Vous êtes sur la page 1sur 4

Recensiones

la familia como taller primordial de la cultura, al verdad tras el lavado y eliminación de toneladas
ser ésta la única institución heredada del animal. de escombros.
aunque la sociabilidad que nos caracteriza como
especie tiene como base la plasticidad generalizada Octavio BaRRIUSO VaReLa
de nuestros instintos, Malinowski afirma que es
imposible cualquier forma familiar sin la prohibi-
ción del incesto, ya que éste comprometería todas FOUCaULt, Michel: De gouvernement des vivants.
las distinciones de edad y rango existentes. Si las Cours au Collège de France, 1979-1980. París:
relaciones incestuosas estuvieran permitidas, las Seuil/ gallimard, 2012, 400 págs.
generaciones se yuxtapondrían y ciertos sentimien-
tos como la autoridad y la benevolencia paternas, Si en los años setenta habitabas en París, luego
costosamente construidos en el seno familiar se de caminar muy temprano por el Barrio Latino
desorganizarían, haciendo imposible la garantía había que bajar por el Boulevard de Saint-Michel
del desarrollo infantil y la instrucción cultural de hacia la Rué des Écoles, seguir de largo en el cruce
los nuevos miembros sociales. La represión es de Saint-germain-des-Près con su bella Facultad
consecuencia de la cultura y no al contrario, ya que de Medicina y la escultura de Marat en dirección
toda sociedad requiere para perpetuarse el respeto al Sena; obligado era dar un vistazo a los jardines
estricto a determinadas reglas de parentesco y a los medievales y, mucho antes de llegar a sus homó-
roles sociales que éstas comportan. nimos de Luxembourg, dar vuelta hacia la iz-
Por último, el autor alude al hecho de que la ins- quierda. Veías –de reojo, no hay tiempo– a la
titución del derecho materno es sin duda preferi- imponente Sorbonne, blanca y orgullosa, mostrán-
ble, al evitar la raíz de los conflictos sexuales de dote su costado con un dejo de reproche ¡No es
nuestra sociedad, que son producto del papel am- para menos! te diriges a la esquina de Saint-Jac-
bivalente del padre. No obstante, la prohibición del ques, donde se encuentra esa otra institución de
incesto ha sido fruto de la cultura, y todas las so- educación superior; la única que le hace sombra y
ciedades deben protegerse de él mediante el cum- con la que compite sempiternamente. atraviesas a
plimiento de una de las prescripciones más toda velocidad un arco pronunciado; es la entrada
importantes y universales. Incluso bajo el derecho del Collège de France. encuentras un auditorio
materno, el incesto y su deseo son complicaciones abarrotado, ¡hay gente en las ventanas! entras sin
y tormentos que sufren los seres humanos durante más. Las palabras y las horas se suceden mientras
toda su vida, tal como el psicoanálisis se ha encar- el ciclo lectivo comienza. el orador se desplaza su-
gado de mostrar. brepticiamente entre diversas edades y temáticas;
La relación tan conflictiva que observa Mali- con gran talento realiza cortes transversales en la
nowski hacia los planteamientos, tesis y métodos historia. Sesión a sesión, mes con mes, la exposi-
de la escuela psicoanalítica hacen del libro una au- ción avanza. el filósofo muestra a los auditeurs la
téntica gigantomaquia. Por desgracia para Freud, constitución de lo que llama nuestros “sistemas de
el avance de una disciplina nunca se basa única- pensamiento”: se trata de Michel Foucault dic-
mente en el progreso sobre una sola línea de in- tando su cátedra; ensayando uno de esos actos fi-
vestigación, ya que a menudo las semillas losóficos, como dirían ewald y Fontana, con los
esparcidas caen en suelo estéril y jamás darán sus cuales ataja la actualidad y exhibe la problemati-
frutos, al haberse adentrado en el terreno de la pura cidad inherente a nuestro ser.
especulación. Para un estudio o escuela de pensa- Sin duda, la reciente publicación de la ense-
miento es necesario a menudo dar marcha atrás al ñanza oral de Foucault es un acontecimiento filo-
haber topado con afirmaciones insostenibles. Ma- sófico de tanta importancia como, en su momento,
linowski, en cambio, tuvo la suerte de verse ayu- la asistencia a esas sesiones de verdadera investi-
dado por una teoría fructífera que necesitaba, no gación universitaria. es bien sabido que el francés
obstante, ser rectificada de inmediato. Con el in- no sólo era hábil en hacer proliferar sus prácticas
estimable apoyo del psicoanálisis, y sólo después discursivas, sino también en profundizarlas al
de un arduo trabajo de campo, el antropólogo ter- grado de imprimir a cada uno de sus actos un estilo
minó por descubrir unas cuantas pepitas de dorada singular. así, sus conferencias de prensa se carac-

235 Anales del Seminario de Historia de la Filosofía


Vol. 31 Núm. 1 (2014): 219-253
Recensiones

terizaban por intercambiar los lugares de la enun- cault se ocupó de la Voluntad de saber occidental,
ciación lanzando preguntas a los periodistas o des- y de cómo el problema de la verdad se encontraba
plegando certeros análisis sobre la condición de presente en el pensamiento griego de la tragedia;
los castigos penitenciarios; mientras las charlas ra- su lectura y conferencias franco-brasileñas sobre
diales evocaban con placer las heterotopías distan- el edipo de Sófocles giraron sobre la figura del ti-
tes y chinescas de la infancia y la muerte, o del rano como sujeto de un saber, sujeto de una trans-
cuerpo utópico como experiencia propia. algún formación en virtud de un saber, que lo enfrentaba
día habría que leer la filosofía de Foucault desde con el psicoanálisis y la estructuración incons-
sus actos de habla, o, mejor, desde su pragmática ciente de lo edípico. Por otra parte, el filósofo
discursiva. siempre mostró interés en estudiar los rituales so-
Dentro de esta ingente producción los cursos ciales, las prácticas reguladas mediante las cuales
lectivos ameritan mención aparte: constituyen una la verdad y el saber se producen como muchas
traza analítica sólida que bien podría conformar un otras cosas en la sociedad: sus conferencias con el
corpus independiente en el pensamiento foucaul- grupo italiano de la antipsiquiatría, así como sus
tiano; de no ser porque a diferencia de sus libros análisis arqueológicos de la práctica médica y del
se trata de documentos sin finalizar y porque su viejo derecho alemán así lo constatan. De tal modo
enseñanza siempre estuvo abierta a recapitulacio- que Du gouvernement des vivants prolonga estas
nes, reelaboraciones, correcciones, en fin, vueltas preocupaciones latentes en el pensamiento de Fou-
constantes sobre inagotables pistas que muestran cault al mismo tiempo que contribuye innovado-
el alto grado de sistematicidad de su reflexión. La ramente en la incursión de las relaciones entre el
enseñanza de Foucault nunca fue normativa. Sus sujeto, el gobierno y la verdad.
métodos, dominios y objetos nunca constituían la el estudio inicia con un análisis de la dramatur-
última palabra; sus lecciones no eran ley. Junto al gia de la verdad elaborada por un emperador ro-
intelectual específico, el estudioso de lo anormal, mano (Séptimo Severo) que mandó a construir un
el arqueólogo del saber o el militante comprome- palacio en cuyos techos podía apreciarse la pintura
tido, el profesor universitario se volcaba a la tarea de la constelación y la posición de las estrellas de
de saber cómo nuestro ser ha podido y ha debido su nacimiento, éstas mostrarían que su relación
constituirse como un problema. Podría decirse que con sus gobernados no obedece a las disputas fac-
los cursos de Foucault que van de 1977 a 1984 ciosas del mundo humano sino a la necesidad
deben ser leídos como un conjunto coherente y sis- misma de las cosas. Práctica semioriental de las
temático de investigaciones sobre las artes del go- satrapías persas, derroche antieconómico de fasto,
bierno, una cuestión que ayudaría de manera todo ello apunta hacia la necesidad, dentro de las
determinante a complejizar la imagen del pensa- relaciones de gobierno, de una aleturgia –palabra
dor. en Du gouvernment des vivant, cuya edición confeccionada por Foucault para valerse de la ale-
y glosa sobre la Situación del curso corre a cargo thurges de Dion Casio–, vale decir, de todo un
de Michel Senellart, se ensaya un nuevo enfoque conjunto de procedimientos y rituales en los que
del problema de la gubernamentalidad. Si en los la verdad se manifiesta, en los que la verdad se
cursos de 1977-1978 se elaboraba una genealogía opone al error, a lo escondido, lo invisible, al ol-
del biopoder a partir del dispositivo de seguridad vido y brilla de manera pública. Foucault entonces
elaborado en europa a finales del siglo XVII, y en muestra interés en estudiar la aleturgia como una
el curso posterior de 1978-1979, bajo el título de práctica de gobierno. Con ello desplaza varios
Naissance de la biopolitique, Foucault sostenía temas con los que se lo vinculaba: en lugar de es-
que el liberalismo clásico y el nuevo liberalismo tudiar las relaciones saber-poder se trata de anali-
alemán y norteamericano pueden ser entendidos zar el régimen de verdad que caracteriza a cada
dentro de la genealogía de las artes del gobierno, sociedad, en vez de describir a los discursos ver-
en este curso apreciamos un nuevo campo de es- daderos desde la lógica interna de su validez y
tudio en torno al problema de cómo el gobierno de constatación se trata de analizar la producción de
los hombres precisa de la verdad para poder con- enunciados dentro de prácticas muy específicas de
ducir las acciones humanas. Habría que acotar lo gobierno de los hombres, y en lugar, por último,
anterior. es cierto que desde muy temprano Fou- de declarar la muerte del sujeto se trata de mostrar

Anales del Seminario de Historia de la Filosofía 236


Vol. 31 Núm. 1 (2014): 219-253
Recensiones

qué operaciones han hecho posible el assujettisse- genérica a la autoridad de las Musas sobre el poeta.
ment de los individuos a una relación de gobierno. a partir de esta idea de que el “yo” debe estar
Hablar de un régimen de verdad, como se habla de implicado en el descubrimiento de una verdad que
un régimen económico o político, permite vincular ha de establecerse como una relación de sí sobre
el saber con el poder de una manera distinta a la sí mismo, Foucault estudiará al cristianismo;
relación de utilidad o requerimientos tácitos de una menos como un conjunto doctrinal que a través de
administración centralizada que fiscaliza bienes y su régimen de verdad. en los textos fundacionales
conductas de la ciudadanía. Foucault muestra a lo de los padres de la Iglesia, el filósofo identifica
largo de este y otros cursos que el poder no debe una serie de prácticas encaminadas a la conduc-
pensarse como guerra sino como gobierno, si bien ción de las almas. Si en Sófocles el arte máximo
esta tesis es la menos conocida. así el curso de consistía en gobernar a las ciudades, a partir del
1979-1980 sigue dos ejes principales: toda la pri- cristianismo primitivo consistirá en transformar al
mera parte del curso está abocada a un análisis de sujeto a partir de su encuentro con la verdad. Fou-
la aleturgia tal como aparece en Edipo rey de Só- cault atiende a varias prácticas como el bautismo
focles, análisis que aporta nuevos elementos den- (que reproduce una escena parecida a la de los
tro de la lectura foucaultiana de la tragedia griega exorcistas que atacan al enemigo interno), las pe-
y del pensamiento político griego; mientras que la nitencias (en los cristianos que abandonaron la fe
segunda parte muestra cómo el cristianismo pri- en el momento de las persecuciones romanas,
mitivo desarrolla todo un arte de la conducción de quienes, para volver a la comunidad, debían pro-
las almas. tagonizar una escena suplicante), y por último la
en el caso de la tragedia edípica, Foucault in- confesión para la cual no se monta todavía el tin-
siste en que toda tragedia en la grecia clásica es glado que separa individualmente a los dos actores
en el fondo una aleturgia, una puesta en escena de de esta escena sino que se ejecuta en cierta medida
la verdad. Pero esto es lo relevante: se trata de una de manera pública, a los ojos de la comunidad, en
manifestación y no de una demostración, dos actos prácticas monásticas que tienden a conformar una
discursivos que pertenecen a regímenes de veri- conducción permanente. a diferencia de la con-
dicción distintos. Podría decirse que la demostra- ducción helenística de los estoicos, la cual se man-
ción científica o teórica es sólo un caso entre otros tenía mientras el alumno o discípulo era capaz de
de aleturgia. en este orden de ideas, Foucault ar- ser autónomo, el cristianismo primitivo tiende a
gumenta que en edipo se desarrollan dos tipos de hacer del ejercicio de la conducción una práctica
aleturgia distinto: el de los dioses que comandan de la docilidad sempiterna, una práctica en la cual
el destino del hombre, un destino oculto para los quien es conducido somete voluntariamente sus
mortales, y la aleturgia de los sirvientes, de quie- pensamientos a quienes conducen. De igual forma,
nes obedecen al tirano; de igual manera se muestra quienes conducen, a diferencia del estoicismo, no
que el pensamiento político griego se relacionaba son sabios y con frecuencia no desarrollan un co-
con el fenómeno de la tiranía con tanta ambigüe- nocimiento teórico disciplinar significativo, son
dad como el pensamiento moderno con los fenó- personas sin formación fundamentalmente, por lo
menos de la revolución, pues tirano era quien cual la conducción cristiana no requiere de una es-
gobernaba con su voluntad en lugar de con leyes. pecialización como la vida de autogobierno del
en cierta medida, al igual que Hannah arendt, sabio que cuida de sí. en líneas generales, éste
Foucault indicaría que el valor del pensamiento curso de Foucault aporta elementos para volver a
político moderno debe medirse en relación con el reflexionar la problematización del poder y la re-
tesoro de las revoluciones. Pero además de estas lación entre sujeto y verdad. Sin duda, el hecho de
dos prácticas aletúrgicas distintas el filósofo iden- que el sujeto deba decir la verdad sobre sí mismo
tifica un cambio histórico peculiar: la aparición del es un elemento constitutivo de nuestra cultura, en
“yo”, de la primera persona del singular, dentro de gran medida atribuido al cristianismo, aunque
los procedimientos de descubrimiento de la ver- Foucault, en contra de Nietzsche, argumentará que
dad; esto es peculiar, toda vez que en la grecia clá- el cristianismo no introdujo la noción de pecado
sica la verdad no dependía del “yo” para ser en un mundo de inocencia pagana, sino que, por
enunciada, así lo muestran la épica y su apelación el contrario, el mundo griego conocía muy bien la

237 Anales del Seminario de Historia de la Filosofía


Vol. 31 Núm. 1 (2014): 219-253
Recensiones

falta y la necesidad de resarcirla. entonces, ¿qué nera que ni siquiera las guerras confesionales que
cambia el cristianismo? en gran medida el cristia- lo precedían tendrían comparación con la conmo-
nismo refuncionaliza viejos rituales de penitencia ción que las nuevas ideas radicales causarían a par-
pagana: escenas públicas de suplicantes, una co- tir de la constitución del grupo holandés alrededor
dificación ritual del llanto, etc.; pero lo que intro- de Van den enden y del propio Spinoza.
duce es la práctica permanente de conducción La obra está dividida en cinco grandes partes en
como un gobierno de las almas, dentro de una gu- las cuales se exponen las principales características
bernamentalidad pastoral que vigila a todo el re- del nuevo tiempo en relación con el anterior y el
baño y al mismo tiempo desarrolla un saber papel de la censura, las bibliotecas y las publica-
individualizado de cada uno. Michel Foucault con- ciones de la alta Ilustración (primera parte), la fi-
tinuará con su estudio de las relaciones entre el su- losofía de Spinoza y el círculo en el cual tuvo su
jeto y la verdad dentro de las técnicas de gobierno origen y sus primeros receptores (segunda parte),
en su curso Mal faire, dire vrai en la Universidad las nuevas controversias intelectuales que surgie-
de Lovaina. ron a partir de los mismos, centradas principal-
mente en la discusión de aspectos centrales de la
Donovan HeRNaNDeZ CaSteLLaNOS autoridad, la fe y la tradición (parte tercera) y, fi-
nalmente, la contraofensiva intelectual y el pro-
greso clandestino que hubo en los distintos países
ISRaeL, Jonathan: La ilustración radical. La filo- europeos, principalmente en Inglaterra, Francia,
sofía y la construcción de la modernidad 1650- alemania e Italia (cuarta y quinta partes). en ellas,
1750. México: Fondo de Cultura económica, Israel da cuenta de su titánica tarea de investiga-
2012, 1004 págs. ción de fuentes y de rastreo, por toda europa, de
los itinerarios de un gran número de pensadores,
La famosa primera parte de la trilogía sobre la obras e ideas, que le confieren a la obra su carácter
ilustración radical de Jonathan I. Israel ha sido tra- monumental y la convierten no sólo en un libro de
ducida recientemente al castellano por Fondo de consulta, sino también en una referencia indispen-
Cultura económica. este enciclopédico primer vo- sable para quien quiera estudiar el periodo aquí de-
lumen de más de mil páginas sienta las bases de nominado de la alta Ilustración (1650-1750). Por
una novedosa y controvertida concepción del pe- otro lado, el epílogo se hace cargo, aunque breve-
ríodo ilustrado que se basa en la reivindicación de mente y centrándose en los aspectos ideológicos
la vital importancia de la llamada ilustración radi- más generales, de la continuidad del ideario de este
cal, conjunto de ideas, obras y pensadores hasta periodo y el de la Revolución Francesa. es intere-
ahora considerados secundarios, que se infiltran en sante resaltar aquí la especial utilidad que pueden
todas las capas de la sociedad y que tienen como tener para quien se sienta interesado por lo estu-
punto de fuga de la figura de Spinoza. Como es- diado en esta obra la nada despreciable informa-
queleto de la obra sobre el que se superponen e im- ción acerca de las traducciones, ediciones y
brican la gran diversidad de corrientes métodos de edición, bibliotecas, panfletos, delibe-
intelectuales que Israel estudia se halla una tripar- radas sentencias y diccionarios que aquí se ofrece.
tición básica: los llamados conservadores de la fe el llamado periodo ilustrado ha sido objeto de
y la tradición, la ilustración moderada (neocarte- numerosos y relevantes estudios y reflexiones, si
sianismo, leibnizismo-wolffismo y newtonismo) y bien la tesis del autor es que ninguno de ellos se
la radical, coincidiendo las dos primeras, a pesar ha hecho cargo del mismo de manera global (es re-
de su oposición, en la exigencia de la censura y di- levante aquí que, explícita y brevemente, discuta
solución de toda expresión de lo que pueda consi- únicamente con el estudio clásico de P. Hazard,
derarse el ala radical de la misma. Spinoza se sosteniendo que cifra el comienzo de la crisis de
erige, así, como un gigante cuya sombra se pro- la conciencia europea demasiado tardíamente, en
yecta por toda la europa en la segunda mitad del 1680). Contra esto, Israel toma su método inter-
XVII, y que sintetiza los aspectos más genuinos pretativo como esencialmente novedoso, ya que
de la ruptura con todo lo anterior que supone el busca estudiar la Ilustración como un todo por
movimiento que da título a este libro, de tal ma- medio de un análisis general y a gran escala, todo

Anales del Seminario de Historia de la Filosofía 238


Vol. 31 Núm. 1 (2014): 219-253

Vous aimerez peut-être aussi