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La incapacidad para reconocer como válidas ideas de otros, el miedo a ser superado
profesionalmente por un subordinado o la envidia pueden llevar a algunos directivos
o mandos intermedios a eludir su principal responsabilidad, tomar las decisiones
más adecuadas para su empresa, dedicándose a cercenar las iniciativas, aportaciones
e ideas de aquellos que pueden dejarles en evidencia. Es el Síndrome de Procusto,
un nombre de origen mitológico que retrata una figura que suele observarse en
entornos laborales y resulta nefasta para cualquier organización o equipo, incluido
el de Comunicación.
Entonces, había dos posibilidades. Si el viajero era más grande que la cama, Procusto
le cortaba las extremidades que sobresalían (pies, brazos, cabeza…) para que
‘encajase’ exactamente en el lecho.
Si por el contrario era más pequeño, le ‘estiraba’ hasta descoyuntarlo para que se
adaptase a la medida. De hecho, el verdadero nombre del posadero era Damastes.
Procusto era su apodo ya que significa ‘el estirador’.
El Lecho de Procusto:
La literatura universal ha utilizado frecuentemente esta figura desde la antigua
Grecia y muy pronto se aplicó a diferentes entornos como la familia, la empresa, la
política…
Así, cuando alguien quiere que todo se ajuste a lo que dice o piensa, lo que quiere es
que todos se acuesten en el ‘Lecho de Procusto’.
Procustos en la empresa:
Para reconocer mejor la figura del Procusto en una organización, suelo realizar una
distinción entre dos modelos que tienen ligeras diferencias, ‘Conscientes’ e
‘Inconscientes’ de que lo son:
1. Inconscientes de que lo son: Directivos y mandos intermedios que no escuchan
otras opiniones al entender directamente que su idea siempre va a ser la mejor y
son los demás quienes deben adaptarse a ella.
2. Conscientes de que lo son: Directivos y mandos intermedios que reconocen entre
sus subordinados a figuras que pueden hacerles sombra.
Consecuencias:
Inconscientes de que lo son:
Su visión siempre es tan clara que se molestan si se les dice que no tienen razón.
No se ponen en el lugar de los demás, aunque creen que sí lo hacen.
Suelen hablar de tolerancia, multidiversidad, intercambio de ideas… pero cuando
esto se produce no soportan que se den opiniones diferentes a la suya y
encuentran cómo criticar o deslegitimar a esa persona.
Conscientes de que lo son:
Frente a esto, profesionalidad y formación continua son la solución. Ambas son las
que aportan los conocimientos y la visión necesarios para tener la capacidad de
gestionar adecuadamente las virtudes propias y las de los subordinados, y lograr que
todas ellas contribuyan al bien común de la empresa y el equipo.
Conclusión:
El Síndrome de Procusto es un gran mal de muchas empresas y prácticamente todos
hemos visto casos concretos en los que se produce.
Como reflexión final, una frase propia que llevo años utilizando para referirme a este
tema:
“El gran problema de muchas empresas es que tienen empleados en
puestos de responsabilidad que han decidido (consciente o
inconscientemente) que sus obligaciones no son las que les ha asignado
la empresa, sino que su trabajo consiste en mantener su trabajo”.
Enlace: Procusto.
C. Marco
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Procusto: El síndrome del envidioso
El Sindrome de Procusto en entornos TIC
El síndrome de Procusto
Catalina dijo:
15/08/2016 en 10:34 AM
Asi es. Es muy atinada tu observacion. En especial los Psiquiatras no quieren a los
Psicologos, les dicen a los pacientes que prescindan de ellos.
o Davat dijo:
09/08/2016 en 2:25 PM
Exacto, creo que es así porque ven todo desde la patología y no desde la totalidad
de la persona. Saludos!
Responder
o Mari dijo:
16/08/2016 en 2:36 AM
¡Lamentablemente es asi.! Me gusto la frase que dice .La verdad no está de parte de
quien grita más..
Responder
o Eduardo dijo:
19/10/2016 en 12:32 AM
Totalmente de acuerdo, este síndrome solo lleva al conflicto, en todas las facetas de
la vida, pero concretamente en el cuerpo médico, y mucho más en la única
especialidad médica que no tiene ni que “tocar” al paciente para realizar su
diagnostico, osea la psiquiatría, es desde mi modesta opinión donde más estragos
hace.
Felicito a quien ha escrito lo siguiente, ya que demuestra su inteligencia y sobre
todo su manera de enfrentarse al mundo, mucho más si se trata del mundo médico.
“En la ciencia –y por ende en la medicina- no todo está escrito, lo mejor que
podemos hacer los médicos es estar abiertos a posibilidades que no se ajusten a
nuestro “lecho de hierro procustiano”, debemos estar flexibles a cualquier
posibilidad que implique curación para un paciente, y ser científicos de la
evidencia, no de las creencias, pues antes de que tuviéramos la explicación
científica de porqué caen los objetos hacia la tierra, los objetos caían igualmente.
Aún no sabemos con precisión como se originó este universo que vemos, lo que es
cierto, es que estamos dentro de él.”
Responder
Esta precisión me recuerda el libro del médico polaco Ludwik Fleck, “Génesis y
desarrollo de un hecho científico” (1935), recomendable sin reservas para quienes
estén interesados en la cita transcrita.
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 6:57 PM
JBrigitte dijo:
24/07/2016 en 4:47 PM
4. Gustavo dijo:
04/07/2016 en 4:51 PM
“Le hace sobra” ¿De dónde viene la expresión? – Pienso que de la idea de que una
persona más grande o alta que otra, le hace sobra – ¿Será así? por otra parte
¿Algunas perdonas aplicarán actitudes de bajo perfil para evitar el Síndrome de
Procusto?
Responder
“Le hace sombra” se refiere al caso de una persona de menor rango que sabe más o
tiene mejores soluciones y continuamente opaca a su superior en el trabajo y
provoca que se vea gris, no permite que detecten su débil brillo, lo apaga, lo tapa, lo
anula.
Responder
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 6:58 PM
6. E. Rus dijo:
04/07/2016 en 9:22 PM
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 6:59 PM
Si creo que sea aplicable. Tambien existen las consecuencias o patologias generadas
por el SINDROME PROCAUSTO
Responder
o Roberto dijo:
28/08/2016 en 3:55 PM
ghsergio dijo:
19/10/2016 en 5:25 AM
SOCIAL
Responder
8. Mónica dijo:
05/07/2016 en 12:34 AM
o Mj P dijo:
20/08/2016 en 6:58 PM
Totalmente de acuerdo. Y veo muy complicado que situaciones así puedan evitarse.
Se tiene miedo a perder el puesto dectrabajo y creo que a este tipo de empresas les
da exactamente igual. Ven resultados y los aplauden que es lo que alimenta al que
padece el sindrome que yo creo que en el fondo casi siempre es consciente.
Responder
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:01 PM
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:01 PM
o Marijose dijo:
05/07/2016 en 8:47 PM
excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:01 PM
Muy interesante, muy buen artículo. Un sindrome muy propio del hombre
mediocre.
Responder
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:02 PM
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:02 PM
Muchas gracias. Un saludo.
Responder
o Noelia dijo:
21/07/2016 en 5:37 AM
Mari dijo:
16/08/2016 en 2:39 AM
XDDDDD
Salido del manual Lumbreras de la humanidad
:’v
Megaprocusto a la vistaaaaa!!!
Por ahí resopla!!!!
Olga dijo:
04/09/2016 en 4:38 AM
Siiiiiiii jajaja
o Miguel dijo:
24/07/2016 en 8:07 PM
Comienza por quitarte los lentes para ocultar, seguramente, los ojos que son las
ventanas del alma. Y segundo, si no tienes bases o argumentos básicos para opinar
en este u otros asuntos, pierdes una magnífica oportunidad de no ventilar tu
ignorancia.
Responder
Interesante artículo. Generalmente los que actúan así son aquellos dirigentes o
pichones de líderes mediocres, los cuales han alcanzado su nivel de incompetencia
y sienten paso de animal grande de quien o quienes los pueden sustituir o colocar a
un lado.
Responder
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:03 PM
Así es; he padecido ésto en varios centros laborales (Soy académico) y me costó el
trabajo en varios casos. Los mandos de dirección deben someterse a controles y
perfiles psicológicos y observar su nivel de empatía para saber si tienen la
capacidad de dirigir grupos de trabajo, capacidades intelectuales y emocionales que
los haga candidatos para tan delicada labor. Debe resaltarse cuando esos mandos
son mujeres y pretenden cobrarse lo que la sociedad machista les ha hecho en
diversos ámbitos ¿ tiene sentido el revanchismo de género ?
Para tal comentario, recomiendo leer un sabio pensamiento de un autor anónimo
que se titula “¿Eres jefe o líder?”.
Responder
o linda dijo:
07/07/2016 en 3:01 PM
Excelente artículo.
Responder
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:04 PM
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:04 PM
o excelencemanagement dijo:
06/02/2017 en 7:04 PM
Carlos dijo:
06/02/2017 en 7:14 PM
Gracias, muy buen articulo. Personas con este síndrome podrían encontrarse en
cualquier organización, pero no estoy seguro si en todas las culturas. Personas con
este síndrome llevarían al fracaso a los colectivos de trabajo (no leer equipo) y dar
resultados mediocres o pésimos en organizaciones que pretenden mejorar su nivel
de desempeño pensando en clase mundial.
Responder
Hay un libro de Joyce Mac Dougal ella hace del mito, El divan de Procusto, q sería
el intento de el psicoanálisis y la psiquiatría de hacer encajar a lis pacientes en un
cuadro psicopatológico
Responder
Muchas gracias a todos por este buen debate. Entre todos debemos contribuir a
evitar que este síndrome se extienda por nuestras empresas y en general en la
Sociedad. Un saludo a todos y que siga el debate!. Carlos L. Marco. Excellence
Management.
Responder
Excelente..!
Responder
28. Lu dijo:
10/07/2016 en 5:05 PM
Este Síndrome es tan real que se vive a diario en muchos lugares, pero también
podría ser confundido con la competitividad y una no tiene nada que ver con la
otra. Soy subordinada y jefa en diferentes jornadas y me ha permitido tener una
panorámica de ambas perspectivas. Pero nadie es sabio de su propia oponión debe
prevalecer el respeto ante todo de manera ascendente o descente en la piramide
jerarquíca.
Responder
o iDavilag dijo:
09/08/2016 en 4:22 PM
Muy buena pregunta Enrique, por lo pronto se me ocurre que una gran mayoría
llega a cargos directivos precisamente aprovechándose de los demás, de sus ideas o
propuestas, manipulándolos con falsas promesas, etc… y claro también esta el
nepotismo…
Responder
Intersante, pero algo dificil que nosotros mismos queramos reconocer ser Procusto,
siempre estaremos buscandolo entre los demas.
Responder
33. Bea dijo:
12/07/2016 en 3:35 PM
Muy buena reflexión, pero yo pienso que todos sin excepción llevamos un Procusto
dentro pronto para aflorar en cualquier momento, lo bueno sería poder reconocerlo
y tratar de luchar contra el
Responder
Muy buena reflexión, mi opinión es que todos sin excepción llevamos un Procusto
dentro pronto para aflorar en cualquier momento de la vida, ideal sería poder
reconocerlo para poder derribarlo
Responder
Definitivamente, pienso que este síndrome es el que aqueja a todo México, y lo digo
sin el afán de molestar, porque veo que todos tratamos de ajustar las situaciones a
los modelos de administración en lugar de situarnos en el lugar del usuario,
paciente, cliente o ciudadano para determinar sus necesidades y resolverlas, lo que
considero seriamente mientras no se resuelva, que esto no nos va a permitir llegar a
ser un país del primer mundo !!!
Responder
o ricardo dijo:
19/07/2016 en 1:28 AM
Carlos.
Responder
o cnielsen56 dijo:
19/10/2016 en 7:56 PM
Carlos:
¿Tienes una versión en inglés? Me gustaría compartirlo con amigos en EEUU. Si no
la hay, ¿me das permiso para traducirlo, al menos en parte?
Responder
excelencemanagement dijo:
19/10/2016 en 8:45 PM
este sindrome no solo se da en empresas sino en todos los ambitos, como en una
familia por ejemplo, lamentable por todo lo que pueden hacer juntos en el caso de
que dejen hacer y ser a la persona que en este caso caso tiene mas recursos para
sobresalir, en este caso suelen perder todos.
Responder
y este sindrome no solo se da en empresas, sino suele darse en todos los ambitos
imagiables de la vida asi como en una familia, porque muchas veces que hacemos
con un ser que no queremos y que de repente tiene mas recursos y tiene mas para
hacer y para dar en la vida, y no lo dejamos hacer ni ser, pues sencillamente
pierden todos los que cortaron sueños y cortaron vidas, por lo que pudieron hacer
sin cortar vidas, sin cortar ilusiones, sin cortar sueños…
Responder
Hace muchos años propuse que este mal se denomine Hipersimiofobia. Que se
define como el temor de algunas personas a que exista un Simio mas grande que el
mismo, o sea mas inteligente.
Responder
Habremos caído en este síndrome o también en uno más simple que se denomina
el sindrome de la chimultrufia “como digo una cosa, digo la otra”, cuyo máximo
exponente es el nopalote de Fox.
Responder
Excelente!gracias!!
Responder
Oué bueno sería volver a enseñar Filososfía en la secundaria para que nos diéramos
cuenta de que estos temas perduran en la naturaleza humana y nos sirviera para no
caer en una u otra de las situaciones que describe la mitología griega.
Responder
Siento que este síndrome de Procusto , va muy ligado al síndrome de Narciso. Creo
que todos los narcisistas son un procusto en potencia. Ya que los Narciso, aparte de
creerse hermosos y perfectos, puntuales, elegantes, leales, y creedores de poseer un
sinfin de virtudes. Obviamente se creen sabios por sobre todas las cosas. Ojo con el
Narciso Maligno.
Responder
Excelente tema.!! viví las consecuencias de este síndrome hace poco y ahora que lo
leo y lo conozco pues, todo tiene sentido.!!
Responder
Qué pena no haber conocido este mito y su interpretación antes!!! Soy profesora y
lo padecí en cada ámbito de trabajo en el que el sistema nivela para abajo. En el
último, “el corte de cabeza” fue una situación de estres sostenida que me generó la
invalidez laboral. La tristeza es infinita. Este artículo DEBE difundirse para que
todos tengan conocimiento. Gracias por publicarlo!!!
Responder
Excelente, muy Bueno! Gracias Diego. Siento y veo identificacion personal sobre
este tema. Más que todo sobre el sentir presión de personas que no pueden
manejar su Precursor interno.
En lo personal creo que tengo o puedo captar en algunas personas un poco del
precursor que se tiene adentro de uno!
Alguna forma de evitar el precursor que se lleva adentro, podría ser manejar los
juicios que uno hace?
Yo en algunos casos soy de pensar que todo lo que hago va a ser lo mejor, pero
cuando escucho a los demás hacepto sus opiniones y pruebo, de ese modo se corta
el precursor que nace dentro.
Hay doscientos mil nombres para nombrar el mismo concepto, un autor lo llama el
síndrome MIA, mediocre inoperante activo, que es aquel, bastante inútil por cierto,
que cuando alguien sobresale, lo ve como una amenaza e intenta tratarlo como con
poco valor, por mil formas. Esto forma parte de la vida y no se puede eliminar. Es
digamos como el cáncer, que tenemos que aprender a convivir con él, siempre está
cerca, en nosotros o en familiares o amigos. Dicho esto, lo importante es detectar a
esos sujetos, que nos los encontramos, en todas las empresas, grandes o pequeñas,
hospitales, administraciones, en todos los sitios, hasta en grupos de amigos o en la
familia. En general son gente con el EGO enfermo y hay que tomar precauciones.
Nunca nunca enseñar la oreja, aquel se dirige a ti, diciendote que te ve a ayudar en
todo lo que te haga falta, que le preguntes ese es tu acosador futuro, falso amigo,. Si
notas que te hacen vacio, algo pasa, seguro que hay alguien atacandote por detrás,
serás el último en enterarte y no intentes hacer cosas para caer biern, es inútil,
simplemente alejate, trabajo trabajo casa y tus amigos. Los compañeros de trabajo
no son tus amigos. Si vas a una fiesta o cena de trabajo, no cuentes tu vida y
procura no beber, se bebe con amigos y ellos no lo son. cenas y te marchas. Y no te
preocupes si te sientes inútil, en esos ambientes por el estrés que producen el
rendimiento baja una barbaridad. Y finalmente, si puedes largate pero no intentes
nunca nunca pensar que eso pasará, en el sentido de que algo no estas haciendo
bien, como con sentimiento de culpa y con el tiempo todo ira a mejor. No pasa.
Responder
Muy bueno….
Responder
Eso es realidad. Creo que el ser humano se transforma en Procusto cuando llega a
la adolescencia, consciente o inconscientemente. Porque supuestamente nacemos
puros. Pero la mala semilla que traemos en algun gen, se manifiesta y seguira
sucediendo. Que lastima.
Responder
Excellent! Esuna realidad..y una traba para quienes pretendemos aportar en las
organizaciones!!
Responder
Simplente cierto!!
Responder
Fui víctima de ello después de dedicarle 26 años a una empresa. Triste pero Real y
aún se acentúa más si eres más joven y del seco opuesto a tus superiores. Poco
inteligentes por su parte.
Responder
Todo depende del efecto “Bidet” que haya en la empresa..los empleados son, como
son los dueños. Empleador perverso, empleado perverso, “el agua y el aceite no se
mezclan”
Responder
Muy interesante
Responder
Excelente nota
Responder
Excelente articulo!!! conozco personas así, quieren ser jefes mostrando que son
únicos y tienen la verdad absoluta sobre el trabajo y solo denotan su falta de
imaginación y de creatividad. ademas faltan el respeto al personal y logran sacar a
la luz su miedo a ser destituidos. se enfocan en una sola cosa, no saben delegar, no
pueden ver el bosque porque están aferrados al árbol…
Responder
98. Pingback: Síndrome de Procusto: Prescindir de quien sobresale – Oussama Saadoune
Existe en todos los ambitos de la vida, es una cuestión que depende de la condición
humana. En los politicos, en la administración, en las empresa… en la vida social
en general.
Responder
Existe en todos los ambitos de la vida, es una cuestión de condición humana. Los
militares, los funcionarios, maestros, sanitarios…empresas privadas y, como no, en
la vida social y escolar, ya de pequeños..
Responder
o Dannet dijo:
07/11/2016 en 5:55 AM
Me gusto mucho leer sobre este síndrome porque puedo relacionarlo con muchas
de las vivencias diarias de las personas, del idividuo como tal, que de forma
equivoca quieren alcanzar metas o propósitos pisoteando a los otros, también
porque ya con esta lectura conociendo con detalle el tema puedo hablar del el y
compartirlos con mis amigos.
Responder
o excelencemanagement dijo:
09/02/2017 en 12:50 PM
Excelente, gracias por compartir, ahora entiendo algunas cosas que sucedieron y
Responder