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Reporte Crítico #2

Lectura crítica y expresión escrita, s. 2

Karina Martínez

“Aporofobia, el rechazo al pobre. Un desafío a la democracia” (Adela Cortina), “La falacia


de los migrante buenos y malos” (Carol Chan)

La aporofobia la podemos entender como el rechazo al pobre, al rechazo de las personas


desamparadas, este rechazo es un problema social que esta intrínseco dentro de la humanidad,
esta nueva palabra es centrada en los países y sociedades desarrolladas, esta fobia se puede
comparar con otras semejantes como por ejemplo la xenofobia y el racismo. La aporofobia
no indica un rechazo hacia el extranjero o inmigrante en sí, depende de que como llegue y de
donde llegue esa persona, y cuál es su posición económica, y esto es mucho mas común de
lo que podría ser la xenofobia, el racismo u otro tipo de rechazo.

Vivimos en un mundo globalizado, en donde la migración es cada vez más común, por lo
tanto, el trato que se le da a las personas es muy distinto ¿Por qué se da esta distinción hacia
las personas? Primero que todo las personas se fijan en el aspecto físico del migrante, si es
de tez blanca, alto, rubio, se le va a recibir de mejor manera que una persona baja, de tez
morena, pelo oscuro, que vienen de países en conflicto y buscan un mejor pasar en otro país.

El discurso que hacen los políticos sobre la migración de los refugiados políticos,
inmigrantes, tiene un sútil velo de mentiras y estigmatización hacia este tipo de personas, es
en donde la gente cree ciegamente en los que dicen, ya que no tienen idea de lo que pasa y
actúan deliberadamente, por ejemplo, podemos usar el discurso de Donald Trump, de
levantar un muro para que no entren mexicanos, estigmatizando a todos los latinos de que
son drogadictos y delincuentes, eso hace que se genere más rechazo, más desigualdad. Pasa
lo mismo con las personas de color, se genera mucha segregación, estas personas han sufrido
una constante hostilidad por parte de las personas que se creen superiores, para ellos las

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personas de color siempre se va a asociar a pobreza y delincuencia, y ha costado mucho que
se quite esa estigmatización hacia estas personas.

Los políticos ven a quién dirigir su “odio” y a quien dirigir su agrado, y eso cuenta en como
el extranjero aporta en la construcción del país, podemos decir que es una relación de dar y
recibir, mientras el extranjero que llegue aporte en la construcción económica del país es
bienvenido, de no ser así se le culpará de ser una paria del gobierno y se le echará la culpa de
todo lo que suceda en el país en el que residen, tomemos el ejemplo de Chile “ Diferenciar
migrantes buenos y malos en su función de su aporte económico y usarlo como argumento
para restringir el ingreso al país, es sólo una forma más del racismo y xenofobia que se ha
venido instalando en Chile” (Chan, 2018).

Es así como lo plantea Carol Chan en su columna de opinión, los migrantes buenos y malos,
en donde ellos como minoría de población son muy endebles, por lo que su “posición” puede
ser cambiada muy rápido y la idea se propaga para el beneficio de los políticos. El discurso
y la manipulación de los medios de comunicación han generado concepciones erróneas en la
población, podemos tomar como ejemplo la noticia de la joven haitiana que le robaron los
documentos y tuvo que dejar a su bebé para ir en busca de la persona que se los robó, en
consecuencia, ella fue apresada y su bebé lo dejaron a cargo del Sename, llevando a la muerte
de la joven por la desesperación de no poder comunicarse y el no tener a su bebé a su lado
¿Qué pasó? Los medios de comunicación resaltaban el hecho de que era haitiana mas que el
delito, ¿Por qué resaltar su nacionalidad?

Es mejor poder echarle la culpa de las problemáticas políticas, sociales y económicas a las
personas migrantes, como, por ejemplo, de que las personas migrantes están quitando los
empleos, antes de que el mismo gobierno se de cuenta de que esas problemáticas pudieron
estar mucho antes de que la explosión migratoria tuviera su apogeo.

Como se dijo anteriormente estamos en un mundo globalizado, en donde supuestamente las


desigualdades deberían estar erradicadas o mejor dicho deberían ser más estrechas, pero está
sucediendo lo contrario, las desigualdades están incrementando, y esto es algo que los
gobiernos deben erradicar quizá no de forma inmediata pero que demuestre que esa brecha
de desigualdad va decreciendo, las primeras políticas serían políticas antipobreza, pero no la
solución.

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La educación es sumamente es importante también, para que no se genere un rechazo al
migrante, esta educación puede abarcar la familia, la escuela, también la relación de la
sociedad con respecto al tema, para que se formen ciudadanos responsables, compasivos, que
sepan ponerse en los zapatos del otro, que la persona no niegue la dignidad del otro para que
así no se genere un doble discurso.

Bibliografía
Cortina, A. (2017). Aporofobia, el rechazo al pobre: un desafío para la democracia.
Barcelona: Paidós.
Chan, Carol (24 de enero de 2018). La falacia de los migrantes “buenos” y “malos”. En El
Mostrador. Obtenido de El Mostrador
http://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2018/01/24/la-falacia-de-los-migrantes-buenos-
y-malos/

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