cuenta además los deba- y; finalmente, la vigencia temporal del ccr en el
tes surgidos al interior del Congreso Constituyente plano constitucional. Asimismo, a lo largo del ar-
Democrático. El doctor Toyama no se detiene en di- tículo, en cada tema, no dejaremos de comparar
lucidar la naturaleza jurídica del convenio colectivo las Constituciones de 1979 y 1993.
de trabajo, ya que principalmente pretende entre-
garnos alternativas de solución a los problemas de Obsérvese que no describiremos la naturaleza ju-
la vigencia temporal y la ubicación en el sistema rídica del CCf. Consideramos el tema agotado con
de fuentes de derecho de este figura jurídica. Espe- la famosa frase de Camelutti -el ccr es un «híbri-
cial interés reviste el problema de la aplicación de do con alma de ley y cuerpo de contrato»-. Las
los artículos 62 y 103 de la Constitución a los con- teorias que afirmaban la naturaleza exclusivamen-
venios colectivos; ante esta interrogante, la res- te contractual del ccr han quedado superadas;
puesta del autor es dara: los mencionados artículos hoy, se reconoce en la legislación y doctrina, que
no son aplicables a los convenios colectioos de tra- el ccr no tiene una naturaleza únicamente con-
bajo. tractual.

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1. EL CONVENIO COLECTIVO DE (fuente en sentido propio); al mismo tiempo, con-
TRABAJO: FUENTE DE DERECHO fería rango normativo al ccr («fuerza de ley»),
siendo, entonces, una norma en sentido traslativo.
Por fuente del Derecho entendemos, siguiendo lo
expuesto por Pizzoruso 1, al conjunto de actos o La Constitución de 1993 señala que los sujetos co-
hechos que en un determinado ordenamiento dan lectivos pueden celebrar un ccr con «fuerza vin-
lugar a una norma, en virtud de otras normas so- culante en el ámbito de lo concertado» (numeral 2
bre producción jurídica. De lo dicho, se derivan del artículo 28). Antes de ello, el propio artículo
tres elementos necesarios para la producción de constitucional reconoce al derecho de negociación
una norma: a) poder normativo, b) acto o hecho colectiva -en adelante NEC-, debiendo el Estado,
normativo y e) el procedimiento de elaboración de incluso, fomentarlo.
la norma.
De esta forma, el poder normativo de los agentes
Por el primero, entendemos, tomando la expre- laborales tiene su base en la propia Constitución 4
sión de Entrena 2, al conjunto de hechos o actos e, incluso, se precisa que el Estado sólo fomentará
que producen consecuencias jurídicas «generales, este poder normativo y, por esto, siguiendo a
abstractas, impersonales y de permanente fuerza Alonso Olea5, podemos decir que el reconoci-
vinculante». Son las llamadas fuentes en sentido miento estatal de] derecho a la NEC importa, au-
propio, es decir, el poder social que alumbra la tomáticamente, la atribución a los sujetos colecti-
norma. vos de crear normas jurídicas.

El segundo elemento, el acto normativo o fuente Veamos ahora los argumentos esbozados por los
en sentido traslativo, es la exteriorización del pri- constituyentes de 1993; para ello, utilizaremos el
mero, siendo una fuente de derecho objetivo. Es, Diario de los Debates del Congreso Constituyente
propiamente, la norma jurídica. y Democrático -en adelante CCD- de la Constitu-
ción Política de 1993. Tanto en la Comisión de
Por último, Rubio 3 desarrolla el concepto de pro- Constitución y de Reglamento como en el Ple-
cedimiento de elaboración de una norma: «fuente nario del CCD, prácticamente, existió consenso en
formal del Derecho es aquel procedimiento a tra- admitir el carácter normativo del ccr pero variar
vés del cual se produce, válidamente, normas ju- la frase de la Constitución anterior.
rídicas que adquieren el rasgo de obligatoriedad
propio del Derecho». En efecto, en la Comisión de Constitución y de
Reglamento del CCD 6 se señaló que el CCf debía
En el plano laboral, la fuente en sentido traslativo tener <<fuerza vinculante» -aunque hubo una pro-
por excelencia es el ccr y los agentes colectivos puesta minoritaria para introducir la frase «ca-
laborales se constituyen en fuente en sentido pro- rácter normativo»- porque no sólo regía para las
pio. La Constitución de 1979, en su artículo 54, partes firmantes del mismo. Las razones que emi-
otorgaba a los sujetos colectivos la posibilidad de tieron los congresistas para cambiar el término de
crear un ccr para regir sus relaciones de trabajo la Constitución de 1979 -«fuerza de ley»- fue por-

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que algunos laboralistas interpretaron que dicha b) Es una norma de aplicación automática. De
expresión permitía que el ccr sólo podía modifi- acuerdo a lo descrito por Paseo Cosmópolis 11 , el
carse por una ley emitida por el Congreso. CCT no requiere de mayor formalidad que retrase
su aplicación.
En el Plenario del CCD, el dispositivo constitucio-
nal que comentamos fue aprobado -en la Se- e) No se permite la derogación in peius por la au-
sión 29 E de 8 de julio de 1993-, sin registrarse ma- tonomía individual En otras palabras, el CCT es
yor discusión, por 48 votos a favor y 20 en con- una norma de inderogabilidad relativa, sólo supe-
tra -en puridad, se aprobaron conjuntamente, a rado «mejorativamente». El CCT es un medio para
diferencia de lo ocurrido en la Comisión de Cons- alcanzar beneficios pero nada obsta para que
titución y de Reglamento del CCD, en una sola éstos se superen por convenios individuales (in
votación, los tres incisos del actual artículo 28 de meius).
la Constitución- 7•
d) Son normas de aplicación obligatoria. El CCT, al
Finalmente, por un lado, los instrumentos inter- ser una norma jurídica, tiene carácter imperativo,
nacionales sobre derechos humanos reconocen la esto es, los agentes laborales se encuentran obli-
libertad sindical -dentro de ella a la NEC- como gados a aplicar todas las cláusulas del CCT e, in-
derecho inherente a la persona humana y, por cluso, se genera responsabilidad en caso contra
otro lado, del artículo 4 del Convenio OIT No 98 rio 12•
(ratificado por la Resolución Ministerial No 14712)
se desprende que el CCT es un acuerdo entre em- En el Decreto Ley No 25593 de 26 de junio de
pleador y trabajadores de aplicación ilimitada; lo 1992, Ley de Relaciones Co1ectivas de Trabajo -en
expuesto es suficiente para reconocer al CCT la adelante LRCT-, encontramos estos rasgos. Cierta-
calidad de fuente de Derecho originaria 8• En con- mente, basta con la dedaración constitucional pa-
secuencia, aun cuando la Constitución no recono- ra asegurar al ccr con las características anota-
ciese expresamente al derecho de NEC, los suje- das; sin embargo, la inclusión de mecanismos co-
tos colectivos tendrían asegurada su condición de mo la inderogabilidad, obligatoriedad, etc. fortale-
fuente en sentido propio. cen el carácter normativo del CCT. Así las cosas,
el artículo 42 de la LRCT precisa que el CCT «obli-
Así, y haciendo nuestra la frase de Messineo 9, el ga a éstas (las partes que adoptaron el CCT), a las
ccr adquiere la calidad de «verdadera y propia personas en cuyo nombre se celebró y a quienes
fuente de derecho», teniendo las siguientes carac- les sea aplicable».
terísticas:
De otro lado, tenemos lo expresado en el inciso a)
a) Es, en palabras de Alonso Olea 10, un derecho del artículo 43 de la LRCT referido a la aplicación
objetivo. El CCT crea un haz de derechos y obliga- automática del CCT a los contratos individuales
ciones que se caracterizan por ser generales, im- de trabajo, no permitiéndose alguna estipulación
personales y abstractos dentro de su ámbito de menor a la establecida en aquél. La norma indica
aplicación. que «los contratos individuales quedan automáti-
camente adaptados a aquél -el CCT- y no podrán

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contener disposiciones contrarias en perjuicio del vas son las únicas que despliegan virtualidad ju-
trabajador». rídica normativa, en tanto que las obligacionales
sólo entre los sujetos pactantes.
Entonces, estamos ante una verdadera norma ju-
rídica que coexiste con las normas producidas por Otro sector de la doctrina indica que todo el ccr
el Estado. Al estar reconocida en la Constitución, tiene carácter normativo. El ccr es, sostiene
se produce, en términos de lo señalado por la Krotoschin16, una «unidad inescindible» que no
doctrina, un «pluralismo jurídico» 13; es decir, una puede resistir una división en relación a su efica-
situación particular donde no sólo el Estado pue- cia jurídica.
de crear normas cogentes, también se confiere a
los agentes privados la posibilidad de autonormar Nosotros coincidimos con lo expresado por la pri-
sus relaciones y crear normas jurídicas. mera de las posiciones. El CCT es una norma ju-
rídica y contrato a la vez. No puede negarse la
Ahora bien, la coexistencia de dos fuentes del De- existencia de diferentes tipos de cláusulas al inte-
recho: autónoma (sujetos colectivos) y heteróno- rior del CCT y por esto pueden distinguirse dos
ma (Estado) no es pacífica. En los casos de conflic- efectos: uno contractual y otro normativo 17• Evi-
to, deberán prevalecer las normas estatales pues dentemente, la característica más relevante del
representan intereses generales que deben primar ccr es su naturaleza normativa pero ello no im-
sobre lo dispuesto en el CCT. Lo expuesto es re- plica que estos efectos «normativicen» la parte
sumido en forma clara por García-Perrote 14 : contractual del mismo.

«Reconocer y admitir aquel carácter prevalente, 2 INCLUSION DEL CONVENIO


autónomo y de emancipación del convenio colec- COLECTIVO DE TRABAJO EN EL
tivo respecto de la norma estatal, sería tanto como SISTEMA DE FUENTES
situar el poder normativo del Estado en un plano
secundario y subordinado en relación con el po- El estudio acerca de los modelos de NEC requiere,
der normativo de representantes de los trabajado- de acuerdo a lo expresado por V aldés, la conflu-
res y empresarios, lo que resulta a todas luces in- encia de tres elementos: procedimiento, sistema y
concebible (...), pues supondría desconocer la vo- estructura. En atención al procedimiento, se anali-
luntad poñtica que éste expresa e ignorar los inte- za «la configuración de la negociación colectiva
reses generales y sociales que el Estado atiende, como cauce social de relaciones sociales»; en rela-
intereses que, con carácter general, han de preva- ción al sistema, se distingue al «conjunto de re-
lecer sobre aquellos otros más específicos». glas de acción y reorganización de quienes nego-
cian sobre el procedimiento»; y, finalmente, la es-
Por último, conviene analizar los alcances de la tructura comprende el «conjunto de acuerdos al-
consideración del ccr' como norma jurídica, en canzados dentro de determinado ámbito funcio-
las distintas cláusulas del mismo. Para un sector nal o territorial»18•
de la doctrina, sólo las cláusulas normativas ten-
drían el carácter de fuente del Derecho; por ejem- Ahora, desde la perspectiva del procedimiento, se
plo, Montoya 15 precisa que las cláusulas normati- distinguen dos tendencias: de integración y de di-

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ferenciación. En la primera, el CCT se incorpora al En consecuencia, creemos que puede incluirse al
sistema formal y material de fuentes estatal; en la CCT en el sistema de fuentes. A continuación, in-
segunda, el ccr no se integra al sistema de tentaremos describir la jerarquía que tiene el CCT
fuentes. en el sistema de fuentes estatal.

La mayor parte de la doctrina coincide en incluir 3. JERARQUIA DEL CONVENIO


al ccr dentro de la jerarquía de la normativa es- COLECTIVO DE TRABAJO EN EL
tatal. Empero, hay quienes afirman que el ccr SISTEMA DE FUENTES
tiene una especial naturaleza (distinta de las nor-
mas jurídicas de origen estatal) por la forma como Determinada la naturaleza normativa del ccr y
se origina, por su contenido, estructura y por la la integración de éste en el sistema formal de
eficacia del mismo; es pues, en palabras de Ermi- fuentes, ¿qué rango jerárquico tiene en nuestra
da Uriarte 19, una norma «extraetática»: dentro de pirámide jurídica?
una concepción «autonomista» de las relaciones
colectivas de trabajo, el carácter no estatal del Para responder a esta interrogante tenemos que
ccr es una consecuencia lógica de esta con- realizar una distinción en razón a lo dispuesto en
cepción. las Constituciones de 1979 y 1993, y en la LRCT.

La mayoría de los estudiosos del Derecho Laboral 3.1. Constitución de 1979


otorga naturaleza normativa al ccr, conside-
rándolo dentro de la estructura jerárquica de la El artículo 54 de la Constitución de 1979 señalaba
normativa estatal 20• Incluso, en el Derecho Consti- que el ccr tenía «fuerza de ley para las partes».
tucional, se reconoce que el CCT es una norma Mucho se ha escrito sobre el particular. Casi
jurídica que, en términos de Biscaretti 21 , se «incar- unánimemente la doctrina nacional coincidió en
dina» en el sistema de fuentes: ubicar al CCT dentro del nivel primario de la je-
rarquía de normas 22• La declaración de la Consti-
«Esa potestad contractual -del derecho a la nego- tución representaba un precepto jurídico que, por
ciación colectiva- es, al mismo tiempo, fuente de la denominación otorgada a sus efectos, se consti-
normas jurídicas (con eficacia reglamentaria) tuía en una norma de nivel primario.
constitutivas del ordenamiento estatal».
En efecto, al igual que las demás normas que se
Si bien el CCT no tiene las características de las encontraban en este nivel (ley, decreto legislativo,
fuentes en sentido propio estatales, genera los tratados internacionales, etc.), la determinación je-
mismos efectos que estas últimos. Las normas es- rárquica provenía de la Constitución. La Constitu-
tatales y autónomas gozan de un reconocimiento ción empleaba el término «fuerza de ley» y, con
a nivel constitucional, tienen eficacia jurídica ge- ello, le atribuyó un nivel jerárquico al CCT: prima-
neral, impersonal, abstracta y con carácter vincu- rio. Si bien el término «fuerza de ley» es complejo
lante; no hay pues, en este sentido, diferencia al- [como dice Rubio 21, es un «metaconcepto»], la de-
guna. terminación del nivel primario, resultaba, como
sostiene Herrera Vásquez 21, de una interpretación

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sistemática de la Constitución: se empleaba el día ser transgredido por una norma de nivel pri-
término «fuerza de ley» para designar al decreto mario. Así, durante la vigencia de la Constitución
legislativo y reglamento del congreso y de las de 1979, el ccr mantuvo su ubicación en el siste-
cámaras de senadores y diputados (inciso 10 del ma de fuentes.
artículo 211 y artículo 177 de la Constitución de
1979, respectivamente). Entonces, tanto la LRCT como la Constitución de
1993 adoptan la misma fórmula. ¿Qué quiere decir
El poder normativo contenido en el artículo 54 de «fuerza vinculante»? ¿Hay alguna consecuencia
la Constitución no constituía uno de nivel inferior jurídica por utilizar un término distinto al conte-
al primario. Los agentes sociales tenían igual po- nido en la Constitución de 1979?
testad normativa que los órganos que expedían
normas de nivel primario por cuanto, como se ha Un primer punto puede ser el desarrollo del ar-
dicho, tenían por fuente la Constitución. tículo 42 de la LRCT por el Decreto Supremo
NOOll-92-TR de 14 de octubre de 1992, Reglamento
3.2. Constitución de 1993 y Ley de de la LRCT. El artículo 28 del Reglamento de la
Relaciones Colectivas de Trabajo LRCT indica que «fuer7..a vinculante» implica que,
en el CCT, «las partes podrán establecer el alcan-
La Constitución de 1993 no confiere ningún nivel ce, las limitaciones o exclusiones que autónoma-
jerárquico al CCT en el sistema de fuentes. El nu- mente acuerden con arreglo a ley». U na lectura
meral 2 del artículo 28 precisa que «La convención del dispositivo permite apreciar que el desarrollo
colectiva tiene fuerza vinculante en el ámbito de normativo del Reglamento de la LRCT no ha sido
lo concertado». felíz.

Antes de la promulgación de la Constitución de Efectivamente, la disposición del Reglamento de


1993, se emitió la LRCT que no empleaba el mis- la LRCT confunde eficacia normativa del CCT con
mo término de la Constitución anterior para refe- la eficacia general o limitada del mismo. La des-
rirse a los efectos del CCT. En efecto, el artículo 42 cripción contenida denota las características pro-
de la citada norma menciona que: pias de un ccr respecto a su eficacia general o li-
mitada, de acuerdo a lo señalado por los agentes
«La convención colectiva tiene fuerza vinculante laborales 25• Entonces, el artículo 28 no nos sirve
para las partes que la adoptaron. Obliga a éstas, a para determinar el nivel normativo que goza un
las personas en cuyo nombre se celebró y a quie- ccr ni siquiera su naturaleza normativa.
nes les sea aplicable, así como a los trabajadores
que se incorporen con posterioridad a las empre- Recogiendo los aspectos más trascendentes del
sas comprendidas en la misma, con excepción de debate suscitado en España sobre este tema, unos
quienes ocupan puestos de dirección o desem- consideran que la fórmula refleja la eficacia nor-
peñan cargos de confianza». mativa del CCT -Rivero, Rodríguez Sañudo,
Valdés, Sala Franco, Alvarez Algolla, etc.-, es de-
La LRCT ha utilizado el mismo término que el ar- cir, se plasma la fuerza normativa del CCT. Otros
tículo 37.1 de la Constitución de España de 1978 y indican que la expresión «fuerza vinculante» es
con ello ingresamos al rico debate generado en la un plus que se estableció para garantizar la NEC:
doctrina española sobre el significado de «fuerza Alonso Olea, Borrajo, Martínez Emperador, Oje-
vinculante». da, etc. 26•

¿Varió la ubicación Jerarquica del CCT con la Sobre la expresión «fuerza vinculante», Kelsen v
LRCT? Definitivamente no. El nivel jerárquico del describe lo siguiente: «El mandato es vinculante
CCT se encontraba asegurado por la Constitución no porque el individuo que ordena tenga un po-
de 1979 (la «fuerza de ley» del CCT) y ello no po- der efectivamente superior, sino porque está dota-

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do del poder de emanar mandatos de naturaleza inscribe en el sistema de fuentes, ha de someterse
vinculante. Están autorizados y dotados del poder a las normas de mayor rango jerárquico y ha de
sólo si un ordenamiento normativo, que se supo- respetar el cuadro de derechos fundamentales
ne vinculante, les confiere aquella facultad, esto acogidos a nuestra Constitución» 2'1•
es, la competencia para emitir mandatos vincu-
lantes». Los efectos del CCT siguen siendo generales, ob-
jetivos, inmediatos y obligatorios. En la Constitu-
De otro lado, resulta ilustrativa la definición de ción de 1979 se hablaba de «fuerza de ley», es de-
García-Perrote 28 sobre el término «fuerza vincu- cir, existía una equiparación entre el ccr y la ley,
lante»: «La expresión fuerza vinculante implica la dotadas ambas de similar eficacia, existiendo una
eficacia normativa e inderogable del convenio co- preeminencia de la ley en lo concerniente a la
lectivo, o si se prefiere la eficacia real: (efecto au- promoción de la NEC y la solución de los conflic-
tomático y efecto imperativo), sobre las relaciones tos colectivos. Este mismo análisis no puede tras-
individuales de trabajo incluidas en el ámbito de ladarse fácilmente a la fórmula contenida en la
aplicación del mismo». Constitución de 1993 («fuerza vinculante»).

La doctrina nacional también sigue esta corriente Creemos sumamente temeraria la afirmación de
interpretativa. Así, por ejemplo, en relación a la García Toma32, quien ubica al CCI' en el rango
«fuerza vinculante» del CCT, Blancas Bustamente equivalente a, lo que él denomina, «normas de in-
y Boza Pro 29 precisan que este término implica re- terés de las partes». Según este autor, el ccr se
conocer al ccr la calidad de «fuente del Derecho ubica en el mismo nivel jerárquico que las ejecu-
del Trabajo». torias supremas, las resoluciones del Tribunal
Constitucional, los acuerdos de Sala Plena de los
De esta forma, no cabe duda que la expresmn órganos jurisdiccionales, etc. y debajo de las nor-
«fuerza vinculante» denota el carácter normativo mas típicas que emana el Poder Ejecutivo (decre-
del CCT. No estamos ante un «plus» -el mismo ar- tos supremos, resoluciones supremas, resolucio-
gumento fue usado inicialmente por Paseo nes ministeriales, etc.). El CCT, definitivamente,
Cosmópolis al analizar el término «fuerza de
3() no se encuentra en este nivel jerárquico: no pue-
ley»de la Constitución de 1979 como innecesario-. den estar, en el mismo nivel, una sentencia de
La expresión «fuerza vinculante» trae consigo el una Sala de la Corte Suprema de la República y
carácter aplicativo inmediato del ccr sobre las re- unCCT.
laciones laborales y la irradiación obligatoria del
CCT dentro de su ámbito de aplicación; es decir, Ciertamente no hay ninguna norma que señale el
el reconocimiento como instrumento normativo o nivel jerárquico del CC1. No puede tener rango
fuente jurídica sui géneris al CCT. de ley porque las fuentes primarias de un Estado
sólo se mencionan en la Constitución, que es el
El problema se presenta en la determinación del instrumento a través del cual se construye la es-
nivel jerárquico que tiene el ccr, entendido co- tructura normativa en cualquier Estado. Empero,
mo norma con «fuerza vinculante». Sobre el parti- sería válido -sin que ello implique una transgre-
cular, el Tribunal Constitucional Español indicó sión a la Constitución- que una ley ubique al CCT
en una sentencia del año 1988 que «el convenio en el rango equivalente al decreto supremo o en
colectivo, en cuanto tiene valor normativo y se el nivel terciario -ubicación natural de las normas
autónomas-.

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En resumidas cuentas, el CCT no está en el nivel Así pues, debería existir un límite a la autonomía
primario. Pero, siguiendo a Rubio:x\ el CCT puede colectiva. Este límite debe ser, siguiendo a Sala y
ubicarse dentro de cualquier nivel inferior al de la Albiol 35, el respeto a aquellos «derechos o valores
ley 34• protegidos por la Constitución con igual o supe-
rior intensidad que el derecho a la negociación co-
Lo expuesto precedentemente, ¿perjudica a la au- lectiva sea en su formulación constitucional o en
tonomía colectiva? ¿Puede una ley establecer res- la formulación de leyes sociales que los concre-
tricciones al ccr, dado que, jerárquicamente, se tan».
encuentra por encima de aquél?
De esta forma, aun cuando la Constitución de
Indudablemente, el CCT debe sujetarse a ciertos 1993 ya no establezca el nivel primario al CCT, la
parámetros establecidos en la Constitución e, in- ley debe reconocer, respetar y fomentar la auto-
cluso, en la ley. El poder normativo estatal, nece- nomía colectiva. No hay pues, una reducción de la
sariamente, debe primar sobre el poder normativo capacidad negocia} de los sujetos colectivos y /o
de que gozan los agentes laborales. No cabe una un aumento del poder normativo estatal
superposición del CCT sobre la potestad normati-
va inherente al Estado. La autonomía colectiva se encuentra garantizada
por la propia Constitución que emplea los mismos
Sin embargo, la intervención estatal debe ser es- términos que el Convenio OIT No 98 («fomen-
porádica, indispensable y reducida a lo necesario; tar»la NEC). Basta el reconocimiento de la autono-
no cabe una intervención reglamentarista o esta- mía colectiva para que los sujetos colectivos ten-
bleciendo serios y permanentes límites intrínse- gan el derecho a negociar y celebrar acuerdos, los
cos (definiendo por ejemplo, los conceptos que mismos que el Estado deberá respetar y fomentar.
puede contener el CCT, como lo hacía el Decreto Como sostiene Neves Mujica :v.,:
Supremo No 006-71-TR de 29 de noviembre de
1971) o extrínsecos (verbigracia, las prohibiciones «Ahora que tal fuerza de ley se ha reemplazado
sobre la inclusión de cláu~ulas de indexación en por el carácter vinculante, por tanto, tal sustento
un CCT, de acuerdo al Decreto Legislativo No 757 podría desaparecer, lo que nos parecería una gra-
de 8 de noviembre de 1991). Estos mismos límites ve equivocación. El verdadero fundamento está
eran los fijados en la Constitución de 1979. en el derecho a la negociación colectiva que el Es-
tado debe garantizar o fomentar y no en el ca-
En relación a este tema, el Tribunal Constitucional rácter normativo del convenio colectivo y menos
Español ha resuelto lo siguiente: en su rango, puesto que el primero permite im-
pugnar todas las normas estatales limitativas de la
«La Constitución establece por sí misma los lími- autonomía colectiva y el segundo sólo las que
tes de los derechos fundamentales en algunas afectan convenios colectivos ya celebradoS>>.
ocasiones y, en otras ocasiones el límite del dere-
cho deriva de la Constitución sólo de manera me- 4. VIGENCIA TEMPORAL DEL
diata o indirecta, en cuanto ha de justificarse por CONVENIO COLECTIVO DE TRABAJO
la necesidad de proteger o preservar no sólo otros
derechos constitucionales, también otros bienes Sobre la vigencia temporal del CCT en la Consti-
constitucionalmente protegidoS>> (Sentencia del tución de 1993, existen dos puntos importantes
08.04.81 del Tribunal Constitucional Español). que deben analizarse: primero, apreciar los alcan-
ces del artículo 62 -que consagra el principio de

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intangibilidad de los contratos- y, segundo, del ar- Debemos advertir que el artículo 62 de la Consti-
tículo 103 -que prohibe la retroactividad de nor- tución de 1993 no recoge el principio de condición
mas laborales-. más beneficiosa. Este principio supone la conser-
vación de un beneficio contractual -originado en
4.1. El artículo 62 y la vigencia del convenio un primer acto no normativo- ante una sucesión
colectivo de trabajo peyorativa, sólo si el segundo acto prevé un bene-
ficio menor al establecido por el primero 41•
El artículo 62 de la Constitución dispone lo si-
guiente: Sobre las consecuencias de la aplicación de esta
norma, hay dos posiciones. Para De la Puente y
«La libertad contractual garantiza que las partes La Valle 42, el artículo 62 de la Constitución «cons-
pueden pactar válidamente según las normas vi- tituye un rezago del liberalismo, incompatible con
gentes al tiempo del contrato. Los términos con- la moderna orientación que reconoce la función
tractuales no pueden ser modificados por leyes u social del contrato».
otras disposiciones de cualquier clase» (el subra-
yado es nuestro). De otro lado, para Olaechea 43, la referida disposi-
ción busca «asegurar la libertad individual» y «es
Tanto en la Comisión de Constitución y de Regla- acertado y debe mantenerse, sino peligra el pro-
mento :r; como en el Plenario del CCD 38 este tema pósito de cambio del régimen económico y social
mereció de encontrados dictámenes y debates -in- del país para darle estabilidad y seguridad nece-
cluso, hubo hasta dos ruedas en la Comisión de sarias (a los contratos)». Esta última posición es
Constitución y de Reglamento- por la admisión o compartida por los economistas Boloña Behr y
no de una intervención estatal en los contratos; fi- González Izquierdo 44 •
nalmente, el artículo fue aprobado en el Plenario
del CCD por 56 votos a favor y 9 en contra 39• Nosotros respaldamos la primera de las posicio-
nes. El artículo 62 representaría un serio retroceso
De acuerdo a lo dispuesto por el artículo constitu- en la evolución jurídica del país. El referido dispo-
cional bajo comentario, los contratos no podrán sitivo «congela» los términos contractuales, desco-
ser modificados por leyes u otras disposiciones de nociendo la realidad económica y social. Todo
cualquier naturaleza. La norma consagra la cono- contrato no sólo está sometido a un orden público
cida teoría de los derechos adquiridos o el princi- al momento de su celebración, sino durante toda
pio de intangibilidad de los contratos que implica, su existencia, más aún teniendo en consideración,
como precisa Herrera Vásquez 40, la «ultraactividad como bien apunta Stiglitz 45, que el orden público
de la norma bajo la cual se configuraron aquéllos varía de acuerdo a las circunstancias que rodean
(los contratos)». Es decir, los derechos y obligacio- determinadas coyunturas.
nes contractuales son inmutables, aun frente a
normas de orden público. Ciertamente, se quiere brindar una seguridad ju-

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rídica a los contratantes pero hay que tener pre- En nuestra opinión, puede construirse una posi-
sente que existe un bien mayor por tutelar: el or- ción que permita «inaplicar» este precepto consti-
den público. La Constitución hace primar el bien tucional a los convenios colectivos de trabajo.
individual sobre el público a tal punto que, aun
cuando se emitiese una ley favorable a los contra- Sin duda, de aplicarse la regla del artículo 62, se
tantes, éstos no podrían incorporarla al contrato transgrediría la autonomía colectiva: el ccr no
celebrado. tendría aplicación inmediata sobre los contratos
individuales -desaparecería el principio de au-
De esta manera, el artículo 62 de la Constitución tomaticidad y la eficacia normativa de] ccr- y se
debería merecer una urgente modificación. El aplicaría sólo a los trabajadores que ingresen du-
equilibrio necesario entre la voluntad individual y rante la vigencia del CCT.
los intereses del Estado y sociedad debe lograrse
a través de una modificación que incluya la suje- La autonomía colectiva se encuentra regulada en
ción de los contratos a las normas de orden públi- . la parte dogmática de la Constitución -donde se
co, tal como lo establecía el tercer párrafo del ar- establecen los derechos de las personas- y, como
tículo 131 de la Constitución de 1979 al precisar lo hemos señalado, tiene el carácter de derecho
que el ejercicio de la libertad de comercio e indus- fundamental En cambio, el artículo 62 está ubica-
tria no podía ser contrario «al interés social ni lesi- do en el Título III (Del Régimen Económico), esto
vo a la moral, la salud o la seguridad pública». es, en la parte orgánica de la Constitución -donde
se detalla la estructura del Estado-. Así, una inter-
¿Se aplica el artículo 62 a la autonomía colectiva? pretación sistemática de la Constitución permite
Para responder esta interrogante, tenemos que di- inferir que hay una distinta regulación y que la
vidir el desarrollo de la respuesta en dos ítems: el disposición no se aplica al CCT 47• El artículo 62 de-
ccr como sujeto -estamos en la consecuencia del bería aplicarse, esencialmente, a los contratos fi-
precepto constitucional, el ccr actúa modifican- nancieros y de inversión extranjera, descartando
do una relación jurídica- y objeto -nos encontra- de sus alcances al CCT.
mos en el supuesto o hipótesis del mandato cons-
titucional, el ccr es modificado por otra norma- De otro lado, no debe dejarse de tener en consi-
de modificación. deración el carácter normativo del ccr, matiz im-
portante que lo distingue de los contratos comu-
El primer supuesto se contrae a lo siguiente: si el nes (actos no normativos); el ccr tiene «fuerza
ccr puede alterar las relaciones contractuales in- vinculante», produce actos normativos. El CCT es
dividuales, esto es, dentro del ámbito de aplica- una norma jurídica y el dispositivo constitucional
ción activa del referido dispositivo constitucional; se aplica a los contratos.
el segundo, comprende el siguiente caso: si el
ccr puede ser modificado por normas heteróno- Además, la autonomía colectiva implica la libertad
mas, es decir, dentro el ámbito de aplicación pasi- que tienen las partes laborales para celebrar, mo-
va del referido artículo de la Carta Magna. dificar o extinguir actos normativos. De un lado,
la Constitución reconoce a las partes laborales
En relación al primer supuesto, creemos que el una plena autonomía colectiva y, de otro, preten-
ccr puede modificar contratos individuales de dería constreñir esta misma autonomía colectiva.
trabajo. Herrera Vásquez y Neves Mujica 46 seña- A nuestro juicio, la autonomía colectiva debe ser
lan que el ccr encajaría en el supuesto estableci- asegurada y fortalecida y, por ello, la aplicación
do por la naturaleza normativa/contractual del del artículo 62 de la Constitución debería descar-
ccr y la fórmula amplia empleada por el precep- tarse. De no ocurrir ello, como acota Neves Muji-
to constitucional ca 48, se vaciaría de contenido a la autonomía colec-
tiva.

THEMIS
228
La labor del Estado es «fomentar» la NEC (así lo Por todo lo expuesto, consideramos que el CCf,
precisan el artículo 28 de la Constitución y el Con- tanto como su jeto y objeto de modificación, no in-
venio de OIT No 98) y, además, «garantizar>> la vi- gresa dentro del ámbito de aplicación del artícu-
gencia de los Derechos Humanos (artículo 44 de lo62
la Constitución). No puede, entonces, aplicarse un
precepto que limite la autonomía colectiva. 4.2 El artículo 103 y la vigencia del
convenio colectivo de trabajo
En conclusión, la autonomía colectiva no se ve
afectada por lo expuesto en el artículo 62 de la El artículo 103 de la Constitución dice que «Nin-
Constitución. Pensamos que los argumentos ex- guna ley tiene efecto retroactivos, salvo en mate-
presados precedentemente pueden ser utilizados ria penal, cuando favorece al reo».
por una jurisprudencia que no asuma una inter-
pretación «simplista», la misma que debe ser crea- Primero veamos el Diario de los Debates del CCD.
tiva y responder a una valoración adecuada de los En la Comisión de Constitución y de Reglamento
bienes constitucionales tutelados. del CCD 50, la aprobación del artículo fue objeto de
encontradas posiciones al tocar los temas de los
En relación al segundo caso -el ccr como objeto derechos laborales y la vigencia de normas en el
de modificación-, consideramos que el ccr, bajo tiempo 51. La discusión se reitera en el Plenario del
los presupuestos reseñados en el numeral 3. pre- eco sin que se logre una modificación, apro-
cedente, puede ser alterado por normas heteróno- bándose -en la Sesión 29 T de 22 de julio de 1993-
mas. El ccr es una norma jurídica, por lo cual, el por 46 votos a favor y 18 en contra 52•
artículo 62 no se podría aplicar a la parte normati-
va del mismo -parte típica del CCf donde el Esta- Hay pues, un giro respecto de la Constitución de
do acostumbra intervenir- por comprender actos 1993: ya no se admite la retroactividad en materia
no normativos, salvo, evidentemente, las partes laboral cuando la ley sea más favorable al trabaja-
contractual y delimitadora. dor.

Empero, hay autores que señalan que, producto La mayor parte de las normas constitucionales de
de la nueva disposición constitucional, ninguna otros países contienen un precepto similar al ar-
ley puede modificar un CCf. En efecto, Rendón tículo 103, incluso la doctrina constitucional de-
Vásquez anota que «ni el Poder Legislativo ni el fiende la excepción penal -si favorece al reo- a la
Poder Ejecutivo están ya facultados para imponer regla de la retroactividad~; sin embargo, nosotros
modificaciones de cualquier clase que fueran» 49• coincidimos con Neves Mujica y Paseo Cosmópo-
En nuestro parecer, el artículo 62 no enerva lapo- lis 54 y concebimos que las normas laborales, cuan-
sibilidad de una intervención estatal sobre el do se declaran como tales, deben ser retroactivas
CCf; claro que, como hemos visto, la intervención si favorecen al trabajador 55•
debe sujetarse a ciertas pautas y requisitos.

THEMIS
229
¿Se aplica este dispositivo al CCT? En nuestra opi- Ciertamente, resulta discutible sostener la consti-
nión, el artículo 103 -ubicado en el Capítulo II (De tucionalidad de la LRCT: si se afirma que la LRCT
la Función Legislativa) del Título IV (De la Estruc- es inconstitucional, al caducar un CC1, cualquiera
tura del Estado)-, sólo rige para las normas de ori- de las partes podría dejar de cumplir las presta-
gen estatal y, consecuentemente, un CCT retroac- ciones contenidas en él, rigiendo en las relaciones
tivo no atentaría con el mandato de este artículo. individuales sólo las leyes imperativas hasta la da-
Por tanto, las partes pueden establecer una vigen- ción de un segundo CCT.
cia retroactiva al CCT sin que ello constituya una
transgresión a la Constitución. No obstante lo expuesto, consideramos que la re-
gla de la Constitución sólo comprende las normas
Ahora, ¿puede alegarse la vigencia del inciso b) heterónomas propiamente dichas y nada obsta
del artículo 43 de la LRCT ~que prescribe la retro- para que éstas dispongan la retroactividad de una
actividad del CCT-, a la luz de la nueva Constitu- norma autónoma: finalmente, es el CCT que se
ción? En otras palabras, la LRCT ¿puede estable- aplica retroactivamente y no la norma estatal.
cer la retroactividad del CCT sin transgredir la
Constitución?

m o~ [e Ll M A :
CIA. CONSTRUCTORA S.A.

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A. MIROQUESADA 260- 3er. Piso. Telf. 4287848


Planta San Juan: Telf. 4676594
Planta Ansieta: Av. Plácido Jiménez 958
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CONCRETO PRE MEZCLADO


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SERVICIO DE BOMBA Carretera Sullana Km. 3 s/n Telf. 328970

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