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LA EMPRESA

CONCEPTO DE EMPRESA.
La empresa es un sistema en el que se coordinan factores de producción,
financiación y marketing para obtener sus fines. De esta definición se
deducen las principales características de toda empresa:
1. La empresa es un conjunto de factores de producción,
entendiendo como tales los elementos necesarios para producir
(bienes naturales o semielaborados, factor trabajo, maquinaria y
otros bienes de capital); factores mercadotécnicos, pues los
productos no se venden por sí mismos, y factores financieros,
pues, para realizar las otras tareas, es preciso efectuar inversiones
y éstas han de ser financiadas de algún modo.

2. Toda empresa tiene fines u objetivos, que constituyen la propia


razón de su existencia.

3. Los distintos factores que integran la empresa se encuentran


coordinados para alcanzar sus fines. Sin esa coordinación la
empresa no existiría; se trataría de un grupo de elementos sin
conexión entre sí y, por tanto, incapaces de alcanzar objetivo
alguno. Esa coordinación hacia un fin la realiza otro factor
empresarial que es la administración o dirección de la empresa. El
factor directivo planifica la consecución de los objetivos, organiza
los factores, se encarga de que las decisiones se ejecuten y
controla las posibles desviaciones entre los resultados obtenidos
y los deseados.

4. La empresa es un sistema. Un sistema es un conjunto de


elementos o subsistemas, interrelacionados entre sí y con el
sistema global, que trata de alcanzar ciertos objetivos. Por
consiguiente, de lo reseñado anteriormente se deduce la evidencia
de que la empresa es un sistema.
CLASES DE EMPRESAS
Existen una gran multitud de empresas y aunque comparten todas ellas
los rasgos generales que hemos utilizado para definir el concepto de
empresa, sin embargo unas son muy diferentes de otras. Así, no es lo
mismo la farmacia de nuestro barrio que Telefónica o el Corte Inglés.
Puesto que las diferencias son tan grandes, es difícil establecer un sólo
criterio de clasificación, y por ello se utilizan varios. Entre ellos
destacaremos:
1. Según la naturaleza de la actividad económica que desarrolla se
dividen en:
 Empresas del sector primario: como las agrícolas,
ganaderas y pesqueras. Estas tratan de situar los recursos
de la naturaleza en disposición de ser utilizados. De este
tipo de empresas se excluyen las mineras.
 Empresas del sector secundario o transformadores,
desarrollar una actividad productiva en sentido estricto, es
decir existe una transformación de inputs en outputs.
Agrupa a las empresas en mineras, industriales y de
construcción.
 Empresas del sector terciario, constituye el colectivo más
heterogéneo, comprende actividades tan diversas como:
lavanderías, tintorerías, peluquerías, reparaciones,
empresas de transporte, empresas de comunicaciones,
empresas comerciales, empresas de hostelería, turismo y
espectáculos, financieras, información y medios de
comunicación social, asesoramiento y de asistencia
especializada y profesional, empresas hospitalarias y de
servicios sanitarios, enseñanza etc.
2. Según su dimensión o tamaño, se distingue tradicionalmente
entre empresas grandes, medianas y pequeñas. Esta
clasificación se puede hacer en función de los recursos propios,
el número de empleados, el volumen de ventas, etc.
3. Según su ámbito de actuación hablaremos de empresas locales,
regionales, nacionales y transnacionales o multinacionales.
4. Dependiendo de quién posea los medios de producción o el
capital de la empresa se dividen:
 Empresas Privadas. Cuyo capital es propiedad de
particulares, bien personas individuales o bien jurídicas
según regula el derecho empresarial.
 Empresas Públicas. Cuyo capital es propiedad total del
estado o siendo parcial su influencia en el sistema directivo
es importante.
5. Según su forma jurídíca, se distingue entre:
 Empresas individuales.
 Empresas societarias.
 Empresas Individuales

En las empresas individuales existe un único propietario. El Código de Comercio


lo denomina Empresario o comerciante individual. Se caracteriza porque asume
todas las decisiones y tiene una responsabilidad ilimitada o lo que es lo mismo
responde con todos sus bienes presentes y futuros frente a terceros. La empresa
individual tiene una serie de ventajas, derivadas de sus características; el
empresario tiene autonomía para regir como quiera su negocio, y recibe la
totalidad del beneficio. Además son empresas que gozan de una gran
flexibilidad, es decir, se adaptan con facilidad a todos los cambios impuestos por
el empresario individual. Presenta también una serie de dificultades:

 El empresario sufre una gran concentración de riesgos, ya que todos sus


bienes están afectos a la empresa. · Son entidades muy dependientes del
talante de su fundador, por lo que muchas veces no le sobreviven. Así,
requiere que se den en una sola persona física: conocimientos, patrimonio
y aceptación del riesgo.
 Tiene dificultades para obtener financiación, y en consecuencia para
crecer y aprovechar oportunidades rentables de inversión. Y ello debido a
que los recursos financieros son aportados por el empresario o se
obtienen en el mercado financiero. Pero este empresario en la mayoría de
los casos tiene unas posibilidades económicas limitadas y por tanto la
garantía que puede ofrecer este tipo de empresas es escasa. Por tanto
sus posibilidades de emprender ambiciosos proyectos de inversión son
también limitadas. Este tipo de organización predomina en aquellos
sectores económicos en los que existe una tecnología que no exige
grandes sumas de capital, ni conocimientos muy complejos. Se da más
en sectores como: la agricultura minifundista, algunas empresas de
servicios y algunas ramas industriales como la textil (confección de
prendas de vestir), donde proliferan las empresas con un número reducido
de empleados. Sin embargo, cuando ya nos centramos en otros sectores
más representativos de la industria moderna, como por ejemplo, la
producción de automóviles, se observa que las empresas adoptan una
forma jurídica diferente casi siempre una sociedad anónima y ello porque
cuando los negocios crecen y aumentan la complejidad, se requiere un
mayor volumen de recursos que es difícil que aporte una persona
individual en concreto.
 Empresas privadas en forma de sociedad

La insuficiencia, a veces, de medios económicos para acometer una


empresa, la responsabilidad universal que para el empresario proclama el
artículo 1.911 del Código Civil en el sentido de que el deudor responde del
cumplimiento de sus obligaciones con todos sus bienes presentes y futuros,
ha hecho que el empresario social sea el más frecuente, máxime en las
sociedades capitalistas en las que la responsabilidad de los socios queda
limitada a los términos de su aportación pero no con sus bienes personales.
Una sociedad mercantil surge cuando dos o más personas se obligan a poner
en común dinero, bienes o industria para obtener lucro mediante actividades
mercantiles. Por tanto en principio se requieren dos o más personas para el
contrato de sociedad. Para la constitución de las sociedades se deben seguir
una serie de requisitos como por ejemplo que un notario refrende la escritura
de constitución e inscribir a la sociedad en el Registro Mercantil. Una vez
constituida la sociedad mercantil, la compañía tendrá personalidad jurídica
en todos sus actos y contratos. Vamos a analizar a continuación los rasgos
más destacados de algunas formas societarias.
 Sociedades personalistas

La Sociedad Colectiva, tiene carácter personalista (en cuanto que tiene


en cuenta la personalidad del socio, es decir, selecciona a los socios,
así la entrada de un nuevo socio o la transmisión de tal condición,
requiere el consentimiento de todos los socios) se funda en base a
vínculos de mutua confianza personal entre los asociados. El capital de
la sociedad está formado por las aportaciones de los socios. Estas
aportaciones pueden consistir en dinero, bienes o trabajo (industria). El
número mínimo de socios para fundarla es de dos.

 Sociedades mixtas

La Sociedad Comanditaria, es también de carácter personalista,


aunque en grado inferior a la colectiva. Se diferencia de esta en que al
lado de unos socios colectivos (responsables con todo su patrimonio)
existen otros denominados comanditarios, en los que su
responsabilidad se limita a su aportación. Al ser mayor la
responsabilidad de los socios colectivos sobre ellos recaen las
principales funciones gestoras de la sociedad. El número mínimo para
fundarla es de dos por lo que debe existir como mínimo un socio
comanditario y otro colectivo. Existe también una variedad de Sociedad
Comanditaria en donde el capital comanditario está dividido y
representado por acciones. La responsabilidad de los socios colectivos
es ilimitada y la de los comanditarios se limita a su aportación. Debe
existir al menos un socio colectivo. La gestión de este tipo de sociedad
puede corresponder a los socios colectivos o a los comanditarios, si
algún socio comanditario es el administrador de la sociedad mientras
tanto responderá ilimitadamente pasando en ese período a ser un socio
colectivo.

 Sociedades capitalistas

La Sociedad de Responsabilidad Limitada, se caracteriza por tener su


capital dividido en participaciones iguales acumulables (que no pueden
llamarse acciones). Los socios no responderán personalmente de las
deudas sociales (se limita su responsabilidad a su aportación). Capital
mínimo para fundarla 3.000 euros, que debe estar suscrito y
desembolsado en el momento fundacional. Tiene carácter tanto
personalista como capitalista, aunque tradicionalmente se la ha
considerado como capitalista. Así demuestra su carácter personalista
en cuanto a la transmisión de las participaciones. Cabe la posibilidad
de fundar una sociedad limitada con un solo socio a tenor de la
Duodécima Directiva Comunitaria de 21 de Diciembre de 1989
(Directiva 89/667). En nuestro derecho en el tema de las sociedades
capitalistas unipersonales hay que recordar que la Resolución de 21 de
Junio de 1990 admite esas sociedades.

La Sociedad Anónima es el prototipo de la sociedad capitalista y es la


constitución clásica de las grandes empresas. Son sociedades
capitalistas, no interesa la identidad del socio. El capital de la sociedad
suscrito totalmente en el momento de su fundación y desembolsado al
menos en un 25%, está dividido en porciones, fácilmente transferibles
de un socio a otro y que acreditan su condición de socio. La sociedad
por acciones no sólo limita el riesgo de los accionistas a la pérdida del
valor de su inversión sino que permite repartir el riesgo del negocio
entre un elevado número de socios. La sociedad anónima requiere de
órganos capaces de expresar su voluntad. En este caso los órganos
sociales son los siguientes:

- La Junta General de Accionistas que personifica la voluntad social.


Es la reunión de los accionistas debidamente convocados, para
decidir sobre los asuntos de su competencia.
- Administradores y Consejo de Administración. A los
administradores les corresponde la dirección, gestión y
representación de la sociedad. El nombramiento de los
administradores y su número le corresponde a la Junta General.
Cuando los administradores son varios forman el Consejo de
Administración (por lo menos tres administradores). El
nombramiento de los administradores no podrá exceder de cinco
años, pudiendo ser elegidos posteriormente.
El capital social en la S.A. como mínimo ha de ser de 60.101,21 euros,
se divide en partes alícuotas que reciben el nombre de acciones. Estas
pueden ser nominativas o al portador. Las nominativas son aquellas en
las que aparece el nombre de su titular, hasta que no esté
desembolsado el capital totalmente las acciones revestirán dicho
carácter. En las acciones al portador no figura el nombre del titular. Las
acciones otorgan a sus titulares, entre otros, los siguientes derechos y
obligaciones:
 Derecho a participar en las ganancias y en el patrimonio
resultante de la liquidación de la sociedad en proporción a su
participación en la sociedad.
 Derecho de suscripción preferente en la emisión de nuevas
acciones o de obligaciones convertibles en acciones.
 Derecho de asistencia y voto a la Junta General de Accionistas
cuando se posea el número mínimo de acciones que exijan los
estatutos.
 Derecho de información.
 Derecho de transmisión de las acciones.
 Obligación de desembolsar las acciones suscritas.

Presenta una serie de ventajas para sus propietarios frente a las


individuales como son:

 Limitación de la responsabilidad.
 Diversificación de riesgos.
 Especialización de funciones. La sociedad anónima favorece la
especialización de funciones; dado que esta forma societaria
permite que unos pongan el dinero y otros la capacidad.

 Las sociedades de participación


Son entidades alternativas que han surgido frente a las anteriores,
especialmente frente a las capitalistas, para superar algunos problemas
y dar una respuesta más social de creación de empleo, de mayor
participación del socio y para fomentar el desarrollo económico y social
de áreas locales y regionales. Suele existir una oposición entre los
intereses de los capitalistas y sus trabajadores, para intentar reducir
esta van apareciendo nuevas formas de empresa. Lo que se intenta es
limitar el poder de los propietarios de los medios de producción así
como fomentar la motivación mediante la participación de los
trabajadores en las decisiones que les afectan, y proporcionales unas
mejores relaciones laborales al disminuir el conflicto.
Dentro de este tipo de sociedades podemos destacar: las sociedades
laborales, las sociedades cooperativas y las sociedades agrarias de
transformación.
Las Sociedades Laborales, reguladas por la ley 4/1997, de 24 de
marzo, de Sociedades laborales, deroga a la anterior ley de Sociedades
anónimas laborales, y entre otras novedades abre la posibilidad de que
las sociedades laborales adopten tanto la forma de Sociedad anónima
como la de Sociedad limitada. La apertura de esta posibilidad responde
al importante aumento en el número de sociedades de Responsabilidad
Limitada creadas tras la reforma del 1989, lo que a juicio del legislador
sentaba la necesidad de crear la figura de la Sociedad Laboral de
responsabilidad limitada.
Se entenderán que son sociedades laborales, aquellas sociedades
anónimas o de responsabilidad limitada en las que la mayoría del
capital social sea propiedad de los trabajadores que presten en ellas
servicios retribuidos en forma personal y directa, cuya relación laboral
lo sea por tiempo indefinido, podrán obtener la calificación de “laboral”
cuando concurran los siguientes requisitos:
 El número de horas-año trabajadas por los trabajadores
contratados por tiempo indefinido que no sean socios, no podrá
ser superior al 15% del total de horas-año trabajadas por los
socios trabajadores. Si la Sociedad tuviera menos de 25 socios,
el referido porcentaje no podrá ser superior al 25% del total de
horas trabajadas por los socios trabajadores.
El otorgamiento de la condición de “Sociedad Laboral”
corresponde al Ministerio de Trabajo y asuntos sociales o en su
caso a las Comunidades Autónomas que hayan recibido las
correspondientes competencias.
En la denominación de la sociedad deberá figurar la indicación
“Sociedad Anónima Laboral “o“ Sociedad de Responsabilidad
Limitada Laboral, o sus abreviaturas SAL o SLL.
El capital social estará dividido en acciones nominativas o
participaciones sociales. En el caso de la Sociedad anónima
laboral, el desembolso de los dividendos pasivos deberá
efectuarse dentro del plazo que señalen los estatutos sociales.
Ninguno de los socios podrá poseer acciones o participaciones
sociales que representen más de la tercera parte del capital
social, salvo que se trate de sociedades laborales participadas
por las Administraciones Públicas, en cuyo caso la participación
podrá superar dicho límite, sin alcanzar el 50% del capital social.
Podrán existir dos tipos de acciones, las que pertenecen a
trabajadores cuya relación laboral lo sea por tiempo indefinido y
las restantes. Las del primer tipo se denominan “clase o tipo
laboral” y la segunda “clase general”.
Estas sociedades están reguladas por la ley 4/1997, de 24 de
marzo de Sociedades Laborales y con carácter supletorio por las
respectivas leyes reguladoras de las sociedades anónimas y de
responsabilidad limitada.
 Las Sociedades Cooperativas, La Ley 2/1999, de 31 de marzo
de Sociedades Cooperativas Andaluzas define las cooperativas
como sociedades participativas que asocian a personas físicas
o jurídicas que tienen intereses o necesidades socioeconómicas
comunes, para cuya satisfacción y en interés de la comunidad
realizan cualquier actividad empresarial. Por tanto la finalidad de
este tipo de empresa no es la obtención de un lucro máximo,
sino más bien la defensa y satisfacción de los intereses de sus
miembros.
Los principios generales que informan la constitución y el
funcionamiento de este tipo de sociedades son:
1) Libre adhesión y baja voluntaria de los socios, con la
consiguiente variabilidad del capital social (Principio de
puertas abiertas según la Alianza Cooperativa
Internacional ACI).
2) Igualdad de derechos y obligaciones entre los socios.
3) Estructura, gestión y control democráticos (Principio
democrático según la ACI).
4) Interés voluntario y limitado a las aportaciones al capital
social.
5) Participación en la actividad de la cooperativa.
6) Participación de los socios en los resultados, en
proporción a la actividad desarrollada en la cooperativa.
7) Educación y formación cooperativa de sus miembros, así
como difusión en su entorno de estos principios.

Las sociedades cooperativas andaluzas se constituirán


mediante escritura pública y adquirirán personalidad jurídica
desde el momento en que se inscriban en el Registro de
Coopertivas, debiendo empezar su actividad en el plazo
máximo de un año desde el momento de su inscripción en el
Registro. La denominación de la cooperativa incluirá
necesariamente las palabras “Sociedad Cooperativa
Andaluza” o su abreviatura “S. Coop. And” y su uso será
exclusivo de estas sociedades.

El capital social estará constituido por las aportaciones


obligatorias y voluntarias efectuadas por los socios y
asociados. La figura del asociado deberá ser contemplada en
los estatutos, podrá adoptar esta figura tanto personas físicas
como jurídicas que realicen las aportaciones al capital que
determinen los estatutos y que no desarrollen la actividad
corporativizada. Los estatutos establecerán el régimen de
admisión y baja así como los derechos y obligaciones de los
asociados y el reparto de sus votos en la Asamblea General,
si bien el conjunto de sus votos no podrá superar el 20% de
los votos sociales.
Serán los estatutos los que fijen el capital mínimo para
constituirse que será al menos de 3.000 euros, debiendo
estar suscrito en su totalidad y desembolsado al menos en
un 25%. Las aportaciones se acreditarán mediante títulos
nominativos, que en ningún caso tendrán la consideración de
títulos valores.

Los órganos de gobierno de la cooperativa son la Asamblea


General, el Consejo Rector y los Interventores. La Asamblea
General está constituida por los socios de la cooperativa, y
en su caso los asociados, es el órgano supremo de expresión
de la voluntad social en las materias cuyo conocimiento le
atribuye esta Ley y los Estatutos. El Consejo Rector es el
órgano de gobierno, gestión y representación, su número de
miembros nunca podrá ser inferior a tres, existiendo los
cargos de Presidente, Vicepresidente y Secretario. El
Presidente del Consejo rector, que lo será también de la
cooperativa tiene atribuido el ejercicio de la representación
de la entidad. Respecto a los interventores los estatutos
sociales determinarán su número que como mínimo será
uno, en las que tengan menos de 50 socios, y tres en las que
tengan 50 o más, siendo su misión fundamental revisar las
cuentas anuales y los libros de la cooperativa.

Existen cooperativas de primer grado y de segundo o ulterior


grado. Las cooperativas de primer grado deberán estar
integradas como mínimo por tres socios ordinarios, que
podrán ser tanto personas físicas como jurídicas, en ningún
caso se podrán constituir cooperativas de primer grado
formadas exclusivamente por cooperativas. Las cooperativas
de segundo o ulterior grado y de integración tendrán al
menos dos socios ordinarios que necesariamente deberán
ser cooperativas, salvo cuando sus miembros sean
cooperativas agrarias en cuyo caso podrán ser también
socios las Sociedades Agrarias de Transformación. La ley
recoge la figura de las Cooperativas de Integración que a
diferencia de las cooperativas de segundo o ulterior grado
pueden tener como socios a entidades o Administración de
Empresas y Organización de la Producción 9 personas
jurídicas, públicas o privadas, para el cumplimiento y
desarrollo de fines económicos comunes.

Las cooperativas de primer grado se pueden clasificar en


cooperativas de trabajo asociado, cooperativas de
consumidores y usuarios y cooperativas de servicios. A su
vez las cooperativas de consumidores y usuarios podrán ser
de suministro de artículos de consumo, de servicios diversos
como restaurantes, transportes, hospitalización etc, de
suministros especiales como agua, gas, electricidad, etc, de
ahorro para el consumo, de suministros servicios y
actividades para el desarrollo cultural, de viviendas, de
crédito, de seguros y educacionales. Finalmente dentro de
las cooperativas de servicios cabe mencionar a las
cooperativas agrarias. La responsabilidad de los
cooperativistas se limita a su patrimonio, con lo que los
socios sólo responden del importe nominal de sus
aportaciones.

En España tenemos un grupo cooperativo de gran éxito, que


es puesto de ejemplo por los estudiosos de todo el mundo:
el grupo vasco Mondragón. Pese al éxito de esta cooperativa,
el hecho cierto es que este tipo de organización presenta
problemas respecto empresas capitalistas y de los que
destacaremos los siguientes:

1) La cooperativa no asegura una buena coordinación en


cuanto que no motiva al monitor ni le otorga la
suficiente autoridad como para llevar a cabo su labor.
2) A la hora de la toma de decisiones, es mejor que la
información y las decisiones que haya que tomar la
realicen pocas personas, que no que se recurra a la
implicación de todo el personal (si bien es cierto que
en las cooperativas se puede delegar la toma de
decisiones en un monitor, sin embargo si fuera así se
desvirtuaría uno de los principios de la cooperativa
cual es el principio democrático) en las decisiones, ello
ocasiona una lentitud en la adopción de respuestas
ante cambios en el entorno.
3) El riesgo que implica esta forma de empresa. Así el
riesgo tiene dos facetas: primero, la escasa protección
que los trabajadores tienen frente a la variabilidad de
los ingresos y resultados (ya que se expone que los
capitalistas pueden diversificar sus inversiones, con lo
que se protegen de vientos desfavorables haciendo
un símil naviero). En segundo lugar el promotor de la
cooperativa no se puede guardar para sí una renta
residual debido al principio de igualdad entre los
socios.

La Sociedad Agraria de Transformación. La sociedad


agraria de transformación es una sociedad civil de
finalidad económico-social en orden a la producción,
transformación y comercialización de productos
agrícolas, ganaderos o forestales, la realización de
mejoras en el medio rural, promoción y desarrollo agrario
y la prestación de servicios comunes que sirvan a dicha
finalidad. En su denominación deberá figurar
necesariamente la indicación “sociedad agraria de
transformación” o su abreviatura “S.A.T.”.

La sociedad agraria de transformación quedará


constituida y gozará de personalidad jurídica desde el
momento que se inscriba su acta fundacional en el
Registro General de las Sociedades Agrarias de
Transformación del Instituto de Relaciones Agrarias del
Ministerio de Agricultura.
Podrán ser socios de una S.A.T. las personas que
ostenten la condición de titulares de explotación agraria o
trabajador agrícola, así como las personas jurídicas que,
sin ostentar dichas condiciones, persigan fines agrarios.
El número mínimo de socios es tres. No obstante, en el
caso en que concurran ambos tipos de socios, el número
de éstos que ostenten la condición de titulares de
explotación agraria o trabajador agrícola será superior a
los que persiguen fines agrarios. Los órganos de la S.A.T.
son la Asamblea General, la Junta Rectora y el
Presidente. El capital social constituido por las
aportaciones de los socios (en dinero o en especie) está
representado por resguardos nominativos que no tendrán
la condición de títulos valores. Dicho capital social deberá
estar totalmente suscrito y La Empresa 10 desembolsado
al menos en un 25% desde el momento constitutivo de la
sociedad, pudiéndose desembolsar el resto en un plazo
máximo de seis años.

La Comunidad de bienes

La comunidad de bienes carece de personalidad jurídica


propia, lo que significa que cada uno de los comuneros
actúa en nombre propio frente a terceros. Para constituir
una comunidad de bienes se puede hacer de diversas
formas:

Un contrato verbal, contrato privado por escrito, escritura


pública ante notario que puede ser voluntaria u obligatoria
si se aportan bienes inmuebles o derechos. La
responsabilidad es ilimitada y mancomunada. Todos los
socios son administradores salvo que las facultades se
hayan atribuido a uno de ellos. La Comunidad de Bienes
se rige por el Código Civil, mientras que las sociedades
mercantiles lo harán por el Código de Comercio y
disposiciones complementarias. Según el artículo 392 del
Código Civil, las comunidades de bienes son las
formadas por varias personas que ostentan la propiedad
y titularidad de una cosa o derecho indiviso.

CREACIÓN DE LA EMPRESA:

El proyecto de creación de una nueva empresa va ligado cada vez más al


concepto de emprendimiento, debido especialmente a que en el entorno global
que nos situamos, con gran competencia y con entorno tecnológico que
evoluciona a gran velocidad, lo que exige cada vez más una visión más
"emprendedora" que "empresarial" el análisis y puesta en marcha de un
proyecto.

Para la supervivencia de la nueva empresa creada, es fundamental que aporte


una nueva ventaja competitiva, como la mejor en el producto, un proceso más
limpio y eficiente, servicios adicionales que mejoren las prestaciones, una
mejor y más rápida distribución, introducir el nuevo producto/servicio en un
segmento de mercado no utilizado anteriormente. Es fundamental que la nueva
empresa, a través de los productos/servicios que ofrezca satisfaga
necesidades no cubiertas actualmente.

La creación de una empresa necesita estructurar una serie de recursos


materiales, humanos y económicos de cara a la consecución de una serie de
objetivos establecidos por los emprendedores en la puesta en funcionamiento
de su actividad. Para ello, se recurre generalmente al desarrollo de un plan de
empresa.
 Historia de la creación de empresa

Se considera que fueron los escritos de Richard Cantillon (pensador francés,


1755, considerado el primer gran economista teórico) donde se introduce el
concepto de “entrepreneur” (que podríamos traducir como emprendimiento) y
se comienza a definir quién es el empresario y qué hace éste, es decir qué
papel juega en el proceso económico llamado función empresarial, que es
crear y poner en marcha una empresa.
Desde entonces los estudios sobre el emprendedor se han basado en la Teoría
Económica, centrándose en la función empresarial. Sobre este concepto, y el
de la figura del empresario, escriben otros economistas como Say, von Thünen,
Mill, Hermann, Marshall, etc. Sin embargo, para Adam Smith y David Ricardo
no existe la figura del empresario sino la del capitalista. A pesar de buscarse
el esencialismo metodológico, que pretende encontrar definiciones
caracterizando el objeto de estudio, prácticamente cada uno de los citados
autores destaca una característica de lo que es la figura de la persona que
emprende. Se dan muy diversas definiciones (véase la página "Empresario" de
este portal) por lo que la ausencia de consenso hace que esta disciplina no
avance. Alguna de las diferentes concepciones del empresario son:

 Empresario es el que asume el riesgo de la incertidumbre.


 Empresario es quien aporta capital.
 Empresario es un innovador.
 Es un decisor.
 Es el que consigue ser líder del sector.
 Es el manager o superintendente.
 Es un organizador y coordinador de recurso.
 Es un empleador de factores de producción.
 Es la persona que asigna recursos entre usos alternativos.
En la primera mitad del S.XX se empieza a perfilar la ciencia a través de la
proliferación de estudios históricos sobre empresas, empresarios y función
empresarial, biografías, tipos de empresarios, empresarios líderes,etc. Destaca
en este sentido el Centro de Historia Empresarial de la Universidad de Harvard.

Se podría decir que en la segunda mitad de dicho Siglo, entre 1949 y 1979,
arranca la línea de investigación científica en este terreno, celebrándose varios
congresos en los Estados Unidos. La disciplina toma dos vertientes, la
dedicada a la PYME, y aquella que trata de la figura del empresario, como
emprendedor, y de la creación de empresas.
En los últimos tiempos, el empuje esencial lo da el Informe Birch, presentado
en 1979 ante el Congreso de los Estados Unidos, donde se exponía que, a
diferencia de lo que se creía hasta los años setenta sobre que la gran empresa
integrada verticalmente sería el modelo por excelencia, quedando la pequeña y
mediana empresa reducida a simple vestigio de una etapa anterior de
desarrollo económico (post II Guerra Mundial), la mayoría de los puestos de
trabajo en los Estados Unidos lo creaban las PYMES. Como dato señalaba que
en la etapa 1969-1976 el 50% de los nuevos empleos fueron generados por las
pequeñas empresas. En el mismo sentido se pronuncia la Carta Europea de la
Pequeña Empresa (2002), confirmando el papel de innovador y generador de
empleo del emprendedor que inicia su actividad a través de su pequeña
empresa, además de ser, por su estructura menor, el tamaño de entidad que
puede más fácilmente adaptarse al entorno cambiante.
El Proyecto GEM: El proyecto internacional GEM (General Entrepreneurship
Monitor) nace en 1999 impulsado por instituciones de reconocido prestigio,
como la Babson College y London Bussiness School. El proyecto busca
conocer de forma rigurosa el fenómeno emprendedor de cada país participante,
y su influencia en las economías nacionales. Su aportación más relevante es la
creación de un indicador, TEA (tasa de actividad de creación de empresas),
que permite observar la influencia de las políticas públicas y otros fenómenos
(sociológicos, culturales, por ejemplo) en la creación de empresas en un
territorio, y su comparación territorial (puesto que utiliza criterios y metodología
uniformes y comunes a todos los países integrantes del proyecto). Utiliza
encuestas a la población adulta en general, cuestionarios a expertos varios, y
variables diversas socioeconómicas.

 10 primeros pasos para dar de alta tu empresa

Independientemente del tipo de forma jurídica en el que vayas a constituir tu


empresa, vas a necesitar realizar obligatoriamente una serie de gestiones y
trámites. A continuación te guiamos en los pasos indispensables para dar de
alta una empresa:

 Elegir la forma jurídica

Lo primero es determinar el tipo de empresa que vas a crear y


determinar la forma jurídica: sociedad anónima, sociedad
limitada, cooperativa.

 Certificación negativa

Deberás obtener en el Registro Mercantil Central la


Certificación negativa del nombre de la sociedad (CNN) que
acredite la exclusividad y no existencia de otra sociedad con el
mismo nombre. Se puede tramitar presencialmente con un
impreso en las oficinas del Registro Mercantil, por correo o a
través de la web.

 Capital social

Depositar en una entidad bancaria una cantidad de dinero, que


variará en función del capital social exigido en cada caso. Para
una sociedad limitada el mínimo son 3.000 euros, y para una
sociedad anónima el capital no podrá ser menor de 60.000
euros.
 Solicitar el NIF

Obtener el Número de Identificación Fiscal en la Agencia


Tributaria, primero provisional presentando la documentación
necesaria (modelo 036, copia de la escritura de constitución y
copia de los estatutos), y después el definitivo (no más tarde de
6 meses) presentando la escritura.

 Creación de la sociedad

Debes realizar una escritura pública ante notario en el que los


socios firman la constitución de la sociedad.

 Inscripción en el Registro Mercantil

Inscripción de la empresa en el Registro Mercantil Provincial


para obtener la plena competencia jurídica. Tendrá lugar en la
oficina del Registro Mercantil de la misma provincia donde la
empresa esté domiciliada.

 Alta en IAE

Hay que darse de alta en el Impuesto sobre Actividades


Económicas con la actividad empresarial que se va a realizar,
en una oficina de la Agencia Tributaria.

 Libros de sociedades

Legalizar los libros de sociedades (libro de inventarios, libro de


cuentas anuales y libro diario) en el Registro Mercantil
correspondiente de la provincia. Consiste en poner un
certificado oficial en la primera página de los libros y marcar el
resto de las hojas con el sello del Registro.

 Registro de patentes y marcas

Registro de signos distintivos como pueden ser palabras,


frases, imágenes o símbolos en la Oficina Española de
Patentes y Marcas, ya que haber registrado anteriormente una
denominación en el Registro Mercantil no significa tenerla
protegida como marca.

 Puesta en marcha

Después de realizar las gestiones anteriores estarás casi listo


para empezar con tu negocio aunque dependiendo de la
tipología puede que tengas que hacer alguna más, por ejemplo,
si vas a tener trabajadores deberás comunicar la apertura del
centro de trabajo a la Dirección Provincial del Ministerio de
Empleo y Seguridad Social y obtener un libro de visitas para las
inspecciones. Además, es muy recomendable obtener un
certificado electrónico para poder firmar documentación
electrónicamente y agilizar procesos.

 10 claves para crear una empresa en la actualidad

Aparte de los pasos y trámites obligatorios expuestos anteriormente, a


continuación te damos algunas claves para orientarte a la hora de desarrollar
cada una de las etapas de emprendimiento de tu negocio:

 Investiga el mercado y analiza las posibilidades de tu


negocio

No te lances a lo loco y antes de embarcarte en la aventura


conoce bien el mercado en el que se mueve tu proyecto. Cada
sector es un mundo y los negocios no funcionan igual en todos
los países o ciudades. Puede que si te dedicas a la venta
online tu actividad traspase fronteras, pero si lo que ofreces es
un servicio o se trata de un negocio físico, tu trabajo se
desarrollará en un ámbito local.

Establece cuáles son las debilidades y las fortalezas de tu


negocio: en qué puedes mejorar y qué puntos te hacen más
fuerte o te diferencian del resto. También debes conocer las
amenazas que puedes encontrarte, si podrías superarlas y las
oportunidades que te ofrece el entorno. El análisis DAFO es un
elemento básico para el lanzamiento de una empresa.

Analiza de qué forma trabaja tu competencia directa, no te fijes


sólo en las grandes marcas. Tener claro en qué franja de
competidores te mueves puede ser revelador.

 Crea una estrategia de marketing

Tu estrategia de Marketing debe estar alineada con tus


objetivos. Establece dónde está tu público objetivo (target),
cuáles serán tus canales de difusión, cómo y con qué asiduidad
crearás contenidos en tu blog, la intención de los mismos
(serán enfocados a venta directa, aportarán valor -inbound
marketing-), cómo lo hace tu competencia.

Si andas un poco perdido, podemos echarte un cable con este


manual completo de marketing online. Pero si tu negocio no es
exclusivamente online, tendrías que pensar en cómo utilizar las
estrategias de marketing para atraer clientes (descuentos,
regalos, packaging personalizado, etc).

 Elige un dominio con el nombre de tu negocio

¿Te acuerdas de lo que antes hablábamos de la importancia de


elegir un nombre que incluya una keyword? Ahora ya sabes por
qué. Vas a necesitar una web que te dé visibilidad online, si tu
nombre y dominio incluyen esa palabra mágica vas a tener
unos puntos extras. Aunque todavía no tengas hecha la web,
deberías comprar el dominio. Que tú registres un nombre de
empresa al constituirla no quiere decir que ese nombre quede
también reservado en el mundo online.

Ten en cuenta dónde vas a desarrollar tu proyecto, no es lo


mismo poner .es, que .com o .mex. La terminación del dominio
indica el país de ubicación, por lo que lo recomendable es
.com.

Un dominio cuesta entre 5 y 15 euros, depende dónde lo


compres.

 Contrata un hosting para alojar tu web

El hosting es el servidor dónde estará alojada la web de tu


empresa. Los precios pueden ser muy dispares. Ten en cuenta
que muchos de ellos no trabajan en castellano, sino en su
idioma nativo, por lo que si el más barato está en los EE.UU y
no hablas inglés, posiblemente no sea tu mejor opción.
Yo te recomiendo Webempresa como hosting. Atienden en
castellano, servicio 24 horas, son súper rápidos en solucionarte
cualquier problema y tienen un blog lleno de información útil.
De igual forma, si quieres mirar otras opciones, te dejo este
artículo de los mejores hosting web para que puedas
compararlos y escoger el que más te guste.

 Crea una página web que sea irresistible para tu cliente

Página Web. Pasos crear empresaTu web será tu centro


neurálgico de operaciones, es como las oficinas de la CIA o el
FBI. Medirás comportamientos, probarás estrategias, será un
punto de información útil para tus potenciales clientes.

El aspecto visual y la usabilidad web son dos puntos


fundamentales para que el cliente se interese por tu propuesta.
Hay todo un mundo de plugins que puede ayudarte a ello si
trabajas con WordPress. Algunos, como el Visual Composer,
han supuesto un antes y un después en el diseño web. Si no
sabes de qué te hablo, léete este tutorial de Visual Composer
de Ernesto G. Bustamante y sabrás a qué me refiero.

Una web tiene que ser visualmente atractiva y, a la vez, debe


tener una navegación clara y concisa. Cuando la tengas hecha,
pídele a un conocido que navegue por ella y luego pregúntale
si le ha resultado fácil.

En nuestro curso de WordPress presencial y online, te


enseñamos a crear páginas web que cumplan con todo lo que
te he comentado en este apartado, también te ayudamos a
escoger tu dominio y el mejor hosting para que puedas alojar tu
página.

 Construye una marca personal y un branding potente

El branding abarca sobre todo cuestiones como logos, diseño,


colores corporativos, etc. Esto no solo deberás incorporarlo a tu
web, también deberás hacerlo en tus tarjetas, documentos o
local. Tener unos colores que nos identifiquen ante el cliente de
un solo vistazo o un logo que se grabe a fuego en la memoria,
nos ayuda a posicionarnos frente a la competencia.

Con la marca personal sucede lo mismo, tu presencia en redes


sociales debe estar en línea con el tipo de negocio que tengas.
Una empresa que se dedique a la construcción no puede
utilizar el mismo tono en su comunicación que otra que se
dedique a las fiestas infantiles. En ambos casos es importante
la marca personal, ya que lo que transmitimos al cliente puede
ser el detonante para que se genere una venta de servicio o
producto.

 Piensa en tus Recursos Humanos

Si vas a contratar trabajadores deberás estar al día en los


aspectos que competen a la selección de personal y
entrevistas de trabajo, bajo el lado empresarial.

La contratación de personal para una empresa ha cambiado


mucho en estos últimos años. Redes sociales y blogs se han
convertido en un currículum in live de nuestras habilidades e
intereses. No solo Linkedin puede resultar efectiva en ese
campo, si buscas un diseñador o un decorador para tu negocio,
posiblemente te encuentres con que tienen un portafolio en una
web o una página en Facebook.

Realizar búsquedas en Redes Sociales mediante hashtags,


graph search o similares, puede acercarnos rápidamente al
perfil de trabajador que estamos buscando para completar
nuestra empresa.

 Atención al cliente

Las redes sociales es un espejo que refleja nuestra experiencia


como cliente. No son pocos los halagos a determinados
negocios, pero tampoco son pocas las quejas.

Monitoriza lo que se dice de tu negocio en las Redes Sociales


y, si hay alguna queja, responde de manera profesional e
intenta resolver el problema. No importa que no tengas una
web o presencia online, el cliente utilizará este canal para emitir
su opinión.

 Gestiona la base de datos de tus clientes

Aunque tu empresa sea offline, no creas que debes restar


importancia al hecho de hacerte con una base de datos de tus
clientes. Es muy importante para tu estrategia de negocio
contar con una buena gestión de tus contactos.

Muchos negocios o empresas solicitan las direcciones de


correo electrónico a sus clientes para luego mandar ofertas o
descuentos. Que un cliente te ceda su correo quiere decir que
está interesado en establecer una comunicación con tu
empresa. La comunicación debe conseguir que tu cliente se
sienta valorado.

No se trata de mandar una newsletter cada vez que actualices


tu web, es más que eso. Puedes avisarle de los próximos
eventos que haya en tu local, ofrecerle ofertas sólo para
quienes hayan realizado una compra previa, o incluso
recomendar un nuevo servicio que hayáis puesto en
funcionamiento en la empresa.

Recomendación: intenta tener una base de contactos por email


antes, incluso, de crear tu empresa. Podrás causar expectación
y anunciar tu lanzamiento. Para ello ayúdate de Mailchimp o
Mailrelay, dos plataformas de email marketing.

 Ten en cuenta la formación

Deberás tener presentes los conocimientos y habilidades


requeridos por tus trabajadores en tu sector, para darles las
facilidades necesarias de renovar y actualizar sus
conocimientos en los ámbitos que lo demanden, así como su
formación en nuevas áreas que sirvan para potenciar el
desarrollo de ambas partes. Infórmate de las diferentes
opciones que hay de financiación en cursos de formación, la
fundación Tripartita imparte varios cursos gratis a empleados y
empresas, quizá alguno de ellos cuadre con tu sector.

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